NUMERO CUATRO: Ante mí, MANUEL ANTONIO VIQUEZ JIMENEZ, Notario Público de

Heredia cien metros al sur del parque central, comparecen ALVARO LOPEZ GONZALEZ, mayor,

cédula cuatro - cero cincuenta - novecientos veintisiete, quien dice ser: viudo una vez, Industrial,

vecino de Paso Ancho, San José, Urbanización Los Geranios, casa número uno-C; y QUINTINA

JACKSON OMIER, mayor, cédula nueve - cero setenta - doscientos cuarenta y uno, quien dice

ser: soltera, Estilista, vecina igual que el anterior compareciente; y dicen: Que van a contraer

matrimonio próximamente, y que de conformidad con los numerales treinta y siete y

concordantes del Código de Familia, han convenido en arreglar previamente lo relativo a sus

bienes patrimoniales presentes y futuros de la siguiente manera: PRIMERO: Disponen de común

acuerdo que cada uno conservará en vida la propiedad total de los bienes presentes de que

cada uno de ellos es propietario: ALVARO LOPEZ GONZALEZ es dueño del inmueble del

PARTIDO DE SAN JOSE, inscrito en el Registro Público, TOMO setecientos cinco, FOLIO

cuatrocientos once, ASIENTO primero, con matrícula número SIETE MIL

CUATROCIENTOS CUARENTA Y OCHO - CERO CERO UNO, CERO CERO DOS, CERO

CERO TRES y CERO CERO CUATRO, que es terreno de café, caña y charrales, sito en el

distrito segundo San Josecito del cantón décimo Alajuelita de la Provincia de San José;

con una medida de dos mil doscientos ochenta y tres metros con noventa y tres

decímetros cuadrados; y con los siguientes linderos: Norte: calle pública y Silvia Emilia

Mora Jiménez; Sur: Víctor Arias Segura; Este: en parte Luz María Alvarado Alvarado y

Silvia Emilia Mora Jiménez y Oeste: Aureliz Chinchilla Mora, todo de conformidad con el

PLANO que he tenido a vista CATASTRADO con la enumeración J - SETECIENTOS

CINCUENTA Y SIETE MIL NOVECIENTOS CUARENTA Y CINCO - OCHENTA Y CINCO, del

cual guardo copia en mi archivo de referencias al folio OCHOCIENTOS DOS de

conformidad con lo establecido en el artículo noventa del Código Notarial. QUINTINA

JACKSON OMIER es dueña del inmueble del Partido de Heredia inscrito en el Registro Nacional,

en el Sistema de Folio Real con matrícula TRESCIENTOS CUARENTA Y CINCO MIL

OCHOCIENTOS TREINTA Y CINCO – CERO CERO CERO, que es terreno para construir con

una casa de habitación, sito en el distrito primero Heredia del cantón primero Heredia de la
Provincia de Heredia, con una medida de ciento noventa y cinco metros cuadrados, y con los

siguientes linderos: Norte: Roberto Salas Vargas, Sur: Andrea Suárez Montero, Este: calle con

un frente a la misma de veintidós metros y Oeste: Carlos Rojas Vega, con el plano que he tenido

a vista catastrado con la enumeración H- CIENTO VEINTITRES MIL DOSCIENTOS DOS – MIL

NOVECIENTOS NOVENTA Y CUATRO, del cual guardo copia en mi archivo de referencias al

folio OCHOCIENTOS TRES de conformidad con lo establecido en el artículo noventa del Código

Notarial. SEGUNDO: Si su Matrimonio se disuelve por Divorcio o Nulidad o si se da Separación

Judicial, ninguno tendrá derecho de participación o copropiedad sobre los bienes presentes del

otro ni tampoco por concepto de Gananciales Matrimoniales. Si el Matrimonio se disuelve por

fallecimiento de cualquiera de los cónyuges, el supérstite tendrá derecho de heredar sus bienes

presentes y futuros sea por disposición testamentaria o por Herencia Legítima establecida por la

Ley. TERCERO: Los bienes que adquieran en el futuro dentro de su matrimonio, se considerarán

gananciales para todo efecto legal de conformidad con los numerales cuarenta y uno y

concordantes del Código de Familia siempre y cuando éstos superen el valor fiscal de diez

millones de colones, los que tengan un valor inferior al mencionado serán propiedad exclusiva de

su propietario o propietaria. Se declara inestimable este acto. Es todo. Extiendo un primer

testimonio para los otorgantes. El suscrito notario advierte de la importancia y efectos que

las presentes manifestaciones de voluntad adquirirán en la vida de los comparecientes,

les explica su significado y trascendencia, les hace ver el valor de sus renuncias y les

interroga acerca de si han entendido lo comunicado. Los comparecientes asienten su

entendimiento, manifiestan su conformidad y aprueban lo aquí estipulado libremente y sin

coacción. Leído lo escrito a los comparecientes, lo aprobaron, y firmamos en la ciudad de

Heredia a las catorce horas del veintiuno de junio del dos mil.