Está en la página 1de 48

JUICIO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO FEDERAL

DEMANDA DE NULIDAD

MAGISTRADOS QUE INTEGRAN LA SALA

REGIONAL DEL CENTRO NORTE I EN TURNO

DEL TRIBUNAL FEDERAL DE JUSTICIA

FISCAL Y ADMINISTRATIVA.

P R E S E N T E.-

LUIS ALFONSO MORALES FERNANDEZ, promoviendo en nombre

y representación de la empresa denominada “ADMINISTRACIÓN Y

PROYECTOS DE MERCADO, S.A. DE C.V.”, carácter acredito mediante el

instrumento notarial que anexo al presento, con R.F.C. APM0301278V2, con

domicilio fiscal ubicado en CALLE CORTEZ DE MONROY, NUMERO 2305,

COLONIA SAN FELIPE, C.P. 31310, CHIHUHUA, CHIHUAHUA., señalando

como domicilio para oír y recibir notificaciones en PLAZA DIAMANTE

LOCAL 14, ENTRE PERIFERICO DE LA JUVENTUD Y BOULEVARD

ORTIZ MENA, FRACCIONAMIENTO AVICOLA 1, C.P. 31207,

CHIHUAHUA, CHIHUAHUA; autorizando para mismos efectos a los CC.

Vicente Elizarraras Rivas, Carlos Elizarraras Rivas, Leticia Alejandra Loo Loya;

ante ustedes con el debido respeto comparezco a efecto de exponer:

Que por medio del presente ocurso procedo en nombre de mi

representada, a DEMANDAR LA NULIDAD de la resolución

08MAS200804119602, de fecha 10 de Abril de 2009, emitido por la C.P.

MARIA DE JESUS MUÑOZ ALANIZ, quien se ostenta como Subgerente de

Recaudación Fiscal del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los

Trabajadores en el Estado de Chihuahua, en la cual determina un crédito fiscal

y un multa cargo de mi mandante por la cantidad de $38,670.51 derivado de

supuestas omisiones de aportaciones y amortizaciones por créditos para la

vivienda al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores.


AUTORIDADES DEMANDADAS:

C. SUBGERENTE DE RECAUDACION FISCAL DEL INSITUTO DEL

FONDO NACIONA DE LA VIVIENDA PARA LOS TRABAJADORES CON

DOMICILIO CONOCIDO EN ESTA CIUDAD.

HECHOS:

ÚNICO.- Con fecha 24 DE JUNIO DE 2011, se notificó a mi poderdante

la resolución 08MAS200804119602, de fecha 10 DE ABRIL DE 2009, emitido

por la C.P. MARIA DE JESUS MUÑOZ ALANIS, quien se ostenta como

Subgerente de Recaudación Fiscal del Instituto del Fondo Nacional de la

Vivienda para los Trabajadores en el Estado de Chihuahua; resolución la cual

resulta ser ilegal y violatoria de los derechos de mi representada, por lo que,

me permito hacer valer en su contra los siguientes:

AGRAVIOS:

PRIMERO.- La resolución determinante 08MAS200804119602, de fecha

10 de Abril de 2009, no fundamenta de manera precisa y correcta que se haya

notificado el crédito que se impugna conforme a derecho, violando de esta

manera lo establecido en los artículos 16 Constitucional y 38, fracción IV del

Código Fiscal de la Federación al no cumplir con una debida fundamentación y

motivación, así como los artículos 134 y 137 del Ordenamiento Legal

precedentemente citado.

En efecto, el precepto 14 Constitucional, señala que nadie podrá ser

privado de la vida, de la libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos,

sino mediante juicio seguido antes los tribunales previamente establecidos en el

que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento y conforme a las

leyes expedidas con anterioridad al hecho.

Por otra parte, el dispositivo 16 de Nuestra Carta Magna y el diverso 38

fracción IV del Código Tributario, establecen que nadie puede ser molestado en
su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de

mandamiento escrito de la autoridad competente que funde y motive la causa

legal del procedimiento.

Al respecto, el artículo 134 del Código Hacendario, establece que las

notificaciones de los actos administrativos se harán personalmente cuando se

trate de citatorios, requerimientos, solicitudes de informes o documentos y de

actos administrativos que puedan ser recurridos.

El numeral 137 del Ordenamiento citado con anterioridad, establece que

cuando la notificación deba hacerse personalmente y el notificador no

encuentre a quien se deba notificar, le dejará citatorio para que lo espere a una

hora fija del día hábil siguiente.

En la especie se viola en perjuicio de mi representada las garantías

aludidas ya que la autoridad demandada pretende maliciosamente acreditar

que la resolución determinante 08MAS200804119602, de fecha 10 de Abril de

2009, se le notifico de manera legal a mi representada, siendo esto totalmente

contrario ya que la misma se practico indebidamente, tal y como se podrá

corroborar de la simple lectura minuciosa que realice del acta de notificación

que exhibió como prueba, en virtud de que no me fue notificada

personalmente, sino a un tercero extraño, el cual desde este momento declaro

desconocer.

Por lo que ante tal omisión es claro y preciso que la autoridad al

pretender notificar el oficio impugnado lo entrego a persona distinta del

representante legal de la persona moral y de igual forma la persona física con

quien se entendió supuestamente la diligencia de notificación la desconozco,

por tal motivo la notificación del multicitado oficio carece de los requisitos

esenciales de las notificaciones personales, los cuales se encuentran consagradas

en los preceptos 134 y 137 del Código Fiscal de la Federación, por lo que resulta

procedente se deje sin efectos la resolución que se impugna por devenir de un

acto viciado desde su ilegalidad, desde su origen y por carecer de validez

jurídica.
Niego lisa y llanamente que la autoridad demandada, le hayan notificado

a mi poderdante la resolución determinante 08MAS200804119602, de fecha 10

de Abril de 2009, conforme a lo dispuesto por los diversos 134, fracción I y 137

del Código Hacendario, dejándola así en un completo estado de indefensión.

Lo anterior es así, ya que los numerales 134, fracción I y 137 primer y

segundo párrafo en su parte conducente establecen lo siguiente:

Artículo 134.- Las notificaciones de los actos administrativos

se harán:

I. Personalmente o por correo certificado o mensaje de datos

con acuse de recibo, cuando se trate de citatorios,

requerimientos, solicitudes de informes o documentos y de

actos administrativos que puedan ser recurridos.

Artículo 137.- Cuando la notificación se efectúe personalmente

y el notificador no encuentre a quien deba notificar, le dejará

citatorio en el domicilio, sea para que espere a una hora fija del

día hábil siguiente o para que acuda a notificarse, dentro del

plazo de seis días, a las oficinas de las autoridades fiscales.

Tratándose de actos relativos al procedimiento administrativo

de ejecución, el citatorio será siempre para la espera antes

señalada y, si la persona citada o su representante legal no

esperaren, se practicará la diligencia con quien se encuentre en

el domicilio o en su defecto con un vecino.

(El énfasis es nuestro).

Sin embargo, niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del

Código Tributario que se hubiese dejado citatorio para efectos de entender la

diligencia de notificación directamente con quien suscribe.

Suponiendo, sin conceder, que se hubiese dejado el citatorio que

disponen los artículos que preceden, de los mismos se permite concluir que,

cuando se trate de citatorios, requerimientos, solicitudes de informes o


documentos que puedan ser recurridos, los mismos deberán ser notificados

personalmente, en el entendido de que, cuando el notificador o actuario se

presente en el domicilio a notificar y no encuentre al interesado o a su

representante legal, le dejará citatorio sea para que espere a una hora fija del día

hábil siguiente o para que el contribuyente acuda a notificarse a las oficinas de

la autoridad administrativa, quedando a discreción del actuario o notificador el

dejar un citatorio para cualquiera de los efectos antes señalados, siendo en el

caso concreto, el actuario si en algún determinado momento acreditase que dejó

el citatorio, y que el mismo fuese para efectos de que lo esperara a una hora fija

del día hábil siguiente, la notificación que se impugna es ilegal, toda vez que

conjeturando, sin atribuir, que el notificador se constituyó al día siguiente en el

domicilio a notificar, eso es, entendió una diligencia de notificación de carácter

personal con un tercero extraño, sin facultades para entender ese tipo de

diligencias, lo que contraviene lo previsto por los artículos 134, fracción I y 137

primer párrafo del Código Fiscal de la Federación, por lo que debe declarase la

nulidad lisa y llana del acto impugnado, de conformidad a lo dispuesto en los

artículos 51, fracción IV y 52, fracción II, de la Ley Federal de Procedimiento

Contencioso Administrativo.

Los artículos antes invocados, disponen los casos en los cuales la

notificación deberá ser entendida de manera personal con el interesado, o en el

caso de personas morales, con su representante legal, persona única con

facultades para cumplimentar obligaciones y ejercer los derechos de los entes

abstractos de naturaleza mercantil, y al ser la resolución que se impugna, deben

ser notificados de manera personal; por lo que debió practicarse la diligencia de

notificación conmigo y no con persona diversa, toda vez que no existe precepto

legal alguno que faculte al actuario para que proceda a entender las diligencias

de notificación de índole personal, con la primer persona que encuentre

presente en el domicilio al momento de notificar.

Así las cosas y suponiendo, sin conceder, que la autoridad sostenga que

la notificación es válida al haberse realizado en términos de los diversos

anteriormente citados, Ad Cautelam, procedo ampliar y reforzar los

argumentos vertidos con anterioridad, a efecto de demostrar que en ningún


momento se me notificó legalmente la resolución determinante

08MAS200804119602, de fecha 10 de Abril de 2009.

Lo anterior es así, ya que admitiendo, sin atribuir, que se hubiese

pretendido notificar la resolución que se impugna, en la supuesta diligencia de

notificación, se incumplieron con las formalidades que se encuentran previstas

en los artículos 134 al 137 del Código Fiscal de la Federación.

Dispone el diverso 134 fracción I de nuestro Ordenamiento Tributario,

que las notificaciones de los actos administrativos se harán personalmente o por

correo certificado con acuse de recibo, cuando se traten de citatorios

requerimientos, solicitudes de informes o documentos y de actos

administrativos que puedan ser recurridos; por su parte el precepto 137 primer

y segundo párrafo del mismo ordenamiento legal que se invoca, dispone que

cuando la notificación se efectué personalmente y el notificador no encuentre a

quien deba notificar, le dejará citatorio en el domicilio, sea para que espere a

una hora fija del día hábil siguiente o para que acuda a notificarse dentro de un

plazo de seis días hábiles a las oficinas de las autoridades fiscales, y si la

persona a notificar no esperare en la hora y fecha señaladas en el citatorio, se

practicará la diligencia con quien se encuentre en el domicilio, sin embargo

para que el notificador proceda a entender la diligencia con una persona que

no tenga facultades para tal efecto, deberá hacer constar los motivos por los

cuales procede de esta forma, pues de no hacerse constar tal circunstancia en

el texto del acta de notificación se estaría violentando la garantía de audiencia

que prevé el artículo 14 de Nuestra Ley Suprema.

De lo anteriormente expuesto, niego lisa y llanamente conforme a lo

contenido en el artículo 68 del Código Fiscal de la Federación que haya

procedido citatorio a la diligencia de notificación que se impugna por este

medio; de igual manera en los mismos términos niego que se hubieran

cumplido con las formalidades del procedimiento a que se refieren los artículos

134 al 137 del Código Fiscal de la Federación.


Y en el caso, de que hubiese existido el referido citatorio, niego lisa y

llanamente en términos del conjurado numeral antes mencionado, que el

mismo contenga los requisitos legales que prescriben los artículos señalados

anteriormente.

En virtud de lo anterior, y atribuyendo sin otorgar, que haya procedido

citatorio a la diligencia de notificación realizada, la misma se encuentra viciada

de ilegalidad, porque es de explorado derecho que los actos administrativos

que puedan ser recurridos, deberán ser notificados de manera personal al

interesado o a la persona facultada para ello, y en el caso que nos ocupa, el acta

de notificación levantada para notificar la resolución que el día de hoy se

impugna, incumple con lo previsto por los diversos 134 a 137 del Código

Hacendario, pues es de fácil deducción que en el acta de notificación en

cuestión, el notificador en ningún momento requirió mi presencia o la de mi

mandante, a pesar de tener la obligación de ello, entendiendo la diligencia de

notificación con la primera persona que encontró presente en mi domicilio

fiscal, hecho que resulta ilegal y viola en mi perjuicio lo previsto por el precepto

14 de nuestra Carta Magna, en relación con los artículos mencionados en líneas

anteriores, pues dejaron de observarse las formalidades esenciales del

procedimiento dejándome en completo estado de indefensión .

No resulta suficiente para dar cumplimiento al requisito de hacer constar

los motivos por los cuales se entendió la diligencia de notificación con un

tercero, el hecho de que el notificador exponga en el texto de la constancia de

notificación que ello deriva de que el representante legal o el directamente

interesado “no comparece él contribuyente”, pues de tal manifestación podrían

derivarse actos ilegales, como que el notificador no se constituya efectivamente

en el domicilio fiscal de la persona a notificar.


Efectivamente, la notificación en comento es del todo ilegal, toda vez que

es estrictamente necesario que se haga constar pormenorizadamente que:

a) El domicilio en el cual se encuentra es el del contribuyente a

notificar.

b) Los datos o elementos que tomó en consideración para llegar a tal

conclusión

c) El nombre de la persona a la cual requirió la presencia del

directamente interesado o de su representante legal.

d) La respuesta que obtuvo por parte de esa persona y que le basto

para concluir que la persona requerida no se encontraba en el

domicilio en que se actúa.

e) El nombre de la persona con la cual se entendió la diligencia de

notificación.

f) Datos identificatorios con los cuales acredite el notificador que la

persona con la cual se entiende la diligencia de notificación, es en

efecto quien dice ser, así como todos aquellos elementos que

permitan dilucidar que la notificación se efectuó en el domicilio

correcto y con la persona idónea, o en su defecto que se efectuó

con una persona cierta, misma que se identifico ante el notificador

de manera fehaciente.

Resta decir, que si bien es cierto que el artículo 137 del Código Fiscal de

la Federación, no exige literalmente la obligación por parte del notificador de

que al practicar la diligencia de notificación levante acta circunstanciada, en la

que se asienten los hechos, motivos, razones particulares y causas inmediatas

que lo llevaron a entender las diligencias de notificación con una persona

distinta del directamente interesado, también es cierto que tal obligación de

levantar un acta circunstanciada a cargo del notificador y/o actuario en donde

se mencionen los datos que han quedado descritos, derivan del numeral en

comento, ya que no se puede dejar en estado de indefensión al particular

afectando con hechos imprecisos e incoherentes que obren en las supuestas

actas de notificación.
Niego lisa y llanamente en términos de lo establecido en el numeral 68

del Código Tributario, que en la supuesta acta de notificación se encuentren

asentados los hechos, motivos, razones particulares o causas inmediatas que

haya tomado en consideración el notificador para no efectuar las diligencias

de notificación directamente con mi persona.

Sirve de apoyo a lo anterior la Jurisprudencia sustentada por el Segundo

Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Tercer Circuito, visible en la

página 99 de la Gaceta del Seminario Judicial de la Federación número 37,

correspondiente al mes de Enero de 1991, que al rubro señala:

“…NOTIFICACIONES PERSONAL EN MATERIA FISCAL.

REQUISITOS QUE SE DEBEN HACER CONSTAR

CUANDO NO SE ENCUENTRE A QUIEN SE DEBA

NOTIFICAR…”

Del mismo modo, sustenta lo anterior los siguientes criterios

jurisprudenciales:

NOTIFICACIÓN FISCAL DE CARÁCTER PERSONAL.

DEBE LEVANTARSE RAZÓN CIRCUNSTANCIADA DE LA

DILIGENCIA (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO 137

DEL CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN).

Si bien es cierto que dicho precepto únicamente prevé la

obligación del notificador de levantar razón circunstanciada de

las diligencias, tratándose de actos relativos al procedimiento

administrativo de ejecución y, en concreto, cuando la persona

que se encuentre en el lugar o un vecino con quien pretendan

realizarse aquéllas, se negasen a recibir la notificación, también

lo es que atendiendo a las características propias de las

notificaciones personales, en concordancia con las garantías de

fundamentación y motivación que debe revestir todo acto de

autoridad, la razón circunstanciada debe levantarse no sólo en

el supuesto expresamente referido, sino también al diligenciarse

cualquier notificación personal, pues el objeto de las

formalidades específicas que dispone el numeral en cita permite

un cabal cumplimiento a los requisitos de eficacia establecidos


en los artículos 14 y 16 de la Constitución Política de los Estados

Unidos Mexicanos y el respeto a la garantía de seguridad

jurídica de los gobernados.

Contradicción de tesis 87/2000-SS. Entre las sustentadas por los

Tribunales Colegiados Cuarto en Materia Administrativa del

Primer Circuito, Primer y Segundo del Sexto Circuito, ahora

Primer y Segundo Tribunales Colegiados en Materia Civil del

mismo circuito y Segundo Tribunal Colegiado en Materia

Administrativa del Tercer Circuito. 2 de marzo de 2001. Cinco

votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretaria: Maura Angélica

Sanabria Martínez.

Tesis de jurisprudencia 15/2001. Aprobada por la Segunda Sala

de este Alto Tribunal, en sesión privada del treinta de marzo de

dos mil uno.

NOTIFICACIÓN PERSONAL EN MATERIA FISCAL.

REQUISITOS QUE DEBE CUMPLIR QUIEN LA PRACTICA

CUANDO SE REALIZA A TRAVÉS DE PERSONA

DISTINTA DEL DESTINATARIO.

De la interpretación del artículo 137 del Código Fiscal de la

Federación, se desprende que cuando se lleve a cabo una

notificación de carácter personal, con persona distinta del

destinatario, es menester que el notificador cumpla con los

requisitos siguientes: a) que levante un acta circunstanciada en

la que asiente que se constituyó en el domicilio respectivo; b)

que en ésta asiente que requirió la presencia de la persona

citada o su representante legal, y que al no estar presente se

dejó citatorio con alguna persona para que lo esperara a una

hora fija del día siguiente; y c) que se constituyó el día y hora

que señaló en el citatorio en el domicilio indicado, requirió la

presencia de la persona buscada y que al no encontrarlo

practicó la notificación con quien se encontró en el domicilio o

con un vecino. Por consiguiente, debe considerarse que la

notificación que no cumple con los requisitos antes

mencionados, deja al gobernado en estado de indefensión al no

poder combatir hechos imprecisos; de ahí que sea necesario que

existan constancias que demuestren fehacientemente cómo se

llevó a cabo la notificación.


DÉCIMO TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA

ADMINISTRATIVA DEL PRIMER CIRCUITO. Clave: I.13o.A. ,

Núm.: 8 A

(El énfasis es nuestro).

NOTIFICACIONES FISCALES DE CARACTER PERSONAL

ES ILEGAL UTILIZAR FORMATOS PARA SU PRACTICA

SI INCLUYEN PREIMPRESOS ASPECTOS RELATIVOS AL

REQUERIMIENTO DEL INTERESADO O DE SU

REPRESENTANTE POR SER UN REQUISITO ESENCIAL

PARA SU DEBIDO DESAHOGO.

Es importante mencionar que las autoridades administrativas están

obligadas a observar lo dispuesto por las jurisprudencias emitidas por los

Tribunales Colegiados de Circuito, y la Sala Superior del Tribunal Federal de

Justicia Fiscal y Administrativa, ello de conformidad con lo previsto por el

diverso 193 de la Ley de Amparo.

Esto es así, ya que de conformidad con lo previsto por el precepto 134

fracción I y 137 primer y segundo párrafos del Código Fiscal Federal, lo actos

administrativos que sean legalmente impugnables deberán ser notificados

personalmente y tratándose de personas morales la notificación deberá

entenderse con la única persona facultada para dar cumplimiento a sus

obligaciones y ejercer sus derechos, esto es, el representante legal o

administrador único de la persona moral, tal y como lo prevé el dispositivo 137

segundo párrafo del Ordenamiento Tributario señalado, y el cual me permito

transcribir a continuación:

ARTICULO 137.- “... el citatorio será para la espera antes señalada

y, si la persona citada o su REPRESENTANTE LEGAL no

esperaren, se practicará la diligencia con quien se encuentre...”


Niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del Código

Tributario, que el notificador hubiese entendido la diligencia de notificación de

la resolución impugnada ante el representante legal de la hoy actora, con apego

a los preceptos 134 fracción I y 137 primer y segundo párrafos señalados en

líneas anteriores.

Ahora bien, si la autoridad demandada en determinado momento

alegara que el notificado se constituyo en mi domicilio fiscal, se debe aclarar

que esta circunstancia no puede entenderse por válida por el simple hecho de

que en machotes preimpresos se establezcan algunos datos del domicilio

fiscal ya que con los mismos no se concluye que el funcionario se haya

cerciorado de tales circunstancias, las cuales se deben hacer en el propio acto

de notificación.

Es aplicable al caso concreto de manera analógica, la siguiente tesis cuyo

rubro y texto son los siguientes:

ORDEN DE INSPECCION.-

Tal y como lo establece el artículo 16 constitucional dentro de su

contexto legal, nadie puede ser molestado en su persona, familia,

domicilio, papeles o posesiones sino en virtud de un mandamiento

escrito de autoridad competente que funde y motive la causa legal

del procedimiento, por lo que de acuerdo con dicho precepto la

orden de inspección mediante la cual los inspectores proceden a

revisar vehículos de procedencia extranjera en tránsito, debe

emitirse en su totalidad por la autoridad competente, por lo que es

ilegal que ésta se limite a firmarla conteniendo la misma espacios

en blanco, ya que esto trae como consecuencia que las personas

que la portan decidan en forma unilateral a quien se le va a

practicar la revisión correspondiente, por lo que dicha orden es

ilegal si dichos espacios en blanco son llenados en forma

manuscrita por los inspectores actuantes.- Juicio No.


158/95-.
SEGUNDO.- La resolución que en este juicio se combate viola los

artículos 14 y 16 Constitucionales; así como el diverso 38, fracción IV, del

Código Fiscal de la Federación, y las Jurisprudencias de Fundamentación y

Motivación, preceptos legales que establecen lo siguiente:

Artículo 14 Constitucional

A ninguna Ley se dará efecto retroactivo en perjuicio de persona

alguna.

Nadie podrá ser privado de la vida, de la libertad o de sus

propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido

ante los tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan

las formalidades esenciales del procedimiento y conforme a las

leyes expedidas con anterioridad al hecho.

En los juicios del orden criminal queda prohibido imponer, por

simple analogía y aun por mayoría de razón, pena alguna que no

esté decretada por una ley exactamente aplicable al delito de que

se trata.

En los juicios del orden civil la sentencia definitiva deberá ser

conforme a la letra, o a la interpretación jurídica de la ley, y a la

falta de esta se fundara en los principios generales del derecho.

Artículo 16 Constitucional

Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio,

papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la

autoridad competente, que funde y motive la causa legal del

procedimiento.

Artículo 38 Código Fiscal de la federación

Los actos administrativos que se deban notificar deberán tener por

lo menos los siguientes requisitos...............

(…)

IV. Estar fundado y motivado y expresar la resolución, objeto o

propósito de que se trate

FUNDAMENTACION Y MOTIVACIÓN.-
De acuerdo con el artículo 16 de la Constitución Federal, todo acto

de autoridad debe estar adecuado y suficientemente fundado y

motivado, entendiéndose por lo primero que ha de expresarse con

precisión el precepto legal aplicable al caso y, por lo segundo, que

deben señalarse, con precisión, las circunstancias especiales,

razones particulares o causas inmediatas que se hayan tenido en

consideración para la emisión del acto; siendo necesario, además,

que exista adecuación entre los motivos aducidos y las normas

aplicables, es decir, que el caso concreto se figuren las hipótesis

normativas.

Amparo en revisión 8280/1967.- Augusto Vallejo Olivo. Junio 24 de

1968. 5 votos. Ponente: Mtro. José Rivera Pérez Campos.

Amparo en revisión 9598/1967.- Oscar Leonel Velasco Casas. Julio

1º. de 1968. 5 votos. Ponente: Mtro. Alberto Orozco Romero.

Amparo en revisión 7258/1967.- Comisariado Ejidal del Poblado

de San Lorenzo Tezonco, Ixtapalapa, D.F. y otros. Julio 25 de 1968.

5 votos. Ponente: Mtro. Pedro Guerrero Martínez.

Amparo en revisión 3713/1969.- Elías Chaín. Febrero 20 de 1970. 5

votos. Ponente: Mtro. Pedro Guerrero Martínez.

Amparo en revisión 4115/1968.- Emeterio Rodríguez Romero y

Coags. Abril 26 de 1971. 5 votos. Ponente: Mtro. Jorge Saracho

Álvarez.

JURISPRUDENCIA 2ª. SALA.- Informe 1973, pág. 18.

FUNDAMENTACION Y MOTIVACIÓN, GARANTÍA DE.-

Para que la autoridad cumpla la garantía de legalidad que

establece el artículo 16 de la Constitución Federal en cuanto a la

suficiente fundamentación y motivación de sus determinaciones,

ellas debe citar el precepto legal que le sirva de apoyo y expresar

los razonamientos que la llevaron a la conclusión de que el asunto

concreto de que se trata, que las origina, encuadra los presupuestos

de la norma que invoca.

Amparo en revisión 8280/1967.- Augusto Vallejo Olivo. 5 votos.

Sexta Época, Vol. CXXXII, Tercera Parte, pág. 49.

Amparo en revisión 9598/1967.- Oscar Leonel Velasco Casas. 5

votos. Sexta Época, Vol. CXXXIII, Tercera Parte, pág. 63

Amparo en revisión 7258/1967.- Comisariado Ejidal del Poblado

de San Lorenzo Tezonco, Ixtapalapa, D.F. y otros. 5 votos. Sexta

Época, Vol. CXXXIII, Tercera Parte, pág. 63.


Amparo en revisión 3713/1969.- Elías Chaín. 5 votos. Séptima

Época, Vol. 14, Tercera Parte, pág. 37.

Amparo en revisión 4115/1968.- Emeterio Rodríguez Romero y

Coags. 5 votos. Séptima Época, Vol. 28, Tercera Parte, pág. 111.

JURISPRUDENCIA 2ª. SALA Séptima Época, Vol. 30, Tercera

Parte, pág. 57.

En efecto la autoridad demandada emite un formato preelaborado con

espacios en blanco, denominado acta de notificación, para hacerme entrega de

la resolución determinante de crédito fiscal, emitida por la Subgerente de

Recaudación Fiscal del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los

Trabajadores del Estado de Chihuahua, en dicho documento en ningún

momento indica cómo es que se cercioró del domicilio de mi poderdante, con lo

que se incumplen las formalidades esenciales del procedimiento de

notificación, lo cual se traduce en una profunda incertidumbre jurídica a la

actora. El anterior argumento se ve reforzado por analogía, conforme al criterio

siguiente:

NOTIFICACIONES PERSONALES.- REQUISITO DEL

CERCIORAMIENTO DEL CONTRIBUYENTE Y DOMICILIO

CIRCUNSTANCIADO EN ESTÁS.-

Aún cuando de una interpretación y restrictiva de los artículos 134

fracción I y 137 del Código Fiscal de la Federación, no se advierte

que se exija al notificador precisar las circunstancias de la

notificación en un acta donde se expresen de manera

pormenorizada los detalles bajo los cuales se lleve a cabo el

procedimiento de notificación, lo cierto es que estas formalidades

deben cumplirse, pues las notificaciones son un acto trascendental

de todo procedimiento y fundamental para que las resoluciones

puedan surtir efectos, consecuentemente son actos formalmente

regulados por la ley que deben dar verosimilitud, certidumbre y

legalidad al procedimiento, lo que no se cumple cuando el

notificador administrativo omite precisar detalles esenciales del

acto de notificación, como es el de indicar la forma en que se

cercioró de que efectivamente se trataba del nombre del

contribuyente visitado y el domicilio, hechos que deben quedar

claramente circunstanciados en el acta respectiva a fin de que se


pueda advertir, sin lugar a dudas, que la notificación se ajustó a

derecho. Por lo que, es incuestionable que la práctica de las visitas

domiciliarias debe llevarse a cabo con respeto a las garantías

constitucionales del particular, pues se trata de una excepción a la

violabilidad de la identidad y domicilio, de ahí que por un

principio lógico y de seguridad jurídica para el visitado, la

autoridad que practique la visita debe notificar legalmente al

cerciorándose de la identidad y domicilio fiscal del visitado.

Juicio No. 3877/03-12-01-4.- Resuelto por la Primera Sala Regional

de Oriente del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa,

el 12 de mayo de 2004, por unanimidad de votos.- Magistrado

Instructor: Gilberto Luna Hernández.- Secretaria: Lic. Gloria María

de la C. Escobar Arrona.

(El énfasis es nuestro).

Acorde a lo transcrito en el párrafo que antecede, las notificaciones son

un acto trascendental de todo procedimiento y fundamental para que las

resoluciones puedan surtir efectos, por lo que al ser actos formalmente

regulados por la ley, éstos deben cumplir a cabalidad con los requisitos

esenciales, a efecto de otorgar veracidad, certidumbre y legalidad al

procedimiento, por lo que, en la supracitada acta de notificación, al no señalarse

como es que el notificador se haya cerciorado de que efectivamente se trataba

del domicilio de mi representada, no deja lugar a dudas, de que dicha

notificación no se realizo con ajuste a la legalidad, por lo que se impone se deje

sin efectos la misma, así como de la resolución determinante de crédito fiscal a

cargo de mi mandante, por ser fruto de actos viciados.

Apoya a lo anterior el siguiente criterio jurisprudencial el cual establece.

FRUTOS O ACTOS VICIADOS.-

Si un acto o diligencia de la autoridad está viciado y resulta

inconstitucional, todos los actos derivados de él, o que se apoyen

en él, o que en alguna forma se encuentren condicionados por él,

resultan también inconstitucionales por su origen y los tribunales

no deben darle valor legal, ya que de hacerlo, por una parte

alentaría prácticas viciosas, cuyos frutos serían aprovechables por


quienes las realizan y, por otra parte, los tribunales se harían en

alguna forma partícipes de tal conducta irregular, al otorgar a tales

actos valor legal.

Amparo directo 504/1975 Montecargas de México, S.A. Octubre 8

de 1975 José Gómez y Carlos González Blanquel. Enero 20 de 1976.

Unanimidad de votos.

Amparo directo 651/1975 Alfombras Mohawk de México S.A. de

C.V. Febrero 17 de 1976. Unanimidad de votos.

Amparo directo 301/1978 Refaccionaria Maya, S.A. Enero 18 de

1979. Unanimidad de votos.

Niego en términos del artículo 68 del Código Fiscal de la Federación, que

se me haya notificado legalmente la resolución determinante

08MAS200804119602, de fecha 10 de Abril de 2009.

TERCERO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria de los

artículos 14 y 16 de nuestra Carta Magna, en relación con la fracción IV, del

diverso 38 del Código Hacendario Federal, acorde a lo siguiente:

La resolución que se combate acusa de ilegalidad, toda vez que no se

precisa con documento idóneo con el cual se demuestre fehacientemente que

los supuestos trabajadores están al servicio de mi representada, y por los que se

determinó el crédito fiscal impugnado, con lo que existe una carencia absoluta

de fundamentación y motivación debidas, y en consecuencia una profunda

inseguridad jurídica a la hoy actora, al no encontrarse en aptitud de conocer el

origen del citado crédito, habida cuenta de que no se prueba con plenitud la

relación laboral que existe con los trabajadores por los que se determinó el

multicitado crédito fiscal.

En efecto, como se puede apreciar de la simple lectura que se realice a la

resolución que se combate, se podrá apreciar que la misma tan solo consta de

una liquidación global, sin especificar el origen y la forma de la determinación

de la misma, con lo cual se deja a mi mandante en un completo estado de


indefensión e incertidumbre jurídica, al no poder conocer los elementos

constitutivos que sirvieron de base para la determinación del crédito fiscal

impugnado, con lo que se dejan de cumplir con los principios de

fundamentación y motivación debidas que deben de cumplirse en todo acto de

autoridad.

En los términos que establece el artículo 68 del Código Fiscal Federal,

niego que en la resolución impugnada se encuentren identificados los

supuestos trabajadores por los que se determinó el crédito fiscal.

Siendo entonces, que al no identificarse a los supuestos trabajadores por

los que se determinó el crédito fiscal impugnado, se deja en estado de

indefensión a mi representada, constituyendo una autentica inseguridad

jurídica al no observarse los principios de fundamentación y motivación

debidas en la resolución que se combate, por lo que procede se declare su

Nulidad.

Aunado a lo anterior, se hace patente la ilegalidad de la simple lectura

de la resolución impugnada en el Juicio Contencioso Administrativo, la cual

pretende encontrar fundamentación y motivación, en hechos inciertos y vagas

suposiciones realizadas por la autoridad emisora, lo cual hizo al tenor

siguiente:

“Que con fundamento en lo anterior, se llevó a cabo el proceso de

comprobación del cumplimiento de sus obligaciones patronales, a

través de la revisión de la información que obra en la base de

datos de este instituto, integrada con los avisos de altas, bajas o

modificación de salarios de sus trabajadores o de cambio de

situación patronal, misma que está obligado a presentar de

conformidad a lo previsto…sin que a la fecha se tenga una nueva

información que notifique la baja a sus trabajadores o que acredite

que se encuentra en algún supuesto de no obligación para el pago

de las aportaciones y/o amortizaciones correspondientes, lo que

SUPONE la existencia de la responsabilidad solidaria que tiene en

materia de descuentos a los salarios…”

(Nota: El énfasis es nuestro).


Es inconcuso, que la autoridad emisora del acto de molestia, se motivó,

como ya hemos examinado, en primera instancia en la información

supuestamente contenida en una base de datos del propio Instituto, para

PRESUMIR la existencia de una relación laboral para con mi representada,

aduciendo además que a la fecha no tenia nueva información que acreditara

que mi mandante se encontrase en algún supuesto de no obligación para el

pago, lo que la hace SUPONER, que existe obligación por parte de mi

representada ante el INFONAVIT.

Se hace evidente la ilegalidad de la resolución impugnada, porque la

autoridad emisora PRESUME la relación laboral derivado de la consulta de

una base de archivos digitales del mismo Instituto, sin hacer uso de sus

facultades de comprobación y revisión, es decir, no inició un procedimiento

administrativo previo a la determinación del crédito fiscal, por el que mi

representada pudiera conocer los datos, documentos y elementos en los que la

autoridad fiscalizadora se basó para emitir la resolución impugnada, así como

demostrar encontrarse en un supuesto de no obligación de pago, y en general

defenderse ante ella.

Sin embargo, al no haber existido un procedimiento previo del cual

conociera la hoy demandante y que arribara a la resolución impugnada en el

presente juicio, donde se pudiese acreditar encontrarse en un supuesto de no

obligación de pago, y basándose en una mera PRESUNCIÓN, la misma no

contiene los elementos considerados para su emisión, por lo que resulta

innegable que esa falta de fundamentación y motivación es más que suficiente

para que se declare la nulidad lisa y llana del acto impugnado, de conformidad

a lo dispuesto en los artículos 51, fracción IV y 52, fracción II, de la Ley Federal

de Procedimiento Contencioso Administrativo, así como en el criterio

contenido en la tesis jurisprudencial cuyo rubro y texto son del tenor literal

siguiente:
NULIDAD, ES PROCEDENTE LA NULIDAD LISA Y LLANA DEL

ACTO IMPUGNADO ANTE LA FALTA DE FUNDAMENTACIÓN

Y MOTIVACIÓN RESPECTO AL ORÍGEN DE LOS CRÉDITOS

QUE CONSITUTYEN LA MATERIA DE FONDO DEL ASUNTO.-

Para saber si se está en los supuestos de la fracción II del artículo 238

del Código Fiscal de la Federación, o en los de la fracción IV del

mismo artículo, resulta necesario distinguir entre la falta de

fundamentación y motivación que se pudiera advertir en la resolución

reclamada, que contiene los créditos impugnados, y la falta de

fundamentación y motivación de los créditos en sí mismos, cuando

ésta se origina con el desconocimiento de los datos, elementos o

documentos en que la autoridad se apoya para emitir la misma. En el

primer caso, y siempre que la resolución se haya emitido en un

procedimiento en el que por su naturaleza el particular hubiera tenido

la oportunidad de oponer defensas o excepciones, la omisión de

fundar y motivar implica que se afecten las defensas del particular, y

que ésta trascienda al resultado de la resolución emitida por la

autoridad, por lo que, al cometerse una violación formal, procede

declarar la nulidad para el efecto de que se emita una nueva

resolución contra la cual el gobernado pueda hacer valer,

eventualmente, sus defensas. Sin embargo, en el segundo caso, es

decir, cuando la resolución impugnada no ha sido emitida dentro de

un procedimiento fiscal y, el contribuyente no tiene conocimiento de

los fundamentos y motivos que justifican los créditos fincados en su

contra, estamos frente a violaciones de fondo y, por tanto, la nulidad

debe ser lisa y llana, pues por un lado los hechos y fundamentos que

motivaron los créditos fiscales no fueron conocidos por el interesado,

ni quedaron demostrados en cuanto a su existencia jurídica y, por otro

lado, no es posible obligar a la autoridad a que haga uso de sus

facultades de fiscalización, dado que ésta, en ejercicio de sus

atribuciones podrá o no hacerlo. En otras palabras, para que proceda

la nulidad para efectos, es menester que no se analice el fondo de la

resolución impugnada, es decir, basta con que existan vicios formales

en la tramitación o resolución reclamada. En cambio, si se analiza el

fondo de la cuestión alegada, y se estima que la resolución en sí

misma es ilegal porque no se ajusta a derecho al dictarse en

contravención de disposiciones normativas, la nulidad del acto debe

ser lisa y llana.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA

ADMINISTRATIVA DEL PRIMER CIRCUITO.


Es obligación inexcusable de las autoridades que al emitir determinado

acto de molestia lo funden y motiven con la finalidad de dar a conocer al

particular las razones de hechos y de derecho que se tomaron en consideración

para expedir ese acto en concreto, en el entendido de que de no darse

cumplimiento a esa obligación constitucional, se deja inclusive al gobernado en

un completo estado de indefensión al no poder determinar si efectivamente la

autoridad emisora es competente o si el acto se basa en acontecimientos reales,

por lo que resulta procedente se declare la nulidad lisa y llana del acto

impugnado.

No obstante a lo anterior, el acto carece de una total fundamentación y

motivación, ya que, como ya se vio, la autoridad emisora del acto impugnado,

advierte:

“…lo que SUPONE la existencia de la responsabilidad solidaria

que tiene en materia de descuentos a los salarios…”

De lo transcrito con anterioridad, es notorio que mi contraria en ningún

momento prueba las afirmaciones que pretende acreditar, encuadrándose de

esta manera en el siguiente Principio General de Derecho el cual señala:

“El que afirma está obligado a probar”

Consecuentemente, es claro que al no demostrar sus aseveraciones se

encuentra realizando suposiciones; por lo tanto mi contraria SUPUSO que mi

poderdante tiene alguna responsabilidad solidaria para con el INFONAVIT,

derivado de una consulta de los archivos digitales del Instituto Mexicano del

Seguro Social, de la cual PRESUMIÓ una relación laboral, y toda vez que al no

haber llevado a cabo un procedimiento de fiscalización y verificación, no

contaba con información respecto de que mi representada estuviera en un

supuesto de no obligación de pago.

Toda vez, que como ya se vio, la autoridad administrativa emisora del

acto de molestia se basó en la mera SUPOSICIÓN de la existencia de la

responsabilidad solidaria de mi representada por el crédito determinado,


debiendo en todo caso probar la relación laboral ante la negativa lisa y llana de

que se encuentre plenamente acreditada la relación laboral, ni tampoco se

puede acreditar una debida fundamentación ni motivación del acto de molestia,

dado que esta tiene por base una mera SUPOSICIÓN, por lo que es imperativo

se declare la nulidad lisa y llana del mismo.

CUARTO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria del

numeral 16 Constitucional en relación al artículo 38, fracción IV del Código

Fiscal de la Federación, los cuales adminiculados entre sí establecen que todo

acto de autoridad debe estar debidamente fundado y motivado.

Como ya se ha planteado, el crédito fiscal determinado por mi contraria,

es ficticio e ilegal, por las razones expuestas en el concepto de impugnación

precedente, sin embargo, en la tesitura de suponer sin conceder que,

efectivamente mi representada tuviera obligación alguna para con la autoridad

en cita respecto del crédito que se le imputa en la resolución que se combate,

resultaría nugatoria la oportunidad de hacerlo efectivo, toda vez, que la propia

resolución impugnada acusa ilegalidad, al tiempo que violenta los preceptos

jurídicos mencionados en el párrafo que antecede; en efecto, de la simple

lectura de la resolución combatida, se advierte que, en ésta, no se establecen las

operaciones matemáticas o cálculos aritméticos utilizados por la autoridad para

obtener como resultado la cantidad asentada en la misma, así como tampoco

establece los preceptos jurídicos que fundamenten todas y cada una de las

operaciones matemáticas en comento, limitándose simplemente a consignar

importes globales por diversas aportaciones y amortizaciones supuestamente

omitidas en su entero por mi representada, sin embargo, reitero, la autoridad es

totalmente omisa en establecer el procedimiento seguido para su

determinación, dejando a la hoy actora, en completo estado de indefensión, ya

que, ante dicha omisión de establecer pormenorizadamente el procedimiento

empleado, así como las operaciones que dieron como resultado las cantidades

contenidas en la resolución que se combate y su fundamentación jurídica, se

nos priva no solo el derecho, sino inclusive la posibilidad de analizar el cálculo,

y encontrarnos en aptitud de determinar si las cantidades asentadas son las

correctas y conforme a derecho; por lo que, derivado de tal falta de


fundamentación y motivación, resulta clara la ilegalidad de la resolución que se

combate, consecuentemente debe declarase su Nulidad.

Apoya a lo anterior, el criterio que se sustenta analógicamente, la tesis de

la Sala Superior de este Tribunal, la cual versa al tenor siguiente:

"CÉDULAS DE LIQUIDACIÓN DE CUOTAS OBRERO


PATRONALES.- SU FUNDAMENTACIÓN Y MOTIVACIÓN.-

A fin de que se consideren debidamente fundadas, deberán


contener además de la identificación de los asegurados, el importe
de las cuotas causadas por cada uno de ellos en las ramas del
seguro que les corresponda, y la constancia con la que se acredita
que el particular conoce los documentos en que se basó la
autoridad para determinar la cuotas; precisar
pormenorizadamente el procedimiento empleado para liquidar el
adeudo. Por tanto, si sólo se reportan importes globales sin
especificar cómo se obtuvieron los porcentajes de aplicación y los
importes totales, la cédula correspondiente no se encuentra
debidamente fundada y motivada."

Recurso de Apelación No. 100(A)-II-578/96/5661/95.- Resuelto por


la Segunda Sección de la Sala Superior del tribunal Fiscal de la
Federación, en sesión del 16 de mayo de 1997, por mayoría de 3
votos a favor y 1 en contra.- Magistrada Ponente: Silva Eugenia
Díaz Vega.- Secretaria: Lic. Ma. Concepción Martínez Godínez.

A mayor abundamiento, se debe tener en consideración que lo más

importante respecto al cobro del que es objeto mi mandante, radica en el hecho

de que las aportaciones y amortizaciones al Fondo Nacional de la Vivienda, así

como su emisión y procedencia debe encontrar su aspecto central en una

relación obrero patronal, la cual, para el caso de existir en términos de la Ley

del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, obliga al

patrón a inscribir a sus trabajadores y una vez que los mismos han quedado

debidamente identificados, se procederá con base en el salario devengado y los

días laborados, a la determinación de las contribuciones correspondientes

respecto a las que se encuentra supuestamente obligada mi representada. Sin

embargo, en el presente, y en relación a lo dispuesto en los artículos 8°, 10 y 20

de la Ley Federal del Trabajo, mi representada Niega Lisa y Llanamente haber

tenido o tener relación laboral alguna con los trabajadores objeto de las

aportaciones y amortizaciones señaladas en la resolución que se combate.


Así las cosas, se insiste en que mi poderdante no cuenta con los datos de

identificación de los supuestos trabajadores por los que se determinó el crédito

fiscal impugnado, por lo que, ad cautelam se niega lisa y llanamente la

existencia de una relación laboral de mi representada para con los supuestos

trabajadores por los que se determinó el crédito fiscal, por las que se actualizan

las hipótesis normativas previstas en los artículos 8°, 10 y 20 de la Ley Federal

del Trabajo, luego entonces corresponde a la autoridad acreditar en forma

indubitable la relación laboral entre mi representada y los supuestos

trabajadores por los que se determinó el crédito fiscal objeto de impugnación

Ahora bien; independientemente de que no se encuentra probada, como

ya se ha dicho, una relación obrero-patronal entre los supuestos trabajadores y

mi representada, éstos al no haber sido plenamente identificados por la

autoridad, no podrían contar si quiera con la facultad de exigir le sean

otorgados los beneficios referidos en el párrafo que antecede y por tanto, el

cobro del que es objeto mi mandante, no se traduce en otra cosa sino en un

intento de enriquecimiento ilegítimo por parte de la demandada, que pretende

cobrar aportaciones y amortizaciones sin sustento legal alguno, por lo que es

procedente declarar su NULIDAD.

Sirve de apoyo a lo anterior la tesis de Jurisprudencia que a continuación

se transcribe:

INFONAVIT.- LAS RESOLUCIONES QUE SE DICTEN POR


OMISION DE LAS APORTACIONES PATRONALES, DEBEN
CUMPLIR CON LOS REQUISITOS DE FUNDAMENTACION Y
MOTIVACION.

Las resoluciones dictadas por el Instituto para hacer efectivos


créditos por omisión a las aportaciones patronales, deben
encontrarse debidamente fundadas y motivadas atento a lo
previsto en el artículo 16 Constitucional. En consecuencia, debe
considerarse que no se cumple con lo estipulado en dicho precepto
legal cuando en tales resoluciones la autoridad se abstiene de
identificar plenamente a los trabajadores mediante la mención de
sus nombres, salarios, fechas de admisión, etc. (45)

Revisión No. 2284/86.- Resuelta en sesión de 13 de abril de 1987,


por unanimidad de 7 votos.- Magistrado Ponente: José Antonio
Quintero Becerra.- Secretario: Lic. Mario Bernal Ladrón de
Guevara.
Con relación a lo anterior, resulta perfectamente aplicable por analogía al

caso que nos ocupa, la Tesis de Jurisprudencia No. 269 sustentada por la

Honorable Sala Superior del Tribunal Fiscal de la Federación misma que

establece lo siguiente:

“RELACION LABORAL PARA LOS EFECTOS DE LA


AFILIACION AL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO
SOCIAL. CORRESPONDE A LA AUTORIDAD LA CARGA DE
LA PRUEBA SI EL PATRON NIEGA LA PRESTACION DE
SERVICIOS.-

De la misma manera resulta aplicable la siguiente tesis jurisprudencial

que a la letra dice:

INSTITUTO DEL FONDO NACIONAL DE LA VIVIENDA


PARA LOS TRABAJADORES.- RELACIÓN LABORAL PARA
LOS EFECTOS DE LA INSCRIPCIÓN Y PAGO DE LAS
APORTACIONES EN MATERIA HABITACIONAL AL.-
CORRESPONDE A LA AUTORIDAD LA CARGA DE LA
PRUEBA SI EL PATRÓN NIEGA LA PRESTACIÓN DE
SERVICIOS.-

Para que subsista la presunción legal de la existencia de una


relación de trabajo entre quien presta un servicio y quien lo recibe,
de la que depende la obligación de la inscripción y pago de las
aportaciones en materia habitacional al Instituto del Fondo
Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, es necesario que
dicho Instituto pruebe el supuesto esencial de dicha presunción, o
sea, la prestación del servicio o relación laboral que existe entre el
trabajador y el pretendido patrón contribuyente. Y, en
consecuencia, cuando el supuesto patrón niegue ésta, lisa y
llanamente, la carga de la prueba recae en el Instituto mencionado,
conforme a lo dispuesto en los artículos 68, del Código Fiscal de la
Federación vigente y, 81, del Código Federal de Procedimientos, ya
que no se puede exigir a su contraparte la prueba del hecho
negativo consistente en que el trabajador no le prestó servicios,
más aún cuando el Instituto, para determinar el crédito fiscal
respectivo, se sustenta en la denuncia presentada por el trabajador
ante ese mismo Organismo, la cual no ofrece como prueba dentro
del juicio contencioso administrativo. (4)

Juicio No. 10746/98.- Sentencia de 30 de marzo de 1999, aprobada


por mayoría de votos.- Magistrada Ponente: Ma. de los Ángeles
Garrido Bello.- Secretaria: Ruth Beatriz De la Torre Edmiston.

En términos generales, el cobro del que es objeto mi mandante

nuevamente resulta ilegal, toda vez que el Instituto y las autoridades que

intervinieron para la emisión del mismo fueron omisas en justificar, acreditar,


fundamentar y motivar adecuadamente el origen y procedencia del mismo; esto

es, no se acreditó la relación jurídico-tributaria, entre el sujeto pasivo del crédito

fiscal y el sujeto activo del mismo, por lo que, al no estar debidamente probada

la relación jurídico-tributaria, esto trae como resultado que no se pueda tener

por acreditado, en la especie, el surgimiento del hecho generador de la

obligación tributaria y como consecuencia, resulta improcedente el cobro de

que es objeto mi poderdante.

En éste orden de ideas, el hecho generador de las aportaciones y

amortizaciones al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los

Trabajadores, se produce con el nacimiento de una relación laboral entre un

patrón y un trabajador, con lo que surge la obligación plasmada en la fracción I,

del artículo 29, de la Ley de la materia, de inscribirse como patrón e inscribir a

los trabajadores que tiene a su servicio. Sin embargo, en la especie, mi

representada NIEGA LISA Y LLANAMENTE la existencia de la relación

laboral y por lo tanto, no se produce el fenómeno jurídico al que hemos venido

haciendo referencia y que provoca el nacimiento del hecho generador, el crédito

fiscal que se pretende fincar carece de sustento jurídico, máxime si se toma en

cuenta que nuestra negativa la llevamos al extremo de que ignoramos saber el

origen de las cifras cantidades y números que se emplean en las aportaciones y

amortizaciones respectivas, lo que produce una indebida fundamentación y

motivación, conduciendo a mí representada al estado de indefensión y a la

franca violación de los principios de legalidad y seguridad jurídica

comprendidos en el artículo 16 de la Constitución Federal, por lo que resulta

procedente declarar la Nulidad de la resolución que se combate.

Niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del Código Fiscal de

la Federación que se me hayan dado a conocer las operaciones matemáticas,

origen y forma de determinación del crédito fiscal determinado a mi

representada, dentro de la resolución combatida.

Sirve de apoyo a lo anterior la tesis de jurisprudencia que a continuación

se transcribe:
RELACION LABORAL.- DEBE PROBARLA LA AUTORIDAD
CUANDO EL PARTICULAR LA NIEGA LISA Y
LLANAMENTE.-

De conformidad con el artículo 82 del Código Federal de


Procedimientos Civiles, de aplicación supletoria, interpretado a
contrario sensu y 89 del Código Fiscal de la Federación de 1967, el
actor no tiene a su cargo la obligación de probar un hecho que
motive los actos o resoluciones cuando lo niegue lisa y llanamente;
en tal virtud, si la empresa actora, desde el recurso de
inconformidad ante el INFONAVIT, negó tener relación laboral
con los trabajadores respecto de los cuales le pretende cobrar
aportaciones, y esa autoridad en la liquidación emitida no señala
concretamente de qué trabajador se trata ni da a conocer al
afectado los documentos en que se basa para considerarlo patrón,
la carga de la prueba de la relación laboral la tendrá la autoridad
administrativa.(48)

Revisión No. 718/83.- Resuelta en sesión de 17 de octubre de 1983,


por unanimidad de 8 votos.- Magistrada Ponente: Margarita
Lomelí Cerezo.- Secretario: Lic. Hugo Valderrábano Sánchez.

QUINTO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria del

artículo 16 Constitucional en relación al diverso 38 fracción IV del Código

Tributario, los cuales adminiculados entre sí establecen que todo acto de

autoridad debe estar debidamente fundado y motivado.

En efecto, la resolución combatida debe ser declarada nula por haber sido

emitida en franca violación a los preceptos jurídicos supracitados, toda vez que,

de la simple lectura de la resolución que se combate, se advierte que la

autoridad emisora del acto de molestia fue omisa en asentar en el propio

documento, los datos identificatorios de los supuestos trabajadores por los que

se determinó el crédito fiscal en la resolución en cita, cuando lo conducente

para cumplir con la obligación de fundar y motivar debidamente sus

resoluciones, en armonía con lo preceptuado por los artículos en comento, la

autoridad debió por lo menos asentar la fecha de ingreso de los supuestos

trabajadores por los que pretende el cobro de aportaciones y amortizaciones,

sin embargo, al no haberlo hecho así, nuevamente deja a mi representada en

franco estado de indefensión, al no saber siquiera si los trabajadores por los que

se determinó el crédito fiscal en la liquidación de aportaciones y amortizaciones

que se combate, habían sido dados de alta por lo menos en el período por el

cual pretende el cobro la hoy demandada, por lo que, ante la ausencia de tal
requisito no se cumple por parte de la autoridad, con la debida fundamentación

y motivación a que la obligan los artículos en comento, por lo que es evidente

que procede se declara su Nulidad, en virtud del estado de indefensión en que

deja a mi representada al no poder conocer en qué fecha considera la autoridad

que se dieron de alta los supuestos trabajadores de mi representada.

Niego lisa y llanamente en términos de lo previsto por el precepto 68 del

Código Fiscal de la Federación, que la autoridad emisora del acto de molestia

que se combate haya identificado plenamente la fecha de alta de los supuestos

trabajadores que detalla en la liquidación que se combate.

Sirve de apoyo a lo anterior la tesis de jurisprudencia que a continuación

se transcribe:

INFONAVIT.- LAS RESOLUCIONES QUE SE DICTEN POR


OMISION DE LAS APORTACIONES PATRONALES, DEBEN
CUMPLIR CON LOS REQUISITOS DE FUNDAMENTACION Y
MOTIVACION.-

Las resoluciones dictadas por el Instituto para hacer efectivos


créditos por omisión a las aportaciones patronales, deben
encontrarse debidamente fundadas y motivadas atento a lo
previsto en el artículo 16 Constitucional. En consecuencia, debe
considerarse que no se cumple con lo estipulado en dicho precepto
legal cuando en tales resoluciones la autoridad se abstiene de
identificar plenamente a los trabajadores mediante la mención de
sus nombres, salarios, fechas de admisión, etc. (45)

Revisión No. 2284/86.- Resuelta en sesión de 13 de abril de 1987,

por unanimidad de 7 votos.- Magistrado Ponente: José Antonio

Quintero Becerra.- Secretario: Lic. Mario Bernal Ladrón de

Guevara

SEXTO.- La resolución que se combate es ilegal por ser violatoria del

artículo 30 fracción I, de la Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda

para los Trabajadores, así como los artículos 16 Constitucional y 38 fracción IV,

y 42 del Código Fiscal de la Federación, ya que la misma no cumple con los

requisitos de los procedimientos de fiscalización

En efecto, establece el artículo 30, fracción I de la Ley del INFONAVIT

que el citado Instituto en su carácter de organismo fiscal autónomo está


facultado para determinar en caso de incumplimiento el importe de las

aportaciones patronales y de los descuentos omitidos, así como calcular su

actualización y recargos que se generen, señalar las bases para su liquidación,

fijarles en cantidad liquida y requerir su pago. Para este fin podrá ordenar,

practicar, con el personal que al efecto designe, visitas domiciliarias, auditorías

e inspecciones a los patrones, requiriéndoles la exhibición de libros y

documentos que acrediten el cumplimiento de las obligaciones que en materia

habitacional les impone esta Ley.

En la especie ocurre violación a los preceptos antes mencionados, toda

vez que, para la determinación del crédito fiscal que ilegalmente se le impone a

mi representada, primeramente se debió de ejercer alguna de las facultades que

establece el artículo 42, del Código Fiscal de la Federación, para poder estar en

la posibilidad de desvirtuar los hechos u omisiones conocidos por la autoridad

en el ejercicio de las facultades de comprobación en términos de lo establecido

por el artículo 56 del Código Fiscal de la Federación, lo cual no aconteció,

dejando a mi representada en completo estado de indefensión ya que no se le

dio la oportunidad de ser oída, de igual forma se le negó la oportunidad de

aportar documentación necesaria para desvirtuar lo manifestado por la

demandada; por lo que si bien es cierto que el Instituto tiene el carácter de

organismo fiscal autónomo y por tal motivo puede determinar, en caso de

incumplimiento, el importe de las contribuciones patronales y de los

descuentos omitidos, así como calcular su actualización y recargos que se

generen, señalar las bases para su liquidación, fijarles en cantidad liquida y

requerir su pago, también es cierto que esta potestad la debe realizar en

términos de lo que establece el Código Hacendario Federal, tal y como lo

ordena el artículo 30, fracción I de la Ley del INFONAVIT, es decir, ejercitar

alguna de las facultades de comprobación que le otorga el Código Fiscal de la

Federación y no dejar inaudita a mi representada negándole la oportunidad de

manifestar lo que a su derecho conviniera; por lo que es claro que la resolución

que se combate carece de la debida fundamentación y motivación que exige el

artículo 16 de nuestra Ley Suprema y el 38, fracción IV del Código Tributario,

luego entonces, lo jurídicamente procedente, es que se declare la Nulidad de la

resolución impugnada.
No es óbice a lo anterior, el hecho de que la autoridad basándose en

documentos o expedientes que tenga en su poder, determino el crédito fiscal en

contra de mi mandante, ya que para esto de igual forma era necesario que la

autoridad demandada otorgará el derecho a mi mandante de desvirtuar los

hechos, omisiones o documentos con los que contara la demanda en el

expediente de mérito, no debiendo pasar por alto la exigencia del artículo 16

Constitucional en relación con el precepto 38, fracción IV del Código Fiscal de

la Federación, por lo que es claro que la resolución que se impugna carece de la

debida fundamentación y motivación.

Niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del Código Fiscal de

la Federación que la resolución impugnada, provenga de un procedimiento de

fiscalización de los contemplados por el artículo 42 del Código Fiscal de la

Federación, así como que se haya fundamentado las facultades de la autoridad

para poder ejercerlas con mi poderdante, lo cual ocasiona violaciones en el

procedimiento y transgrede la esfera jurídica de mí representada.

SEPTIMO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria del

artículo 16 Constitucional en relación al artículo 38, fracción IV del Código

Fiscal de la Federación ya que la autoridad nunca funda su competencia para

hacer efectivas las aportaciones y amortizaciones de que se trata, al no citar los

preceptos que le otorguen la competencia para actuar, así como los artículos,

fracciones, incisos o subincisos legales que le otorguen la competencia para

emitir actos de molestia tales como el que por este medio se combate.

En este orden de ideas, es claro que la liquidación de aportaciones y

amortizaciones que se contraviene viola en perjuicio de mi representada las

garantías de legalidad y seguridad jurídica establecidas en los preceptos legales

mencionados con antelación, por lo que se impone que se declare la nulidad del

acto impugnado.

De lo anterior tenemos el hecho de que la autoridad, de la misma forma

omite establecer el artículo, así como la fracción, el inciso o subincisos que


establezca la competencia territorial de la autoridad para emitir el acto de

molestia como el que se combate, dentro de la circunscripción territorial en la

que tiene su domicilio mi representada, ya que existe la obligación impuesta

por el artículo 16 Constitucional en relación con lo dispuesto por el diverso 38

fracción IV del Código Fiscal de la Federación que para los actos de molestia

emitidos por la autoridad ostentan la debida fundamentación y motivación,

siendo entonces imperativo que se declare la nulidad de la liquidación

combatida.

Así las cosas, resulta franca la violación a los preceptos mencionados, por

lo que respecta la competencia territorial de la autoridad emisora, ya que de la

simple lectura que se le practique a la resolución que contiene la liquidación

impugnada se podrá observar que la autoridad no establece la fundamentación

correcta de su esfera competencial, violando con ello lo establecido por el

precepto 38, fracción IV del Código Hacendario Federal, dejando a mi

representada en un total estado de indefensión e inseguridad jurídica al no

poder estar en aptitud para determinar si la autoridad emisora del acto de

molestia es competente para tal efecto, por lo cual es necesario que se declare la

Nulidad de la liquidación que en este momento se impugna.

Por lo cual niego lisa y llanamente en términos del diverso 68 del Código

Tributario que la resolución que se impugna se encuentre ajustada a derecho y

que la misma fundamente la competencia territorial que faculta a la autoridad

emisora del acto impugnado.

Lo anterior se robustece con la siguiente tesis jurisprudencial:

COMPETENCIA DE LAS AUTORIDADES


ADMINISTRATIVAS. EN EL MANDAMIENTO ESCRITO QUE
CONTIENE EL ACTO DE MOLESTIA, DEBE SEÑALARSE
CON PRECISIÓN EL PRECEPTO LEGAL QUE LES OTORGUE
LA ATRIBUCIÓN EJERCIDA Y, EN SU CASO, LA
RESPECTIVA FRACCIÓN, INCISO Y SUBINCISO.

De lo dispuesto en la tesis de jurisprudencia P./J. 10/94 del


Tribunal Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
publicada en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación,
Número 77, mayo de 1994, página 12, de rubro: "COMPETENCIA.
SU FUNDAMENTACIÓN ES REQUISITO ESENCIAL DEL ACTO
DE AUTORIDAD.", así como de las consideraciones en las cuales
se sustentó dicho criterio, se desprende que la garantía de
fundamentación consagrada en el artículo 16 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, lleva implícita la idea de
exactitud y precisión en la cita de las normas legales que facultan a
la autoridad administrativa para emitir el acto de molestia de que
se trate, al atender al valor jurídicamente protegido por la
exigencia constitucional, que es la posibilidad de otorgar certeza y
seguridad jurídica al particular frente a los actos de las autoridades
que afecten o lesionen su interés jurídico y, por tanto, asegurar la
prerrogativa de su defensa, ante un acto que no cumpla con los
requisitos legales necesarios. En congruencia con lo anterior,
resulta inconcuso que para estimar satisfecha la garantía de la
debida fundamentación, que establece dicho precepto
constitucional, por lo que hace a la competencia de la autoridad
administrativa para emitir el acto de molestia es necesario que en
el documento que se contenga se invoquen las disposiciones
legales, acuerdo o decreto que otorgan facultades a la autoridad
emisora y, en caso de que estas normas incluyan diversos
supuestos, se precisen con claridad y detalle, el apartado, la
fracción o fracciones, incisos y subincisos, en que apoya su
actuación; pues de no ser así, se dejaría al gobernado en estado de
indefensión, toda vez que se traduciría en que éste ignorara si el
proceder de la autoridad se encuentra o no dentro del ámbito
competencial respectivo por razón de materia, grado y territorio y,
en consecuencia, si está o no ajustado a derecho. Esto es así, porque
no es permisible abrigar en la garantía individual en cuestión
ninguna clase de ambigüedad, ya que su finalidad consiste,
esencialmente, en una exacta individualización del acto de
autoridad, de acuerdo a la hipótesis jurídica en que se ubique el
gobernado en relación con las facultades de la autoridad, por
razones de seguridad jurídica.

OCTAVO.- La resolución combatida es ilegal y carente de todo sustento

jurídico, ya que viola en mi perjuicio lo establecido por los artículos 14 y 16 de

nuestra Carta Magna en relación con lo establecido por el precepto 38, fracción

IV del Código Fiscal de la Federación, toda vez que la misma carece de la

debida fundamentación y motivación que para tales efectos establecen los

preceptos legales anteriormente manifestados.

En efecto, establece el artículo 14 de nuestra Constitución, que nadie

podrá ser privado de la vida, de la libertad, de sus propiedades, posesiones o

derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente

establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del

procedimiento conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho.


Por su parte, el diverso 16 de la Constitución establece que nadie puede

ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino

mediante mandamiento escrito emitido por autoridad competente que funde y

motive debidamente la causa legal de procedimiento.

En la especie se actualiza la violación a los diversos anteriormente

manifestados, ya que la resolución combatida y su constancia de notificación,

me fueron entregados por la autoridad a través de su notificador en copias

simples, las cuales son ilegales y carentes de todo sustento jurídico, ya que, al

ser exhibidas en copias simples, las mismas no resultan ser suficientes para

acreditar que se cumplen con los requisitos de la debida fundamentación y

motivación que todo acto de molestia emitido por autoridad competente debe

revestir, por el simple hecho de ser insuficientes para acreditar tales extremos,

toda vez que, éstas no hacen prueba plena, y con las mismas únicamente surge

la presunción de su existencia, pero no son suficientes para acreditar las

características que establecen los artículos 16 de nuestra Ley Suprema y 38,

fracción IV y V del Código Fiscal de la Federación, por lo que lo procedente es

declarar la Nulidad de la resolución combatida por estar viciada de ilegalidad.

Sirve de apoyo a lo anterior la Jurisprudencia sustentada por el tercer

Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, Amparo directo 424/89. Beatriz Sota

viuda de Urquillas. 12 de julio 1989. Unanimidad de votos. Ponente: José Ángel

Mandujano Gordillo. Secretaria: Julieta María Elena Anguas Carrasco.

Seminario Judicial de la Federación, 10° Época, Tomo IV, Segunda Parte 1, pág.

177, que a la letra dice:

“COPIAS FOTOSTATICAS, VALOR PROBATORIO DE LAS.-

Dentro de un procedimiento judicial, el valor de un documento


obtenido en copia fotostática es únicamente presunciones de su
existencia e insuficiente para justificar el hecho o derecho a
demostrar o ejercitar, ya que de acuerdo a su forma de obtención
solo son simples reproducciones fotográficas de documentos que el
interesado coloca en una máquina diseñada para ese fin, por ende,
de acuerdo a la naturaleza de la misma reproducción y lo
avanzado de la ciencia, cabe la posibilidad de que esa
multiplicidad de datos no proceda de un documento realmente
existente, sino de uno prefabricado que para efectos de su
fotocopiado permita reflejar la existencia irreal del pretendido
hacer valer.”

Así mismo, resulta procedente la tesis sustentada por el Primer Tribunal

Colegiado en materia civil y del trabajo del Segundo Circuito, S.J.F. IX Época,

T.II, 1° T.C. del 2° C., Diciembre 1995, p 504, que al rubro dice:

“.. COPIA FOTOSTATICA SIMPLE, NO OBJETADA; NO SE LE

PUEDE CONCEDER VALOR PROBATORIO.-”

De igual forma se hace aplicable la Jurisprudencia sostenida por el H.

Segundo Tribunal Colegiado del Sexto Distrito y que es de observancia

obligatoria para esa H. Sala, de acuerdo a lo establecido por el artículo 193 de la

Ley de Amparo consultable en la gaceta del Seminario Judicial de la

Federación, No. 58, Octubre de 1992, página 5 y que textualmente señala:

“COPIAS FOTOSTATICAS SIN CERTIFICAR CARECEN DE


VALOR.-

Las copias fotostáticas sin certificar resultan insuficientes para


acreditar, cuando menos en forma presuntiva, el interés jurídico,
ya que tales documentos carecen de valor legal alguno por ser
necesario que se encuentren autorizadas por el funcionario
respectivo.”

Niego, en términos del artículo 68 del Código Tributario Federal, que la

autoridad le haya dado a conocer a mi representada, la resolución combatida

en original así como sus constancias de notificación.

NOVENO.- La resolución que en ésta vía se impugna es ilegal ya que

viola en perjuicio de mi representada lo establecido por los preceptos 14 y 16

de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en relación con lo

establecido por el diverso 38, fracción IV y V del Código Fiscal de la

Federación, ya que carece de la debida fundamentación y motivación que para

tales efectos establecen los artículos de referencia.

En efecto, establece el diverso 14 de nuestra Carta Magna que nadie

podrá ser privado de la vida, de la libertad, de sus propiedades, posesiones o

derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente


establecidos en el que se cumplan las formalidades esenciales del

procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho.

Por su parte, establece el artículo 16 Constitucional, que nadie puede ser

molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en

virtud de mandamiento escrito de autoridad competente que funde y motive la

causa legal del procedimiento.

El precepto 38, fracción V del Código Fiscal de la Federación establece

que los actos administrativos que se deban notificar deberán ostentar la firma

del funcionario competente, y en su caso el nombre o nombres de las personas

a las que va dirigido.

En la especie, acontece la violación a los preceptos de referencia por lo

que esta H. Autoridad al revisar las copias de la resolución tal y como me

fueron notificadas y que anexo al presente se podrá percatar de la total y

completa ausencia de la firma autógrafa impuesta por el funcionario

competente para emitir el acto de molestia por lo que resulta inconcuso que el

mismo se dejen sin efectos.

En este orden de ideas, en este acto exhibo la resolución que me fue

notificada, la cual es anexada al presente, tal y como la autoridad me la dio a

conocer, por lo que con la mismas se podrá percatar claramente que la

resolución no fue notificada en original con firma autógrafa, siendo que de

acuerdo con la Garantía de Seguridad Jurídica consagrada por el artículo 16 de

la Constitución, todo acto de autoridad que cause molestia al particular, debe

ostentar la firma de puño y letra del funcionario que lo emita, y cuando dicho

acto se entregue en copia al particular, debe estar revestido del requisito de

validez antes mencionado, puesto que es ésta la que le agravia y no el original

del documento del que se obtuvo. De esto se sigue que es inconducente, para

demostrar el cumplimiento de la Garantía Constitucional de mérito, el que la

autoridad exhiba el original de la resolución que se impugna y que tenga firma

autógrafa del funcionario emisor, si la copia de que de ella se entrega al

particular únicamente presenta una firma facsimilar, puesto que sólo con la
firma autógrafa se autentifica tanto el acto mismo que se causa molestia como a

quien lo emite, por lo que es claro que con la copia simple que le fue dada a

conocer a mí representada la autoridad no puede probar que ésta cuente con el

requisito que de manera directa establece el precepto 38, fracción V razón por

la cual es procedente declarar la Nulidad de la resolución recurrida por ser

contraria a derecho.

Sirve de apoyo a lo anterior la Jurisprudencia publicada en la pág. 407 de

la obra denominada “JURISPRUDENCIA DEL TRIBUNAL FISCAL DE LA

FEDERACION 1937-1993, PRECEDENTES DE LAS SALAS 1988-1993.”, con

fundamento en los artículos 94 de la Constitución Política de los Estados

Unidos Mexicanos, y 192 de la Ley de Amparo.

“FIRMA AUTOGRAFA.- DEBE APARECER


NECESARIAMENTE EN LA COPIA DE LA RESOLUCION
IMPUGNADA QUE SE ENTREGUE AL PARTICULAR.-

De acuerdo con la garantía de seguridad jurídica consagrada


por el artículo 16 Constitucional, todo acto de autoridad que
cause molestia al particular, debe ostentar la firma de puño y letra
del funcionario que lo emita.- Cuando dicho acto se entregue en
copia al particular, debe estar revestido del requisito de validez
antes mencionado, puesto que ésta es la que le agravia y no el
original del documento del que se obtuvo. De esto se sigue que es
inconducente, para demostrar en el juicio de nulidad el
cumplimiento de la garantía constitucional de mérito, el que la
autoridad demandada exhiba el original de la resolución que se
impugna y que tenga firma autógrafa del funcionario emisor, si la
copia que de ella se entrega al particular únicamente presenta una
firma facsimilar, puesto que sólo con la firma autógrafa se
autentifica tanto el acto mismo que causa la molestia como a
quien lo emite.”

Niego lisa y llanamente en términos de lo establecido por el artículo 68

del Código Hacendario Federal que la resolución que se le notificó a mí

representada en copia simple y que se recurre, cuente con la firma autógrafa de

puño y letra del funcionario emisor.

DECIMO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria del

diverso 16 Constitucional en relación al precepto 38, fracción IV del Código

Fiscal de la Federación, los cuales adminiculados entre sí establecen que todo

acto de autoridad debe estar debidamente fundado y motivado.


En la especie, acontece violación a los preceptos antes mencionados, ya

que de la simple lectura que se haga de la documentales exhibidas, en especial

el acta de notificación se podrá observar en ella que, en la misma se manifiesta

en la parte conducente lo siguiente:

“…haciendo entrega de su (s) original (es) con firma autógrafa,…

así como de una copia de este documento…”

También cierto es, que una simple leyenda como la plasmada con

anterioridad y con la firme intención de hacer creer que la documental fue

entregada en original y que conlleva la firma autógrafa del funcionario emisor,

no prueba plenamente que así sea, ya que al remitirnos a dicha notificación

podremos corroborar que la misma no se encuentra debidamente

circunstanciada y que la persona notificada haya expresamente consentido y

firmado de conformidad que era lo que se le estaba entregando documentos

originales, con firma autógrafa.

He de hacer mención a esta H. Sala, que aún y cuando mi representada o

la persona que recibió la notificación de la resolución que se impugna hubiese

estampado su firma en la misma, debajo de la leyenda que establece, que

acepte su consentimiento de que la misma fue entregada en la forma que

instituye tal leyenda, dicha aceptación al estar impresa en el documento no fue

hecha por mi representada o por la persona quien recibió dicha resolución y

menos aun que el mismo notificador la haya escrito en el momento de

desahogar tal diligencia, si no que es puesta por la propia autoridad en el

momento de su emisión, por lo que resulta ser claro que no existió un

verdadero consentimiento por parte de mí representada de que la resolución

que se impugna haya sido entregada en la forma y términos que establece tal

leyenda, por lo que reitero que ésta me fue notificada en copias simples y que

la misma ostenta firma facsimilar, siendo procedente que se declare la Nulidad

de la resolución que se impugna por ser contraria a derecho.


Sirve de apoyo a lo anterior la tesis número III-J-49, de la revista del

Tribunal Fiscal de la Federación, Segunda Época de año II.No.10. Enero 1980,

página 49, que se transcribe a continuación:

IMPROCEDENCIA, CASO EN EL CUAL NO EXISTE


CONSENTIMIENTO EXPRESO.-

No es exacto que cuando un actor estampa su firma en una


resolución abajo de la leyenda que aparece impresa: “ACEPTO LA
DETERMINACIÓN Y LA LIQUIDACIÓN DE DIFERENCIAS”, la
consienta expresamente, pues en primer término, dicha aceptación
al estar impresa en el documento no significa que fue hecha por el
afectado, sino puesta por la propia autoridad; resultando de ello
que no existió un verdadero consentimiento por parte del actor,
pues de haber existido, el, de su puño y letra, hubiera estampado
no sólo su firma, sino la frase en cuestión, que es, en última
instancia, a través de la cual se habría reflejado ese consentimiento.
Además, conforme al artículo 1803 del Código Civil de aplicación
Federal, dicho acto debe ser interpretado como un acuse de recibo
que tiene por única finalidad el certificar que el causante recibió
en forma personal el documento en cuestión; máxime si se tiene en
cuenta que dichos causantes no son especialistas en derecho fiscal,
y que en el momento de hacérseles entrega de una liquidación, los
mismos los podrán firmar sin saber si se encuentra formulada
conforme a la Ley, por cuyo motivo se les otorga el término de
quince días para que se alleguen a personas que los asesoren a
efecto de impugnar las resoluciones que a su juicio los
perjudiquen, o bien que de lo contrario se formulen con ellas.

A más de lo anterior, he de manifestar en esta misma tesitura, que para

poder desvirtuar lo dicho por mi representada, sería necesario que la persona a

notificar haya plasmado íntegramente y de conformidad, que le estaban

haciendo entrega de la resolución impugnada en original con firma autógrafa;

siendo que solo le fueron entregadas a mi representada EL ACTA DE

NOTIFICACIÓN Y LA RESOLUCIÓN QUE SE COMBATE MISMA QUE

CONSTA DE TAN SOLO DOS PÁGINAS, por lo que niego en términos del

artículo 68 del Código Fiscal de la Federación que la misma me haya sido

legalmente notificada, encontrándome nuevamente en incertidumbre y estado

de indefensión por ignorar el origen de tal resolución, procediendo con esto se

declare la NULIDAD lisa y llana de la resolución que se impugna.

Sirve de apoyo a lo anterior la tesis Jurisprudencial que a continuación se

transcribe:
INFONAVIT.- LAS RESOLUCIONES QUE SE DICTEN POR
OMISION DE LAS APORTACIONES PATRONALES, DEBEN
CUMPLIR CON LOS REQUISITOS DE FUNDAMENTACION Y
MOTIVACION.

Las resoluciones dictadas por el Instituto para hacer efectivos


créditos por omisión a las aportaciones patronales, deben
encontrarse debidamente fundadas y motivadas atento a lo
previsto en el artículo 16 Constitucional. En consecuencia, debe
considerarse que no se cumple con lo estipulado en dicho precepto
legal cuando en tales resoluciones la autoridad se abstiene de
identificar plenamente a los trabajadores mediante la mención de
sus nombres, salarios, fechas de admisión, etc.(45)

Revisión No. 2284/86.- Resuelta en sesión de 13 de abril de 1987,


por unanimidad de 7 votos.- Magistrado Ponente: José Antonio
Quintero Becerra.- Secretario: Lic. Mario Bernal Ladrón de
Guevara.

Niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del Código Fiscal de

la Federación, que la demandada le haya notificado a mi representada en

original y con firma autógrafa la resolución impugnada.

DECIMO PRIMERO.- La resolución que se combate es ilegal y violatoria

de los preceptos 14 y 16 Constitucionales en relación con el diverso 38, fracción

IV del Código Tributario.

La resolución impugnada acusa también ilegalidad por violación a los

preceptos legales invocados, en efecto, de la simple lectura de la misma se

observa que carece de la debida fundamentación y motivación que exige la ley,

toda vez que en dicha resolución, únicamente se establece una cantidad relativa

al total de supuestas aportaciones y amortizaciones, sin que haga referencia al

procedimiento que utilizó la autoridad demandada para llegar a la cantidad ahí

asentada, lo cual coloca a mi representada en completo estado de indefensión

jurídica, al no encontrarse en aptitud de saber si el procedimiento empleado por

la autoridad es idóneo, y el importe global consignado es correcto; por lo que

solicito a esta H. Sala se declare Nulidad de la resolución impugnada por

carecer de la debida fundamentación y motivación que la ley exige.

Niego lisa y llanamente en términos del artículo 68 del Código

Hacendario Federal que la autoridad demandada, haya consignado el


procedimiento utilizado para determinar el importe total de las supuestas

aportaciones y amortizaciones que pretende cobrar mi representada.

DECIMO SEGUNDO.- La resolución que se combate es ilegal y

violatoria de los artículos 16 de la Constitución en relación al diverso 38,

fracción IV del Código Fiscal de la Federación, los cuales armónicamente

interpretados establecen que todo acto de autoridad debe estar debidamente

fundado y motivado.

La resolución impugnada entraña violación a los preceptos antes

mencionados, ya que de su simple lectura se puede observar que la autoridad

no motiva el monto de la sanción impuesta, siendo necesario que cite las

circunstancias especiales, razones particulares o causas inmediatas que haya

tenido en cuenta para la imposición de la multa, debiendo existir adecuación

entre los motivos aducidos y las normas aplicables, es decir que en el caso

concreto se configure la hipótesis normativa. A más de lo anterior para evitar

que la multa sea excesiva la autoridad debe tomar en cuenta la gravedad de la

infracción, esto es, el acto u omisión que haya motivado la imposición de la

multa, así como la gravedad de los prejuicios ocasionados a la colectividad, la

reincidencia y la capacidad económica del sujeto sancionado, así como

tratándose de multas en donde la sanción puede variar entre un mínimo y un

máximo, se invoquen las circunstancias y las razones por las que se considere

aplicable al caso concreto el mínimo, el máximo o cierto monto intermedio

entre los dos; cuestiones que omite la autoridad demandada y que son

indispensables para poder considerar que la resolución combatida se encuentra

debidamente fundada y motivada y estar en condiciones de saber si es que

realmente la autoridad consideró todos los elementos de juicio necesarios para

llegar a la imposición de la multa cuyo monto es de $8,340.70, no liberándola de

esta obligación el hecho de que se trate del monto mínimo de la sanción, por lo

que es clara la violación a los preceptos invocados siendo entonces procedente

declarar la Nulidad de la resolución impugnada.

Se sustenta lo anterior, con la tesis de jurisprudencia No. 308, sustentada

por la Sala Superior del Tribunal Fiscal de la Federación, la cual al rubro dice:
“MULTAS. REQUISITOS CONSTITUCIONALES QUE DEBEN

CUMPLIR...”

DÉCIMO TERCERO.- La resolución que se combate en esta vía, resulta

ilegal y viola en perjuicio de mi representada lo establecido por los artículos 16

Constitucional, en relación con el 38, fracción IV del Código Tributario, y en

consideración al diverso 22 de nuestra Carta Magna.

Por su parte, el precepto 16 de nuestra Ley Suprema, establece que nadie

puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones,

sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente que funde y

motive la causa legal del procedimiento.

El artículo 38, fracción IV del Código Fiscal Federal, impone que los actos

administrativos que se deban notificar deberán estar debidamente fundados y

motivados.

Ahora bien, el precepto 22 de la Constitución Política de los Estados

Unidos Mexicanos, prohíbe las multas excesivas.

En la especie, se da la violación a los dispositivos legales arriba

mencionados, toda vez que la autoridad al imponer una multa a mi

representada, debió tomar en consideración su capacidad económica, si existía

reincidencia o en su caso la gravedad de la infracción, los perjuicios

ocasionados a la colectividad, etc., esto con el fin de que su actuar se encuentre

apegado a la legalidad y no contravenga lo dispuesto por los numerales

jurídicos invocados. Por lo tanto, no demostrándose que se esté en un caso de

gravedad, lo jurídico es declarar la Nulidad de la multa impugnada, por

contener deficiencias legales y ser contraria a derecho.

De la aceptación gramatical del vocablo “excesivo”, así como de las

interpretaciones proporcionadas por la doctrina y por la Suprema Corte de

Justicia de la Nación, para definir el concepto de multa excesiva, contenido en

el artículo 22 Constitucional, se pueden obtener los siguientes elementos:


a) Una multa es excesiva cuando es desproporcionada a las

posibilidades económicas del infractor con relación a la gravedad

del ilícito.

b) Cuando se propasa, va más delante de lo licito y lo razonable

c) Una multa puede ser excesiva para unos, moderada para otros y

leve para muchos.

Por lo tanto, para que una multa no sea contraria al texto constitucional,

debe establecerse en la ley, que la autoridad facultada para imponerla, tenga

posibilidad, en cada caso de determinar su monto o cuantía, tomado en cuenta

la gravedad de la infracción, la capacidad económica del infractor, la

reincidencia, en su caso, de este en la comisión del hecho que la motiva, o

cualquier otro elemento del que pueda inferirse la gravedad o levedad del

hecho infractor, para así determinar individualizadamente la multa que

corresponda, y por lo tanto al no cumplirse estos elementos en el caso que nos

ocupa, procede declarar la Nulidad de la resolución impugnada.

Al respecto resulta aplicable la tesis jurisprudencial que a continuación se

transcribe:

MULTA EXCESIVA. CONCEPTO DE.-

S.J.F.IX, Época, T.II., Pleno, julio 1995, p. 5

Sirve de apoyo a lo anterior, la Jurisprudencia que a continuación se cita:

MULTAS. FUNDAMENTACION Y MOTIVACION DE SU

MONTO.-

En la fracción I del artículo 37 del Código Fiscal de la Federación

(1967), se establecen las puntas que deben tomarse en cuenta para la

cuantificación de las sanciones, como son: La importancia de la

infracción, las condiciones económicas del causante y la conveniencia

de destruir prácticas establecidas para evadir las prestaciones fiscales

así como para infringir disposiciones legales y reglamentarias. Por


tanto, si en el proveído en el que se impone la sanción, mismo que

debe ser apreciado en su integridad, se asientan los hechos que

relevan la gravedad de la infracción por el monto de los ingresos

omitidos, así como también los elementos con base en los cuales la

autoridad calificó de la buena la situación económica del infractor, al

considerar la magnitud de las operaciones realizadas por el

contribuyente, el proveído se encuentra debidamente fundado y

motivado por lo que hace a la cuantificación.

De igual modo, resulta aplicable la tesis que se copia a continuación:

MONTO DE UNA SANCION.- SU MOTIVACION DEBE

CONSISTIR EN DETERMINACIONES ESPECIFICAS RELATIVAS

AL INFRACTOR Y NO EN EXPRESIONES GENERICAS.-

Del análisis cuidadoso del artículo 37 del Código Fiscal, en relación

con el artículo 16 constitucional, se deduce que cuando una infracción

debe sancionarse con una multa que puede determinarse entre un

mínimo y un máximo, si se impone más del mínimo la autoridad debe

motivar la cuantificación hecha, atendiendo a las reglas que consignan

el artículo 37 citado, o sea la gravedad o levedad de la infracción y a

los atenuantes o agravantes que hubieran concurrido a su comisión,

debiendo entenderse que la motivación respectiva, especialmente si se

toma en cuenta que se trata de una materia sancionadora

administrativa, debe consistir en manifestaciones específicas que en

forma indubitable e individualizada se refiera al infractor y a las

circunstancias que se tomaron en cuenta.

Niego lisa y llanamente en términos del precepto 68 del Código

Hacendario, que en la resolución que se combate se haya tomado en

consideración los aspectos planteados con anterioridad.

Aunado a lo anterior, conviene hacer mención que la Suprema Corte de

Justicia de la Nación, ha establecido que tratándose de imposición de multas,

las leyes, deben contener las reglas adecuadas para que las autoridades

impositoras tengan la posibilidad de fijar su monto o cuantía, tomando en

cuenta la gravedad de la infracción, la reincidencia de éste en la conducta que la

motiva y, en fin, todas aquellas circunstancias que tiendan a individualizar

dichas sanciones, obligación del legislador que deriva de la comunión de los

artículos 22 y 31, fracción IV, de la Constitución Federal, el primero de los


cuales prohíbe las multas excesivas, mientras el segundo aporta el concepto de

proporcionalidad. El establecimiento de multas fijas es contrario a estas

disposiciones constitucionales, por cuanto al aplicarse a todos por igual, de

manera invariable e inflexible propicia excesos autoritarios y tratamientos

desproporcionados a los particulares, tal y como acontece en el caso que

establece porcentajes fijos, lo cual como ha quedado precisado en líneas que

anteceden, es ilegal y carente de todo sustento jurídico, por lo que procede

declarar la Nulidad de la resolución impugnada.

Es aplicable la Jurisprudencia número 10/1995 (9ª), aprobada en sesión

privada del Pleno de veinte de junio de mil novecientos noventa y cinco,

publicada en la página 19, Tomo II, Novena Época, del Semanario Judicial de la

Federación y su Gaceta correspondiente al mes de julio del mismo año, que a la

letra dice:

MULTAS FIJAS. LAS LEYES QUE LAS ESTABLECEN SON

INCONSTITUCIONALES.

Por otra parte conviene precisar que para considerar que una multa

impuesta a un particular cumple con lo establecido por los diversos 16 y 22 de

la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, debe satisfacer

ciertos requisitos, de los cuales se concluye que son los siguientes:

1. Que la imposición de la multa esté debidamente fundada, es decir

que se exprese con precisión el precepto legal aplicable al caso.

2. Que la misma se encuentre debidamente motivada, señalando con

precisión las circunstancias especiales, razones particulares o

causas inmediatas que se hayan tenido en consideración para la

imposición de la multa, debiendo existir adecuación entre los

motivos aducidos y las normas aplicables, es decir, que en el caso

concreto se configure la hipótesis normativa.


3. Que para evitar la multa sea excesiva, se tome en cuenta la

gravedad de la infracción, esto es, el acto u omisión que haya

motivado la imposición de la multa; así como la gravedad de los

perjuicios ocasionados a la colectividad, la reincidencia y la

capacidad económica del sujeto sancionado.

4. Que tratándose de multas en las que la sanción puede variar entre

un mínimo y un máximo, se invoquen las circunstancias y las

razones por las que se considere aplicable al caso concreto el

mínimo, el máximo o cierto monto intermedio entre los dos.

Por lo tanto y en el caso que nos ocupa, la autoridad emisora de la

resolución que se impugna, no tomó en cuenta los puntos vertidos con

anterioridad, para efectos de imponer a mi representada la ilegal sanción que se

impugna, por lo tanto resulta procedente declarar su Nulidad.

DECIMO CUARTO.- Los actos que se impugnan violan en perjuicio de

mi representada lo previsto por el artículo 14 Constitucional en relación con el

diverso 39 de la Ley Federal del Procedimiento Administrativo, ya que no

cumplen con las formalidades esenciales del procedimiento.

Los artículos mencionados establecen:

ARTÍCULO 14.- “… Nadie podrá ser privado de la vida, de la

libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino

mediante juicio seguido ante los tribunales previamente

establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del

procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad

al hecho.”

ARTÍCULO 39.- “Toda notificación deberá efectuarse en el plazo

máximo de diez días, a partir de la emisión de la resolución o acto

que se notifique, y deberá contener el texto integro del acto, así

como el fundamento legal en que se apoye con la indicación si es o

no definitivo en la vía administrativa, y en su caso, la expresión del

recurso administrativo que contra la misma proceda, órgano ante

el cual hubiera de presentarse y plazo para su interposición.”


Así las cosas, es evidente que nuestra legislación es categórica al señalar

que todo acto administrativo debe contener en su texto los siguientes

elementos:

1.- Deberá contener fecha de emisión.

2.- Deberá ser notificado dentro de los diez días hábiles siguientes

a su fecha de emisión.

3.- Si es definitivo en la vía administrativa.

4.- El fundamento legal de la indicación mencionada en el punto

anterior.

5.- El recurso que proceda en su contra.

6.- Órgano ante el cual deberá presentarse el medio de defensa, y

7.- Plazo para interponer el recurso.

De lo anterior, se arriba a la conclusión de que todo acto administrativo,

además de la fecha de emisión, debe ser notificado inexcusablemente dentro

de los diez días hábiles siguientes a su fecha de emisión, ya que de lo

contrario se transgrede la esfera jurídica del particular, al no conocer si el acto

primigenio ha sufrido modificaciones o si no se ha emitido uno diverso que

deje sin efectos el primero, de ahí que al haber sido notificada la resolución

impugnada en contravención a los numerales transcritos, se evidencia que

adolecen de legalidad plena y debe ser dejada sin efectos.

En efecto, la fecha de emisión del acto administrativo, lo fue el día 10 de

Abril de 2009, sin embargo, este no fue notificado sino hasta el día 24 de Junio

del año en curso, es decir, violando flagrantemente lo previsto por el artículo 39


de la Ley Federal del Procedimiento Administrativo y en exceso, pues los diez

días que otorga la Ley para tal fin no fueron respetados.

En tales condiciones debe reconocerse que el acto que se impugna no

puede surtir efecto jurídico alguno por flagelar la esfera jurídica de mi

representada y por consiguiente debe dejarse sin efectos la resolución recurrida.

Niego lisa y llanamente en términos de lo previsto por el artículo 68 del

Código Fiscal de la Federación que el acto impugnado se hubiese notificado de

acuerdo a lo establecido por el artículo 39 de la Ley Federal del Procedimiento

Administrativo.

PRUEBAS

PRIMERA.- La documental pública consistente en el original del acta de

notificación de la resolución determinante 08MAS200804119602, de fecha 10 de

Abril de 2009, sin haber existido citatorio previo a tal diligencia.

SEGUNDA.- La documental pública consistente en la resolución

determinante 08MAS200804119602, de fecha 10 de Abril de 2009, tal y como fue

dada a conocer (en copias simples).

TERCERA.- Copia certificada del Instrumento Notarial, con el cual

acredito el carácter con que promuevo, misma que se adjunta, acompañada de

copia simple, para que previo cotejo y compulsa, me sea devuelta la primera,

autorizando para recogerlo a las personas señaladas en el preámbulo de este

escrito.

CUARTA.- La instrumental de actuaciones.

QUINTA.- La presuncinonal en su doble aspecto legal y humana.

Por lo expuesto y fundado; a Ustedes C.C. Magistrados atentamente

solicito se sirvan:
PRIMERO.- Admitir a trámite la presente demanda interpuesta en

tiempo y formas legales.

SEGUNDO.- Previos trámites de ley, declarar la Nulidad de forma lisa y

llana de la resolución que se combate en este juicio.

PROTESTO LO NECESARIO

___________________________________________

LUIS ALFONSO NEVAREZ TORRES

Chihuahua, Chihuahua a 14 de Septiembre del 2011

También podría gustarte