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Elí Evangelista Martínez

Claudia Isabel Achell Santoyo

Diseño Estratégico y
Procuración de Fondos para
Proyectos Sociales y
Culturales.

Ediciones Entorno Social


Diseño Estratégico y Procuración de Fondos para Proyectos Sociales Culturales.
Elí Evangelista Martínez y Claudia Isabel Achell Santoyo
Primera Edición 2018.
122 páginas Editorial Entorno Social.
Ciudad de México.

Diseño Estratégico y Procuración de Fondos para Proyectos Sociales y


Culturales
Primera Edición. 2018.
122
páginas.
Publicación de la Editorial Entorno Social.
Reservados todos los derechos
Impreso en México.

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Indice

Introducción………………………………………………………5

Capítulo 1.- Aproximaciones teórico-conceptuales a la


Planeación Social………………………………………………..7

Capítulo 2.- Aproximaciones metodológicas a la


Planeación Social………………………………………………..31

Capítulo 3. Formulación de Proyectos Sociales……….…55

Capítulo 4. Planeación Estratégica y Marco Lógico………61

Capítulo 5. Innovación Social………………………………….73

Capítulo 6. Procuración de Fondos para Proyectos


Sociales…………………………………………………………….81

Conclusiones, hallazgos y proyecciones…………………111

Referencias Bibliográficas……………………………………117

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Introducción
El presente libro es producto de un intensivo esfuerzo colectivo por
sistematizar diversas dimensiones de nuestra vida profesional basada en
el trabajo comunitario y de gestión social realizado en numerosos espacios
sociales, complementado con la participación y acompañamiento
metodológico a diversas organizaciones civiles y sociales; y con la praxis
profesional en la administración pública.

En ese sentido, es una obra especializada dirigida a los estudiantes y


profesionales de las ciencias sociales y a servidores públicos insertos en
los procesos de formulación y desarrollo de procesos de planeación social
orientados al bienestar social y en la dirección de instituciones sociales.
En tal caso, el texto aborda de manera sucinta pero consistente, y desde
una perspectiva multidimensional el estudio de la Planeación y la Gerencia
Sociales proponiendo dos dimensiones para su análisis: la Dimensión
Teórico-conceptual, que nos permitirá adentrarnos en el significado, en
la forma y en el fondo de distintas categorías de análisis, en los diversos
conceptos elementales y en los referentes teóricos y conceptuales para el
estudio de la planeación y la gerencia social; y la Dimensión
Metodológica que se estructura a partir de la identificación de enfoques,
etapas, procedimientos, estrategias, métodos, técnicas e instrumentos
utilizados en todo proceso de planeación y gerencia social.

Asimismo, a la par de los elementos mencionados, es importante resaltar


la tesis central que enmarca el desarrollo de la obra sostiene lo siguiente:
“los procesos de Planeación o elaboración de planes, programas y
proyectos sociales, no son exclusivamente cuestiones teóricas,
conceptuales o metodológicas, sino que en su funcionamiento y desarrollo
intervienen aspectos contextuales, políticos y societales, y la articulación
de esos aspectos determina significativamente el rumbo de los mismos,
fundamentalmente con miras a la construcción de nuevos enfoques y
claves que reorienten los planes, programas, proyectos sociales y las
instituciones sociales de nuestro país”.

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Por ello, consideramos que el libro es un relevante aporte para el análisis
y para la acción social, ya que además de que se gesta, nace y se
desarrolla con la conexión entre formación académica, investigación,
práctica docente, trabajo comunitario y experiencia profesional, a la vez
integra distintos ejes de análisis tanto teóricos como metodológicos
necesarios para lograr un amplio, riguroso y profundo estudio de la
Planeación Social.

Es importante mencionar que cuando se concluye un escrito, pareciera


que en él existen casi todas las respuestas a casi todas las preguntas de
una temática determinada, aunque este escrito lo que busca no es
responder interrogantes de manera absoluta, ni definitiva, sino más bien
generar aproximaciones, propuestas en construcción, esbozos para
planear socialmente y para dirigir instituciones y programas sociales, y por
eso no es una propuesta que agote todo sobre los temas tan amplios y
complejos como los tratados.

Y finalmente es preciso mencionar también que generalmente cuando se


concluye una publicación, pareciera que una sola persona es quien la
hace, pero más bien una persona es quien la registra por escrito y asume
la responsabilidad por lo dicho, pero la realidad es que todo escrito es una
construcción intelectual colectiva, por eso, es preciso reconocer que el
presente escrito es fruto de un arduo esfuerzo de muchas personas e
instituciones, y creo que un intento por nombrar a todos aquellos que han
contribuido a configurarlo se convertiría en un ejercicio casi inacabable,
pero es necesario mencionar y reconocer como algo sustantivo, por eso
reconocemos el aporte de todas y todos nuestra compañeros en la lucha
por construir este libro, como procesos de construcción de conocimiento
para la práctica social científica.

CDMX. Diciembre 2018.

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Capítulo 1.- Aproximaciones
teórico-conceptuales a la
Planeación Social.
1.1 Conceptualización de la Planeación Social

Hablar de Planeación Social implica hacer referencia a un concepto


amplio, diverso y complejo, pero podemos afirmar que es un proceso
social, educativo, político y metodológico; es proceso SOCIAL, dado que
siempre busca la transformación de situaciones sociales, busca un
impacto social; es EDUCATIVO porque implica la construcción de
conocimientos y saberes a partir procesos de enseñanza-aprendizaje; es
POLITICO porque implica definir opciones y tomar decisiones; y
METODOLOGICO porque se compone de un ciclo de vida, de enfoques,
métodos, técnicas instrumentos para realizarse.

Todo proceso de Planeación busca proyectar o incidir en el futuro,


definiendo objetivos y metas, tomando decisiones y desarrollando
acciones en tiempos y espacios delimitados y retomando metodologías
para el logro de lo planteado, tomando en cuenta, al menos, las siguientes
interrogantes:
 ¿Qué quiero lograr? OBJETIVOS
 ¿Cuánto quiero lograr? METAS
 ¿Cómo voy a lograrlo? METODOLOGIA
 ¿Qué hacer? ACCIONES
 ¿En qué momento? TIEMPO
 ¿En qué lugar? ESPACIO
 ¿Qué necesito? RECURSOS

La Planeación Social se basa en la elaboración de PLANES, que son los


instrumentos de la planeación más generales , amplios, de largo plazo y
se orientan a los espacios globales y son multitemáticos; los
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PROGRAMAS, que son los instrumentos intermedios, de mediano plazo,
operan en espacios regionales y son temáticos; y los PROYECTOS, que
son los instrumentos más específicos, concretos u operativos de la
planeación, son de corto plazo, operan en espacios locales y son micro-
temáticos.

En tal sentido, la Planeación Social es un Proceso social, educativo,


político y metodológico que tiene como objetivo la definición de
objetivos y metas, de tiempos y espacios, recursos y estrategias,
procedimientos y potencialidades requeridas para el desarrollo de
acciones y actividades orientadas a transformar el fondo y la forma
de una situación o problema social. Toco proceso de Planeación se
basa en la elaboración de Planes, Programas o Proyectos Sociales.

Todo proceso de planeación a la vez que debe ser sistemático,


articulado, coherente, viable, gestionable, participativo, democrático,
sustentable, eficiente y eficaz, y en tanto es proceso, es algo que siempre
se ubica en dos grandes dimensiones; entre lo que se plantea realizar y lo
que está en marcha; por lo tanto, la planeación es una actividad
recurrente, un proceso dinámico y continuo que articula también actores
sociales, institucionales u organizacionales.

1.2 Planeación y Planificación

Asimismo, para aproximarnos al concepto de Planeación Social existe otro


término que es relevante para tal fin, y es importante resaltar la relación
y/o diferencia que hay entre este concepto y el de Planificación Social,
cuestión que se ha sido abordada de manera superficial, por ello es
importante entrar a detalle en tal tema, y el siguiente cuadro nos ilustra las
diferentes consideraciones de uno y otro concepto:

PLANEACIÓN PLANIFICACIÓN

Sistema de libre competencia. Sistema de Planificación central.

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Es un proceso ubicado en los Es un proceso que se enmarcaba
marcos de una economía en una economía de países
capitalista. socialistas.

Es un proceso “micro” o Es un proceso “macro” o general.


específico ( es parte de proceso
de planificación).

Está vinculado con la proyección Es un proceso de proyección y de


sólo se define que se va hacer . acción, defino como voy a actuar.

En la Planeación se fijan las En la Planificación defino las


metas u objetivos que quiero estrategias y métodos que voy a
cumplir. seguir para conseguir mis metas u
objetivos.
En la Planeación se fijan los En la Planificación se eligen y
medios para alcanzar ese fin. elaboran los procedimientos
apropiados para actuar sobre la
situación que se desea trabajar.
Se elaboran Planes Sociales Se elaboran y desarrollan Planes
Sociales
Son sinónimos Son sinónimos

Ante las anteriores perspectivas y diferencias y para los fines del presente
documento, privilegiaremos el concepto de Planeación Social tomando
como base que ante la Planificación Social estos serán sinónimos.

1.3 Características del Proceso de Planeación Social

Es Científico. La Planeación Social no es un ejercicio de sentido común,


es considerado un proceso científico que se basa en teorías, categorías,
conceptos y metodologías científicas que le permiten ser una actividad
que se vincula a diferentes disciplinas sociales y humanas.

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Es Explícito.- Todo proceso de Planeación debe de ser explícito, tiene
que darse a conocer y debe de ser traducido a un documento escrito. Debe
de ser público. Por ejemplo el Plan Nacional de Desarrollo, es un Plan que
está plasmado en un documento y es público.

Es Flexible.- La Planeación debe ser precisa, pero de acuerdo a la


situación puede estar sujeta a cambios, innovaciones o modificaciones,
para ir adaptando procedimientos y acciones con respecto a los objetivos,
ya que definir acciones y procedimientos precisos no significa que dichos
procedimientos y objetivos deban ser inmutables. Siempre es importante
considerar cambios en función de las circunstancias que se presenten ya
que la flexibilidad tiene como fin obtener mejores resultados.

Es Incluyente o participativo.- Todo proceso de Planeación debe de ser


construido con todos los actores e instituciones que promueven o
intervienen en el proceso. En el cual tanto los beneficiarios como los
técnicos que provengan de una institución u organización deben de
involucrarse por igual en el proceso de planeación generando
organización, colectividad y participación.

Es Estratégico.- Todo proceso de Planeación debe tener una visión de


largo alcance que se transforme en acciones a mediano y corto plazo. La
estrategia consiste en definir escenarios futuros, es construir una imagen
objetivo del Plan al que se aspira y de la trayectoria que se va a seguir
para acercarse a dicha imagen. Se refiere a la construcción de
alternativas.

Es Coordinado.- Todo proceso de Planeación debe de ser coordinado,


es necesario contar con el respaldo de una institución u organización que
permita que esas ideas, acciones y procedimientos se concreticen en la
realidad. Habrá más capacidad de organización y por lo tanto mayor
capacidad de impacto y de recursos.

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1.4 Fundamentos Teóricos de la Planeación Social

Cuando se habla de los fundamentos teóricos del proceso de Planeación


Social se hace referencia a los grandes horizontes teóricos que sustentan
los objetivos últimos o estratégicos que se buscan obtener. Las finalidades
no son los propósitos u objetivos de corto plazo que se generan en una
coyuntura social y que se orientan en el hacer de la Planeación Social,
sino que son aquellos grandes lineamientos que definen sus objetivos
sustantivos o de largo plazo. Asimismo, es importante mencionar que toda
finalidad de la Planeación Social se construye con diversas posturas,
ideas o posiciones teóricas, políticas y metodológicas que se priorizan de
cara a la sociedad y con respecto a las formas en que esta se organiza y
se presenta frente a las instituciones del Estado. Por ello, podemos de
manera general ubicar las siguientes posiciones teóricas:

1.4.1 La Planeación Social como fundamento de la generación del


Bienestar Social.

Este enfoque concibe a la Planeación Social como un proceso mediador


entre el Estado y la Sociedad, que articula una serie de mecanismos,
instituciones y procedimientos para generar bienestar social en una
sociedad, disminuyendo y eliminando las diferencias socioeconómicas
entre los grupos de una sociedad determinada, pero también enfrentando
la desigualdad social con medidas redistributivas y de acceso a servicios
y beneficios sociales.
Para este enfoque la planeación social será la estrategia más importante
para lograr bienestar social de la comunidad, entendiéndolo por una parte,
como una acción planeada y dirigida a todos los sectores de la sociedad,
sin distingos, ni excepciones, aunque priorizando a los más sectores más
necesitados.

1.4.2 La Planeación Social como mecanismo de combate a la


pobreza.

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Desde esta perspectiva la Planeación Social es vista como el conjunto de
mecanismos y lineamientos de acción social necesarios para compensar
social y asistencialmente, solo a los sectores de la población que se
encuentran en situación de pobreza: excluidos y marginados. Por otra
parte, los sectores que no son focalizados en este rubro, quedan fuera del
proceso, por lo que esta tendencia teórica de la planeación social, limita o
reduce su ámbito de acción a los sectores en situación de pobreza, por lo
que se traduce en el desarrollo de iniciativas sociales compensatorias,
asistencialistas, emergentes, cortoplacistas y desarticuladas, como lo
argumentamos anteriormente, focalizados prioritariamente a sectores
sociales en situación de necesidad extrema.

En este caso, la Planeación Social se convierte en un dispositivo para dar


apoyos o ayuda concreta y puntual en situaciones emergentes a cierto tipo
de población pobre que es seleccionada como prioritaria para quienes
planean.

1.4.3 La Planeación Social para la búsqueda de la Equidad Social.

Esta tendencia teórica sostiene que en el mundo social existen


desigualdades en diferentes planos no solo en el económico, y lo
sustantivo de los procesos de Planeación Social es enfrentarlas y buscar
la equidad social en todas esas dimensiones. Es preciso advertir el tema
de la equidad se ha complejizado, ya que hoy la equidad no sólo se busca
entre pobre y rico, entre el que tiene la riqueza y el que padece pobreza,
sino que se debe buscar la equidad socio-cotidiana entre otras
desigualdades que se presentan en nuestras sociedades: la equidad entre
hombre y mujer, entre minorías étnicas, entre minorías sexuales, entre
posturas religiosas, entre los territorios y las regiones, entre las
instituciones y los sujetos sociales, entre el Estado y la sociedad, entre el
binomio ciudad-campo, entre la ecología y la producción. Todos estos
planteamientos orientados hacia la equidad son los que hoy definen una
vertiente consistente en el marco de las finalidades de la Planeación
Social.

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1.4.4 La Planeación Social como proceso orientado al Control Social.

En esta perspectiva los procesos de Planeación Social estriban en


construir circuitos y/o dispositivos sociales, que son identificados como
indispensables para asegurar la cohesión, el consenso y la estabilidad
social. Desde este enfoque el fin de la Planeación Social es la
gobernabilidad de una sociedad, que implica el control social persuasivo,
para incidir a la reversión de las tendencias más excluyentes y autoritarias
del sistema social en los planos económicos , sociales, políticos, culturales
y medio ambientales.

Así, la cuestión social específica aparece como un medio para el logro y


conservación de la armonía y la cohesión social, es decir, para esta
perspectiva los fines de la Planeación Social tienen que ver
prioritariamente con lograr ambientes sociales de gobernabilidad, dejando
en segundo plano y entendiendo como un medio, el acceso a servicios,
beneficios y prestaciones sociales. Pero en un segundo momento, si el
planteamiento consensual del control social queda rebasado, existe una
posición que parte de la visión coercitiva que pretende por la fuerza
extender la hegemonía del Estado y del sistema socio-económico sobre
los núcleos de la población, cuestión en la que los proceso de planeación
social juegan un relevante papel.

1.4.5 La Planeación Social como posibilidad de formación de sujetos


sociales.

Para este enfoque más progresista y de avanzada, la Planeación Social


juega un papel de impulso y apoyo a las y los ciudadanos de una sociedad
para que estos se puedan transformar en sujetos colectivos dotados de
derechos, deberes y capacidades de decisión, acción y proyección social,
rasgos característicos del sujeto social o actor social.

Desde la Planeación Social la formación de sujetos sociales implica


generar procesos de participación y organización, que en sí son
referentes y espacios de ejercicio y aprendizaje de la ciudadanía. En

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consecuencia, desde esta perspectiva los procesos de planeación juegan
una finalidad alterna que es contribuir al establecimiento progresivo de una
sociedad civil autónoma formada por ciudadanos-colectivos, que tenga
claridad de sus derechos y que fundamentalmente tengan en sus manos
los mecanismos para ejercerlos. Es así como, por medio de sujetos
sociales, ciertos miembros de los sectores sociales populares pueden
acceder a una ciudadanía que la sociedad muchas veces no les reconoce
como individuos o por sus características socio-económicas.

Es preciso mencionar que desde una perspectiva teórica las anteriores


posiciones aparecen como configuraciones que coexisten, se enfrentan,
se tensionan e interactúan dentro un contexto socio-histórico específico.
Y también es necesario reconocer que si bien el principio ético e inspirador
de los procesos de planeación social de avanzada es sin temor a
equivocarnos construir el bienestar social y la transformación social,
existen otros alcances más allá de lo ético, que hacen que en el nivel de
concreción las finalidades de la planeación se centren también en un
interés por el control social y la reproducción de esquemas que permitan
la preservación y legitimación del sistema social, y con ello conservar y
fortalecer el status quo.

Es por eso que consideramos como un aspecto central en el análisis


teórico , es que es necesario entender a la planeación social desde una
visión pluralista, crítica, pero también propositiva; por una parte como un
dispositivo para operar mecanismos de reproducción del sistema y como
mecanismo de control social, pero también como un instrumento de lucha
social y de transformación y como dispositivo para lograr el bienestar
social colectivo a través del reconocimiento de derechos sociales incluidos
en marcos legales, en opciones legitimadas y en una red institucional de
lo social, y por supuesto, como elemento liberador y transformador en toda
acción social.

De acuerdo a este planteamiento, la Planeación Social se convierte en un


medio y un fin para generar acciones contra la pobreza, para promover
modalidades de organización y participación social, para idear

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mecanismos para la generación de empleo y obtención de un salario
digno, para lograr el acceso pleno a las prestaciones sociales, para otorgar
asistencia social, para eficientar la gestión social y ciudadana, para dar
capacidad de respuesta a las demandas populares, para incidir a la
construcción de ciudadanía social, todo ello a través de responsabilidades
públicas, tanto del Estado como de otros actores sociales.

Asimismo, es preciso remarcar que el Planeación Social al acompañar


procesos en que intervienen actores sociales, es una acción encaminada
a la construcción de ciudadanía cuyo sustento tiene relación con un multi-
proceso para constituir tejido social dotado de continuidad y capacidad de
acción, lo que permite lograr autonomía como modelo de organización y
relación con los actores sociales. En tal sentido, el concepto de
construcción de ciudadanía remite al sujeto colectivo responsable, dotado
de derechos, deberes y capacidad de decisión, rasgos característicos del
ciudadano moderno. También, la construcción de ciudadanía implica
generar procesos de participación y organización, que en sí son
referentes y espacios de ejercicio y aprendizaje de la ciudadanía.

En consecuencia, la Planeación Social se ha venido convirtiendo en un


mecanismo social, político, educativo y metodológico que tiene también
como finalidad alterna contribuir al establecimiento progresivo de una
sociedad autónoma formada por ciudadanos-colectivos, que tenga
claridad de sus derechos y que fundamentalmente tenga en sus manos
los mecanismos para ejercerlos, para vivirlos, para concretizarlos. Es así
como, por medio de sujetos colectivos, los sectores sociales pueden
acceder a una ciudadanía que la sociedad muchas veces no les reconoce
como individuos o por sus características socio-económicas de exclusión
o marginación social.

1.5 Principios de la Planeación Social

Participación: Es la manera en que las y los sujetos sociales, de una


forma integral, son protagonistas en la construcción de proceso de
planeación social y no sólo receptores de la información o de la visión de

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su desarrollo. Por eso, esta perspectiva promueve la participación
solidaria, voluntaria, activa, consciente, libre y reflexiva de los sujetos
vinculados con las realidades sociales y los actores institucionales correspondientes.

Diversidad. La Planeación social siempre debe poner énfasis a las


múltiples formas de pensamiento y acción que tienen las y los sujetos
sociales beneficiarios de lo social. En lo que respecta al pensamiento nos
referimos a la forma de expresarse, de imaginar el presente y el futuro; y
en cuanto a la acción a priorizar, problematizar, y dar capacidad de
respuesta a cualquier situación o necesidad social.

Libre Definición. Todo proceso de planeación social debe ser realizado


a partir de un respeto a las decisiones de los sujetos participantes, es
decir, es necesario respetar la autonomía y la libre determinación de las
decisiones y acciones que tomen y asuman.

Pluriculturalidad. Todo ejercicio de planeación social debe respetar la


diferencia de las distintas culturas e identidades que se manifiestan en los
sectores sociales. Esto, si bien representa una diversidad, es mucho más
complejo, porque una cultura está conformada por elementos materiales,
simbólicos, históricos, ideológicos y coyunturales, que generalmente
reconocen diferencias entre los diferentes grupos sociales.

Espacialidad. La planeación social estará muy vinculada a los espacios


sociales, que están dividida en dos niveles: físicos e imaginarios, o
simbólicos, que se concretan en territorios que son una fuerte marca de
identidad, en tanto representación, de los sujetos beneficiarios de lo social.

Transversalidad. La mirada de la planeación social contemporánea debe


retomar el enfoque transversal, entendido como la posibilidad de buscar
en todas las instancias públicas y civiles, independientemente de áreas,
sectores o rubros de atención, lineamientos dirigidos al Bienestar Social,
a partir de un ente que delinea las formulaciones generales, estratégicas
y que sea una instancia normativa y supervisora de los programas
sociales. Asimismo, la transversalidad es una acción encaminada a lograr

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que las temáticas de interés para la generación del Bienestar Social,
crucen el hacer y quehacer de todas las instituciones públicas y civiles.

Perspectiva inter e intrageneracional. La planeación social debe


impulsar acciones que desencadenen procesos y relaciones
intergeneracionales, construir, promover y fortalecer espacios de
encuentro y comunicación horizontal entre la juventud y otros sectores:
niños y niñas, adultos y adultos mayores, así como entre los mismos
grupos de edad y entre las muy diversas identidades sociales y culturales.

Enfoque educativo. Todo tipo de acción encaminada a elevar la calidad


de vida social debe ser considerado un proceso de análisis y significación
de conocimiento entre las y los participantes. Por ello, en todo proceso
orientado a la planeación social se debe buscar la promoción de procesos
educativos y organizativos entre los sujetos beneficiarios de lo social,
simultáneamente al desarrollo de servicios o acciones, potenciando con
ello, aprendizajes y fomentando la construcción de conocimiento.

Visión estratégica. La planeación social debe ser continua, buscando


centrarse en visiones que retomen el largo alcance, que permite imaginar
entornos sociales más justos y equitativos, pero siempre tomando en
cuenta lo realizable en el corto y mediano plazo. Es decir, es aquella visión
que nos permite proyectar los escenarios de largo plazo tomando
decisiones y desarrollando acciones en el presente mismo.

Alianzas estratégicas/gestiones asociadas. La planeación social


implica también la construcción de acuerdos, articulaciones, convenios,
que permitan acciones conjuntas de diferentes sectores de la comunidad,
que permiten alcanzar más fácilmente el logro de los objetivos comunes,
potenciando el resultado y el impacto de dichas acciones.

Inclusión y consenso social. Independientemente de que todo grupo


social se caracteriza por tener cuestiones en común, también tienen
diferentes temáticas, objetivos, inquietudes, intereses, expresiones,
reivindicaciones, identidades, códigos de comunicación, normas,

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problemáticas, modos y formas de vida, por los que las acciones que se
realicen en el marco de procesos de planeación social deben tender a
incluir socialmente todas esas expresiones y condiciones, a partir de sus
diferencias, pero también a lograr consensos específicos en el abordaje
de sus temáticas diferenciadas.

Perspectiva de Género. Se refiere a las diferencias sociales y culturales


de lo que significa ser mujer y ser hombre en una sociedad, sabiendo que
existe una división genérica del mundo que se manifiesta en una situación
de dominio de la construcción social del ser hombre sobre el ser mujer.
Toda acción orientada a la planeación social debe ser construida y
desarrollada con un enfoque de género, aunque ahora también la
categoría de género incorpora temas de la diversidad sexual.

Horizontalidad. Todo proceso de planeación social debe establecer


relaciones horizontales de intercambio y construcción de conocimientos,
ideas y proyecciones, con el fin de promover diálogos consciente, libres y
reflexivos de los sujetos sociales vinculados con la realidad local donde se
va a planear.

Visión integral. Un ejercicio de planeación social debe considerar todos


los aspectos, necesidades, situaciones, problemas y potencialidades de
sectores sociales y, además, imprimir importancia a todas las miradas y
opiniones de los actores sociales e institucionales participantes.

Postura democrática. En los proceso de planeación se deben privilegiar


relaciones dialógicas, incluyentes abiertas, plurales y tolerantes entre los
sujetos sociales y las instituciones.

Intencionalidad transformadora. Todo proceso de planeación siempre


tiene la intención de lograr cambios positivos y progresivos, desde dentro
y debajo de las realidades sociales. Un reto importante recae en entender
todo proceso de transformación orientado al bienestar social como una
construcción histórica y colectiva a partir de aproximaciones sucesivas:
transformación de circunstancias–instante inmediato; transformación de

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acciones-corta duración; transformación de coyunturas–mediana duración
y transformación de estructuras–larga duración.

Focalización. Dentro de todo planteamiento de planeación social es


importante definir específicamente los sectores sociales y poblacionales
con los que hay que trabajar. Focalizar no sólo tiene que ver con una
estrategia política para seleccionar arbitrariamente a los beneficiarios de
lo social, sino que debe ser visto como un planteamiento político de
acceso universal, y que se convierte en un concepto técnico para
identificar o seleccionar rigurosamente sectores sociales y para definir y
dar prioridad al desarrollo de acciones sociales a la población en
desventaja social.

Capacidad de resolución emergente y estratégica. Si bien todo


planteamiento orientado a la planeación social exige una mirada
estratégica, a la vez requiere una capacidad de dar solución inmediata a
las demandas, necesidades y situaciones o problemáticas que los
sectores o grupos sociales asumen como suyas. Las mismas realidades
sociales efectivamente exigen respuestas a largo y mediano plazo, pero
sin dejar de tomar en cuenta que el cumplimiento de sus aspiraciones y
demandas de manera inmediata, urgente o emergente es crucial para los
mismos sectores sociales.

Fortalecimiento institucional. La planeación social es producto de


acciones de capacitación y apoyo de las instituciones u organizaciones
que posibilitan su desarrollo y mejoran su eficiencia en el cumplimiento
de sus objetivos. Por ello siempre deben existir procesos de
fortalecimiento para que los ejercicios de planeación sean realizados con
Eficiencia, que es el proceso que le da forma a la planeación,
desarrollando adecuadamente acciones y optimizando de tiempos y
recursos, con Eficacia que es el fondo del proceso, ya que tiene que ver
con el cumplimiento de objetivos y metas y con Calidad que tiene que
con el cumplimiento de normas o estándares adecuados de
funcionamiento.
1.6 La planeación Social desde un Enfoque de Políticas Públicas.

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1.6.1 Estado y Estructura Social

La Planeación Social como proceso orientado a conocer, caracterizar o


interpretar la realidad social, pero de manera esencial para actuar o
insertarse en ella para transformarla positivamente, tiene su singularidad,
que no su especificidad, en la acción social, actuación social, praxis social
o intervención social, es decir, en la inserción en la realidad social, para
identificar y dar capacidad de respuesta a problemas y necesidades
sociales. Sin embargo, para profundizar esta aproximación conceptual es
necesario reconocer las esferas de la estructura social y por ello es
indispensable abordar dos categorías prioritarias: el Estado y la Estructura
Social, así como la relación de las mismas con los procesos de
planeación. Podemos iniciar este recorrido ubicando al Estado como un
fenómeno histórico de larga duración, traducido en la macro-estructura de
organización política, económica, social y normativa de una sociedad
determinada, que se compone con, al menos, los siguientes elementos:
 Una colectividad social reconocida en una historia
 Una delimitación territorial
 Una legitimidad basada en diversas formas de organización social
 Una expresión jurídico-administrativa concretizada en un gobierno
 Una fuerza simbólica concretizada en un sistema político
 Un sistema político que vela por el funcionamiento interior y sus
relaciones al exterior, y una modalidad de control y estratificación social
 Un conjunto de instituciones y actores orientados a generar el bienestar
social de diversos segmentos de la población
 Una sistematización de las conductas basada en un orden jurídico-
normativo
 Una serie de elementos culturales que generan la cohesión y el
consenso social (Heller, 1990; Crossman, 1994)

Es preciso mencionar que desde una perspectiva crítica e integral, existen


dos grandes enfoques para entender la naturaleza del Estado: uno que
plantea que existe una relación instrumental específica y de dominación
entre el aparato estatal y la clase dominante en una sociedad, y por otro

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la sociedad dominada. (El Estado como instrumento de los intereses de la
clase dominante). Y existe otra perspectiva que sostiene que el Estado no
favorece intereses específicos y no está aliado con clases específicas,
sino lo que el Estado busca es la reproducción de relaciones sociales
necesarias para la reproducción de la sociedad. (El Estado como
mecanismo de reproducción del sistema y como garante del control,
integración y cohesión social).

Asimismo, en esta ubicación conceptual es necesario retomar otra


categoría de análisis vinculada al Estado, que es necesario abordar para
entender la naturaleza del Trabajo Social en el ámbito de una sociedad
determinada: la Estructura Social, que “es el conjunto de esferas en las
que las prácticas de grupos e individuos están organizadas (instituciones)
y relacionadas entre sí (procesos sociales), de manera que se crean unos
ejes de desigualdad que configuran la identidad de esos individuos y
grupos, así como los cursos posibles de la acción social (individual y
colectiva). (Adelantado, 2002; 48)

La Estructura Social se integra con un sistema de posiciones jerarquizado,


no sólo en función de la división clasista de la sociedad desde el punto de
vista socio-económico, sino también en función de muchos ejes de
desigualdad y dominación sociales y culturales. Es a partir de los ejes de
dominación y de las esferas antes mencionadas, cuando se generan
desigualdades que el la planeación social busca cerrar o acortar distancias
y brechas, tanto coyunturales como estructurales. (Adelantado, 2002) La
Estructura Social siempre se constituye como una articulación compleja
de relaciones, instituciones, dispositivos, legalidades, niveles de
legitimidad, actores, reglamentaciones y recursos para el funcionamiento
de la sociedad. Estos elementos se sintetizan en cuatro grandes esferas:
la estatal, la mercantil, la relacional y la doméstico-familiar. (Adelantado,
2002).

A partir de esa perspectiva, la planeación social debe ubicar en su acción


profesional las cuatro esferas de estructura social: la Estatal, que
salvaguarda los derechos-igualdad, lo jurídico-administrativo, la seguridad
interna y externa y el territorio; la Socio-civil que hace referencia al
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mundo asociativo y organizacional de la comunidad; la Privada que tiene
que ver con el mercado y todo lo relativo a la producción-distribución-
consumo de bienes y servicios; y la doméstico-familiar que tiene vínculos
con las células básicas que socializan y cohesionan desde abajo a la
sociedad.(Adelantado, 2002). Estas esferas se entrecruzan, coexisten y
cada una de ellas tiene roles y misiones en función del mismo desarrollo
de la sociedad, y por eso no pueden ser desvinculadas una de la otra,
interactúan para la generación de servicios y beneficios sociales y en el
reconocimiento, defensa y promoción de los derechos sociales. (Villarreal,
2005). Habría que remarcar que el Estado no es la única esfera de
importancia para la planeación social, pero es la que tiene centralidad
como forma macro-social que reconoce, valida, legaliza e institucionaliza
las relaciones entre las esferas.

1.6.2 Políticas Públicas, Políticas Sociales y Planeación Social

Las Políticas Públicas son los diferentes cursos de decisión y actuación


delimitados, legalizados e institucionalizados por el Estado, mismos que
se traducen en directrices y proyecciones estratégicas, explícitas,
permanentes, sistemáticas, integradas y consensadas socialmente, que
los actores estatales y socio-civiles generan para transformar o modificar
una situación determinada, dando capacidad de respuesta a los intereses
de los distintos segmentos de la sociedad y al mismo estado. Es decir,
las políticas públicas representan una serie coherente y articulada de
respuestas del Estado hacia los intereses, contextos y problemáticas de
la sociedad. En un segundo momento, la política pública es parte del
heterogéneo y complejo campo multidisciplinario que tiene como objetivo
el análisis de las cuestiones y problemas considerados públicos, por lo
que sus propósitos se fincan en estudiar los procesos de decisión de las
autoridades jurídicamente públicas, ya sea para indagar su compleja
multicausalidad y/o para dilucidar la mejor opción de decisión y acción
frente a un problema público o de gobierno. (Bazúa y Valenti, 1995)

Como lo público no es sinónimo de lo Estatal, ni de lo gubernamental, las


políticas públicas si bien deben ser validadas y legalizadas por los poderes

22
del Estado y aplicadas por el gobierno, esto no significa que solamente la
estructura estatal y/o gubernamental tenga en sus manos su diseño e
implementación, por lo que los actores que se encuentran más allá del
Estado son también importantes en su definición. Por lo tanto, lo público
es una construcción social y un hecho histórico que involucra al Estado
pero también a otros actores, privados, pero también socio-civiles y micro
sociales. (Moscoso, 2001) Es necesario indicar que las políticas públicas
en tanto dispositivos de planeación y racionalización de las decisiones y
las acciones del gobierno en torno a asuntos públicos, deben tener
forzosamente la validación del aparato estatal, y se aplican en una
realidad social a través de leyes, reglamentaciones, marcos jurídicos y
normativos, los cuáles posteriormente se concretizan en instituciones,
planes, políticas y programas gubernamentales o de alguna organización
no gubernamental –civil o social. En este caso, la expresión de políticas
públicas, además de que implica la definición de ciertos lineamientos,
designa también las estrategias de acción y proyección que le son
imputables a los actores de la sociedad en su quehacer frente a la gran
diversidad de áreas, problemas y situaciones que enfrentan en cada
coyuntura. La validez, legalidad y legitimidad de tales definiciones y
estrategias, acciones y proyecciones, están supeditadas al sentido público
que las subyace, es decir, serán adecuados en tanto sirvan al interés
público y respondan a las demandas y necesidades de las voluntades
individuales y sociales del público ciudadano. (Bazúa y Valenti, 1995)

Por lo anteriormente explicado, las políticas públicas siempre se


constituyen como un conjunto articulado de planteamientos proyectivos
integrados, aunque para fines analíticos, así como para lograr su
desarrollo adecuado en una realidad social, se desagregan en los
siguientes rubros:
 Políticas Económicas, que hacen referencia a procesos de
producción, distribución, consumo de bienes y servicios a nivel micro,
meso y macro, así como a todo lo concerniente al financiamiento y
presupuesto del Estado.

23
 Políticas Interiores y Exteriores, hacen referencia a las formas de
gobierno, al sistema político, a la organización y seguridad interior y
exterior.
 Políticas Sociales, que hacen referencia a las orientaciones,
contextos, mecanismos, directrices y acciones relacionadas con la
cuestión social, es decir, con la idea de generación de bienestar social
entre la población.
 Políticas Culturales, que hacen referencia a las orientaciones,
contextos, mecanismos y directrices relacionadas con la cuestión
cultural, que buscan construir identidad, cohesión e inclusión social.
 Políticas Medio Ambientales, que hacen referencia a la relación entre
el ser humano y el medio ambiente, para utilizarlo, aprovecharlo y
conservarlo.

Las políticas públicas son construcciones sociales que retoman elementos


de la historia de un país, que sistematizan los intereses y demandas de
distintos sectores sociales, simbolizan y reelaboran los vínculos de control
y orden público legitimados, contienen regulaciones económicas
establecidas según un modelo de desarrollo y expresan las aspiraciones
de equidad social de los grupos humanos. También los temas objeto de
política pública señalan los asuntos o problemáticas sociales que en un
tiempo y espacio se llevan a la discusión pública, adquiriendo difusión,
controversia y poder tales que se incluyen en una agenda política y por
ende en un programa de gobierno. Además, hacen referencia al concepto
de ciudadanía, de igualdad, de valores y esfuerzos por establecer
principios basados en la equidad.

1.6.3 Las Políticas Sociales.

Las Políticas Sociales constituyen la Dimensión Social de las Políticas


Públicas, y son el puente de comunicación que desde los ámbitos
estatales, sociales y/o civiles, buscan modificar o transformar las
cuestiones sociales. De acuerdo con lo anterior, podemos entenderlas
como el proceso articulado de lineamientos, decisiones, normas, cursos
de acción y proyecciones estratégicas, explícitas, permanentes,
24
sistemáticas y conflictuadas/consensadas socialmente, definidas y
validadas desde los espacios estatales, privados, socio-civiles y micro-
sociales, tendientes a modificar o transformar positivamente el fondo y la
forma de cuestiones sociales específicas y priorizadas social y
políticamente. Todas las políticas sociales además de servir como medio
de reproducción, asistencia, hegemonía, control y cohesión social, puede
servir, de acuerdo al contexto determinado donde se desarrolle, como
medio y fin para elevar las condiciones sociales de la población, a partir,
no solamente del acceso a servicios o beneficios sociales ofertados a
sectores en desventaja social, sino a partir de medios o vehículos para el
reconocimiento y ejercicio de los derechos sociales. Las políticas sociales
por eso, tienen relación con los siguientes temas:
 Derechos Sociales
 Servicios y beneficios Sociales
 Calidad de Vida
 Atención Social
 Organización y Participación Social
 Lucha contra la Pobreza
 Gestión Social
 Construcción de Ciudadanía y Democracia
 Desarrollo sustentable
 Desarrollo local
 Capital social

Asimismo, es necesario advertir que la construcción de las políticas


sociales, más que una modalidad técnica, es un proceso histórico y
político, y por ello, adquiere un perfil específico a partir de los siguientes
aspectos:
 Situación Económica y Socio Política local e internacional
 Movilización y Participación Social, Identidad Comunitaria o local
 Tipo de Estado, Sistema político y Tipo de Gobierno
 Protagonismo de la Sociedad Civil y Tipo de Pacto Social
 Formas e identidades culturales y expresiones locales y regionales
 Formas de Negociación y Concertación entre actores sociales
 Elementos educativos y culturales de la población
25
 Cuestiones geopolíticas y diferenciación Regional
 Legislación Nacional y local

1.6.4 Políticas Sociales y Planeación Social

Es claro entonces que para la planeación social su radio de acción


profesional lo constituye el campo de las Políticas Públicas y en específico
de las Políticas Sociales, a partir de las diferentes áreas y sectores
sociales con los que se relaciona. En este caso, podemos mencionar que
la generación de Políticas Sociales requiere de mecanismos que permitan
operacionalizar un marco normativo e institucional global y general y
transformarlo en acciones y operaciones. Y es necesario que el marco
global social sea agrupado en categorías sintéticas que ayuden a
comprender sus articulaciones y su concreción en áreas, sectores de
atención prioritaria o sectores en desventaja social. Entonces, la
planeación social tienen un enfoque de políticas públicas, cuando tiene
una vinculación estratégica con la Política Social cuando se diversifica en:

Areas de la Políticas sociales:


 Salud
 Educación
 Vivienda
 Alimentación
 Seguridad Social
 Asistencia Social
 Empleo y capacitación para el trabajo
 Ecología y medio ambiente
 Cultura, Recreación y Deporte
 Protección Civil
 Servicios de Información, transporte y comunicaciones
 Servicios urbanos

Sectores sociales de Atención Prioritaria:


 Adultos mayores
26
 Adolescentes y Jóvenes
 Niños-niñas
 Mujeres
 Familias
 Personas con discapacidad
 Pueblos Indígenas
 Minorías étnicas
 Comunidades Migrantes

Sectores sociales en Desventaja Social o grupos vulnerables:


 Poblaciones Callejeras
 Sexo-servidoras/es
 Población-seropositiva–VIH
 Víctimas de Violencia Familiar y Social
 Población con problemas de adicciones
 Población afectada por siniestros

Sectores sociales caracterizados por situaciones socio-


económicas:
 Población en pobreza
 Población en situación de pobreza extrema
 Población en pobreza alimentaria

Pero también existe otro nivel de relación estratégica existente entre la


planeación social y las Políticas Sociales, que hace referencia a las
dimensiones de las Políticas Sociales, es decir a los niveles o puentes de
comunicación que se construyen para que las políticas sociales se
vinculen del nivel abstracto al operativo:

 Políticas Sociales como Ideas, conceptos o discursos. Esta


dimensión involucra al conjunto de ideas, conceptos, discursos,
argumentos y proyecciones sobre lo que es (presente) y se propone
puede ser el tema de la política social en específico (futuro). El
27
discurso nos permite tener argumentos, concepciones, principios,
visiones, definiciones o enfoques sobre lo social y/o sobre el tema,
sector y área social específica.
 Políticas sociales como marco jurídico. Toda política social
siempre se transforma leyes, normas, marcos jurídicos o
reglamentaciones que sirven de apoyo a lo social. Desde este punto
de vista el marco jurídico forma parte de una política social como el
instrumento de legalidad que enmarca, norma y delimita derechos y
obligaciones para los actores de la política social, además de que
define las formas y los medios para asegurar el cumplimiento de los
lineamientos y de sus horizontes proyectivos.
 Políticas Sociales como nivel de legitimidad. La legitimidad es el
nivel de reconocimiento de parte de los actores sociales con
respecto a las ideas y legalidades de la política social y no solo se
relaciona con consensos, sino con la diferenciación e incluso
confrontación para llegar a acuerdos o pacto sociales. La legitimidad
es un mecanismo de participación y organización cuando los
acuerdos son excluyentes y la idea de legitimidad está en el mismo
nivel de la legalidad, al ser eje equilibrador del marco jurídico con
respecto su propio reconocimiento por la población.
 Políticas sociales como marco institucional. La dimensión de la
institucionalidad tiene relación con la creación, funcionamiento,
administración y operación de redes de organismos o instituciones
definidas para actuar en los diferentes ámbitos de lo social. Desde
esta perspectiva, la política social requiere de espacios
institucionales que articulen el discurso, el marco jurídico, los
objetivos y metas que busca un sistema de política social, con
respecto los grupos de la sociedad.
 Políticas sociales como marco programático Esta dimensión
busca traducir ideas, discursos, argumentos, procesos y propuestas,
para convertirlos en planes, programas y proyectos públicos que
vinculen a la institucionalidad social con los sectores de una
sociedad. En este caso, la esencia de mirar a la política social como
un conjunto de formulaciones, planteamientos e instrumentos
operativos, es lograr que los sectores sociales tengan acceso,
28
atención o beneficios a una diversidad de medios y/o fines para
lograr el bienestar social.
 Políticas sociales como marco operativo. Esta dimensión es la
operativa de la política social y se relaciona con procedimientos,
métodos, técnicas e instrumentos que hacen viable que los planes,
programas o proyectos sociales se concreticen en la realidad social.
Lo operativo siempre se transforma en un puente para que las ideas
de política social se conviertan en acciones, prácticas, servicios o
beneficios sociales.

Las anteriores dimensiones permiten también entender a las políticas


sociales como lineamientos complejos, históricos y en constante proceso
de transformación, y por ello su vínculo con los procesos de planeación
social se sostiene con la idea tradicional, de que este solo interviene en el
nivel de operación o cuanto más, llega al nivel programático, y ahora
podemos ver en la realidad institucional la inserción y el aporte cada vez
mayor de profesionales de la planeación social en las dimensiones de
definición y decisión, aun cuando es importante reconocer que todavía
falta un trecho enorme por recorrer en este aspecto. Es importante
reconocer que la relación entre la planeación social y el campo de las
políticas sociales se da a nivel de una participación mayoritaria en las
dimensiones operativas y programáticas, pero es importante considerar la
participación en otras dimensiones que se ubican en la toma de
decisiones, en el marco institucional, en la legitimidad, legalidad y en las
ideas, conceptos y discursos.

29
30
Capítulo 2.-
Aproximaciones metodológicas a la
Planeación Social

2.1 Ciclo de Vida de la Planeación Social

Cuando hacemos referencia a la Planeación Social es necesario ubicar


una primer dimensión teórico-conceptual, misma que presentamos en el
anterior capítulo, pero por otra parte, es importante mencionar que se
requiere también e una dimensión Metodológica, es decir, de una serie
de enfoques, etapas, procedimientos métodos, técnicas e instrumento que
nos permiten conocer el “COMO HACER” planeación social, por eso uno
de los aspectos fundamentales de la parte metodológica es el CICLO DE
VIDA DE LA PLANEACION SOCIAL, integrado por distintas etapas que
conforman un esquema flexible y adaptativo cuyo tránsito nos permite
conocer-actuar-evaluar una porción, tema, problema o fenómeno de la
realidad social. Esto es de enorme importancia ya que este ciclo de
ninguna manera debe verse como una serie de pasos predeterminados o
como una receta mecánica, inflexible.

Cuando hacemos referencia a la Planeación Social es necesario ubicar


una primer dimensión teórico-conceptual, misma que presentamos en el
anterior capítulo, pero por otra parte, es importante mencionar que se
requiere también de una dimensión Metodológica, es decir, de una serie
de enfoques, etapas, procedimientos métodos, técnicas e instrumento que
nos permiten conocer el “COMO HACER” planeación social, por eso uno
de los aspectos fundamentales de la parte metodológica es el CICLO DE
VIDA DE LA PLANEACION SOCIAL, integrado por distintas etapas que
conforman un esquema flexible y adaptativo cuyo tránsito nos permite
conocer-actuar-evaluar una porción, tema, problema o fenómeno de la
realidad social. Esto es de enorme importancia ya que este ciclo de
ninguna manera debe verse como una serie de pasos predeterminados o
31
como una receta mecánica, inflexible.
Según el Manual de capacitación sobre métodos de trabajo para
organizaciones comunitarias (Sánchez, 2011), el proceso de la planeación
se divide básicamente en tres grandes momentos:
 Diagnóstico: Se realiza en la situación inicial, lo que significa el punto
de partida del proceso
 Pronóstico: Se realiza y desarrolla a través del pronóstico a qué
situación futura se quiere llegar
 Imagen Objetiva: Representa la situación deseada
En Ciclo de Vida del Proyecto y Organización (), las fases son:
 Inicio
 Planificación
 Ejecución
 Cierre de proyecto
“La transición de una fase a otra dentro del ciclo de vida de un proyecto
generalmente implica y, por lo general, está definida por alguna forma de
transferencia técnica. Generalmente, los productos entregables de una
fase se revisan para verificar si están completos, si son exactos y se
aprueban antes de iniciar el trabajo de la siguiente fase. […] Esta práctica
de superponer fases, que normalmente se realiza de forma secuencial, es
un ejemplo de la aplicación de la técnica de compresión del cronograma
denominada ejecución rápida.”()

Para nosotros, las etapas del ciclo de vida de la Planeación Social,


son las siguientes:
1.- Construcción de la agenda social
2.- Inserción, vinculación y coordinación social
3.- Investigación Social
4.- Elaboración de diagnósticos sociales
5.- Diseño o Formulación de planes, programas y proyectos sociales
6.- Gestión de planes, programas y proyectos sociales
7.- Desarrollo de planes, programas y proyectos sociales
8.- Evaluación de planes, programas y proyectos sociales
9.- Sistematización de experiencias
10.- Comunicación Social de las mismas.
32
Es importante indicar que cada etapa orientada para desarrollar procesos
vinculados a la Planeación Social estará dada predominantemente por la
situación, el tiempo, el lugar y el contexto donde se realizan los mismos
procesos de praxis social y por ello, es necesario referir que en términos
absolutos dentro del ciclo de vida del Planeación Social no existe una
propuesta teórico-metodológica única que pueda ser generalizable y que
por ello pueda dar respuesta a todas las situaciones, problemas o
necesidades de todos los lugares y en todos los tiempos.

Además este ciclo de vida constituye una metodología-base que debe


adaptarse a la realidad social donde se pretendan desarrollar los procesos
de planeación social, siempre entendiendo las fases como dimensiones
histórico-sociales que en ocasiones pueden ser transformadas, ser
simultáneas, invertirse en su orden o incluso dejar de realizarse, ya que la
misma dinámica social permite que varíe su ordenamiento. En este caso,
la implementación de este esquema de Planeación Social tiene como
requisito ubicar el espacio y el tiempo determinado, además de conocer
el contexto socio-político donde se desarrollarán las acciones sociales,
para innovar o transformar de acuerdo a las características,
requerimientos y necesidades de los espacios sociales donde se lleva a
cabo la mencionada planeación social, por ello es preciso profundizar
sobre las fases o momentos del ciclo de vida.

2.1.1 Construcción de la Agenda Social

La construcción de la agenda social tiene que ver con el primer momento


en el ciclo de vida cuya característica es el posicionamiento, definición o
reconocimiento de una serie de temas o tópicos de lo social, que
posteriormente serán retomados para convertirlos en planes, programas,
proyectos, modelos o iniciativas sociales. La construcción de la agenda
implica definir un conjunto de situaciones, necesidades, temas o
problemas susceptibles de transformar o modificar para beneficio social,
cuestión que es crucial ya que permite tener elementos para desarrollar
en el futuro diversas iniciativas sociales.
33
La construcción de la agenda social siempre implica tomar en cuenta a
todos los actores vinculados a esos temas para introducirlos a la discusión
y a la toma de decisiones y casi siempre se integra por los tópicos de
mayor trascendencia social y aquellos visualizados por el aparato del
Estado y sus diferentes poderes (gobiernos, poder legislativo y judicial en
sus diferentes niveles), la opinión pública, la ciudadanía, el mercado, la
sociedad civil y los entornos doméstico-familiares.

2.1.2 Inserción, vinculación y coordinación social.

La inserción social es fundamental porque es el primer contacto con un


espacio social definido para actuar en él, que tiene como objetico
visualizar la naturaleza y las caracterizaciones de los espacios sociales en
lo que va a desarrollar su praxis social para insertarse en ellos, delimitando
social el espacio donde se intentan realizar o desarrollar proyectos
sociales. Esta dimensión se traduce en un contacto social de primer
orden entre el profesional y los sujetos de un entorno social, ya que
cuando se busca desarrollar procesos de trabajo social es necesario
identificar de forma y de fondo los espacios donde se van a implementar
dichas iniciativas.

La vinculación social se traduce en la posibilidad de crear espacios de


encuentro o puentes de comunicación entre actores, agentes,
instituciones y organizaciones de un espacio social, identificando este
proceso como un punto de encuentro de segundo orden entre los actores
insertos en el proceso de planeación. Este punto de encuentro de segundo
orden es el primer contacto con los actores sociales del espacio social
donde se pretende incidir, por eso representa un punto estratégico para
las sucesivas acciones y actividades propuestas de planeación social, ya
que es fundamental para lograr un adecuado desarrollo de acciones
futuras.

Por su parte, la coordinación social implica una etapa que es la


consolidación de espacios de diálogo entre los actores y agentes inmersos

34
en la planeación social. Puede considerarse como un punto de encuentro
de tercer orden, en el que el profesional busca entender las racionalidades
y las subjetividades de los actores y agentes insertos en el proceso
promocional, y trata de transformarse en parte integrante del entorno
social donde se pretenden generar y desarrollar procesos de planeación.
Esta fase busca construir y concretizar la búsqueda de consensos para la
toma de decisiones. Por ello, se puede decir que la coordinación y
organización es un punto de encuentro y dialogo de cuarto orden, cuya
finalidad es generar el ambiente social y grupal para diseñar iniciativas o
propuestas sociales.

Es importante mencionar que en ocasiones los procesos integrantes de


esta fase del ciclo de vida se pueden obviar cuando van implícitos en otras
etapas de la praxis social o cuando ya se tiene identificado o se tiene una
vinculación o coordinación previa con un espacio social, entonces se
pueden desarrollar otras fases del ciclo dejando de lado las mencionadas
sub-fases.

2.1.3 Investigación Social.

La investigación social es un proceso sistemático, ordenado y reflexivo


que tiene como objetivo la construcción de conocimientos sobre algún
tema, problema, necesidad o demanda social. Dicho proceso se basa en
procedimientos científicos, ordenados y controlados, además de una serie
de procedimientos y metodologías para obtener datos, registrarlos y
comprobarlos. En esta etapa del ciclo de vida se busca llegar a un
conocimiento de la realidad social de un espacio determinado, a través de
un proceso de indagación participativo, reflexivo, sistemático y formal,
siendo el objetivo último de este ejercicio investigativo conformar un
estudio analítico para conocer características generales, procesos,
condiciones y tendencias de un espacio social determinado.

La investigación social es el basamento de la praxis social ya que siempre


es una indagación o búsqueda de conocimientos que permiten enriquecer
el acervo del Trabajo Social y sus temas posicionados en la agenda social,
pero también nos fundamenta la toma de decisiones y principalmente la
35
realización de acciones sociales, y es válida para las situaciones o casos
particulares o micros, así como para realizar inferencias de validez amplia,
macro o general.

La investigación social es cimiento de la planeación social, ya que implica


una exploración sistemática a partir de un marco teórico en el que se
vinculan los problemas o necesidades sociales utilizando metodologías
científicas y sus resultados siempre se plasman en documentos que tienen
por finalidad dar a conocer a un público más amplio, descubrimientos
sobre hechos, necesidades, problemas o fenómenos de un determinado
ámbito de la realidad.

2.1.4 Elaboración de Diagnósticos Sociales

Es una etapa del ciclo de vida que se caracteriza por ser un momento de
ordenamiento, interpretación y jerarquización de la información generada
a partir de un proceso de investigación social. Es importante mencionar
que el proceso de investigación y la construcción de un diagnóstico son
fases íntimamente relacionadas aunque significan dos procesos
diferenciados claramente; por una parte, la investigación tiene como
objetivo construir conocimiento y generar información de importancia para
un proceso de planeación social, y por su parte, el diagnóstico retoma ese
conocimiento e información producida por la investigación, para ordenarla,
interpretarla y jerarquizarla con mira a la toma de decisiones en el marco
de los programas y proyectos sociales.

La construcción de un diagnóstico social siempre es un proceso para


comprender, analizar e interpretar hechos de un determinado proceso o
situación de lo social, a través de juicios interpretativos sobre una
problemática o situación dada, y establece como punto focal la
jerarquización de las necesidades según su naturaleza y magnitud, desde
el punto de vista de los profesionales y de los actores sociales vinculados
a tal temática. Asimismo, todo diagnóstico social siempre busca incidir a
la toma de decisiones en el ámbito de la praxis social y por ello
proporciona un conocimiento de la realidad concreta que permite
identificar carencias, necesidades, problemas, aspiraciones, pero

36
sobretodo la magnitud de las mismas, así como su priorización con
respecto a las miradas de los actores vinculados a ellas.

La finalidad de un diagnóstico es aportar los elementos suficientes y


necesarios para la explicación de la realidad social de cara a la acción y
transformación de los problemas y necesidades que presentan individuos,
grupos y comunidades, porque a partir de él se identifica no solamente la
naturaleza, causas y efectos de las problemáticas y necesidades que se
generan en él, sino también los recursos existentes y faltantes para darles
solución. Es ese sentido, todo diagnostico social siempre tiene dos
finalidades centrales: servir de fundamento para la planeación de
actividades y tareas; y fundamentar las estrategias a utilizar en la
ejecución de las mismas.

Pero también es relevante mencionar, que de acuerdo a su alcance, los


diagnósticos sociales con un nivel mayor de elaboración nos permiten
identificar o proyectar tendencias a futuro de las situaciones seleccionadas
y priorizadas, construyendo una visión de estrategia que implica una
mirada de largo alcance delimitada por cursos de acción a corto y mediano
plazo, pero sobretodo con el diseño de lineamientos para valorar las
diversas opciones que se construyen para construir distintos escenarios y
proyecciones ideales, viables y complejas.

2.1.5 Formulación: formulación de planes, programas, proyectos


sociales, “ppp”.

La planeación social es una etapa del ciclo de vida en la que se decide


por anticipado lo que se va a realizar, registrando por escrito los aspectos
que se piensan desarrollar y las acciones, actividades, mecanismos,
espacios y tiempos para lograrlo. Por ello la formulación o la planeación
social se considera un proceso educativo, participativo y democrático de
toma de decisiones, de definición de estrategias y de realización de
acciones dirigidas a reorientar procesos orientados al desarrollo social. En
un ciclo de vida del Trabajo Social siempre es indispensable planear las
acciones sociales que se van a desarrollar a partir de interrogantes y
respuestas que conduzcan a identificar y dar capacidad de solución a
37
problemas que de manera colectiva han sido detectados y priorizados
como necesidades sentidas o estratégicas por la misma colectividad.

La planeación social se concretiza en explicitar propuestas de largo,


mediano y corto alcance que buscan solucionar problemas, demandas o
intereses, determinando objetivos y metas y articulando procedimientos,
iniciativas, tiempos, espacios y recursos. Asimismo, es importante
mencionar que la planeación siempre debe responder a situaciones
concretas, vividas, sentidas e identificadas por los mismos participantes-
beneficiarios de lo social, porque no tiene que ver solamente con
esfuerzos institucionales para hacer discursos, escritos o papeles con una
serie de pasos a seguir, sino que la formulación se construye a partir de
compromisos vitales, miradas de los participantes-beneficiarios sociales,
articulación de actores, metas en común, diferencias y pluriculturalidades,
diversidad de opiniones y acciones, proyecciones del futuro, acciones del
presente, reinterpretaciones del pasado y formas de lucha colectiva.

Un elemento de enorme relevancia es que la planeación social siempre se


concretiza con la formulación de planes, programas y proyectos sociales,
“PPP” que términos generales consiste en redactar propuestas que
buscan dar capacidad de resolución a un problema o llenar un vacío,
invirtiendo recursos, tiene, de manera general, que desarrollar una serie
de pasos previos antes de plasmarlo en uno de los tantos formularios o
guías que las distintas instituciones culturales definen. Es importante
mencionar que los “PPP” siempre deben responder a situaciones
concretas, vividas, sentidas e identificadas por los mismos participantes,
porque no son simplemente escritos o papeles con una serie de pasos a
seguir, sino que se construyen a partir de compromisos vitales, metas en
común, diferencias y pluriculturalidades, proyecciones del futuro, acciones
del presente, reinterpretaciones del pasado y formas de lucha colectiva.

Construir procesos de planeación social implica significa imaginar


procesos, enfocar miradas de largo plazo, establecer alianzas con actores
y definir lineamientos sociales, participativos e incluyentes, encaminados
a la resolución y transformación positiva de problemáticas y necesidades

38
sentidas y estratégicas, y para ello se requiere tomar en consideración
elementos de la planeación social que son fundamentales para que la
acción no se quede en actividades desordenadas o caóticas que
finalmente perjudican socialmente aunque sean hechas con las mejores
intenciones.

2.1.6 Gestión de Planes, Programas y Proyectos, ”ppp”

La gestión de “ppp” es el conjunto de pasos a seguir y de las acciones


necesarias para concretar los objetivos definidos en un proceso vinculado
a la planeación social, es decir, la gestión desde una perspectiva de
Trabajo Social sugiere movilizar y articular necesidades, prioridades,
ideas, contactos, recursos y apoyos necesarios para la concreción de
“ppp”. La gestión es el conjunto de pasos a seguir y de las acciones
necesarias para concretar los objetivos definidos en un proceso de
planeación social, y se traduce en el proceso coherente, ordenado,
sistemático e intencionado dirigido a realizar y a obtener todos los
requerimientos indispensables para el logro de los objetivos propuestos
en la etapa de planeación cultural. En este caso es importante realizar un
Flujo de Gestión, elemento técnico se integra con los siguientes aspectos:
 Identificación rigurosa de recursos y Apoyos requeridos
 Identificación y Contacto con Actores Sociales
 Identificación y Contacto con instituciones de apoyo
 Definición de estrategias de gestión
 Confirmación de Compromisos
 Obtención de Recursos y Apoyos
 Puesta en marcha del proyecto
Asimismo, para gestionar “PPP” es necesario tomar en cuenta la totalidad
de los actores insertos en los mismos procesos, entre podemos ubicar los
siguientes:
 Estado: Gobierno Federal, Gobiernos Estatales o Gobiernos
Locales , poderes legislativas o judiciales nacionales o locales.
 Organizaciones Socio-Civiles y/o Organismos No
Gubernamentales.
 Espacios académicos y de investigación.
39
 Asociaciones Políticas y Sociales
 Fundaciones Nacionales e Internacionales.
 Agencias de Cooperación Internacional.
 Iniciativas Privadas.

Todo proceso de gestión de “ppp” refiere a todas aquellas acciones


concretas que permitan obtener lo necesario para llevar a cabo la política
social, así como para articular iniciativas interinstitucionales y
participativas para la gestión de recursos para el desarrollo de planes y
proyectos sociales.

La importancia de obtener lo necesario para desarrollar “ppp” no sólo


permite vislumbrar temporalmente las acciones a seguir para el
cumplimiento de los objetivos y metas trazados, también nos auxilia en
delimitar las necesidades materiales, financieras, humanas e
institucionales que al obtenerse hacen de la planeación social una
estrategia de acción completamente viable, por lo que el conseguir cada
uno de estos elementos requiere de la suma de voluntades para darle
posibilidad de aterrizaje a un proceso de planeación social.

2.1.7 Desarrollo de planes, programas, proyectos y modelos

En esta etapa del ciclo de vida se desarrollan las iniciativas, acciones y


actividades indispensables para lograr los objetivos y las metas
propuestas en un proceso de planeación. El desarrollo de “ppp” tiene
como principal función poner en marcha las estrategias acordadas para
dar capacidad de respuesta a las necesidades y problemas expresados
en el diseño de los “ppp”.

Este momento es relevante porque permite poner atención a las iniciativas


y acciones emprendidas para que correspondan a los objetivos y metas
establecidos previamente, todo ello con una serie de métodos, técnicas y
conocimientos para la praxis social, y siempre tomando en cuenta el
contexto, las condiciones sociales y las dinámicas y relaciones entre los
actores sociales. Por ello, al hablar de desarrollo de “ppp” es necesario
40
tomar en cuenta al menos cuatro rubros que nos permiten un aterrizaje
adecuado de nuestras estrategias, métodos acciones y recursos; LA
IMPLEMENTACIÓN, EJECUCIÓN, ADMINISTRACIÓN Y
SUPERVISIÓN DE LOS “PPP”.

La implementación es un momento en el que se incluye la puesta en


marcha de las acciones sociales, podemos mencionar que es el impulso
inicial que permite que los “ppp” se fortalezcan, sean conocidos y
empiecen con impacto social y mediático en los ámbitos políticos y
sociales. Toda implementación es un proceso muy corto y tiene relación
con el posicionamiento que se integra con la definición de acciones
iniciales y con la difusión y divulgación de la realización de las acciones
determinadas. Asimismo como inicio de las estrategias, iniciativas o
actividades, se deben priorizar acciones de alto impacto y acciones
interinstitucionales que permitan identificar resultados del punto de
arranque y con ello los actores sociales vinculados al proceso de Trabajo
Social tengan conocimiento y participación en los “ppp” a desarrollar.

La Ejecución de “ppp” es un proceso que tiene relación con el desarrollo


general de las acciones planeadas, es decir, con el desarrollo pleno de
iniciativas planeadas y registradas en los “ppp” hasta su finalización o
conclusión. Para ello es indispensable determinar precisamente etapas
de la ejecución: acciones, espacios y tiempos, definir estrategias de
control programático, definir estrategias de coordinación interinstitucional,
definir estrategias de supervisión interinstitucional, definir mecanismos de
monitoreo, identificar fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas,
definir plan de contingencias: técnicas, económicas, de capacitación, de
infraestructura, y materiales así como insertar nuevos lineamientos o
acciones para mejorar o perfeccionar el proceso social desarrollado.

Todo proceso de ejecución de “ppp” implica concretizar acciones, generar


o acceder a servicios sociales, dirigir y ampliar o beneficios sociales hacia
nuestra población objetivo, y por ello es el punto estratégico donde lo
investigado, planeado y gestionado, se convierte en acciones o

41
actividades que impactan socialmente el marco de vida socio-comunitaria
y familiar de la población objetivo.

Asimismo la ejecución siempre debe tomar en cuenta la relación horizontal


y dialógica de los profesionales vinculados a un proceso de praxis social
con los actores y sujetos participantes en los mismos, y así como
determinar establecimiento de espacios formales de representación y
articulación social y política para el análisis y la discusión sobre las
situaciones y su priorización e instalar los diferentes órganos y sistemas
de seguimiento.

La Administración se define como la disciplina que permite crear, diseñar,


mantener y coordinar esquemas de funcionamiento para que los “ppp”
logren los objetivos y metas seleccionadas inicialmente, por eso es un
momento del ciclo de vida del Trabajo Social que por medio de una
planeación adecuada de los recursos humanos, materiales, y técnicos,
pretende el logro óptimo de los objetivos mediante el menor esfuerzo
logrando una mayor utilidad. La Administración de “ ppp” es un proceso
que persigue la satisfacción de los objetivos institucionales por medio de
un mecanismo de operación y a través de un proceso administrativo
definido desde los diferentes espacios donde se desarrollan procesos de
Trabajo Social; instituciones, organizaciones,colectivos, fundaciones,
corporaciones, entre otras.(Menéndez, 2006)

Finalmente, en este momento del desarrollo de “ppp”, es necesario tomar


en cuenta también a la Supervisión, que es un proceso social, educativo
y metodológico que tiene como objetivo el poder dar seguimiento y
acompañamiento, a las acciones, actividades, servicios o beneficios que
brindan los “PPP” con la finalidad de que estos se desarrollen
adecuadamente en el marco de los principios de eficiencia y eficacia Por
ello supone ordenar y facilitar el desarrollo de los PPP en el marco de sus
propias estructuras institucionales, organizativas, grupales o comunitarias.
La supervisión también sirve como dispositivo de monitoreo, es decir de
seguimiento técnico para identificar fallas en el desarrollo y solucionarlos
en el mismo proceso. Asimismo, la supervisión siempre implica el poder
42
diseñar formas de articulación, coordinación, integración y evaluación al
interior de los espacios institucionales u organizativos desde donde se
generan ppp.

2.1.8 Evaluación social

Dentro del ciclo de vida la evaluación es una fase de suma importancia


ya que es un proceso de discusión colectiva en el que se pretende
contrastar y analizar lo planeado y lo realizado. Con la evaluación social
se intentan construir respuestas sobre los “ppp” en desarrollo o
desarrollados, a través de discusiones y reflexiones colectivas, al menos
en el marco de las siguientes interrogantes: ¿ Qué se planeó? ¿Qué se
realizó? ¿Cómo se planeó lo realizado? ¿ Cómo se realizó lo planeado?
¿Qué se logró con lo planeado?

Todo proceso de evaluación conlleva necesariamente aspectos como el


comprobar resultados o productos, identificar obstáculos y facilidades en
el desarrollo de “ppp”, proponer rectificaciones en futuros procesos de
planeación social. Por eso la evaluación consiste en contrastar en qué
medida la acción del Estado o de la Institución produjo los cambios
planteados como metas, así también la calidad de éstos y el impacto social
generado a partir de ello. En términos generales, se puede entender por
evaluación la actividad de comparar un determinado proceso o unos
resultados específicos con propósitos u objetivos previamente
establecidos o planteados. Evaluar significa entonces confrontar la validez
y los resultados o impactos de un determinado proceso social.

La evaluación no es un proceso que requiera ser ejercido estrictamente al


final de la Política Social, sin embargo poco se conoce sobre su
importancia y ventajas. Cuando la evaluación se hace al final de este
proceso se deben de cruzar objetivamente las acciones realizadas con
sus logros contra las metas establecidas una vez tomada la decisión de
aplicarse; con estricto régimen es importante incluir todas aquellas
situaciones que se involucraron en el proceso de la Política Social

43
Generalmente la evaluación se reduce (es un hecho que predominan) a
los análisis económicos mediante los cuales el porcentaje de inversión
suele ser el único indicador del éxito o fracaso de una Política Social,
ignorando a los actores principales quienes generalmente son los que
tienen la perspectiva completa del proceso.
La evaluación tiene una amplitud importante, por lo que en la idea de
mostrarla, algunos autores la han desglosado en las diferentes etapas,
tipos y características. Para hacer de esta etapa una herramienta
práctica al lector, presento un cuadro que contempla el tipo de
evaluaciones que existen, así como las características de cada una de
ellas y así algunas fórmulas que habitualmente ayudan en el momento de
su aplicación.

2.1.9 Sistematización

La sistematización es una etapa donde se describe, ordena y reflexiona


analíticamente sobre el desarrollo, resultados y efectos de una experiencia
de promoción cultural. En este caso, la sistematización es entendida como
un medio que permite reflexionar colectiva y horizontalmente sobre
elementos, procesos, resultados e impactos de la experiencia de praxis
social, y como una forma educativa para viabilizar, mejorar y perfeccionar
futuros procesos orientados al Trabajo Social.

Pero, además de que la sistematización es un ejercicio de ordenamiento,


reconstrucción, análisis, categorización y conceptualización de una
experiencia concreta de praxis social que sirve de base o como marco de
acción y perfeccionamiento a otras experiencias sociales de otros
entornos realizadas en otros tiempos, es a la vez un ejercicio permanente
para la construcción de conocimientos y saberes. En tal sentido, la
sistematización como modalidad educativa es un medio que guía los
procesos de promoción de la cultura en torno a los siguientes propósitos:

 Ser base para un mejor conocimiento de la metodología y/o del


quehacer promocional y a la apropiación colectiva por parte de los
participantes.

44
 Contribuir al establecimiento de los consensos básicos entre los
miembros de un equipo de profesionales del Trabajo Social o de una
organización que favorezca su cohesión o su unidad de acción.
 Instrumentar aspectos constitutivos de los procesos de autoevaluación
y de autodiagnóstico.
 Ser instrumento para un intercambio crítico y analítico de experiencias
promocionales
 Favorecer una mayor capacidad para crear y manejar herramientas
metodológicas para la comprensión y reconstrucción articulada de la
realidad social.
 Ser base para la creación de teoría sobre la práctica realizada.
 Ser base para la preparación pertinente de reportes a agentes externos
al trabajo promocional. (Cadena, 1987)

El proceso de sistematización se compone de diversas fases, entre ellas


sobresalen las siguientes:
 Caracterización de las necesidades y/ interrogantes a cuya resolución
debe contribuir la sistematización
 Especificación de los ámbitos y aspectos del trabajo promocional que
serán objeto de la sistematización
 Proyección o prefiguración de los productos o resultados.
 Construcción y/o adopción de los esquemas metodológicos,
categorías e indicadores que permitirán la reconstrucción del ámbito y
del proceso especificado.
 Especificación de la información relevante en los ámbitos y procesos
que puedan contribuir a dar respuesta a la necesidad-interrogante
planteada.
 Elaboración de los instrumentos para la identificación y registro de la
información significativa, preferentemente sobre la base del perfil de los
productos o resultados.
 Obtención, registro y ordenación primaria de la información a nivel de
la descripción de hechos y actividades.
 Construcción colectiva de los productos o resultados buscados a nivel
de explicación e inteligibilidad de los hechos y actividades, mediante el
análisis, articulación y reflexión de las prácticas realizadas.
45
 Socialización de los productos o resultados para su retroalimentación
por los sujetos que participaron en su elaboración.
 Instrumentación de resultados para su adopción en prácticas futuras.
( Cadena, 1987)

A manera de síntesis, se puede afirmar que todo proceso de


sistematización debe dar respuesta al menos a las siguientes
interrogantes, en el marco de una experiencia social:
 ¿Qué se hizo?
 ¿Cómo se hizo?
 ¿Dónde se hizo?
 ¿Porqué se hizo?
 ¿Para qué se hizo?
 ¿Qué se logró con lo hecho?
 ¿ Cuál fue la temática esencial de la experiencia?

2.1.10 Comunicación de experiencias de Planeación Social

Esta etapa se busca hacer del conocimiento público las experiencias de


planeación social sistematizadas, así como tender puentes de
comunicación entre sectores, espacios e instituciones involucrados al
mismo. Esta fase tiene como objetivo dar a conocer avances y resultados
del proceso de desarrollo de “ppp”, y se puede desarrollar en diferentes
momentos del ciclo de vida de la Planeación Social, siempre tomando en
cuenta que pueden considerarse las dos variantes: la difusión y la
divulgación social.

Difusión: La difusión es un proceso de comunicación horizontal sobre las


iniciativas desarrolladas en algún momento del ciclo de vida de la
Planeación Social. Esta comunicación generalmente se establece entre
los participantes y otros sectores cercanos al entorno donde se desarrolla
la planeación social, o entre personas con conocimiento de la realidad
cultural de ese contexto. Por eso la difusión por naturaleza es más
especializada y se extiende hacia todos aquellos sujetos participantes o
cercanos al proceso de planeación social.
46
Divulgación: La divulgación consiste en generar procesos de
comunicación sobre el desarrollo de actividades y aspectos generados por
“ppp”, pero de manera específica se establece entre los participantes y
otros sectores ajenos a la realidad social donde se desarrollan los
procesos de Planeación Social, es decir, la divulgación va dirigida actores
u organizaciones o instituciones sin conocimiento pleno de las
características del contexto donde se desarrolla la planeación social. En
ese sentido la divulgación por naturaleza es más general y panorámica,
extendiéndose hacia todos aquellos sujetos no participantes, lejanos o
ajenos al entorno inmediato de la acción social.

2.2 Tipos de Planeación Social.

Existen numerosas propuestas para tipificar a la Planeación Social, sin


embargo aunque entre autores estas sean diferentes, en realidad
consideramos que podemos delimitarlas a los tipos de planeación por
quienes son quien realizan el proceso de planeación social y responde a
la interrogante: ¿Qué actores o quiénes hacen el proceso de planeación
social?; hay una segunda tipología definida por el espacio o Lugar desde
donde se realiza la planeación social, que responde a la pregunta; ¿Desde
dónde o desde que espacios se hace la Planeación Social?; y la última
tipología que abordaremos es a partir de sus finalidades o de las rutas
para hacer planeación social, esta propuesta busca dar respuesta a la
siguiente interrogante: ¿Cómo se hace la Planeación Social?-

1er Tipología ¿Quiénes hacen la Planeación? Actores

Planeación Técnica.- Se refiere al tipo de Planeación en el cuál los


actores principales son los Técnicos o el Profesional Técnico que
provenga de una Institución u Organización. El equipo técnico y
profesional son los que guían el proceso de Planeación y los participantes
o beneficiarios juegan un papel secundario. Se ve a la Planeación como
un Medio para lograr fines y objetivos y como un instrumento neutralizado,
controlado y con una idea verticalista.

47
Planeación Participativa.- Es la Planeación en dónde se involucran por
igual el equipo técnico y los beneficiarios de los procesos. Implica un
reconocimiento mutuo de los actores. Hay una relación equilibrada en la
toma de decisiones. Destaca la organización y la colectividad, será un
proceso más flexible. La Planeación se entiende como medio-fin, es un
proceso que generará participación.

Autoplaneación.- Es el tipo de Planeación en el cual los participantes son


los que definen el proceso de Planeación y el equipo técnico profesional
es un complemento. Los participantes se convierten en actores sociales y
polít
icos.

2a Tipología ¿Desde dónde se hace la Planeación? Lugar o espacio

Planeación Nacional.- Se refiere a la Planeación en la cual la


determinación de acciones, procedimientos y proyecciones se desarrollan
en la totalidad del territorio Nacional. Es una Planeación global o
globalizante. Ejemplo el Plan Nacional De Desarrollo.

Planeación Regional.- Se refiere a la Planeación que tomara como


espacio sólo una región específica. Una región tomando en cuenta su
delimitación geográfica y su identidad. Hace referencia a la región en
cuanto a unidad de superficie territorial con características o propiedades
comunes.

Planeación Sectorial.- Proceso de planeación determinado a sectores


específicos de lo social. Delimitado a partir de determinados sectores y
áreas más importantes de los social. Por ejemplo niños de la calle, madres
solteras, etc.

Planeación Local.- Es la planeación que se concentra en un espacio


local determinado, en un espacio territorial y relacional (lo que se

48
desarrolla en sobre ese territorio). Hace referencia a la acción programada
a nivel municipio o ayuntamiento.

3a Tipología ¿Cómo se hace Planeación? Finalidad

Planeación Situacional.- Es la Planeación a corto plazo que enfrenta


situaciones que se presentan en la realidad social. Es un Plan emergente
por que busca dar respuestas rápidas a problemas específicos.

Planeación Coyuntural.- Es la planeación orientada al mediano plazo,


no está orientada a enfrentar situaciones sino a enfrentar coyunturas que
son el cruce de situaciones problemáticas y necesidades que se
construyeron al mediano plazo. Tiene la capacidad de responder a varias
necesidades y problemáticas.

Planeación Estratégica.- Su núcleo fundante tiene relación con cuatro


cuestiones centrales:
1. Es la Planeación orientada a largo plazo, pero operada a partir del
corto plazo es decir visualizar las acciones del presente.
2. Es la Planeación vinculada a diferentes escenarios u objetivos,
además hay un control de los escenarios.
3. Debe de haber innovación para trasformar o modificar los
procedimientos de acuerdo al medio.
4. Busca impactar situaciones, coyunturas y estructuras.

2.3 Instrumentos de la Planeación: Plan, programa y proyecto

Un PLAN engloba programas y proyectos, pero no está compuesto solo


por un conjunto de programas y proyectos. Y esto por una razón
fundamental: porque su formulación se deriva de propósitos y objetivos
más amplios que la suma de programas y proyectos. En otras palabras,
el plan es el parámetro técnico- político dentro del cual se enmarcan los
programas y proyectos. Un plan está constituido por un conjunto de
programas y sus criterios para su elaboración son:
 Agenda

49
 Diagnóstico
 Areas de Acción
 Políticas
 Marco Legal
 Propósitos
 Finalidades
 Líneas de acción
 Marco Estratégico
 Marco Institucional
 Plan de contingencias

Un PROGRAMA operacionaliza un plan mediante la realización de


acciones orientadas a alcanzar las metas y objetivos propuestos dentro
de un periodo determinado. Está constituido por una constelación o
conjunto de proyectos. Sus criterios para la elaboración son las siguientes:
 Antecedentes
 Justificación
 Prioridades de intervención
 Contexto
 Objetivos
 Metas
 Marco Estratégico
 Marco operativo
 Marco institucional
 Supervisión /seguimiento
 Evaluación
 Sistematización
 Recursos

Un PROYECTO hace referencia a un conjunto de actividades concretas,


interrelacionadas y coordinadas entre sí, que se realizan con el fin de
producir determinados bienes y servicios capaces de satisfacer
necesidades o resolver problemas. Los criterios para su elaboración son
los siguientes;
50
 Tema o problema
 Descripción Gral.
 Justificación
 Objetivos
 Metas
 Límites
 Metodología
 Evaluación
 Recursos
 Plan de gestión de recursos
 Calendarización

La actividad es el medio de intervención sobre la realidad, mediante la


realización secuencial e integrada de diversas acciones necesarias para
alcanzar las metas y objetivos específicos de un proyecto.

Y la tarea es la acción que tiene el máximo grado de concreción y


especificidad. Un conjunto de tareas configura una actividad, entre las
muchas que hay que realizar para concretar un proyecto.

Instrumentos de la Planeación

Instrumentos Plan Programa Proyecto

Es un documento Es un conjunto En la unidad


Definición sistemático y coordinado y operativa más
analítico que ordenado de específica del
atiende a objetivos proyectos que proceso de
nacionales o tiende a la atención planificación. Está
generales de de problemas o orientado al
desarrollo social. áreas específicas desarrollo de
Resume el para el logro de los acciones y
conjunto de ejes objetivos del actividades
rectores o grandes desarrollo social concretas,
lineamientos que particulares o

51
se quieren lograr específicas de
así como los alguna área o sector
medios para relacionado con lo
obtenerlos. social.
Generalmente
aborda de manera
integral o
totalizadora un
tema a nivel
macro. Se integra
por programas.

Tiempo/ Larga duración Mediana duración Corta duración


espacio

Problemas que
aborda Estructurales Coyunturales Cotidianos/
Emergentes/
Sentidos

Criterios  Agenda  Antecedentes  Tema o problema


Básicos  Diagnósticos  Justificación  Descripción Gral.
 Areas de  Prioridades de  Justificación
Acción intervención  Objetivos
 Políticas  Contexto  Metas
 Estrategias  Objetivos  Límites
 Marco Legal  Metas  Metodología
 Propósitos  Marco  Evaluación
 Finalidades Estratégico  Recursos
 Líneas de  Marco operativo  Plan de gestión
acción  Marco de recursos
 Marco institucional  Calendarización
Estratégico  Supervisión
 Marco /seguimiento
Institucional  Evaluación
 Plan de  Recursos
contingencias  Plan de gestión
de recursos
 Calendarización

52
Duración 5-20 a 1-5 años Meses-2 años
años

Ejemplo a nIvel Plan Nacional de Programa Nacional Proyecto o


nacional Desarrollo para el Desarrollo Subprograma de
de los Pueblos Atención a la
Indios población Indígena
del D.F.

Ejemplo a nivel, Plan de Programa de Proyecto para el


Estatal, Superación de la Capacitación y Desarrollo de los
Regional y/o pobreza del Empleo para Jóvenes del
Local Estado de México jóvenes Municipio de
Tejupilco

Ejemplo a nivel Plan General de Programa de Proyecto de


Institucional Actividades del Atención materno Atención Materno
IMSS Infantil Infantil para
Familias de la
Delegación
Cuauhtémoc

Ejemplo a nivel Plan General de Programa de Proyecto sobre la


de la práctica actividades en la Jóvenes Promoción de
social Colonia Los Cooperativas
Reyes Coyoacán. Juveniles
Autogestivas

53
54
Capítulo 3.
Formulación de Proyectos
Sociales
3.1 El Proyecto Social

La palabra proyecto refiere a algo que se arroja hacia delante y con lo que
uno se compromete. Cada proyecto expresa la manera la manera en que
sus participantes directos conciben su quehacer. Es evidente que en
algunos casos el compromiso social que se adquiere llega a ser tan
completo que el proyecto se transforma en un estilo de vida.

En otras ocasiones, se mantiene una distancia crítica entre lo que es el


proyecto y lo que es su promoción. Finalmente, en su mayoría, los
proyectos sociales forman parte de movimientos sociales más amplios, en
los cuales lo particular se mezcla con lo colectivo.

La explicitación discursiva de los proyectos permite captar su singularidad,


pero al mismo tiempo se ve limitada por las palabras que se enuncian. Los
proyectos guardan dentro de sí la energía social, los deseos y las
expectativas de amplios sectores sociales. En ese sentido, es importante
que exista una valoración adecuada de cada uno de ellos, y que, a su vez,
los proyectos expresen de la mejor manera posible las aspiraciones
comunitarias.

Un Proyecto Social es el instrumento más operativo, específico y


delimitado de la Planeación Social; es la unidad mínima de procesos,
decisiones y actividades que pretende transformar una parte de la realidad
con el objetivo de solucionar un problema social.

Buscan la articulación de ideas para convertirlas en objetivos, metas,


procedimientos, acciones, actividades y recursos; se orienta al corto plazo
y a espacios micro o locales; se concentra en definir procedimientos y
realizar acciones; y se delimita a partir de temáticas específicas.
55
Sus características son las siguientes:
• Científico-Metodológico
• Explícito
• Participativo-Colaborativo
• Incluyente
• Articulado
• Coherente
• Flexible-adaptable
• Estratégico
• Transformador

3.2 Tipos de proyectos Sociales

 Proyectos Sociales de Intervención, Educación Social o Social-


Comunitarios: Se centran en intervenir y transformar positivamente
problemas sociales a través de apoyos, atención, beneficios y/o
servicios sociales.
 Proyectos Sociales Productivos: Proyectos para elevar la calidad de
vida a partir de vincularse a procesos de producción, distribución.
comercialización y consumo de bienes y servicios.
 Proyectos Sociales de Infraestructura: Buscan crear, ampliar,
rehabilitar o mejorar la infraestructura social, que brinda servicios
sociales a la población como medio para elevar sus condiciones de
vida.

3.3 Criterios para la elaboración del proyecto social:

1. Nombre del Proyecto


2. Introducción (De que se va a tratar el Proyecto)
3. Justificación (Los Porqué de la existencia del proyecto)
4. Diagnóstico Social del tema a abordar
5. Marco de Política Social
6. Misión (Motivo de la existencia de la propuesta)
7. Visión (Logros que se espera tener a largo plazo)
8. Objetivo General (Qué se pretende hacer)
9. Objetivos Específicos (Qué se hará para lograrlo)
56
10. Metas (Logros cuantificables, es decir, cuanto y a que tiempo
se pretende alcanzar)
11. Metodologías (Pasos, enfoques, métodos, estrategias y
técnicas, detalladas que se seguirán para alcanzar las metas y
cumplir los objetivos)
12. Presupuesto desglosado (Descripción de todos y cada uno de
los requerimientos del Proyecto, así como su costo unitario)
13. Cronograma (Fechas del proyecto, tomando en cuenta la
duración de 12 meses del mismo)
14. Resultados. Logros, beneficios, impactos sociales esperados
(Cuantitativos y Cualitativos)
15. Mecanismos de Supervisión y Evaluación.
16. Conclusiones

3.4 Reflexiones sobre la dimensión metodológica de la Planeación


Social.

La planeación social refiere a algo proyectivo desde el presente, apela a


algo que se arroja hacia delante y con lo que uno se compromete. Cada
proyecto expresa la manera la manera en que sus participantes directos
conciben su quehacer. Es evidente que en algunos casos el compromiso
social que se adquiere llega a ser tan completo que el proyecto se
transforma en un estilo de vida.

La explicitación discursiva de un proceso de planeación permite captar su


singularidad, pero al mismo tiempo se ve limitada por las palabras que se
enuncian. La planeación guarda dentro de sí la energía social, los deseos
y las expectativas de amplios sectores sociales. En ese sentido, es
importante que exista una valoración adecuada de cada uno de ellos, y
que a su vez, los proyectos expresen de la mejor manera posible las
aspiraciones comunitarias.

Por eso, la Planeación Social es un hecho social, político, cultural y


metodológico, ya que este proceso consiste en transformar ideas,
visiones, concepciones, horizontes, formas de vida, percepciones y

57
utopías, en propuestas de trabajo que buscan solucionar un problema o
llenar un vacío, invirtiendo en ello recursos, insumos y tiempo. Es
importante mencionar que los proyectos sociales siempre deben
responder a situaciones concretas, vividas, sentidas e identificadas por los
mismos participantes. Los proyectos no son simplemente escritos o
papeles con una serie de pasos a seguir, sino que se construyen a partir
de compromisos vitales, metas en común, diferencias y
pluriculturalidades, proyecciones del futuro, acciones del presente,
reinterpretaciones del pasado y formas de lucha colectiva.

Por eso, un factor de éxito para la planeación es la identificación de


aquellos problemas que constituyen verdaderos cuellos de botella para el
desarrollo de los grupos humanos. Siempre hay que actuar en base a
"factores limitativos", es decir, aquellos factores cuyo aumento o
disponibilidad es una condición necesaria pero no suficiente para el
desarrollo social. El desarrollo social se logra expandiendo todos los
factores limitativos.

Es necesario simplificar los estudios de factibilidad, y disminuir el período


de formulación, evitando la separación drástica entre formulación y
ejecución. Ello debe facilitar la reprogramación del proyecto, incorporando
aquellos aspectos que no se pudieron prever en el momento de la
formulación, por cambios en la política nacional, en el contexto
macroeconómico y/o en los factores ambientales.

El diseño de los proyectos debe incorporar la mayor flexibilidad posible


para el período de ejecución, debido a la dificultad de realizar previsiones
realistas de precios y otras variables en épocas de gran incertidumbre.
Habría que establecer un mecanismo ágil para la actualización del
programa original e incluir en el presupuesto una partida sin asignación
específica.

Los diseños que permitan flexibilidad en la implementación facilitarán la


atención de demandas de las comunidades que no hayan sido
explícitamente contempladas en el diseño original.

58
Los proyectos flexibles permiten incorporar adecuaciones a la propia
dinámica social del área. Esto no quiere decir que se diseñen proyectos
imprecisos, sino que se determinen con claridad los problemas centrales
a resolver, frente a los cuales puede haber un cierto grado de flexibilidad
para readecuar las acciones a situaciones impredecibles en el momento
de la formulación, reprogramando el proyecto.

En la preparación del diseño del proyecto es necesario y conveniente


apelar a criterios y pasos metodológicos que sean capaces de adaptarse
y responder a la complejidad y a las transformaciones de la realidad. En
el diseño del proyecto deben incorporarse elementos y procedimientos
capaces de responder adecuadamente a los desafíos provenientes de
esas transformaciones que -en gran medida- se manifiestan durante el
tiempo que transcurre entre la preparación del diseño y el momento de la
ejecución.

Los objetivos del proyecto deben plantearse con claridad y no deben


constituir largas "listas de buenos propósitos". Objetivos bien formulados,
como respuesta a la pregunta sobre lo que el proyecto intentará alcanzar,
permiten introducir flexibilidad en los medios para alcanzar los objetivos.

Proyectos bien formulados deberán partir de diagnósticos claros, que


señalen cuáles son las características físicas y ecológicas del área y
cuáles son los procesos sociales y culturales que determinan el patrón de
acumulación en la zona, priorizando aquellos problemas que pueden ser
modificados por el proyecto y aquellos que pueden constituir factores
condicionantes para lograr tales cambios.

Es necesario realizar diagnósticos analíticos y dinámicos que superen la


simple descripción de datos de un área determinada. Esto implica que se
estudien procesos, no hechos sueltos. Para ello es necesario no
solamente utilizar información secundaria, que es útil en la medida en que
complemente el conocimiento que se adquiere con los propios
participantes en un proceso de interacción directa con el grupo humano
potencialmente beneficiario del proyecto.

59
Los procesos de desarrollo social en áreas de gran fragilidad socio-
económica y con altos índices de pobreza de la población, requieren
como punto de partida la elaboración de diagnósticos dinámicos, que
tengan posibilidad de encontrar los espacios, fenómenos o aspectos
sociales cambiantes.

En la etapa del diseño del proyecto es fundamental realizar consultas


detalladas con la población que será destinataria del proyecto, y con
especialistas locales (incluyendo, de ser posible, intelectuales y/o
especialistas que pertenezcan a dicha población), sobre los objetivos y
medios del proyecto e -incluso- sobre el nombre que se le dará al mismo.

Al planificar un proyecto, es importante tener presente la forma en que se


distribuye la población, para evitar que se programen acciones imposibles
de cumplir por falta de vías de comunicación y por las dificultades que
representa llevar diferentes servicios a cada uno de los caseríos si se
encuentran muy distantes unos de otros, además de representar un alto
costo. Es importante que el diseño presente con claridad la estructura del
proyecto y los indicadores clave, para lo cual puede resultar conveniente
utilizar la metodología del "marco lógico".

Cuando los niveles de incertidumbre son elevados, el diseño de un


proyecto debe visualizarse como una acción continua que no acaba con
el inicio de su ejecución. Acciones intermedias de supervisión y evaluación
constituyen herramientas potencialmente ágiles de rediseño de los
proyectos ante circunstancias cambiantes.

La Planeación Social se ubica en una perspectiva global y hace referencia


a las decisiones de carácter general que expresan los lineamientos
políticos fundamentales, las prioridades que se derivan de esas
formulaciones, la asignación de recursos acorde a esas prioridades, las
estrategias de acción y el conjunto de medios e instrumentos que se van
a utilizar para alcanzar las metas y objetivos propuestos.

60
Capítulo 4
La Perspectiva Estratégica en la
Planeación Social
Uno de los temas más relevantes de la planeación social contemporánea
tiene que ver justamente con la Planeación Estratégica, sus fundamentos
e instrumentos, mismos que conllevan también elementos teóricos y
metodológicos requeridos para la elaboración de un Plan Estratégico,
instrumento que es de utilidad para el funcionamiento adecuado, eficaz y
eficiente de las instituciones donde se inserta el profesional del Trabajo
Social. Por eso, al igual que un proceso de planeación convencional, la
Planeación Estratégica necesariamente toma en cuenta cuatro grandes
aspectos, a saber: entenderla como proceso social, proceso educativo,
proceso administrativo y proceso metodológico.

Es un Proceso Social porque el impacto que busca un ejercicio de


planeación estratégica será mejorar el funcionamiento de las instituciones,
servicios y programas sociales y con ello, lograr que se beneficie a los
sujetos que tienen acceso a ellos. Es un Proceso Educativo porque
siempre va a aplicar un proceso de adquisición de conocimientos y
saberes, que lógicamente buscan mejorar el funcionamiento de las
instituciones, servicios y programas sociales. Es un Proceso
Administrativo porque tiene que ver con el funcionamiento de las
instituciones, que sea óptimo y de calidad, pero muy vinculado a los
tiempos y a los recursos que se van a requerir para que los objetivos
institucionales se lleven a cabo. Y es un proceso metodológico porque
tendrá fundamentos teóricos-conceptuales y también rutas, ciclos, etapas,
procedimientos, métodos, técnicas e instrumentos.

Un segundo punto es que este proceso social, educativo, administrativo y


metodológico, busca: 1) Determinar rigurosamente Objetivos y Metas a
cumplir por una institución u organización; 2) Delimitar estratégicamente

61
objetivos y metas; y 3) Definir estrategias o caminos y lineamientos para
cumplir esos objetivos y metas.

Un tercer aspecto de relevancia es que la Planeación Estratégica en


general se vincula a la Misión, Visión y Valores de una institución, y
además va a tomar en cuenta el contexto y el entorno para poder definir
esos objetivos y esas metas. Es decir, siempre tomará en cuenta las
condiciones internas y externas a la institución, por lo que todo proceso
de la planeación estratégica establece objetivos estratégicos, metas
generales y estrategias que se llegan a sintetizar en planes o iniciativas,
que son necesarios para lograrlos.

En cuarto punto, es importante ubicar que todo proceso de planeación


estratégica siempre va a estar determinado y regulado por dos grandes
dimensiones que van a existir en toda institución: el Control de Gestión y
el Control de Actividades; que implican dos grandes niveles de
funcionamiento institucional: el de la toma de decisiones y de la operación.
El control de gestión tiene relación con el nivel directivo, los mandos que
dirigen una institución, y el control de actividades tiene que ver con el nivel
del personal que ejecuta los programas y las iniciativas de esa institución.
La planeación estratégica implicaría la relación entre control de gestión,
control de actividades y las propuestas que surgen de la relación entre
esos niveles.

Es muy importante aclarar que históricamente se habla de planeación


estratégica haciendo referencia a un proceso de proyección, organización
y orden de nuestros objetivos y procedimientos para lograr ciertas
finalidades, pero sin perder de vista que la historia de la planeación
estratégica inicia en el mundo de lo privado, el universo de las empresas,
es decir, realizándose este tipo de planeación para que las empresas
produjeran más, con mayor calidad, en el menor tiempo y con los menores
recursos. Pero cuando el tema de la planeación estratégica se relaciona
con las instituciones públicas, entonces este esquema se tiene que
modificar, ya que en la planeación estratégica tradicional la alta dirección
es quien va a definir los grandes lineamientos, mientras que a nivel

62
dirección se van a retomar para convertirlos en programas, y el nivel
operativo los va a desarrollar, implementar, concretizar.
Sin embargo vemos que la complejidad de las instituciones
contemporáneas implica muchas veces cuestionar este esquema más
vertical de la planeación estratégica, donde pueden existir enfoques más
horizontales, más circulares donde, por ejemplo, las decisiones se toman
con la participación de las sujetos vinculados a la institución, con la
población beneficiaria, con la participación de los profesionales, no
necesariamente en un esquema que implica una verticalidad, aunque lo
que si podemos decir es, que la planeación estratégica siempre vincula la
toma de decisiones, con lo directivo, con lo programático y con lo
operativo.

4.1 Elementos básicos de la Planeación Estratégica

Los elementos más importantes y generales que son básicos e inherentes


a la planeación estratégica son los siguientes:

 La Misión. Es el planteamiento que le da perfil constitutivo a la


institución u organización, a las acciones que desarrolla y establece
su mandato. Fija los propósitos, fines, y límites que la institución
busca, y también orienta y señala la dirección de las acciones a
seguir. Es una declaración de principios que incorpora el carácter de
la institución, que define su mandato, sus propósitos, sus
finalidades, sus límites y la dirección a donde va. Por eso, toda
misión implica la búsqueda de la organización: qué características
tiene, los elementos integradores, los objetivos, sustantivos, a quien
va dirigida y cuáles son los principios fundamentales que orientan la
acción de una institución.
Ejemplo de Misión. En una Institución de Defensoría Pública:

“Proporcionar defensa penal de alta calidad profesional a las


personas que carezcan de abogado por cualquier circunstancia,
velando por la igualdad ante la ley, por el debido proceso y actuando

63
con profundo respeto por la dignidad humana de nuestros
representados”.

 La Visión siempre permite ver donde estamos, pero principalmente


donde queremos estar en el futuro, orientando la prospectiva de la
institución. Por eso, la visión es una imagen objetivo, es la mirada
en el largo plazo, el modelo a lograr institucionalmente para así
poder lograr su misión, retomando valores, oportunidades y
proyecciones. La visión implica por tanto proyección, principios,
características y el futuro de nuestra institución, por lo que siempre
estará vinculada también con la misión. La Misión es la declaración
de principios de lo que esencialmente busca una institución, y la
Visión será el escenario a dónde quiere, puede y debe llegar la
institución en el largo plazo.
Ejemplo de Misión: En una Institución de Seguridad Social.
“Ser la mejor institución de Seguridad Social del Estado, ágil,
eficiente y proactiva, focalizada en la atención de sus usuarios y con
una presencia destacada en la comunidad”

 Los Valores, son el conjunto de principios que guían la acción de la


institución, es la ruta de funcionamiento institucional que delimita lo
que está permitido y que no está permitido para que esa institución
consiga sus objetivos. Es una especie de código de conducta y
acción dentro del cual la institución se compromete a lograr su
misión y obtener su visión. Los principios o los valores son los
grandes lineamientos que nos permiten actuar adecuadamente y
lograr nuestros objetivos en el marco de ciertos parámetros, que son
las grandes guías éticas, políticas e institucionales.

 Análisis FODA. (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y


Amenazas) Es un tipo de análisis diagnóstico que, en un primer
momento, identifica los procesos, dinámicas y actores internos y
externos que tienen relación con una institución, pero se
complementa cuando se ve también los aspectos que hacen fuerte
o débil a una institución. Por eso, el análisis FODA retoma el cruce
64
o relación de Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas.
Las Fortalezas, tienen relación con la mirada interna a la institución,
pero relacionándola con sus atributos positivos; es decir, resalta lo
fuerte, consistente, positive; las Oportunidades son aspectos del
contexto externo a la institución que tiene que ver con atributos
positivos, con cuestiones de logro, de fortaleza, de apoyos para un
mejor funcionamiento institucional; las Debilidades, son todos los
puntos rojos, vacíos o elementos de fragilidad que puede tener la
institución, pero desde una perspectiva interna; las Amenazas, es
todo aquello que puede afectar el funcionamiento de una institución,
pero que son vinculadas al contexto externo. El análisis FODA nos
plantea, que en toda institución hay Fortalezas, Oportunidades,
Debilidades, y Amenazas y es necesario identificarlas y
principalmente relacionarlas, para así tener un diagnóstico
estratégico con una perspectiva institucional más amplia y compleja
para así llegar a formular objetivos y metas pertinentes y viables. Es
importante mencionar que existe un análisis FODA básico, que
relaciona Fortalezas con Debilidades y Oportunidades con
Amenazas, pero también hay otro más complejo donde el cruce
puede darse entre las diferentes dimensiones, por ejemplo,
Fortalezas con Amenazas y Oportunidades con Debilidades, y todas
las otras relaciones que puedan existir entre esas dimensiones.

 Objetivos Estratégicos Los objetivos estratégicos son los logros


que persigue la institución, definiendo tiempos o plazos
determinados para cumplirlos, y lógicamente estos tienen que estar
cuadrados con la misión y la visión institucional. Por eso, la
Planeación estratégica es una cadena muy articulada, entre misión,
visión, principios y objetivos estratégicos. Los objeticos estratégicos
son los logros que perseguimos, pero estructurados en tres grandes
dimensiones de tiempo: lo que queremos lograr en el Corto,
Mediano y Largo plazo. Los objetivos estratégicos se dividen en
Propósitos, que van a ser objetivos de corto y mediano plazo, y las
Finalidades, que son los objetivos de largo plazo. En la Planeación
Estratégica por eso es importante visualizar primero las Finalidades,

65
porque todo lo que se tiene que realizar para lograrlas, serán los
Propósitos, es decir, lo que queremos lograr en el corto y mediano
plazo.

 Metas estratégicas. Las metas estratégicas tienen que ver con la


cuantificación de lo que se quiere lograr, es decir, buscan
parámetros de medición de los objetivos estratégicos a través de
indicadores, que serán los instrumentos que permitan medir el logro
de los que plantea una institución. Por eso las metas y objetivos
estratégicos van a ser dos criterios de la planeación estratégica que
van de la mano, que no se separan, que tienen que ver con
cuestiones cualitativas, los objetivos, y cuantitativas, las metas, pero
que siempre van articulados.

 Estrategias. Las estrategias son los ejes o caminos que nos van a
llevar a cumplir nuestros objetivos y nuestras metas estratégicas. Es
el conjunto de rutas, decisiones, acciones, momentos que
posicionan la institución para obtener mejores resultados en el largo
plazo. La estrategia pone énfasis en el largo plazo, retoma el corto
o mediano plazo, pero siempre mirando al largo plazo. Las
Estrategias implica siempre opciones u alternativas, no solamente
una sola adopción o alternativa. Puede haber Estrategias diferentes
para lograr nuestros objetivos, pero que están previamente
diseñadas y priorizadas. Por ejemplo, tengo Estrategias A, B, C y D
y todas nos dirigen al logro de los objetivos, por lo que se tienen
plurales y diversas opciones. La diferencia que establece una
planeación tradicional es precisamente que las Estrategias,
significan diferentes opciones, horizontes y escenarios, para lograr
nuestros objetivos institucionales, además de que conllevan medios,
procedimientos, métodos, técnicas, instrumentos, etcétera.

 Plan Estratégico. Plan estratégico, que implica la serie de criterios


que nos van a permitir definir un proceso de planeación estratégica,
que ese mismo proceso se traduce en un documento donde
destacamos las grandes decisiones que se toman en el marco de la
66
planeación estratégica, cuáles son los elementos que incorpora un
plan estratégico, como objetivo, trazar un mapa de la organización,
señalar los pasos para lograr nuestra misión, un plan implica todo lo
que requerimos para lograr nuestra misión, trata de convertir los
proyectos en acciones, será un documento que nos permite
identificar nuestra proyección, nuestra misión, y como vamos lograr
la misma.

Criterios para elaborar un Plan Estratégico,

 Presentación general del tema,


 Area institucional donde se realizará
 Delimitación de prioridades,
 Escenario,
 Estructura,
 Investigación,
 Diagnóstico, sobre la propia institución,
 Antecedentes, la historia de la institución,
 Actualidad, las cuestiones específicas y lógicamente incluye una
misión su visión y sus valores sea de una institución o sea de un
área de una institución o sea de una organización o de un área de
una organización, por ejemplo: un hospital.
 Su análisis FODA,
 Sus objetivos y metas estratégicas,
 Sus indicadores. Que nos otra cosa más que los valores que pueden
ser medibles para una meta requieren estrategias
Todo un plan operativo que tiene que ver con las actividades,
acciones, acciones concretas que tiene que vincularse.

Esto de manera general esto implica un plan estratégico.

4.2 Criterios básicos del Marco Lógico

El Marco Lógico es una metodología que se utiliza en la planeación social


que permite presentar de forma sistemática y lógica los objetivos de la
67
planeación y sus relaciones de causalidad. Asimismo, sirve para evaluar
si se han alcanzado los objetivos y para definir los factores externos que
pueden influir en su consecución.

Es el sistema más utilizado para conceptuar, diseñar, ejecutar, seguir el


desempeño, evaluar y comunicar información fundamental sobre un
proyecto en forma resumida y da elementos para estructurar el proceso
de planeación.

El marco lógico, también conocido como metodología de marco lógico


(MML) es una herramienta de gestión de proyectos usada en el diseño,
planificación, ejecución y evaluación de proyectos.

Fue desarrollada en 1969 por la USAID (Agencia de los Estados Unidos


para el desarrollo internacional) como respuesta a análisis de resultados
de proyectos anteriores, donde se concluyó que había deficiencias y que
era necesario crear una herramienta para mejorar los resultados de
futuros proyectos.

Posteriormente, organizaciones y entidades como el Banco


interamericano de desarrollo (BID), la agencia de cooperación alemana
para el desarrollo (GTZ) y muchos gobiernos en Sudamérica y Caribe
adoptaron el enfoque marco lógico (EML). Los presentamos algunas
definiciones del Marco Lógico:

Herramienta de gestión que facilita la planificación, ejecución y evaluación


de un proyecto. Agencia Noruega de cooperación para el desarrollo
(NORAD), 1993.

Un sistema de procedimientos e instrumentos para una planificación de


proyectos orientada a objetivos. Agencia de cooperación alemana para el
desarrollo (GTZ), 1987.

Herramienta analítica para la planificación y gestión de proyectos


orientada por objetivos. Constituye un método con distintos pasos que van
desde la identificación hasta la formulación y su resultado final debe ser la
elaboración de una matriz de planificación del proyecto. Agencia Española
de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), 1999.
68
Los pasos metodológicos del Marco Lógico son:
1. El Análisis de Involucrados
2. El Análisis de Problemas
3. El Análisis de Objetivos
4. El Análisis de Alternativas
5. La Matriz del Marco Lógico

El Marco Lógico siempre identifica una situación insatisfactoria la


llamamos SITUACIÓN ACTUAL. Si existe una situación actual
insatisfactoria, podemos decir que existe también una SITUACIÓN
FUTURA DESEADA que sería el resultado de una planeación social
diseñada para mejorar algunos o todos los elementos de la situación
actual. Esa planeación se ejecuta en el corto y mediano plazo para lograr
en el mediano y largo plazo la situación deseada.

Con el Análisis de involucrados y Análisis de problemas, podremos


alcanzar la identificación del problema. Con el Análisis de objetivos y
Análisis de alternativas, el resultado será la identificación de un proyecto
(Futuro).

Y la matriz del marco lógico, resume todo lo discutido en los cuatro pasos
anteriores. Además se agrega información sobre lo que se va a
monitorear, lo que se va a evaluar y el alcance de la responsabilidad del
responsable de la planeación. Es decir se integran los Propósitos,
Finalidades, Componentes y Actividades.

Para el Análisis de Involucrados, se deben identificar y ubicar grupos,


organizaciones, instituciones y actores que están involucrados, para
tomar en consideración sus intereses, su potencial, sus limitaciones, su
percepción sobre las causas-efectos de los problemas, recursos y poder
o mandatos, para su posible participación en la planeación. Este análisis
debe hacerse de manera permanente, tanto al inicio, a la mitad y al final
del proceso.

69
Para el Análisis de Problemas, se debe Analizar la situación actual
relacionada con el problema de desarrollo seleccionado. Se identifican los
problemas principales en torno al problema de desarrollo y las relaciones
causa-efecto entre ellos. Busca visualizar las relaciones de causalidad y
sus interrelaciones en un diagrama (árbol de problemas)

Para el Análisis de Objetivos, se deben identificar los Problemas,


describir una situación que podría existir después de resolver los
problemas, Identificar las relaciones medio-fin entre objetivos, visualizarlo
en un diagrama, y los objetivos se construyen con el análisis de
problemas. Seleccionamos el problema que está en el nivel más alto del
árbol de problemas y lo convertimos en un objetivo o manera de abordar
el problema. Hecho esto, se revisan todas las relaciones medio-fin y
tenemos el árbol de objetivos. La idea del Análisis de Objetivos es
convertir cada problema y sus causas/efectos, tanto el problema central
como los específicos, en OBJETIVOS.

El Análisis de Alternativas consiste en identificar estrategias alternativas


a partir del árbol de objetivos, que si son ejecutadas, podrían promover el
cambio de la situación actual a la situación deseada. Después de
identificadas las distintas estrategias se debe evaluar cada una con
varias herramientas de análisis que en realidad son filtros para ir
seleccionando. También se deben construir las alternativas tomeno en
cuenta los siguientes aspectos: Los intereses de los beneficiarios del
proyecto; Los recursos financieros disponibles; Los resultados de estudios
económicos (costos totales, beneficios), financieros, sociales,
institucionales y ambientales, impacto social, sostenibilidad, experiencias
previas; y los intereses y mandatos de los involucrados

Para el análisis de alternativas se deben identificar diferentes conjuntos


de objetivos (escalones medios-fin) que pudieran ser estrategias
potenciales de un proyecto. Se recomienda eliminar los objetivos que no
son éticamente deseables o políticamente factibles, o aquellos que ya
están siendo perseguidos por otros proyectos de la institución o el área.

70
En necesario evaluar las alternativas respecto de los recursos disponibles,
la viabilidad política, los intereses de los beneficiarios, de la entidad
ejecutora prevista y de las fuentes de financiamiento, así como decidir cuál
es la estrategia o combinación de estrategias (alternativas) más apropiada
para ser la del proyecto.

Análisis de Análisis de Análisis de Proyecciones


problemas Objetivos Alternativas

Problema 1 Objetivo1 Alternativa 1 Cambios


Causas y efectos

Problema 2. Objetivo 2 Alternativa 2 Cambios


Causas y efectos

Problema 3. Objetivo 3 Alternativa 3 Cambios


Causas y efectos

Conclusiones.

La Planeación Estratégica y el Marco Lógico son perspectivas que deben


ser retomadas al implicar una visión de corto, mediano y largo plazo, así
como la visión, la misión los valores el análisis de lo interno y externo que
se va a traducir con lo que conocemos como el análisis FODA los objetivos
estratégicos, las metas estratégicas, las estrategias y un instrumento que
va a ser muy importante y que los vamos a ubicar como los planes
estratégicos, complementándolos con el marco lógico.

71
72
Capítulo 5.
La Innovación Social.
La Innovación es un cambio que introduce novedades, y que se
refiere a modificar elementos ya existentes con el fin de mejorarlos,
aunque también es posible en la implementación de elementos
totalmente nuevos. Proviene del latín "innovatio" que significa «crear
algo nuevo", y está formada por el prefijo "in-" (que significa "estar
en") y por el concepto "novus" (que significa "nuevo")

Siempre se relaciona a la Innovación con la implementación de


nuevos productos, acciones, servicios, o procedimientos, que
encuentran una aplicación exitosa, con aquellos cambios que
introducen alguna novedad o varias, con la aplicación de nuevas
ideas, productos, conceptos, servicios, y prácticas a una determinada
cuestión, actividad o negocio, con la intención de ser útiles.

Una condición esencial de la innovación es su aplicación exitosa y


su difusión Proceso que consiste en convertir en una solución a un
problema o una necesidad, una idea creativa, puede realizarse a
través de mejoras y no solo de la creación de algo completamente
nuevo.

Pero, para entender de manera integral la innovación, es necesario


reconocer otro concepto fundamental: la Creatividad que es un
proceso del pensamiento que busca la solución de un problema
mediante métodos no ortodoxos o aparentemente ilógicos. La
creatividad no está amarrada a las respuestas, también está
asociada a las preguntas.

73
Es la ruptura de los límites de los sentidos y de la razón, es
transformar conocimientos y saberes con el fin de generar
alternativas los problemas del mundo contemporáneo.

La Creatividad es la generación de ideas que aceleran, cambian,


transforman el curso de la vida social en todos sus aspectos.
Establece relaciones de conocimiento y saberes, implica relaciones
sociales, para proyectar cosas que no existen, establecer nuevas
preguntas y dar respuestas originales, útiles para el entorno social

Creatividad:
O Proceso
O Producto
O Fenómeno Educativo
O Característica de la Personalidad
O Construcción Social y Cultural.
O Fenómeno Componencial-Contextual.

Proceso Creativo
O Preparación. Proceso de recopilar información, con la
intervención de los procesos perceptuales, de memoria y de
selección.
O Incubación . Procesos de análisis y de procesamiento de la
información centrándose en la corrección y búsqueda de datos.
O Iluminación .Es el proceso del darse cuenta y se le identifica
más como un proceso de salida de información. Ocurre después
de un periodo de desequilibrio, confusión o duda.
O Innovación. Desarrollo y concreción del proceso creativo.
O Evaluación o Verificación. Es el proceso de evaluación sobre
la utilidad temporal del objeto o proceso de creación.

La creatividad es un proceso inventivo y la innovación una práctica


creativa.
74
Innovación representa una solución creativa, es decir, supone un
cambio que se realiza con el propósito de solucionar un problema
o mejorar una situación. Creatividad es el proceso mental que nos
ayuda a generar ideas originales.

Innovación es la aplicación práctica de esas ideas, que se


implantan con el fin de alcanzar los objetivos de la organización de
forma más eficaz.
la innovación sería aplicar la creatividad y la creatividad sería la
llave o el empuje que colabora en descubrir y delegar las libertades
para que la innovación se concrete.

Cuando se habla de Innovación por una parte casi siempre se hace


referencia identificarla como Invención, a verla como sinónimo de Lo
Nuevo y a vincularla con el mundo de lo empresarial-privado o lo
científico-tecnológico:
A menudo la innovación se confunde con la invención, y esta
última se toma como un hecho más o menos aislado,
producto de la genialidad o la inspiración de la persona o del
equipo que la realizó. Pero la invención es en realidad el
resultado de un proceso social que tiene lugar en el curso de
una serie de oleadas de pequeños cambios y que finalmente
cristaliza en un hecho específico, asociado a un
reconocimiento específico. Luego nace la posibilidad de la
innovación, como una aplicación localizada y singular de una
invención, que puede resultar tan deslumbrante que haga
pasar desapercibidos los pequeños avances y la diversidad
de factores que debieron coincidir para que la nueva idea se
concretara y aplicara. La innovación es el resultado de un
largo proceso histórico, de un cúmulo de intentos fallidos y
pequeñas mejoras que en un momento crítico cambian el
signo de la tendencia, la dirección de un proceso, la calidad
de un producto o la técnica de un procedimiento. Dado que
75
aparecen de manera impetuosa y hasta transgresiva, con
frecuencia se pasa por alto que cada innovación depende del
cambio que se ha venido gestando en el marco de una
determinada cultura tecnológica, artística, científica, filosófica
u organizativa. La originalidad de la innovación radica en el
proceso que permite hacer realidad un cambio específico.
Una reflexión más comprehensiva de la innovación requiere
entonces que se considere, más que el invento original, el
origen y el destino de cada nueva aplicación. Es decir, que se
conciba la innovación más como un proceso que como un
hecho o un acontecimiento; que se considere más la praxis
que genera el cambio y es capaz de sostenerlo en el tiempo
y el espacio. (Rodríguez y Alvarado, 2007; 23)
O El proceso innovador social comienza con una necesidad no
satisfecha junto con la intención de satisfacerla.
O Supone un proceso-medio para buscar formas diversas,
creativas y nuevas para satisfacer las necesidades aún no
cubiertas, o satisfechas de manera deficiente.
O Este proceso es “motor” del proceso de “evolución social”, del
“cambio social” o del “desarrollo”.
O Tiene finalidades orientadas a transformar positivamente el
contexto de los sectores sociales involucrados en ella.

Pero de manera actual, la Innovación ahora lleva un apellido


sustantivo: Lo Social, vinculándose a lo que hemos denominado las
Centralidad de lo Social; es decir, la articulación de las dimensiones
económicas, políticas, culturales, medio ambientales y otras, a través
de una intersección de lo Social que significa privilegiar o priorizar a
los sujetos sociales mayoritarios, para así, dar capacidad de
respuesta a sus problemas sociales, tomando en cuenta sus
procesos relacionales, sus construcciones o representaciones
sociales tanto a nivel micro-meso o macro local.

76
La Centralidad de lo Social implica ver también a las necesidades,
problemas sociales actuales, más complejos; a las mayorías de los
Sujetos sociales en nuestros contextos, en condiciones de mayor
vulnerabilidad y complejidad; a las instituciones sociales en crisis
profundas, por lo que los grandes e inéditos retos y desafíos actuales
de nuestra sociedades modernas, son justamente: Construir
capacidad de respuestas y soluciones novedosas, estratégicas,
micro-sociales y estructurales a los problemas sociales desde las
instituciones y organizaciones que forman parte de la esfera social.
Desde esta perspectiva vemos a la Innovación Social como el
conjunto de:
Todas las innovaciones seleccionadas son el resultado,
más o menos intencional, de procesos que forman parte de
programas y proyectos llevados a cabo por determinados
actores y agentes sociales. Ningún proceso puede
prescindir de sujetos que lo impulsen y sostengan; más
aún, de sujetos organizados en empresas, en instituciones,
en comunidades o en algún otro tipo de organismo. Las
principales fuentes de la innovación en el campo social son
las organizaciones de la comunidad, las no
gubernamentales, y las públicas. (Rodríguez y Alvarado,
2007; 25)

La Innovación Social es un multi-proceso que implica nuevas formas


de gestión, de administración, de ejecución, nuevos instrumentos o
herramientas, nuevas combinaciones de factores orientadas a
mejorar las condiciones sociales y de vida en general de la población
de la región, a través del funcionamiento adecuado y siempre en
mejor continua de la institucionalidad social. (CEPAL, 2010)
Por eso podemos entender a la Innovación Social como un concepto
que nos remite casi automáticamente pensar y aplicar nuevas rutas,
ideas, conceptos, servicios y prácticas, beneficios, procedimientos,
métodos, instrumentos, con la intención de ser útiles para el mejor
77
funcionamiento de las instituciones, organizaciones y servicios
sociales. La Innovación por eso, siempre es la concreción del proceso
creativo, es el resultado de algo nuevo o reformulado, que siempre
busca generar mejorías en los servicios sociales e institucionales.

Desde esta perspectiva, la Innovación Social busca la transformación


de ideas creativas, para que se convierten en series de acciones y
prácticas concretas, planeadas y novedosas en las instituciones u
organizaciones donde se inserta profesionalmente. Por eso, será un
proceso complejo que genera respuestas o alternativas a
necesidades o problemáticas de los servicios sociales, pero también
es resultado de al producir algo nuevo para el mejoramiento de los
servicios sociales que son medios para mejorar las condiciones de
vida de los sujetos sociales.

La Innovación Social siempre proyecta nuevos enfoques, prácticas,


métodos o sistemas que se pueden realizar por procesos
tradicionales o también por procesos nuevas que se hacen con
participación de la comunidad, misma que se transforma en
protagonista de su propio desarrollo. Por eso, siempre prioriza
alternativas o soluciones que resultan novedosas, efectivas,
eficientes, sostenibles y justas para un problema social; que buscan
siempre ser mejores a las existentes, atacando problemas de la
sociedad como un todo.

La Innovación Social es un proceso que a la vez es un dispositivo de


avanzada, que se conforma como un sistema de pensamientos y
prácticas para realizar algo diferente, para lograr cambios o
transformaciones con los insumos y recursos institucionales con que
se cuentan, aunque también siempre cuestiona la falta de los
recursos necesarios para lograr a cumplir los objetivos y metas
institucionales u organizacionales.

78
Y los nuevos enfoques de la innovación social si bien dan
preeminencia a planear lo Nuevo que se genera con el pensamiento
creativo, también reflexionan sobre lo Viejo, clásiso o tradicional que
funcionó bien y se puede rescatar o se requiere recuperar-actualizar.
Pero también pone énfasis a lo que existe y funciona mal, buscando
que se reconfigure para que funcione mejor.
El enfoque de la Innovación Social siempre detona procesos sociales
creativos, a partir de las siguientes herramientas que las podemos
insertar en los procesos de planeación social:
 Con la participación plena y profunda de la actores sociales en
diferentes etapas de los procesos institucionales u
organizacionales.
 Con la capacidad de construir alianzas estratégicas entre
actores sociales e institucionales diversos que permitan
fortalecer a la propia instancia de referencia.
 Con la posibilidad de generar sinergia entre diferentes tipos de
conocimientos y saberes, que vimos en el enfoque del cruce de
saberes: saber científico, saber social y saber práctico.
 Con la posibilidad de planear la creatividad como construcción
social y colectiva, planeada, imaginada, supervisada, evaluada
y sistematizada.
 Con el impulso de la construcción de liderazgos institucionales-
comunitarios-organizacionales, no sólo individuales o
personales.
 Planeando la vida institucional con miradas de corto-mediano-
largo plazo e identificar colectivamente y de abajo hacia arriba
las fortalezas-oportunidades-debilidades-amenazas, pero
también sus respuestas, o soluciones.
 Con el impulso social para multiplicar contextual e
institucionalmente las estrategias y sus sustento integral,
proyectando de escenarios y generando alternativas viables y
factibles.
79
 Orientando el trabajo en equipo, para el impulso creativo y
estratégico de la formación de equipos de trabajo.
 Con el planteamiento participativo para definir mecanismos
básicos y complejos para la resolución de conflictos y generar
procesos de comunicación Institucional (interna y externa) que
haga ligero el funcionamiento institucional.
 Con la apropiación de la innovación social por parte de toda la
comunidad institucional de referencia, independientemente de
su jerarquía, funciones, tareas o actividades.
 Creando la perspectiva Transdisciplinar para el análisis,
planeación, realización de prácticas y de la evaluación de los
procesos de Innovación Social.

80
Capítulo 6.
Procuración de Fondos para
Proyectos Sociales
La Procuración de Fondos para instituciones y proyectos sociales es una
función intrínseca dentro del ciclo de planeación. Se trata de obtener los
recursos necesarios para que las actividades planeadas puedan llevarse
a cabo, de tal manera que la edificación de alianzas para el desarrollo se
convierte en un medio para la obtención de recursos, así como un fin para
la articulación de acciones a largo plazo.

En México tanto la obtención de financiamiento, como la asignación del


mismo se encuentran en una etapa de maduración en la que los
procedimientos comienzan a institucionalizarse hacia la consolidación de
modelos de gestión con elementos de mayor objetividad para lograr un
mayor impacto social. De tal manera que los gobiernos, las empresas, las
fundaciones internacionales, y el ciudadano de a pie, ante una importante
demanda de recursos para la implementación de proyectos sociales,
comienzan a generar más y mayores mecanismos para poder tomar la
decisión final de elegir a la instancia apoyada. De tal manera que la
realidad exige un riguroso orden institucional para poder efectuar cualquier
proyecto social.

Este capítulo trata de desarrollar en una primera instancia algunas ideas


sobre la situación actual de la procuración de fondos, para dar paso a
algunas reflexiones sobre el tipo de proyecto o institución que somos para
que ayude a ubicar la mejor estrategia, el tener definido quiénes somos y
qué queremos contribuirá a hacerlo. Finalmente, para ilustrar el flujo de
diagrama de este proceso retoma de diversos autores el Circulo Virtuoso
de la Procuración de Fondos, en el que por medio de sus siete momentos
se trata de incluir consejos prácticos durante nuestro esfuerzo de la
obtención de recursos.

81
6.1 La procuración de Fondos

Las instituciones, las organizaciones de la sociedad civil, los colectivos,


las cooperativas, cualquier núcleo de personas que tiene la finalidad poner
en marcha algún proyecto social, sin importar la magnitud de este,
siempre, llegará en algún momento en el que habrá de referirse a la
necesidad de tener fondos para poder llevarlo a cabo.
“... la forma de obtener estos recursos implica establecer estrategias
de recaudación de fondos que van desde utilizar los métodos
comunes hasta aplicar los más novedosos, sin más límites que su
creatividad y sin dejar de recordar que la meta real no es conseguir
un donativo, sino conseguir un bienhechor; el donativo es aislado, el
bienhechor continuará donando en diversas ocasiones, ya que se
identifica con el fin de la A.C.” (Román, 2011)
“... existen necesidades financieras que deben ser cubiertas, para
eso es necesario hacer un plan de procuración de fondos, cuyo
objetivo es lograr que la organización cuente con los recursos
financieros suficientes para alcanzar sus objetivos.” (Estraviz, 2015;
156)
“... la procuración de fondos [...] se refiere al conjunto de actividades
que realiza la organización para gestionar recursos de terceros que
permitan la operación de sus programas sociales. Por fondos
entendemos los recursos financieros en donde la participación de
diversos actores sociales: personas físicas, morales, gobierno,
cooperación internacional, fundaciones, empresas, entre otros,
invierten en un tema de desarrollo que les es común y construyen
una bolsa financiera con diversas aportaciones.” (Martínez Gil, 2012;
18)

Es innegable el rol que ha venido teniendo la ciudadanía para la solución


de los problemas en los distintos ámbitos hasta cubrir la integralidad de la
vida comunitaria, espacios en lo cultural, asistencial, ecológico, cívico,
económico, etc. De este modo es que se hace vigente la idea de que un
proyecto social no se define por la presencia o ausencia de inversión, sino
por ser una unidad organizada de gestión que busca solucionar un
problema determinado Cohen, E. y Martínez, R. (2005: 6), es decir que
82
en la práctica social existe un sin número de proyectos formulados con la
participación de diversos actores, más allá del Estado, que proponen
soluciones a las problemáticas comunes, pero que requieren
financiamiento, lo que inevitablemente nos conducirá a una búsqueda del
mismo.

Así que esta “pesquisa de recursos” es una actividad taxativa del ciclo de
los proyectos sociales, la cual se sugiere realizar con ciertos instrumentos
y técnicas que permitirán la puesta en marcha del mismo. Siempre es
difícil iniciar, pero hay que hacerlo. Muchas instituciones comienzan sin
conocimiento de alguna técnica o método, pero en el camino, conforme a
la madurez institucional que van teniendo, sin duda, han obtenido mayores
elementos para poder consolidar una estrategia que les da sustentabilidad
en el tiempo y la contundencia en su actuar.

Existe abundante literatura para poder consultar los cómo, los secretos,
los tips, y las técnicas, para la obtención de recursos para los proyectos
sociales, sin embrago, la práctica es lo que nos dará las pautas
particulares de la estrategia que cada proyecto e institución necesita. Los
referentes más citados en las guías, o artículos son de origen
estadounidense, pues se liga directamente con la “tradición filantrópica”
o de la cultura de la donación de este país, en donde si bien es cierto que
se ubican las grandes fortunas destinadas para causas sociales, también
evidencia que le modelo económico es ineficiente para poder generar
bienestar en su población, pues por ello existen proyectos sociales
privados, que desde luego facilitan la cohesión social e intervención que
se requiere para mantener el statu quo.

De tal manera que observamos, por un lado, la concentración de los


grandes capitales en unas manos y por otro el destino de grandes
porcentajes de éstos a causas sociales, realizadas de manera
institucionalizada que se dice que conforman el “mercado de los
donantes”, teniendo sus reglas del juego. Así que a nivel mundial
encontramos el caso más representativo de este esquema: la Fundación
Bill & Melinda Gates, que en el año 2010 destinó 1, 646, 624,977 dólares

83
en ayuda internacional para apoyar 553 iniciativas Foundation Center
(2012:3).

Es muy tentador pensar en una cantidad de dinero como esta fortuna para
llevar a cabo acciones de desarrollo social, si promediáramos el monto
estas subvenciones estaríamos hablando de casi tres millones de dólares
por iniciativa, cantidad nada desdeñable si de financiamiento para
proyectos sociales se trata. De pronto lo seductor se transforma en
también algo irrisorio como institución poder obtener algún monto de este
tamaño. Sin embargo, cuando se decide realizar una estrategia para la
recaudación de fondos se debe de tener en el radar la existencia de
fuentes como esta de grande, así como la más pequeña porque “muchos
de a poco” también impactan.

Una vez implementado el diagnóstico situacional de nuestro grupo o


institución en el que se ve la compatibilidad esta fuente casi es seguro que
nos cuestionaríamos: ¿Es posible acceder a un financiamiento de ellos?
Probablemente nos responderíamos de inmediato que no, por
considerarla muy lejana a la realidad mexicana, incluso a la latina pues
tradicionalmente las fundaciones privadas estadounidenses enfocan su
trabajo en las regiones más pobre en los continentes africano y asiático.

La importancia de realizar esta actividad con ciertas técnicas es reducir el


tiempo, la energía y los recursos institucionales que se tienen destinados
para ello.

Así que antes de descalificar alguna posibilidad para nuestro proyecto, se


recomienda analizar otras experiencias similares a los nuestros que ya
han sido sujetos de este financiamiento, en el caso de la Fundación Bill &
Melinda Gates, si existen propuestas mexicanas que han logrado obtener
recursos de esta fuente.

En el bagaje nacional aún persisten prácticas nocivas para la designación


de recursos de forma imparcial, por lo que además de conocer los
mecanismos para la asignación de donativos en México, no debemos de
perder de vista que aún dependen de ciertos “influyentísimos” en el ámbito
público o privado. Esto desalentará nuestra labor, al no encontrar
84
objetividad en varios de los procesos, pero también alentará a desarrollar
aquellos elementos subjetivos que nos darán fortaleza, teniendo entonces
la oportunidad de tejer con el tiempo esta red de aliados que determinen
el rumbo de nuestras propuestas recordando que es “un proceso
humano”, flexible, que requiere también de elementos relativos para poder
tener resultados tangibles, por lo que la credibilidad y confianza son tan
necesarias como una buena estrategia elaborada.

Cuando se inicia en esta actividad, sabiendo que de ella depende la


posibilidad de poder transformar las condiciones de cierta comunidad o
personas, hay coincidencia en que la mayoría surgen con recursos
tangibles muy limitados pero con recursos intangibles ilimitados (buenas
ideas, personas comprometidas), por lo cual es muy importante tener claro
que será una actividad que impulsar de manera inmediata y paralela para
ir construyendo una mejor estrategia, porque de lo contrario se estaría
retardando la posibilidad de poder lograr nuestra misión de cambiar una
realidad. Por lo general un buen recaudador es una persona directamente
relacionada con el proyecto, porque tiene la pasión y el conocimiento del
tema, pues este es proceso de varios años que irá mejorando en función
de ciertas medidas que vayamos tomando, lo que implica sistematizar
información, y formar a los colaboradores.

En lo subsecuente quisiéramos resaltar algunos pasos para lograr una


primera propuesta para poder obtener recursos para nuestros proyectos.
Recordando que, a medida de la complejidad de las acciones, y del
desarrollo organizacional las propuestas de financiamiento podrán
transformarse en estrategias institucionales de recaudación a largo plazo.

6.2 ¿Quiénes somos y para qué queremos recuadrar fondos?

Al emprender iniciativas sociales, éstas estarán permeadas por los


integrantes del núcleo de personas que pretende poner en marcha ciertas
actividades, generando una identidad específica al grupo que definirá el
rumbo de sus acciones; evidenciarlo facilitará los criterios para la
búsqueda recursos, así como la selección de las fuentes de
financiamiento.

85
Igualmente seamos un grupo que busca transformaciones desde un
ámbito acrítico al sistema económico actual, o bien grupos con posturas
opuestas a éste, ya sea en la parte autogestiva, o simplemente en la parte
de la gestión, para poder llevar a cabo nuestra propuesta requiere de
ciertos recursos para poder funcionar.

De aquí partirá la base nuestra proposición. Pensemos entonces en:


¿Cómo se financia el Kilombo Galáctico? ¿Cómo se financia la casa hogar
de la Divina Providencia?, o ¿Cómo se financia Teletón? Los tres
planteamientos son legítimos para sus grupos, cada uno se ha valido de
sus principios para hacerse de los elementos que les han permitido poner
en marcha su proyecto. También los tres, en sus portales de internet
coinciden con espacio para las donaciones de ciudadanos. Un poco más
adelante hablaremos sobre estos criterios que son necesarios para la
formulación de nuestra propuesta.

Es muy fácil caer en el impulso de hacer un planteamiento en función de


la oferta del mercado de donantes, pero esto no nos dará ni
sustentabilidad, ni credibilidad en el tiempo. Es decir que, si nuestro
proyecto surge para atender la desnutrición infantil de nuestra colonia, y
tenemos una fuente cercana cuyo objetivo es el mejoramiento del entorno
urbano, como recaudadores tal vez hagamos la propuesta; la ganemos
por la proximidad con el donante, pero la captación de fondos implica
también la construcción de una trayectoria institucional que queremos
tenga credibilidad, e incidencia en el tema. Esto, no significa que como
organizaciones no podamos cambiar de objeto social en algún momento,
pero pasar de un objeto a otro debe de obedecer más a las necesidades
comunitarias que a la existencia de una oferta financiera.

Dando pie al punto de conocer qué y para qué necesitamos los recursos,
ambos cuestionamientos están relacionados con la estrategia
institucional, perfilando el financiamiento hacia el cumplimiento de nuestra
misión y visión.

Se recomienda: nunca pedir menos de lo necesario, porque se captarán


recursos insuficientes para los proyectos, pero tampoco hay que pedir más

86
de lo requerido porque se forzarán las capacidades institucionales para su
cumplimiento.

Relacionado con esto, estará el momento de la revisión del presupuesto,


esto quiere decir que un buen resultado en este proceso dependerá en
gran medida del buen diseño del proyecto, en el que el cálculo de éste
corresponda a las metas planteadas, además de la existencia de una
planeación estratégica de la institución.

Por ello, se debe considerar la pertinencia de los recursos materiales,


humanos y los tiempos en los que se planea. En todo momento en las
solicitudes debe de estar el sentido de la prudencia, pero también la
intención de sensibilizar a la fuente de la necesidad de este recurso para
poder llevar acabo nuestra actividad.

Los gastos operativos y administrativos, resultan ser un tema controversial


casi con todas las fuentes, siendo esto un reto para la puesta en marcha
de los proyectos. En nuestro país, en 2003 según García los recursos
autogenerados (por ejemplo, cuotas, venta de productos y bienes)
constituían el 85% de los recursos de las organizaciones no lucrativas,
mientras que el financiamiento público era de alrededor del 8.5% y los
donativos solamente representaban el 6.5% de sus recursos. Si bien este
dato es de hace diez años, al no contar otra referencia documentada
similar, sólo podemos mencionar que en la actualidad las organizaciones
de la sociedad civil siguen con esta lucha del día a día, las políticas
públicas no hacen de este sector una prioridad, no se ve reflejado como
un ente necesario para poder lograr avances en la sociedad. Incluso,
existe la percepción en el sector de que hay un retroceso a todo lo logrado
al inicio del siglo.

De tal manera que se puede caer en un círculo vicioso entre escasez de


recursos y baja profesionalización, por no contar con programas de
capacitación constantes, personal especializado para cada área o
condiciones laborales que alienten la permanencia.

Especialmente, la parte de recursos humanos es un renglón difícil de


impulsar con las fuentes. Se recomienda entonces informarse sobre las
87
tendencias salariales, que puede ser por medio de las bolsas de trabajo
especializado en organizaciones de la sociedad civil, las convocatorias de
las vacantes de los organismos públicos o privados con temas a fin.

Se trata de ir construyendo una estrategia institucional que permita por un


lado cubrir las actividades que darán un beneficio de manera directa a la
población, sin detrimento también de la remuneración y derechos
laborales de los profesionales a cargo.

Usualmente un buen proyecto no debe de rebasar cierto porcentaje en


estos dos rubros, el cinco para administración y quince para la operación.
Como organizaciones sociales, nos da escalofríos pensar en ser
equiparadas en nuestro funcionamiento como el de una empresa, pero
fiscalmente en México también tenemos este tope que cumplir en los
gastos administrativos del 5% según el Art. 10 del Reglamento de la Ley
del ISR 2014.

A propósito de este tema, vale la pena hacer un paréntesis, a medida de


que la fuente está más institucionalizada, a que el tamaño de los montos
de los recursos que se solicitan es son más significativos, a la complejidad
de los proyectos; los requisitos legales y fiscales, serán proporcionales,
por lo que también se recomienda definir hacia dónde va el núcleo de
personas a cargo del proyecto, sin son colectivos, organizaciones
constituidas legalmente etc. para que así puedan tener todos los requisitos
en un plazo de tiempo aceptable. En estos temas tanto el Centro Mexicano
de Filantropía (CEMEFI), como el Instituto Nacional de Desarrollo Social
(INDESOL) tienen abundante material de consulta de gran utilidad en sus
páginas web.

Lo mismo sucede al momento de mostrar nuestros resultados, los cuales


serán analizados costo-beneficio o “rentabilidad social”, por lo tanto,
debemos de estar preparados a este tipo de respuestas. Por ejemplo,
cuánto nos cuesta un tratamiento para un niño con cáncer durante un año,
la estancia de un adulto mayor en una casa de los abuelos, un curso de
producción de hortalizas, un tratamiento para un niño en desnutrición en
el campo o en la ciudad, una campaña contra el racismo, etc.

88
Igualmente, lo que pareciera evidente, se convierte en todo un reto como
profesionales sociales el mostrar cual es impacto o el cambio que le
producirá esta intervención, cual es la diferencia entre estar o no estar,
luego que seremos comparados con otras propuestas que también están
solicitando el recurso. Organizacionalmente esto se analiza
colectivamente en forma de evaluación. Por lo habrá que invertir dinero y
tiempo en esta labor.

Desde una perspectiva financiera, podemos hacer un listado que puede


ser muy básico, con objetivos, actividades, y costos, dado que es la
información que se requiere para visibilizar la vialidad del proyecto (Ver
Cuadro 2).

Al principio siempre nuestras actividades requerirán un mayor


presupuesto, suponiendo que iniciamos con esa gran idea que ya es
proyecto, pero que aún no tiene recursos. Cuando es el nacimiento de un
proyecto nos encontramos en situación de desventaja frente a otras
intuiciones que llevan más años, porque se han hecho de cierto equipo,
incluso patrimonio, pero la razón de nuestra existencia se centra en que
sabemos que no existe grupo alguno que trabaje esta idea en el espacio
que hemos detectado la necesidad. La ventaja de propuestas nuevas es
que tal vez exista un equilibrio en los costos porque seguramente habrá
horas hombre- invertidas de manera voluntaria, que se cuenta con toda la
pasión que implica el nacimiento de una propuesta.

Como hemos mencionado líneas arriba, es un proceso a largo plazo, las


primeras actividades son la base de una institución o propuesta que se
pretende perdure en el tiempo, lo cual no significa que siempre siga igual,
porque eso podría ir de la institucionalización a la burocratización de
nuestros procesos.

En México, existen organizaciones especializadas en captar un porcentaje


importante de los donativos de los ciudadanos, pero, pocas veces dan a
conocer la totalidad de su funcionamiento. Pensemos, en la última vez que
nos pidieron fondos en la calle en los famosos boteos, en los redondeos
de los supermercados o el uso de espacios en los medios masivos de

89
comunicación para promover una “causa social”, seguramente nos
vendrán cuatro o cinco instituciones a la mente. Ahora bien, de ellas,
reflexionemos si la solicitud trae consigo el retorno de información sobre
en qué y cómo gastaron sus recursos. Esto no les resta su valor o la
veracidad de sus actividades, sin embargo, queda inconcluso el proceso
de informar a sus donantes. Entonces, se suma otro componente
sustancial, la forma de transparentar nuestra actividad como parte ahora
del círculo virtuoso de la recaudación de fondos.

Direccionemos nuestras energías hacia el tipo de organización que


queremos ser. Así como existen organizaciones que han fallado en su
función social, el cual está relacionado directamente con el manejo de sus
recursos, como lo es el caso de Vamos México de Martha Sahagún de
Fox, o Pro Vida con Jorge Serrano Limón, por citar los escándalos más
sonados. Existen también, las instituciones que han podido perdurar,
transformarse, ser irremplazables en el ámbito por su función. Sólo como
breviario ético, hay que tener presente que lo que hagamos como
institución, impacta no sólo a nuestro curriculum vitae organizacional,
también le suma o resta al conjunto.

Lo que parece una labor tediosa si lo hacemos hábito, será un banco de


información institucional que nos ahorrará en algún momento recursos,
además de que nos brindará herramientas para ofrecer transparencia
tanto al interior como al exterior. Aquí un formato para realizar los costos
de nuestras actividades, considerando los recursos que contamos dado
que a la fuente le gusta saber en qué etapa de éstas participará.

Objetivo Costo para llevarlo acabo MONTO Monto con Monto


/Actividades TOTAL el que Faltante
contamos
Recursos Recursos Otros
Humanos Materiales

Cuadro 2: Presupuesto de Objetivos y Actividades. T E A R F U N D (2004)

90
Los formatos para almacenar la información financiera del proyecto
pueden ser tomados de los manuales existentes por las fuentes. Abajo se
muestra el de la Agencia Española de Cooperación (AEC), en el que
organiza las actividades en costes directos e indirectos, nos pide la
equivalencia en euros, con un recuadro especial para poner a otros
aportantes, la tendencia en general sea una fuente pública o privada, es
motivar la concurrencia de otras financiadoras. Esto significa solidez,
confianza por la capacidad de articulación de nuestra institución, y
también mayor “rendimiento social” al focalizar los esfuerzos en un rumbo.

PARTIDAS
COSTE APORTACIÓN OTRAS APORTACIÓN
TOTAL DE ENTIDAD APORTACIONES SGCID
LA SOLICITANTE
ACTIVIDAD Euros Euros Euros
Euros
A. COSTES
DIRECTOS
B. COSTES
INDIRECTOS*
*Gastos propios
del
funcionamiento
regular de la
Fundación,
imputándose los
incurridos
dentro del
periodo de
ejecución de las
actividades
hasta un
importe máximo
del 12 % del
total de la
subvención
concedida
TOTAL,
GENERAL.
EUROS
Cuadro 3: Presupuesto programado para la presentación de propuestas de la convocatoria
de subvenciones para la celebración de congresos, seminarios y jornadas relacionadas con
la cooperación al desarrollo de la AEC.

91
Para cerrar este apartado, podemos reflexionar que existe una relación
simbiótica entre el cumplimiento de la misión y la necesidad de fortalecer
los aspectos institucionales, de tal manera que para poder implementar
proyectos eficaces se requiere de fondos; para recaudar los recursos
financieros necesarios hay que instituir una buena administración y
credibilidad.

Recordemos que la aprobación o aceptación de nuestro proyecto, ya sea


por medio de una convocatoria abierta, la presentación a solicitud de la
fuente, o apoyo del público en general, en su mayoría de las ocasiones,
se hace de manera colegiada y multidisciplinaria, por lo que habrá de ir
ubicando esos aspectos que son de interés para cada uno de ellos,
además de que a un procurador de fondos también en ocasiones le tocará
el papel de evaluador de proyectos por lo que debemos de ir colectando
los elementos institucionales que sumen a su organización con un sentido
autocrítico.

6.3 Sobre el Círculo Virtuoso de la Recaudación de Fondos

Hemos mencionado que conseguir el financiamiento de proyectos sociales


y actividades institucionales es el resultado de la articulación de diversos
actores, fuera como dentro de la organización, así como de la coincidencia
de elementos técnicos, pero también de elementos subjetivos dentro del
proceso. De igual manera que los proyectos sociales tienen un ciclo, éste
por ser un proceso también lo tiene.

Autores como Nina Booting, Elizabeth Westman, o Ernesto Rowe, hablan


de una u otra forma del Círculo Virtuoso de la Recaudación de Fondos, en
el que existen ciertos eventos que se repiten como causa y efecto para
generar los resultados deseados en la captación de recursos.

En este caso mencionaremos siete momentos que conforman el círculo


virtuoso, el cual si se practica será ineludible el regreso al principio para
repetir la secuencia y reforzar el resultado. Éstos son: I) La identificación
de los prospectos; II) La investigación; III) La cultivación; IV) La solicitud;
V) El agradecimiento e información; VI) nuevamente la cultivación y VII)
La Renovación.
92
Recordemos que casi ninguna institución cuenta con los recursos
necesarios para poder dedicarse sólo a su objeto social, por lo que se
tiene que destinar tiempo y personal para poder hacerse de dinero para
sus proyectos. La actividad de recuadrar va mejorando a medida que la
institución va madurando porque se irá profesionalizando. Contemplar los
siete momentos del ciclo, son una buena pauta para poder realizar nuestra
estrategia de recaudación.

Diagrama 1: Círculo Virtuoso de la Recaudación de Fondos. Rowe (2010)

I. Identificar Prospectos

Cuando nos encontramos en el mapeo de los actores en el diseño


de nuestro proyecto, comienzan a perfilarse aquéllos que podrían
participar con recursos materiales, humanos, y financieros, así que
son nuestros prospectos. Construir alianzas que generen beneficios
mutuos es lo que le dará mayor potencial a nuestra propuesta para
ser apoyados.

Realizar una especie de análisis de quién es quién en nuestro


proyecto contribuirá a hacer planteamientos más certeros. De pronto
varios de los actores de nuestro proyecto se transformarán en
potenciales proveedores de financiamiento. Se recomienda iniciar
por los más cercanos a nosotros o nuestra institución. Proponemos
trabajar en otra lista derivada de la matriz de actores sociales,
pensemos en cuáles son sus intereses y en su potencial de
93
financiamiento. Solicitemos las visiones del personal operativo,
directivo, órgano de gobierno, y destinatarios de nuestros proyectos
para poder tener distintas perspectivas.

Seguramente, este inventario estará conformado por nombres de


personas ligadas al tema que tienen capacidad de aportar recursos
en pequeñas cantidades, de nombres de personas que tienen
capacidad de aportar cantidades grandes, gobierno (en su ámbito
local, estatal y nacional), empresas, universidades, fondos privados
nacionales, y financiamiento internacional de gobiernos, u otras
Organizaciones No Gubernamentales. Existen diversas tipologías
de los donantes, pero la mayoría coincide que están conformados
por estos actores.

Actor Intereses Potencial de


Financiamiento

Cuadro 4: Listado de identificación de prospectos.

Analicemos entonces tres momentos diferentes para su identificación: 1)


Quiénes pensamos que deberían de financiarnos, 2) Qué interés podrían
tener en financiarnos y 3) Queremos que nos financien.

Es importante reflexionar en estos puntos, pues no siempre los que


pensamos estarán dispuestos a financiarnos, ni siempre es posible
trabajar con los que están interesados en apoyarnos. Por un lado, lo que
pensamos tal vez ya ese hayan comprometido con otras causas, y los que
están interesados en apoyarnos pueden generar un dilema ético que
influya en el rumbo de nuestro proyecto. Por ejemplo, la presencia de un
partido político, o bien procedencia de un recurso ilícito. Por consiguiente,
un lugar intermedio de este análisis se encuentra la fase de detectar que
interés podrían tener para descartar a los prospectos que tuvieran otra
intencionalidad fuera del objetivo del proyecto.

94
Una vez definidas personas e instituciones “meta” nos enfrentaremos a la
realidad de La ley 80/20, esto quiere decir que del número del total de
intentos habrá un porcentaje reducido de aceptaciones. Esto no significa
que nunca lo lograremos, ni tampoco que sea un aliciente para que la
actividad de procuración se paralice, todo lo contrario, debemos de tener
la capacidad de poder ir monitoreando hasta qué grado hemos avanzado,
y luego también de evaluarnos.

En un sentido muy práctico y tangible para esta actividad resulta muy útil
desarrollar una base central de datos de donantes y asegurarnos de que
se mantenga actualizada. La información importante que debe guardarse
incluye nombres, datos de los contactos y de las donaciones.

Realicemos también un archivo de donantes:

Nombre del donante


Cuánto apoyo solicitamos
Nombre y posición de la persona
a quien
Contactamos
Fecha en que se envió la solicitud
o que se tuvo el
Fecha esperada de decisión
Acción de seguimiento necesaria
Acción de seguimiento realizada
Cuadro 5: Archivo de Donantes. T E A R F U N D 2 0 0 4

A mejor y mayor información almacenada, el seguimiento y la continuidad


será mayor sin importar algún cambio de personal.

II. Investigar

Para recaudar fondos necesitamos averiguar qué financiamiento está


disponible, cuál es el contexto de las institucionales en general, la
situación de la problemática a atender en sus distintos niveles, y la oferta
institucional de los donantes.

95
Si de lo que se trata es ampliar nuestra capacidad de financiamiento,
puede ser de ayuda observar cuál es la actitud hacia el dinero en nuestra
región. Por ejemplo: ¿Qué concepto tienen del dinero las instituciones y
los individuos? ¿Dar dinero forma parte de la cultura local? ¿Qué actitudes
tiene la gente hacia el trabajo de las organizaciones sociales?

El Instituto Tecnológico Autónomo de México realizó en el 2005 la


Encuesta Nacional de Filantropía y Sociedad Civil (ENAFI), en la que se
analizan las actitudes que tiene la población mexicana hacia el trabajo de
las organizaciones de desarrollo y la donación de dinero, evidenciando
que el 67% de los mexicanos no realizó donación alguna en el último año,
cifra nada desalentadora si se considera que existe un 33% que si lo hizo,
lo que significan alrededor de 34 millones de personas.

Sin embargo, quienes sí contribuyeron con dinero en efectivo, el 77% lo


hizo a través de limosnas a los indigentes y no a través de alguna
organización, es decir que la mayoría de los mexicanos que hacen
donativos prefieren hacerlo de manera directa, dejando de lado la
oportunidad que implica tener organizaciones que atiendan las
necesidades de la población.

Entonces nos enfrentaremos a una sociedad solidaria pero no organizada,


en el que la desconfianza (poca transparencia), la debilidad organizacional
(bajo nivel de profesionalismo), la escasez de fondos (en parte por no
hacer una labor correcta de procuración de fondos), la situación
económica del país, pero también política, son factores que inhiben esta
actividad, por lo que a mayor información del contexto en el que nos
encontramos tengamos, más certeros serán nuestros planteamientos.

La “Cuenta Satélite de las Instituciones Sin Fines de Lucro de México”


(CSISFLM) serie 2008-2011 elaborada por el INEGI, también es una
fuente de información muy útil para sensibilizar al donante hablando en
los mismos términos que el sector económico del país, pues es un
esfuerzo para visibilizarse la participación del sector en la economía. Así
que, durante 2011, el PIB de las Instituciones Sin Fines de Lucro (ISFL)

96
alcanzó un monto de 316 mil 394 millones de pesos. Al añadir el valor
económico del trabajo no voluntario de las organizaciones no lucrativas se
observa que el PIB ampliado ascendió a 365 mil 951 millones de pesos (lo
que representó el 2.6% del PIB total del país), es decir que más de dos
pesos de cada 100 de la riqueza producida en dicho año correspondería
a las organizaciones privadas sin ánimo de lucro y a la valoración
económica del trabajo de sus voluntarios.

Otro aspecto que puede ser de gran ayuda, de este censo, se refiere al de
observar cuales son las organizaciones sociales que más están aportando
a la producción de la riqueza del país, encontrando que las que se enfocan
a la enseñanza y la investigación concentran el 51.7% del PIB generado;
en el impulso al desarrollo y la vivienda 11.8%, y en las congregaciones y
organizaciones religiosas 10.1%. Por lo cual, si nos dedicamos a la
enseñanza e investigación, será importante mencionar este dato al
momento de contextualizar el planteamiento con la fuente.

En cambio, si nos dedicamos a la salud y a los servicios sociales, haciendo


uso de esta misma fuente, reivindicaremos que son los dos sectores que
mayor capacidad tienen de generar trabajo voluntario, contabilizado ya
como parte del PIB ampliado en el que se valoriza esta función,
representando el 22% y 16.5 %.

Datos como estos son la base de la defensa de nuestra propuesta,


apoyándonos para realizar enunciados como, por ejemplo: somos una de
las 2072 organizaciones que trabajan en el D.F o bien una de las 51 que
existen en Baja California.

Para llegar a un simple enunciado, pero con potencia para sensibilizar, es


importante haber hecho toda una labor de investigación. Esto en cuanto a
la justificación de nuestra existencia como institución.

Lo mismo sucede cuando debemos de dar los antecedentes de nuestra


causa. Cómo se encuentra la situación a nivel internacional, nacional,

97
estatal, municipal, y local según las estadísticas formales, para
complementarlo con nuestros diagnósticos comunitarios.

Para ello, se puede consultar estudios como lo son el Informe sobre


Desarrollo Humano del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD), publicaciones del Banco Mundial (BM), publicaciones
de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL),
publicaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos (OCDE), Publicaciones de la Organización de las Naciones
Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), entre otras.
Por ejemplo, si nuestro tema es cambio climático, movilidad humana,
pobreza y cooperación internacional, podremos hacer uso de los reportes
del informe sobre Desarrollo Humano de Naciones Unidas.
Específicamente, para la averiguación de nuestros prospectos, una forma
muy práctica de hacernos de información en este tema es unirse a una
red de recaudación de fondos. Las redes proveen la oportunidad para que
los recaudadores de fondos y las organizaciones de desarrollo de
compartan sus ideas y la información acerca de posibilidades de
financiamiento. Pueden ser nacionales como CEMEFI, Fondos a la Vista,
Procura A.C., o internacionales. Portales como el de Foundation Center
tienen directorios gratuitos de donantes globales.

Tapia Cuellar y Carrillo (2010:35) desarrollaron un cuadro muy útil de


Fuentes de consulta y capacitación en recaudación de fondos.
 Association of Fundraising Professionals, www.afpnet.org
(Bajo chapters se encuentran los distintos capítulos que
existen en México)
• Centro Mexicano para la Filantropía, www.cemefi.org
En Línea

• Foundation Center, www.foundationcenter.org


• Grassroots Institute for Fundraising Training,
www.grassrootsfundraising.org
• The Fund Raising School, Indiana University,
www.iupui.edu/TheFundRaisingSchool
• The Grantsmanship Center, www.tgci.com

98
Talleres y • Association of Fundraising Professionals, www.afpnet.org
Cursos • Centro para el Fortalecimiento de la Sociedad Civil,
www.fortalecimiento.org
• Fundación Murrieta, A.C., www.fundacionmurrieta.org.mx
• Procura, A.C. www.procura.org.mx
 Elizabeth Westman Wilson, Building structures and skills for
fundraising. Elizabeth Wilson and KIT, Publishers, Canada,
2001.
• Jane C. Geever, Guía para escribir propuestas. Colección Guías
Bibliografía

para la Recaudación de Fondos.


Foundation Center. EUA, 2008.
• Nina Botting y Michael Norton, The complete fundraising
handbook. Directory of social change in
association with The Institute of Fundraising, Londres, 2004.
• Procura, Procuración de fondos. Colección Experiencias
Significativas. Procura A.C. México, 2004.
Cuadro 6. Fuentes de consulta y capacitación en recaudación de
fondos. Tapia Cuellar y Carrillo (2010:35)

Aunque la oferta de información en línea es cuantiosa, se recomienda


siempre estar en eventos del sector por lo general también asisten los
donantes.

III. Cultivar

A medida que vamos tendiendo claridad en qué se quiere, para qué y


quién podrían ser los posibles aliados, debemos de ir direccionado nuestra
labor para dar a conocer nuestro proyecto.

Como mencionamos anteriormente por ser un proceso sobre todo


humano, la captación de fondos establece que hay que desarrollar y
mantener relaciones a largo plazo con los donantes, sin banalizar el
esfuerzo a una serie de transacciones monetarias, porque de hecho
difícilmente se daría.

99
Inicia entonces el proceso de friends raising before fund raising (captar
amigos antes de captar fondos), como se ha mencionado las aportaciones
no son exclusivas en dinero, hay colaboraciones en especie y en tiempo.
El contar con un aliado que se ha comprometido con la causa sobre todo
a título personal, significa que impulsará al proyecto de desde el ámbito
en el que se encuentre, un comentario a favor, en algún momento se
traducirá en algún fondo, a medida que nuestra red sea mayor se
incrementan las posibilidades de acercamiento con más y nuevas fuentes.

Sobre el trato con los donantes, se sugiere abordarlos de forma individual,


considerando que cada uno de ellos es único en su historial de apoyo, su
motivación para contribuir y sus expectativas hacia la organización. Las
decisiones en materia de captación de fondos deben ser adoptadas
teniendo en cuenta el valor percibido por el donante en su relación global
con la organización.

Se trata de ofrecer la libertad de elección del donante. A menudo se


consultan sus preferencias sobre el contenido, el medio y la frecuencia de
las comunicaciones que se le dirigirán. De este modo, el donante se siente
más importante.

Aunque la atención es individualizada, un principio que funciona es el de


tratar a todos los donantes por igual, refiriendo en el buen sentido a darle
una atención no diferenciada en función de sus aportaciones,
técnicamente es un sistema más caro, pero a la larga incrementa la
lealtad, con lo que la fuente de ingresos se mantiene durante más tiempo.

El cultivar implica dedicación con el donante para encaminar a que éste


se sienta muy satisfecho con su experiencia de donación y desee repetirla
e incluso incrementarla. Esto requiere de más comunicaciones que no
tienen como fin recaudar fondos, sino tan sólo informar e intercambiar
visiones.

Para iniciar demos por sentado que el donante no sabe nada acerca de
nuestra organización ni de nuestro trabajo. Al desarrollar material visual

100
de apoyo podemos realizar las siguientes pregunta guía como son: ¿Qué
es lo que el donante necesita y no necesita saber?, y, ¿Qué queremos
que sepan que podría direccionar su decisión de donar dinero?

Sobre los impulsos en el que podemos caer es en exagerar la verdad con


el fin de que el llamado a proveer fondos parezca más urgente. El riesgo
es que la deshonestidad puede afectar más que ayudar a la imagen de
nuestra organización.

Pensar con cuidado cuándo dirigirse a los donantes beneficia al proceso.


Por ejemplo, así como algunos donantes institucionales tienen una fecha
límite para recibir solicitudes, también, existen otros que estén buscando
una organización a la cual darle dinero casi al cierre del año fiscal, en uno
u otro caso, habría que haber hecho ya una labor de acercamiento para
conocer estos tiempos.

Para alimentar la comunicación con ellos, podríamos aprovechar


ocasiones importantes en la historia de nuestra organización, como un
aniversario o bien pensar en usar celebraciones del calendario cultural de
nuestro país para recaudar fondos. Propiciar el encuentro entre los
donantes de la institución permite mostrar que es un proyecto de valorado
por muchos, además de lo significativo que es la confluencia de diversas
visiones para la solución de ciertos problemas.

Debemos de planearnos que queremos significarle a nuestro donante, si


somos una más de las organizaciones a las que apoyará durante su
trayectoria o habremos marcado alguna diferencia, como por ejemplo
haberle brindado una experiencia distinta y valiosa. Démosle la confianza
de acercarse a la institución, sin que necesariamente recibamos un
donativo, también el intercambio profesional enriquece a la organización.
Aprovechemos las oportunidades que se nos presentan, también las
instituciones donantes por muy sólidas y fuertes que parezcan, en algún
momento se les presentan emergencias en las que necesitan visibilizar
sus resultados, estemos listos con nuestro proyecto, hagamos de su
urgencia la nuestra respondiendo lo antes posible. Algunas fuentes

101
aseguran que una vez realizado el depósito de la ayuda resulta difícil o
muy fría la comunicación con las instituciones apoyadas, pensemos en las
particularidades de su institución, de qué manera nosotros podemos
sumarle a su organización ya a su espacio laboral.

Trabajar con diversos actores para la colaboración en un proyecto social,


implica también ampliar la capacidad de adaptación de nuestro proceso,
lo que para un gobierno puede ser importante, para una empresa puede
no serlo, aunque existen líneas en las que la mayoría si coincide.

La mejor recomendación es la que se hace de persona a persona,


mantengamos abierto el proyecto a personas sin que necesariamente
aporten algún recurso, asistamos a congresos, conferencias cursos,
haciendo evidente nuestra presencia.

En la práctica los paquetes de bienvenida están pensados para estimular


al nuevo donante a que profundice en el conocimiento de la organización,
que puede ser muy superficial. En este tema también un buen número de
guías para desarrollar este material como, por ejemplo: Smart Chart 3.0
(Gráfico Inteligente) es una herramienta gratuita para organizaciones no
lucrativas en el desarrollo de planes de comunicación estratégica,
diseñada para profesionales del ramo, pero sin experiencia en el área de
la comunicación. Es un formato interactivo que está disponible en
www.smartchart.org

Mención especial merecen las estrategias de recaudación de fondos de


organizaciones como Greenpeace o Amnistía Internacional, quienes
tienen una comunicación constante con sus socios. Se dice que los
primeros dos años, son determinantes para poder conservar a nuestras
fuentes, porque estiman que al término de una primera etapa de
“enamoramiento” muchos se enfrían y abandonan la organización.
Observemos nuestro entorno que instituciones están más presentes en
los distintitos espacios públicos. Imaginemos o mejor aún averigüemos los
caminos que trazaron para estar ahí. Casi el inicio fue porque un conocido

102
le comentó que un amigo está buscando una causa que apoyar, un
proyecto social que atiende de manera efectiva ciertas necesidades etc.

La comunicación de los programas de desarrollo de donantes se realiza a


través de uno o varios de estos canales: cartas, e-mails, llamadas
telefónicas, boletines o revistas impresas, e-boletines, reuniones o
invitación a eventos abiertos al público y conversaciones cara a cara.

Las propuestas de incentivación pueden ser muy variadas: formar parte


de un club de grandes donantes, dar contribuciones no finalistas (para los
donantes vinculados proyectos), patrocinar un área de trabajo o un
beneficiario.

Pensemos en que, si queremos tener sustentabilidad en el tiempo, esta


depende en gran medida de los soportes que tengamos, si logramos hacer
vínculos sólidos seguramente por varios años estarán presentes en
nuestra institución.

IV. Solicitar

Uno de los periodos más complicados para poder captar el recurso para
nuestro proyecto es el de hacer la solitud. En la mayoría de las ocasiones
a la hora de realizarlo se encuentra el temor de que la respuesta sea no,
asumamos que esta variable estará siempre implícita, pero hagamos
planteamientos que les permitan tener la información que necesitarán para
poder decidir si financiarnos.

Las maneras en que habremos de hacer las solicitudes están en función


de la estrategias que elegimos para hacerlo como por ejemplo:
propuestas a proyectos a fundaciones, gobierno o empresas; solicitudes
en persona, por teléfono, por correo electrónico, por radio o televisión,
solicitudes y donaciones en el lugar del trabajo vía deducciones, por
nómina; campañas de redondeo, mercadotecnia con causa, eventos
especiales; venta de productos, bazares colectas, cuotas por servicios,
membrecías, o apadrinamientos.

103
Una vez que hemos identificado nuestra variedad de financiamiento,
necesitamos pensar en la información que necesitarán tener para poder
decidir si financiarnos o no. Tendremos que compartir la información con
diferentes donantes de maneras diferentes. El tipo y la cantidad de
información que necesitarán también variará. Por ejemplo, un folleto
quizás sea adecuado para donantes particulares, mientras que los
donantes institucionales por lo general exigirán que se complete un
detallado formulario a modo de solicitud.

Es valioso escribir un documento que contenga toda la información que se


pueda necesitar para nuestro trabajo de recaudación de fondos. Una vez
que esté escrito este documento, nuestro trabajo de recaudación se hace
más fácil. Cuando queremos abordar una clase específica de donante,
podemos utilizar las porciones de la información que necesitemos. Es una
labor ardua, de alto entendimiento de nuestro proyecto, que seguramente
se irá logrando con el paso de los años.

Idealmente debe de cubrir los siguientes puntos:

 Fecha de última actualización de documento.

 Información sobre la organización (cuándo, para qué y por quién fue


fundada, lugar, datos para ponerse en contacto, cantidad de
personal, incluyendo empleados a tiempo completo, tiempo parcial
y voluntarios, ingreso anual, y de dónde proviene, declaración de
misión, logros importantes durante los últimos cinco años,
conexiones con otras organizaciones).

 Información acerca del trabajo de la organización prioridades y


actividades actuales, a quién sirve la organización, por qué es
importante el trabajo de la organización, qué sucederá si la situación
continúa sin contar con nuestra ayuda, crecimiento reciente en la
organización y en las demandas de sus servicios, información
acerca de proyectos pasados, actuales y futuros, incluyendo: la
necesidad a la que se está respondiendo, por qué se necesita el

104
proyecto, por qué la organización debe involucrarse, los objetivos
del proyecto, cómo se lograrán los objetivos, personal que
participará y su experiencia beneficiarios (quiénes, dónde, cómo,
cuántos),presupuesto, impacto, firmantes.

 Lista de personas que podrían firmar la solicitud, como, por ejemplo:


coordinador del proyecto, recaudador de fondos, director, presidente
de la directiva.

Es importante guardar el documento en una carpeta, junto con otra


información, como informes anuales, cuentas, estudios de caso,
resúmenes ejecutivos para proyectos y recortes recientes de diarios
y revistas.

Contando con esta información, consideremos que llegará la hora


también de la entrevista personal, en varias de las modalidades de
las estrategias de recaudación. Hay herramientas que podemos
usar para ayudarnos a hacerlo:

1) Escriban una descripción en pocas palabras de lo que hace nuestra


organización. Este es un muy buen ejercicio y es muy útil cuando la
gente pregunta, ¿Qué hace su organización?

2) Recuerden y compartan los argumentos que han entusiasmo a los


donantes.

V. Agradecer e Informar

Todos los proyectos deben contemplar la aplicación de un programa de


agradecimiento a los donantes, que sea parte de las funciones operativas
ordinarias.

El ingreso por aportaciones de donantes podrá no ser el sustento de una


organización, pero aun así el agradecimiento se convertirá en la
conclusión de la tarea de captación. Es decir, el trabajo de obtener
105
recursos no termina con la recepción del dinero del benefactor, tal vez es
allí donde comienza; porque el verdadero esfuerzo implica un seguimiento
tenaz y persistente que logre convertir al donante en un miembro activo
de la institución.

Esto significa que, aunque una persona no se haya decidido todavía a


donar su apoyo, merece un reconocimiento por el tiempo brindado al
procurador.

Agradecer es una actitud, no una retribución. Por eso, los agradecimientos


deben ser sinceros, y no servibles. Dar las gracias no conlleva grandes
gastos, porque la mayoría de las veces la ostentación genera
desconfianza en los bienhechores; se trata de tenerlos presentes con
detalles mínimos que reflejen lo importantes que son para el proyecto.

Cuando los resultados son visibles, es decir que cuando el proyecto ha


funcionado para transformar una realidad significativamente, entonces el
agradecimiento de pronto se torna aún más genuino. También nosotros
hagamos a la inversa un buen comentario por parte de nosotros de esa
institución en distintos espacios también es una manera de retribuir su
colaboración.

Aunque actualmente a medida que también se institucionaliza la manera


de asignar donativos, la labor de informar es parte del monitoreo por lo
que debemos de estar pendientes de la operación del proyecto. A
continuación, enlistamos alguno de estos instrumentos, que tienen que ver
con el proceso de informar:

• Informes de actividades: La organización informa sobre las actividades


realizadas en el periodo, en relación a lo propuesto por el proyecto.
• Informes financieros: La organización informa el avance de gastos del
proyecto. Esto puede incluir un breve reporte de rubros del presupuesto
del proyecto y los gastos realizados a la fecha, o una relación de todos los
gastos con copia de facturas, por ejemplo.
• Informes parciales: Tomando como base la información asentada en el
proyecto original, la organización informa sobre sus avances. Si los

106
proyectos duran varios años, se pueden pedir varios informes parciales,
para observar el ritmo con que se alcanzan los logros. Una vez recibidos
estos informes, es recomendable analizarlos y emitir una opinión, de
manera que si hay rubros atrasados el donante pueda pedir más
información a la donataria.
• Informe final: La donataria da cuenta de todos los logros del proyecto
financiado. Se sugiere pedir alguna evidencia gráfica y documental del
proyecto (fotografías, folletos/ libros editados con el financiamiento
recibido, por ejemplo).
• Visitas de campo: Las visitas al sitio donde se realiza el proyecto son
útiles para recabar información y estrechar la relación entre el donante y
las donatarias. Se sugiere preparar la visita con una guía. Las visitas
pueden ser anunciadas y no anunciadas.

Un punto a considerar es que los donantes mexicanos se enfocan más a


las revisiones administrativas, por lo que impide utilizar el monitoreo y la
evaluación para estos otros fines de cercanía.

Comparando las respuestas de OSCs mexicanas con las de una encuesta


publicada por la revista Alliance for Philanthropy and Social Investment
Worldwide, puede verse que las OSCs mexicanas perciben que los
donantes utilizan los informes sobre todo para ver cómo se usaron los
recursos (79%, contra 59% en el caso internacional), y menos para ver los
resultados del proyecto (63%), el progreso hacia cambios de largo plazo
(42%) y los aprendizajes (31%) que sus contrapartes internacionales
(76%, 62% y 51%, respectivamente) (Verduzco et al., 2009), pero es algo
que no debemos de perder en nuestro espectro.

VI. Cultivar

¿Qué sucede cuando nuestro periodo de financiamiento a concluido o


cuándo ya nos han apoyados por varios periodos? Así como hemos
preparado una estrategia de ingreso, también es importante generar una
estrategia de desprendimiento, se recomienda cerrar conforme a sus
lineamientos, entrega de documentación, reportes que el proyecto ya está
concluido.
107
Cerrar una colaboración de recursos, no implica clausurar la relación con
la fuente, por lo general le gusta continuar recibiendo noticias nuestras,
pues fueron parte del proceso, también como una forma de cultivar un
posible aliado futuro.

Si el donante quedó satisfecho con el manejo de su donativo, aunque


institucionalmente tenga la limitante de apoyarnos por varios periodos, es
muy frecuente recibir ayuda a la organización o prepararla para conseguir
fuentes de fondos alternativas, ya sea sirviéndole como referencia, o
asesorándola para acercarse a ellos.

Existen niveles de relaciones y perspectivas tan diversas que el haber


dado de frutos también puede conducirnos a que el donante esté
interesado en ayudar a otras organizaciones a replicar un modelo o
método que desarrollamos, o bien hacernos sus futuras dictaminadoras
de otros donativos. Por ello, cultivar implica la perspectiva de largas y
duraderas relaciones.

VII. Renovar

Cuando hablamos de renovar, se entiende que es el fin del ciclo de la


recaudación, la aplicación del donativo habrá concluido, el proyecto está
cerrado cuando ninguna parte tiene una actividad pendiente de los
compromisos adquiridos. Entonces nos encontramos en la fase del círculo
de volver a empezar, para refrendar nuestros vínculos. Como institución
bonificada por lo general la expectativa es contar con el apoyo permanente
de esta fuente, hacer de la relación un matrimonio durable, en el que se
convierta en nuestro proveedor perpetuo.

Sin embargo, por ser la tendencia en los proyectos sociales la búsqueda


de la sustentabilidad y auto sustentabilidad habrá un momento en el que
se concluya la relación. Por lo que la renovación se refiere más a una
revisión constante de nuestra estrategia, para poder tener detectados
prospectos a manera de que en nuestra planeación no se deje de realizar
esta función. Revisar, replantear, recapitular habrán de ser las actividades

108
para poder renovar e innovar en nuestro proceso de procuración de
fondos.

Consideraciones Finales

El proceso de recaudar fondos es una actividad constante, ineludible a la


búsqueda de posibilidades de poder emprender actividades que busquen
equilibrar, compensar, transformar lo que no nos gusta como sociedades.

Reivindicar los derechos sociales, económicos, ambientales, y culturales,


implican una serie de acciones que si se conoce lo que ya han hecho otros
y cómo lo han hecho reducen el camino para poder efectuarlo.

Al ser sujetos de financiamiento, significa que hemos logrado cierto grado


de orden institucional, una estructura humana comprometida, un proyecto
valioso y un manejo económico sano.

Invirtamos nuestro trabajo hacia la construcción de proyectos valiosos,


infaliblemente nos conducirá a oportunidades de financiamiento, pero
sobre todo a realizar acciones en cadena que irradian otros ámbitos.

Los obstáculos a los que habremos de enfrentarnos son la desconfianza


interpersonal y en las instituciones (poca transparencia), falta de
capacidad para recaudar fondos, pobre capacidad para reclutar voluntario,
debilidad organizacional (bajo nivel de profesionalismo), a una sociedad
solidaria pero no organizada y la situación económica del país.
La procuración de recursos y fondos se sustenta en un incesante trabajo
de relaciones públicas. Es imprescindible que logremos que los que
aportan no se sientan solo “donantes” sino aliados estratégicos de
nuestros proyectos y parte importante de los mismos.

Si bien es cierto que a nivel macro las donaciones no representan un


monto significativo de la riqueza mundial, pensemos que este también es
un mecanismo de lucha contra las desigualdades sociales, es una
transferencia en la búsqueda de la tan anhelada equidad social.

109
110
Conclusiones, hallazgos y
proyecciones.
La planeación Social es un Proceso técnico, educativo y político que tiene
como objetivo la definición de objetivos y metas, además de los recursos
y procedimientos requeridos para el desarrollo de acciones y actividades
orientadas a transformar el fondo y la forma de una situación o problema
social. Todo proceso de planificación debe ser sistemático, articulado,
coherente, viable, gestionable, participativo, democrático, sustentable,
eficiente y eficaz.

La formulación de un proyecto social es como tal un proceso social,


político, educativo, cultural y metodológico, ya que este proceso consiste
en transformar ideas, visiones, concepciones, horizontes, formas de vida,
percepciones y utopías, en propuestas de trabajo que buscan solucionar
un problema o llenar un vacío, invirtiendo en ello recursos, insumos y
tiempo. Es importante mencionar que los proyectos sociales siempre
deben responder a situaciones concretas, vividas, sentidas e identificadas
por los mismos participantes. Los proyectos no son simplemente escritos
o papeles con una serie de pasos a seguir, sino que se construyen a partir
de compromisos vitales, metas en común, diferencias y
pluriculturalidades, proyecciones del futuro, acciones del presente,
reinterpretaciones del pasado y formas de lucha colectiva.

Por eso, un factor de éxito para proyectos sociales es la identificación de


aquellos problemas que constituyen verdaderos cuellos de botella para el
desarrollo de los grupos humanos. Siempre hay que actuar en base a
"factores limitativos", es decir, aquellos factores cuyo aumento o
disponibilidad es una condición necesaria pero no suficiente para el
desarrollo social. El desarrollo social se logra expandiendo todos los
factores limitativos.

111
Es necesario simplificar los estudios de factibilidad, y disminuir el período
de formulación, evitando la separación drástica entre formulación y
ejecución. Ello debe facilitar la reprogramación del proyecto, incorporando
aquellos aspectos que no se pudieron prever en el momento de la
formulación, por cambios en la política nacional, en el contexto
macroeconómico y/o en los factores ambientales.

El diseño de los proyectos debe incorporar la mayor flexibilidad posible


para el período de ejecución, debido a la dificultad de realizar previsiones
realistas de precios y otras variables en épocas de gran incertidumbre.
Habría que establecer un mecanismo ágil para la actualización del
programa original e incluir en el presupuesto una partida sin asignación
específica.

Los diseños que permitan flexibilidad en la implementación facilitarán la


atención de demandas de las comunidades que no hayan sido
explícitamente contempladas en el diseño original.

Los proyectos flexibles permiten incorporar adecuaciones a la propia


dinámica social del área. Esto no quiere decir que se diseñen proyectos
imprecisos, sino que se determinen con claridad los problemas centrales
a resolver, frente a los cuales puede haber un cierto grado de flexibilidad
para readecuar las acciones a situaciones impredecibles en el momento
de la formulación, reprogramando el proyecto.

En la preparación del diseño del proyecto es necesario y conveniente


apelar a criterios y pasos metodológicos que sean capaces de adaptarse
y responder a la complejidad y a las transformaciones de la realidad. En
el diseño del proyecto deben incorporarse elementos y procedimientos
capaces de responder adecuadamente a los desafíos provenientes de
esas transformaciones que -en gran medida- se manifiestan durante el
tiempo que transcurre entre la preparación del diseño y el momento de la
ejecución.

112
Los objetivos del proyecto deben plantearse con claridad y no deben
constituir largas "listas de buenos propósitos". Objetivos bien formulados,
como respuesta a la pregunta sobre lo que el proyecto intentará alcanzar,
permiten introducir flexibilidad en los medios para alcanzar los objetivos.

Proyectos bien formulados deberán partir de diagnósticos claros, que


señalen cuáles son las características físicas y ecológicas del área y
cuáles son los procesos sociales y culturales que determinan el patrón de
acumulación en la zona, priorizando aquellos problemas que pueden ser
modificados por el proyecto y aquellos que pueden constituir factores
condicionantes para lograr tales cambios.

Es necesario realizar diagnósticos analíticos y dinámicos que superen la


simple descripción de datos de un área determinada. Esto implica que se
estudien procesos, no hechos sueltos. Para ello es necesario no
solamente utilizar información secundaria, que es útil en la medida en que
complemente el conocimiento que se adquiere con los propios
participantes en un proceso de interacción directa con el grupo humano
potencialmente beneficiario del proyecto.

Los procesos de desarrollo social en áreas de gran fragilidad socio-


económica y con altos índices de pobreza de la población, requieren como
punto de partida la elaboración de diagnósticos dinámicos, que tengan
posibilidad de encontrar los espacios, fenómenos o aspectos sociales
cambiantes.

En la etapa del diseño del proyecto es fundamental realizar consultas


detalladas con la población que será destinataria del proyecto, y con
especialistas locales (incluyendo, de ser posible, intelectuales y/o
especialistas que pertenezcan a dicha población), sobre los objetivos y
medios del proyecto e -incluso- sobre el nombre que se le dará al mismo.

Al planificar un proyecto, es importante tener presente la forma en que se


distribuye la población, para evitar que se programen acciones imposibles
de cumplir por falta de vías de comunicación y por las dificultades que

113
representa llevar diferentes servicios a cada uno de los caseríos si se
encuentran muy distantes unos de otros, además de representar un alto
costo. Es importante que el diseño presente con claridad la estructura del
proyecto y los indicadores clave, para lo cual puede resultar conveniente
utilizar la metodología del "marco lógico".

Cuando los niveles de incertidumbre son elevados, el diseño de un


proyecto debe visualizarse como una acción continua que no acaba con
el inicio de su ejecución. Acciones intermedias de supervisión y evaluación
constituyen herramientas potencialmente ágiles de rediseño de los
proyectos ante circunstancias cambiantes.

114
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