TRABAJANDO EN PROFUNDIDAD RELACIONAL EN COUNSELLING Y PSICOTERAPIA

DAVE MEARNS Y MICK COOPER

CAPITULO 7

En este capitulo • veremos las formas en que los terapádas pueden facilitai- un encuentro en
profundidad relacional con sus clientes, que conduce ala clase de relación terapéutica que se
caracteriza por una profunda confianza y seguridad.
Esperamos que sea de particular valor para los que se están entrenando en el enfoque centrado
en la persona y en otras terapias relacionales, ayudándolos a desarrollar su habilidad para
encontrarse plenamente con sus clientes de esta manera. - -• - -
También esperamos presentar un nuevo punto de vista en el cual la preocupación central del
terapeuta sea encontrarse con sus clientes tan plenamente como sea posible, más que
implementar habilidades específicas o proveer un discreto set de condiciones terapéuticas.
El uso del término "facilitar' y no curar, que se hace en este capítulo es deliberado, porque como
dijimos en el capítulo 3, un encuentro en profundidad relacional no es algo que un terapeuta
pueda hacer suceder él solo, por sus propios medios, sino que esto sucede por un número de -
razones:
Primero, como hemos enfatizado en este libro, profundidad relacional no es un fenómeno de
una sola persona sino algo fundamentalmente diádico; por muy presente que estuviera Dave con
Rick en el capítulo 6, solamente se dio cuando Rick estuvo dispuesto a corresponder a esa
presencia, aunque sea al más mínimo nivel; es así como algún tipo de encuentro puede darse.
Segundo, para que se dé un encuentro profundamente relacional el terapeuta debe, como
veremos más adelante, soltar o dejar ir sus metas, sus anticipaciones, sus expectativas y sus
deseos. Tal como Buber dijo en 1958, y esto incluye el deseo de profundidad relacional; esto es
así porque si estamos tratando de hacer algo a alguien, no nos estamos encontrando
genuinamente con ese Otro, sino más bien con nuestras propias necesidades y deseos.
Tercero a un nivel práctico, muchos clientes como Rick, van a percibir si les estamos haciendo
algo a ellos y/o si _ellos se sienten forzados a relacionarse en formas en las cuales no se sienten
cómodos, y ambas percepciones pueden alejarlos. Esto puede ser precisamente el caso de
clientes que están temerosos de encontrarse con otros a un nivel de profundidad relacional,
clientes que como se discutió en el capítulo 2, pueden ser los que más necesitan ese tipo de
y
encuentro en sus vidas.
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 Con respecto a este Último punto, no sólo no podemos hacer que se de un encuentro en
profundidad relacional, sino que debemos ganarnos el derecho a hacerlo. Para muchos clientes
el deseo de encontrarse en profundidad relacional corre parejo con su temor a ese tipo de
intimidad, porque encontrarse sin pretender ser otra cosa, sin simular o sin defensas, significa
que pueden ser juzgados por lo que son, por quienes ellos son realmente. Si no pueden
encontrar en ese momento un lugar donde esconderse; entonces es más 'seguro para ellos
proyectar una imagen de sí mismos, quizás una que complazca a los otros o por lo menos les dé
a ellos la seguridad de lo familiar, pues despojarse de esta imagen y de las defensas, requiere un
alto grado de confianza.
Como terapeutas entonces, no podemos simplemente esperar que los clientes estén deseosos
de permitirnos entrar álas zonas más escondidas de su ser. PorMuy merecedores de confiania -
y seguros que nos podamos sentir, no debemos caer en el mito de la autotransparencia y dar por
sentado que los otros pueden ver nuestras cualidades y confiabilidad. También, es probable que
muchos de nuestros clientes nos sientan por lo menos inicialmente como extraños e
inescrutables, cuya confiabilidad todavía debe ser comprobada.

SOLTANDO LAS METAS Y LOS DESEOS

Como ya hemos indicado, una de las cosas que a menudo se interpone en el camino de un
encuentro profundo, es el deseo de hacer algo a/o por nuestros clientes, porque si nuestra
¡atención está orientada a los resultados de nuestro trabajo, entonces rio lo estará hacia el cliente
;•• sz.. exi---r:-ncins. En probable rje la imagen Oue tengamos de ellos sea bastante difPrent de
la imagen de una persona capaz de reflexión, con voluntad, la clase de actitud confirmante y
respetuosa que es necesaria para que se dé un verdadero encuentro de libertades humanas.

Por supuesto que es bastante entendible que a menudo tengamos metas para nuestros clientes,
esto es en gran medida inevitable y no estamos sugiriendo que esas metas sean necesariamente
malévolas o inhumanas. En muchos casos, por ejemplo y particularmente en el caso de un
,Counselor en entrenamiento, muchas de nuestras metas implícitas pueden ser mostrarnos a
nosotros mismos: a nuestros clientes -o quizás a nuestros -supervisores o entrenadores que
somos practicantes competentes. Esto es algo que todos experimentamos hasta cierto punto,
pero el problema es que cuanto más nos enfocamos en qué tan eficiente es nuestro trabajo
terapéutico, menos podemos enfocamos en el ser humano que está frente a nosotros; en lugar
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 de eso, se convierte en un medio para nuestros deseós y ésa es una de las razones (como
veremos en el capítulo 8) por las cuales el trabajo de desarrollo personal de los terapeutas es tan
importante. La meta no es desembarazarnos de todos nuestros deseos, sino asegurarnos de
estar conscientes de ésas metas implícitas que podamos tener, de modo de poder hacerlas a un
lado lo mejor que podamos. En terminología fenomenológica, ponerlas entre paréntesis y
comprometernos con las experiencias vividas por nuestros- clientes aquí y ahorá. -
Otra bien intencionada meta que muchos terapeutas pueden tener, es simplemente hacer que
sus clientes se sientan mejor, esto se manifiesta a menudo en formas muy sutiles; trabajando con
un cliente deprimido, por ejemplo, podemos tender a reflejar sus sentimientos de esperanza para
el futuro y no sus sentimientos de desesperación o simplemente de desesperanza; semejante
prejuicio nuevamente es totalmente entendible, en verdad en algunos enfoques terapéuticos
(como terapias breves enfocadas en soluciones), este tipo de conducta es positivamente
alentada; sin embargo desde una perspectiva existencial centrada en la persona
argumentaríamos que esta respuesta tendería a reducir la probabilidad de que se dé un
encuentro profundo, porque el cliente probablemente no sentiría que su terapeuta está
conectado con la totalidad de lo que él es y siente en ese momento.
Para tener un encuentro con alguien, realmente a nivel de profundidad relacional, podemos
necesitar soltar también nuestro deseo de entender al otro, pues podemos engancharnos tanto
con el contenido de lo que ellos están experimentando, por ejemplo: "qué hermana le dijo qué, a
quién, a qué hora, en qué día", que perderemos el contacto con el presente del cliente que está
teniendo la experiencia. Para este fin es perfectamente posible proveer un contacto
intensamente humano con la experiencia del cliente, que en sí mismo le trae seguridad para
explorar, sin siquiera saber de qué está hablando el cliente. Esta disciplina de relacionarse con lo
experiencial, más que con la experiencia o situación concreta, nos resultará útil cuando
trabajemos con clientes cuya comunicación difiera de la nuestra. Con un cliente que muestra un
proceso psicótico o traumático, o con aquel que fugazmente se conecta con las características
apenas parcialmente simbolizadas al borde de su conciencia, el terapeuta tiene pocas
oportunidades de en realidad entender er contenido; en ese momento en realidad, esa
. necesidad de comprender puede conducir al terapeuta novato a una serie de preguntas que solo
'sirven para sacar o alejar al cliente que está al borde de su conciencia.
Invitamos al terapeuta que está en entrenamiento a prestar más atención al acto, al hecho de
que el cliente se exprese, en vez de centrarse en lo que el cliente está en realidad diciendo, ya
que permanecer así conectado con el cliente puede ayudarlo a sentirse más cómodo y pueda
3
 -

expresar el material que tiene al borde de la conciencia. Este tipo de disciplina queda
ejemplificada por el estudio hecho en el capítulo 6 y algunos otros.
En términos prácticos ¿Cómo puede el terapeuta desarrollar su habilidad para hacer a un lado
sus objetivos?. Quizás el primer punto y el más obvio, es que cuanto más pueda el terapeuta
estar consciente de sus metas más podrá ponerlas entre paréntesis, nuevamente el trabajo de
~•••-

desarrollo personal es de enorme ayuda aquí, no solo los terapeutas pueden ser más conscientes
de sus necesidades sino que también pueden volverse más aceptantes de sí mismos y por lo
tanto pueden ser más capaces de admitir sus necesidades, no importa qué tan desagradables y
equivocadas ellas puedan parecer.
Un terapeuta que está entrenándose en el enfoque centrado en la persona, por ejemplo, puede
hallar muy difícil darse cuenta, reconocer o tomar conciencia de su necesidad de "mejorar a sus
clientes" porque ha llegado a creer que es un error querer dirigir a su cliente en cualquier
dirección. Sin embargo es poco probable que esa creencia lo hará menos directivo, en verdad si
él o ella se dicen que están equivocados o niegan tener esa necesidad, pueden tener más
probabilidades de ignorarla o justificarse cuando en algún momento actúen de una forma
directiva. Es mucho mejor entonces que lleguen a ver y comprender la preocupación que hay
detrás de su deseo de su deseo de ayudar a los otros, de modo tal que puedan reflexionar
honestamente sobre los momentos en que sus deseos o sus metas para con sus clientes los
lleven a hacerse cargo o a tornar el control y comiencen a buscar formas en las que puedan ser
capaces de responder de una manera menos directiva o basada en sus intenciones.
En términos de soltar metas, fines o propósitos, puede ser útil recordar nuestras limitaciones
cómo terapeutas. Pensar que ,debería estar_ en nuestro poder el curar a nuestro cliente o
encontrar la solución mágica para ellos o hacer que ellos cambien toda la estructura de sus vidas,
es abrazar la omnipotencia de un modo tal que se asemeja a un pensar patológico. La realidad
es que nuestro cliente puede tener las raíces de un. problema presente, localizadas en lo
profundo de su experiencia pasada. Estas raíces tendrán posteriores articulaciones que se han
mezclado y entrelazado con todo su mundo de relaciones, logros y con su concepto de sí mismo:
puede ser que estemos trabajando con él en un momento oportuno de su vida, en el cual se
encuentra disconforme con el desarrollo de la estructura de la misma y está más motivado a
• omento en que algo dramático le ha sucedido, que lo ha hecho parar y hacer
cambiar o en un m
un balance. Quizás en esas circunstancias el clieiate nos permitirá que lo acompañemos por un
corto tiempo y nos invitará a que le mostremos nuestras perspectivas diferentes sobre su
estructura de vida. Quizás también en el contexto de esta relación, comenzará a cambiar la
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 estructura o quizás no todavía, quizás resultará ser simplemente un período de contemplar un
cambio que podrá ser puesto en práctica mucho más adelanta En todo esto, el cliente es el
agente de su propio cambio y el terapeuta solamente un "otro" significativo en su vida.

SOLTANDO LAS ANTICIPACIONES, LAS EXPECTATIVAS.

Muchos de nosotros nos metemos en counseling y psicoterapia porque estamos fascinados con
el funcionamiento de la mente humana y las emociones, aún si no lo estamos, es inevitable que
tengamos algunos preconceptos acerca de por qué la gente es del modo que es; por ejemplo:
creer que la gente tiene una tendencia innata a la actualización o que los problemas psicológicos
son el resultado .de dificultades en la temprana infancia. En cuanto a nuestras metas para
nuestros clientes asumir estas hipótesis no es malo en sí mismo, pero, si solamente vemos a
nuestros clientes a través del filtro de esas teorías, entonces realmente no nos estamos
encontrando con ellos, sino con una proyección de lo que nosotros esperamos o creemos que
vamos a encontrar.
No nos sorprende entonces cuando los counselors con los que hablamos acerca de sus
experiencias de profundidad relacional, no mencionan el hecho de haber estado conscientes de
la teoría en ese momento. En momentos de profundidad relacional ellos no estaban pensando en
cosas como: "yo puedo realmente sentir la tendencia actualizante del cliente", más bien había un
contacto inmediato con sus clientes como otro ser humano, alguien que no podía ser reducido a
un sistema de hipótesis o a una teoría.
-Por lo- tanto, en términos de facilitar un encuentro en profundidad relacional, es importante que
encontremos a nuestros clientes desde un lugar de inocencia o de "no saber" (Espinely, 1997 )
donde tratamos de hacer a un lado nuestras expectativas, nuestras presunciones y nos abrimos
nosotros mismos al cliente, en toda su impredictibilidad. Por supuesto que al igual que cuando
tratamos de soltar nuestras metas, esto no significa que simulemos para nosotros mismos que no
tenemos expectativas o presunciones, ya que inevitablemente las tendremos, más bien se trata
de ser suficientemente autoaceptantes y honestos con nosotros mismos como para darnos
cuenta cuando tenemos creencias y prejuicios y así tener, la capacidad de ponerlas entre
paréntesis o hacerlas' a un lado.
Paradójicamente también una de las mejores maneras de desarrollar nuestra capacidad de
hacer a un lado nuestras presuposiciones teóricas puede ser profundizando y ampliando nuestra
comprensión teórica. Ya que al hacerlo nos damos cuenta más conscientemente todavía de que
5
las teorías filosóficas y psicológicas que sostenemos, ya sea explícita o implícitamente, son
solamente otra forma de ver al mundo y no una verdad establecida. Esto se aplica al trabajo de
Dave con Rick en el capítulo 6, cuando al ser consciente y tener muy presente el trauma de
guerra, expandió su imaginación, haciéndole más fácil tolerar la incertidumbre de su trabajo.

SOLTAR LAS TECNICAS

Los estudiantes de counseling y psicoterapia a menudo están ansiosos por tener alguna técnica
sobre la cual basar su práctica, pero esta forma de trabajar puede crearles dificultades para
encontrarse con sus clientes a un nivel profundo, esto es así por un número de razones:
Primero, si tratamos de implementar una técnica, es probable que nuestra atención esté puesta
en lo que estamos haciendo con nuestros clientes y en su resultado, más que en el ser humano
en particular que está presente ante nosotros; en otras palabras nuestra relación con el cliente ya
no es inmediata sino que median ciertos planes y acciones.
Segundo, si nos relacionamos con nuestros clientes a través de técnicas y estrategias
terapéuticas, es menos probable que estemos abiertos a ellos como los seres humanos únicos
que sbn, más bien estaremos buscando ciertas respuestas y resOltados de ellos en ciertas
dimensiones particulares.
Tercero, cuando más nos estamos relacionando con nuestros clientes en una forma basada en
la técnica, más se reduce nuestra naturalidad, espontaneidad y nuestra unicidad y empezamos a
relacionarnos de modos ya ensayados, repetitivos y formulados, lo que nuevamente reduce las
posibilidades para que se dé un encuentro humano, inmediato y directo.
Las personas que se están entrenando o que son practicantes tk el:Ft:que entrado en la
persona están relativamente familiarizadas con el argumento anterior, pero lo que a veces se
pasa por alto, es el hecho de que aún los modos de trabajar "centrados en la persona" pueden
transformarse en técnicas, si los implementamos rutinariamente, si reflejamos las últimas
palabras de todo lo que el cliente dice o respondemos a cada pregunta con un "¿Y cómo se
siente usted acerca de eso?", entonces nuestro trabajo no es más fluido ni Más espontáneo que
el de un terapeuta cognitivo y conductista orientado por la técnica, en realidad aún la.,po-
directividad puede transformarse en una técnica si es usada en forma inflexible y estructurada de
hacer algo con el cliente.

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 ESCUCHAR..., ESCUCHAR..., ESCUCHAR...

Como terapeutas, cuando tenemos cosas que queremos lograr, cuando hay teorías que
queremos probar o técnicas que queremos implementar, a menudo tratamos de acelerar el
trabajo terapéutico. A veces estamos ansiosos por ayudar .a nuestros clientes a no sentirse
más deprimidos o por averiguar qué es lo que ha causado esos ataques de pánico, y los
apresuramos hacia el punto donde queremos que esté, y al hacerlo, aveces hacemos algunas
cosas que los clientes clasifican como las que menos los ayudan entre muchos
Comportamientos del terapeuta: no escuchar suficientemente bien.
Esta forma poco facilitadora de responder a nuestros clientes no es prerrogativa de los
terapeutas que están entrenándose. Como en los trabajos de Dave con Dominic, hubo
ocasiones donde Dave intervino muy rápido o dijo demasiado o perturbó el fluir del cliente.
Probablemente es justo decir que todos nosotros como terapeutas desde el principiante
menos experimentado hasta el supervisor o el entrenador más experimentado, tendremos
momentos en que esperamos hacer algo a nuestros clientes o conseguir algo de ellos, en
consecuencia no los dejaremos con espacio suficiente para hablar.
',Por qué es tan importante para facilitar un encuentro en profundidad relacional, escuchar y
darles espacio? . En parte porque esto asegura que los clientes sigan sus propios caminos y
iablen de las cosas que realmente les interesa hablar, de ellos, de sus preocupaciones y
axperiencias centrales y no de las que el terapeuta considera importantes, por eso también
as esencial darles a los clientes el tiempo que necesitan para procesarlas al nivel más
profundo posible. Muchos de nosotros podemos hablar a nivel de lo cotidiano a un ritmo
rápido, pero cuando hablamos de nuestros sentimientos más profundos, automáticamente
disminuimos la velocidad, cuando estamos tratando de hablar de nuestras experiencias
jeneralmente necesitamos mucho más tiempo para encontrar la palabra o frase adecuada.
;Cómo puede alguien poner en palabras el sentimiento de pérdida, de dolor, de vacío que ha
ixperimentado cuando una esposa murió o la alegría profunda que se siente cuando ve nacer
.4l primer hijo?, COMO se vio_ en el trabajo de Dave con Domimic o Rick. Por lo tanto no es
- .sorprendente que muchos terapeutas experimenten sus momentos más profundos de relación
con los clientes; en silencio, cuando hay un encuentro y una experiencia compartida que es
Pecibida mucho mejor sin palabras. A su vez, si el terapeuta está tirando demasiadas palabras
1 cliente puede sacarlo de su nivel más profundo de procesar y llevarlo a*un plano más de
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 conversación ordinaria en el cual las palabras están más fácilmente disponibles pero que en
realidad significan mucho menos.
El hecho de procesar algo emocionalmente muy profundo, es una de las razones por las
cuales puede ser tan importante solamente reflejar lo que los clientes dicen en sus propias
palabras, devolverles este reflejo y nada más. En Dominic 24 por ejemplo, Dominic dice: "yo
pienso que soy serio, sincero, pero en realidad soy solamente un borracho...un maldito
borracho" y Dave le repite esto casi palabra por palabra: "tu piensas que eres serio ... y
sincero pero en realidad eres sólo un maldito borracho"; y entonces cuando Dominic le dice:
"Sí", Dave refleja nuevamente: "un maldito borracho, eso es todo lo que eres".
A veces las personas que se están entrenando evitan los reflejos palabra por palabra, porque
temen que sérán sentidos como algo dicho desde un aire de superioridad .o répetitivo o sin
vida y verdaderamente pueden serio si lo implementan como una técnica, pero donde un
cliente esta procesando a un nivel más profundo, a menudo necesita el tiempo que esos
reflejos le brindan para realmente trabajar a través de lo que esta diciendo. Si Dave, por
ejemplo , hubiera tratado de llevar el diálogo, continuándolo, diciendo algo como: "bueno yo
te siento sincero" , entonces Dominic podría no haber tenido tiempo suficiente para realmente
procesar esta autorrevelación. La afirmación de Dominic: "yo soy solo un maldito borracho"
podría no haber sido procesada instantáneamente, su poder de procesamiento necesita
tiempo para calar hondo en la persona, para ser sentida y pensada y es en momentos como
éstos en los que el silencio o el reflejo simple son la más poderosa respuesta que puede dar
el terapeuta.
Escuchar a los clientes sin embargo implica, más que darles una oportunidad de hablar, lo
que realmente significa es comprender, prestar atención, estar presente con el cliente y
sintonizar con su ser a un nivel emocional cognitivo y corporal, esta es otra razón por la cual
puede ser tan importante brindar al cliente un espacio ininterrumpido para hablar,
particularmente al comienzo de la sesión, porque si nos metemos muy pronto, si intervenimos
muy pronto, no permitimos que la totalidad de este ser emocional, cognitivo y físico del cliente
emerja. Si un cliente, por ejemplo, comienza una sesión hablando de su bronca, de su enojo
hacia su madre, el reflejo prematuro de un terapeuta, puede frenar al cliente evitando que
también exprese el 'amor por su madre y -su preocupación por la fragilidad de ella y su culpa
por no ayudarla más. Entonces el terapeuta estaría resonando solo con una parte de la
experiencia holística total del cliente. Para desarrollar una comprensión holística de la otra
persona necesitamos tiempo, las personas son seres complejos y si los terap
4 eutas intervienen
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 demasiado pronto, no permiten que su complejidad emerja y se manifieste con todas las
sutilezas, interacciones, dilemas y tensiones.
Otra forma de pensar es que, nosotros como terapeutas necesitamos sentir el "hilo rojo" de la
preocupación del cliente (Bugenta1,1976). Esto es la esencia de lo que ellos están tratando de
decirnos, su real preocupación o preocupaciones, las cosas que son más significativas para
ellos en el presente, este hilo o hebra roja no puede sentirse o percibirse si interven-irnos muy
pronto interrumpiendo la historia del cliente. Más bien, para que emerjan todos los diferentes
aspectos de la narrativa del cliente se le da una oportunidad de ser ventilados por completo,
de modo tal que la hebra entretejida a través de ellos, sea la trama que comience a
materializarse. Esto es lo que Dave Rennie (1998) quiere decir cuando escribe acerca de la
importancia de "seguir las huellas" del cliente.
Por lo tanto de lo que estamos hablando es de una "escucha holistica", esta es una escucha
que respira la totalidad del Otro, en vez de enfocarse en un solo elemento en particular. Es un
tipo de complementación o de circunscripción de su ser. Tal forma de recibir al otro es
hermosamente descripta por Buber (1958) en su relato de la contemplación de un árbol, que
implica considerar todos los aspectos del árbol, "la figura y el movimiento, la especie y el tipo,
la ley y el número, aparecen indivisiblemente unidos en el hecho". Es interesante ver cómo
gsta escucha holística es similar a la actitud de atención flotante prescripta por Freud en los
años de nacimiento de la psicoterapia, una forma de atención que consiste en no hacer
iingún esfuerzo por concertar la atención en nada en particular y mantener con respecto a
,odo lo que uno escucha, la misma calma mesurada y tranquila atención. Es interesante
también que la justificación de Freud para escuchar a los clientes 'de esta forma es casi.
idéntica a lo que se presenta en este libro. El escribe:

"Tan pronto como la atención se concentra deliberadamente en un cierto punto, uno empieza
seleccionar el material que está ante uno; un punto se fijará en la mente con total claridad y
ilgunos otros consecuentemente no serán tenidos en cuenta, serán descartados y en esta
elección las propias expectativas, las propias -inclinaciones serán tenidas en cuenta. Esto es
J ustamente. lo que_no, debe Mecerse, si seguimos escuchando con nuestras expectativas en
esta selección, corremos el peligro de nunca- encontrar nada más de lo que ya sabemos, y si
uno sigue las propias inclinaciones, cualquier cosa que esté para ser percibida, con mucha
neguridad será falsificada".

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 " GOLPEANDO LA PUERTA"

La escucha holística significa tomar o recibir 1a totalidad de nuestros clientes, pero para
desarrollar algún sentido de lo que esa totalidad es, podremos también necesitar ayudarlos a
ellos a explorar sus experiencias vividas en una forma más enfocada, detallada y en
profundidad. En otras palabras, así como Buber (1958) sugiere que nosotros inevitablemente
vamos y venimos cíclicamente entre el Yo-Tú y el Yo-Ello, entre estos dos modos de
relacionarnos, y que la relación Yo-Ello puede permitirnos experimentar una relación Yo-Tú en
gran profundidad, de la misma manera una exploración enfocada en la experiencia vivida del
cliente' puede ayudarnos a comprometernos más plenamente con la totalidad de lo que él es.
Cuando invitamos a los Clientes a eXplorar de esta forma sus experiencias vividas y sus
significados, nos podemos referir a esto como "golpear la puerta" de sus experiencias más
profundas. En nuestro trabajo terapéutico habrá momentos en que nuestra cercanía a su
experienciar, comprometa, toque nuestra propia sensibilidad a algo que esté por debajo del
nivel de la superficie de lo expresado, y aquí es perfectamente apropiado para nosotros
preguntar si hay "algo más allí". Los que se están siendo entrenando en el enfoque centrado
en la persona, a veces piensan que a los terapeutas centrados en la persona no les está
permitido hacer preguntas, pero este es un mito que viene de la idea de que la terapia
centrada en- la persona es un set, un conjunto de técnicas o habilidades especificas.
Si nosotros pensamos por otro lado en la terapia centrada en la persona como un enfoque
que está centrado, enfocado alrededor de encontrarnos con nuestro cliente a un nivel de
prnfundidad, entonces.hacer preguntas es enteramente apropiado si ellas tienen el potencial
de facilitar el encuentro. Al mismo tiempo no deberíamos ser tan presuntuosos como para
creer saber o más aún, estar seguros de la existencia de algo que todavía está al borde de
ser simbolizado. La metáfora de "golpear la puerta" refleja la suavidad, la gentileza, la
naturaleza de invitación que tiene este encuentro. Es realmente un encuentro Yo-Tú: estamos
con el experienciar del cliente y él es la única persona que tiene alguna autoridad en este
dominio. Para nosotros, pasar a ser un experto dentro de su experiencia se convertiría en un
tipo diferente de terapia, más basado en el tipo de capacidad o destreza que tiene un
'terapeuta analítico y no en un encuentro r-elacional.
Tales invitaciones al cliente para explorar sus experiencias más profundamente, pueden tomar
muchas formas. En el nivel más básico puede simplemente implicar reflejar a los clientes una
palabra, una frase, que han usado. Alternativamente, puede tomar la forma de una pregunta
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 más directa como: "tú dijiste que te sentías enojado y yo me estoy preguntando si podrías
decir algo más acerca de ello". o "¿podrías decir qué quisiste decir por injusto?", invitar a los
clientes a desempacar, a abrir las palabras de sentimientos puede ser a menudo de enorme
valor. Palabras como "enojado" o "triste" a veces tiradas por nuestros clientes de una forma
casual, pueden contener una gran riqueza.y complejidad de experiencias, "un mundo en un
grano de arena". Entonces, aunque hacer una pregunta del tipo "¿Qué significa?", "¿Qué
quieres decir con triste?", puede parecer banal aplicada a un cliente que está "probando la
temperatura del agua" con su terapeuta para ver si es seguro explorar esta emoción, puede
ser una invitación muy bienvenida. Este golpear a la puerta de las experiencias sentidas del
cliente refleja el proceso de focusing, en 'el cual los clientes son invitados a explorar
sentimientos sentidos que no son claros y que están al borde de la conciencia, un ejemplo de
este podría ser: "tú dijiste que tenías un sentimiento de pesadez, de muerte en tu estómago, y
me estaba preguntando si te podrías quedar con ese sentimiento y decirme un poco más
acerca de él". Aquí el terapeuta trabajará con el cliente para articular por completo lo que está
siendo sentido a nivel corporal.
Como hemos presentado más arriba, "golpear la puerta " se basa o recae en algún nivel de
comunicación verbal. Pero aún cuando eso no esté presente, es todavía posible invitar al
:tiente a que baje a niveles más profundos de compromiso, algún cliente puede tener
dificultades con la comunicación por una enorme variedad de razones, incluyendo profunda s
dificultades de aprendizaje, o procesos psicóticos, o como consecuencia de un trauma. Por
cierto puede haber veces con cualquier cliente, por ejemplo, donde está experimentando
considerable stress o confusión para simbolizar un material que está al borde de la
conciencia, y le resulta muy difícil la comunicación de lo que está sintiendo. En circunstancias
como éstas, puede ser importante tener en cuenta o tener presente la disciplina de la "pre-
4erapia" que invita al terapeuta a salirse del nivel de simbolización normal, o del nivel de
:ornunicación normal para reflejar más concretamente eventos que pueden estar sucediendo
In el mundo fenoménico del cliente. Por lo tanto los reflejos de situaciones, los reflejos
.aciales, los reflejos corporales, los reflejos palabra-por-palabra y los reflejos reiterativos, se
convierten en disciplinas comunicativas a través de las cuales el terapeuta hace contacto
dstcológico con el -cliente. Este método está Muy bien descripto en el escrito de sus creadores
(Prouty,1994 y Van Werde,2002).

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 PARCIALIDAD MULTIDIRECCIONAL

Escuchar la totalidad del cliente significa, prestar atención y comprometerse con las muchas y
diferentes configuraciones del self o modos de ser que el cliente habita (Cooper, 1999),
aspectos del cliente que pueden ser unos opuestos a otros. Aquí como ya fue discutido en el
capítulo 2, podemos hablar o adoptar una actitud de "parcialidad multidireccional", un. término
sacado de la literatura de terapia de familia que se refiere a la habilidad de empatizar con una
multitud de diferentes voces y posiciones.
Esta parcialidad multidireccional puede ser mucho más difícil, más duro de lo que suena,
porque inevitablemente vamos a favorecer algunas voces del cliente por sobre otras. Si
estamos hablando con un cliente que padece fobia social, por ejemplo, podemos tener una
tendencia a ponernos del lado de su parte que dice "quiero superar mis temores" y ofrecer
menos validación y empatía a su parte que dice "quiero mantenerme alejado de la gente". En
términos de facilitar un encuentro en profundidad relacional sin embargo, parecería ser crucial
que nos comprometamos con ambos, esto está muy bien ilustrado en el trabajo de Dave con
Dominic en el capitulo 5 donde parecía esencial, no solamente establecer una relación
terapéutica con un Dominic sobrio, sino también estarigualmente, ansioso, deseoso de dar la
bienvenida y comprometernos y empatizar con un Dominic borracho.
En enfoques ingenuos con respecto al cambio de comportamiento, las partes que son vistas
como la antítesis a la dirección deseada de cambio, a menudo son descartadas o ignoradas.
Se les niega atención por si a caso esto pueda interpretarse como "alentar el mal
comportamiento". La base teórica de esos regímenes de tratamientos, está fundada, más en
políticas de servicios y en la doctrina calvinista que cn la psicoterapia. Para trabajar con la
dinámica interna de la persona, ambos lados o aspectos del conflicto necesitan ser
reconocidos y contactados por igual. En la teoría moderna centrada en la persona, este
énfasis dialógico se describe en términos de interacción entre configuraciones de
"crecimiento" y configuraciones de "no crecimiento" (Mearns and Thorne,1999), o la dinámica
formada entre la tendencia actualizante y la necesidad de "mediación social" (Mearns, 2002).
Otra manera de mirar esto es en términos psicodinámicos, es que necesitamos "apreciar, la
_ sabiduría de la -resistencia" (Hycner,1991), aliamos con ella y abrazarla en vez de castigarla
o tratar de doblegarla. En otras palabras, los clientes, como todos los seres humanos, no
evitan los sentimientos dolorosos por una cobardía autodestructiva, más bien nosotros
evitamos esos sentimientos por un muy humano, adaptativo y comprensible deseo de

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 sentirnos seguros, cómodos y no amenazados. Por lo tanto aunque los clientes puedan a
veces necesitar experimentar sentimientos dolorosos, difíciles para seguir adelante en sus
vidas, también necesitamos valorar la parte de ellos que no quiere experimentar el dolor y se
resiste a hacerlo, no ve ninguna razón por la cual él debería hacerlo. Lo que desde afuera,
entonces, podría verse como una "resistencia", desde el interior del mundo del cliente, puede
ser una estrategia con mucho sentido común para no experimentar demasiado dolor, y, a
menos que podamos aceptarlo y acompañar esta necesidad de "no-crecimiento", de la misma
manera que aceptamos y acompañamos la necesidad de "crecimiento", no estaremos
totalmente presentes con la totalidad que es el cliente.
Paradójicamente, en términos de facilitar un :encuentro a un nivel relacional de profundidad,
une de los aspectos del cliente que puede ser particularmente importante para
comprometerse con él, es el lado del mismo que no quiere ser conectado a profundidad
relacional, este puede ser un aspecto de la persona, que está muy temeroso de la intimidad o
puede ser un aspecto que lleve el mensaje "mantente seguro". "no corras riesgos", "abrirme a
los sentimientos es peligroso", etc. En otras palabras, mientras una parte más expansiva de la
persona pueda dar la bienvenida a un encuentro en profundidad relacional viéndola como una
desviadión de la norma y un potencial "nuevo amanecer", otra parte más protectora puede
adoptar una posición altamente cautelosa, percibiendo el ofrecimiento de contacto, como una
amenaza a la noción de sí mismo de la persona. Empatizar con este última parte del cliente
?uede ser particularmente importante porque a través de ella los clientes pueden sentirse
.-easegurados de que cualquier deseo que ellos expresen de parar un encuentro íntimo será
respetado. También muchos clientes pueden no ser -conscientes de que haya una parte de
ellos que aleja la posibilidad de intimidad y cercanía, entonces al explorar y aceptar éáa parte
pueden sentirse más capacitados de ponerla entre paréntesis, con cautela, y arriesgarse a un
encuentro interpersonal en profundidad. Exploraremos un ejemplo de esto más adelante en
este capítulo.
l'or lo tanto para que se de un encuentro en profundidad relacional, parecería valioso para los
erapeutas reflexionar acerca de las múltiples y a veces contradictorias formas en las cuales
.os clientes experimentan su mundo_ Por ejemplo en vez de reflejar al., cliente "tengo la
sensación de que -tú realmente quieres encontrarte con las otras partes", ayudaría. más una
respuesta como "percibo una sensación de que realmente quieres encontrarte con tus otras
nartes y que también estás realmente asustado de ello", esos reflejos que estamos sugiriendo,
-eflejos mucho más exactos de la totalidad del mundo del cliente tal como él lo vive, ayudan
13
 también al terapeuta a Obtener una comprensión holistica de la telaraña que representa el
conflicto o las tensiones internas que vive el cliente. Es interesante saber sin embargo que,
Bill Stiles un eminente investigador y terapeuta centrado en la persona, sugiere que puede
ser confuso para los clientes que se les reflejen ambas voces al mismo tiempo, argumentando
que es generalmente mejor trabajar con una voz por vez. Del mismo modo Dave Mearns, en
su advertencia en la terapia centrada en la persona cori respecto a las configuraciones,
previene en contra de crear "una suma que dé cero" mediante responder a configuraciones
opuestas, juntas y simultáneamente. Por lo tanto todavía hay debates sobre la mejor manera
de trabajar con esas voces y necesidades múltiples.

UNA APERTURA A LA POSIBILIDAD DE SER AFECTADO POR EL CLIENTE.

"Los insto a que dejen que sus pacientes les importen" escribe el psiquiatra existencial Irvin
Yalom, "para permitirles entrar en tu mente, que te influencien y que te cambien", sin ese
deseo de ser impactados por el cliente, un encuentro de profundidad relacional es muy poco
probable que suceda. porque si un terapeuta se encuentra con su cliente desde un lugar
cercano a la certeza, entonces es poco probable que pueda Ser receptivo a la singularidad e
impredicibilidad del ser del cliente. Por ejemplo, si un terapeuta se siente muy entusiasmado
escuchando a un cliente (como en el trabajo de Dave con Dominic) y si las creencias del
cliente desafían la visión del mundo del terapeuta, entonces, esto no es algo que esté
necesariamente equivocado o sea poco profesional o algo que el teraPeuta . haya podido
evitar, -más bien podría ser una indicación de qué tan abierto es el terapeuta con el cliente y
que tan deseoso está de permitirse que el cliente le importe, le impacte. En el ejemplo que
sigue, uno de los terapeutas que nosotros entrevistamos, habla acerca de su propia
experiencia de permitir que un cliente entre en él, es decir abrirse, darle la bienvenida, y de
cómo él ha superado sus propias y particulares defensas para hacerlo:
-"Durante la sesión ni terapeuta me estaba diciendo cuánto yo le importaba a él, no
solamente le importaba el proceso de counseling, sino yo. Lo importante para mí, mientras me
lo decía, fue oírlo y tomarlo enteramente. Yo me había enfrentado y me había encontrado con
mis tendencias del pasado, de ser tímida y evitativa; en realidad me daba cuenta qué
importante era para mí recibir todo lo que me estaba diciendo. Había una real energía y

14
 vitalidad en eso y eran conocidas para mí. Y nos movió a un espacio de conocimiento más
profundo, de aceptación del uno por el otro y de lo que somos para el otro."

En términos de facilitar el encuentro en profundidad relacional puede ser también valioso,

comunicar a los clientes cuánto ellos nos impactan, como se puede ver en el trabajo de Dave
con Dominic, cuando Dominic le pregunta cómo se siente acerca de estar con uh borracho en
la sesión, Dave dice que no siente nada acerca de eso. Esto parecería que tiene muy poco
potencial de profundizar un contacto terapéutico pero una vez que Dave le comunica a
Dominic que realmente se siente asustado por esto, porque es una amenaza para la
conexión, Dominic recibe una vívida sensación de qué tan seriamente Dave lo tomaba a él en
su trabajo terapéutico. Vamos a retornar a este proceso de comunicar transparentemente más
tarde en este capítulo.
Como en el trabajo de Dave con Dominic, dejar que los clientes vean el impacto que ellos
causan en los terapeutas, no solo se aplica en el caso de un impacto experimentado o sentido
como positivo. La terapeuta Kalpana nos cuenta:
"Durante la primera parte de la sesión el comportamiento del cliente había sido diferente.
Sonrió mucho y parecía un poco "alocado" a veces. Entonces me dijo que yo "le gustaba" y
que le gustaría que nosotros hiciéramos algo en base a eso. Yo hice una pausa por un
momento antes de responder, no me gustó . entonces le dije que no me gustaba, que no le
encontraba ningún sentido sustancial a lo que él estaba diciendo, que sonaba "sexual" pero no
ielacional, que me hacia sentir fría y no cálida, como si fuera un. objeto. Le dije todo lo que
sentía y también le pregunté cómo se sentía él- con todo lo que yo le había dicho. Esto nos
llevó a ambos a un material nuevo, sorprendente."

Esta es la clase de situación en la cual algunos terapeutas "esponjosos" (inconsistentes) se

sienten incómodos, sonríen para sí mismos, a veces ellos pueden decir algo como "bueno, me
Ialaga, pero por supuesto nada puede suceder" y todo el tiempo se están sintiendo
drofundamente incómodos. Como hemos mencionado muchas veces en este libro y como
2eter Schmith (2002) enfatiza, en-cuentro significa paramos "contra" la otra persona, y
Lrabajar terapéuticamente con la diferencia. Este último punto es esencial, el terapeuta debe
estar preparado para trabajar con las consecuencias del encuentro. Este "contragolpe" del
-,liente no es un acto de juzgamiento, de agresión o revancha, el recibirlo es parte del
'ompromiso terapéutico. Un encuentro como este es probable que conduica a un encuentro
15
 en profundidad relacional tal como se vio en el ejemplo anterior, encontrarse en profundidad
relacional no se logra siendo incongruentemente amables o agradables con el cliente, sino
siendo reales con él y continuar trabajando con la diferencia, hay muchos aspectos de
desarrollo personal acerca de esto que son revisados en el capitulo 8.

CREANDO UN ESPACIO SEGURO

Para muchos clientes, la idea de permitir que otra persona entre en sus dominios más
personales y profundos, es algo que les provoca mucha ansiedad, particularmente cuando los
visitantes anteriores han dejado caos y daño a su paso. Es probable que tales clientes,
mantengan al terapeuta a una distancia considerable, hasta que sientan que pueden confiar
completamente, que no los dañará. ¿Cómo puede un terapeuta ganarse semejante
confianza?.
Primero, como habíamos dicho antes, no tratando de forzar la entrada en su mundo, en el
mundo personal del cliente. En otras palabras simplemente respetando las defensas del
cliente y reconociendo su capacidad de reflexión. Uno de los terapeutas con los cuales
hablamos acerca de "caminar pisando muy suavemente" en el mundo del cliente, •dice:
moviéndonos con sensibilidad y delicadeza y recordando que, como un huésped, estamos
ahí, solo por invitación del cliente.
Segundo, asegurándonos que nuestra postura hacia los clientes sea libre de juicio,
confirmante y valorativa, porque los más profundos miedos de nuestrds olientes son. que una
vez que ellos son vistos tal como son, serán humillados, atacados. -
Tercero, tratando de ser una persona relativamente estable, en la cual se pueda confiar y
siendo predecible para nuestros clientes, alguien que ellos sientan que no se comportará de
forma caótica, dañina o descontrolada. Por lo tanto facilitar un encuentro en profundidad
relacional implica ser real y mantener los límites apropiados, tales como acordar sobre los
contratos, cumplir con los límites del tiempo y no socializar con los clientes, porque sin eso el
cliente puede encontrar la situación terapéutica demasiado imprevisible e insegura como para
'permitir que el ferapeuta entre en su mundo. Margaret Warner da una lúcida descripción de la
combinación de ser abierto a las necesidades especiales del cliente, y a la vez crear un
espacio consistentemente seguro en su trabajo con los clientes que están en un frágil proceso
(2000:150-8).
16
 Esta idea de crear seguridad es fácilmente mal entendida. En culturas donde la incongruencia
es la norma en los encuentros que se dan a nivel de presentación del self, hay una tendencia
a ver el hecho de crear seguridad en términos de envolver o cubrir a nuestro cliente con una
calidez efusiva, melosa e incongruente, donde no hay desafío, no hay encuentro. Esto no crea
seguridad, al contrario, este terapeuta es difícil de confiar porque no podemos verlo. En el
ejemplo de la terapeuta Kalpana, ella no respondió del niodo que el cliente podkía haber
esperado, pero su respuesta no fue meramente una sensación de disgusto por lo que su
cliente le había dicho, la respuesta fue quedarse cerca de él y de todas sus diferentes
reacciones al rechazo, durante los siguientes 30 minutos y a lo largo de ese tiempo estar en
genuina relación con él.

MINIMIZAR DISTRACCIONES

Así como con los participantes en el estudio Geller y Greenberg (2002), varios de los
terapeutas con los cuales hablamos dijeron que, para preparar el terreno para un encuentro
en profundidad relacional, era importante que ellos trataran de tener su mente ciara y libre de
distracciones, ya sean de naturaleza externa, sonidos de la calle, una ventana por donde se
ve pasar gente, ruidos en la habitación de al lado; o de naturaleza interna, como por ejemplo
oensar qué voy a cenar o si llegaré a tiempo para tomar el tren.
Igunos consejos para minimizar distracciones:

Darse a uno Mismo, unos pocos Minutos antes del comienzo de cada sesión, para estar
tranquilos.
Mucha gente encuentra que escribir notas de un cliente previo, antes de empezar con el
nuevo cliente, los ayuda a hacer a un lado los temas de la sesión anterior.
Tratar de no meter apretadamente demasiados clientes en nuestro horario porque todos
tenemos límites en nuestro espacio de atención.
Si uno va a recibir clientes, y sale de trabajar con temas o problemas personales, sería
bueno planear un tiempo después del trabajo, donde uno pueda ocuparse de esos temas,
'de Modo que ná estemos ocupándonos de ellos durante la sesión.
di Si estás consciente de distracciones internas o externas, no te lo reproches, pero hay que
tratar de reenfocarse en el cliente y que pase la distracción.

17
 Reflexionar sobre lag razones por las cuales puedes haberte distraído ¿Provienen de un
bloqueo en ti mismo o es algo acerca de la forma de ser del cliente que podría ser útil que
fuera traído al trabajo terapéutico?
Tratar de asegurarse que la habitación donde trabajemos sea tan a prueba de sonidos
como sea posible de modo que las distracciones estén minimizadas.
Conocer nuestros límites! Si tus preocupaciones personales son demasiados
sobrecogedoras, es más ético y profesional explicarle esto al cliente y cancelar la sesión.
Esto, en realidad, es solamente un último recurso, porque los terapeutas profesionales no
cancelan fácilmente la sesión.

CONCIENCIA DE UNO MISMO,

En este punto del capítulo nos hemos enfocado en primer lugar, en el lado receptivo de estar
presente para nuestros clientes. Como Bugental sugiere, el otro lado de la presencia es la
expresividad: un deseo del terapeuta de ser conocido por su cliente y de poner a su
disposición algunos de los contenidos de su conciencia subjetiva, sin distorsionarlos o
disfrazarlos. En otras palabras, para preparar el camino para un encuentro en profundidad
relacional, un terapeuta debe hacer mucho más que recibir pasivamente a sus clientes, debe
estar deseoso de salir al encuentro de sus clientes, de compartir algo de sí mismo con ellos.
Como Kalpana hizo con su cliente en el relato en este capítulo.
Esta expresividad tiene muchos paralelos con la noción de congruencia centrada en la
persona. La congruencia implica ambas cosas: conciencia de uno, mismo y también el deseo
de ser transparente al cliente (Mearns and Thorne, 1999). A veces la palabra congruencia se
usa para resaltar solamente el aspecto de la conciencia de uno mismo, lo que puede ser
confuso para los estudiantes que están practicando otras disciplinas. Como Rogers dice: "con
esta palabra congruencia queremos decir que los sentimientos que el counselor está
experimentando están disponibles a su conciencia, que él es capaz de vivir esos
sentimientos, de ser esos sentimientos en la relación y de comunicarlos si es apropiado".
Antes dé comunicar esas experiencias; sin embargo, un terapeuta debe tener alguna
Conciencia de qué son. Por ejemplo recién cuando Dave se dio cuenta que él se sentía
asustado en relación a la borrachera de Dominio, él pudo comunicárselo a Dominic.
Esto a la vez determina la importancia del desarrollo personal para un terapeuta, porque es a
través de ese trabajo que los que se están entrenando y practicando pueden tener mayor
18
 conciencia de sus sentimientos y pensamientos, momento a momento. Semejante trabajo
termina de ayudar al terapeuta a identificar si un sentimiento en particular, es propio o si tiene
que ver con su relación con ese cliente en particular. Porque los ayuda a ellos a estar más
conscientes de las formas características de responder. Si Dave por ejemplo, se hubiera dado
cuenta que él temía a la gente borracha, podría haber estado menos deseoso de comunicarle
sus ansiedades a Dominic, sabiendo que esto tenía más que ver con él mismo, qUe, con el
estado en que estaba Dominio. En términos de llegar a ser más congruentes, el trabajo de
desarrollo personal es esencial, es de fundamental importancia porque tiende a conducir a
una mayor autoaceptación o lo que en el capítulo 2 hemos llamado una instancia de
autorrelación o una relación Yo-Yo con el self, que significa que los terapeutas sean más
capaces de aceptar los muy diferentes pensamientos y sentimientos que ellos tienen cuando
están ofreciendo terapia.

TRANSPARENCIA

La transparencia en sí misma puede ser vista como con dos facetas: una de las cuales es
-acerca de lo que nosotros no hacemos y la otra es acerca de lo que sí hacemos. La primera
de estas, que podríamos llamar "ser natural", es simplemente acerca de no tratar de
ascondernos o disfrazar cualquier cosa que esté sucediendo dentro nuestro. Por contraste, la
3egunda que podríamos llamar inmediatez, es acerca de comunicar activamente nuestras
.axperiencias aquí y ahora, -a los clientes:
Zn términos terapéuticos, ser natural significa que no estamos tratando de ser alguien que no
somos, con nuestros clientes, o minimizar los niveles de disfraz o de pretender ser otra cosa
dentro de la relación terapéutica. Aquí estamos hablando de cosas como, no simular que uno
atiende a un cliente cuando en realidad no lo hace o hacer gestos que no son naturales en
losotros, que son raros, incómodos. Estos son cosas muy relevantes para muchas personas
;Lie están entrenándose, cuando empiezan a practicar la terapia, porque puede haber una
andencia a "ponerse el sombrero de counselor" en el momento que ellos entran a la
..abitación con el - cliente. Una vez que ellbs empiezan la sesión de counseling, ya sea
verdadera o de práctica, es como si hubieran atravesado un velo invisible, es como si se
nubieran transformado de "seres humanos normales" en "counselors", su lenguaje cambia,
altos manejan sus cuerpos en maneras diferentes, hacen expresiones fasciales que nunca
19
harían en la vida de todo% los días. No estamos sugiriendo que cuando estemos con nuestros
clientes, debemos hacer exactamente las mismas cosas que hacemos en todos los otros
aspectos de nuestra vida, porque en esta situación, estamos específicamente enfocados en
una persona. Pero si la persona que somos con nuestros clientes, es notablemente diferente
de la persona que somos en otros aspectos de nuestra vida, eso sugiere que hay un cierto
grado de no naturalidad que está interfiriendo, que esta - metiéndose en nuestra práctica
terapéutica, y que puede hacer que la posibilidad de un encuentro en profundidad relacional
sea menos probable.
La faceta más proactiva de transparencia, que es la inmediatez, tiene que ver con abrirnos
deliberadamente y revelar aquí y ahora nuestras respuestas sentidas a nuestros clientes. Para
muchips terapeutas, este abrirse deliberadamente, hacer estas revelaciones en el aquí y
ahora, son la llave para un encuentro relacional verdaderamente profundo. Es a menudo, la
habilidad de trabajar con tales sentimientos, lo que distingue a los terapeutas más
experimentados de los menos experimentados. Un deseo de comunicar directamente las
experiencias a nuestros clientes es también, en cierto modo, lo que distingue el modelo de la
terapia centrada en la persona aquí delineada, con relación a los otros encuentros más
clásicos, en los cuales, las comunicaciones congruentes tienden a ser reservadas para
situaciones, en las cuales el terapeuta está teniendo una experiencia contradictoria con las
actitudes dé empatía o aceptación positiva incondicional.
Revelar nuestros sentimientos aquí y ahora puede tomar muchas formas. Desde un punto de
vista centrado en la persona, quizás lo más significativo es la revelación de sentimientos que
parecen emerger de una sintonía empática con el cliente. Donde un terapeuta, como se ha
discutido anteriormente, realmente se permita a sí mismo "respirar en el ser del cliente", es
probable que alguna de las maneras de ser sean re-invocadas dentro del terapeuta. En otras
palabras, el terapeuta puede empezar a desarrollar un sentido empático, profundo y avanzado
de lo que el cliente esta experimentando y esto no va ser sólo una comprensión cognitiva sino
que incluirá también lo emocional y corporal. Esto es lo que nosotros queremos decir con la
frase "empatía corporalizada": un experienciar cómo otra la persona es o está en su mundo
que llega hasta las profundidades de nuestro cuerpo, lo invade, lo impregna, y que nos da
- I conciencia de cómo es para ellos como un todo cognitivo-afectivo- somático.
.'una vivida y vita
Y cuando los terapeutas comparten algo de lo que están experimentando a este nivel con los
clientes, esto a menudo puede tener un efecto muy poderoso, que ayuda a los clientes a

20

=
 profundizar su comprensión de cómo ellos experimentan su mundo. El siguiente es un
ejemplo tomado de un de terapeuta que entrevistamos.
"Esta cliente me estaba contando acerca de una experiencia en su juventud, y mientras me lo
contaba, yo tuve una sensación extrema, sentí de repente que mi energía estaba siendo
drenada y estaba al borde del colapso. Fue bastante profundo, entonces se lo dije a ella: "algo
me ha sucedido justo ahora y me estoy sintiendo agotado; vacío". Ella inmediatarriente hizo
una conexión para ella misma y dijo que ella se experimentaba a sí misma como descuidada
en ese momento de su vida, y también descuidándose a sí misma. Ella habló acerca de eso
unos minutos y después pasó de vuelta a conectarse conmigo, y dijo: "usted realmente sintió
eso, ¿no es así?". Y esa fue una experiencia profunda entre nosotras dos.

En muchas instancias sin embargo, las revelaciones de un terapeuta aquí y ahora son más
una reacción a algo, que una respuesta empática con el cliente, cuando Dave dice a Dominic,
por ejemplo, que no juegue con él, esta es una comunicación muy directa en respuesta a
cómo Dave percibe el comportamiento de Dominic. Cómo en esta instancia la revelación de
esas experiencias puede poderosamente profundizar el nivel de relacionarse, porque trae el
foco del trabajo al aquí y al ahora en la relación y ayuda al cliente a ver cómo ellos pueden
afectar a otra persona. También es modelo para una genuina y abierta manera de ser. Como
lo dice Yalom: "Las revelaciones del terapeuta hacen que sucedan las revelaciones del
paciente". En el ejemplo de abajo, un cliente ha cambiado repentinamente su manera de ser,
Je callado y tímido a gritón y fuerte.

Cliente: No voy a soportar esto de él nunca más. Suficiente, suficiente, ya he soportado

demasiado!
Terapeuta: VVow, eso me tomó por sorpresa. Sentí una repentina sensación de temor cuando
+U dijiste eso. Chico, eso me asustó bastante.
r;liente: Sucedió así en realidad?. Yo nunca pensé que podía asustar a nadie.
"rerapeuta: Bueno, por un momento yo me olvide que tú -no estabas enojado conmigo, me
,entí asustado. Quizás fue por lo repentino. De repente eras muy diferente a como eres
s ua !mente.
3liente: Sí, usualmente soy el que se porta como si fuera siempre asustadizo.

21
 Este es un simple intersambio humano en el cual la terapeuta es la que ha expresado sus
sentimientos en respuesta a su cliente. Lo que ella le ha ofrecido es una respuesta
humanamente "razonable". Esto es útil para el cliente porque es una forma diferente de la que
él se imagina a sí mismo y también lo lleva rápidamente a darse cuenta que generalmente se
comporta como una persona asustada.
La palabra clave en este análisis es "razonable". La respuesta emocional del • terapeuta es
potencialmente útil como reflejo, porque es probable que sea una reacción común a esta
forma suya de expresión. Esto le dice que él recién se ha comportado de una manera que
alguna gente encontraría aterrorizante. La respuesta podría no haber sido útil si proviniera de
una posición particularmente idiosincrática, o si la terapeuta fuera neurótica y estuviera
predispuesta asentir:temor donde no hay un comportamiento amenazante; en ese caso su
referencia a ese temor sería confusa para el cliente. Sin embargo, como lo hemos discutido
antes, este es otro ejemplo más de la "agenda de desarrollo" del terapeuta. Durante el
entrenamiento ella encontrará esas áreas de particular vulnerabilidad, donde los reflejos que
le dará a su cliente puedan estar excesivamente afectadas por su propio proceso personal,
en estas áreas ella estará más atenta porque aún no puede confiar plenamente en que dará
una respuesta transparente. A la vez que desarrolla este "control", ella también se dirigirá a la
base de su vulnerabilidad en esta área y quizás sea capaz de remediarla. De hecho, la
agenda de desarrollo durante la etapa de entrenamiento, tiene mucho más que ver con soltar
los "controles", que con insertar otros nuevos. La gente tiende a tener desarrollada una falta
de confianza en la "razonabilidad" de sus sentimientos y reacciones hacia los otros
(nuevarriente el gradual crecimiento de la autoaceptacián,
. significativamente
„ desarrollará sus
habilidades para ser transparente).

Es importante enfatizar la cualidad temporal de la inmediatez. No sería particularmente

valioso para el cliente arriba mencionado, si el terapeuta 6 semanas más tarde le dijera algo
acerca de su reacción temerosa. Esto pone en relieve los malos entendidos más comunes con
respecto a la congruencia del terapeuta. Como se ilustra con el siguiente comentario de un
terapeuta en supervisión:
— Winalmente yo -lo enfrenté (al cliente) con mi frustración, se había estado acumulando a lo
largo de las semanas y se ponía cada vez peor. Se lo tuve que decir, de este modo fui
"congruente" con él".

22
 conflicto interno entre su lado cauteloso y su parte delincuente que se tironean. Aquí es
interesante ver cómo la apertura de Dave parece facilitar una igualdad en la relación
terapéutica, donde Dave ya no es más "el que sabe", entonces Dominic piensa: " así que el
terapeuta también está loco". Dominic se da cuentade que ya no es más "el qué está aquí
para aprender» cuando Dave le dice: "porque yo no puedo ser tan sabio". Semejantes
revelaciones pueden facilitar un encuentro persona a persona, un encuentro qué es-té menos
dominado por los roles tradicionales de poder y autoridad del terapeuta y de sumisión del
cliente.
No es necesario decir que no estamos sugiriendo que los terapeutas deberían mostrar todas
sus vulnerabilidades y sus experiencias, momento a momento, a sus clientes. La cuestión
clave que los terapeutas necesitan plantearse a sí mismos, es si esa revelación está al
servicio del cliente o si tiene más que ver con sus propias necesidades. También
necesitamos distinguir entre las autorrevelaciones que comunican las experiencias del
terapeuta con relación al cliente y las revelaciones acerca de la vida del terapeuta afuera del
consultorio. Barret-Lennard(1962) en una temprana investigación empezaron a establecer el
significado clínico/terapéutico de la empatía, la consideración positiva incondicional y la
congruencia y también realizaron una hipótesis, que "el deseo del terapeuta de ser conocido"
tendría significancia clínica/terapéutica. De hecho, aunque los resultados muestran una
tendencia positiva, no llegaron a recabar una estadística significativa y "el deseo de ser
conocido" quedo en una relativa oscuridad en la investigación. Una hipótesis más sutil podría
ser que hay contextos donde la última cosa que el cliente necesita es que el terapeuta les
cuente aCerca de su propia vida, sin embargo también hay momentos en el proceso de la
relacion terapéutica en los cuales el cliente activamente necesita de esos detalles-quizás
como una manera de ajustar el "balance" de la relación. Investigando la experiencia del cliente
del proceso terapéutico, este fenómeno ha sido observado muy a menudo, como hemos visto
en el capítulo 1, la evidencia actual sugiere que, un limitado grado de revelaciones personales
puede ayudar en el trabajo terapéutico.

TRABAJANDO CON EL AQUÍ Y EL AHORA

Como se sugirió antes, las estimaciones inmediatas a menudo son de ayuda porque ponen la
atención sobre el trabajo terapéutico y la dinámica inmediata del encuentro terapéutico, y
podemos hablar más generalmente de explorar "el aquí y el ahora" del encuentro terapéutico.
24
 De hecho el terapeuta no ha sido congruente para nada, él ha sido decididamente
incongruente, sus sentimientos originales se perdieron en la oscuridad y se han magnificado
por el paso del tiempo ya que han estado completamente reprimidos o suprimidos. Su
supervisor, si es transparente, probablemente expresará su propia exasperación y aun horror
de que su superyisada/o haya descargado o tirado su propio lío encima del cliente.

En algunas instancias, las revelaciones más valiosas que los terapeutas pueden hacer,
podrían ser, revelar sus vulnerabilidades hacia el cliente. Como en el ejemplo cuando Dave le
dice a Dominic acerca de su temor a quedar desconectados justo cuando la relación
empezaba a profundizarse..
Verdaderamente la psiquiatra existencialista Leslie Farber (1967), argumenta que con algunos
clientes, cuando el terapeuta revela su desesperación de no ser capaz de ayudarlo, el cliente
empieza a "compadecerse" del terapeuta y el trabajo terapéutico real puede comenzar.
Un ejemplo de esto parecería ser el trabajo de Dave con Rick, donde Dave esta llorando y
Rick le alcanza un pañuelo de papel, esto pareció ser un verdadero punto de inflexión en el
deseo o la voluntad de Rick de comprometerse con otro. Quizás lo que sucede es que una
vez que los clientes empiezan a ver las debilidades del terapeuta, también empiezan a
experimentar sentimientos de cuidado hacia la otra persona y esto les abre la puerta para que
vuelvan a la comunidad interhumana. También una vez que ellos ven las vulnerabilidades del
terapeuta, pueden darse cuenta que esta persona no es un mago puede agitar una varita
mágica y hacer que estén mucho mejor; de modo que, si quieren mejorar, necesitarán ellos
mismos poner algo de esfuerzo en- ese proceso y en esa relación. Las revelaciones de
vulnerabilidad pueden ser también importantes porque pueden ayudar a los clientes a ver que
ellos pueden causar un impacto fuera de su mundo, y si ellos pueden cambiar a sus
terapeutas, ellos pueden llegar a creer que también se pueden cambiar a sí mismos.
Paralelamente con revelar vulnerabilidades, también puede ser muy útil para un terapeuta,
"mostrar que están trabajando" con los clientes, esto quiere decir que si estamos sintiéndonos
inseguros o confundidos de cómo responder a un cliente o si estamos tironeados en dos
glirecciones diferentes, estas son las cosas que podemos abrir y mostrarlas. Esta forma podría
—servir para mostrarnos' más reales en la relación, y por lo tanto hacer el encuentro más
profundo. Un ejemplo de esto es cuando Dave discute con Rick en el capítulo 6 al referirse a
su esposa y a sus hijos y también en Dave 51 en el capítulo 5 cuando Dave reconoce que
podría haber estado tratando de empujar a Dominic demasiado lejos y habla acerca de su
23
el único aprendizaje qtre surja cuando se toque la relación no hablada. El terapeuta se
embarca en esas exploraciones con bastante coraje porque puede ser que sea el terapeuta el
que este haciendo el aprendizaje. Recientemente, por ejemplo, una exploración del aquí y
ahora con un cliente rápidamente abrió para Mick el hecho de que este cliente lo sentía algo
frío y desapegado. Esto fue una sorpresa para Mick, y no muy placentera, pero lo ayudó a
hacer un insight de cómo otros pueden experimentarlo; consecuentemente si - él quiere
conectarse con ellos más de lleno, él necesita comunicarles más explícitamente a sus
sentimientos de calidez y preocupación.

CONCLUSION

Si pensamos en la profundidad relacional como una “co-presencia" y la presencia cómo

expresividad y receptibidad, entonces hay cuatro formas básicas en las cuales podemos
facilitar un encuentro en profundidad con nuestros clientes: aumentar nuestra expresividad;
aumentar nuestra receptibidad, ayudar a nuestros clientes a que aumenten su expresividad y
ayudar a nuestros clientes a que aumenten su receptibidad. En este capitulo hemos explorado
una cantidad de diferentes maneras en las cuales podemos desarrollar nuestro trabajo en
cada una de estas áreas: lograr estar más atentos a todos nuestros clientes, a la totalidad de
nuestros clientes, tomando el riesgo de ser transparentes con ellos e invitando a nuestros
clientes a expresarse ellos mismos, más plena y abiertamente y creando la clase de clima
seguro y contenedor en el cual los clientes puedan sentirse deseosos de recibirnos. En el
siguiente capítulo vamos a explorar el primero de estos dos dominios en más detalle,
observando la clase de trabajo de desarrollo personal que puede ser valioso para los
terapeutas para ayudarlos a aumentar su habilidad de estar presente.

Traducción: Silvia Lombardi

Edición: Graciela Zapata

26
 Este trabajo puede facilitar el encuentro a un nivel de profundidad relacional por un cierto
número de razones.
Primero, en muchas sesiones de terapia, la preocupación más persistente del cliente va tener
que ver con la dinámica de la relación terapéutica (cliente-terapeuta), por lo tanto, aún si
están hablando de otros temas, de temas triviales, llevar el foco del trabajo terapéutico a este
tema puede permitir a algunos clientes estar totalmente presentes. Una cliente pOr ejemplo
puede estar hablando de su relación con su hija pero lo que puede estar importándole más, es
que su terapeuta piense que ella es una mala madre, entonces si el terapeuta le hace una
pregunta como: "Yo me pregunto cómo es para ti hablar de estas cosas conmigo", le da al
cliente una oportunidad de expresar sus temores reales y presentes y por lo tanto, estar más
presente.
Una exploración del aquí y ahora en la relación terapéutica, puede ayudar al terapeuta y al
cliente a identificar los tipos de proceso que evitan que un cliente se acerque más a los otros.
Como Yalom (2001) señala, las estrategias del cliente para desarrollar o evitar la intimidad
probablemente surjan en las relaciones terapéuticas inmediatas. En la exploración del aquí y
ahora, los clientes también tienen la oportunidad de descubrir cómo son experimentados por
uh otro congruente, y esto puede ayudarlos a desarrollar su habilidad de conectarse con los
otros como realmente son y no como se imaginan que son. La terapeuta Kalpána, antes, en
este capítulo ofreció a su cliente justamente una oportunidad de este tipo. Otro ejemplo de
esto, es el trabajo de Mick con Rebecca, que fue discutido al principio del capitulo 2, cuando
Mick compartió con ella, lo mucho que él estaba luchando para conectarse con ella. Como
Stern(200t)s suffiere, son a - menudo los puntos críticos de la relación terapéutica o los
momentos de desconexión en la relación, los que pueden ser disparadores para un encuentro
más profundo, porque esos momentos piden una respuesta genuina y espontánea del
terapeuta, y no una formula basada en el rol.
Trabajando en el aquí y ahora, la dinámica de la relación terapéutica es un tema explorado en
otros libros y también en el capítulo 4 en términos de "tocar la relación no hablada" entre el
terapeuta y el cliente. Aunque la relación en la terapia tiende a ser personificada y
particularmente "abierta", como cualquier otra relación humana, habrá muchas experiencias
de cada uno que- pas.arán sin ser verbalizádas. Hay potencialmente un enorme caudal de
material terapéutico en esa relación no hablada y parte de eso puede ser disparado a través
de la transparencia del terapeuta y el deseo o la voluntad de ambas partes de trabajar en el
aquí y el ahora. Sin embargo, que los clientes aprendan acerca de ellos mimos puede no ser
25