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¿Cómo realizar un mantenimiento de equipos

dentales correctamente?
Tabla de contenidos
1. Tareas de mantenimiento de equipos dentales
a. Acciones preventivas para un buen mantenimiento de equipos dentales
b. Limpieza y desinfección de equipos dentales
c. Inspección y calibración de equipos dentales

No son pocas las clínicas dentales que se preguntan qué medidas pueden llevar a cabo

para hacer un correcto mantenimiento de los equipos dentales. Si bien hay ciertos

equipos y ajustes que deben realizar profesionales en revisiones periódicas, también

existen una serie de medidas básicas que, al incluirse en el día a día de una clínica dental,

favorecen un mejor funcionamiento y durabilidad de los equipos.

Además, este mantenimiento no es sólo un seguro para alargar la vida útil del

equipamiento dental, sino que ayuda a prevenir reparaciones que pueden suponer

retrasos y alteraciones en la clínica.

Por tanto, en este post nos vamos a centrar en medidas de mantenimiento preventivo

que deben incluirse en el uso y limpieza regular de la consulta dental para que el

equipamiento esté siempre en el mejor estado posible.

Tareas de mantenimiento de equipos dentales

Antes de enumerar las acciones de mantenimiento de equipo dental, hay que hacer una

distinción.

Por un lado, es importante leer la información de cada fabricante para el equipo en

cuestión, donde se suelen incluir medidas a implementar para el cuidado de los mismos,

así como aquello que no se debe hacer. Estas serán recomendaciones concretas para

cada dispositivo que aseguren no dañarlo.

Por otro lado, las recomendaciones que vamos a exponer a continuación son genéricas

para aplicar dentro de los límites que ofrece cada equipo o instrumento.
Acciones preventivas para un buen mantenimiento de equipos dentales

Cuando se habla de mantenimiento preventivo de equipos dentales, se está hablando

de una limpieza general que se debe realizar cada 2 ó 3 meses y que se basa en:

1. Inspección en búsqueda de grietas, daños o fugas en el equipo.


2. Limpieza a fondo del instrumental.
3. Engrasado de las articulaciones y piezas móviles del equipo dental.
4. Sustitución de instrumental y equipo desgastado.
5. Comprobación de niveles de líquido en cilindros hidráulicos.

Algunas de estas medidas, como la última, también suele venir indicada por el fabricante

para realizarse con una periodicidad concreta, lo que nos puede ayudar a crear un

protocolo de mantenimiento lo más fidedigno posible.

Limpieza y desinfección de equipos dentales

Algunas de las mencionadas medidas deben considerarse más detenidamente teniendo en

cuenta la vital importancia de áreas como la asepsia y la desinfección en consultas

relacionadas con la salud, como es una clínica dental.

Toda esta importancia se ha incentivado a raíz de la situación vivida con la pandemia del

COVID 19, que ha recordado, tanto a pacientes como a profesionales, lo esencial de

mantener unas condiciones e higiene óptimas en todo momento.

Por tanto, dentro del instrumental y equipamiento que se encuentra en una consulta

odontológica, se debe prestar especial atención a la desinfección de los depósitos donde

se acumulan líquidos, que pueden ser fuente de acumulación de bacterias. Lo mismo

ocurre con partes del mobiliario que tienden a usarse por todo aquel que acude al dentista,

como son los pomos de las puertas.

Para aquellas consultas en las que hay un espacio esterilizado, tanto el instrumental como

resto del equipo que se va a utilizar debe desinfectarse antes de la entrada del paciente.

Sin olvidar la desinfección de superficies como bandejas, estantes, o perchas para

uso de los pacientes.

Inspección y calibración de equipos dentales


Por último, otra parte del mantenimiento de equipos dentales que no se debe olvidar es

la calibración de los dispositivos que lo necesiten.

Ya hemos recordado en las medidas generales lo importante de una buena inspección,

que permite anticiparse a roturas o averías y sustituir piezas o sistemas a tiempo y sin

interrumpir el flujo de trabajo en la consulta. Sin embargo, hay algunos equipos en los

que parte de esta inspección consiste en valorar si se encuentran en los parámetros

adecuados para su uso y, en caso contrario, calibrarlos para que recuperen sus valores

predilectos.

Para inspeccionar si el instrumental está calibrado, hay que fijarse en criterios como la

temperatura: el sobrecalentamiento de taladros y similares suele ser signo de que

necesitan una revisión. Una vez calibrado el equipo que sea, se debe comprobar que ha

recuperado la precisión y condiciones óptimas de funcionamieno.

Por otro lado, muchos dispositivos cuentan con sistemas que avisan cuando alguna de sus

partes no está calibrada. En estos casos, lo mejor que se puede hacer es acudir al

servicio técnico de cada equipo y concretar una cita de calibración, evitando así

futuras reparaciones y configuraciones erróneas.

Con estas medidas preventivas, esperamos transmitir la importancia de mantener un

protocolo de mantenimiento de equipos dentales para asegurar el buen funcionamiento

de los dispositivos, así como el correcto desarrollo del día a día en una consulta dental.

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