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Sala de ejecución por inyección letal de la Prisión Estatal de San Quentin ubicada en California,
Estados Unidos. 2010.
La inyección letal es un método de ejecución que consiste en inyectar por vía intravenosa y de
manera continua una cantidad letal de diversos fármacos combinados, que producen,
sucesivamente, inconsciencia, parálisis respiratoria y paro cardíaco.
Componentes
Estos fármacos depresores son los primeros que se administran y su función es inhibir las
funciones cerebrales, provocando lo que se conoce como hipnosis anestésica, un estado donde
se pierde la conciencia y se suprimen los sentidos. Es primordial que actúen convenientemente
para que la persona ejecutada no reaccione frente a la acción de las sustancias que se
introducen a continuación en el torrente sanguíneo.
Midazolam, es una sustancia de acción depresora corta sobre el sistema límbico, con
propiedades sedantes, ansiolíticas, amnésicas, anticonvulsivantes y relajantes musculares. En
altas dosis produce un estado de sopor e inconsciencia.
Bloqueadores neuromusculares
Modalidades de uso
En Texas, uno de los estados de Estados Unidos en los que la ejecución se realiza por inyección
letal, se usan tres sustancias conjuntamente: tiopental sódico, bromuro de pancuronio y
cloruro de potasio. El tiopental sódico es un hipnótico, la segunda es un bloqueador de la placa
neuromuscular no despolarizante, que paraliza el diafragma y los músculos torácicos,
interrumpiendo así la respiración, y el cloruro de potasio impide la despolarización del músculo
cardíaco provocando su detención (o paro cardíaco).
Controversias
Actualmente se debate en Estados Unidos, en los estados donde está establecido este sistema
de inyección de las tres sustancias como sistema de ejecución, si realmente produce una
muerte indolora o existe sufrimiento por parte del condenado.
El 22 de febrero de 2018, el estado de Alabama tuvo que suspender la ejecución de Doyle Lee
Hamm, que había sido condenado a morir por el procedimiento de la inyección letal. Según los
médicos que le trataron de su enfermedad, las venas estaban tan deterioradas que podrían
haber reventado en plena ejecución, causándole al reo un sufrimiento añadido. David fue
condenado en 1987 tras asesinar de un disparo en la cabeza al empleado de un motel durante
un atraco.3