Está en la página 1de 12

TEMA 4 (EDUCACIÓN INFANTIL)

 EL NIÑO DESCUBRE A LOS OTROS.

 PROCESO DE DESCUBRIMIENTO, DE VINCULACIÓN Y DE


ACEPTACIÓN.

 LA ESCUELA COMO INSTITUCIÓN SOCIALIZADORA.

 EL PAPEL DEL CENTRO DE EDUCACIÓN INFANTIL EN LA


PREVENCIÓN E INTERVENCIÓN CON NIÑOS Y NIÑAS EN SITUACIÓN
DE RIESGO SOCIAL.

 PRINCIPALES CONFLICTOS DE LA VIDA EN GRUPO.

PREPARADORA PERSONAL DE OPOSICIONES AL CUERPO DE


MAESTROS: Carmen Carreras Chacón.

carmencarreras2013@hotmail.es

Tlf: 679 71 04 33
ÍNDICE:

INTRODUCCIÓN.

1. EL NIÑO DESCUBRE A LOS OTROS.

1.1 Agentes socializadores.


1.2 Los procesos de socialización.
1.3 El descubrimiento de los otros.

2. PROCESOS DE DECUBRIMIENTO, DE VINCULACIÓN Y DE


ACEPTACIÓN.

2.1 Proceso de descubrimiento.


2.2 Proceso de vinculación.
2.3 Proceso de aceptación.

3. LA ESCUELA COMO INSTITUCIÓN SOCIALIZADORA.

3.1 Funciones de la escuela.


3.2 El papel del maestro/a.
3.3 La socialización desde el currículo de la Educación Infantil.

4. EL PAPEL DEL CENTRO DE EDUCACIÓN INFANTIL EN LA


PREVENCIÓN E INTERVENCIÓN CON NIÑOS Y NIÑAS EN
SITUACIÓN DE RIESGO SOCIAL.

4.1 Situación de riesgo social.


4.2 Perfil del niño/a en situación de riesgo social.
4.2 Medidas de prevención y actuación.

5. PRINCIPALES CONFLICTOS DE LA VIDA EN GRUPO.


5.1 Concepto de conflicto y de grupo.
5.2 Causas de los conflictos.
5.3 Tipos de conflictos.
5.4 Orientaciones para una correcta intervención educativa.

CONCLUSIÓN.

NORMATIVA VIGENTE.

BIBLIOGRAFÍA.

WEBGRAFÍA.

ANEXO.
INTRODUCCIÓN.

En este tema conoceremos como durante la etapa de Educación Infantil contamos con
numerosos ejemplos sobre como el niño/a descubre a los otros e inicia procesos de
descubrimiento, vinculación con los demás y aceptación. Todo ello, se va a ver
favorecido por las interacciones sociales, las cuales ayudan desde el momento del
nacimiento a averiguar quiénes somos, contribuyendo a la comprensión del yo y a la
autoevaluación de nuestros comportamientos y actitudes. Las investigaciones en el
campo de la psicosociología apoyan que es importante adquirir un concepto de sí mismo
positivo, hecho en el que el entorno social tiene un papel comprometido.
Durante los primeros años de la vida del niño, se producen una serie de adquisiciones en
lo que se refiere a la capacidad de respuesta social y a las habilidades sociales.
La socialización es el proceso a través del cual el niño/ a asimila la cultura (normas,
valores, costumbres, conocimientos, conductas...) a la vez que, recíprocamente, la
sociedad se perpetúa y desarrolla. En este proceso el niño descubre a los otros.

1. EL NIÑO DESCUBRE A LOS OTROS.

El proceso de socialización es una interacción entre el niño y su entorno. Esta


interacción depende de las características del propio niño y de la forma de actuar de los
agentes socializadores.

1.1 Agentes socializadores.

Los agentes de socialización son las personas que forman parte de las diferentes
estructuras: familia, centro educativo, amigos, vecinos, medios de comunicación…
Cada estructura tiene sus propias características y reglas, que educan al sujeto en una
determinada dirección.

- La familia es la estructura de socialización primaria. En ella se transmiten las


primeras pautas culturales y la educación de las primeras pautas y valores.
- La escuela es una institución socializadora que aporta relaciones y vivencias
diferentes y complementarias a las de la familia y a las de otros ambientes.
- Los amigos y vecinos amplían el cuadro de relaciones sociales.
- Los medios de comunicación son también agentes socializadores cuya magnitud
de influencia es tan amplia que, en edades infantiles, debe estar supervisada por
los adultos.

La socialización es, por consiguiente, un proceso interactivo entre el niño/a y el grupo


social en el que nace y al que pertenece; coexistiendo distintos procesos.

1.2 Los procesos de socialización.

Existen tres procesos en el desarrollo de la socialización. Todos están íntimamente


relacionados, no dándose de forma separada; pero los diferenciaremos porque
dependiendo del tipo de actividad a la que nos refiramos, serán predominantes unos u
otros. Es importante señalar que esta distinción es sólo didáctica, sirviéndonos para
agrupar y dar sentido a las distintas adquisiciones sociales que hace el niño.

a) Los procesos mentales de socialización: adquisición de conocimientos.


La adquisición de conocimientos es uno de los aspectos fundamentales del
desarrollo social, a la vez que precondición para que tengan lugar los procesos
afectivos y las conductas sociales. Sin conocimiento social no hay conducta
social.
Marchesi aborda tres dimensiones del conocimiento social: el conocimiento de
sí mismo, el conocimiento de los otros y el conocimiento de la sociedad.
López limita los conocimientos mentales de socialización de mayor importancia
entre el nacimiento y los 3 años, al reconocimiento de las personas, el
reconocimiento de sí mismo, la identidad y el rol personal y de los otros.

b) Procesos conductuales de socialización. La socialización implica


también la adquisición de conductas consideradas socialmente deseables, así
como el evitar aquellas que son juzgadas como antisociales.
Desde este punto de vista, el proceso socializador supone el conocimiento de
valores, normas y hábitos sociales, por un lado, y el control sobre la propia
conducta, por otro. Esto, a su vez, incluye el aprendizaje de hábitos sociales
(comer, vestir…) y de habilidades sociales (saludar, dar las gracias, etc.)

c) Procesos afectivos de socialización: formación de vínculos. Para Müller este


componente resulta esencial, ya que mediante él se crean estímulos y lazos con
determinadas personas que van a condicionar la personalidad futura y las
interacciones sociales del individuo.
En este proceso pueden distinguirse tres etapas:

 Primera etapa. Abarcaría el primer y segundo año. La actividad se desarrolla


principalmente en solitario y el interés `por los otros niños está motivado por la
curiosidad que despiertan en él, junto a sentimientos de rivalidad ante la
consecución de la atención y el amor del adulto.
 Segunda etapa (alrededor de los 3 años), los niños/as se buscan y les gusta estar
juntos en grupos de 2 o 3, pero todavía les resulta difícil la colaboración. Actúan
juntos pero, en realidad, lo hace uno al lado del otro; es lo que se conoce como
“juego en paralelo”. El lenguaje no es aún un instrumento de intercambio, sino
un choque de afirmaciones (monólogo colectivo).
 La tercera etapa, sobre los 4-5 años, se caracteriza por la ampliación de los
participantes en los grupos de juego a 4 o 5. Las intenciones se hacen más
patentes. Es la etapa del “juego asociativo”.

1.3 El descubrimiento de los otros.

El descubrimiento de los otros es la consecuencia del reconocimiento de sí mismo como


ser diferente de las demás personas que le rodean. Este descubrimiento conlleva una
serie de pasos:
a) El conocimiento de sí mismo se construye al mismo tiempo que el conocimiento
de los otros y en los seis primeros años de vida aparecen ciertos logros como el
reconocimiento en el espejo, el uso del pronombre personal y la identificación
con el nombre propio. Al mismo tiempo que el conocimiento de sí mismo y de
los demás, se forma la identidad personal.

b) El descubrimiento de los otros se realiza mediante el contacto con las personas


próximas. Así el niño establece las diferencias entre adultos y niños, conocidos y
desconocidos, etc.

c) Durante el primer año , los niños muestran interés por los otros , lo cual se
aprecia por la sonrisa y las miradas de búsqueda hacia quienes va conociendo.

d) El periodo comprendido entre los dieciocho meses y los tres años viene marcado
por una constante y creciente interacción social, lo que se ve favorecido por la
consolidación de la locomoción y la comunicación.

e) Desde los tres años hasta los seis, el niño integra sin grandes dificultades las
normas de comportamiento, descubre un mundo de relaciones, de juegos y de
experiencias sociales; produciéndose simultáneamente una serie de procesos
fundamentales tanto en el descubrimiento de los demás como en la socialización
en general.

2. PROCESO DE DESCUBRIMIENTO, DE VINCULACIÓN Y DE


ACEPTACIÓN.

A medida que el niño crece su círculo de relaciones se va ampliando y comienzan las


interacciones con los demás. Este proceso lleva consigo el desarrollo de las conductas
sociales, que se realiza mediante el descubrimiento de los demás, la vinculación con
ellos y su aceptación.

2.1.Proceso de descubrimiento.

El descubrimiento de los demás es la percepción de las personas con sus características


físicas, afectivas, roles, etc. En dicho proceso se distinguen cuatro fases:

1ª) Hasta el tercer mes aproximadamente el niño/ a no discrimina unas personas de otras
y suele mantener conductas sociales positivas con todas las personas que se le acercan.
2ª) Entre los tres y los seis meses, el niño diferencia las figuras familiares del resto y
también de los objetos. Hasta los 6-7 meses continúa aceptando a personas extrañas para
él si le resultan agradables.
3ª) Desde los seis meses hasta los tres o cuatro años, el niño realiza conductas de
aproximación hacia individuos específicos ( padres, hermanos, maestros...) y aparece el
miedo a los desconocidos.
4ª) Desde los cuatro a los seis años el niño establece relaciones asimétricas con los
adultos y de igualdad con los otros niños/ as.
2.2.Proceso de vinculación.

Para Bowlby vínculos afectivos que el niño establece con los demás constituyen una de
las bases más sólidas para la formación de su personalidad y para su desarrollo social.
Estos vínculos son:
- El apego, que es la relación socio-afectiva que mantiene el niño/ a con la madre
o con la persona que habitualmente le cuida. Supone una base de seguridad y
confianza desde la que enfrentarse al desconocimiento de todo lo que le rodea.
- Los hermanos son los compañeros de juego más regulares y constituyen los
modelos primarios de actividades interesantes a los cuales imitar. Establecen y
mantienen normas y sirven de confidentes.
- Los iguales. Las relaciones entre iguales giran, en principio, en torno a objetos
como vehículos de interacción social. El grupo de iguales le ofrece al niño la
posibilidad de opción en la selección del compañero.

2.3.Proceso de aceptación.

La aceptación de un niño por los demás se refiere a su admisión dentro del grupo total.
Para entrar en un grupo y ser aceptado, para resolver conflictos y mantener relaciones
positivas; el infante debe adquirir destrezas sociales que no le resultan tan necesarias
para interactuar con los adultos. La aceptación le supone al niño una preparación para
adaptarse y relacionarse con los demás según unas estrategias y normas previamente
establecidas por el grupo al que desea incorporarse.

Todos estos procesos se producen en los diferentes contextos de socialización a los que
el niño y la niña pertenecen, siendo uno muy relevante la escuela.

3. LA ESCUELA COMO INSTITUCIÓN SOCIALIZADORA.

Todas las sociedades poseen sistemas organizados en los que los adultos preparan a los
niños para su incorporación a la sociedad. La escuela es , por excelencia, la institución
encargada de la transmisión de los conocimientos y valores y de preparar a su
alumnado para el acceso activo a las estructuras sociales organizadas.

3.1.Funciones de la escuela.

La escuela infantil es importante para el desarrollo social y personal, ya que ofrece un


marco de “ensayo-aprendizaje” que le va a permitir a los niños:

- Relacionarse con los iguales a temprana edad.


- Superar gradualmente el egocentrismo.
- Asumir la importancia de las reglas y aceptarlas.
- Aprender a cooperar y a compartir.
- Hacerse responsable de su conducta.
- Solucionar conflictos de la vida en grupo.
- Tener confianza en sí mismo/ a.
- Adquirir hábitos que le ayuden en el desarrollo de su autonomía.

3.2 El papel del maestro/a.

El maestro o maestra de Educación Infantil es el elemento más relevantes en el


proceso educativo-socializador , al que corresponderá guiar el aprendizaje de los
alumnos/as, organizar los espacios y los tiempos de una forma concreta,
interaccionar de forma relevante,…haciendo por ello que el cúmulo de sus
características, sus vivencias, sus relaciones con los niños y niñas, etc., sean
capaces de formar un conjunto de relaciones grupales muy significativa.
Los docentes debemos reflexionar, por la repercusión a medio/ largo plazo que
ello puede suponerle al alumnado, sobre cuál es el modelo de comportamiento
que estamos ofreciendo a nuestro grupo-clase: rígido y autoritario, flexible,
tolerante, afectivo,…

3.3 La socialización desde el currículo de la Educación infantil.

Desde el punto de vista de las relaciones interpersonales y de la actuación e inserción


social, la finalidad de la Educación Infantil consiste en hacer posible el desarrollo de la
individualidad en el interior de un contexto que demanda ajuste y coordinación social.
En la orden de 5 de agosto de 2008, por la que se desarrolla el currículo
correspondiente a la Educación Infantil en Andalucía, aparece un objetivo general de
etapa que alude directamente a la importancia de las relaciones sociales: “Establecer
relaciones satisfactorias en ámbitos cada vez más amplios, teniendo en cuenta las
emociones, sentimientos y puntos de vista de los demás, así como adquirir
gradualmente pautas de convivencia y estrategias en la resolución pacífica de
conflictos”.
Desde el área de Conocimiento del Entorno, se pretende favorecer en niños y niñas el
proceso de descubrimiento y representación de los diferentes contextos que componen
el entorno infantil, así como facilitar su inserción en ellos.
Desde el Conocimiento de sí mismo y la Autonomía Personal, se establecerán las pautas
para la adquisición de conductas y comportamientos socialmente deseables, que
favorezcan la socialización con las demás personas del entorno.
Los diferentes lenguajes (área: Lenguajes: representación y comunicación) constituyen
un elemento de intercambio de ideas, opiniones, sentimientos…indispensable para un
adecuado desarrollo socializador.
Asimismo, el Decreto 428/ 2008, de 29 de julio, por el que se establece la ordenación y
las enseñanzas correspondientes a la Educación infantil en Andalucía; en el capítulo II,
artículo 5, punto 7, pone de manifiesto que “las diferentes áreas del currículo integrarán
de forma transversal el desarrollo de valores democráticos, cívicos y étnicos de nuestra
sociedad (...)”
Por lo tanto, podemos decir que la socialización del niño en el contexto escolar se
realiza a través de actuaciones curriculares, además del establecimiento de relaciones
con los compañeros y de la actuación ante el riesgo social.

4. EL PAPEL DEL CENTRO DE EDUCACIÓN INFANTIL EN LA


PREVENCIÓN E INTERVENCIÓN CON NIÑOS Y NIÑAS EN SITUACIÓN DE
RIESGO SOCIAL.

Se pueden considerar como situaciones de riesgo aquellas que tienen los niños/ as con
grandes déficits de cobertura de sus necesidades básicas.
El personal educativo que trabaja en el centro de Educación Infantil, debe colaborar en
la prevención y solución de estas situaciones.

4.1 Situaciones de riesgo social.

Dentro de las situaciones de riesgo se engloban todas aquellas acciones que se


desarrollan en contra de un adecuado desarrollo cognitivo, físico y/o emocional.
Entre las circunstancias que se desarrollan con esta situación podemos citar problemas
que se vinculan con algunos de los miembros familiares, relacionados con alcohol,
drogas, prostitución, problemas neurológicos, falta de recursos económicos-culturales,
estrés continuo, impulsividad, ira constante, baja intolerancia a la frustración, etc.
El maltrato, ya sea físico o psicológico, puede ocasionar en el niño/a a lo largo de la
infancia diversas secuelas, como pueden ser:

- Dificultades para regular las emociones.


- Padecimiento de trastornos psicosomáticos.
- Manifestación de una baja autoestima.
- Aislamiento, miedos, conductas autodestructivas y disruptivas, agresividad hacia
los adultos y/o los iguales, etc.

4.2 Perfil de niños/as en situación de riesgo social.

Para elaborar, a modo de ejemplo, un pequeño perfil de rasgos que pudieran alertarnos
de la existencia de un alumno/a en situación de riesgo, vamos a tomar como referencia
la Convención de los Derechos de la Infancia. Es imprescindible aclarar que estas
referencias para realizar posibles evaluaciones, no pueden considerarse con un
criterio generalizado.

 Factor 1. Aspectos académicos.

- Alumno repetidor (poco probable en la etapa de Educación Infantil).


- Bajo rendimiento en las distintas materias.
- Tareas diarias de clase, sin finalizar.
- Discrepancias entre desarrollo y habilidades.
- Pobres hábitos de estudio. En la etapa infantil estos hábitos se dirigirán a la
capacidad de atención, escucha, …

 Factor 2. Comportamiento personal.

- Dificultad para aceptar la autoridad (de padres, docentes, etc)


- Incapacidad para resolver conflictos sin negativismo o por vía de hecho.
- No aceptación de “sanciones” disciplinarias.
- Baja participación en actividades escolares.
- Propenso al estrés.
- Dificultades o incluso incapacidad, para relacionarse con sus iguales.
- Dificultades para desenvolverse en situaciones nuevas.

 Factor 3. Situación familiar.

- Bajo juez de menores, adoptado, perteneciente a familias desestructuradas…


- Padres desempleados.
- Recientes hechos de muerte.

 Factor 4. Relaciones entre familia y escuela.

- Falta de apoyo escolar de los padres hacia su hijo.


- Ausencias injustificadas al aula, constantes.
- Asistencia al aula tardía, sin respetar los horarios establecidos.
- No asistencia a tutorías, reuniones,… y desinterés general por la institución
educativa.

 Factor 5. Cultura familiar.

- Pobre capacidad para integrarse socialmente.


- Falta de recursos culturales, hábitos sociales y personales inadecuados…
- Diferente raza o cultura, inmigración.

4.3 Medidas de prevención y actuación.

La posición de la escuela le proporciona a ésta numerosas posibilidades de actuación


con niños en situación de riesgo social. Entre otras:

- Identificar familias y niños/ as en situación de riesgo.


- Organizar y colaborar de manera activa en programas comunitarios de
sensibilización colectiva, escuelas de padres, planes de formación, etc.
- Fomentar la confianza en el maestro/ a como persona que puede comunicar su
problema a otras instituciones colaboradores ( asuntos sociales ).
- Cooperar con organismos públicos que se ocupen del caso, para comunicarle
datos sobre absentismo escolar, aspecto que presenta el niño...
- Utilizar recursos y dotaciones propios de la Educación Compensatoria (comedor
escolar, información a la familia de convocatorias de ayuda al estudio, etc).
- Atender a la diversidad, a través de una educación personalizada, la
estimulación, el fomento de la autonomía, la adaptación escolar y la solución de
problemas de diverso tipo; entre los que estarían los conflictos de la vida en
grupo.

5. PRINCIPALES CONFLICTOS DE LA VIDA EN GRUPO.

El establecimiento de relaciones sociales con los miembros del grupo, da lugar a la


posible aparición de una serie de conflictos.

5.1 Concepto de conflicto y de grupo.

Un conflicto humano es una situación en la que dos sujetos o más (adultos o


menores) o bien, dos o más grupos de individuos con intereses diferentes, entran en
confrontación, oposición o emprenden acciones mutuamente neutralizantes de las
del otro individuo o grupo; con el fin de dañar o lograr los objetivos que motivaron
dicha confrontación.

El grupo se define como el conjunto de dos o más individuos que se relacionan, son
interdependientes y que se reunieron para conseguir unos objetivos específicos.
Los grupos formales son aquellos a los que define la estructura de la organización,
con asignaciones concretas de tareas. En estos grupos el comportamiento de los
individuos está estipulado y dirigido hacia las metas de la organización.
Los grupos informales son formaciones naturales producidas en el entorno que
surgen como respuesta a una necesidad de contacto social. Entre las razones para
que las personas formen grupos, podemos citar: seguridad, estatus, autoestima,
afiliación…

5.2 Causas de los conflictos infantiles.

Los principales conflictos de la vida infantil en grupo surgen en torno a:

- La territorialidad. El niño se apodera de lo que considera su espacio y “todo


vale” para defenderlo: su mesa, su rincón, su caja de lápices, etc. En este caso, es
aconsejable marcar algunas normas que los niños y niñas comprendan para
evitar, en la medida de lo posible, conflictos y peleas.
- La conducta de influencia. La finalidad es poner el entorno a su beneficio. Esto
puede provocar sentimientos de culpabilidad, desilusión o satisfacción,
alegría...El maestro/ a debe ofrecer modelos alternativos a ese enfoque de
manipulación y capricho que se desarrolla con este tipo de conductas.
- La conducta de cooperación. Se trata de una postura egoísta en la que el niño se
une al grupo buscando únicamente su propio beneficio.
- Choques relacionados con la competitividad.
- Disputas ocasionadas por la violación de las normas establecidas en el seno del
grupo.
- Desacuerdos por la distribución de roles en el grupo, situaciones de
marginalidad, discriminación.

5.3 Tipos de conflictos.

La investigación sobre los conflictos infantiles distingue cuatro formas


negativas de conductas:

a) La agresión abierta. Se da en niños y niñas que se manifiestan con


hostilidad saltándose la autoridad. Su postura es de desafío hacia el
adulto y hacia los otros niños, traduciéndose en palabras insultantes,
peleas, destrucción de objetos, fuertes rabietas, etc.
b) La agresión encubierta. Se denomina así porque sus manifestaciones no
son abiertamente hostiles, es el caso de los celos, por ejemplo, que se
produce ante el miedo a perder el afecto o la situación privilegiada ante
alguien.
c) La agresión negativa. Puede adoptar muchas formas , como la reacción
de oposición, el negativismo o las conductas resistentes que se
manifiestan cuando el niño hacen casi sistemáticamente lo contrario de lo
que se espera de él. Esta conducta cuando no es exagerada, es sólo un
paso más en el desarrollo de la persona, ya que los pequeños prueban con
ella sus relaciones sociales y aseguran el valor de sus capacidades. De
manera continua, supone un claro problema de adaptación.

d) Aislamiento y reacción depresiva. Se incluirían en este grupo los niños y


niñas apáticos, indiferentes, cohibidos, que evitan la relación con los
demás, protestando débilmente y refugiándose en la soledad.

Todos estos conflictos pueden superarse mediante una adecuada intervención


educativa.

5.4 Orientaciones para una correcta intervención educativa.

Debemos subrayar que es importante una atención individualizada para la detección y


resolución de los conflictos de grupo. Entre estas orientaciones podemos citar las
siguientes como las más relevantes:

- Establecer acuerdos y normas consensuadas por todo el grupo-clase.


- Presentar las normas de convivencia a principio de curso y delimitar las
consecuencias de su cumplimiento o incumplimiento.
- Cuando se produzcan agresiones se deben escuchar ambas partes, es decir, al
agredido y al agresor , averiguar las causas del conflicto y buscar soluciones que
atiendan a ambas partes.
- Desarrollar programas de orientación para padres con hijos con problemas
familiares, sociales o escolares.
- Crear vínculos cooperativos en clase y relaciones que fomenten la tolerancia, el
respeto y el cariño.
- Utilizar el diálogo y la participación como medios de relación.
- Establecer límites en los comportamientos de los niños/ as.

CONCLUSIÓN.

El centro de Educación Infantil debe ser concebido como un lugar de encuentro que
ofrece las experiencias relacionales necesarias para que el niño pase de la individualidad
al encuentro con los demás, en un clima de seguridad, respeto y confianza que le
conduzca progresivamente a la madurez y autonomía para la convivencia social reglada.
El docente-tutor del grupo-clase debe contar con el apoyo del resto de los profesionales
del centro para detectar situaciones de riesgo en el alumnado, especialmente en lo
referente al maltrato infantil. Por lo tanto, a la escuela se le otorga un doble papel, por
un lado, como institución socializadora y por otro lado, como detectora de situaciones
de riesgo; siendo, además, el lugar en el que el niño comienza a establecer sus primeros
grupos.

“Sorprendernos ante alguien es el primer paso para descubrirlo y conocerlo”

( Jhon Bowlby).

NORMATIVA VIGENTE.

BIBLIOGRAFÍA.

WEBGRAFÍA.

ANEXO.

También podría gustarte