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Vanguardismo

Llamamos vanguardismo al conjunto de movimientos artísticos y


literarios formados a comienzos del siglo XX en Occidente que
rompieron con la tradición académica y buscaron la innovación.
De hecho, el término vanguardismo proviene de vanguardia. Este
se tomó prestado del francés avant-garde, expresión militar que
significa ‘el que va adelante’, el que ocupa la primera línea de
combate.

Algunos movimientos de vanguardia fueron interdisciplinarios,


pues se manifestaron tanto en artes como en literatura. Otros
fueron estrictamente literarios y otros estrictamente artísticos.
Todos compartieron el afán por romper con la tradición y buscar la
innovación permanente. Los podemos clasificar de la siguiente
forma:

Características del vanguardismo

De izquierda a derecha. Arriba: fauvismo, expresionismo, cubismo, futurismo, abstracción lírica.


Abajo: constructuvismo, suprematismo, neoplasticismo, dadaísmo, surrealismo.

Tanto en la literatura como en las artes, las vanguardias se


caracterizaron por la disconformidad con la realidad y el
estado del arte, el rupturismo, la experimentación, la
originalidad, la libertad de expresión y la provocación.
Veamos en qué consiste cada característica.

Disconformidad con la realidad

Los artistas y escritores de vanguardia cuestionaron


abiertamente la realidad, y se mostraron opuestos a los
valores de la burguesía. Esto lo expresaron a través de dos
caminos distintos:

 La evasión de la realidad.
 El deseo de cambiar el mundo a través del arte.

Representantes del modernismo hispanoamericano


 José Martí. La Habana, 1853-Campamento de Dos Ríos, Cuba, 1895. ...
 Rubén Darío. Metapa, Nicaragua, 1867-León 1916. ...
 Leopoldo Lugones. Córdoba, 1874-Buenos Aires, 1938. ...
 Ricardo Jaimes Freyre. ...
 Carlos Pezoa Véliz. ...
 José Asunción Silva. ...
 Manuel Díaz Rodríguez. ...
 Rafael Ángel Troyo.

Fragmento de “Despedida”, de Gottfried Benn


Ajeno desde joven a la ilusión de la realidad
negándose a un mundo fácilmente otorgado,
cansado del engaño de los detalles
porque ninguno acompaña al Yo profundo;
ahora, desde el fondo mismo, inconmovible,
ningún vocablo o signo te revela
-a quién le ocurrirá, será mejor que olvide
y no toque más las horas idas.

ULTRAISMO

Ultraísmo es el nombre de una corriente de


la literatura que surgió en el territorio español
en 1918 en oposición al modernismo. El movimiento
reunió a escritores españoles y latinoamericanos que
compartían criterios de la estética y que apostaban por
un cambio de las técnicas y filosofías dominantes.

El ultraísmo comenzó a desarrollarse en tertulias que


se realizaban en un café madrileño bajo la dirección
de Rafael Cansinos Assens. Autores como Juan
Larrea, Pedro Garfias, Lucía Sánchez
Saornil y Gerardo Diego se hicieron habitúes de
dichas tertulias y protagonistas del grupo. En América
Latina, el argentino Jorge Luis Borges fue uno de los
principales exponentes del ultraísmo.
Principales características

Además de todo lo expuesto, tenemos que subrayar


otra serie de datos relevantes acerca de esta corriente
o movimiento literario, tales como estos:

Principales representantes del ultraísmo


El ultraísmo contó con un núcleo compuesto por Gerardo
Diego, Pedro Garfias, Pedro Iglesias Caballero, Juan
Larrea, Ernesto López-Parra, Lucía Sánchez Saornil,
Guillermo de Torre e Isaac del Vando-Villar.

Primavera
La ultima nieve sobre tus hombros
Amada vestida de claro color
El ultimo arco iris
Hecho abanico entre tus manos
Mira el hombre que mueve el manubrio
Enseña a cantar a los pájaros nuevos
La primavera es el poema
De nuestro amigo el jardinero
Katherine Sosa

Realismo
El realismo es la corriente artística y literaria que surge en
Francia a mediados del siglo XIX. Aunque antes de esa
fecha ya existían representaciones de la realidad y de la
vida, no fue hasta ese momento que se adoptó el término
para referirse a un movimiento artístico basado en la
representación fidedigna de la realidad y de la vida
cotidiana.

Sin embargo, el concepto realismo abarca un sentido más


amplio. Realismo también es la predisposición a exponer
las cosas sin idealizarlas.

Asimismo, el término realismo ha formado parte de


diferentes disciplinas a lo largo de la historia, como la
filosofía o la política, y otras manifestaciones artísticas
posteriores como el cine.

Qué es la Pintura realista

Surge como reacción a la pintura romántica. En un


contexto de industrialización, el artista toma conciencia de
las consecuencias de la misma y asume y denuncia los
problemas sociales derivados a través de sus obras. El arte
es un “medio” para denunciar la realidad.

Características de la pintura realista

En la pintura realista destacan las siguientes


particularidades:

 Denuncia de las secuelas de la industrialización.


 Pérdida del deseo de evasión del Romanticismo para
centrar la atención en la realidad objetiva y el presente.
 El hombre aturdido por su trabajo abrumador es un tema
frecuente en las obras.

son los principales autores del realismo?


La novela: principales autores
 Juan Valera.
 José María de Pereda.
 Pedro Antonio de Alarcón.
 Benito Pérez Galdós.
 Emilia Pardo Bazán.
 Luis Coloma.
 Leopoldo Alas (Clarín)
 Armando Palacio Valdés.
Ante una pirámide de Egipto
Quiso imponer al mundo su memoria

un rey, en su soberbia desmedida,

y por miles de esclavos construida

erigió esta pirámide mortuoria.

¡Sueño estéril y vano! Ya la historia

no recuerda su nombre ni su vida,

que el tiempo ciego en su veloz corrida

dejó la tumba y se llevó la gloria.

El polvo que en el hueco de su mano

contempla absorto el caminante ¿ha sido

parte de un siervo o parte del tirano?

¡Ah! todo va revuelto y confundido,

que guarda Dios para el orgullo humano

solo una eternidad: la del olvido.

Autor: Gaspar Nuñes

Generación del 27
Se denomina generación del 27 a un conjunto de escritores y
poetas españoles del siglo XX que se dio a conocer en el panorama cultural
alrededor de 1927,1 con motivo del homenaje a Luis de Góngora organizado aquel
año por José María Romero Martínez en el Ateneo de Sevilla para conmemorar el
tercer centenario de la muerte del autor del Siglo de Oro, y como relevo de
la generación del 98 y el novecentismo.
El concepto y la denominación de grupo generacional fue ya puesto en duda por uno de sus
miembros, Pedro Salinas, con el argumento de que los integrantes del mismo no cumplen los
criterios que Julius Peterson dio al concepto historiográfico de «generación»:1

 Nacimiento en años poco distantes;


 Formación intelectual semejante;
 Relaciones personales;
 Participación en actos colectivos propios;
 Existencia de un «acontecimiento generacional» que aglutine sus voluntades;
 Pre de un «guía»;
 Rasgos comunes de estilo («lenguaje generacional»);
 Anquilosamiento de la generación anterior.
Es cierto que el nacimiento de la mayoría se sitúa en un lapso que no rebasa los 17 años,
pero no todos los autores nacidos entonces se han considerado miembros del grupo.
Coinciden los elegidos en una sólida formación universitaria y en la consideración de Juan
Ramón Jiménez como poeta de referencia. Se pone en duda, asimismo la existencia de un
«lenguaje generacional», ya que, si bien todos ejercieron estéticas de la vanguardia artística,
no renunciaron a la tradición literaria culta del Siglo de Oro o la popular, y evolucionando
desde el neopopularismo al surrealismo.[cita requerida]
Aunque se podría considerar «acontecimiento generacional» el acto de reivindicación en el
Ateneo de Sevilla de la segunda época de Luis de Góngora, la llamada culterana, rechazada
por la crítica literaria oficial, no se levantaron con firmeza contra generaciones anteriores, ni
estas se hallaban en un estado de anquilosamiento; muy por el contrario constituyen una
generación «cumulativa» que asume los logros de las anteriores, y todas estas generaciones
del 98, del 14 y del 27, las que forman la llamada Edad de Plata de la literatura española,
reaccionaban en el fondo contra una sola: la decimonónica, identificada con la falsía del
turnismo de partidos y de la Restauración monárquica, contra las que se levantó también
el krausismo, la Institución Libre de Enseñanza y el regeneracionismo, corrientes de las que
se sienten herederos. En cuanto a si existieron relaciones personales entre ellos, las hubo,
incluso de profunda amistad al menos entre los que residieron en la misma zona y
frecuentaron lugares como la Residencia de Estudiantes, donde entraron en contacto con las
vanguardias artísticas y científicas, y el Centro de Estudios Históricos, donde asimilaron las
tradiciones culturales hispánicas, así como en las redacciones de revistas como La Gaceta
Literaria, Cruz y Raya, Revista de Occidente, Litoral, Verso y Prosa, Caballo Verde para la
Poesía y Octubre entre otras, lo cual les hace tener una conciencia colectiva unida por
experiencias comunes y propias definidas al cabo por la positiva de la República y las
negativas de la Guerra Civil y los exilios exterior e interior.1
autores hay en la Generación del 27?
Los autores que tradicionalmente se asocian a esta generación son: Pedro
Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, Federico García
Lorca, Vicente Aleixandre, Emilio Prados, Rafael Alberti, Luis Cernuda y
Manuel Altolaguirre. Aunque el grupo puede ser más extenso.
ADOLESCENCIA
Vinieras y te fueras dulcemente,
de otro camino
a otro camino. Verte,
y ya otra vez no verte.
Pasar por un puente a otro puente.
—El pie breve,
la luz vencida alegre—.
Muchacho que sería yo mirando
aguas abajo la corriente,
y en el espejo tu pasaje
fluir, desvanecerse.
Barroco
El Barroco fue un período cultural que abarcó desde la segunda
mitad del siglo XVI hasta la primera mitad del siglo XVIII. Se
difundió por toda Europa y América Latina, así como por otras
regiones colonizadas por los europeos.

El barroco contrastó con el Renacimiento por expresar una


sensibilidad pesimista, desengañada, crítica y compleja. Esto se
debe a que literatura y el arte barrocos representan una época
inquietante desde el punto de vista psicológico, cultural y social,
además de político y económico.

Caravaggio: La vocación de San Mateo. 1601. Óleo sobre lienzo. 3,38 m


× 3,48 m. Capilla Contarelli, Italia.

El barroco se puede definir como el “arte de parecer”, ya en las


artes, ya en la literatura. Tres elementos pueden ser considerados
fundamentales de su estética: el efectismo, la espectacularidad y
la emocionalidad.

El término barroco se usó por primera vez a mediados del siglo


XVIII en pleno contexto de la Ilustración o Iluminismo.
Originalmente, el significado de barroco fue tomado de portugués
antiguo, pues "barroco" designaba un tipo de perla de forma
irregular.

En la época de la Ilustración, los iluministas Diderot y Rousseau


usaron esta palabra para describir de manera peyorativa el arte de
ese período, al que consideraban estrambótico y confuso. Sin
embargo, la historiografía posterior ha reivindicado el valor
estético de este período.

Características del barroco

Pedro Pablo Rubens: Los horrores de la guerra . 1638. Óleo sobre tabla.
206 × 345 cm.
Palacio Pitti, Florencia.

Si algo caracterizó al barroco fue el principio del horror vacui,


expresión latina que quiere decir 'horror al vacío'. El arte barroco,
en todas sus manifestaciones, gusta de los acabados abigarrados
y recargados, con lo que pretende llenar todo el espacio.

Autores y obras de la literatura barroca


 Luis de Góngora, España, 1561-1627. ...
 Lope de Vega, España, 1562-1635. ...
 Francisco de Quevedo, España, 1580-1645. ...
 Tirso de Molina, España, 1579-1648. ...
 Pedro Calderón de la Barca, España, 1600-1681. ...
 Sor Juana Inés de la Cruz, Nueva España, 1648-1695
 John Milton, Inglaterra, 1608-1674.

Amor constante más allá de la muerte (Francisco de


Quevedo)
«Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día;
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera;

mas no de esa otra parte en la ribera


dejará la memoria, en donde ardía;
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.

Alma a quien todo un dios prisión ha sido,


venas que humor a tanto fuego han dado,
medulas, que han gloriosamente ardido,

su cuerpo dejará, no su cuidado;


serán ceniza, mas tendrán sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.»

Contemporáneo
Contemporáneo viene del vocablo en latín contemporaneus, que quiere decir
lo que coincide en el tiempo. Esto implica que dos personas que viven en el mismo
periodo de tiempo son contemporáneas. Lo mismo puede decirse de aquellos
acontecimientos que suceden en el mismo periodo de tiempo (los Juegos
Olímpicos de 1968 en México y las revueltas estudiantiles de Paris son hechos
contemporáneos, pues tuvieron lugar el mismo año).
El ser humano necesita ordenar el conocimiento de alguna manera. Para
comprender la historia resulta muy útil ordenarla de una manera cronológica.
Tradicionalmente la historia de la humanidad se divide en grandes etapas:
la prehistoria, la Edad Antigua, la Edad Media, la Edad Moderna y, el periodo
más reciente, la Edad Contemporánea. El cambio de una edad a otra permite
estudiar y comprender de una manera homogénea un periodo de tiempo amplio.
Los historiadores están de acuerdo en indicar que la Edad Contemporánea se
inició con la Revolución Francesa de 1789. La elección de este acontecimiento
histórico tiene mucho sentido, ya que la Revolución Francesa supuso un cambio
significativo con la etapa anterior y un nuevo rumbo en la historia de la humanidad.
Sin embargo, la idea de mundo contemporáneo no es más que una forma
de clasificación, pues en la práctica no hay una ruptura absoluta con las etapas
anteriores. De hecho, muchas de las realidades contemporáneas provienen del
mundo antiguo o el medieval.
El concepto de contemporáneo se utiliza como sinónimo de actual. Así, la
moda, la cocina o la música del presente se definen como contemporáneas. Con
esta denominación trasmitimos que una actividad forma parte de las coordenadas
del presente.

La contemporaneidad es un concepto eminentemente temporal y, en


consecuencia, lo que ahora es presente será antiguo en un futuro. El tiempo es,
en pocas palabras, el elemento que acaba ordenando la propia vida de cada
persona y el devenir de la propia humanidad.

Autores Contemporáneos
Según algunos críticos, los escritores aglutinados dentro de este grupo son; Jorge
Cuesta, Jaime Torres Bodet, Gilberto Owen, Salvador Novo, Xavier
Villaurrutia, José Gorostiza, Bernardo Ortiz de Montellano, Enrique González
Rojo y Carlos Pellicer
AMOR, MI AMOR... (Jaime Sabines, mexicano)

Amor mío, mi amor, amor hallado


de pronto en la ostra de la muerte.
Quiero comer contigo, estar, amar contigo,
quiero tocarte, verte.

Me lo digo, lo dicen en mi cuerpo


los hilos de mi sangre acostumbrada,
lo dice este dolor y mis zapatos
y mi boca y mi almohada.

Te quiero, amor, amor absurdamente,


tontamente, perdido, iluminado,
soñando rosas e inventando estrellas
y diciéndote adiós yendo a tu lado.

Te quiero desde el poste de la esquina,


desde la alfombra de ese cuarto a solas,
en las sábanas tibias de tu cuerpo
donde se duerme un agua de amapolas.

Cabellera del aire desvelado,


río de noche, platanar oscuro,
colmena ciega, amor desenterrado,

voy a seguir tus pasos hacia arriba,


de tus pies a tu muslo y tu costado.

EL MODERNISMO

En la literatura en lengua española, el término modernismo denomina a un movimiento


literario que se desarrolló entre los años 1880-1917, fundamentalmente en el ámbito de la
poesía, que se caracterizó por una ambigua rebeldía creativa, un refinamiento narcisista y
aristocrático, el culturalismo literario y una profunda renovación estética del lenguaje y la
métrica. Se conoce por modernismo a la forma hispánica de la crisis universal de las letras
y del espíritu, que se manifiesta en el arte, la ciencia, la religión y la política. En ciertos
aspectos su eco se percibe en movimientos y en corrientes posteriores. En las raíces del
Modernismo hay un profundo desacuerdo con la civilización burguesa. En ciertos sentidos,
se trata de una corriente heredera del Posromanticismo decimonónico, al que da una especie
de salida, y en las demás artes esta estética se plasma en las formas del art nouveau (en
Bélgica y Francia), Modern Style (en Inglaterra), Sezession (en Austria), Jugendstil (en
Alemania y Países Nórdicos), Liberty (en Estados Unidos), Floreale (en Italia), y
Modernismo artístico (en España e Hispanoamérica). Tradicionalmente, se ha asociado su
comienzo a la publicación, en 1888, de Azul..., de Rubén Darío, a causa de la innegable
repercusión del libro en la literatura de Hispanoamérica. El término modernismo designaba
cierta corriente heterodoxa de renovación religiosa, y se aplicó en el campo de las artes a
tendencias surgidas en los últimos veinte años del siglo XIX. Sus rasgos más comunes eran
un marcado anticonformismo y un esfuerzo de renovación. En su origen el apodo de
«modernistas» era utilizado con un matiz despectivo.
El Modernismo cuenta con un elevado número de escritores en América. Algunos han
tenido verdadera repercusión internacional y otros han quedado reducidos al ámbito
nacional. Un aspecto común fueron los viajes que hicieron, bien por trabajo (muchos fueron
diplomáticos), bien por ampliar sus conocimientos y conocer a otros escritores. Rubén
Darío es, sin lugar a dudas, el más influyente, pero también hay otros que influyeron fuera
de sus países de origen. Algunos autores que participaron de una estética semejante y
publicaron en la primera mitad de la década de 1880, como José Martí, Max Henriquez

1. “El sembrador de estrellas” Enrique González Martínez (México)

Y pasarás, y al verte se dirán: “¿Qué camino


Va siguiendo el sonámbulo?” Desatento al murmullo
Irás, al aire suelta la túnica de lino,
La túnica albeante de desdén y de orgullo.

Irán acompañándote apenas unas pocas


Almas hechas de ensueño… Mas al fin de la selva,
Al ver ante sus ojos el murallón de rocas,
Dirán amedrentadas: “Esperemos que vuelva”.

Y treparás tú solo los agrietados senderos;


Vendrá luego el fantástico desfile de paisajes,
Y llegarás tú solo a descorrer celajes
Allá donde las cumbres besan a los luceros.

Bajarás lentamente una noche de luna


Enferma, de dolientes penumbras misteriosas,
Sosteniendo tus manos y regando una a una,
Con un gesto de dádiva, las lumínicas rosas.

Y mirarán absortos el claror de tus huellas,


Y clamará la jerga de aquel montón humano:
“Es un ladrón de estrellas…” Y tu pródiga mano
Seguirá por la vida desparramando estrellas…

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