Prescripción dietética

Régimen común liviano, normocalorico, hiperproteico, normoglicidico con selección de CHO

complejos, normolipidico con selección de monoinsaturados y poliinsaturados, hiposodico,
vitamina E, aumentado en fibra, volumen total y parcial aumentado, horario fraccionado y Tº
templada.

Fundamentación

R. Común: Ya que no tiene ninguna patología que le impida la deglución de los alimentos.

D. Liviano: Para evitar sistomas gastrointestinales

Normocalorico: Para favorecer un balance energético neutro y a medida que vaya progresando
el paciente, inducir un balance energético negativo.

Hiperproteico: Para favorecer una mayor pérdida de peso a corto plazo (6 meses) y favorecer
la preservación de la masa magra.

Normoglicidico: Con selección de CHO complejos para mantener un control adecuado del
índice glicémico y así prevenir la ganancia de peso. Preservar las proteínas y así prevenir la
cetosis.

Normolipidico: Para ayudar a disminuir los síntomas propios de la hipertensión, también a

evitar las complicaciones propias de la diabetes. Y a mejorar el perfil lipídico (aumentado el
colesterol HDL).

Hiposódico: Para controlar y así evitar un aumento de la presión arterial.

Fibra: Con un mayor aporte de fibra insoluble, para favorecer el tránsito intestinal y así
evitando la constipación. También ayudará a aumentar la saciedad y retardar la absorción de
nutrientes.

Volumen total y parcial: Aumentados para así favorecer la saciedad del paciente.

Horario fraccionado: Comer más seguido para acelerar el metabolismo, controlando el peso
corporal y ayudando a estabilizar los nivele de glicemia e insulina.

Vitamina E: Para evitar la oxidación de los ac. Grasos poliinsaturados. (o sino aumenta la HTA)

Tº templada: Para una mayor saciedad, ya que se produce una congestión de la mucosa
digestiva.