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Lectura: 

Mobbing

Trabajo, trabajadoras y cultura organizacional. Entre el mobbingy el acoso sexual

En las últimas décadas, la violencia ha surgido con la organización flexible y se


muestra bajo múltiples y diversa fórmula, para las y los trabajadores puede ser
inconcebible, como algo a lo que hay que acomodarse. En un intento por
identificar, comprender, prevenir y combatir la acción violenta se ha delimitado sus
fronteras en una norma o legislación como:

 Discriminación
 Segregación laboral
 Hostigamiento sexual
 Acoso moral

Son apenas algunas de esas expresiones, las cuales hoy en día pueden ser
identificadas y reconocidas, particularmente en ciertos países, como problemáticas
que violentan los derechos humanos de las personas en el trabajo y afectan su
salud, dignidad e integridad física y emocional.

En México, el debate sobre el mobbing se amplía y comienza a profundizarse con


otros estudios de singular importancia, como los de hostigamiento sexual de las
mujeres en el trabajo. Si bien el hostigamiento sexual y el acoso laboral están
claramente delimitados como conceptos y problemas más allá de las múltiples
definiciones y acotamientos que existen, pocas veces se les estudia como
problemas que pueden estar articulados en la realidad cotidiana de las
mujeres trabajadoras, lo cual posibilita el tránsito de una forma de violencia a otra.

La organización flexible:

La cultura organizacional que predomina actualmente en México, tanto en el


sector público como en el privado, es la precariedad, la cual es la organización
flexible de los usos de la mano de obra dentro de una lógica de competencia
constante y una gestión del trabajo a través del estrés.

De tal forma, se demanda a cada trabajador y trabajadora que sean más


productivos para hacer frente a la intensificación del trabajo, a las numerosas
urgencias, a los cambios de productos y de procedimientos; que sean reactivos a
las fluctuaciones del mercado y a las amenazas de la competencia. Como las
demandas siempre son externas y el ritmo es impuesto, constantemente hay que
abandonar una tarea para hacer otra más urgente, lo que trae como consecuencia
un crecimiento de la carga mental de las y los trabajadores

La trama del género en el acoso laboral y el hostigamiento sexual

En el caso de las mujeres trabajadoras, las expresiones de acoso laboral y


hostigamiento sexual rara vez se presentan de manera pura, tal como la teoría nos
lo define. Sin duda es fundamental tener identificado de manera precisa cada
problema y nombrarlo en su justa dimensión, particularmente si queremos
regularlo como derecho establecido que hay que respetar y hacer cumplir.

Con todo, si abordamos el acoso laboral y el hostigamiento sexual desde la


subjetividad de las trabajadoras en cuanto a cómo lo perciben, lo experimentan o
lo sufren, el borde para identificar y deslindar uno de otro lo establecerán las
propias trabajadoras en las acciones de resistencia que antepongan diariamente.

Tanto uno como otro problema permanecieron invisibles durante mucho tiempo, y
en muchos lugares de trabajo lo son aún. Las feministas lograron darle existencia
social a la violencia sexual que las mujeres viven en su trabajo

Opinión del tema:

Bueno lo que yo opino es que incluso en los tiempos que vivimos a día de hoy, el
mobbing no ha disminuido a pesar de las terrbiles consecuencias que ya todos
sabemos, esto obviamente llega a afectar el rendimiento de la persona y se ve
reflejado en una empresa, considero que este tema es reprobable y no importa el
genero que este realizando estos actos, aunque sabiendo que son las mujeres las
que mas llegan a sufrir este caso, diferentes organizaciones deberían tomar más
cartas en el asunto para evitar problemas como estos y el hombre o incluso mujer
que este realizando estas atrozidades debe ser castigado duramente.

Igual si en una empresa no se respetan los derechos de los trabajadores, recibir


penalizaciones y ofrecerle ayuda a la persona afectada, aunque muchas veces
lastimosamente nadie hace nada para poder parar estos problemas, ya sea por
miedo, por conveniencia ya que como sabemos en muchas ocaciones son los
jefes de empresas o gerentes de esta misma que hacen esto y úsan su “poder”
dentro de una organización para sacar un beneficio propio y muchos trabajadores
no deciden apoyar al afectado ya que pueden verse así mismos con
consecuencias como despidos o incluso demandas de parte de los altos mandos
por “acusaciones falsas” aunque todos sepamos que es algo que si esta pasando
en realidad.
Al final creo que el acoso lamentablemente nunca va a terminar, sin embargo creo
que si podemos hacer que este disminuya y como lo comente al principio,

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