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Introducción

El conocimiento ordinario es el que todo ser humano ha adquirido en forma


espontánea e informal.
Por este conocimiento el hombre sabe de un mundo material exterior a él y de
otros hombres de los cambios que superan en la naturaleza todo lo que lo que
otros aprendieron por experiencia conoce todo aquello que lo mueve su
curiosidad pero no se limita a consignar los hechos sino que piden explicaciones.
El hombre piensa que todo debe tener una explicación, ahora bien, es justamente
en esta búsqueda donde se encuentra la separación de la articulación entre el
conocimiento ordinario y el conocimiento científico; es que el conocimiento
científico aparece cuando las explicaciones resultan insuficientes o contradictoria
por lo que se requiere de este tipo de conocimientos con explicaciones
fundamentales y probadas.

Metodología de las ciencias. Módulo I


Escrito por Edelmira Mello
CONOCIMIENTO CIENTÍFICO Y CONOCIMIENTO
ORDINARIO
Es el entendimiento, inteligencia, razón intelectual de la realidad o de una
relación entre los objetos, facultad con la que nos relacionamos con el mundo
exterior. Conjunto de saberse sobre un tema o sobre una ciencia.
La adquisición del conocimiento está en los medios intelectuales de
un hombre (observación, memoria, capacidad de juicio, etc...) A medida que
crece el conocimiento se da tanto el cambio cualitativo por haber en ello un
incremento de reorganización del conjunto y de adquisición de los mismos.

El Racionalismo.
Plantea que el origen del conocimiento está en la razón, la cual es considerada
como la fuente principal de éste, tal circunstancia determinada que esta posición
sea considerada como exclusiva.

El Empirismo.
Considera que el origen está en la experiencia. Parte de los hechos concretos y
es una posición cuyo origen se encuentra fundamentalmente en
las ciencias naturales.

Intelectualidad.
Es una posición entre el racionalismo y el empirismo la cual considera el
conocimiento como producto de la razón y la experiencia.

El Apriorismo.
Al igual que intelectualidad, es también una posición intermedia entre el
racionalismo y el empirismo ya que considera la razón y a la experiencia frente
del conocimiento
Didáctica e innovación curricular
Escrito por Araceli Estebaranz García

Bunge 1980 considera dos tipos de conocimientos fundamentales el


conocimiento ordinario y el conocimiento científico.

El conocimiento científico, es el conjunto de conceptos, ideas y de teorías que


describen y explican propiedades, principios, relaciones y leyes de los
fenómenos y procesos de la realidad; que tienen su origen en la percepción de
que con el conocimiento disponible no se pueden manejar determinados
problemas. Por ello, es un tipo de conocimiento que arranca de algún cuerpo de
conocimiento porque sólo los que bien pueden darse cuenta de que falta algo.
En parte es conocimiento ordinario al que se le aplica métodos, técnicas,
procedimientos e instrumentos científicos.
Características:
1. Objetivo. Trata a los hechos y se apega a ellos evitando introducir en la
explicación cosas sobrenaturales, valores sentimentales o emocionales. La
objetividad como característica primordial rebasa la subjetividad; por tanto, como
categoría de validez general clarifica y precisa al fenómeno del conocimiento.
2. Sistemático. Consiste en establecer un orden o coherencia entre los
conocimientos producidos en la investigación.
3. Racional. Toda explicación debe ser fundamentada, a través de principios y
teorías científicas.
4. Universal. Con esta característica queremos señalar que cualquier
conocimiento tiene validez para todos los objetos del conjunto a que se refieren
las afirmaciones.
5. Relacionable. Consiste en relacionar y descubrir las conexiones y vínculos
entre los fenómenos y acontecimientos que conforman la realidad.
6. Verificable. Es un proceso mediante el cual se somete a prueba nuestras
afirmaciones sobre los hechos, para confirmar si son verdaderas o falsas, y que
cualquier científico o persona lo puede comprobar.
7. Crítico. Emite juicios de valor.
8. Falible. Que se puede llegar a crear conocimientos erróneos, pero ciertos a
las condiciones históricas y sociales en las que se producen.
Ejemplos:
 El fuego quema porque está a altas temperaturas y cundo nuestra piel se
expone a ellas, las proteínas y componentes de nuestras células se
desnaturalizan, osea que sufren cambios.
 El azúcar es dulce porque está compuesta por glucosa y fructosa
(azucares de las frutas), es por eso que al juntarse estos dos
monosacáridos forman la sacarosa, mejor conocida como "azúcar", lo que
le ayuda a tener el sabor dulce es la fructosa.
 El color azul del cielo está relacionado con la composición de la luz solar,
y con la humedad de la atmósfera. La luz blanca que emiten los rayos del
sol, al chocar con las diminutas gotas de agua que existen en la
atmósfera, refractan los colores del arco iris, los tonos azules y violetas se
dispersan más fácil mente, en cambio, los tonos amarillos y rojos se
dispersan menos y viajan directa mente; esto hace que veamos el sol con
colores amarillos y rojos, y al cielo con tonos azules y violetas.
 Llueve porque el agua primero se evapora de la superficie de la tierra. A
medida que asciende por el aire se va enfriando y condensando dando
lugar a las nubes. las gotas son tan diminutas que se mantienen "flotando"
en el cielo. Cuando se van haciendo más grandes, llega un momento que
no aguantan el peso y es cuando caen a la tierra en forma de lluvia.
 El agua moja porque la fuerza de adhesión entre la superficie de algo y el
agua, es mayor que la fuerza de cohesión entre las moléculas del agua.

El conocimiento ordinario es un conocimiento no especializado, que se


adquiere experiencia y se corrige, se enriquece o se rechaza mediante la
investigación; entonces se obtiene el conocimiento científico, mediante el
método de la ciencia-observación y experimentación sobre un objeto, y puedes
volver a someterse a prueba, enriquecerse y, llegado el caso, superarse
mediante el mismo método. Pero a base de dominar determinados
conocimientos llegan a convertirse en “sentido común”; de hecho, parte del
sentido común de hoy son resultados de la investigación científica de ayer. El
conocimiento científico, pues, parte del conocimiento ordinario y lo rebasa
porque empieza cuando éste deja de solucionar problemas o incluso que
plantearnos. Pero no es una prolongación ni un afinamiento, sino que es que es
un conocimiento de naturaleza distinta y por lo mismo hay una continuidad entre
los tipos de conocimiento y una discontinuidad a la vez. Este tipo de
conocimiento aspira a ser racional y objetivo ya que es crítico, racional, busca
coherencia y se adapta a los hechos antes de hacer especulaciones sin control.
Sin embargo, esta objetividad es limitada porque está muy relacionada con la
percepción y la acción.

El conocimiento ordinario se dividen en:


 Conocimiento técnico: es un conocimiento especializado que se
encuentra en las artes y en las habilidades profesionales, este
conocimiento no es científico.

Tiene una finalidad, está orientado al saber hacer, a crear objetos


artificiales que tienen una finalidad práctica, a satisfacer sus necesidades
modificando la naturaleza.

La información es un conjunto organizado de datos procesados, que


constituyen un mensaje que cambia el estado de conocimiento del sujeto
o sistema que recibe dicho mensaje.

Es un conocimiento explícito extraído por seres vivos o sistemas expertos


como resultado de interacción con el entorno o percepciones sensibles
del mismo entorno. En principio la información, a diferencia de los datos
o las percepciones sensibles, tienen estructura útil que modificará las
sucesivas interacciones del ente que posee dicha información con su
entorno.

 Protociencia: Es el trabajo cuidadoso y sin objetivo teorético de la


observación y la experimentación. También es llamado ciencia
embrionaria.
 Pseudociencia: creencias y prácticas que se autodenominan ciencia
aunque no posean el planteamiento, las técnicas y los conocimientos de
la ciencia. Por ejemplo el espiritismo y el psicoanálisis.
Estos conocimientos ordinarios no son ciencia propiamente, pero la ciencia se
vale de ellos para avanzar en sus investigaciones. El conocimiento ordinario
posee una serie de generalizaciones empíricas en torno a la cual se organiza
gran parte de la vida cotidiana del ser humano. Algunas de sus características
son: que este conocimiento se refiere principalmente a acontecimientos de la
vida cotidiana, no presupone un conocimiento especializado, no se somete a
contrastaciones metódicas, por lo general realiza inducciones, es decir,
resúmenes de hechos observados o inferidos, no es sistemático, es aislado, etc.

El conocimiento ordinario hace uso de la evidencia directa, esta se emplea para


apoyar o destruir generalizaciones empíricas de nivel bajo. Este conocimiento se
relaciona, en cuanto a lo que se refiere a la apariencia, con la teoría filosófica del
fenomenalismo, esta consiste en que todo lo que conocemos de la realidad son
apariencias ya que ignoramos lo que puedan ser las cosas en sí mismas.

En los diferentes discursos sociales de algunos postmodernistas, como Michel


Maffesoli, aparecen continuamente los términos “país”, “territorio”, “espacio”,
cosas todas que indican un sentimiento de pertenencia, algo emocional: el lugar
constituye un vínculo, un lazo que no es abstracto, teórico, racional. Un lazo que
no está constituido a partir de un ideal lejano, sino, más bien, lo contrario, se
apoya, orgánicamente, sobre la posesión común de valores enraizados: lengua,
costumbres, cocina, posturas corporales; cosas todas cotidianas, concretas,
unidas en una paradoja, que es sólo aparente, y que constituye lo material y lo
espiritual de un pueblo. Debemos reflexionar sobre esto: tal ‘materialismo
espiritual’ (sic), vivido localmente, es el que va a tomar, cada vez más, el lugar
de la política en sus diferentes modulaciones (Maffesoli 2000b).

Estamos, entonces, ante “el fin de las ideologías”, de los “grandes relatos de
salvación al estilo de una metafísica o ideología”; “hay un primado de la
singularidad de las formas antes que de la universalidad de los valores, de la
inteligencia de las situaciones antes que de la vanidad de las generalizaciones”
(Maffesoli, en Champetier 2003), y su transfiguración en los “pequeños relatos”,
específicos, propios de la “tribu” que los detenta, ligados a un territorio dado, a
los lenguajes juveniles, a los dialectos locales, a los sincretismos filosóficos o
religiosos; son nuevas formas de sociabilidad unidas en un compartir de
emociones, en las cuales lo no-lógico, la pasión y lo imaginario juegan un papel
importante (2003).

En su obra Elogio de la Razón Sensible (1996), enfatiza Maffesoli las intuiciones


y destellos de esta “razón sensible”: que considera como una manera de
aproximarse a lo real en su más fluida complejidad; una conjunción de lo material
y de lo espiritual y no una oposición. La razón sensible se dedica a destacar el
papel de lo afectivo, de las interacciones y de lo subjetivo. Es una razón abierta
hacia lo imaginario, lo lúdico, lo onírico social y es aún más rica porque sabe
integrar, de manera homeopática, estas obras que nos constituyen. La verdad
absoluta se fragmenta en verdades parciales que conviven.

Serge Moscovici, por su parte (1983, 1984), acentúa la postura fenomenológica,


dándole el rango epistemológico de ciencia (frente y en oposición al
conocimiento científico clásico), al considerar las “representaciones sociales”
como una forma de conocimiento social específico, natural, de sentido común y
práctico, que se constituye a partir de nuestras experiencias, saberes, modelos
de pensamiento e información, que recibimos y transmitimos por la tradición, la
educación y la comunicación social.

Las “representaciones sociales” son modalidades de pensamiento práctico


orientadas hacia la comunicación, la comprensión y el dominio del ambiente
social, material e ideal. En este sentido, presentan caracteres específicos para
el plan de organización de los contenidos, de las operaciones mentales y de la
lógica, y para cuya plena comprensión habrá siempre que referirlas a las
condiciones y contextos en que emergen, a las comunicaciones por las cuales
circulan y a las funciones que desempeñan en la interacción con el mundo y con
los otros. Así, pues, “las representaciones sociales son sistemas cognitivos que
tienen una lógica y un lenguaje particular... destinados al descubrimiento de lo
real y a su ordenamiento” (1984: 380). “La ciencia –dice Moscovici– estuvo, en
otro tiempo, basada en el sentido común e hizo que el sentido común fuera
menos común; pero, ahora, el sentido común es la ciencia hecha común” (1983:
221).
Ejemplo: En el conocimiento relacionado con la administración, se podría colocar
de ejemplo artesanos que administran sus negocios con solo el conocimiento
natural y este fue transmitido por sus familiares, amigos, conocidos etc., trabajan
en talleres que han funcionado con éxito comercial con tan solo el conocimiento
transmitido también se puede considerar que este conocimiento fue adquirido a
través de la práctica y la experiencia.

Cuadro comparativo entre conocimiento ordinario y científico

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