Rev. C o l . Anest.

18; 2 8 7 , 1 9 9 0

MONITORIZACION DIRECTA
DE LA PRESIÓN ARTERIAL SISTEMICA

Víctor Neira A.*

Ef. M o n i c a Veloza**
Mario Ruiz P.***
Rafael Villavicencio,****
Fernando G u z m a n , " * "

Introducción do una detección precoz, además de un

control continuo y preciso que solo es
A pesar de los avances recientes en posible mediante una línea arterial.(4)
el monitoreo cardiorespiratorio, el cate-
terismo arterial sistémico (línea arterial) Como con cualquier método diag-
sigue siendo un recurso muy utilizado nóstico, su manejo requiere un conoci-
en anestesia y cuidado intensivo.(1) Sus miento claro de la técnica empleada, de
aplicaciones generales son la toma los problemas técnicos frecuentes, de
frecuente de muestras sanguíneas y el las posibles complicaciones y por su-
registro directo continuo de la presión puesto de la fisiología. (5) (6) Con todo
arterial(2) esto, la obtención e interpretación de
los datos y la incidencia de complicacio-
Las muestras sanguíneas de tipo nes disminuye.
arterial brindan la posibilidad de realizar
El objeto de la presente revisión es
un análisis de los gases sanguíneos y el
brindar información para optimizar el
estado ácido-básico a pesar de la apari-
manejo de las líneas arteriales, detectar
ción de métodos no invasivos como la
y manejar adecuadamente las compli-
oximetría de pulso y el capnógrafo. Hoy
caciones.
por hoy sigue siendo el recurso más
utilizado para evaluar la oxigenación a Cateterismo arterial sistémico
nivel pulmonar y tisular.o)
I. I N D I C A C I O N E S
Con respecto a la medición directa Son básicamente: (7) (2| (8) (49) <50)
de la presión arterial, recientemente se
nos ha enfatizado sobre los trastornos A. Medición directa de la presión arte-
perioperatorios frecuentes de esto, ge- rial sistémica: (ver tabla No. 1)
neralmente de origen multifactorial y
que requieren para su manejo adecua- B. Toma de muestras sanguíneas
Anestesiólogo Hospital San José
Departamento de Enfermería Fundación Santa Fe de Bogotá
Asistente Unidad Cuidadas Intensivos Fundación Santa Fe de Bogotá
* Asistente Unidad Cuidados Intensivos Fundación Santa Fe de Bogotá
** Cirujano Cardiovascular Fundación Santa Fe de Bogotá

287
Neira V, y col,

TABLA No. 1

A. TOMA DIRECTA DE LA PRESIÓN ARTERIAL SISTEMICA

1. INDICACIONES QUIRÚRGICAS:

a. Cirugía de corazón, especialmente con circulación extracorpórea.

b. Cirugía vascular mayor
c. Cirugía abdominal o torácica con compresión de grandes vasos. Ventilación
de un solo pulmón.
d. Trauma mayor
e. Cirugía intracraneana
f. Sangrado masivo
g. Hipotermia o hipotensión deliberadas
h. Incapacidad para medir la presión sanguínea indirecta: obesidad, quemaduras
en extremidades.

2. INDICACIONES MEDICAS

a. Resucitación cerebro cardiopulmonar

b. Enfermedad cardíaca o pulmonar severas
c. Alteraciones metabólicas severas
d. Choque
e. Uso de agentes vasoactivos y cardiotónicos
f. Pacientes en estado crítico y aquellos en quienes sea necesario tomar gasime-
tría arterial frecuente.

II. C O N T R A I N D I C A C I O N E S .
(Ver tabla No. 2)

TABLA No. 2

a. Paciente anticoagulado

b. Infección local del sitio de canulación

c. Enfermedad vacular periférica y/o mal riesgo colateral. (Diabetes, arterieescle-

rosis, vasculitis, Sind Raynaud).

d. Canulación reciente de la arteria o de una proximal a ésta.

e. Cirugía previa en el sitio de la punción

f. Cirugía vascular previa proximal al sitio de canulación. (8) (9) (10!

288
 Monitorización Directa

llI. EQUIPO DE M O N I T O R I A Los catéteres son manufacturados

Los componentes deben ser dese-
charles y cambiarse cada 48 a 72
horas, con el fin de minimizar el riesgo
de la infección.
a) Mecanismos (Sistema de conduc-
ción) (11) ver figura 1
1. Catéter
2. Tubos de presión o extensiones de
anestesia.
3. Llaves de tres vías o llaves de paso.
4. Dispositivo de flujo contínuo(intraflo).
con variedad de plásticos de diferentes
propiedades estructurales y de reacción
a los tejidos. (13)(7)
Estos son vialón, teflón, polipropile-
no, polivinicloruro, polietileno. El teflón
es más propenso a doblarse pero menos
trombogénico que otros materiales. El
polipropileno es más fuerte, no se
deforma, pero tiene una mayor inciden-
cia de trombosis. Publicaciones recien-
tes muestran que los catéteres de
vialón se asocian con menor frecuen-
cia a la t r o m b o f l e b i t i s que los de
teflón. (51)

5. Otros accesorios: Domo, bolsa de Las arterias de gran calibre(femoral,

solución salina normal, heparina,
equipo de venoclisis, infusor de pre-
sión, jeringa de 2 cc, bomba o
jeringa de infusión.
1. CATÉTER. Las cánulas intraveno-
sas se han venido usando para el catete
rismo arterial, (2) aunque existen caté-
teres provistos de guía metálica para la
canulación arterial. (44)
axilar y braquial), son mejor canuladas
con catéteres de polietileno con pare-
des gruesas relativamente rígidas; las
periféricas con catéteres de teflón. (12)
Según lo anterior, la mejor elección
de acuerdo al diámetro longitud del
catéter y vía escogida se encuentra en
la tabla No. 3 (7) (5)

TABLA No. 3

VIA CALIBRE LONGITUD (cms)

ADULTOS
Radial 20 3-5
Pedia
Axilar 1E 15
Femoral 18-16 15

NIÑOS
Radial 22
Femoral 18-20

NEONATOS
LACTANTES
Radial 22 3
Femoral 20 5

289

2. Tubos de presión o extensiones
de anestesia: Ver prueba de la onda
cuadrada pag. 5-6
3. Llaves de paso: (11) se pueden
utilizar tres juegos de llaves de acuerdo
al equipo usado.
Llave No. 1: Utilizada para facilitar
el purgado del sistema.
Llave No. 2: Empleada para la toma
de muestras de sangre con prioridad
para los gases arteriales.
Llave No. 3: Se usa para purgar el
Domo y calibrar el transductor.
4. Sistemas de irrigación: existen
tres sistemas: (10)
a. Dispositivo de flujo continuo: Intraflo
(Abbott-Sorenson). Este sistema es
altamente recomendado porque evi-
ta la formación de coágulos en el
catéter al asegurar un flujo continuo
de 3 m l / h de solución heparinizada
presurizada evitando la manipula-
ción excesiva con la disminución del
riesgo de embolismo, infección, etc.
Además, permite flujos altos (1-2
ml/seg) para un lavado rápido.(11)(16)
(19) (17).
b. Flujo continuo mediante bomba de
infusión: La bomba se programa
para administrar un volumen de 3
m l / h . de solución heparinizada.
c. Sistema de irrigación intermitente:
Consiste en el lavado de la línea, por
intermedio de una jeringa que no
debe ser mayor de 2 cc. Este sistema
presenta múltiples desventajas por
su constante manipulación, aumen-
tando el riesgo de infección, daño
vascular porlavado " e x a g e r a d o " ,
riesgo de embolismo, obstrucción y
sobredosifícación de heparina.pu
5. Domo. Este dispositivo permite
aislar el diafragma del transductor,
Monitorización Directa
evitando el contacto con la solución
del sistema de registro y minimizan-
do los riesgos de contaminación
cruzada. Además, genera un aisla-
miento eléctrico que impide que el
transductor se afecte cuando se
emplean aparatos electroquirúr-
gicos(11)
Electrónicos
1. Transductor: Es un aparato que con-
vierte la fuerza mecánica en señales
eléctricas.
2. Cable de conexión entre el transduc-
tor y el monitor.
3. Monitor: Es un aparato que amplifi-
ca, acondiciona, mide y muestra las
señales eléctricas. Para el lector
interesado se recomienda las refe-
rencias (17) (11).
IV. C U I D A D O S Y M A N T E N I M I E N T O
(33) (17)
a. Línea arterial
En el paciente se debe valorar la
fijación externa, la posición del brazo, la
sensibilidad, el color y la temperatura
de ¡a extremidad comprometida y verifi-
car el pulso del vaso canalizado. Se
deben utilizar elementos que permitan
la visualización del sitio de inserción,
como esparadrapo transparente (trans-
porte, tegaderm) o gasa de fácil movili-
zación.
Marcar la línea arterial cuando se
tienen varias líneas vasculares. Se
deben registrar las fechas de inserción
del catéter y de cambio de los equipos
como control.
Las curaciones se practican con
técnica aséptica por lo menos cada 48
horas con soluciones yodadas. Se reco-
mienda canalizar una nueva arteria
cada cuarto día de acuerdo a la situa-
ción del paciente, sus accesos vascula-
291
Neira V, y col.
res y el tiempo de duración de la
monitoria. Si no es posible canalizar
una nueva vía, se debe cambiar la
cánula arterial con una guía metálica.
Cuando se utiliza la vía femoral se
recomienda restringir los movimientos
de la pierna comprometida movilizando
al paciente en bloque y evitando la
flexión de la pierna a nivel de la cadera.
b. Equipo
1. Verificar la fijación de los empates y
las conexiones al monitor.
2. Calibrar el transductor: Con el pa-
ciente en posición de cubito dorsal,
nivelar la llave de tres vías conecta-
da al Domo, abierta a la atmósfera,
con la línea media axilar del paciente
a la altura de la aurícula: obteniendo
O de la calibración en el monitor.
Cuando se utilice el transductor
desecbable, la calibración se hará al
nivel del Domo, El procedimiento de
calibración se debe realizar mínimo
3 o 4 veces al día. (7)(2) Ver figura 2.
PACIENTE C O N LINEA R A D I A L
PARA MONITORIZACION
DE PRESIÓN A R T E R I A L
3, Realizar la prueba de onda cuadrada
(SNAP) (18) (2)(45), para valorar la
respuesta dinámica del sistema y
obtener mediciones seguras. Con-
siste en el lavado rápido de la línea
mediante el dispositivo del flujo
continuo obteniendo una onda cua-
drada. Se cierra la válvula y la
presión en el sistema retorna al nivel
base; si el sistema (catéter, tubo,
transductor) está adecuadamente
calibrado en relación con los vasos
sanguíneos del paciente, este retor-
no a la línea de base ocurrirá suave-
mente y sin la interpretación del
trazado de la presión arterial. Si el
sistema de presión es muy rígido la
prueba resultará hiporresonante y
se presentará una sobrepresión en
el monitor. Si el sistema de medida
es muy flexible, se presenta una
señal que desciende de la línea de
base (hiporresonante). Ver figura 3
PRUEBA DE LA
HONDA CUADRADA

Se pueden presentar errores en la
lectura relacionados con el líquido
y los tubos (inercia y fricción) y tas
propiedades del tubo conectar (dis-
tensibilidad y longitud).(47)
Los tubos muy distensibles produ-
cen una disminución de la frecuencia
de respuesta del sistema, sobreva-
loración de la presión,
La hiporresonancia aumenta con la
longitud del tubo,
Se d i s m i n u y e n estos problemas
usando tubos de presión rígidos,
idealmente de gran calibre, con la
mínima longitud que permita el cui-
dado adecuado del paciente (máximo
120 cms.)(10)(7)(22)
Las burbujas deben eliminarse por
completo de TODO el sistema, por-
que además del riesgo de embolismo
aéreo, las burbujas grandes amorti-
guan la onda de pulso y las pequeñas
(0.05 - 0.25 ml) pueden producir
hiporresonancia con aumento de las
presiones sistólicas. (10)(7)(22)
V. TÉCNICA DEL C A T E T E R I S M O
a. Equipo mínimo (17)
Tapabocas, gorro, guantes, gasas,
isodine (jabón y solución), catéter, espa-
radrapo, inmovilizador del carpo (línea
arterial), lidocaína sin epinefrina, jerin-
ga desechable de 2 cc, campos y blusas
estériles, compresas, equipo de puntos
y sutura.
b. Pruebas de flujo colateral
Antes de la cateterización se reco-
mienda realizar pruebas de flujo cola-
teral.
Las más usadas son:
Prueba de Alien:
Evalúa la vascularización de la mano.
Ocluya simultáneamente las arterias
Monitorización Directa
radial y cubital durante 30 a 60 segun-
dos mientras el paciente abre y cierra la
mano para promover la exanguinación
de ésta. Luego se ordena extender los
dedos mientras una de las arterias se
mantiene comprimida y la otra se libera.
La prueba es normal si el llenado capilar
de la mano ocurre en los 6 a 7
segundos, equívoca sí dicho llenado
toma 15 segundos y anormal si dura
más de 15 segundos. (10) (19). Sí es
normal existe contraindicación relativa
para la canalización de la arteria radial y
se recomienda otra vía.p)
1. El paciente debe estar despierto y
colaborar.
2. Es difícil de interpretar, en pacientes
pálidos, ictéricos o quemados(7)
3. Tiene poca correlación con la pre-
sencia de complicaciones. (20)
Prueba de Bedford
Se colocan los dedos índices del
examinador sobre la arteria radial del
paciente; el dedo índice proximal se
presiona hasta ocluir la arteria y deberá
palparse el pulso retrógrado con el dedo
índice de la otra mano colocado distal-
mente si el flujo colateral es adecuado.
(7|{10)
Otras pruebas que se pueden hacer
son la detección del flujo retrógrado con
Doppler; o en el paciente inconsciente,
detección del pulso en el pulgar con un
transductor del pulso o un pulsoxímetro
ocluyendo la arteria radial.(7)
La evaluación de la vascularización
del pie se hace ocluyendo simultánea-
mente la arteria dorsal del pie y la tibial
posterior bloqueando el grueso artejo
con compresión directa. Se libera la
tibial posterior y el dedo debe retornar a
su coloración rápidamente. No es reco-
mendable canular la arteria pedia si el
color no es normal a los 10 segundos.
(2)(9)
293
Neira V. y col.
También se puede evaluar el flujo
colateral con Doppler.
c. Elección de la vía
De acuerdo a la duración esperada
de la monitoria invasiva y a la condición
clínica del paciente recomendamos la
elección de la vía de acuerdo a la tabla
N o . 4. (21) (10)120) (23) (32|
TABLA No. 4
DURACIÓN ESPERADA
Menos de 72 horas
Más de 72 horas
CONDICIONES DEL PACIENTE
Relativamente estable
Inestable
Las arterias periféricas tienen múlti-
ples desventajas: (24) (25) (10)(7)
— Se trombosan más fácilmente.
— Presentan dificultad en su cateteri-
zación en el paciente vasoconstre-
ñido.
— Dan valores menos exactos de pre-
sión.
— Poseen más problemas mecánicos
asociados al uso de cánulas de
pequeño diámetro {acodadura y sa-
lida accidental).
— Las arterias de gran calibre presen-
tan algunas ventajas:(24)(26)(10)(15)(27)
— Son palpables aún en los estados de
choque.
294
Tienen menor aumento en la lectura
de presión.
Poseen menor posibilidad de com-
plicación trombótica, isquemia y ne-
crosis, dando una mayor duración.
La oclusión de la arteria radial por la
cánula rara vez resulta en isquemia
VIA DE ELECCIÓN
radial, pedia tibial
posterior y cubital
Femoral y axilar
VIA DE ELECCIÓN
Radial, pedia
Femoral, axilar
de la mano por el gran flujo cola-
teral. (7)(26)
No se recomienda el uso de la arteria
braquial por la carencia de circulación
colateral, con el riesgo de la obstrucción
total del flujo hacia la mano. (19)(24)
Si el cateterismo de la arteria radial
es fallido o ya se han realizado múltiples
punciones en ambos lados, las vias de
elección serán la pedia o la axilar con-
tralateral. ¡7)(12)
d. Técnica de punción
La cateterización percutánea (pun-
ción) tiene ventajas sobre la disección
quirúrgica ya que el método cruento
aumenta la posibilidad de complicación
isquémica o infección. (29) (30)

Existen tres técnicas de punción
percutánea de las arterias periféricas:
Técnica de punción directa:
Después de la infiltración de anesté-
sico local se amplia el sitio de punción
con una aguja, se palpa el pulso proxi-
mal con un deo y se dirige el catéter en
el menor ángulo posible (20 a 30
grados). Una vez se obtiene el retorno
de sangre se disminuye el ángulo (10 a
20 grados) y se desliza el catéter sobre
el mandril. (7) (34) Ver figura 4,
TÉCNICA DE P U N C I Ó N DIRECTA
Monitorización Directa
Técnica de punción por transfixión:
Aunque en las arterias periféricas no
parece haber aumento de las complica-
ciones al perforar en dos sitios la pared
de la arteria, recomendamos evitar esta
técnica en lo posible, ya que aumenta la
posibilidad de trombosis y de hematoma
y las complicaciones relacionadas con
éste como isquemia y compresión ner-
viosa,
Una vez se atraviesa la arteria, se
retira el mandril, se retrocede lenta-
mente el catéter hasta obtener el mayor
flujo sanguíneo, allí se corrige la direc-
ción y se introduce el catéter rotándolo.
(3) Ver figura 5,
TÉCNICA DE P U N C I Ó N
POR T R A N S F I X I Ó N
Cateterización con guía metálica:
(Seldinger)
Con los nuevos catéteres disponibles
en nuestro medio (Becton Dickinson) se
puede realizar la punción dirigida con
295
Neira V. y col,
una guía. Puncionando la piel de una
forma lenta hasta obtener el retorno de
sangre, se estabiliza la aguja y se
avanza la guía que está unida al émbolo
de la jeringa, se avanza el catéter fuera
de la aguja introductora sobre la guía,
una vez en su lugar se retira la aguja
introductora, la guía y la jeringa. Un
flujo sanguíneo libre indica una ade-
cuada colocación. (44) ver figura 6.
TÉCNICA DE SELDINGER
PARA ARTERIAS PERIFÉRICAS
FIGURA 6
La falla en la canulación general-
mente es consecuencia de trauma pro-
ducido en los intentos previos. Este
puede incluir disección de la íntima,
hematoma y espasmo; por ello el primer
intento debe hacerse bajo óptimas con-
diciones. Si este es infructuoso, cerca
del 8% de los pacientes presentan
espasmo arterial serio, con uno parcial-
mente oclusivo en el 40%de los pacien-
tes. Una canalización previa varios días
antes también puede cambiar la arteria,
produciendo formación de trombos, con
disminución del calibre del vaso.(36)
Ayudas para la canalización arterial
(36)
Si la arteria es pequeña, el máximo
volumen de pulso y tamaño de la luz, se
pueden obtener después de un período
de oclusión usando un brazalete de
tensiómetro inflado por encima de la
presión sistólica durante dos minutos.
Este procedimiento causa hiperemia y
296
dará el tamaño óptimo de la punción
arterial.
Cuando varios intentos para produ-
cir el catéter fallan, se sugiere usar la
técnica del "estilete líquido", que con-
siste en puncionar la arteria e inyectar
uno a tres ml. de solución salina
mientras se avanza el catéter, con
aspiración al final de la inserción para
confirmar la localización del catéter en
la arteria.
En los episodios de vasoconstricción
o hipotensión el pulso puede estar muy
disminuido, entonces para facilitar la
canulación sin dañar la pared posterior
de la arteria se puede conectar una
cánula a un transductor y se avanza la
aguja hasta observar la curva en el
monitor.
Otra forma de localizar el pulso
cuando es débil es con un Doppler;
cuando la aguja entra en contacto con la
arteria, estrecha la luz y cambia la
señal.
En los lactantes una ayuda adicional
es la transiluminación de la muñeca.
Para la canulación de las arterias de
gran calibre se deben utilizar agujas 1 6
a 20 porque las de mayor diámetro
aumentan la posibilidad de hematomas.
Se prefiere la técnica de Seldinger, para
la arteria femoral. Después de la ade-
cuada preparación de la piel, se infiltra
con anestesia local y se realiza la
punción a dos centímetros por debajo
de la arcada inguinal, con la aguja en un
ángulo de 45 grados. Una vez se
observa el sangrado pulsátil, se intro-
duce suavemente la guía metálica y se
retira la aguja, se amplía el sitio de
punción y se pasa el catéter sobre la
guía; se retira ésta última y se conecta
al transductor. Se debe asegurar con
puntos el sitio de entrada para controlar
el sangrado y fijar el catéter,(25)(10)No se
debe utilizar la técnic del "catéter"
dentro de la aguja por el riesgo de
cortarlo. (26) Ver figura 7
 Monitorización Directa

La enfermedad oclusiva aórtica, ilíaca

o femoral no se ha- considerado una
contraindicación si el pulso femoral
está presente aunque puede causar
dificultad para pasar por la guía, o hacer
embolismo distal. (10)

Vi. ANÁLISIS DE LAS O N D A S

DE PRESIÓN

La onda de presión arterial contiene

abundante información sobre muchos
aspectos de la función cardiovascular.(1)

Velocidad del cambio de presión:

DP/DT arterial: el incremento súbito de
la presión al inicio de la sístole, refleja el
cambio de presión que ocurre en el
período de contracción isovolumétrica
del ventrículo izquierdo, así puede ser
un indicador del estado contráctil del
miocardio. El DP/DT aórtico está estre-
chamente relacionado con el DP/DT
ventricular izquierdo. En la práctica la
simple visualización de la curva en la
pantalla de osciloscopio indica buen
estado de la contractilidad si la veloci-
dad de cambio de presión es rápida, o
mala si es lenta.

Volumen latido: El área de la parte

sistólíca de la curva de presión aórtica
se relaciona con el volumen latido. La
fórmula matemática es: Ver figura 8

C U R V A S DE
PRESIÓN N O R M A L E S
Neira V. y col.
El pulso radial está muy distorsionado
por la onda de reflexión para dar un
volumen latido estimado verdadero.
Con la ayuda de un computador por
este método y con un catéter en la aorta
o en la arteria axilar, se puede estimar el
volumen sistólico latido a latido, (1)
Resistencia vascular sistémica: Las
drogas y los eventos fisiológicos que
alteran la resistencia vascular sistémica
causando vasoconstricción o vasodila-
tación causan cambios marcados en la
forma de caída de la presión diastólica.
1 P(T)
VL = (P(t) - PD) DT
Zo P(D)
Zo = Es la impedacia caracterís-
tica del sistema arterial sis-
témico:
P (t) = Presión instantánea en el
tiempo T
PD = Presión diastólica
P (t) = (P(t)-PD) DT = Área bajo la
curva de presión sistólíra
Una caída en la presión arterial
asociada a una dilatación arteriolar se
caracteriza por pérdida de la caída de
presión diastólica después de la incisu-
ra dicrótica. Estos cambios pueden
ocurrir en pacientes con anemia severa,
fístulas arteriovenosas, o que estén
recibiendo nitroprusiato de sodio. Una
presión arterial elevada con una incisu-
ra dicrótica alta y un caída de la presión
diastólica, caracterizan la resistencia
vascular elevada en respuesta a vaso-
constrictores como la fenilefrina, o al
paciente hipertenso. (1)(17)(39) Ver figu-
ras 8-13

INSUFICIENCIA AÓRTICA
G R A D O III
FIGURA 12
Con la edad, se desarrollan presiones
sistólicas mayores y menores ondas
distólicas. Estos cambios son atribuidos
a la sumación de las ondas reflejas con
el pico sístólíco por un incremento de la
rigidez de las arterias sistémicas. (3)
Una onda de presión de apariencia
amortiguada después de descartar al-
guna alteración en el sistema puede
indicar una severa estenosis aórtica,
marcada vasoconstricción periférica o
colapso circulatorio. (17)
Las ondas de presión son diferentes
dependiendo del lugar donde se realiza
el registro. Ver figura 14.
C O N T O R N O DE LAS O N D A S DE PRESIÓN ARTERIAL
DE A C U E R D O AL SITIO DE REGISTRO
Monitorización Directa
HIPOTENSIÓN Y
VASOCONSTRICCIÓN
FIGURA 13
La onda de presión periférica tiene
mayor amplitud (la presión sistólica es
mayor y la diastólica menor). La onda
diastólica usualmente es más pronun-
ciada, y la presión media es ligeramente
menor que en las arterias centrales.
(39)(17}
El contorno de la onda de presión
arterial es el resultado de la interacción
de diferentes variables, incluyendo la
distensibilidad, la velocidad, el pulso y
la función cardíaca. Por estas razones,
no resulta sorprendente que no se haya
encontrado correlación entre la altura
de la incisura dicrótica, la resistencia
vascular, la caída y el gasto cardíaco.
Neira V. y col.

(38) Con mayor razón si tenemos en
cuenta que estos datos se estudiaron en
la arteria radial, la cual al ser una arteria
periférica distorsiona la onda del pulso y
no refleja exactamente la presión aórti-
ca central en el período post by pass.(37)
VII. C O M P L I C A C I O N E S
El riesgo de complicaciones varía
mucho de acuerdo a la vía utilizada, a la
población de pacientes y al tipo de
complicación estudiada.
La tabla No. 5 resume algunas de las
complicaciones del cateterismo arterial
sistémico dependiendo de la vía utili-
zada. (24) (10) (7) (12)
3. Ubicación del catéter por un período
mayor de 4 días.
4. Inadecuada técnica aséptica durante
la inserción o su mantenimiento.
5. Contaminación de los componentes
del sistema de monitoria relaciona-
dos con su manipulación: llaves de
tres vías, obtención de muestras
sanguíneas, cambio rutinario de los
mismos.
Las manifestaciones clínicas usua-
les son:
1. Locales:
Dolor, inflamación, salida de mate-

TABLANo. 5

VIA ISQUEMIA EMBOLISMO DAÑO HEMATOMA DIFIC. FALSAS

TROMBOSIS NERV. LECTU.

Radial XX X

Braquial XXX XX

Axilar XX XX X

Femoral XX

Pedia XX

X < 10% XX 10-30% XXX > 30%

a. Infección rial purulento en el sitio de inserción

La frecuencia de infección nosoco-
mial en la Unidad de Cuidado Intensivo
llega a ser de un 27%. Los factores pre-
disponentes más importantes son:(7)(10)
(11) (12) (30) (40) (42)
1. infección.
(10) (30)
del catéter.
2. Generales:
Fiebre, escalofríos, estado séptico
(hiperdinamia, leucocitos, etc.)
En caso de sospecha de infección por
catéter los criterios determinntes son:

1. Colocación del catéter mediante di- 1. Catéter infectado: Obtención de 1 5 o

sección quirúrgica. más colonias en cultivo.

300
 Monítorización Directa

2. Hemocultivos positivos. de pequeño calibre de material no

trombogénico durante el menor tiempo
3. Manifestaciones locales o generales posible. (7)
de infección.

El tratamiento básico consiste en Los factores predisponentes usuales

retirar el catéter, cultivar la punta,
cultivar la secreción en el punto de la
inserción, tomar hemocultivo, instaurar
terapia antibiótica.
b. Trombosis:
La trombosis asociada a la coloca-
ción y mantenimiento del catéter arterial
puede producir isquemia y llevar a
necrosis distaI al sitio de punción. El
riesgo de trombosis es minimizado al
colocar el catéter en arterias con sufi-
ciente irrigación colateral, con cánulas
se presentan en la tabla No. 6(7)(41)(25)
(36) (96)
Las manifestaciones clínicas son:
palidez, enrojecimiento o necrosis de la
piel por encima del catéter, moteado o
necrosis de la piel dista a este, pareste-
sias, dolor, trastornos sensitivos, pará-
lisis y ausencia de pulso. (7)(2) (45)
Los métodos diagnósticos utilizados
son: observación local, palpación. Dop-
pler y angiografia.

TABLA No. 6

FACTORES PREDISPONENTES PARA LA TROMBOSIS ARTERIAL

DEPENDIENTES DEL PACIENTE

1. Períodos de bajo gasto 2. Períodos de aumento de

la RVS

3. Enfermedad vascular previa 4. Sexo > femenino

5. Edad > neonatos 6. Prueba de perfusión

anormal

7. Estado hipercoagulable 8. Estado hiperosmolar

9. Hipergliceridernia 10. Tamaño de la arteria

canulada.

11, Uso de vasopresores 12. Compresión post de

canulación.

NO DEPENDIENTE

1. Configuración del catéter, 2, Inserción

traumática longitud, calibre y material

3. Duración de la canulación 4. I nfusión intermitente de

solución heparinizada

301
Neira V. y col.
El tratamiento consiste en evalua-
ción por cirugía vascular, retirar el
catéter aspirando simultáneamente con
el fin de remover el trombo y explora-
ción quirúrgica en casos extremos. En
estas circunstancias puede requerirse
trombectomía, angioplastia o injerto. Si
existe daño microvascular se instaura
terapia anticoagulante o se recurre a
bloqueo simpático del ganglio estrella-
do, del piejo braquial o incluso bloqueo
epidural. De acuerdo a la gravedad de la
necrosis se dejará para cierre por se-
gunda intención, colocación de injertos
o amputación. (7)(9) (12)
c. Otras complicaciones (12)(10) (43) (48)
1. Desconexión accidental con exan-
guinación.
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2. Inyección accidental de medicamen-
tos (PE. Thiopental) que pueden con-
ducir a necrosis.
3. Complicaciones neurológicas loca-
les: compromiso del nervio mediano
en la canulación de la arteria radial
o del piejo braquial con la arteria
axilar, generalmente debido a com-
presión por hematoma.
4. Aneurismos opseudoaneurismas en
caso de múltiples punciones.
5. Hematomas relacionados con mayor
posibilidad de lesión isquémica y
comprensión nerviosa.
6. Embolismo aéreo: relacionado con el
sistema de irrigación.
7. Fístula arteriovenosa.
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