6.3. El Sexenio Democrático (1868-1874): la constitución de 1869.

Evolución política: gobierno

provisional, reinado de Amadeo de Saboya y Primera República.

La Revolución Gloriosa.
La revolución comenzó en Cádiz el día 17 de septiembre, dirigidos por el almirante Topete, el cual
también estaba acompañado por Prim y Serrano entre otros. El pronunciamiento militar se transformó
en una revolución popular cuando los sublevados armaron a la población y los organizaron en Juntas
revolucionarias. El 28 de septiembre se producía la batalla del puente de Alcolea, donde las tropas al
mando de Serrano derrotaban a las gubernamentales, un día después la Reina partía al exilio.
Tras la huida de Isabel se formó un Gobierno provisional compuesto por unionistas y progresistas
presidido por Serrano. Por su parte el Partido Demócrata se transformó en el Partido Republicano
Democrático Federal. Una minoría de demócratas, conocidos como los cimbrios, estos se separaron del
partido para dar su apoyo al Gobierno. El gobierno provisional procedió a cumplir la mayor parte del
programa demócrata (derechos de reunión y asociación, establecimiento del sufragio universal
masculino, etc.), y convocó elecciones a Cortes Constituyentes.

La Constitución de 1869:
En junio de 1869 se aprobaba la nueva constitución, era la primera constitución democrática de
España. Las características principales del texto eran:

1. Soberanía Nacional y el sufragio universal de los varones mayores de 25 años.

2. Establece una monarquía democrática y parlamentaria.
3. División de poderes.
4. Una exhaustiva declaración de derechos como Habeas Corpus o libertad de expresión.
5. Se consagra la libertad de culto, pero también el compromiso del Estado de mantener el culto
católico.
6. Por último, se incluía el compromiso de regular la situación de las colonias de ultramar.

Los problemas del régimen y la búsqueda de un rey

Aprobada la constitución, Serrano fue nombrado Regente y Prim pasó a dirigir el Gobierno quien formó
un Gobierno de mayoría progresista con un unionista, Topete, y dos demócratas (cimbrios). Entre
1869 y 1870 se fueron publicando una serie de leyes reformadoras: como el nuevo Código Penal. En el
terreno económico, el ministro de Hacienda, promovió la Ley de aranceles, que rebajaba las aduanas,
establecía la peseta como nueva unidad monetaria entre otras medidas.
La situación social fue muy convulsa: dándose levantamientos en toda la península. Además, estallaba
una sublevación en la isla de Cuba.
La búsqueda del nuevo rey resultó complicada. Finalmente, y tras provocar una guerra entre Francia y
Prusia (telegrama de Ems), el príncipe italiano Amadeo de Saboya accedió a aceptar la Corona. Amadeo
I llegó a Cartagena el 30 de diciembre y allí mismo recibió la noticia del asesinato de Prim tres días antes.

El Reinado de Amadeo de Saboya (1871-1873)

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El monarca, falto de su principal valedor, se enfrentó a una gran oposición, durante su reinado se
sucedieron seis Gobiernos y tres elecciones generales. Además, se sucedieron los escándalos, las
mociones de censura y el amaño de las elecciones, sobre todo en 1872. Ese año la sublevación en Cuba
seguía en aumento, se producía una sublevación republicana en El Ferrol y las sublevaciones carlistas
en Cataluña. El estallido de la Comuna en París, la presencia de la AIT en España, completaron el clima
de conflictividad. Finalmente, presentó su abdicación el 11 de febrero de 1873. Esa misma noche se
proclamaba la república.

La Iª República
Eligieron jefe del poder ejecutivo a Estanislao Figueras. En las elecciones a cortes constituyentes de
mayo, con un 60% de abstención. Se proclamaba la República federal y el 9 de junio era nombrado
presidente Pi i Margall.
Se presentó un proyecto de constitución en 1873, aunque nunca llegó a entrar en vigor. En esta se
proponía cierta autonomía de los municipios y una amplia declaración de derechos.
El 7 de julio se proclamó una huelga general en Alcoy. El 12, se proclamaba el cantón en Cartagena. El
movimiento cantonal, insurrección protagonizada por los republicanos federales «intransigentes», que
querían instaurar inmediatamente la República Federal se extendió creándose Juntas revolucionarias. El
gobierno de Pi y Margall se vio desbordado por la rebelión cantonal y también por la marcha de la
Tercera Guerra Carlista.

El 18 de julio accedía a la presidencia Nicolás Salmerón, el cual aumentó los efectivos de la Guardia Civil
y se restableció la pena capital, el siguiente presidente era Emilio Castelar, este reforzó el Ejército para
acabar con las guerras carlista y cubana; durante la sesión parlamentaria en que se elegía sucesor, el
general Pavía entró en las Cortes. Comenzaba la república ducal, un gobierno militar autoritario
dirigido por el general Serrano, cuyo principal logro fue levantar el asedio carlista sobre Bilbao y tomar
Cartagena. Duró hasta el 29 de diciembre de ese mismo año cuando Martínez Campos se pronunciaba
en Sagunto a favor de la restauración de los Borbones y del rey Alfonso XII.