LABORAL
Gloria Arellano Bernal
Mujeres y
derechos
Consejos laborales
laborales
L
as leyes sustentan igualdad en derechos laborales entre hom-
bres y mujeres, e incluso se contemplan las condiciones dis-
tintas, que son las físicas, que consideran los derechos de una
trabajadora embarazada con garantías para su protección y la
de su bebé.
Las madres trabajadoras tienen derecho
durante el periodo del embarazo a no
realizar, en el centro de trabajo, labores
que exijan esfuerzos considerables y sig-
nifiquen un peligro para su salud en rela-
ción con el embarazo, así como el bienes-
tar del futuro bebé, como levantar, tirar,
o empujar grandes pesos, o estar de pie
durante largo tiempo.
Se considerarán labores peligrosas o
insalubres las que, por las condiciones
físicas, químicas y biológicas, puedan
afectar la vida y la salud física y mental
de la trabajadora embarazada o del futu-
ro bebé.
En materia de Seguro Social, la traba-
jadora embarazada que esté inscrita míni-
mo nueve meses sin interrupción en el Ins-
tituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)
podrá gozar del pago íntegro de su salario
sin tener que acudir al centro de trabajo en
el periodo de mes y medio antes del naci-
miento del bebé y mes y medio después al
nacimiento, este pago lo obtendrá del pro-
pio Instituto cuando en las unidades mé-
dicas se haya comprobado el embarazo y
la fecha probable del parto. Si el bebé no
nace en la fecha determinada por el médi-
co del Instituto, todos los días posteriores
al mes y medio antes del nacimiento del
bebé se pagarán a la trabajadora embara-
zada en 60% de su último salario.
Ejemplo: Adela Rodríguez, trabajado-
ra embarazada, tiene un salario integrado
diario de $ 146.00, cuenta con 10 meses
de pagos al IMSS de manera ininterrum-
pida, acudió al médico del Seguro Social,
14 REVISTA AH
En la Ley Federal del Trabajo
Artículo 170:
• Disfrutarán de un descanso
de seis semanas anteriores y
seis posteriores al parto;
• Los periodos de descanso a que
se refiere la fracción anterior se
prorrogarán por el tiempo necesario
en el caso de que se encuentren
imposibilitadas para trabajar a
causa del embarazo o del parto;
• En el periodo de lactancia tendrán dos
reposos extraordinarios por día, de
media hora cada uno, para alimentar
a sus hijos, en lugar adecuado e
higiénico que designe la empresa;
• Durante los periodos de descanso a
que se refiere la fracción II, percibirán
su salario íntegro. En los casos de
prórroga mencionados en la fracción
III, tendrán derecho al cincuenta
por ciento de su salario, por un
periodo no mayor de sesenta días;
• A regresar al puesto que desempeñaban,
siempre que no haya transcurrido más
de un año de la fecha del parto; y
• A que se computen en su antigüedad
los periodos pre y postnatales. (
quien le dio fecha probable del parto el
13 de febrero del 2006, por lo que su pe-
riodo de incapacidad prenatal inició el
2 de enero, esos 42 días la trabajadora
recibió el 100% de su salario otorgado
por el propio Instituto; sin embargo, el
bebé nació hasta el 20 de febrero del
2006, razón por la cual, del 13 de febre-
ro al 20 de febrero la trabajadora emba-
razada recibió durante esos días 60% de
su salario, es decir, $ 87.60 diarios, pues
esos días están considerados como de
enfermedad general.
Cabe señalar que si el bebé de la tra-
bajadora embarazada hubiera nacido el
3 de febrero del 2006 se hubieran per-
dido los días de incapacidad del 3 al 13
de febrero, pues hubiera iniciado el pe-
riodo de posparto, y en ese momento co-
menzaría el pago de 100% del salario por
otros 42 días.
Asimismo, tendrá las prestaciones
médicas, más una ayuda en especie por
seis meses, y una canastilla al nacer el
hijo de la madre trabajadora.
Al estar inscrita la trabajadora emba-
razada en el IMSS y habiendo cumplido
los requisitos que señala el propio Insti-
tuto, el patrón no tendrá obligación de
realizar ningún pago extra; sin embargo,
si la trabajadora ya estaba embarazada al
momento de contratarla y no cumple con
los nueve meses de pagos al Instituto,
será el patrón quien tenga la obligación
de pagar los 42 días anteriores al parto y
los 42 días posteriores al mismo.
Por último, si la trabajadora embara-
zada tiene crédito con el Infonavit, ni ella
ni su patrón están obligados a realizar el
pago del crédito durante esos días de in-
capacidad.
Nuestra autora:
Gloria Arellano Bernal es abogada por la Escuela Libre de
Derecho. Doctora en derecho por la UP. Socia directora del Área
de Seguridad Social y Laboral del despacho “Sánchez, Arellano
Abogados”. Conferenciante y articulista.