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RESUMEN PRIMER PARCIAL SOCIO

UNIDAD 1

Ander-Egg acerca del conocer y la ciencia


Cuestiones básicas que se van a analizar:

1. Realidad y conocimiento
2. La relación sujeto objeto
3. La validez del conocimiento o los criterios de verdad
4. La producción del conocimiento
5. Las formas del saber: saber cotidiano y saber científico
6. Saber-doxa y saber-episteme
7. Supuestos del conocimiento científico
8. Noción de ciencia

1. REALIDAD Y CONOMIENTO
Por el solo hecho de vivir el hombre entra en contacto con la realidad. La realidad es lo dado,
lo existente y lo existente es la totalidad de aquello con que el hombre se relaciona o puede
relacionarse en su devenir. No es contantemente igual, sino que es dinámica. También es por
tanto lo que puede existir y lo que ha existido. Existe una doble dimensión en que esa
realidad se manifiesta:

 La realidad natural, que se identifica con lo no-hombre (específicamente con la naturaleza)


 La realidad social, que se identifica con los hombres (específicamente con la sociedad)

Practica social: actividad humana mediante la cual el hombre se relaciona con lo otro que no es él.
Se desarrolla en el plano de las relaciones entre sí y de estos con la naturaleza exterior. El hombre se
hace a partir de esta práctica. Sus formas son la ciencia, el arte y la moral.

Formas de practica social: la forma fundamental es la actividad productiva por medio del trabajo, ya que
las relaciones con la naturaleza y con los hombres son fundamentalmente relaciones de producción. La
lucha de clases, la ciencia, el arte y la moral son otras formas de practica social.
Modos de relación con la realidad: la práctica social nos pone tres modos de relación del
hombre con la realidad:

 Los modos de trabajar: el trabajo es la actividad mediadora de las relaciones con


la realidad, a su vez, constituye la génesis del conocer y ser. Las relaciones
productivas son el vínculo fundamental el hombre con la naturaleza y con los
demás hombres.
 Los modos de conocer: el conocimiento se produce en un hombre inserto en una
trama socio-natural. El hombre piensa a partir de sus experiencias e interroga la
realidad desde un determinado cuerpo de conocimientos.
 Los modos de ser: como la realidad es dinámica, las relaciones entre los hombres
y de estos con la naturaleza se dan en un proceso dinámico. Por lo tanto, el
método para aprehender esa realidad, ha de ser concordante con ella. El ser
humano es un ser en devenir, al igual que la realidad las relaciones entre los
hombres no son siempre iguales

Por otro lado, la ciencia tendrá que descubrir el movimiento, las leyes del movimiento y
consistirá en “aprehender” ese constante devenir (constante cambios y evolución).

2. LA RELACION SUJETO-OBJETO
La relación entre estos dos miembros es el punto de la partida de toda teoría del conocimiento,
ya que se implican y exigen mutuamente. Son los miembros de la relación cognoscitiva
(que sirve para conocer).

El sujeto de conocimiento es el hombre social en las condiciones reales de existencia. Sujeto-


objeto son dos polos de una realidad en relación dialéctica.

El sujeto siempre está implicado en la realidad. Nace y se desarrolla en una matriz socio-cultural.

El sujeto somos nosotros mientras que el objeto es aquello que se le aplican técnicas para
conocer la realidad. Ambos están en continua interacción y cambios: El objeto influye sobre el
sujeto y éste asimila y se modifica con esta influencia, actuando a su vez sobre el objeto
(interdependencia).

El conocimiento parece ser la resultante de unas interacciones que se producen a medio


camino entre el sujeto y el objeto y, por lo tanto, que dependen de ambos al mismo
tiempo, pero a causa de una indiferencia completa y no de unos intercambios entre
formas distintas. -Jean Piaget.

3. LA VALIDEZ DEL CONOCIMIENTO O LOS CRITERIOS DE VERDAD


 La práctica es el criterio de la realidad.
 La validez del conocimiento viene dada por la confrontación con la realidad a través
de la praxis.

La validez de un conocimiento se da por los resultados de una práctica. Pero como


todo pensamiento está vinculado o condicionado a una situación contextual, los criterios de
verdad están relativizados de acuerdo a las diversas culturas y a los códigos de civilización
subyacentes.

4. LA PRODUCCION DEL CONOCIMIENTO


La producción del conocimiento está condicionada por su contexto, que constituye la fuente
donde se engendra y se desarrolla el pensamiento. El sujeto está implicado en esa
realidad y no puede separarse por especulación científica o filosófica. Por lo que
podemos concluir que hay un condicionamiento de la realidad sobre el conocimiento (sus
formas se hallan ligadas a las formas del ser social lo que equivale a afirmar que el sujeto
que conoce no se separa de su existencia objetiva y ello condiciona la producción del
conocimiento), este queda reducido a ser simples fotografías de la realidad, es producto
de condiciones históricas.

 La relación dialéctica e inescindible (indivisible) entre el ser y el conocer.


 El condicionamiento de la realidad sobre el conocimiento.

Condicionamientos del conocimiento en cuanto al producto cultural:


 Condicionamiento de la situación contextual: son las circunstancias históricas,
sociales, económicas, culturales y políticas en las que aparece y se desarrolla ese
conocimiento. Las relaciones entre los hombres se dan en un contexto determinado
y condicionan la manera de interpretar la realidad.
 Los marcos referenciales apriorísticos: es la opción científica e ideológica desde la
cual se aborda la realidad, condicionando el modo de abordarla.
 La ecuación personal (factores personales): esta posee dos dimensiones; la posición
de clase con los resabios o no del origen de clase y los factores estrictamente
psicológicos. La posición del individuo en la sociedad determina una cierta manera
de ver la realidad y la formulación de sus ideas lleva un sello, más o menos
modificado, de su personalidad.

5. LAS FORMAS DEL SABER: SABER COTIDIANO Y SABER CIENTIFICO


Saber cotidiano: es el saber o conocimiento que se adquiere en la experiencia cotidiana. Es el
modo común, corriente y espontaneo de conocer que se adquiere en el trato directo con
los hombres y con las cosas. Este se posee sin haberlo buscado o estudiado, sin aplicar un
método y sin haber reflexionado sobre algo.

Este saber cotidiano se caracteriza por ser superficial no sistemático y acrítico:

 Superficial: se conforma con lo aparente, con lo que se comprueba con el simple


pasar junto a las cosas.
 No sistemático: tanto en la forma de adquirirlos y vincularlos como en el
modo de establecer cánones de validación.
 Acrítico: estos saberes pueden ser verdaderos o no, pero no se plantea una manera
critica o reflexiva de porque pasa lo que pasa.

Saber científico: se obtiene mediante procedimientos metódicos con pretensión de validez,


utilizando la reflexión sistemática, los razonamientos lógicos y respondiendo a una búsqueda
intencionada. Para ello delimita un problema, se diseña una investigación, se prevén,
medios e instrumentos y se procede a un análisis de interpretación de lo estudiado. El
conocimiento científico pretende relacionar de manera sistemática todos los conocimientos
adquiridos acerca de un determinado ámbito de la realidad.

Saber cotidiano Saber científico


Superficial Metódico
Espontaneo Intencionado
No sistemático Sistemático
Acrítico Crítico
6. SABER-DOXA Y SABER-EPÍSTEME
Según Platón la doxa u opinión es aparencial y se contrapone con la ciencia y al saber verdadero.
Esta vinculado con la acción práctica. Es demostrable e irrefutable (saber cotidiano).

Por el contrario, la episteme no constituye nunca un saber relativo a una sola cosa, sino que
es un saber sobre una cosa en relación al conjunto de otras cosas. Es una actitud
teorética. Posee un doble sistema de referencia, por un lado, sus verdades deben ser
validas en la realidad y por el otro, deben poder situarse dentro de un determinado
sistema cognitivo (saber científico).

7. SUPUESTOS DEL CONOCIMIENTO


El conocimiento científico desborda la apariencia y trata de indagar las causas de los hechos
que considera. Para ello se estructura sobre algunos supuestos:

 El conocimiento posible
 Existe un mundo objetivo y la realidad tiene una contextura independiente
del conocimiento que el hombre pueda tener de ella
 De esta realidad se puede afirmar algo de sus propiedades estructurales y
relacionales, que se captan por una serie de procedimientos y por la imaginación e
intuición del hombre
 Esta realidad es la base y el punto de arranque del conocimiento
 Como la realidad es devenir, la esencia del conocimiento científico ha de ser
descubrir los hechos y fenómenos en el devenir de la realidad
 El conocimiento científico procura establecer una conexión universal de los fenómenos
 Para que el conocimiento tenga carácter científico, es necesario elaborar
instrumentos que garanticen y controlen la validez de los conocimientos
adquiridos

8. NOCION DE CIENCIA
El termino ciencia deriva del latín “scire” que significa “saber”, “conocer”. Pero el verbo “scire”
más que al saber alude a una forma de saber y a la acumulación de conocimientos.
Es un conjunto de conocimientos racionales (exige el uso de la razón), ciertos o probables
(no existe la certeza absoluta, son verdades sujetas a corrección) que obtenidos de manera
metódica (se adquieren mediante reglas lógicas y procedimientos técnicos) y verificados en su
confrontación con la realidad (los fenómenos deben poder ser contrastados empíricamente) se
sistematizan orgánicamente (se trata de un saber ordenado lógicamente) haciendo referencia a
objetos de una misma naturaleza (objetos pertenecientes a un determinado aspecto de la realidad
que guardan cierta relación entre sí), cuyos contenidos son susceptibles de ser transmitidos (deben
ser transmisibles a través de un vocabulario que le es propio y que debe responder a todas las
exigencias de la claridad y precisión). Es un hecho o producto social, el hombre en su relación con
la naturaleza necesita dominarla para lograrlo ese conocimiento de la naturaleza es una necesidad
que se transforma en un problema y este una motivación para encontrar la respuesta.
En la ciencia existe una secuencia propia del trabajo científico:

Problema → Hipótesis → Verificación empírica → Ley → Teoría

 Conocimiento racional: es el tipo de conocimiento propio de la ciencia que exige el


uso de la razón y ello tiene exigencias metódicas que comportan una serie de
elementos básicos, tales como un sistema conceptual, hipótesis, definiciones, etc.
 Ciertos o probable: gran parte de nuestros conocimientos científicos son solo
probabilidad. EN la ciencia no hay certeza absoluta sino solo la probabilidad inductiva.
Son verdades parciales sujetas a corrección cunado nuevos datos o experiencias
demuestren la necesidad de rectificación.
 Obtenidos de manera metódica: los conocimientos de la ciencia no se obtienen de
manera al azar o en la vida cotidiana, sino mediante reglas lógicas y procedimientos
técnicos que se organizan según ciertas convicciones científicas.
 Verificados en su confrontación con la realidad: la ciencia solo se ocupa de
fenómenos susceptibles de ser contrastados empíricamente.
 Sistematizados orgánicamente: se trata de un saber ordenado lógicamente,
constituyendo un sistema de generalizaciones y principios que relacionan los
hechos entre sim deduciendo leyes y constantes.
 Relativos a objetos de una misma naturaleza: o sea, objetos pertenecientes a
un determinado aspecto de la realidad que guarden entre si caracteres de
homogeneidad.
 Susceptibles de ser transmitidos: los conocimientos o contenidos de una ciencia deben
ser transmitidos a través de un vocabulario que le es propio y que debe responder a
todas las exigencias de la claridad y la precisión.

Investigar: Adquisición de conocimientos acerca de un aspecto de la realidad con el fin de


actuar sobre ella.

La investigación científica se caracteriza por:

 Ser una forma de plantear problemas y buscar respuestas mediante la indagación


con un interés teorético (dirigido al conocimiento teórico) o una preocupación
práctica.
 Requerir una formulación precisa del problema que se quiere investigar y un
diseño metodológico en el que se expliciten los procedimientos para buscar la o las
respuestas a las preguntas implicadas en la formulación del problema

Marradi “Tres aproximaciones a la ciencia”


1.1 Galileo y el método experimental
La tradición helenista y escolástica sostenía que la tarea de la ciencia es la de
identificar la naturaleza de cada especie de objeto del conocimiento, separando lo
esencial y fijo, de lo accidental y variable.

Sin embargo, Galileo Galilei rompe con esta concepción (S.XVI) afirmando que la tarea
de la ciencia es en realidad formular, controlar y decidir afirmaciones entre las
propiedades de los objetos. También señaló que estas relaciones que tenían con la naturaleza
debían ser expresadas matemáticamente.

A partir de esta visión, surge el METODO EXPERIMENTAL. Este método consiste en manipular
una o más variables para ver conductas específicas del objeto que se analiza. Un
experimento se obtiene solo cuando se observen los efectos de variaciones controladas
de una propiedad llamada operativa en otra llamada experimental, mientras se mantienen
constantes todas las otras propiedades que podrían influir en la segunda. Es decir, se
ponen en práctica medidas que impidan variaciones en los estados de las propiedades de
este grupo durante todo el experimento. Parte de una concepción ideal. No es adecuado
para investigar relaciones funcionales ni sistemas complejos de relaciones causales.

Características del método experimental:


 Se opera sobre un solo objeto
 Se registra la información en dos vectores: propiedad operativa y propiedad experimental.
 Se grafican los datos en un eje abscisas y ordenadas.
 Se traza una curva que representa la relación matemática.
 Presume que los hechos de la naturaleza son fungibles (los objetos del mismo tipo
son intercambiables bajo iguales condiciones).

1.2 Limites del modelo experimental


El método experimental tiene dos tipos de límites: el límite teórico y el límite práctico.

El límite teórico consiste en que no se puede estar seguro de que otras propiedades no
consideradas en el experimento, influyan en la propiedad experimental.

El límite práctico, que consiste en que no siempre es posible controlar las variaciones
en la propiedad que se manipula (prop. operativa) ni mantener perfectamente constantes
a las que deberían estarlo.

El método experimental, por lo tanto, no es aplicable a las ciencias sociales debido a los
límites prácticos que presenta. Esto se debe a que las ciencias sociales se caracterizan
por ser no fungibles, es decir, no son intercambiables, ya que no se puede dar por sentado
que los objetos del mismo tipo siempre reaccionen de la misma manera bajo las mismas
condiciones.

1.3 La matriz de datos y el supuesto atomista


Ante la falta de un instrumento intelectual para analizar aspectos de las ciencias sociales,
a principios del siglo XVIII, Alfred Achenwall aplica la matriz de datos como metodología
estándar para las ciencias sociales, a pesar de haber sido una herramienta elaborada por
matemáticos en el siglo XVI para llevar registro de la economía.

Este elemento permite tratar la variabilidad entre objetos del mismo tipo y realizar
análisis estadísticos. En las filas se vuelcan los casos y en las columnas las propiedades.
Esta herramienta permite aislar variables y establecer relaciones entre ellas.

Se basa en cuatro supuestos:

1. Cada caso se puede descomponer en un conjunto de propiedades, y a su vez,


estas propiedades pueden tomar distintos estados que luego se convertirán en
datos cuantificables. Este mecanismo es útil para las ciencias sociales ya que puede
transformar información en un dato cuantificable y aislar las variables.
2. Cada estado en una propiedad, una vez transformado en dato, es
perfectamente separable de su detentador.
3. Cada estado en una propiedad es totalmente independiente de los otros estados
de su detentador en todas las otras propiedades.
4. Cada dato con el mismo valor es perfectamente asimilable entre sí.

1.4 El método de la asociación o cuantitativo


Hasta el momento no había ninguna unidad de medida específica en las ciencias
sociales; solamente existía algo pensado para expresar cantidades de dinero y cuantificar. Sin
embargo, en el siglo XX, se trató de aplicar el mismo procedimiento que se utilizaba con el
dinero, pero para medir actitudes. Es decir, surgieron las escalas (Thurstone; Likert,
Guttman), que eran una forma de cuantificar propiedades específicas como actitudes,
opiniones, valores, etc., transformándolas en variables cuantitativas:

 Las formas de recolección de informaciones transforman estas informaciones en


datos en una matriz;
 Esta transformación y codificación permite establecer relaciones entre
propiedades, fundándose en más que impresiones, y cuantificando las fuerzas
de estas relaciones:
 No es posible establecer de manera impersonal (sin intervención humana) la
dirección de una eventual influencia, por lo tanto, las técnicas de análisis permiten
establecer la presencia de asociaciones entre variables, pero no de relaciones
causales.

1.5 El enfoque que se contrapone a la visión estándar o


cualitativo / no estándar
En contraposición al método de asociación, surge el método cualitativo o no estándar. Dentro
de sus características encontramos:
 Reducir al mínimo la separación entre la ciencia y la vida cotidiana.
 Le da mucho valor a la voz de los actores sociales.
 Mayor dependencia del contexto en el que se realiza la investigación al
no aislar al sujeto.
 Preferencia por problemas micro para hacer un análisis más profundo en
cada sujeto/grupo social.
 Orientación idiográfica, descriptiva.
 Orientación inductiva.
 Comprensión global.
 La causalidad se reconstruye a través de las narraciones.
 Necesidad de vigilancia epistemológica.

P. Bourdieu “El campo científico”


El campo científico no es armónico ni consensuado si no que es definido como un
espacio de articulación de fuerzas, de controversia y de lucha para obtener recompensas
y ser reconocido (capital específico). Es un sistema de relaciones objetivas entre las
posiciones adquiridas de una lucha de concurrencia, que tiene por apuesta especifica el
monopolio de la autoridad científica, definida como capacidad técnica y como poder social,
o, si se prefiere, el monopolio de la competencia científica, entendida en el sentido de
capacidad de hablar y de actuar legítimamente en materia de ciencia que está
socialmente reconocida a un agente determinado.

El funcionamiento del campo científico produce y supone una forma específica de


interés, es decir, las prácticas científicas no aparecen como desinteresadas. Asigna a cada
investigador, según la posición que ocupa, sus problemas científicos o políticos, sus métodos
(estrategias científicas); es decir, no hay elección científica por parte del investigador, sino
que se ve condicionado.

Distingue entre competencias/autoridad científica (lo que sería la representación social, el poder
simbólico, marcado por todo un “aparato” de emblemas y signos.) de una capacidad técnica
(lo que hoy en día seria parte de nuestras competencias específicas). Toda práctica está
orientada a la búsqueda de la autoridad científica.

Plantea que un análisis que intente aislar la dimensión puramente política en los conflictos por
la dominación científica es falso si no se tiene en cuenta las determinaciones puras y
puramente intelectuales de los conflictos científicos. Quien logra definir lo que es ciencia,
conocimiento científico y cómo se hace, es quien ejerce la dominación de ese campo. Tiene
el poder de definir qué es el conocimiento científico (burocracia científica).

Fred Reif hace una distinción entre determinaciones propiamente científicas, interés
intrínseco (hacia uno), de determinaciones propiamente sociales, el interés extrínseco (de
otros hacia vos, lo que resulta importante para los otros investigadores): Un científico busca
realizar las investigaciones que considera importantes. Pero la satisfacción intrínseca y el
interés no son sus únicas motivaciones; su trabajo no debe ser interesante solamente
para él, sino que debe también ser importante, interesante y reconocido entre terceros.
Merton distingue entre conflictos sociales (tratan sobre la asignación de recursos
intelectuales entre diferentes clases de trabajo sociológico) y conflictos intelectuales
(oposiciones de ideas sociológicas estrictamente formuladas). Esta distinción constituye
una estrategia que tiende a imponer una delimitación del campo de los objetos de
discusión legítimos.
La lucha por la autoridad científica es una especie de capital social que asegura un poder
sobre los mecanismos constitutivos del campo científico y que puede ser reconvertido en otras
especies de capital. Los productores tienden a no tener otros clientes posibles que sus
concurrentes, lo que significa que un productor espera el reconocimiento de los otros
productores que a la vez también forman parte de sus concurrentes. Hay dos tipos de
competidores, “de hecho” (son los sabios comprometidos en el mismo juego que poseen
los medios para apropiarse simbólicamente de la obra científica y de evaluar sus méritos), y
“de derecho” (son aquellas autoridades que se encuentran en el exterior del campo
científico).

La ciencia oficial no es el sistema de normas y valores que la comunidad científica


impone o inculca a todos sus miembros. En una visión durkheimiana el campo científico es la
representación del universo científico que los sostenedores de este tienen interés en
imponer en primer lugar a sus concurrentes. En ciencias lo que está en juego es muy alto, es
decir, lo que está en juego en la lucha es objeto de lucha: enfrentamientos sin cesar de las
contradicciones de la legitimidad. Es por ello que, la forma más legitima de ciencia es la
ciencia de la naturaleza. La autoridad científica es una especie particular de capital que
puede ser acumulado, transmitido y reconvertido en otras especies bajo ciertas
condiciones.

Hay cuestiones de prioridad ya que el capital de autoridad proporcionado por el


descubrimiento radica en la persona que primero lo hizo o primero lo hizo conocer y
reconocer. Es decir, el reconocimiento socialmente marcado y garantizado es función
del valor distintivo de sus productos y originalidad.

La estructura del campo científico es definida por el estado de las relaciones de fuerza
entre los protagonistas de la lucha, es decir por la estructura de la distribución de capital
especifico que dirige las estrategias y las posibilidades objetivas de los diferentes agentes o
instituciones de las luchas presentes. Esta estructura es el fundamento de las
transformaciones (campo científico posee una estructura dinámica) por intermediación de
las estrategias de conservación o subversión de la estructura que ella misma produce.
Esta estructura puede variar entre dos límites: la situación de monopolio de capital
especifico y la situación de distribución igual de ese capital entre todos los concurrentes.

La adquisición de capital es un proceso continuo de acumulación que arranca por el titulo


escolar; el cual se necesita también un reconocimiento social y que se da por el valor
distintivo de sus productos y de la originalidad.

Las inversiones de los investigadores dependen tanto en su importancia como en su


naturaleza de la importancia de capital actual y potencial en el campo. Asimismo, para
comprender las transformaciones de las prácticas científicas es necesario relacionar las
diferentes estrategias de inversión y desinversión.

El campo científico como lugar de lucha es desigual, ya que podemos diferenciar entre dos
grupos los dominantes (ocupan las posiciones más altas en la estructura de la distribución
del capital) y los dominados (son los recién llegados quienes poseen un capital científico
un tanto más importante en cuanto a los recursos científicos acumulados dentro del campo).
Los dominantes están destinados a estrategias de conservación que apuntan a asegurar la
perpetuación del orden científico establecido al cual pertenecen. En cambio, los dominados
están orientados a estrategias de sucesión o subversión, quienes son más costosas y
riesgosas que no aseguran beneficios. Estos tienen en contra la lógica del sistema, es decir,
no pueden vencer a los dominantes en su propio juego. Por lo que la distribución de la
autoridad y competencia científica es desigual y cada agente tiende a obtenerla y
acumularla.

El mismo funcionamiento del campo es el que define la ruptura extraordinaria debido a


que las revoluciones contra el orden científico son inseparablemente revoluciones
contra el orden establecido. La revolución científica es asunto de los más ricos
científicamente, es un campo que encuentra su ruptura en el principio de su continuidad.

Lo que está en juego en la lucha interna por la autoridad científica en el campo de las
ciencias sociales no puede separarse de las luchas producidas en el campo político. De ello
se deriva que las posiciones en la lucha interna no pueden esperar jamás el grado de
independencia respecto a las posiciones en la lucha externa que se observa en el campo
de las ciencias de la naturaleza.

Todo campo científico puede situarse en alguna parte entre los dos límites representados, por
un lado, el campo religioso, en el cual la verdad oficial no es otra cosa que la imposición
legítima de una arbitrariedad cultural que expresa el interés específico de los dominantes y por
otro lado por un campo científico en el cual todo elemento de arbitrariedad social sería
descartado y cuyos mecanismos sociales realizarían la imposición necesaria de las normas
universales de la razón.

La sociología tiene la problemática de que se encuentra por debajo de la jerarquía de las


ciencias. Esta debe ser objetiva y de neutralidad ética (no debe manipular a las partes) y
dar todas las apariencias de una ruptura tajante con la clase dominante y sus demandas
ideológicas. No puede constituirse sino a condición de percibir que las diferentes
posiciones dentro del campo están asociadas a representaciones de la ciencia, por los
cuales los ocupantes de una posición determinada apuntan a justificar su propia posición y
las estrategias que ponen en práctica para mantenerla.

UNIDAD 2

Portantiero “La sociología clásica: Durkheim y


Weber”
A partir del Renacimiento, comienza la constitución autónoma del conjunto de las
llamadas “ciencias sociales”. El precursor es Maquiavelo cuya obra marca la
liberación de la política, de sus condicionantes teológicas o filosóficas.
El primer campo secularizado del saber fue la “ciencia política”. Lo que plantea el
autor es que se puede pensar al conocimiento separado de la fe: el desarrollo del
capitalismo y la conformación de las Naciones Modernas ayudó a esta separación.
Esta anticipación de la teoría política sobre el resto de las otras disciplinas no fue al
azar; debido a que el desarrollo y el origen de cada campo del conocimiento se
vincula siempre con las preguntas que plantea el desenvolvimiento social. Hasta
entonces, lo social y lo político aparecía como algo dado, fijo regulado por un sistema
que no distinguía lo público de lo privado, pero comienza a ser pensado como un
proceso de construcción colectiva en el que el hombre precede a la sociedad, la
crea y la organiza; y es justamente ahí cuando nace la idea de “contrato social”, de
soberanía popular y de las formas de representación de esa soberanía.
El segundo campo secularizado del saber fue la “economía política”; la fundación de
esta teoría también siguió los ritmos del desarrollo de la sociedad: en un momento la
atención se dirigió a los problemas de producción, debido al comienzo de la
Revolución Industrial.
Tanto la ciencia política como la economía política no eran consideradas
disciplinas irreductibles, sino que eran fragmentos de una única ciencia de
la sociedad. Eran ambas concebidas como fenómenos que se cruzaban y
se condicionaban mutuamente. Sus ideas giran alrededor de las ideas de
contrato social y de mercado, sostenidas sobre el principio de igualdad
jurídica.

EL ORIGEN DE LA SOCIOLOGÍA (3er momento)


La sociología, recibe la denominación de “ciencia de la crisis” pero esto merece
ser aclarado; debido a que no se refiere a cargar a esta ciencia con un contenido
transformador o revolucionario; sino que se trata del contexto en cual surge, dado que
aparece ligada a una situación de crisis. La sociología entonces, es el tercer campo
secularizado del saber y surgió después del Renacimiento, en el siglo XIX.
El nacimiento de la sociología se plantea cuando este nuevo orden ha empezado
a madurar, cuando se han generalizado las relaciones de mercado y el liberalismo
representativo; en el interior de la sociedad comienzan a surgir nuevos conflictos, muy
distintos a los del pasado, producto del industrialismo.
Como ya planteamos, el estímulo para la aparición de la sociología es la llamada
Revolución Industrial, la crisis social y política que dicha transformación
económica genera. Con ella, aparece un nuevo actor social, el proletariado. A partir
de esto, surgen dos corrientes opuestas para dar respuesta: la del socialismo (Marx) y
la de la tradición sociológica clásica.
La sociología nace íntimamente ligada con los objetivos de estabilidad social de las
clases dominantes. Su función es dar respuestas conservadoras a la crisis planteada
en el siglo
XIX. Es una ideología del orden, del equilibrio, al ser al mismo tiempo, un
avance en la historia del saber, al sistematizar la posibilidad de construir a la
sociedad como objeto de conocimiento.
Y, por último, en el siglo XX aparece el cuarto campo secularizado del saber,
denominado “psicoanálisis” que conquistara un nuevo territorio, el de la indagación
sobre las causas profundas de la conducta.
La magnitud de los problemas que plantea la sociedad como objeto de
conocimiento impone un abordaje científico. Se plantea que la ciencia social, a
imagen de las ciencias de la naturaleza, debía constituirse positivamente; es decir
que la sociedad será comparable al modelo del organismo. Se la estudia en dos
partes: morfología (estudio de sus partes) y fisiología (su funcionamiento). Este
positivismo significa también, reacción contra el negativismo, de la filosofía
racionalista de la Ilustración, contemporánea de la Revolución Francesa.
El punto de partida del positivismo era radicalmente distinto al iluminismo; la
realidad no debía subordinarse a ninguna razón transcendental, este rechazo
estimula un avance de pensamiento científico por sobre la metafísica o la teología.
Pero simultáneamente, implicaba una tendencia a la aceptación de lo dado como
natural. La sociedad puede producir cambios, pero deben estar incluidos dentro
del orden; es decir que la tarea a cumplir es desentrañar ese orden, contemplarlo
y corregir las desviaciones que se produzcan en él: así todo conflicto debía ser
prevenido y combatido, lo mismo que sucede con una enfermedad del organismo.
Con esta ideología nace la sociología clásica, que busca incorporar a la ciencia el
estudio de los hechos sociales por vía del modelo organicista.
Sociedad: como un todo organizo superior a los individuos que la componen,
unificado en sus elementos por valores que le dan cohesión y estabilidad que
proporcionan sustento a las normas que reglan la conducta de los individuos y a
las instituciones en las que esas conductas se desenvuelven. Si estos valores
se alteran, la sociedad entrará en un proceso de desintegración. El término
central de la sociedad es el orden y la transformación entendida como un caso
especial, controlado del equilibrio.

LOS PADRES FUNDADORES


La sociología se estructura a partir de una doble discusión: si bien su adversario
es el marxismo, busca saldar cuentas con el iluminismo. Los pensadores
racionalistas del siglo XVIII aparecen como un antecedente directo de la sociología,
son aquellos que abren un campo de investigación que lleva a descubrir leyes del
desarrollo social.

Montesquieu es un teórico de la ciencia política, y también se lo llama precursor de


la sociológica. Su tema de análisis fueron las instituciones políticas, pero fue encarado
desde una perspectiva sociológica. Para él, las instituciones políticas dependen
del tipo de Estado, y este depende del tipo de sociedad; es por eso que plantea
que ningún tipo de régimen político es universalmente aceptable. Montesquieu
piensa que es posible construir una tipología de sociedades, basadas en la
experiencia histórica y ordenada en una sucesión temporal para así poder realizar
comparaciones entre ellas y poder encontrar leyes de lo social; esto permitió
considerar a este autor como el primero de los pensadores de la filosofía del
iluminismo que tiende un puente conceptual hacia el desarrollo de la sociología.
La sociología clásica obtiene del pensamiento tradicionalista una serie de
proposiciones entrelazadas acerca de la sociedad; especialmente la concepción de
esta como un todo orgánico superior a los individuos que la componen, unificado
por valores que le dan cohesión. Si estos valores se alteran, la sociedad entrará en
un proceso de desintegración. El tema central es el orden social; la transformación
solo será un caso especial controlado del equilibrio.

Comte es considerado el fundador de la sociología, él es el inventor de la palabra,


contra su voluntad, porque en un principio la había bautizado a su disciplina como
“física social”, término que simboliza mejor sus intenciones de asimilar las ciencias
sociales a la perspectiva de las ciencias naturales. Más allá de eso, Saint Simon
puede revindicar ese carácter con mejores títulos. Comte fue secretario de Saint
Simon y colaboró con él en aquel libro que planteaba que la política debía convertirse
en física social, cuya finalidad era descubrir las leyes naturales de la evolución de la
sociedad. 

Comte, finalmente funda la autonomía de la sociología; él no hace más que resumir


ideas circulantes en el tiempo e integrarlas. Por consiguiente, sin Saint Simon habría
muy poco de Comte, debido a que su tarea fundamental consistió en depurar al
saintsimonismo de sus tensiones utopistas y enfatizar sus contenidos
conservadores.
Además, Comte incorpora la idea de evolución y de progreso, pero suponía que
los cambios debían están contenidos en el orden. La sociedad debía ser
considerada un organismo y estudiada en dos dimensiones, la de la Estática Social
(análisis de su orden) y la de la Dinámica social (análisis de su progreso). Orden es
posible sobre la base del consenso, que asegura la solidaridad de los elementos del
sistema; y el progreso debe asegurar el mantenimiento de la solidaridad, dado que
de otro modo la sociedad se desintegraría. 
Y, por último, Comte plantea que la humanidad pasaría por tres etapas: la
teológica, la metafísica y la positiva. Esta última colocaría a la sociología en la cima
de la categorización jerárquica de las ciencias. Esta política positiva solo podría ser
aplicada por la elite autoritaria. El mismo se autoproclamo el papa de la nueva
religión, la positiva. 

Saint Simon se considera el precursor del socialismo, como socialista utópico; pero
el pensamiento de este autor está plagado de tensiones internas que pueden ofrecer
una perspectiva revolucionaria o conservadora. En él se fusilan elementos
progresivos y conservadores: por un lado, admiraba el orden social del medioevo,
pero por el otro lado se considera un teórico del industrialismo y un profeta de la
sociedad teocrática. 
Además, plantea que “El conocimiento científico deberá ocupar en la nueva sociedad
el papel que la fe religiosa ocupaba en la sociedad antigua”. El sistema industrial
será gobernado por una elite integrada por científicos y por productores. Esta elite
aseguraría la unidad orgánica de la sociedad.
La vinculación del positivismo con los intereses políticos de quienes buscaban el orden
social es un tema planteado por Spencer, quien fue mucho más positivista, en el
sentido de intentar aplicar a lo social el método científico natural. Para él, no
existían diferencias metodológicas entre el estudio de la naturaleza y de la sociedad;
el principio que unificaba ambos campos era el de la evolución. Planteaba que la
sociología debía demostrar que los hombres no debían intervenir sobre el proceso
natural de sociedades. 

Tonnies fue el principal representante de la sociología clásica. Este autor surge


en el clima cultural, donde en Alemania, la sociología era fruto tardío. Lo que
estaba en discusión era la legitimidad de construcción de una ciencia de lo social
equiparable a la ciencia de la naturaleza. Los dominantes rechazan esta posibilidad y
surge así, la distinción entre ciencias de naturaleza y ciencias del espíritu. Plantearon
que los hechos históricos son únicos e irrepetibles, es inútil buscar regularidades
para buscar leyes, tal como lo hacen las ciencias naturales. 
En el libro de Tonnies aparece la sociología como conocimiento de las relaciones
sociales y estas, a su vez, solo pueden ser concebidas como producto de la voluntad
de los hombres. Dos tipos básicos de relación entre los hombres son los de
“comunidad” y “sociedad”; la comunidad está fundada sobre lazos naturales,
asimilados al modelo de un organismo, en cambio la sociedad está fundada sobre el
contrato, la racionalidad, el cálculo y asimilados los lazos que se unen a una
máquina. 
Saint Simon, Comte, Spencer y Tonnies comportan la prehistoria de la sociología
clásica; sus obras han perdido toda actualidad, pero las preocupaciones
metodológicas que incorporan configuran aspectos relevantes para el ingreso de la
sociología. Aquí, dos figuras desempeñaron un papel sobresaliente: Durkheim y
Weber.

DURKHEIM: EL PROBLEMA DEL ORDEN


Su misión fue colaborar con la consolidación de un orden moral que le diera a la
nación francesa estabilidad del antiguo régimen, pero fundada sobre otras bases.
Explica la forma en la que los individuos se asocian entre sí por medio del análisis de
los tipos de solidaridad. Reconoce:
 La solidaridad mecánica, vinculada a las formas más primitivas, en donde
la conexión entre individuos se obtiene sobre la base de su escasa
diferenciación; es una solidaridad construida a partir de semejanzas y de
la probabilidad de pocas posibilidades de conflicto.
 La solidaridad orgánica, supone la diferenciación entre individuos y como
consecuencia, la recurrencia de conflictos que solo pueden solucionarse
con una autoridad superior que fije los limites; esta autoridad es la
conciencia colectiva, es algo exterior a cada individuo y resume el conjunto
de creencias y sentimientos comunes al término medio de una sociedad;
en conclusión, es esta conciencia colectiva la que modela al individuo. 

En otro de sus libros “El suicidio”, señala que la felicidad solo es posible si este no
exige más de lo que puede ser acordado. En nombre de su propia felicidad el hombre
habrá de conseguir que sus pasiones sean contenidas hasta detenerse en un límite
que sea reconocido como justo. Ese límite deberá ser impuesto desde afuera por un
poder moral indiscutido que funde una ley de justicia. El orden moral es equivalente al
orden social, se expresa como un sistema de normas que se constituyen en
instituciones; y la sociología es el análisis de las instituciones, de la relación de los
individuos con ellas. 
Durkheim trata de explicar al suicidio en términos de la sociología, ya que considera a
los suicidios en conjunto, durante una unidad de tiempo y en una sociedad dada,
esto ya constituye un hecho nuevo, superior a la suma de los actos individuales,
conformando así un hecho social. Y el estudio de los hechos sociales es el terreno de
la sociología. El autor plantea tres tipos de suicidio:
 El suicidio egoísta es aquel suicidio motivado por un aislamiento
demasiado grande del individuo con respecto a la sociedad (el suicidio de
los marginados, de los que no tienen lazos fuertes de solidaridad
social).
 El suicidio altruista es aquel motivado por una fuerte integración
con la sociedad. Un claro ejemplo es el orden militar donde sin un
alto nivel de integración, no existe ejercito; por eso es que cualquier
obstáculo puede transformarse en un impulso suicida.
 El suicidio anómico es aquel que no ha sabido aceptar los límites
que la sociedad impone, es aquel que aspira a más de lo que
puede.

Y por último, plantea que el objeto de la sociología es el estudio de los hechos


sociales y que el método para estudiarlos es considerarlos como cosas; según
Durkheim a partir de esto la sociología puede ser considerada como una ciencia similar al
resto de las ramas del conocimiento científico. Pero, ¿qué es un hecho social? Consiste en
toda forma de obrar, de pensar y de sentir que ejerce sobre un individuo una presión
exterior; es decir que son anteriores y externos al individuo, lo obligan a actuar y se
expresan en normas, leyes, en instituciones que aseguran la buena integración del
individuo con la sociedad.

WEBER: RACIONALIDAD Y DOMINACIÓN


Consideraba como objeto de la sociología a los individuos, porque son los únicos
que pueden instalar fines, intenciones en sus actos; y utilizaba un método
historicista- comparativo (consiste en que, si comparamos sociedades
diferentes, logramos igualar las principales variables que aparecen en ellas,
quedando una sola variable que no es compartida que sirve para explicar la
diferencia específica) que le permitiese recuperar a la vez la particularidad y la
universalidad del hecho social. Sostiene que solo se puede comprender la
naturaleza de las personas, de sus obras y de sus actos, si se consideran como
parte integrante de un proceso histórico continuo.

Su objetivo era complementar la imagen de un materialismo militar y político: el


tema central que le permitirá poner en práctica esa propuesta. Su tema central
es el capitalismo. Habla de los tipos ideales que se obtienen al acentuar
unilateralmente uno o varios puntos de vista y se encadenan fenómenos
aislados, nos permite analizar las acciones reales como las desviaciones de ese
modelo. Estos sirven para la confrontación comparativa y para el análisis de las
formas sociales concretas. Su punto de partida es el actor y la acción social. La
sociología es una ciencia que pretende interpretar esa acción social para
explicarla causalmente en su desarrollo y efectos. La característica básica de la
vida social es la orientación a las acciones humanas hacia la consecución de
determinados fines a través de la utilización de medios adecuados
racionalmente para conseguirlos. Hay tres tipos de comportamientos: la acción
tradicional, la afectiva y la acción con arreglo de valores. Así fue como pudo llegar
a aislar la causa fundamental del desarrollo del capitalismo: la ética protestante, y
realizar críticas al marxismo economicista.
Max Weber y Emile Durkheim coronan el edificio de la sociología clásica.

Durkheim: el estudio de la conducta humana


como ciencia racional-positiva
COMPLETA ACA COCO

TOM BOTTONMORE: Historia del análisis


sociológico
Max Weber fue un filósofo, economista, jurista, historiador, politólogo y sociólogo
alemán considerado uno de los fundadores del estudio moderno de la sociología y
la administración pública.
A pesar de haber comenzado con la influencia del historicismo alemán, en
especial el historicismo económico, él pretendía desarrollar una teoría sociológica lo
más sistemática posible sin afiliarse a una escuela de pensamiento, lo cual le fue
posible gracias a su enorme erudición.
(Historicismo alemán: considera toda la realidad como el producto de un devenir
histórico).
Cabe mencionar que hoy en día continuamos con el legado de su hilo de pensamiento
y el modo de abordar la investigación de actividades humanas, con referencia a sus
conceptos económicos. Señala que hay tres problemas económicos a tener en
cuenta:
1. Cuestiones específicamente económicas (técnicas financieras, formación de
precios, administración de empresas, etc.).
2. Condicionamiento de la economía por otras actividades, como la
política, religión y la técnica. Un tema relacionado a este problema es el
surgimiento del capitalismo.
3. Condiciones que la propia economía impone a otros órdenes de
actividad, como la modificación de las políticas públicas sobre la base de
consideraciones económicas, o el ascetismo religioso.

El creía que toda obra científica estaba destinada a envejecer y a ser sustituida;
este proceso histórico era inevitable e impedía que las mismas puedan reinventarse
o crearse de nuevo sin lazos con lo conocido. También consideraba que ningún
sociólogo podía desprenderse de sus creencias.

La sociología weberiana se puede dividir en tres secciones:


1. El estudio especial del puesto de la sociología dentro de las ciencias humanas.
2. El aporte de elementos positivos a todo estudio futuro.
3. La definición del análisis sociológico.

EPISTEMOLOGÍA WEBERIANA
La metodología de la sociología que propuso Weber se diferenció a las anteriores
porque en vez de definirla a priori, realizó importantes estudios de campo. Él
consideraba que un buen método era el que demostraba ser eficaz en el plano
concreto en el que se estaba trabajando.

Así, fue el primero en aplicar el método interpretativo en esta ciencia.


El sociólogo opera sobre formas de comportamiento social dinámicas, analiza
relaciones sociales y una actividad. Estas relaciones son producidas por acciones
sociales: actos dirigidos por los agentes con referencia al comportamiento de
otros, las cuales implican tomar parte en un contexto, fijar una meta que justifique la
actividad y apelar a determinados ideales. El hombre actúa debido a sus
motivaciones, la actividad humana se basa en la voluntad.
Estos tres niveles se ven atravesadas por una cualidad: el sentido. Este es inherente
a toda acción, y está subjetivamente dirigido. Las relaciones sociales son el resultado
de la combinación de sentidos individuales y grupales.
La tipología de la acción social que planteó Weber es la siguiente:
 Tradicional: en su sentido reconoce el carácter sagrado de la costumbre
y el pasado.
 Afectiva: es una reacción presente inmediata a un estímulo por deseo/placer.
 Racional con relación a valores: si el agente cree que sirve a una causa futura o
a una esperanza.
 Racional con relación a fines: si se encamina a un objetivo limitado
basándose en el cálculo de los medios disponibles y previendo sus
posibles consecuencias.
Estas poseerán consistencia en la medida que el agente le confiera sentido.

Para aprehender fenómenos sociales es necesario conocer y comprender los motivos, razones y
metas que motivaron al ser humano, ya que toda acción tiene un fin y se basa en la voluntad.
Pero analizar solamente las causas resulta incompleto, ya que no se tiene en cuenta el sentido de
la acción. Para comprenderlo es necesario someter a la acción a un análisis más profundo, ya
que este no se encuentra en el objeto mismo, sino que está subjetivamente dirigido. Mediante la
interpretación del sentido se puede comprender el fenómeno social. En la sociología, el saber se
alcanza cuando se explica las causas de una relación social y se comprende su sentido.

Otra contribución metodológica fue el pluralismo causal.


Weber rechazaba por insuficiente al esquema de causalidad mecánica y unilateral
debido a que consideraba que causa-efecto eran intercambiables y porque no lo
consideraba como razón suficiente. En las ciencias sociales no existe la causalidad
rigurosa, ya que la interpretación de las mismas depende de la evaluación que
haga el investigador y la documentación de sus datos. Además, resulta difícil o
imposible establecer una única causa para los fenómenos sociales.
De esta noción se desprenden las siguientes:
 Proceso de imputación causal: hace referencia a que la aparición de un
fenómeno social se debe a múltiples causas; debido a que los fenómenos
ocurren por diversas causas, es imposible establecer un determinismo
estricto entre ellos, por lo que cada investigador los vincula según el peso
que él mismo les adjudique.
 Posibilidad objetiva: permite establecer dentro de los límites de
nuestro conocimiento, la imputación causal más adecuada, debido a
que las causas pueden tener un papel secundario o un efecto
decisivo.

La conceptualización en sociología fue uno de los mayores afanes de Weber. Esto se


debe a que la ciencia no solo es válida por sus métodos sino también por los
conceptos que elabora, y la sociología era deficiente en esta materia ya que sus
conceptos se malentendían o perdían validez científica. Para ello siguió dos
caminos:
 El tipo ideal.
Son construcciones mentales que permiten en las ciencias sociales una aproximación
a la realidad, tiene características utópicas que se obtienen exagerando
mentalmente elementos específicos de la realidad. Para construirlo es necesario
seleccionar las características adecuadas de la realidad y combinarlas en una imagen
mental homogénea. Hay que tener en cuenta que como la realidad es infinita, la
ciencia no puede ser nunca una copia de ella sino una articulación de conceptos
sustentada por un conocimiento fragmentario. Forma en la que se construye el
tipo ideal del capitalismo:
1. Debemos silenciar nuestras inclinaciones personales positivas o negativas
2. Determinar lo que vamos a analizar
3. Distinguir entre las diferentes formas del capitalismo
4. No confundir el capitalismo primitivo del siglo XIX con el actual

 La referencia a los valores.


Proceso mediante el cual el especialista selecciona las características oportunas de la
realidad para crear el tipo ideal. Como no hay un sistema de valores universal, los
autores deben referirse a su propia escala e indicar con claridad qué valores
determinan sus opciones (honestidad intelectual/obediencia: la investigación
sociológica solo es válida dentro de los límites de la referencia de a los valores
escogidos en cada momento por un autor). De esta forma, siempre se ofrecerá una
interpretación renovada en la historia.

Weber también realizó investigaciones en sociología política. Estas versaron en los


siguientes puntos:

FILADD.CO
 Relación entre la violencia y el Estado: él consideraba que el Estado
moderno es "una comunidad humana que, dentro de los límites de un
territorio específico, reclama y obtiene un monopolio de la violencia física
legítima", es decir, que el Estado tiene el derecho a la violencia de los
individuos y grupos subordinados.
 La dominación desde el punto de vista de la legitimidad: analizó las
razones que mueven a los gobernados a confiar en el poder político.

M
Estableció una tipología de legitimidad, la dominación tradicional (se
funda en la creencia en la santidad de las costumbres vigentes y en la
legitimidad de los que llegan al poder en virtud de la tradición), la
dominación legal (creencia en la validez de la ley instaurada por medios
racionales y en la legitimidad de los que sumen el poder legal) y la
dominación carismática (devoción que prestan a un individuo). Sin
embargo, estas son tipos ideales ya que no se presentan en su estado
puro.
 Análisis de los partidos políticos: diferenció a los partidos de elite de
los partidos de masa, y expresó que los partidos de masa, a pesar de ser
luchas del pueblo, sirven al interés de alguien de una elite.
 Desarrollo de una sociología de la burocracia: era consciente de los
excesos a que puede llevar un sistema burocrático, pero, en armonía con la
neutralidad axiológica, comprendió que dominaría al Estado y empresas
privadas porque satisfacía los requisitos de racionalización moderna.

En cuanto al surgimiento del capitalismo, Weber sabía que este se debió en gran
parte por una dinámica interna de la economía, ya fuera por una acumulación de
capital o por la separación de los planes presupuestarios del hogar y
empresariales. Pero este no se reduce a razones económicas sino también
sociológicas, ya que el sistema no se autoimpuso, sino que fue obra de
empresarios audaces que lo desarrollaron progresivamente. Y también a religiosas:
ellos tenían una mentalidad llamada "espíritu del capitalismo" infundida de creencias
morales y religiosas, en particular la predestinación.
Para ellos, el éxito en los negocios representaba un signo de elección religiosa, por lo
que llevaban hábitos e ideas que favorecían el comportamiento racional para alcanzar
el éxito económico, como una vida rígida en lo personal y familiar. Por lo tanto, un
elemento básico del capitalismo fue el ascetismo mundano.

También delineó los límites de la sociología, los cuales estaban dados por la
naturaleza de la ciencia de expresar conceptos limitados de la realidad, y por el uso de
la referencia a los valores.
En sus últimos años presentó un principio metodológico: principio de
neutralidad valorativa (principio regulador de la conducta del hombre de
ciencia).
Weber admitía la importancia de los valores, ya que consideraba que nutrían cada
acto humano y dominaban las luchas políticas, económicas y religiosas. Incluso
con la referencia a valores se vuelven un papel fundamental en el quehacer
científico, especialmente en la selección de datos.
Como no se puede desarrollar una jerarquía científica de valores, resulta ilegítimo
juzgar valores antagónicos en nombre de la ciencia o conferir significación científica a
un valor por encima de los otros.
Una ciencia empírica no puede enseñar a nadie qué debe hacer, sino solo indicarle
qué puede hacer o qué quiere hacer. Así como la ciencia sólo es competente
dentro de sus propios límites y no en el dominio de actividades valorativas como
la política, el arte y la religión, lo mismo debe suceder a la inversa, estas no pueden
pretender competencia en el dominio científico. La neutralidad valorativa es un
principio regulador de la conducta del hombre de ciencia. Le exige al estudioso
ser consciente de las limitaciones de su disciplina y de la ciencia en general.

En base a este principio, Weber rechazó las pretensiones científicas


del marxismo totalista, ya que creía que muchos conceptos carecen de rigor científico
y son solo ideas metafísicas. Además, desde el punto de vista de la neutralidad
valorativa, él consideraba que los intelectuales marxistas estaban tan seguros de
poseer la verdad que buscaban imponerla al resto de la gente.
Otras críticas que realizó al marxismo:
 La economía no tiene un poder de salvación global porque, como
toda actividad, está limitada por sus medios.
 Creía que la división en dos polos opuestos de la sociedad que hacían
los revolucionarios marxistas era inexistente ya que la misma está
compuesta por una pluralidad de estratos sociales.
 Según él, la revolución es una fuente de estímulo para los intelectuales.
Pero pensar que el hombre puede ser radicalmente transformado por
una revolución hecha en nombre de un concepto ("desalienación”) es una
manera intelectual de caer en la trampa de la ideología del
catastrofismo.

Tom Bottomore: Marxismo y Sociología

La formación del pensamiento de Marx


La intención de Bottomore es exponer los principales elementos de la teoría del Marx,
considerada como uno de los tipos principales del análisis sociológico, para luego
seguir con su evolución, interpretaciones, críticas y problemas que el transcurso del
tiempo le planteaba.
En “los Manuscritos económicos-filosóficos” de 1844, Marx enuncia el concepto
fundamental de su teoría, el de “trabajo humano”. Marx toma un concepto Hegeliano,
el de trabajo espiritual y lo transforma en un concepto muy diferente, el de trabajo
dentro del proceso de producción material, como fuente de riqueza. Esto no
significa que Marx limite su concepción de trabajo meramente a la producción
material, sino que, por el contrario, mantiene la noción más amplia del trabajo
como actividad humana, en la cual se conjugan la producción material e intelectual.
Según este concepto de trabajo humano, el hombre no sólo produce los medios de su
subsistencia física, sino que crea a la vez toda una forma de sociedad.

Por otro lado, Marx toma otro concepto Hegeliano, el de alienación del trabajo y
también lo transforma. La alienación del trabajo es para Marx un proceso que no
sucede exclusivamente en el dominio intelectual o espiritual (como decía Hegel),
sino en el mundo de la existencia física y la producción material del hombre. Para
Marx la alienación del trabajo es la separación del trabajador del objeto que está
produciendo. Por lo tanto, el trabajo alineado es el que algunos hombres imponen a
otros, siendo también un trabajo forzado ya que de su producto se apropian otros.
La concepción del “trabajo alineado” introduce la idea de la división de la sociedad
en dos grupos principales: los amos de la producción y productores directos.
De estos dos conceptos se puede rescatar uno de los elementos principales de la
teoría marxista: el trabajo es un proceso que se desarrolla en la historia y en cuyo
transcurso el hombre, al cambiar la naturaleza, se cambia a sí mismo y cambia a
su sociedad.
Bottomore incluye en su obra una cita de “Contribución a la crítica de la
economía política”, de 1859. Acá Marx dice que en la producción social que
llevan a cabo los hombres, estos entran en determinadas relaciones que son
indispensables e independientes de su voluntad. La totalidad de estas relaciones
de producción entre productores (trabajadores) y dueños de la producción,
constituyen la estructura económica de la sociedad. Esta estructura da pie a las
superestructuras jurídicas y políticas. Marx continúa diciendo que las fuerzas
materiales de producción en la sociedad entran en conflicto con las relaciones de
producción existentes o con las relaciones de propiedad dentro de las cuales han
estado operando, lo que da lugar a un periodo de revolución social.
Después de 1845, hay una ruptura epistemológica que separa al joven Marx (de
ideología humanista e historicista) del Marx maduro (creador de una original y rigurosa
ciencia de la sociedad). Los estudios de este último presentan dos aspectos:
1. El refinamiento de su análisis teórico de los modos de producción,
gracias al estudio intensivo de la producción capitalista moderna y de
las teorías de economía política de sus antecesores y
contemporáneos.
2. El afán de situar el modo de producción y la sociedad capitalista dentro
de un esquema histórico de desarrollo social.
En su libro "Grundrisse", se ve la evolución del pensamiento de Marx maduro en tres
cuestiones:
1. Análisis del dinero y el intercambio. Antes decía que el dinero era el
vínculo social que mediaba las relaciones sociales de la sociedad
capitalista; ahora subordina las relaciones de mercado a un análisis de la
producción capitalista y del proceso de acumulación.
2. Fuerza de trabajo. Reemplaza el término "trabajo" de sus escritos
anteriores por este término, el cual hace referencia a la mercancía que
el trabajador vende a cambio de su salario, la cual es capaz de crear valor
donde no existía o aumentar el valor de una cosa, es decir, crear plusvalía
(origen de la ganancia capitalista).
3. La quiebra del capitalismo. El factor negativo de este aspecto es la
superproducción, que supone la restricción de la producción de valores de
uso por el valor de cambio (restricción de producción de bienes y
servicios por el dinero), y la pobreza y restringido consumo de las masas
en contraste al límite ideal del poder absoluto de consumo de la sociedad
(se enfrentan las fuerzas de producción y las relaciones de producción).
Otro factor es positivo, Marx ve el quiebre del capitalismo en la transición a
una nueva sociedad, marcada por crisis económicas y luchas políticas, y el
surgimiento de un sistema económico alternativo que despierte todas las
capacidades de la ciencia y la naturaleza, de la organización y el
intercambio social.

Desarrollo del marxismo, 1883-1917

La teoría social de Marx fue ignorada en Alemania (pero de gran interés en Rusia)
hasta su muerte, cuando comienza a ejercer influencia política e intelectual en el
movimiento obrero y las ciencias sociales académicas, pasando a ser la doctrina
social preeminente en la clase obrera. Se hizo firme y duradera una vez tomada por el
Partido Social-Demócrata alemán, cuyos dirigentes se convirtieron en los
principales herederos políticos e intelectuales de Marx. Lo característico de este
partido, y de otros que tomaban los mismos ideales, era que creaban sus propias
instituciones y se desarrollaban fuera del mundo académico oficial, constituyendo un
Estado independiente.
La "controversia revisionista" fue el primer gran debate interno del Partido S-D
alemán, tras la publicación de un libro de E. Bernstein. En este se criticaban las
pretensiones del marxismo de constituirse como una ciencia social.
 Por un lado, decía que si era una ciencia, sus resultados debían
someterse a la comprobación empírica, y la teoría debía ser revisada
ya que algunos supuestos no se estaban cumpliendo, como la división de
la sociedad en dos polos opuestos, cuando en realidad había una fuerte
permanencia de la clase media.
 Por otro lado, sugería que si el marxismo era una ciencia positiva, tenía que
ser complementado por una teoría ética.
 También puso en duda la teoría sobre la crisis y colapso del capitalismo.

Sin embargo, estas críticas ayudaron a reevaluar la teoría teniendo en cuenta los
cambios económicos y sociales que acontecían a Europa, y las nuevas ideas
filosóficas y sociales. Pero las interpretaciones dependían del autor que las
analizaba. Los intentos de establecer al marxismo como sistema de sociología
fueron tantos que, en la primera década del s. XX, emergieron en el seno del
movimiento socialista diversas escuelas de pensamiento, como resultado de
controversias sobre la interpretación de teorías de Marx. Se distinguen tres
tendencias:
1. El marxismo ortodoxo del Partido Social-Demócrata alemán.
Representado por Kautsky, tenía una concepción mecánica del desarrollo
de la economía capitalista hacia su inevitable bancarrota que se reflejaba
en las luchas de clases y la victoria final de la clase obrera.
2. El revisionismo de Bernstein. Rechazaba las ideas del colapso económico y
de creciente lucha de clases; veía la llegada del socialismo como
culminación de un proceso gradual de impregnación de la sociedad
capitalista por las instituciones e ideales socialistas.
3. El marxismo austríaco. Creó una teoría sociológica elaborada, tomando
en cuenta la creciente complejidad de la sociedad capitalista y las
cambiantes condiciones de la lucha de clases, manteniendo la perspectiva
revolucionaria y destacando la importancia de una intervención activa de
las masas obreras.

También surgió la corriente de pensamiento de Lenin y los bolcheviques.


De esta forma, el marxismo se impuso como una fuerte teoría social que dio
origen a cantidad de investigaciones sociales novedosas de gran amplitud. Pero
también surgieron los primeros estudios críticos sustanciales, siendo el de mayor
repercusión el de Max Weber.

La hegemonía bolchevique, 1917-1956

Como se nombró anteriormente, la cuarta tendencia dentro del marxismo era la


corriente de pensamiento de Lenin y los bolcheviques. Esta se desarrolló en Europa
oriental, luego de la Revolución Rusa de 1917 y de la instauración del primer "Estado
obrero". Comenzó a institucionalizarse como régimen político.
El marxismo soviético de Lenin tenía como elementos principales el papel de los
partidos, el campesinado como aliado del proletariado revolucionario, y las
condiciones de la lucha política de la clase obrera en la etapa imperialista del
capitalismo, adoptando la concepción del marxismo como "teoría de la revolución
proletaria". Él sostenía que el capitalismo había ingresado en su etapa final, creando
las condiciones favorables para su supresión, pero también había dividido el
movimiento obrero entre la tendencia reformista y revolucionaria.
El aporte más singular de Lenin al marxismo fue su concepción de partido, basado en
la distinción entre, por un lado, la clase obrera y, por otro lado, la vanguardia
revolucionaria de los trabajadores e intelectuales con plena consciencia de clase. Para
él, la clase obrera no era capaz de alcanzar otra cosa más que la unión sindical,
por lo que los trabajadores e intelectuales introducían las ideas socialistas al
movimiento obrero y, de esta forma, se generó un marxismo revolucionario organizado
en un partido centralizado y disciplinado. O sea, la clase obrera necesitaba de la clase
de los intelectuales para comprender las ideas, ya que sola no podía hacer la
revolución.
El leninismo como doctrina y movimiento político, al que contribuyeron otros
pensadores como Trotsky, dio vida a un sistema político y a un partido de nuevo
tipo, que tuvo gran importancia en el pensamiento marxista del siglo XX.

Los debates teóricos y el avance de la ciencia social marxista tuvieron fin en 1920
cuando Stalin, que tras la muerte de Lenin concentraba cada vez más poder, convirtió
al
marxismo soviético en una ideología cada vez más rígida y dogmática, como una
doctrina que reflejaba el desarrollo real de la sociedad soviética a la vez que servía de
sustento al régimen stalinista.
Luego de la Primer Guerra Mundial, el marxismo se particularizó por destacar como
factores esenciales para la transición al socialismo a la conciencia de clase y el
activismo político.

Así, se comenzó a entender al marxismo como una cosmovisión filosófica orientadora


del proletariado en su lucha política para crear una nueva sociedad y civilización. Esta
visión tuvo su inspiración en las condiciones políticas de Europa post PGM, y
dentro de un movimiento de ideas llamado "la revuelta contra el positivismo",
cuyos pensadores se asociaron al Instituto de Investigaciones Sociales de Frankfurt.
Sus miembros y los escritos de Korsch, Lukács y Gramsci, junto a otros, conforman a
los pensadores marxistas situados parcial o totalmente afuera de la órbita del
marxismo soviético en este período. Mientras tanto, los austromarxistas siguieron
desarrollando el marxismo como ciencia social en estrecha relación con la acción
política, hasta 1943, cuando la socialdemocracia austríaca fue aniquilada por el
fascismo.
El triunfo del fascismo en Europa provocó que las ideas marxistas no pudieran ser
expuestas ni revisadas durante 20 años.

La renovación del pensamiento marxista

El renacimiento del pensamiento marxista en las ciencias sociales tuvo sus principales
causas 1) el fin del predominio bolchevique con las revelaciones acerca del
régimen stalinista, 2) las rebeliones políticas e intelectuales en Europa oriental y 3) el
surgimiento de una visión de la teoría marxista más crítica. Como consecuencia,
hubo una transformación del pensamiento marxista en la Europa occidental, en parte
gracias al redescubrimiento de las obras de algunos pensadores que habían sido
censurados durante el stalinismo, y la formulación de nuevas concepciones marxistas
actualizadas al contexto. Gracias a esto, se extrapoló el pensamiento a otros campos
del saber científico (como la ciencia política, la historia, la economía).
Así, surgen dos orientaciones principales:
1. Marxismo estructuralista: el análisis de la estructura tiene prioridad sobre
el análisis histórico. Insisten en que las distintas estructuras (económica,
política e ideológica) que componen una formación social tienen cierta
autonomía, y que no solo la estructura económica es la dominante en la
constitución y reproducción de una forma particular de sociedad. Sostienen que
lo que lleva al colapso de una formación social y el surgimiento de otra nueva
es el desarrollo de contradicciones dentro de las estructuras y entre ellas.
Justifican que el Estado y el aparato ideológico experimentan un desarrollo
independiente y tienen una gran influencia en la formación social, en su
permanencia o declinación.
2. Teoría crítica: se ocupa primordialmente de la interpretación histórica.
Sitúan a la conciencia y la actividad intencional como elemento
fundamental de la constitución, reproducción o modificación de una cierta
forma de sociedad. Es una de las escuelas de "sociología interpretativa" que
analizan el mundo social mediante la interpretación de sentidos. De esto
surge que la transformación de un mundo social depende de que la
conciencia de los individuos reciba sustento del sistema de valores
culturales y de ideologías de ese mundo; por ende, se puede decir que
las luchas son conflictos de ideas.

Los estudios marxistas de los últimos años se han dedicado especialmente a


problemas metodológicos. La contribución más notoria se halla en la "sociología del
desarrollo ", de la cual se han formulado tres ideas importantes:
1. El desarrollo económico y social de los países no industriales deben
ser analizados en el marco de una economía mundial
predominantemente capitalista.
2. Se distinguen los países centrales de los periféricos. Estos últimos pueden
ser subdesarrollados activamente por los centros capitalistas o sometidos a
un proceso de desarrollo dependiente y deformado.
3. Los "modos de producción colonial" son el marco en el cual se analiza,
dentro de la economía mundial, la estructura social y la condición y
acciones de las clases sociales en los países no industriales que han
dejado atrás el régimen colonial.

Giddens “El desarrollo de la Teoría Sociológica”


La sociología estudia nuestras propias vidas y nuestro propio comportamiento, y estudiarnos a
nosotros mismos es la tarea más compleja y difícil que existe. En sociología las
dificultades inherentes al hecho de someter a estudiar nuestro propio comportamiento
complican aún más el problema. Por ello las controversias y los debates teóricos ocupan un
lugar central en la disciplina.

Enfoques teóricos:

Comte: acuñó el término sociología al emplear el termino de física social. Pensaba que la
sociología era la última ciencia que quedaba por crear, la cual era la más significativa y
compleja. Esta debía contribuir al bienestar de la humanidad.

Durkheim: para que la sociología sea científica debía estudiar los hechos sociales, es decir
debía abordar el estudio de las instituciones con la misma objetividad que los científicos
estudian la naturaleza. Estudiar a los hechos sociales como cosas ya que la vida social podía
ser analizada con el mismo rigor que los objetos o sucesos de la naturaleza. Estaba
interesado en los cambios que experimentaba la sociedad y para ello lo hizo en términos del
desarrollo de la división del trabajo como parte del fenómeno de la industrialización. La
división del trabajo desplaza gradualmente a la religión como núcleo central de la cohesión.
Los procesos de cambio son tan rápidos e intensos que generan grandes trastornos sociales
por lo que pudo así vincular a los tres tipos de suicidio.

Marx: se centra en cuestiones económicas principalmente, pero estas vinculadas a las


instituciones sociales. Se apoya en la concepción materialista de la historia. El cambio social
está inducido por influencias económicas. Para él los cambios más importantes se encuentran
ligados al capitalismo, que es un sistema de clases para el cual el conflicto entre clases es
una constante.

Weber: rechazaba la concepción materialista de la historia. El impacto de las ideas y de los


valores sobre el cambio social es tan significativo como las condiciones económicas. Se
centró en el estudio de la burocracia como una organización a gran escala dividida en
departamentos y regida por funcionarios. Implica el gobierno de los expertos, cuyas
decisiones se ponen en práctica sin consultar a aquellos a quien afectan. Es erróneo
pensar que podemos estudiar a las personas utilizando los mismos procedimientos que
utilizamos para investigar el mundo físico.

Desarrollos posteriores:

Mead: elaboró el interaccionismo simbólico, se centró en el lenguaje y en los símbolos de la


vida humana.

Parsons: contribuyó al desarrollo del funcionalismo donde para estudiar a cualquier sociedad
hay que acudir a sus diversas partes o instituciones.

Enfoques actuales:

Funcionalismo (Comte, Durkheim y Parson): comenzó con Comte, para quien esta forma de
pensamiento estaba estrechamente ligada al planteamiento general de la sociología. Para
Durkheim, constituía una parte central en su formulación de las tareas de la teoría y la
investigación sociológica. El funcionalismo moderno estuvo influenciado por el trabajo de los
antropólogos. Estudiar la función de una práctica o institución social hace a la continuidad de
la sociedad en su conjunto. La mejor forma de entender esto último es por analogía con el
cuerpo humano.

Merton, distingue entre funciones latentes y manifiestas. Las funciones manifiestas son
aquellas intencionadas por los agentes, mientras que las funciones latentes son las
consecuencias de las funciones manifiestas. Gran parte de la explicación de la sociología
consiste en sacar a la luz las funciones latentes de las actividades e instituciones sociales. A
su vez distingue entre funciones y disfunciones. Buscar los aspectos disfuncionales del
comportamiento social significa centrarse en aquellos rasgos de la vida social que suponen
un desafío para el orden existente.

Estructuralismo: estudia a los individuos en función de las estructuras a las que están
sometidos. Nace a partir del estudio del lenguaje que consistía básicamente en el
seguimiento del cambio en el modo de utilizar las palabras. En ningún caso podemos
identificar las estructuras básicas del lenguaje fijándonos únicamente en las palabras
que utiliza una persona al hablar. El lenguaje consiste en una serie de reglas de
gramática y significación que residen detrás de las palabras, pero que no se explicitan en
ellas. Saussure sostiene que el significado de las palabras deriva de las estructuras del
lenguaje, no de los objetos a los cuales refiere la palabra. El significado se crea por
diferencias entre conceptos relacionados que reconocen las reglas del lenguaje. Cualquier
objeto que podamos distinguir puede ser utilizado para crear significados. La semiología es el
estudio de significados no lingüísticos pero el termino más utilizado es la semiótica. Lo que
hace que algo este de moda y lo que no es su diferencia entre lo que llevan aquellos que
están en la onda y los que no.

Interaccionismo simbólico: presta atención al individuo activo y creativo. Mead sostiene que
es el lenguaje lo que nos hace seres autoconscientes y el elemento clave en este proceso
son los símbolos. El pensamiento simbólico nos libera de estar limitados en nuestra
experiencia a lo que vemos, oímos o sentimos. Toda interacción de individuos lleva a un
intercambio de símbolos. El interaccionismo simbólico dirige nuestra atención hacia los
detalles de la interacción interpersonal y hacia el modo por el cual esos detalles se utilizan
para dar sentido a lo que dicen y hacen los demás.

Marxismo: es parte de un paquete de análisis sociológico y de reforma de política radical.


Genera un programa de cambio político radical. Pone énfasis en la división de clase, el
conflicto, el poder y la ideología donde muchos han estado influenciados por el
funcionalismo.

Dilemas teóricos básicos:

1. La acción humana y la estructura: el interaccionismo simbólico enfatiza los componentes


activos y creativos del comportamiento humano. Los otros tres resaltan la naturaleza restrictiva
de las influencias sociales sobre nuestras acciones. La sociedad es mucho más que la suma
de los actos individuales. La estructura social limita nuestras actividades. Es exterior a
nosotros. Como seres humanos tenemos razones para hacer lo que hacemos, no somos
criaturas de la sociedad, sino que somos sus creadores. Todos participamos en la
construcción y en la reconstrucción de la estructura social. La sociedad no es externa a
todos los individuos tomados conjuntamente.

2. El consenso y el conflicto en la sociedad: algunas posturas hacen énfasis en el orden y


la armonía inherente a las sociedades humanas. Aquellos que adoptan esta perspectiva
conciben la continuidad y el consenso como las características más evidentes de las
sociedades. Por el contrario, otros, acentúan la omnipresencia del conflicto, para ellos las
sociedades están permeadas de luchas, divisiones y tensiones. Para que una sociedad
viva en el tiempo sus instituciones especializadas deben funcionar en armonía unas con las
otras. La supervivencia de la sociedad depende de la cooperación la que requiere consenso
entre sus miembros. Toda sociedad tiene un cierto grado de conflicto, que no es abierto en
todas las ocasiones. Un concepto que sirve para analizar el consenso y el conflicto es la
ideología, los valores y creencias que ayudan a asegurar la posición de grupos más
poderosos a expensas de los más débiles.
3. Desarrollo social humano: hasta qué punto el mundo moderno es producto de los factores
económicos los mecanismos del sistema económico capitalista. Es decir, hasta qué punto los
factores sociales, políticos o culturales han contribuido a configurar el desarrollo social en la
época moderna.

4. Género: en las obras sociológicas el individuo aparece como neutros, como actores
abstractos, no hombres y mujeres diferenciados. Hombres y mujeres poseen identidades,
gustos, inclinaciones diferentes porque las mujeres están menos socializadas y se
encuentran más próximas a la naturaleza que lo hombres. Para Durkheim las diferencias de
géneros se deben a las variaciones genéticas entre hombres y mujeres. Más bien, que la
posición social y la identidad de la mujer viene determinada por su capacidad reproductora
y por el cuidado de los hijos. Para Marx, las diferencias de poder y estatus entre la mujer
y el hombre son el reflejo de otras divisiones. El poder de los hombres sobre las mujeres
surge con la aparición de las divisiones de clase. La mujer pasó a ser propiedad del hombre
mediante el matrimonio. Abordar el problema del género no es lo mismo que introducir el
estudio de la mujer en la sociología, hay que el género trata de las relaciones entre las
identidades y el comportamiento de mujeres y hombres.

Perspectiva marxista---Perspectiva de Weber

Teoría: son intentos por explicar una serie de condiciones sociales. Forman parte del proceso
de investigación, planteado problemas a los investigadores. Mientras más ambiciosa sea
mayor será la dificultad de su contrastación empírica. Las teorías de alcance medio son lo
suficientemente específicas como para poder ser contrastadas mediante la investigación
empírica y lo suficientemente generales para cubrir un abanico diverso de fenómenos.
Ejemplo: la teoría relativa, que sostiene que el modo en que las personas evalúan sus
circunstancias depende de con quién se comparen a sí mismas. Una teoría valiosa es la de
Weber de la influencia del puritanismo en el desarrollo económico moderno.

Criterios de la teoría de Weber que son de gran importancia sociológica:

1. Es contra intuitiva: sugiere una interpretación que rompe con lo que dicta
el sentido común
2. Una teoría no es exclusivamente estructural ni puramente individual
3. La teoría da sentido a algo que de otra forma seria enigmático
4. La teoría vierte a la luz sobre una serie de circunstancias más allá de aquellas
que originalmente estaba destinada a explicar
5. Una teoría buena no es aquella que simplemente se considera valida. Es,
además, aquella que es provechosa en términos de su capacidad para generar
ideas nuevas y para estimular el trabajo de investigación.

Moore: El funcionalismo
El funcionalismo es un motivo de sorpresa en la sociología teórica contemporánea.

El autor considera que el funcionalismo aparece a fines del siglo XIX. Es una doctrina
sociológica que considera que la sociedad está constituida por partes que funcionan para
mantener el conjunto y que el mal funcionamiento de una de sus partes genera el reajuste
de las otras. Sus ideas nucleares son que los agregados sociales humanos incluyen
unidades diferenciadas que son interdependientes. Estas unidades pueden consistir en
individuos, familias o estructuras de parentesco, en estructuras analíticas.
Las preguntas de diferenciación e interdependencia aluden a teóricos de la sociedad
que tienen en común la percepción de que los sistemas sociales constituyen una realidad
emergente. Todos reflejan su preocupación por estas temáticas: Durkheim a quien se lo
considera como el padre fundador del funcionalismo, imaginó un estado primitivo de cohesión
social basado en la semejanza y no en la diferenciación. Su concepto de solidaridad mecánica
adquiere relevancia si la contraponemos a la solidaridad orgánica manteniendo así la
viabilidad del organismo complejo como un todo. La cuestión de solidaridad mecánica al no
poder ser probable no obtuvo mayor importancia, pero eso no importó para Durkheim quien
recurriría a su ficticia sociedad homogénea para examinar las fuentes de diferenciación y el
problema de la cohesión. Indicó a su vez un concepto de densidad moral cuyo sentido era el
de complejidad normativa creciente que era lo que había que explicar. Saint-Simon y Comte
en su búsqueda de un orden social nuevo construido racionalmente. Para Marx con su tesis de
alineación racional del obrero respecto del producto de su trabajo. Tonnies con su lamentación
de la pérdida de los vínculos de la comunidad estable y Weber con su admiración por el Estado
burocrático y las organizaciones burocratizadas.

La correcta percepción de Durkheim de que la interdependencia no garantiza la


solidaridad del sistema. Enunció el supuesto de que una sociedad primitiva que tuviera las
formas más rudimentarias de la tecnología de supervivencia también sustentaría un sistema
religioso del tipo más elemental. Es el principio que argumenta el principio evolucionista de la
progresión de estructuras simples en complejas, adopto además como supuesto un principio de
integración social que iba a convertirse en una tesis básica del funcionalismo: que las partes
analíticamente distinguibles de cualquier sociedad o cultura tienen que armonizar con el resto
del sistema. En su abordaje comparativo, intentó construir una ciencia de la sociedad en que
se prestase atención a sociedades no occidentales.

Se aceptó al sistema como algo dado y no como un proceso evolutivo. Este es un punto
de ambigüedad en el funcionalismo. Otro punto de dificultad que enfrenta el funcionalismo, es
sostener su argumento de que las funciones determinan las estructuras.

A partir de la analogía entre el cuerpo humano y las unidades de la sociedad podemos


establecer que el funcionalista puede elaborar un conjunto de supuestos operativos acerca de
los sistemas sociales.

Supuestos fundamentales:

* Durkheim llamó solidaridad orgánica a la combinación de diferenciación y de integración


quienes forman parte de los supuestos fundamentales.

* Es preciso considerar que el sistema presenta un alto grado de integración sin partes
sueltas. Es llamado por Merton como postulado de funcionalismo universal.

* Las formas responden a las funciones debido a que las formas se desarrollan para cumplir la
función. Es decir, esta última no es más que la consecuencia de una forma dada.

La perspectiva sistémica (Parsons): los seres humanos buscan su propio beneficio y es


el prójimo quien funciona como un medio para alcanzar los fines que cada quien se propusiera,
la violencia y el fraude se convertiría en el camino más eficaz para el logro de esos fines. Tomó
la idea de nuclear un sistema de valores y un orden normativo. A partir de esta teoría
Durkheim señala la normalidad del crimen donde el castigo está destinado al hombre honesto,
es sobre todo una oportunidad de reafirmar el código moral. Las leyes aparecen como lo que
sobreviene a la desmoralización.

El esquema clasificatorio de Merton: se centra en la falta de integración entre metas y


medios como fuente de desviación. Manifiesta una desorganización por ausencia de
conformidad consensual y un fracaso del sistema en proveer nexos convenientes entre
procedimientos aprobados y propósitos declarados. Traspasa el mero reconocimiento de la
propensión a pecar y señala a la sociedad como instigadora del pecado. Tanto las metas
sociales como los medios prescritos están estipulados.

La controversia del funcionalismo contemporáneo ha girado en torno a la teoría


funcional de la estratificación, que sostiene que universalmente existe una diferenciación de
tareas y estas tienen desigual importancia para los sistemas en los que se encuentra. Por otra
parte, existe una desigual disponibilidad de personas con talento y formación para llenar esas
posiciones por lo que se recurre a recompensas desiguales a fin de asegurar que las posiciones
más importantes sean ocupadas por personas calificadas. Se discute que la universalidad de la
desigualdad sea inevitable.

Disfunciones de Merton: las sociedades complejas ofrecen pruebas de falta de


consistencia y de fallas sistémicas. Ciertas pautas de conducta pueden traer consecuencias
inequívocamente negativas para el mantenimiento del sistema y su operación efectiva. Levy
sugiere hacer de funcional una designación neutra, solo denominaría que ciertas
pautas producen causas más allá de ellas mismas. Si son positivas son
funcionales y si son negativas disfuncionales.

En las sociedades complejas existe el conflicto ya que estos tienen infinidad de fuentes
y de manifestaciones entre esos desacuerdos ideológicos. Ninguna sociedad hasta las
pretendidas sin clases, eliminan de hecho las fuentes de conflicto.

Tres tipos de análisis estructural comparativo:

1- Representa la extensión de la interpretación marxista a situaciones diferentes de la


dinámica del capitalismo industrial. Pretende demostrar que la estructura económica es
la fundamental y que la superestructura no económica es la dependiente.
2- Los archivos se organizan según el tema.
3- Los análisis de las consecuencias estructurales de la industrialización tienen tanto
precondiciones como consecuencias estructurales.

Levy distingue entre estructuras concretas y analíticas: las concretas son grupos con
miembros integrantes (familias) o son agregados (clases no organizadas), alguien pertenece
auna comunidad y no a otras, a un grupo ocupacional y no a otros. Las analíticas en cambio
son identificadas por sus funciones, así la estructura económica incluye las pautas que
interesan a la producción y distribución de bienes y servicios. No incluyen en ellas, la totalidad
de la economía. Ejemplo de esta última: las corporaciones profesionales son también cuerpos
políticos interesados en el acatamiento normativo y en el mantenimiento del orden, tienen una
diversidad de consecuencias sociales.

Funciones manifiestas y latentes de Merton: las primeras comprenden los propósitos


declarados de las organizaciones. Y las segundas, las consecuencias adicionales de las
actividades de la organización. La sustitución de las funciones latentes puede no ser buscada e
inofensiva por sus consecuencias. Ejemplos de intenciones reales ocultas de los participantes
activos y la apariencia de que se persiguen metas que el público en significativa proporción
considera adecuada: los fraudes que son la capa de colectas caritativas. Levy como crítica
establece que esto es una dicotomía simplificadora, introduciendo así el concepto de
eufunción: las funciones no intencionales pero reconocidas y las funciones intencionales, pero
no reconocidas. Ejemplo de las primeras: el profesor de escuela sabe que, y es consciente de
su función acerca de educar al niño, pero gasta más su tiempo en ser su custodio. Y de las
últimas podemos mencionar a un luchador que no se percata de su éxito cuando lo alcanza.

El funcionalismo evolucionista (Parsons): investiga los cambios regulares en sistemas


que mantienen su orden esencial. Se muestra menos abstracto con referencia a las
propiedades sistémicas requeridas, puesto que intenta estipular los prerrequisitos (la
comunicación basada en el lenguaje simbólico, organización del parentesco basada en el tabú
del incesto, una tecnología menos rudimentaria y religión) del desarrollo sociocultural y no de
la supervivencia sistémica como tal.

La perspectiva neoevolucionista: postula una adaptación espontanea con la aceptación


de innovaciones que tienen propiedades emergentes o útiles, o bien contempla la emergencia
del campo institucionalizado, lo que vuelve cuestionable la aplicación del modelo evolucionista
del cambio. La modernización es el primer proceso genuinamente global de cambio de
estructural, y lleva a producir un sistema mundial de una complejidad que rebasa al pequeño
grupo auto subsistente.
Una sociedad es un sistema social persistente y auto subsistente, ya que incluye una
pluralidad de individuos interactuantes orientados hacia el sistema de individuos en cuanto el
mismo sea en principio autosuficiente y capaz de sobrevivir al lapso de vida de los individuos
que en un momento dado lo componen. La comunicación se hace a través del lenguaje
simbólico. Para su supervivencia física requieren de los mecanismos elementales de
supervivencia (la comunicación y la inteligencia cognitiva).

Todas las estructuras son multifuncionales en parte porque ellas también poseen
propiedades sistémicas que tienen que ser satisfechas. El conflicto como una realidad
observada y que puede ser intrínseco al sistema.

Requisitos funcionales: adaptación, logro de metas, integración y latencia (incluye el


mantenimiento de pautas y administración de tensiones).

UNIDAD 3
Mills. La promesa
El hombre es contextual
Lo que los hombres corrientes saben y hacen está limitado por las órbitas privadas en
que viven. Esta sensación de estar atrapados comprende también cambios
estructurales de la sociedad. La forma de entender la vida de un individuo y la
historia de una sociedad es mediante la compresión de ambas. Pero esto no sucede
porque las personas no definen sus inquietudes ni imputan su bienestar a los
cambios históricos que moldearon a la sociedad en que viven, ya que no poseen la
capacidad mental para percibir la interrelación entre hombre y sociedad. Además, las
personas se ven abrumadas por la cantidad de información que están recibiendo
constantemente, lo cual domina su atención y sobrepasa su capacidad de
asimilación. Lo que necesitan es de una cualidad denominada imaginación sociológica
que les ayude a usar la información y desarrollar la razón para poder entender lo
que pasa en el mundo y a ellos mismos.

1 La imaginación sociológica permite a su poseedor comprender el escenario histórico más


amplio y la significación que tiene sobre la vida interior y la trayectoria exterior, ya que lo que
le sucede a los individuos está enmarcado en otros procesos. Permite captar la historia y la
biografía y la relación entre ambas dentro de la sociedad. En base a dicha relación deberían
desarrollarse todos los estudios sociales. El analista clásico poseedor de imaginación
sociológica debería responder a 3 tipos de interrogantes:
1. Una referida a la estructura de la sociedad particular que está analizando.
2. El lugar que ocupa la sociedad en la historia humana.
3. La variedad de hombres y mujeres que prevalecen en esa sociedad y en
ese período.
Estas parten de la necesidad de saber el significado social e histórico del individuo en la
sociedad y el período en que tienen su cualidad y su ver. 
El individuo y la sociedad no pueden entenderse por separado.
Este análisis le permite pasar de una perspectiva a otra, le otorga un nuevo modo
de pensar y un nuevo sistema de valores; en conjunto, les permite comprender el
sentido de las ciencias sociales.

2 La imaginación sociológica opera con una distinción entre “las inquietudes personales
del medio” y “los problemas públicos de la estructura social”.
Las inquietudes se presentan en el carácter de un individuo y en el ámbito de sus
relaciones inmediatas con otros; son asuntos privados, y su enunciado y resolución le
corresponden al individuo. Los valores de un individuo le parecen a éste que están
siendo amenazados.

Los problemas trascienden el ambiente local del individuo y el ámbito de su


vida interior. Es un asunto público en el que se ven amenazados los valores de un
conjunto de personas. Muchas veces implica una crisis en los dispositivos
institucionales y contradicciones.
Para entender mejor la distinción, se nombran a continuación algunos ejemplos:
 Ejemplo relacionado al trabajo.
Cuando en una ciudad de 100.000 habitantes, solo uno se encuentra
desempleado: inquietud. Si el número es mayor, si la mitad de la población se
encuentra desempleada, implica un problema.
 Ejemplo guerra.
La inquietud de la guerra puede estar relacionada a cómo sobrevivir, mientras que los
problemas se refieren a sus causas, a los efectos que tendrá en las instituciones de la
sociedad, etc.
 Ejemplo matrimonio.
En el matrimonio de una pareja, se pueden presentar inquietudes personales. Se
vuelve un problema cuando la cifra de divorcios es proporcionalmente alta en
relación a la cantidad de matrimonios, lo cual puede detonar un problema en la
institución de la familia, por ejemplo.
 Ejemplo metrópolis.
La solución personal ante la inquietud de vivir en una ciudad capital es tener las
comodidades suficientes como para sobrellevar el estrés que implica. En cambio,
el problema público que presentan las ciudades implica su reestructuración para
facilitar la vida de las personas, lo cual involucra examinar los problemas políticos y
económicos que conllevan.
Con los ejemplos se puede comprender que los cambios de muchos medios
personales son comprendidos mediante el análisis que va más allá de ellos. Además,
a medida que la sociedad se complejiza, el número y la variedad de los cambios
estructurales aumentan. Poseer imaginación sociológica, entonces, implica darse
cuenta de la idea de estructura social y descubrir los vínculos entre una gran
diversidad de medios.

Para poder formular inquietudes y problemas hay que preguntarse qué valores se ven
amenazados y apoyados por las tendencias características de nuestra época, y qué
contradicciones notorias de la estructura pueden estar implicadas. Cuando la
gente estima una tabla de valores y no advierte ningún tipo de amenaza contra
ellos, experimenta una situación de bienestar. Cuando estima valores y ve que
estos se encuentran amenazados experimenta una crisis. Y si ello afecta a todos
sus valores experimenta pánico. Pero en el caso que no estime sus valores ni
perciba ninguna amenaza, es la experiencia de la indiferencia. Si no siente
estimación por ningún valor, pero percibe una amenaza, experimenta malestar.

Bienestar Ninguna amenaza contra los valores.

Crisis Algunos valores se ven amenazados

Pánico Todos sus valores se ven amenazados

Indiferencia No siente estimación por ningún valor, ni percibe ninguna amenaza.

Apatía No siente estimación por ningún valor, pero parece afectar a todos los
valores.

Malestar No siente estimación por ningún valor, pero percibe agudamente una
amenaza

Desaliento Sentimiento de que nada marcha bien; no se ha dicho los valores que
siente amenazados ni quien los amenaza.

En los años 30, los valores amenazados eran fáciles de ver y estimados por todos, al
igual que las contradicciones estructurales que los amenazaban. Pero los valores
amenazados en la era posterior a la Segunda Guerra Mundial no. Las inquietudes
no se formulan y el malestar público y las decisiones de enorme importancia
estructural no llegan a ser problemas. Por eso, actualmente vivimos en un tiempo
de malestar e indiferencia.
Los problemas actuales salieron del campo externo de la economía y se relacionan
con la calidad de la vida individual. Además, muchos grandes problemas públicos e
inquietudes
privadas se definen como cuestiones psiquiátricas, en un intento de evitar los
grandes problemas de la sociedad moderna. El principal peligro para el hombre
reside en las fuerzas ingobernables de la sociedad contemporánea misma, en la
naturaleza misma del hombre y las condiciones de su vida.

La primer tarea política e intelectual del científico social consiste en poner en claro
los elementos de malestar y las indiferencias contemporáneas. Así, las ciencias
sociales se convierten el común denominador de nuestro período cultural, y la
imaginación sociológica en la cualidad mental más necesaria.

4 En todas las épocas intelectuales hay un común denominador que es una cualidad mental
que promete la comprensión de nuestras propias realidades intimas en relación con las más
amplias realidades sociales. Rige la vida cultural y regula los términos según los cuales los
hombres formulan sus convicciones, que están dados por el estilo de pensamiento. Esto no
significa que no existan otros estilos de pensamiento y de sensibilidad. También, hay que tener
en cuenta la existencia de modas intelectuales que dejan poca huella intelectual.
En las épocas modernas, la ciencias físicas y biológicas han sido el principal
común denominador. Actualmente, el significado cultural de la ciencia física se está
haciendo dudoso e insuficiente, y sus progresos no han sido sentidos como solución a
ninguno de los problemas, sino que han suscitado más, tanto intelectuales como
morales. Por lo tanto, el autor considera que la imaginación sociológica es el actual
común denominador. Las cualidades de esta imaginación se convirtieron en rasgos
fundamentales de esfuerzo intelectual y de sensibilidad cultural en una gran diversidad
de expresiones. Promete la comprensión de nuestras propias realidades íntimas en
relación con las más amplias realidades sociales. 

5 El propósito de Mills es el de definir el significado de las ciencias sociales para las tareas
culturales de estos tiempos. Considera que las ciencias sociales consisten en lo que los
científicos sociales están haciendo en el presente, y lo que han hecho los científicos del pasado,
según la tradición de la disciplina que eligieron. 
La interpretación del autor se opone al concepto de conjunto de técnicas burocráticas
y pretensiones metodológicas que impiden el trabajo con conceptos difíciles o
triviales, interesándose en pequeños problemas sin relación con los problemas
públicamente importantes. 

Para él, el análisis social clásico presenta las siguientes características:

 Es una serie de tradiciones definibles y usables.


 Su característica esencial es el interés por las estructuras sociales históricas.
 Sus problemas tienen una relación directa con los urgentes problemas
públicos y las insistentes inquietudes humanas.
Su tarea es develar lo que está atrás de lo que se evidencia, y la promesa es
comprender la sociedad desde un marco histórico.

6 La sociología es el centro de reflexión acerca de la ciencia social; es el centro de interés


en cuanto a los métodos y a la “teoría general”. 
Hay una gran diversidad de trabajo intelectual que toma parte en el desarrollo de la
radición sociológica, pero lo que actualmente es considerado de esta forma, se ha
movido entre tres tendencias:
1. Hacia una teoría de la historia. Trata y emplea materiales del pasado,
y es sistemática ya que lo hace con el objeto de distinguir las etapas del
curso de la historia.
2. Hacia una teoría sistemática de la naturaleza del hombre y de la sociedad. Es
una visión estática y abstracta de los componentes de la estructura social, en el
que las concepciones se convirtieron en conceptos.
3. Hacia el estudio empírico de los hechos y los problemas
sociales contemporáneos. La sociología como estudio de algún sector
especial de la sociedad, se convierte en una especie de datos de
ambiente sin relación entre si y con frecuencia insignificante.
Las peculiaridades de la sociología pueden entenderse como la deformación de
estas tendencias tradicionales.
La desventaja de la sociología recae en que entre tanta abundancia de
investigaciones, los científicos se impacientan y tienen la urgencia de investigar que
pierden el dominio sobre un legado verdaderamente valioso. Pero la ventaja es que la
tradición sociológica contiene las mejores formulaciones de la plena promesa de
las ciencias sociales en conjunto.

Lahire. En defensa de la sociología


Castigar sin entender
Quienes denuncian los intentos de la sociología por entender, querrían poder juzgar
sin explicaciones, sentirse plenamente justificados para reprimir, sin recordar que
los crímenes tienen causas, como cualquier acto humano. Quienes reducen las
ciencias sociales a una cultura de la excusa confunden el plano no normativo
(propio del conocimiento científico, bajo el régimen de verdad o falsedad) con el
plano
normativo (propio de la justicia, lo que está bajo el régimen del bien y el mal). El
científico estudia “lo que es”, no busca evaluar si es “bueno” o “malo”. Decir que
entender es lo mismo que des responsabilizar equivale a reducir la ciencia al
derecho.
Andrew Abbott, entiende a la ciencia social como normativa, como lo que está bajo el bien y
el mal y lo distingue de lo empírico que está bajo el régimen de la verdad o falsedad.
Ejemplo: al dibujar una pared según la perspectiva que se lo mire puede ser considerado un
hecho de vandalismo o una expresión de arte. El sociólogo debe contentarse con analizar
tales luchas, así como todas las consecuencias que su resultado conlleve en cuanto a la
manera de tratar los dibujos en cuestión y a sus autores. Abbott confunde lo que Max Weber
se esforzó por distinguir entre juicio de valor y las relaciones de valores, si bien el
investigador siempre manifiesta su relación con valores mediante la elección de sus objetos
de estudio y la manera en que los aborda, su trabajo consiste no consiste en determinar lo
que está bien o está mal (juicio de valor).

Entender sin juzgar


El novelista Georges Simenon atribuyó al comisario Maigret (personaje de una
de sus obras) el objetivo de intentar comprender los mecanismos que llevan al
crimen, insertándose en el universo de las víctimas, los sospechosos y su
entorno.
Prefiere investigar a descubrir, prefiere el entendimiento global de un universo social
y mental antes que los estrictos mecanismos policiales, que solo retienen lo que
puede inculpar o absolver. En otras palabras, Maigret presenta características no
normativas de un sociólogo, en vez de las normativas que podrían esperarse de
su personaje.
Simenon cree posible entender los actos a partir del conocimiento de los medios
sociales y el lugar que ocupan en ellos las personas que llevaron a cabo los
hechos. Hay que entender qué llevó al delincuente a actuar de ese modo, su
historia, sus conflictos. Lo mueve la búsqueda de un pasado, no solo individual
sino también colectivo (familia), afirma que “hay que mirarlos como seres que
existen y hay que mantener dentro de ciertos límites o castigarlos por el bien del
orden establecido”. 
Tarea del sociólogo: este debe abstenerse a realizar cualquier tipo de juicio y no debe
pronunciarse sobre la necesidad de castigar o no por el bien de la sociedad. Puede buscar y
conocer los efectos diferenciables de los diversos tipos de tratamiento de los criminales, pero
no decir que hay que hacer y cómo hay que hacerlo.

¿Para qué sirve entender?

Sirve para resolver los problemas de un modo que no implique la exclusión (encarcelamiento,
confinamiento psiquiátrico) o la destrucción del otro (pena de muerte). Probablemente esta sea
una de las lecciones políticas más importantes de las ciencias sociales. 
Entenderlos significaría la posibilidad de actuar y evitar nuevos problemas. Sin dudas,
describir a estos individuos como bárbaros y pensando que sus actos son el
resultado de su voluntad individual, satisface la necesidad de castigo, pero no
contribuye a determinar cómo impedir el surgimiento de una serie de individuos y
situaciones similares. Solo el distanciamiento y la des individualización del
problema permiten considerar soluciones colectivas y duraderas. La toma de
distancia enseña volver a situar las intenciones individuales en las redes de
interdependencia pasadas y presentes que las estructuraron y las posibilitaron.
La actitud científica ante la vida está ampliamente aceptada, mientras que en el
mundo social abundan las actitudes emocionales. La ciencia requiere un proceso
de distanciamiento y control de los afectos (proceso de civilización). Hay que alcanzar
un alto grado de distanciamiento, dominio sobre uno mismo y neutralidad emotiva
para reconocer que los acontecimientos que provocan sufrimiento pueden ser el
resultado de una multiplicidad de causas, no controlables por pura voluntad.

Bauman. La sociedad sitiada/Tras la


esquiva sociedad
El lugar de la sociología ha sido el ágora, es decir aquel lugar de encuentro de lo
público y lo privado, en busca del entendimiento común. Por consiguiente, la tarea
de
la imaginación sociológica consiste en una traducción simultánea y recíproca entre
las esferas de lo privado y el público; en otras palabras, la traducción de
problemas enfrentados individualmente en otros asumidos colectivamente y de
manera pública; y de modo inverso, la traducción de intereses públicos en
estrategias vitales de carácter individual. La materia prima procesada por la
imaginación sociológica es la experiencia humana, y el producto final es la “realidad
social”.
LA IMAGINACIÓN ADMINISTRATIVA
La imaginación administrativa es un tipo de imaginación destinada a conducir al
“consenso ortodoxo”, en el marco de un “espacio principalmente coordinado”. 
Parsons rearticuló la historia de la sociología como un largo camino hacia un destino
predeterminado, concretamente el “sistema”, apoyado en dos pilares: por un
lado, la estructura sujeta a los actores en su exterioridad con límites para sus
libertades; y por el otro lado, la cultura se dirigía a su interior, a ese lugar en el que
los deseos y propósitos son sembrados. Además, este autor le atribuyó un propósito a
este sistema:
la supervivencia, es decir mantenerse vivo por el mayor periodo de tiempo
posible sufriendo el menor grado de cambio posible. Por eso es que diferenció
entre: cualquier cosa que ayudara a preservar su estado y garantizar su
inmunidad era considerado “funcional”; en cambio cualquier elemento que
ejerciera presión exigiendo cambios y agregándole tensión al sistema se
consideraba “disfuncional”. A modo de conclusión, podemos destacar que la
estructura y la cultura eran los principales dispositivos en esta tarea, y aunque su
modo de funcionamiento era muy diferente, coincidían en un mismo objetivo:
mantener la estabilidad de las cosas.
Este modelo de realidad social propio de la fase sólida de la modernidad implica
que la principal presión que probablemente sujetaría a los hombres sería el
requisito de
conformidad con ciertas normas; bajo ningún punto de vista se permitiría la posibilidad
de un ajuste individual a las normas. La modernidad fue una respuesta a la
desintegración gradual, aunque alarmante del antiguo régimen; éste se había
derrumbado mucho antes de que los revolucionarios se atrevan a entrar donde nadie
se había atrevido a hacerlo: la apertura de un territorio antes inexplorado que
contemplaba la instauración de un nuevo orden diseñado, supervisado y administrado
por el hombre, para legislar sobre los asuntos humanos.
La modernidad nació entonces, bajo este orden visto como una tarea sujeta al diseño
racional y a la supervisión constante, y sobre todas las cosas a la administración
quisquillosa. Se propuso la eliminación de lo accidental y lo contingente, hacer de lo
incierto algo predecible, inyectarles a las cosas el reconocimiento de un propósito
determinado, obligándolas a cumplirlo.
La sociología se propuso explorar las maneras en que la libre voluntad se emplea
en la producción de normas y regularidades; estos hallazgos serian útiles para las
construcciones de nuevas regularidades y patrones, y también para fijar los ya
establecidos. El pensamiento social se basa en el deseo de “conocer la naturaleza
para dominarla”, la naturaleza significa ejercer el dominio sobre la especie humana, lo
cual a su vez es guiar la vida de cada individuo.

Hace siglos, la enseñanza se impartía siguiendo los resultados de los


experimentos con ratas, en los cuales se enviaba a un grupo de ratas hambrientas
en busca de comida a través de los laberintos hábilmente construidos; este
laberinto era una réplica en miniatura del mundo de los humanos.
Consideraban que el hecho de que no pueda establecer lo que sucede en el
cerebro de una rata es problema menor, ya que cosas tan misteriosas como los
pensamientos pueden dejarse de lado sin que se vea afectada la precisión del
proceso.
Durkheim y Weber coincidían en que los actores individuales no son buenos jueces de
las causas que motivan sus propias acciones, por lo que sus juicios individuales
no son material con el que pueda hacerse una buena descripción sociológica de la
“realidad social” y es mejor dejarlos de lado. 
El rol de la sociología entonces, consistía en encontrar el camino para la
implementación de este proyecto, el cual muchas veces fue llamado modelo de control
masivo. Para poder llevarlo a cabo, las estrategias a seguir por la sociología
deberían ser
puramente normativas y nomológicas, si es que se pretendía que fuera útil para las
necesidades de la administración.
Los fundadores de la sociología moderna tenían sus dudas con respecto al buen juicio
del proyecto que habían examinado dándole el nombre de “realidad social”; y
particularmente Paul Lazarsfeld tenía como única preocupación que la sociología
no estuviera capacitada para llevar a la sociedad al nivel de confiabilidad y
predictibilidad de una máquina, debido a su juventud.
Parsons, planteo que la administración del sistema constituiría la verdad esencial de la
realidad social, y a partir de esto se entiende que la tarea sociológica debía consistir
en el develamiento de los secretos del saber administrativo; este saber consistía en
proveer al sistema todos los medios que este necesitaba para mantener su equilibrio,
es decir para mantenerse idéntico a sí mismo.
Y, por último, a modo de conclusión Mills afirma que al decir que el verdadero
objetivo de la ciencia social es predecir, significa sustituir lo que debería ser una
elección moral razonada por un eslogan tecnocrático; es decir que la sociología al
dominar la conducta de los humanos elimina lo que debería ser una elección libre y
razonada del individuo.

EL DERRUMBE DE LA INGENIERIA SOCIAL


Precisamente cuando la mayoría de los miembros de la comunidad sociológica
estaban puliendo los últimos detalles de la administración científica oculta bajo la
denominación de “ciencia conductista”, las realidades sociales comenzaron a
enloquecer.
La sustancia que alimenta a la Segunda Fase de la Gran Transformación es el
derrumbe del proyecto de la ingeniería social, de los grandes modelos que postulaban
un orden social prediseñado, cuidadoso y ampliamente administrado. Por
consiguiente, volvió
la administración cada vez mucho más negada, dejando todo librado a su propio equilibrio;
esta dominación supo encontrar estrategias más suaves, menos trabajosas, incómodas y
coercitivas.
Al parecer, el capítulo de la historia marcado por el orden disciplinado está a punto de
cerrarse. Ya no corresponde a los administradores mantener a sus subordinados en
vereda y guiarlos en cada movimiento de sus vidas, sino que ahora los subordinados
deben competir con sus pares para llamar la atención de sus superiores.
La disolución de las rutinas de matriz administrativa fue aclamada como un
hecho histórico de “empoderamiento” a la humanidad, el triunfo de la autenticidad
individual. Por consiguiente, la estrategia menos riesgosa considerada en esos
momentos fue: una identidad flexible, una disposición constante a cambio y una
capacidad de cambiar sobre la marcha, dejando atrás los estándares inamovibles
y la lealtad incondicional a las costumbres.
Como el contexto de la vida humana y el significado de una estrategia de vida
razonable ha cambiado, la sociología debe encontrar un reflejo en los intereses y
estrategias de su ciencia, dado que el profundo cambio en la composición de las
estrategias de vida la modifica a ella en sí.
SURFEAR POR LA RED
Ed McCracken planteó los lineamientos de las bases de una nueva filosofía
empresarial, en donde la clave para obtener una ventaja competitiva no era
reaccionar al caos, sino más bien producir ese caos. Entonces, el cambio se volvió
imperativo y un fin en si mismo que no necesita justificación, y de modo inverso
podemos decir que la permanencia llama al desastre.
Por consiguiente, adquirir compromisos a largo plazo o depender de compromisos
de otros, está considerándose cada vez más una conducta irracional, debido a que los
marcos que solían a los proyectos de vida tanto sólidos como duraderos, se han
vuelto frágiles y quebradizos, a pesar de ser útiles en el momento. Esta fragilidad
en los marcos la denominan “la desaparición de la sociedad”; es decir que
cualquiera sea la “totalidad”, esta se compone de destinos individuales que se
encuentran por un instante para continuar luego cada uno por su propio camino.
Para dar cuenta de lo esencial de sus propias acciones emplean metáforas como
“bailar” o “surfear”, prefieren hablar de “influencias” antes que de control, liderazgo
y administración. Persiguen formas de organización más maleables, es decir que se
pueden ensamblar, desmanteles y rearmar sobre la marcha. Esta especie de
ensamblaje fluido e inestable es la que mejor se ajusta a su visión del mundo como
algo múltiple, complejo y veloz; y por lo tanto, ambiguo, confuso e incierto. 
Podemos concluir en que la organización empresarial tiene un elemento
de desorganización inherente, que plantea que cuanto menos sólido y más fluido es, mejor.
Esto se debe a que cualquier tipo de saber puede envejecer rápidamente, por eso el rechazo a
aceptar los saberes establecidos. Por esta razón se hace una distinción entre el savoir faire
(saber hacer) y el savoir etre (saber ser):
 El savoir faire es la capacidad de hacer ciertas cosas, que está siendo desplazado
por…
 El savoir etre es el saber cómo moverse en el mundo, el ser capaz de
comunicarse fácilmente y de tener un amplio circuito de personas bien
conectadas con las cuales comunicarse; en otras palabras, comporta la
capacidad de construir una red de comunicaciones de expansión. Este
saber, se está convirtiendo en el factor decisivo para el reconocimiento,
ascenso y enriquecimiento.
El pasaje del savoir faire al savoir etre se resume en la flexibilidad del empleo, en
la capacidad para aprender y adaptarse a las nuevas funciones más que a la
posesión de ciertas capacidades y calificaciones adquiridas, en la capacidad de
generar confianza, de comunicarse. Este desplazamiento es una manifestación
del “nuevo espíritu del capitalismo”.
A partir de todo esto, se han empleado nuevas formas de lenguaje y una de ellas
fue el término “sociedad” el cual fue ridiculizado y tuvo que retirarse, para ser
reemplazado por la “red”. El autor cuando habla de “surfear en la red” implica
transitarla rápidamente o superficialmente, más que involucrase plenamente en ella,
como sería en la sociedad sólida.

Una de las más importantes metáforas para entender la volatilidad del mundo actual, es la
que ha surgido a través de la investigación del sociólogo y filósofo contemporáneo Zygmunt
Bauman. Ésta consiste en la comparación de dos fenómenos transitorios en el mundo, la
modernidad y la postmodernidad.

A estos fenómenos, él los ha categorizado como “modernidad sólida” y “modernidad


líquida”. La diferencia entre ambas, se remite a evidenciar la estabilidad y certidumbre con
que contaban las etapas de la vida, en donde sus particularidades estaban definidas por el
poder totalitario, la constante preocupación por el orden establecido, la división de trabajo y
los valores inamovibles. Fotos en wsp

Bourdie, Chamboredon, Passeron. El oficio de


sociólogo
Construcción del objeto
La ciencia construye su objeto de estudio a partir de las preguntas que le planteamos
al objeto cotidiano (una “problemática teórica"). Se deben comparar las diferencias
entre el objeto real, preconstruido por la percepción ingenua, y el objeto científico, un
sistema de relaciones expresamente construido. El científico estará creando el objeto
de estudio indirectamente mediante estas preguntas, constituyendo a su vez a la
ciencia.
La primera ruptura epistemológica con los objetos preconstruidos de la sociología
espontánea se produce con la necesidad de construir denominaciones específicas
que, aunque estén compuestas por palabras comunes, construyen nuevos objetos al
establecer nuevas relaciones entre los aspectos de las cosas (un ejemplo de esto
puede ser la creación del concepto “delito de guante blanco” para referirse a
aquellos crímenes no violentos cometidos por políticos, generalmente con un objetivo
financiero). Existen dos tipos de conceptos: los operatorios, que poseen un rigor
analítico y formal, y
los sistemáticos, que poseen un rigor sintético y real debido a que se utilizan
para referenciar permanentemente el sistema total de sus interacciones. Estos
conceptos superan a las nociones
Las abdicaciones del empirismo
En la actualidad científica, no hay observación o experimentación que no implique
una hipótesis previa. Se dice que el proceso científico es un dialogo entre
hipótesis y experimentación, aunque en este intercambio lo real nunca tiene la
iniciativa (solo puede responder si se lo interroga). 
Además de la parte real, también es necesaria la teoría. El marco teórico domina al trabajo
experimental desde el comienzo hasta el fin, y es esencial para ajustar instrumentos e
interpretar (de forma propia) las lecturas obtenidas. 

Hay que recordar que hasta los datos más completos no podrían responder de
forma completa y adecuada a otros interrogantes para los cuales no han sido
construidos. Estos se obtienen por aplicación de estadísticas, que implican
supuesto teóricos que dejan escapar información que hubiera podido captar otra
construcción de los mismos
hechos. Los datos sin una hipótesis que los cuestione, son inútiles.

Bourdieu argumenta que la maldición de las ciencias del hombre es la de


ocuparse de un objeto que “habla”, en contraposición a la visión empírica de las
ciencias naturales donde “los hechos no hablan”. Cuando un sociólogo quiere
sacar de los hechos la problemática que le permita construirlos y analizarlos, corre
el riesgo de sacarlos de la boca de sus informantes, sustituyendo a sus prenociones
por las prenociones de quienes estudia.

Hipótesis o supuestos 
Toda práctica científica implica supuestos teóricos, y el sociólogo debe moverse
entre estos interrogantes inconscientes y un cuerpo de hipótesis construidas
basadas en esta misma teoría.
La mala elección de la técnica también puede afectar negativamente la
investigación: el muestreo al azar, por ejemplo, pueden aniquilar el objeto de la
investigación si ese
objeto debe algo a la estructura de grupos que el muestreo busca evitar. En estos
casos, sería mejor usar un sondeo por sectores.
La falsa neutralidad de las técnicas: objeto construido o artefacto
BOURDIEU explica la diferencia más grande entre ambos términos se encuentra
en el valor teórico: el sociólogo somete al objeto a una construcción basada en un
marco teórico, pero en cambio, al artefacto ni siquiera lo cuestiona. El artefacto es
una construcción vergonzosa, caricatura del hecho metódica y conscientemente
construido, es decir de un modo científico.
Al no haber un registro perfectamente neutral, no existen preguntas neutrales. El
sociólogo debe someter sus propias interrogaciones a la interrogación sociológica para
poder hacer un análisis neutral de las respuestas que provoca. La misma pregunta
puede producir una respuesta completamente distinta en dos personas que
pasaron por lo mismo (ej.: la pregunta “¿Trabajo hoy?” cambia de sentido según lo
que el entrevistado considere trabajo). 
Siempre que el sociólogo es inconsciente de la problemática que incluye en sus
preguntas, le es imposible comprender aquella que los sujetos incluyen en sus
respuestas. Las técnicas de la sociología empírica crean situaciones de
experimentaciones ficticias diferentes de las experimentaciones sociales reales. Cuando
las conductas estudiadas dependen de la coyuntura, las opiniones captadas no valen
más allá de los límites de esa situación.
Bourdieu considera que el cuestionario excluye y distorsiona varios aspectos
de la información. Sus limitaciones son:
 Ya que la realidad altera la perspectiva de los individuos, las preguntas que
realice el sociólogo no van a ser captadas de manera homogénea.
 Las normas sociales afectan las preguntas.
 El investigador omite preguntas (intencionalmente o no) debido a su
concepción científica
 No es el más eficiente ni el más vasto/rápido de realizar 
Otro error que puede cometer el sociólogo al recolectar información es centrarse
demasiado en el principio de neutralidad ética, según el cual todos los
comportamientos culturales poseen el mismo valor. En realidad, los grupos le
otorgan un valor distinto a cada uno, y este posee un papel importante en su
composición (por ejemplo, una cantata de Bach no va a tener el mismo valor que
una canción de moda pasajera). El sociólogo que ignora estas diferencias en
valores establecidas por los sujetos, realiza una trasposición ilegitima, omitiendo
información importante.
Para cerrar esta sección, se podría decir que no hay una única forma de
contribuir al conocimiento del objeto, sino que este se debe apreciar desde
distintas técnicas que contribuyan de forma variable a este conocimiento.
La analogía y la construcción de la hipótesis
Todo objeto científico debe ser construido deliberada y metódicamente. Para esto
puede usarse el método del tipo ideal, el cual Weber consideraba una guía para la
construcción de hipótesis. Se debe crear una construcción concebida para confrontarla
con la realidad. Permite medir la realidad porque se mide con ella y se determina al
determinar la distancia que separa al tipo ideal de lo real.
El texto confronta al tipo ideal con las construcciones especulativas de la filosofía
social. Estas últimas son pura especulación, incapaz de ser demostrada, mientras
que los tipos ideales son representaciones coherentes que pueden ser
estudiadas.
Otra herramienta que puede usar el sociólogo es la analogía, una forma legítima
de comparación y un medio práctico para conseguir que las cosas se vuelvan
comprendidos o entendidos. A través de la comparación con otras ciencias se pueden
crear relaciones de semejanza, siendo esto una gran fuente para la creación de
hipótesis.
Modelo y teoría
Se llama modelo a cualquier sistema de relaciones entre propiedades
seleccionadas, abstractas y simplificadas, construido con fines de descripción,
explicación o previsión, y por ello, plenamente manejables. Proporciona el
sustituto de una experimentación a menudo imposible en los hechos y da el
medio de confrontar con la realidad las consecuencias que esta experiencia
mental permite separar completamente.
La ciencia social no se construye a partir de los datos empíricos, sino que el
objetivo es construir un modelo, estudiar sus propiedades y las diferentes maneras en
que reacciona en el laboratorio, para aplicar estas observaciones a la interpretación de
lo que sucede empíricamente. Un modelo, entonces, obtiene su valor en los
principios de su construcción, no en su grado de formalización.
Construir un modelo puede ayudar a tratar diferentes formas sociales y hacer surgir
por ello propiedades ocultas que no se revelan más que en la puesta en relación de
cada una de las realizaciones (o sea, por referencia al sistema completo de
relaciones).

UNIDAD 4

Rober Castel: La sociología y la rta a la


demanda social
Robert Castel vivió entre 1933 y 2013, en Francia; estaba orientado hacia la filosofía
hasta que surgieron sus intereses por la sociología tras el Mayo del ´68 y gracias
a su amistad con Pierre Bourdieu. La demanda social que dirigió el nuevo interés
del autor fue la cadena de protestas que se llevaron a cabo en Francia,
manifestándose en contra de la sociedad del consumo.
Pero… ¿qué es la demanda social? El autor la presenta como aquella que debe
dirigir a la sociología respecto a los problemas cotidianos que debería abordar
para sus investigaciones; es la zona fértil del cuestionamiento que alimenta a la
ciencia, desde donde debe partir y a donde debe volver. Las demandas pueden
provenir no solo de los grupos dominantes, sino también de las incógnitas planteadas
por las personas ajenas al campo científico, y pueden ser explícitas o implícitas. De
todas formas, la demanda social nos interpela.
Los sociólogos tienen opiniones antagónicas respecto a este concepto. Hay
quienes se encuentran a favor de satisfacer esta demanda y hay quienes se
encuentran en contra. Esta división se produce ya que las investigaciones en
ciencias sociales se ven condicionadas por:
 La falta de financiamiento que obliga a los investigadores a recurrir a organismos
públicos o privados, y satisfacer sus requerimientos. 
 Los medios de comunicación, que representan la forma de difundir sus
trabajos, pero que al mismo tiempo realizan simplificaciones excesivas e
interpretaciones parciales del trabajo sociológico, y hasta pueden llegar a
tergiversar la información. 
Ante esto, los sociólogos son libres de elegir trabajar o no de forma autónoma, y
responder o no la demanda social. 
Castel, argumenta que es necesario responder a la demanda social, que se debe
rendir cuentas a la sociedad y no solamente a las instituciones de control y a su
grupo de pares. Prefiere que un trabajo de investigación contribuya a alimentar el
debate público, aunque sea a costa de simplificaciones o deformaciones; más que
quedarse encasillado en la semi- confidencialidad de los intercambios entre
investigadores. Si el investigador es fiel a sus creencias, su punto de vista podría
ayudar a interpretar la realidad. 
Ante la demanda social, entonces, la sociología tiene como objetivo intentar
comprender y hacerse cargo de lo que le preocupa a la gente, volverlos inteligibles y
orientar a los que toman las decisiones. Estas preocupaciones son llamadas
“configuraciones problemáticas”, las cuales perturban la vida social. Se podría
decir que el objeto de estudio de la sociología son las configuraciones
problemáticas.
Para Castel, las investigaciones que no están marcadas por esta problemática no
deben ser calificadas como investigaciones sociológicas. Esto no quiere decir que
no tengan derecho a existir y a ser formuladas, sino que pertenecen a otros campos
que, en conjunto con la sociología, no son autónomos sino complementarios. 
De esta forma nos acercamos a una sociología crítica. Esta rechaza la representación
unidimensional de la realidad social, es decir, puramente empirista, y considera que,
al estar atravesada por conflictos y contradicciones, las interpretaciones serán en
función a la posición que ocupan los protagonistas.
Como ya vimos, los dominantes buscan legitimar su punto de vista. Los sociólogos
deberían ser libres de desprenderse de esta restricción y poder optar por cualquier
punto de vista; de esta forma habría un avance en el conocimiento sociológico. De
hecho, gracias a esto, hoy en día existen investigaciones acerca de temas que eran
considerados tabú, lo que provoca que haya más conocimiento. De todas formas, este
avance se contradice con el tratamiento retrógrado que realizan las instituciones sobre
algunos ciudadanos de las sociedades democráticas.
También el autor considera que no existe postura neutra frente a una situación, ya que
no tomar una postura es justamente tomar una postura porque no se cuestiona lo
dado y de esta forma se lo garantiza.
Con este nuevo concepto de la demanda social, se reescribe la función del sociólogo.
Su compromiso, fuera de las posiciones partidarias que pueda llegar a tomar
frente a una configuración problemática, es el de realizar un diagnóstico preciso de la
situación actual, el cual puede ser argumentable y defendido. 
Relacionando el compromiso del sociólogo con la postura neutra, no se le puede pedir
al investigador que abandone su punto de vista porque él es un sujeto social.
En resumen, se puede observar que Castel considera a la sociología como una
ciencia que debe responder a las demandas sociales. Esto se puede ver en las
investigaciones que realizó sobre la exclusión. 
Como dijo Weber, una ciencia no solo es reconocida por su metodología sino también
por los conceptos con los que trabaja. Si estos son ambiguos pierden validez. Esto
sucede con el concepto de “exclusión”, el cual tiene una heterogeneidad de usos, ya
que es asociado a una multiplicidad de miserias en el mundo. 
 Si una persona pierde su trabajo es exclusión.
 El joven de los suburbios es excluido.
 El sin techo también es excluido.
Por lo tanto, se nombra de la misma forma a situaciones distintas y se les quita el
poder analítico, ya que se adjudica una calificación negativa que nombra la falta sin
decir en qué consiste ni de dónde proviene. Al utilizar de forma desmedida la
palabra “exclusión”, se deja de lado el análisis de aquello que la compone. 
Estas situaciones límites solo toman sentido si las reubicamos en un proceso. La
exclusión se da como un estado de todos aquellos que se encuentran por fuera
de los circuitos activos de intercambios sociales, y es el resultado de diferentes
trayectorias que los marcan, que se traducen en una degradación con respecto a
una situación anterior. Por ejemplo, los sujetos pueden devenir vulnerables por la
precarización de las relaciones laborales y finalmente caer en la “exclusión”. 
Por lo tanto, el trabajo de la sociología consiste en analizar los factores que preceden
a la exclusión. Si focalizamos la atención en el efecto (la exclusión) perdemos el
poder de reflexión acerca de las causas (las dinámicas sociales que son
responsables de los desequilibrios actuales).
El autor analiza un caso particular de tratar la exclusión: las políticas de
inserción. Al comienzo, se pensaron como estrategias limitadas en el tiempo, con
el fin de ayudar a pasar el mal momento de la crisis, y nivelar la sociedad. Hoy en día,
estas situaciones se instalaron y lo provisorio se transformó en una regularidad. De
esta forma, si bien las políticas no son inútiles, se atienen a intervenir puntualmente
en las consecuencias de las situaciones y no en los procesos que las producen.
El objetivo de la acción social es delimitar las zonas de intervención que pueden dar
lugar a actividades de reparación, y que no superen sus recursos. Si dejamos de
utilizar el término exclusión para abarcar todas las problemáticas sociales, y
empezamos a categorizarlas y aislarlas, nos damos los medios para una toma de
responsabilidad específica y cuidadosamente dirigida. Además, así se priorizaría
a los grupos más desfavorecidos. 
El objeto clásico de la acción social se caracterizaba por un déficit personal que lo
volvía inepto para seguir el régimen común, ya sea por una discapacidad, un
desequilibrio psicológico o una inadaptación social. Pero la mayor parte de las
nuevas poblaciones con problemas son invalidadas por la coyuntura, es decir, la
transformación reciente de las reglas del nuevo juego social y económico que los
margina. Los perfiles propios de este nuevo público son desconocidos. Castel los
denomina como los “supernumerarios” y plantea que las razones de su exclusión
se deben a las nuevas exigencias de
competitividad, competencia y la reducción de las oportunidades de empleo, lo cual
provoca que no haya más lugar para todo el mundo en la sociedad. 
Castel llega a la conclusión que las políticas de inserción, o toda lucha contra la
exclusión, debe tener intenciones tanto reparadoras como preventivas. Si
solamente son reparadoras, desplaza el tratamiento social sobre los márgenes, pero
resulta más fácil y realista intervenir en los efectos de una disfunción social que
controlar el proceso que la desencadena. Hacerse cargo de los efectos es una
medida a corto plazo y superficial, mientras que dominar el proceso requiere un
análisis más profundo para encontrar una solución a largo plazo.
No es discutible que estas políticas sean positivas ya que apuntan a asegurar un
extra a quienes nada tienen, para acercarlos al régimen común; pero esta
discriminación positiva se vuelve fácilmente una discriminación negativa. A estas
poblaciones se las instala en sistemas de categorización que les atribuye un
estatus de ciudadanos de segunda.
Castel considera que, antes de la Revolución Industrial, la mayoría de los
asalariados estaban condenados a una precariedad ante la ausencia de un mercado
organizado del trabajo. Los más vulnerables entre esos vulnerables eran los que
caían en la mendicidad y el vagabundeo, y los que así se volvían el objeto de las
prácticas sociales. La imposibilidad de tratar fundamentalmente la problemática
recaía en que tal tratamiento exigía una transformación completa de las relaciones
de trabajo, para la cual se necesitaba de una revolución. De esta forma, la
Revolución Industrial marcó un antes y un después en las relaciones laborales,
estableciendo la promoción del libre acceso al trabajo y la apertura del mercado del
trabajo. De todas formas, el autor no plantea que sea la única solución, pero se
remonta a los hechos históricos para explicar la dinámica. (Ejemplificar la
contraposición con el Antiguo Régimen)
Entre los siglos XIV y XVIII han existido sociedades de exclusión, como las
sociedades esclavistas, que presentan rasgos estructurales que las caracterizan,
de los cuales se desprenden tres subconjuntos principales:
1. La supresión completa de la comunidad: como fue la exclusión de los
judíos y la matanza de herejes. La forma más extrema se presenta con el
genocidio.
2. La concepción de espacios cerrados escindidos de la comunidad:
como los hospitales para los leprosos, los ghettos, etc.
3. El estatus especial que les permite coexistir en la comunidad, pero las priva
de algunos derechos y la participación de ciertas actividades sociales:
como la privación del voto para las mujeres.
La exclusión está institucionalizada, legitimada y es funcional al sistema. Esto se
debe a que impone una condición específica que descansa sobre los reglamentos,
moviliza aparatos especializados y se completa a través de rituales (ejemplo de los
leprosos).
Ya planteados estos criterios, se deberían determinar los usos legítimos del
término exclusión. Las situaciones calificadas como exclusión en el discurso
mediático, político y sociológico, en realidad se refieren a los términos de
precarización, vulnerabilidad y marginalidad. El uso metafórico de la palabra
exclusión es el que genera su ambigüedad, ya que se puede utilizar para hacer
referencia a discriminaciones oficiales o a un proceso de desestabilización. 
A modo de conclusión, existe el riesgo de exclusión, pero su conjugación exige vigilancia:
1. No se debe llamar deliberadamente exclusión a cualquier disfunción social.
2. Hay que esforzarse para que las medidas de discriminación positiva no se
degraden en una discriminación negativa.
3. Hay que asegurarse que las políticas de inserción se lleven a cabo
bajo la modalidad preventiva

Sautu. Reproducción y cambio en la estructura


de clase
Para entender mejor el texto, es importante definir previamente ciertos conceptos
Estructura de clase: forma parte del propio sistema social (capitalismo), de su
organización social, de sus instituciones fundamentales sociales, económicas y
culturales. Establece condiciones básicas de existencia. Esta legitimada
socialmente.
Clases sociales: constituyen a la estructura de clase. Se definen por las relaciones
sociales que tienen lugar con motivo de la producción económica. Son
relaciones de poder económico, definido como la capacidad legitimada
jurídicamente de apropiación y disposición de recursos. 
Ahora sí:
Dentro de las clases sociales, se producen simultáneamente dos procesos opuestos:
la reproducción y la movilidad social. El grado en que uno se imponga sobre otro
indica que tan cristalizada está la estructura de clase de una sociedad. 
Los sociólogos, al realizar investigaciones empíricas, conceptualizan la estructura de
clases usando el concepto de “estructura social”, definida por las localizaciones
en un todo de diversos conjuntos poblacionales de acuerdo a la posesión, o no, de
determinados atributos o rasgos que las definen.
Las clases sociales, en cambio, son construcciones colectivas cuya existencia
tiene consecuencias sociales e individuales (y a la vez son UNA PARTE de la
estructura de clases).
Tanto las clases sociales como la estructura son realidades histórico-sociales. Su existencia
se asienta en la capacidad de apropiación y en la distribución de los recursos
económicos y los honores y privilegios sociales (es fácil deducir quien se queda
con la mayor parte de estos). Los miembros de las clases sociales se
reconocen/diferencian por los espacios geográficos que ocupan y por las relaciones
que establecen entre sí y con miembros de otras clases.
Como todo conjunto social, las clases sociales y estructura de clases se reproducen y
se transforman. Ambos cambios provienen de la transformación o reproducción de
otro elemento: las relaciones sociales entre actores sociales dentro de los contextos
socio- históricos e institucionales.
Para investigar por qué las clases sociales se reproducen a lo largo de
generaciones, es necesario centrarse en aquellas practicas sociales y culturales
que transfieren entre generaciones la pertenencia y condiciones materiales de
existencia, estilos de vida y cultura.
Cabe aclarar que dentro del sistema capitalista es imposible que cambie la lógica
del poder que sustenta al sistema de dominación/subordinación (si esto pasara,
cambiaria el sistema). Si cambia la composición de la cúpula del poder, sería un
cambio en la estructura, no de la estructura.
El grado en el que sea posible, o no, moverse de una clase social a otra, se
estudia mediante el análisis de la movilidad/fluidez/cierre social. La movilidad
social se produce mayoritariamente en aquellas épocas en las cuales los mercados
laborales, las políticas que los regulan y las negociaciones laborales cambian.
 Además, es necesario estudiar los procesos de concentración de poder económico y
la creciente corporativización de la economía. Estos dos procesos son claves
para determinar la reproducción de las clases sociales existentes y permiten
comprender la trama en la que toman lugar. Sin embargo, esta concentración del
poder por sí sola no podría tener un efecto tan duradero, es necesario un
sistema normativo que le otorgue legitimidad jurídica (por ejemplo, las leyes de
propiedad privada, herencia o parentesco). La legitimidad le asigna estabilidad a
la autoridad.
Otros procesos que sustentan la estructura de clases son la creación de monopolios
del conocimiento experto (esto se puede relacionar con lo que vimos en Bourdieu y
Castel), reservas de mercados, y monopolios de bienes y servicios. Todas estas son
modalidades de dominación/subordinación que reproducen las desigualdades.
Un elemento muy analizado por la sociología es la clase media. La posesión y
mantenimiento del status de clase media requiere considerar el concepto de cierre
social de Weber: el proceso por el cual los grupos sociales restringen el acceso de
otros grupos a recursos y oportunidades. Algunos investigadores, como Willis, le
adjudican la reproducción de la clase media a el rechazo de los jóvenes a la
ideología educativa dominante y las conductas contestatarias. Además, al tomar
en cuenta el contexto
histórico, se puede comprender como la estructura social condiciona las
capacidades (individuales y familiares) de apropiarse o no de oportunidades y
recursos.
Teoría, conocimiento acumulado, experiencia y metodología
La economía y la familia responden a dos requisitos básicos de la sociedad: la
reproducción de los seres humanos y la producción de un excedente económico.
A lo largo de la historia, las sociedades fueron resolviendo estos dos desafíos
básicos construyendo sistemas de relaciones sociales de manera diferente. La
estructura de clase y las clases sociales son una parte importante de este complejo
sistema de relaciones.
Este sistema también se ve atravesado por la desigualdad de clases (una
construcción humana). Todos estos procesos ocurren y se manifiestan en las
relaciones sociales.
Es necesario aclarar que las clases sociales son colectivamente creadas, recreadas y
modificadas en su contexto histórico. Su existencia es real mientras que la gente la
piense así y actúe de acuerdo a ellas. Sin embargo, son consideradas
abstracciones por su análisis, debido a que no existen de la misma manera que algo
físico. Lo que SI existe son las relaciones sociales que se organizan alrededor de
ellas, por lo tanto, estas son las que se reproducen y cambian. Las clases sociales,
entonces, son solamente la manera en como nos referimos a las relaciones sociales
que tienen lugar con motivo de la producción económica, la asignación de
recursos y la apropiación de un excedente.
Como dijimos anteriormente, las clases sociales articulan dos procesos claves para
toda sociedad: la reproducción física y la económica. La reproducción física se
lleva a cabo mediante los sistemas de parentesco, que además de sus componentes
biológicos, están compuestos por códigos y normas culturales. La reproducción
económica está sostenida por las instituciones jurídicas y políticas (el Estado), que
legitiman la propiedad
privada. Las relaciones sociales alrededor de estos dos procesos constituyen la
estructura de clase que se estudia de manera separada a las clases sociales. La
estructura se investiga
mediante estudios macrosociales, mientras que las clases se investigan
mediante
estudios microsociales. Lo que ambas tienen en común es que, para analizar su
reproducción y/o cambio, es necesario mirarlas desde la perspectiva de como se
expresan en las relaciones sociales.
Vale la pena aclarar la diferencia entre clases sociales y estilos de vida: la clase
social establece condiciones objetivas de existencia, mientras que el estilo de
vida se ve orientado por las preferencias psicosociales y culturales, y
comportamientos. La clase social, entonces, expresa un margen posible de
desarrollo de los estilos de vida.
La estructura de clase
La reproducción/cambio de la estructura de clase se ve atravesada por tres procesos
sociales: 

1. Movilidad intra e intergeneracional


La movilidad social es un fenómeno que tiene lugar en las familias y que implica
un cambio de clase social. Estos, por un lado, se ven impulsados por los mismos
miembros (por ejemplo, al estudiar una carrera universitaria). Sin embargo, el
esfuerzo individual no es suficiente, ya que también depende mucho de la
desigualdad presente y del grado de apertura/cierre de una sociedad. Por eso, la
movilidad social ocurre solamente si cambia la estructura económica y si otras
instituciones acompañan ese cambio.

Como la movilidad social ocurre cuando la sociedad se transforma, al analizarla desde


una forma más global es necesario ubicarnos históricamente. Sin embargo, para las
personas que la experimentan no es más que un proceso de cambio individual, basado
en la agencia humana (relaciones sociales en las que las personas participan).
La distinción entre movilidad intra e intergeneracional nos permite distinguir el
momento en el curso de vida de una familia en que se producen estos cambios. Si
un progenitor pasa por un cambio (o no), este afecta a sus hijos y a otros familiares, lo
que conlleva una recomposición de la vida familiar.
2. La lógica, composición y nexos en las cúpulas de poder (económico
principalmente)

Las bases del poder económico sostienen la estructura de clase, y también


atraviesan procesos de reproducción y cambio. Se deben analizar las relaciones
sociales entre agentes económicos (aquellos que poseen propiedad y control en la
asignación de recursos) para entenderlos. Sin embargo, que cambien las bases de
poder, no significa que la estructura también tenga que hacerlo.

3. Los sistemas normativos y culturales que legitiman social y jurídicamente


las relaciones de clase
Para estudiar estas bases empíricamente se suele analizar la concentración de
poder económico. Esta diferencia en la distribución de recursos esta
institucionalizada, legitimada y justificada mediante el sistema normativo de
nuestra sociedad. Las ideologías que la legitiman están constituidas por conjuntos
de creencias, actitudes, valores y categorizaciones sociales (como los estereotipos)
que le otorgan una especie de “soporte moral e intelectual” a las diferencias sociales,
justificando la posición privilegiada de los grupos dominantes.
Las clases sociales
La reproducción/cambio de clases sociales puede analizarse mediante
cuatro grandes procesos y el tipo de relaciones sociales que
desencadenan:
1. El estudio de las relaciones familiares que se generan como una parte
de los estilos de vida, y que son la parte visible de las clases sociales

El estilo de vida involucra relaciones sociales que conforman conjuntos que se


entrecruzan. Las relaciones pueden ser dentro de una misma clase, o entre estas.
Las relaciones entre clases son generalmente a raíz de la producción económica,
por lo que son asimétricas de poder (siempre hay un dominante y un
dominado).

2. Las relaciones entre facciones de clases adyacentes.

Entre las clases sociales existen bordes difusos, familias que se identifican con una
determinada clase social, pero mantienen relaciones de parentesco con familias de
otras clases (esto ocurre generalmente durante los procesos de movilidad social).
Esta interrelación también puede ocurrir debido a ciertos intereses, como pasó
con la burguesía terrateniente argentina cuando comenzó a relacionarse
socialmente con miembros de la burguesía industrial y comercial, los que aportaban
poder económico a cambio de apellidos importantes y vínculos sociales.
En todas las clases sociales existen nexos sobre los cuales se asientan los distintos
estilos de vida. En la clase popular, estos nexos toman la forma de intercambios
de bienes, favores, información. En la clase alta, los nexos sociales sirven para
integrarse a círculos de poder íntimos y para la construcción de redes de intereses
(en las que, obviamente, los intercambios son muchos más significativos que los
realizados por la clase media).
Tanto en la clase baja, media y alta existen redes diferenciadas de relaciones
sociales construidas alrededor de las condiciones básicas de existencia. Aunque las
fronteras para pasar de una clase social a otra son muy rígidas, las fronteras dentro
de cada clase social suelen ser mas flexibles. Las fracciones adyacentes a las
fracciones de otras clases actúan como canales para consolidar relaciones entre
clases. Dice que las relaciones *entre* clases se dan entre personas de clases
adyacentes, por ejemplo alguien de clase baja-media con alguien de clase media, o
alguien de clase media- alta con alguien de clase alta, y que es poco común que
por ejemplo alguien de clase alta se relacione directamente con alguien de clase
media (y cuando esto sucede es una relación de dependencia generalmente).
Más adelante explica que para el ojo externo es díficil ver cuándo termina una clase y
empieza otra, pero que los sujetos involucrados si tienen una barrera bien
definida, daba el ejemplo de que alguien de clase media-alta se diferencia de alguien
de clase alta porque este último, además de recursos económicos, tiene relaciones y
contactos que le traen poder.
Por último, un rasgo importante de las clases sociales es que son
omnipresentes. Se expresan en el lenguaje, los gestos y los modos en que
nos relacionamos.

3. Los procesos de prestigios prestados por las relaciones cercanas de


dominación- subordinación.

El concepto de prestigios prestados esta muy relacionado con la naturalización de la


desigualdad. Este aplica a aquellas personas que, generalmente basándose en
su ocupación de prestar servicios a miembros de las clases altas, se perciben a si
mismos de una forma más privilegiada de la que deberían.  Un ejemplo puede ser un
mayordomo que dice “el honor de la familia es el honor de aquellos que los
servimos”. Ellos, al compararse con miembros de su misma clase que están en
lugares menos prestigiosos, se auto perciben como más privilegiados, cuando en
realidad su status no depende de ellos mismos sino de la gente a la que sirven.

4. La socialización en la resignación, fatalismo y obediencia


La preservación de las diferencias entre clases se debe, entre otras cosas, a las
pautas de comportamiento construidas. Una de las mas importantes es el respeto
de clase, visible en las distintas relaciones entre clases. No tratamos por igual a
todo el mundo. Entre miembros de distintas clases se producen relaciones de
dominación y distancia social, manifestadas en actitudes y comportamientos de
subordinación. Estos contribuyen a la legitimación de la estructura de clase, y son
vistos como una forma de aceptar las diferencias. 

Kessler. La Desigualdad y sus


interrogantes.
Distribución del ingreso y el trabajo
PRIMERA PARTE: La desigualdad y sus interrogantes

Una mirada multidimensional


¿Desigualdad de qué? En las sociedades capitalistas, el dinero es el factor principal
de distribución de otros bienes, por lo tanto, la repartición de la riqueza ha sido y
sigue siendo el tema central de las luchas en pos de disminuir las injusticias sociales.
Desde esta perspectiva, no sería necesario multiplicar las dimensiones por examinar,
ya que todas estarían relacionadas a desigualdades de ingresos. Nadie discute su
centralidad, pero sí que sea la única faceta de bienestar válida, existiendo también la
salud, educación, acceso a vivienda, etc. Bajo esta mirada, se desarrollaron
mediciones de pobreza incluyendo otras dimensiones, no solo la de ingresos.
Durante los años 90 se desarrollaron otras categorías que pudieran suplir las falencias
del término pobreza. Una de las alternativas más difundidas fue la de exclusión
social:
 Amartya Sen (2000) articula la idea de exclusión social, con el eje en la
exclusión de relaciones sociales significativas, que puede llevar a la
privación del acceso al crédito o a oportunidades laborales, dando como
resultado la pobreza.
 Graham Room (1995), la exclusión es la negación a la no obtención de
derechos civiles, sociales y políticos.
 La OIT (organización internacional del trabajo) estableció tres esferas de
exclusión: del trabajo (imposibilidad de acceso), en el trabajo (condiciones
precarias) y de ciertos bienes y servicios básicos.
Resulta necesaria esta mirada multidimensional de la desigualdad, que incluye conceptos
como exclusión, pobreza y bienestar. Mientras el primero se vincula a procesos
sociales más generales, los segundos y terceros permiten apreciar de forma más clara
la situación de las poblaciones más vulnerables.

Dimensiones y comparaciones
¿Cuáles esferas explorar?  Una desventaja de este abordaje es que trae consigo una
multiplicación indefinida de esferas, particularmente en la modernidad tardía, donde
son infinitas, transformadas ahora en deseos.
La demanda por la igualdad aumenta cuando las necesidades básicas se
encuentran cubiertas. Entonces, las denuncias por injusticias pueden tener tanta
o hasta mayor presencia en un periodo de mayor bienestar que en un
pasado de inequidad más pronunciada.
Paul Ricceur creó el concepto de “pluralismo controlado”, consiste en seleccionar
esferas según: relevancia, dinámicas propias y controversia.
 Relevancia:
- Perspectiva estructural: no es tan importante la mirada de actores
sobre si esa desigualdad es significativa, ya que con ciertos datos
objetivos seria suficiente para justificar la elección de un problema
- Perspectiva Constructivista: un tema puede preocupar, causar
indignación o estar en la base de acciones colectivas mucho más que
otros cuya gravedad podría ser mayor.
Existe en cada momento una variedad de problemas que compiten entre si
para transformarse en un problema de sociedad, intentando atraer la
consideración del Estado en la opinión pública.
Algo se transforma en un problema público cuando se dan una serie de
condiciones: consenso social, trabajo de los especialistas, apelación al Estado
para dar respuestas y existencia de indicadores. En otras palabras, tiene
que haber algún tipo de experiencia colectiva de malestar y debe ser posible la
recolección de una serie de datos que avalen su relevancia.

 Dinámicas propias: existiendo desigualdades económicas, las distintas


esferas pueden aplicar políticas (de vivienda, salud, educación, etc.) que
atenúen sus efectos. A su vez, es importante definir el periodo que se va a
estudiar, ya que a nuevas carencias pueden sumarse otras persistentes
desde tiempo atrás. Por último, la elección se realiza en base a los temas
que presentan mayores controversias.

 Controversias: algunas cuestiones se dejaron de lado dado que el


nivel de controversias es menor. El caso contrario, por ejemplo, seria
los temas de diversidad sexual.

Indicadores presentes y pasados


La imagen global de la sociedad resulta tanto de las esferas que se incluyan en el
análisis como de aquellas que se excluyan.
Ciertas temáticas, como la calidad educativa, no eran tomadas en cuenta hasta hace
pocos años. Esto no quiere decir que sea una cuestión reciente, sino que no estaba
categorizada como problema y, por ende, no existía para la sociedad. Las categorías y
los indicadores utilizados en los estudios son lo novedoso, siendo parte activa de la
puesta en sentido de la sociedad.
Mirar el pasado con categorías del presente nos ayuda a cuestionar imágenes
consolidadas. Como la idea de una argentina más igualitaria y solidaria en los años 60,
que cambia si adoptamos una perspectiva de género o federal. Tales imágenes se
basaron en investigaciones de la región metropolitana, que no tomaba en cuenta la
situación de las provincias ni de las mujeres, suponiendo que la situación
económica del “hombre proveedor” definía la de estas últimas.
La trampa del realismo, de Raymond Boudon, consiste en transformar las categorías
de los analistas en propiedades de los hechos. Esto no se debe hacer ya que hay
que ser cuidadoso con las categorías del pasado porque es posible que no consideren
algunos tópicos poco relevantes en la época.

Hitos comparativos e intensidades


Para establecer juicios sobre igualdad es preciso saber qué y cómo comparar. Usar
un año puntual del pasado como punto de referencia tiene sus inconvenientes, ya
que puedo elegir uno u otro según si quiero enfatizar una mirada positiva o
negativa sobre el presente. Se pueden realizar también comparaciones entre países,
estos deben tener situaciones de partida comparables y periodos similares. Por
último, es necesario relacionar los avances o retrocesos de un problema con lo
sucedido en otros que forman parte de la misma esfera de bienestar (ej., salud
pública y sus distintas problemáticas). 
Otra cuestión, más difícil de responder, viene de la mano de la intensidad de la
desigualdad. Esta es el resultado de los procesos que la generan y de aquellos
utilizados para contenerla. En cada esfera habrá algunos derechos sociales
respaldados que se traducirán en niveles de menor o mayor desigualdad.

¿Qué es lo opuesto a la desigualdad?


La respuesta parece obvia, la igualdad, pero este no es un concepto unívoco.
Existen distintos horizontes de igualdad:
 La igualdad de posiciones hace referencia a que los distintos grupos
ocupen lugares en la estructura social cuyos beneficios sean más o menos
similares, es decir, que el acceso a la educación, salud y otros bienes
básicos tengan una distribución que tienda a la igualdad.
 La igualdad de oportunidades tiene como idea rectora a la meritocracia,
se asegura de que todos puedan competir en igualdad de condiciones por los
lugares más deseables de la estructura social, sin que ninguna característica
de origen (sexo, raza, etc.) conlleve algún tipo de discriminación.
Si bien estos conceptos no son excluyentes, es más justa una sociedad que tienda a la
igualdad de posiciones, ya que los ejemplos históricos han demostrado que este
modelo beneficia a los más débiles y forja así sociedades más justas. A su vez, la
igualdad de lugares también implica la igualdad de oportunidades.

Causas de la desigualdad
¿Desde qué perspectivas pueden abordarse tanto unas como otras?:
 Tratar la desigualdad desde la perspectiva histórica en América Latina :
historiadores, economistas y cientistas han intentado desarrollar una matriz
que enlace el pasaje de la desigualdad colonial a la moderna, estudiando
cómo influyeron los Estados débiles y las relaciones de poder establecidas,
focalizándose en la acumulación de capital de las elites.

 Otros trabajos trataban la reproducción de desigualdades, encontrando


diversos mecanismos que llevan a la persistencia de la desigualdad, como la
explotación, el acaparamiento de oportunidades y la exclusión de otros grupos.
Desigualdades que se producen en el seno de instituciones y que se
expanden al sistema social. (Argentina).

 Algunos autores les otorgan centralidad a los mecanismos mediante los cuales
una parte de la sociedad se apropia de recursos y excluye a otra. La
distribución de los bienes valiosos (seguridad, prestigio, estima) y los
repudiados (pobreza subordinación, estigma) establece relaciones de
poder y subordinación.

Consecuencias de la desigualdad
 Para el conjunto de la sociedad: empeoramiento de la salud de la población,
caída del desempeño escolar y aumento de los crímenes. Los más vulnerables
son vistos como potencialmente peligrosos.

 Para quienes la padecen: los peores ubicados en la escala de distribución de


cada esfera, y como se da en cada esfera particular. Puede que haya un
avance en una esfera, si se la ve desde un plano general, pero incluso se
puede observar
detalladamente que hay algunos más desfavorecidos que otros. Por ejemplo,
si se diera un incremento de las de las protecciones de salud, pero con
una falta de cobertura para el tratamiento de ciertas enfermedades.

SEGUNDA PARTE: Distribución del Ingreso y el Trabajo (2003 – 2013)


A partir del año 2003 en adelante, el coeficiente de Gini mejoró en Argentina y en
varios países de LATAM, esto suele ser exhibido como prueba fidedigna de una
mayor igualdad. Sin embargo, es necesario complementar esta visión con la
distribución de la riqueza. Dos posturas ponen en tela de juicio las mejoras de esta
década: una señala la consolidación de un polo marginal, la otra pone énfasis en la
evolución de los salarios después de 2007 y su depreciación por inflación.
El coeficiente de Gini disminuye, ¿La igualdad crece?
El coeficiente de Gini normalmente se utiliza para medir la desigualdad en los ingresos
de hogares dentro de un país, utilizando valores entre el 0 y el 1 y con datos
extraídos de la Encuesta Permanente de Hogares. En una hipotética sociedad
totalmente igualitaria, el valor debería ser igual a cero. Sin embargo, los resultados
cercanos al cero no necesariamente hacen referencia a una sociedad más igualitaria
o más justa, ya que un país homogéneamente pobre u homogéneamente rico
puede presentar el mismo coeficiente. 
En argentina, el coeficiente de Gini muestra una mayor desigualdad entre los años
cuarenta y cincuenta, durante el primer y segundo gobierno peronista. Desde los años
setenta hasta el nuevo milenio se produce un gran incremento de la desigualdad, con
periodos de alta volatilidad, pasando así de un coeficiente cercano al de los
países europeos a otro que lo aproxima al de las sociedades más desiguales del
planeta. 
Esto no es sorpresa, ya que, durante esas décadas, el país fue afectado por una
serie de factores de profundizan la desigualdad: crisis macroeconómicas severas,
hiperinflación, dictaduras, modernización tecnológica supletoria de la mano de
obra, aumento del desempleo, etc. 
A partir del año 2003 se registra una caída de la desigualdad, hasta el año 2007. A
partir del 2008, la misma se mantiene en niveles más o menos constantes
(estancamiento), volviendo a niveles previos a la crisis de 2001.

Los principales factores que explican la disminución de la brecha entre salarios son
las políticas sociales, como la Asignación Universal por Hijo (AUH). Además, a partir
del 2003 se reactivó la economía, trayendo consigo la recuperación del poder de
compra de los salarios y una mayor demanda del mercado laboral, con la consiguiente
caída del desempleo.
Es necesario tener en cuenta que los datos provienen de la EPH, que brinda
principalmente información sobre los asalariados, en particular del sector medio de
ingresos. Esto se debe a varias razones: 
 Los sectores más altos declaran sólo una parte de sus ingresos, además,
las encuestas de hogares están diseñadas para captar aquellos provenientes
de flujos regulares (salarios, jubilaciones) y no de flujos variables (operaciones
financieras, propias de los sectores altos).
 El alcance de la muestra excluye zonas rurales y pequeñas poblaciones,
donde se concentran núcleos de exclusión profunda. También existen
problemas de acceso a zonas del conurbano como las villas.
 Dificultades en la captación de ingresos de los trabajadores informales (en negro).
Podemos concluir preguntándonos si no se nos está mostrando una sociedad menos
desigual de lo que realmente es, ya que el panorama que se nos brinda no es
suficiente para deducir un juicio sobre la estructura social en general.
Políticas laborales y coberturas sociales
A continuación, se analizan las políticas que explicarían una disminución
de la desigualdad en la última década.
1. Políticas laborales y de recomposición salarial: se destaca la
revitalización del salario mínimo a partir de 2004. Esto mejoró la
situación de los asalariados registrados e influyó positivamente en la
de los no registrados.
2. Creación de puestos de trabajo por la reactivación económica: Entre 2003 y
2009 se crearon 4 millones de puestos de trabajo, incorporando millones de
personas al mundo laboral. Con una reducción del desempleo, se reduce la
desigualdad al incrementarse el número de personas que reciben ingresos.
3. Disminución del empleo no registrado: Aumentó el trabajo formal, con
una cantidad de asalariados registrados superior a los años
noventa.
4. Aumento de la cobertura previsional: Con el otorgamiento de nuevas
protecciones sociales, en particular la extensión de la jubilación, pensiones
no contributivas, AUH, etc.
Controversias sobre la distribución funcional
Como vimos previamente, una disminución del coeficiente de Gini no autoriza a
postular una mejora de la igualdad, ya que no nos informa sobre la distribución de
ingresos entre clases, grupos étnicos o géneros.  Una mejora de la distribución entre
sectores medios y altos (excluyendo los bajos) puede reducir el coeficiente de Gini.
Es necesario, entonces, complementarlo con el estudio de la distribución primaria
o funcional entre capital y trabajo.
La distribución funcional depende de la productividad de cada trabajador. Cuanto más
se apropien los propietarios del excedente de la productividad del trabajo, menores
serán los salarios y más inequitativa será la distribución funcional. El proceso de
acumulación en los últimos 30 años se basó en el deterioro del salario real, no en la
mejora de la productividad, dando como resultado pobreza.
Miradas críticas I: La heterogeneidad estructural
Los asalariados, en particular aquellos registrados y con sindicatos más fuertes,
han mejorado su situación relativa. Sin embargo, la crítica radica en la magnitud
de esta mejora, y en las poblaciones que quedaron fuera de las mismas. 
Se habla del incremento de un polo marginal y un aumento en las diferencias
salariales entre los trabajadores protegidos y los precarios. En consecuencia, se
plantea cómo categorizar a estos grupos, qué perfiles incluir en los mismos y cuál
es su magnitud. 
Este es el núcleo de la crítica realizada por Agustín Salvia: Sostiene que, a partir
del crecimiento económico del año 2003, que implicó mayor actividad y más
empleo, una masa marginal de trabajadores no pudo acceder al mismo. Para
ellos, además, la diferencia de ingresos era aún más profunda en comparación a
trabajadores protegidos.
La medición de este polo, propuesta por Salvia, se basa en dividir al mercado de
trabajo en:
 Mercado primario: Con empleos protegidos y salarios más altos
 Mercado secundario: asalariados y trabajadores independientes no protegidos. 
 Polo marginal: trabajadores precarios por debajo de la línea de
indigencia y beneficiarios de programas de empleo.
Por otro lado, calcula la desocupación de manera particular. Dentro de los
desempleados incluye a los llamados “desalentados” que ya no buscan trabajo y, por
lo tanto, no forman parte de la población económicamente activa. 
El polo marginal crece debido a que se contrae el sector secundario, aumentan
las posiciones precarias y se profundizan las brechas salariales entre el sector
primario y los otros. 
En contraposición, Pablo Dalle realiza una diferenciación de clases marginales: la
calificada y la no calificada. Un trabajador calificado, pero no registrado, no sería
considerado en una situación marginal. Se basa en que el pasaje de no registrado a
registrado es más fácil
de realizar que el pasaje de no calificado a calificado, al tratarse de un atributo que
depende en gran medida de la educación de los individuos. 
Miradas críticas II: Inflación e impuesto a las ganancias
Se hace referencia a la magnitud real de las mejoras salariales de los
trabajadores, principalmente en relación a la inflación del año 2007 y al impuesto a
las ganancias, debido a la insuficiente actualización del mínimo no imponible (que
debe actualizarse con cada periodo inflacionario), que reduce el poder adquisitivo de
las personas apropiándose de porcentajes cada vez mayores. Además, se cuestiona
el impacto de la inflación en los montos de las transferencias sociales, que genera
una mayor brecha entre los trabajadores y los beneficiarios de planes sociales.
En términos estrictos, la desigualdad se calcula a partir de los ingresos percibidos.
En teoría, la inflación no modificaría la desigualdad ya que todos los sectores de la
sociedad se verían perjudicados proporcionalmente. Sin embargo, al tener en cuenta
el bienestar de los hogares encontramos que la inflación afecta principalmente a
quienes destinan más porción de su ingreso al consumo cotidiano o al pago de
bienes y servicios. En consecuencia, la inflación incrementa la desigualdad,
afectando en mayor medida el bienestar de los sectores menos favorecidos. 
Miradas críticas III: Desacuerdos sobre la pobreza
La pobreza puede considerarse un subproducto de la desigualdad, por un lado, y
por el otro en una perspectiva de desigualdad multifacética. Los pobres son aquellos
que, por su bajo nivel de ingresos, están peor situados en la distribución de bienes
y servicios de las distintas dimensiones de bienestar. La evolución de la pobreza e
indigencia se calculan a través de canastas básicas. Cualquier cambio en el valor o en
la forma de calcularla influirá en la magnitud de la pobreza. Es imposible llegar a un
consenso en cuanto a indicadores de pobreza, ya que el resultado obtenido
depende siempre del método utilizado para medirla. 
Desigualdad e impuestos
Esta cuestión posee muchas aristas, de las cuales nos interesan dos interrogantes: 
 El carácter regresivo o progresivo de la estructura impositiva: en otras palabras,
si la carga impositiva aumenta o no a medida que se asciende en la escala
de ingresos. La visión progresiva se caracteriza por el establecimiento de
impuestos directos a personas con mayor poder adquisitivo, mientras que la
regresiva hace referencia a impuestos indirectos que afecta a toda la población
por igual. Durante el gobierno peronista y parte del gobierno de Alfonsín,
existió una estructura progresiva. A partir del 2001, predomina una
regresividad estructural del sistema tributario, con un IVA de altísima alícuota
y sin excepciones para los pobres en alimentos básicos o vestimenta.
Además, se aplicaba un impuesto a las ganancias
muy débil a las empresas y las personas ricas, en quienes no tenía incidencia
alguna. 
 La necesidad de revisar el nivel de ingresos de cada grupo luego de
ponderar los impuestos cobrados a cada grupo y la forma en la que se
distribuye el gasto público: El coeficiente de Gini post impuestos y
transferencias reduce significativamente la desigualdad, pero no todos
los expertos en impuestos coinciden con estos cálculos. 

Por otro lado, en cuanto al gasto público, se hace hincapié en la coparticipación


federal. El Estado privilegia a las provincias con menor población y mayor PBI per
cápita. Se debe a que menores cantidades de dinero tendrán mayor impacto local
que en las grandes provincias, por ende, se generan beneficios políticos. En otras
palabras, el objetivo del federalismo es evitar la secesión (separación de parte de
la población para generar un estado independiente), no la inequidad. 

Desigualdades de Género
Argentina presenta una buena posición mundial en cuanto a igualdad de
género en cuestiones relacionadas a la salud y la educación, incluso presentando
a veces mayores ventajas para las mujeres. En el mundo del trabajo y los
ingresos, esto no sucede.
Las tasas de empleo e ingresos son mayores para los hombres. En particular, las
mujeres de menores ingresos se ven obligadas a elegir trabajos más flexibles, de
menos horas e ingresos, debido a las demandas de cuidado y protección que siguen
pesando sobre ellas. 
Un estudio señala dos ejes de desigualdad:
o Segregación ocupacional: refiere a la concentración de mujeres en
sectores específicos, peores pagos, de ocupaciones consideradas femeninas
como una extensión de sus roles “naturales”: cuidado, enseñanza, enfermería
y limpieza. La incorporación de las mujeres al mercado del trabajo, no
implicó una mayor equidad en la distribución del trabajo doméstico, siendo
el cuidado infantil responsabilidad primordial de las mismas. Las mujeres
acomodan sus horarios al cuidado de los niños, mientras que los hombres
no.
o Desigualdad de ingresos: Las mujeres de sectores más bajos están en
peor situación relativa respecto a sus pares varones, que las mujeres
de mayor educación respecto de los hombres con las mismas
calificaciones.
En síntesis, si bien existen avances, las desigualdades laborales de género siguen
presentes: de ingresos, de empleos protegidos, de sacrificar carreras por el cuidado de
los hijos, de horas de trabajo doméstico sumadas al trabajo extradoméstico;
situaciones que afectan en particular a las mujeres más pobres.

Bourdieu. Los modos de dominación


Dicotomía de lo económico y lo no económico
Aunque se creía lo contrario en las sociedades precapitalistas las prácticas no dejan
de obedecer una lógica económica. Las relaciones entre las diferentes especies de
capital y los modos de circulación de los mismos, obligan a abandonar la dicotomía
(=división entre opuestos) de lo económico y lo no económico, ya que todas están
orientadas hacia la maximización del beneficio, ya sea material o simbólico.
1. Especies de capital
Las especies de capital son las siguientes: capital de fuerza de combate,
capital económico, capital cultural y capital simbólico, siendo los cuatro
convertibles.
A. Capital simbólico
El caso particular del capital simbólico, este se asegura mediante el uso conforme a
otras especies de capital.
A, 1. Simetría del intercambio a la asimetría de la redistribución
Desde las sociedades precapitalistas a las capitalistas, se produce una transición desde
la simetría del intercambio de dones a la asimetría de la redistribución ostentadora.
Nos alejamos de la perfecta reciprocidad que suponía una relativa igualdad de
situación económica, y se acrecientan las contraprestaciones brindadas bajo la forma
simbólica, es decir, la reconvención de capital económico en capital simbólico que
produce relaciones de dependencias fundadas económicamente, pero
disimuladas bajo el velo de las relaciones morales, que ocultan una legitimación
de lo arbitrario* y una relación asimétrica de fuerza.
*El capital simbólico recuerda que los actos de conocimiento forman parte de la
realidad social y que, si bien creemos que su producción es subjetiva, esta es en
realidad objetiva desde la legitimación de los puntos de vista de los dominantes.

A, 2. Ejemplo de la charka del buey


Un ejemplo de préstamo de interés, que no era reconocido como tal en las
sociedades precapitalistas, es el de la charka del buey. La transacción consistía en
que un campesino prestaba un buey por un tiempo a otro campesino demasiado
pobre para comprarlo, a cambio de una cierta cantidad de granos. Este trato era
oculto ya que iba en contra del sentimiento de equidad: el prestatario actuaba como
si el buey fuera suyo y el prestador era cómplice de esa actitud. Sin embargo, los
agentes ven una transacción equitativa, ya que el prestador da la fuerza de trabajo
del buey, pero el prestatario lo alimenta y atiende, y las medidas de granos son
una compensación por la devaluación del buey acarreada por el envejecimiento.
La economía precapitalista no ofrecía las condiciones de una dominación indirecta e
impersonal debido a la falta de medios institucionales económicas, como el mercado, e
instrumentos de créditos; además, los bienes no eran tratados como capital.
Ningún tipo de riqueza puede funcionar como capital si no es en relación a un campo
que la convierta en objetiva. Por ejemplo, las riquezas económicas no pueden ser
reconocida como capital si no es en relación a un campo económico.
B. Capital cultural
En cuanto al capital cultural, su realización comienza con la escritura. Antes
de su invención, este capital se conservaba en estado incorporado, lo cual
aseguraba su perpetuación, pero estaba destinado a desaparecer. Pero
con la escritura:
 Se puede conservar y acumular de una forma objetivada los recursos
culturales heredados del pasado.
 Separa a la persona de los recursos culturales, permitiendo sobrepasar los
límites antropológicos de la memoria individual.
 Permite la acumulación de la cultura.
Su plena realización se da con la aparición del sistema escolar, el cual dota a los
agentes de las aptitudes necesarias para reapropiárselos simbólicamente. Este
concede títulos que consagran de manera duradera la posición ocupada en la
estructura de la distribución del capital cultural.
La objetivación en instituciones garantiza la permanencia y la acumulación de
adquisiciones, pero tiende a asegurar la reproducción de la estructura de la
distribución del capital y, por consiguiente, la reproducción de la estructura de las
relaciones de dominación y dependencia.

3.Existe una analogía entre los jefes, el Estado y las finanzas públicas, y los "banqueros tribales".
Este último acumula alimentos por medio de tributos para redistribuirlo y atesorar un capital de
obligaciones y de deudas, que serán cancelados bajo la forma de homenajes, de respeto, de
fidelidad, de trabajo y de servicios. Se posee capital (económico) para dar, pero también se
posee (capital simbólico) al dar. Se genera una relación de dependencia que perdura de dos
maneras:
1. Mediante el DON, que son las obligaciones morales y los apegos afectivos que
crea y mantiene.
2. Mediante la DEUDA, las obligaciones abiertamente económicas.
De esta forma, las relaciones arbitrarias se transforman en relaciones legítimas.
3A. Violencia abierta y violencia simbólica
Así, se diferencia la violencia abierta de la violencia simbólica. La violencia abierta
(física y/o económica) es explícita, se encuentra socialmente censurada, no guarda
las formas y no enmascara la relación económica; en cambio, la violencia simbólica
es implícita
y eufemizada, guarda las formas* y enmascara la relación económica.
*Entendiendo como "guardar las formas" a actuar negando el contenido de la acción
y la violencia potencial que puede conllevar.
Ambas violencias coexisten en la misma formación social y a veces en la misma
relación. Están presentes en la deuda y en el don que, a pesar de su aparente
oposición, tienen en común el poder de fundar dependencia e incluso servidumbre.
Son medios
sustituibles para cumplir la misma función, siendo que la opción entre ambas depende
del estado de las relaciones de fuerza entre las dos partes y de la integración e
integridad ética del grupo que arbitra.
Mientras la violencia abierta se tope con la reprobación colectiva, la violencia simbólica
se impone como el medio de dominación más económico porque es el que más se
adecua a la economía del sistema. Esto sucede porque los mecanismos sociales que
hacían de la acumulación simbólica la única forma de acumulación, frenaban y
prohibían la concentración de capital material/económico o cultural. Por lo que las
estrategias orientadas a la acumulación de capital simbólico eran las más
racionales y eficaces.
Además, los más acomodados debían contar con el juicio colectivo, porque de él
obtenían su autoridad, y con la moral oficial, que les imponía las participaciones más
fuertes en los intercambios ceremoniales y las más pesadas contribuciones al
mantenimiento de los pobres. Otra de las razones de la predominación de la violencia
simbólica es la censura: en la economía precapitalista predominaba la violencia
simbólica debido a que las relaciones de dominación fundada en intereses existían a
costa de la censura de la violencia abierta, ya que se apuntaba a disimular dicha
relación (como se puede ver en el ejemplo de
la charka del buey).
El capital "económico" actúa bajo la forma eufemizada de capital simbólico. Esta
reconversión del capital exige conocimiento de la lógica de la economía de la
negación, incesantes cuidados, importantes inversiones materiales y simbólicas, un
trabajo para mantener las relaciones, y la disposición a ofrecer cosas que son más
personales, como el tiempo. De esta forma, se asocia la autoridad como una
propiedad de la persona ya que aquel quien ejerce violencia simbólica debe dar la
cara.
A, 2. Ejemplo del dueño con su khammes (=aparcero, arrendatario)
La relación social tan próxima entre el capital y el trabajo puede mantenerse por
la combinación de ambas violencias directamente aplicadas a la persona misma a la
que se trata de sujetar.
El ejemplo del dueño con su khammes ilustra esta situación, ya que podía aplicar
la violencia abierta mediante la contracción de una deuda que lo obligara a
renovar su contrato hasta encontrar un nuevo dueño que pagara la deuda, o
mediante la retención de su producción para recuperar el monto de la deuda. Y la
violencia simbólica se aplicaba mediante la construcción de lazos éticos y afectivos
con su khammes que los unían perdurablemente, por ejemplo, arreglando el
matrimonio del mismo con un familiar. Así, el dueño consagraba a su khammes
perdurablemente a sus intereses en la medida que lo asociaba completamente a
estos, al punto de enmascarar la asimetría de la relación que lo unía a él.

4.
Como no había una delegación oficial ni una institucionalización, antiguamente la
autoridad personal se perpetuaba a través de acciones que la reafirmaban por medio
de su conformidad con los valores que el grupo reconoce. A los dominantes no les
bastaba dejar hacer el sistema que ellos dominan, sino que lo trabajaban cotidiana
y personalmente, produciendo y reproduciendo las condiciones inciertas de
dominación. Se ven condenados a las formas elementales de dominación, la
dominación de una persona sobre otra, cuyo extremo es la apropiación personal,
mediante la creación de vínculos personales. Estas formas consisten en el
intercambio de dones, la transformación de una especie cualquiera de capital en
capital simbólico, la posesión legítima fundada en la naturaleza de su poseedor,
un gasto visible y una redistribución. Estos mecanismos sociales forman parte
integrante de las condiciones de reproducción del orden social y del aparato mismo
de la producción.
La existencia de campos relativamente autónomos hace que los poseedores de
medios para dominar los mecanismos que imponen a los agentes su necesidad,
puedan hacer ahorro de las estrategias orientadas a la dominación de personas. Se
trata de un ahorro ya que estas son extremadamente costosas, lo cual hace que el
medio devore al fin y que las acciones necesarias para asegurar la duración del
poder contribuyan a su fragilidad.

4, A.
El pundonor (=honor, dignidad) es política en estado puro. Lleva a acumular
riquezas materiales que no tienen su justificación en "si mismas" sino que valen como
instrumentos de demostración del poder, es un capital simbólico que reproduce y
legitima las jerarquías, y es un medio para acumular poder simbólico como poder
de hacer reconocer el poder.
El poder se oficializa e institucionaliza. La institucionalización abarca relaciones
estrictamente establecidas y jurídicamente garantizadas entre posiciones reconocidas,
definidas por rangos que, a su vez, están definidos por títulos que los autorizan a
ocupar esas posiciones. Esto permite establecer relaciones de equivalencia, ya que se
da el mismo valor a todos los poseedores del mismo título, se los vuelve
sustituibles, y se instaura
un mercado unificado de todas las capacidades culturales, garantizando la
convertibilidad en moneda del capital cultural. El título escolar tiene un valor
convencional, está liberado de las limitaciones locales y de las fluctuaciones
temporales.
Así, las relaciones de poder comienzan a establecerse entre instituciones.
El derecho consagra simbólicamente el estado de las relaciones de fuerzas entre
los grupos y clases, por un registro que eterniza y universaliza. Pero la legitimación del
orden establecido también se produce por su justificación práctica, es decir, por el
sistema de producción de bienes culturales o el sistema de producción de los
productores. Se registra una relación bajo la apariencia de igualdad formal entre los
títulos obtenidos y el capital heredado.

El laisser-faire y el silencio cómplice son los efectos ideológicos más seguros.

5. Actualidad
El desarrollo de las fuerzas de subversión en contra de la explotación económica y
la puesta en evidencia de los efectos ideológicos y prácticos de los mecanismos
de la dominación, determinan un retorno a la acumulación de capital simbólico
reconvertido a partir de capital económico. De esta forma, los dominantes se
aseguran un capital de crédito y el asesoramiento de bienes de lujo que
atestiguan su distinción.
La negación de la economía y del interés económico se encuentra hoy en día en el
dominio del arte y de la cultura. En realidad, estos son lugares de consumo puro, de
dinero y de tiempo.

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