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UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA

VERACRUZANA

LICENCIATURA EN EDUCACION BÁSICA

Experiencia formativa:
EXPRESIÓN Y APRECIACIÓN ARTÍSTICA I

Actividad 4:
TEXTO REFLEXIVO

Aprendiente:
ANA KAREN GUZMÁN MORALES

Asesor:
MTRA. GRISELDA AMOR SAITO

Grado y grupo:
7TO. SEMESTRE GRUPO UNO

Minatitlán, Ver. 27 de noviembre 2021


TEMA 3: USOS Y FUNCIONES DEL ARTE
Tendencias, usos, funciones de la educación artística.
La educación artística es un modelo para la formación de las nuevas generaciones,
forma parte de una formación integral sintetizada con contenidos imprescindibles
para conocer, entender el mundo y actuar como consecuencias de conductas
deseables para el progreso social. En este sentido se debe concebir una educación que
admita el derecho a los seres humanos desde sus primeras edades a percibir, valorar y
expresar arte como condición social que contribuye a su desarrollo cognitivo,
espiritual, potenciador cultural y conductas creadoras futuras.

Por otro lado, la expresión estética está presente y demuestra la asimilación y


transformación humana, donde lo emocional y espiritual generan un comportamiento
creador en sus diversas relaciones con la realidad, abarcando la naturaleza, la sociedad
y el pensamiento en tres grandes esferas: conocimiento, actividad y educación, educar
desde el punto de vista estético y artístico de niñas y niños de edad preescolar significa
desarrollo psíquico y físico que se constituye como condición relevante de su futura
personalidad.

Los modelos pedagógicos de la educación en la primera infancia reconocen la


actividad estética y artística, que niñas y niños, debían desarrollar como condición
indispensable de su formación; por otra parte, las actividades y expresiones artísticas
están estrechamente relacionadas con la socialización de niñas y niños y favorecen la
creación de vínculos afectivos.

La educación inicial y preescolar constituye la fase primaria de desarrollo adecuado


para fomentar las diversas competencias, donde el contenido artístico no debe ser un
complemento sino parte esencial en la educación de los futuros ciudadanos. En la
primera etapa de la vida las niñas y niños conocen del mundo que les rodea, sus
ambientes físicos y humanos de manera general y por medio de la condición múltiple
de la sensopercepción, lo cual se estimula fuertemente cuando se aplican recursos
artísticos en el proceso del aprendizaje, en forma de juego y de libre expresión.
La práctica y disfrute artístico aportan condiciones que activan las esferas cognitivas,
afectiva y conductual del ser humano desde las más tempranas edades. La percepción,
la memoria, las emociones y motivaciones son procesos esenciales en el desarrollo de
niñas y niños, a lo que la experiencia artística contribuye poderosamente posibilitando
impresiones duraderas y valiosas en la formación de su personalidad. El proceso de
percepción desde las edades preescolares considera que los estímulos artísticos:
sonidos, formas, colores, texturas, gestos, movimientos; son altamente motivadores
en el juego y en el resto de las actividades de aprendizaje.

La vigencia, pertinencia e importancia de los diversos enfoques y tendencias de la


enseñanza de las artes, se encuentra a debate tanto en Norteamérica como en
Iberoamérica, es posible identificar las concepciones y versiones descritas por el autor,
en las prácticas educativas de diferentes países, tanto en su forma pura como
entremezcladas, las distintas posiciones que sobre el tema mantienen educadores,
filósofos, psicólogos, antropólogos o artistas, son el origen de las tendencias que
históricamente han marcado el desarrollo de la enseñanza de las artes en la educación
básica, en el que se pueden ubicar tanto momentos de avance, como de retroceso,
estancamiento y valoración, por lo que las variaciones que en el tiempo han tenido los
enfoques y tendencias de la llamada “educación artística”, son el resultado directo de
los cambios y transformaciones en las concepciones que se tienen de la educación y
de la sociedad.

Dado que el trayecto histórico de las diversas teorías del aprendizaje no es homogéneo
ni lineal y se encuentra en constante transformación, así también las tendencias al
interior de la enseñanza de las artes en la escuela, se han ampliado, problematizado,
rectificado y reinventado en función del contexto educativo y la situación particular
de cada país frente a la educación artística.

De acuerdo con Arthur D. Efland, el principal objetivo de la enseñanza del arte es que
los alumnos lleguen a entender los mundos sociales y culturales en los que viven. Estos
mundos son representaciones creadas a partir de cualidades estéticas de los medios
artísticos, para entender cómo estas cualidades llegan a producir significado, es
preciso que los estudiantes se enfrenten a ellas en su propia experiencia con diferentes
medios.

Un currículo artístico debería animar a los estudiantes a salir al encuentro de


interpretaciones y concepciones de filósofos del arte y críticos que hayan estudiado
los fenómenos del arte en toda su complejidad, el arte y la ciencia no sólo se oponen
sino que son igualmente importantes, resulta necesario en aras de la concreción de un
enfoque intercultural y posmoderno de la enseñanza del arte en la escuela, que se
diseñen planes para la mente y la experiencia con estrategias didácticas, contenidos y
propósitos congruentes con las exigencias en la formación de ciudadanos críticos, bien
informados y competentes para moverse en un mundo incierto, multiperspectivo y en
continua transformación.

Lo que se busca, fundamentalmente, con la inclusión de las artes en la escuela, es


ampliar la capacidad de percibir las cosas, de identificar sus significados culturales,
personales y sociales, de reflexionar en torno a estos, de comparar y sacar
conclusiones.
TEMA 4: ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LAS ARTES VISUALES
Antecedentes históricos y avances tecnológicos de las artes visuales.
El arte de la Antigüedad conserva plena vigencia y constituyen un intenso estímulo
espiritual y visual aún en la actualidad. Los paradigmas del mundo antiguo han sido
no sólo la manifestación visible de una determinada civilización, sino que fueron
reproducidos, transformados, resignificados a lo largo de los siglos de la historia
occidental, el objeto de estudio de nuestra materia es la obra de arte entendida como
portadora de múltiples significados, estrechamente unidos a la sociedad que la creó,
en el análisis del proceso de elaboración del fenómeno artístico es imprescindible
considerar la historia, las costumbres, la mentalidad, la religión, la filosofía, la
literatura y todo otro elemento que nos ayude a encontrar el sentido más profundo de
la imagen.

Dentro de sus objetivos se deben establecer criterios metodológicos adecuados para


el análisis formal y la interpretación de las imágenes, proporcionar a los alumnos
herramientas de análisis que les permitan identificar las variantes estilísticas y
semánticas en la producción artística de las civilizaciones de la Antigüedad.

Relacionar la obra de arte con la historia, la religión, la literatura y otras


manifestaciones de la civilización, determinar el proceso de elaboración de las
diferentes tipologías de la representación artística.

Proponer temas de reflexión que incentiven la capacidad de los alumnos para


comprender fenómenos alejados cronológica, geográfica y filosóficamente de la
cultura contemporánea.

Los comienzos del arte, una aproximación al arte de la Prehistoria; Arte rupestre y
mobiliar del Paleolítico, simbolismos, interpretaciones, la revolución neolítica, el
levante español y los monumentos megalíticos Egipto y Mesopotamia; Principales
civilizaciones de la Mesopotamia y sus creaciones, de Sumer a Persia, conceptos
fundamentales para comprender la representación egipcia: el mundo de los muertos,
el faraón, la religión, las convenciones artísticas, el desarrollo de los temas
predominantes en pintura, escultura y arquitectura funeraria y religiosa durante el
Reino Antiguo, el Reino Medio y el Imperio Nuevo. Akenatón y la revolución de El
Amarna.

Recordemos que las actividades artísticas despiertan la creatividad, la magia, la


fantasía y su poder de imaginación, permite la formación de la personalidad de los
alumnos, les brinda confianza en si mismos, respeto y fomenta que sean pacientes y
tolerantes, por todo ello es muy importante que como docentes tengamos conciencia
de esta situación y desde nuestros lugares de trabajo podamos ayudar a nuestros
estudiantes a legitimar la tarea artística y la profesionalización en artes como un dador
de identidad personal y social.

En mi opinión esto es uno de las grandes retos que debe asumir un docente si pretende
lograr un trabajo creativo por parte de sus alumnos dentro de una disciplina artística
determinada, aquel que funja como guía tiene que poder acompañar sin imponer,
contener sin asfixiar, exigir sin paralizar, evaluar sin condenar y saber poner los
límites cuando sea necesario, estimular sin aplastar el imaginario del otro,
propulsar la independencia y el autoconocimiento para que los jóvenes creadores aún
en formación puedan ir creciendo en su contacto interior así como en su disciplina
formal.

Un pedagogo en artes que no olvide la empatía, que haga de ella su principal estrategia
didáctica y un puente de comprensión profunda con sus alumnos. Un docente en artes
que sea creativo, que ame su trabajo y que sepa mantener vivo y saludable el tejido de
la pasión en sus estudiantes y en el mismo.
BIBLIOGRAFÍA

1.Las artes y su enseñanza en la educación básica. Capitulo 1. Página


26.34.

2.Áreas y programas de estudio. Desarrollo personal y social. Paginas


470-474. Unidad 1.

3.Las artes y su enseñanza en la educación básica. Capitulo 3. Paginas


115-119. Unidad 2.

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