El imaginario social

Documento de cátedra (Clase Aula Virtual)

El imaginario social está compuesto por los discursos, las prácticas sociales y los valores que
circulan en una sociedad. Actúa como regulador de conductas, y por lo tanto produce
materialidad. Esta materialidad del dispositivo imaginario se manifiesta en los efectos que
logra sobre la realidad. Las conductas de los individuos, las apreciaciones, los gustos, los
ideales, la cultura, son modelados por el imaginario.
Para comprender como se gesta el imaginario social, tenemos que remitirnos a la
imaginación. Esta es una facultad psicológica individual, que produce representaciones de
la realidad, por lo que inventa otras realidades posibles. La imaginación actúa como
cuestionamiento permanente de la realidad establecida.
A partir de la interacción entre las imaginaciones individuales se produce el Imaginario
Colectivo, que al igual que plantea Durkheim en relación a la Conciencia Colectiva, no es la
suma de las imaginaciones individuales, sino que es una entidad nueva con sus propias
características. Es el resultado de una compleja red de relaciones entre discursos y prácticas
sociales. Se manifiesta en las prácticas sociales y en la dimensión simbólica de lo social.
Un ejemplo de ello, como lo veremos cuando tratemos la Sociología del Cuerpo, es el
imaginario del cuerpo que se vuelve hegemónico en una sociedad, que indicaría cómo debe
ser un cuerpo, creando un ideal de la belleza a partir del cual se van a apreciar los cuerpos
de las personas que vemos cotidianamente. Es una valoración imaginaria colectiva que
funciona como parámetro epocal, para actual y juzgar.
Cabe aclarar que el imaginario no produce uniformidad de conductas, sino que señala
tendencias. Todo acontecimiento no registrado produce desconcierto y en algunos casos
rechazo.
Un componente esencial del Imaginario es el lenguaje, ya que es el sistema simbólico más
complejo que comparten los seres humanos. El lenguaje no sólo permite comunicarse, sino
que además permite representar los productos de la imaginación, reales o abstractos.
Los discursos que circulan en el imaginario, son proposiciones dotadas de sentido. Cada
grupo comparte un discurso común. La eficacia del discurso está en función del éxito en
conseguir los objetivos de ese grupo, y por lo tanto está avalado por las prácticas. Por
ejemplo, en la actual situación de pandemia, el aislamiento social se sostiene en la medida
en que se mantiene controlado el porcentaje de contagio y decesos; eso consolida un
discurso acerca de esta medida, y lleva a que los individuos acepten las medidas dispuestas
por las autoridades, modificando sus prácticas habituales.
Los valores son un componente de los imaginarios colectivos. Surgen de la interrelación
entre los discursos y las prácticas. Funcionan como sistemas de apreciación, el bien y el mal,
lo lindo y lo feo, lo agradable y lo desagradable. Los individuos que integran una sociedad
conocen el sistema de valores. Pero los pueden obedecer o rechazar.
Recapitulando, el imaginario colectivo es un referente para chequear las diversas
situaciones por las que atravesamos. Es un parámetro de conductas, palabras y
expectativas. Implica disponibilidad y exclusiones; lo que se puede y lo que no se puede.
Las Representaciones Sociales
Este concepto fue desarrollado por Serge_Moscovici, quien retoma la idea de conciencia
grupal o colectiva de Durkheim, para aplicarlo al desarrollo de la Psicología Social.
Según Moscovici, el estudio del comportamiento social requiere considerar las condiciones
históricas, culturales y macrosociales en las que se desenvuelven los individuos.
Estas condiciones producen las representaciones sociales que tienen las siguientes
características:
- Se construyen a partir de un material cultural y se realiza a través de la interacción social
- Seleccionan aspectos significativos del entorno, se retiran del contexto, reorganizándose
mentalmente y se reintegran a la cultura.
- Permite la reducción de la complejidad del medio circundante a categorías más simples,
funcionando como una guía para las acciones de las personas.
- Se constituyen en un modelo interpretativo y evaluativo de la realidad.
Las representaciones sociales hacen referencia a un tipo de conocimiento colectivamente
elaborado y ampliamente difundido en la sociedad, que se sitúa en el sentido común.
Permiten que los individuos puedan orientarse en el mundo material y social.
Cumplen una función cognitiva, en tanto que hacen familiar lo novedoso y permite la
interpretación y reconstrucción de la realidad, ofreciendo un marco común para facilitar la
comunicación.
Les dejamos como bibliografía complementaria un texto de representaciones sociales.
(Jodelet)