Módulo 2.

Organización y gestión de Centros docentes

Objetivos

• Entender por qué el Centro Educativo puede conceptualizarse como organización

• Trasmitir la imagen del centro como unidad presupuestaria dentro de una
administración pública.
• Conocer a grandes rasgos los principios de la disciplina presupuestaria, tanto en
la elaboración como en la ejecución del presupuesto del centro.
1
• Tener información sobre los mecanismos de control externos de la actividad
económica de los centros así como de la fiscalidad que puede afectarles en su
gestión.
• Tomar conciencia de la necesidad de actuar con rigor en procedimientos
administrativos que pueden alterar la actividad ordinaria de un centro docente
• Familiarizarse con el procedimiento de reclamaciones derivadas del proceso de
evaluación.
• Conocer las formas de actuar para la aplicación de la disciplina en el marco de
la convivencia.
Contenidos

Unidad Didáctica 3. El Centro Educativo como organización

José Luis Caeiro

Unidad didáctica 4. La gestión presupuestaria de los centros docentes

Carlos Orbis Espada

Unidad didáctica 5: La disciplina en el marco de la convivencia

Carlos Orbis Espada

Introducción al Módulo 2.

La forma en que históricamente se estructuró la escuela y el Sistema educativo en

general ha favorecido una concepción individualista del trabajo de los docentes. Si
recordamos que en sus inicios las escuelas estaban formadas por una sola aula, con un
solo maestro y que en ella se reunían los estudiantes de diversas edades y niveles de
aprendizaje, comprenderemos la razón de este predominio de las visiones individualistas.
Pero hoy en día, los Centros docentes han evolucionado y se han transformado en
organizaciones muy complejas. Si pensamos en cualquier IES o Escuela Primaria o
Infantil, veremos que en ellos se desempeñan múltiples profesionales docentes, pero
que intervienen también otros trabajadores como psicólogos, trabajadores sociales,
psicopedagogos, administrativos, informáticos, y personal de servicios como conserjes,
limpiadores, y demás. También tenemos que considerar que, dentro del mismo grupo
de docentes, hay una alta especialización de las funciones, ya que no es lo mismo
2
desarrollar la tarea de Jefe de estudios que ser el profesor de música. Además, para
mayor complicación, muchos de estos papeles se solapan, en el tiempo y en las
personas, añadiendo mayor complejidad a la situación.
Unidad Didáctica 3. El Centro Educativo como organización

José Luis Caeiro

Contenidos
Naturaleza y características de las organizaciones escolares: una aproximación inicial.
La micro-política de los Centros docentes.

NATURALEZA Y CARACTERÍSTICAS DE LAS ORGANIZACIONES

ESCOLARES: UNA APROXIMACIÓN INICIAL. 3

Las ciencias sociales emplean el término organización para designar un tipo de unidad
social característica distinta de otras como pueden ser familias, grupos de pares, tribus,
comunidades y estados nacionales. Las definiciones de las organizaciones son variadas
y suelen estar basadas en ciertas características comunes que comparten todas estas
unidades sociales. Al describir las organizaciones, se enumeran entre otras
características que tienen objetivos relativamente específicos, tareas diferenciadas, clara
división del trabajo, estructura para coordinar actividades diversas, autoridad legítima
que inviste a ciertos miembros y un conjunto de procedimientos de gestión, todo lo cual
permitirá su funcionamiento eficaz. Ahora nos preguntamos, hasta qué punto podemos
aplicar esta descripción a los Centros docentes. Es decir, en qué medida es legítimo
hablar de ellos como organizaciones.
El uso de este enfoque racional o técnico, que emplea tales categorías para definir a la
organización tiende a centrar nuestra atención en una única abstracción llamada
organización, nos advierte Bardisa (1997). Sin embargo, este enfoque no resulta
totalmente eficaz a la hora de comprender las organizaciones reales en las que nos toca
desempeñar la tarea docente. Con frecuencia nos parece que los objetivos no tienen el
adecuado nivel de especificidad, sino que son muy generales, las tareas están poco
diferenciadas, la estructura no favorece la coordinación, sino que la dificulta, la autoridad
no reside en quien posee los cargos que la legitiman, sino que emana de fuentes
informales y los procedimientos gestión suelen entorpecer, más que facilitar, la gestión
eficaz.
Frente a esta posición hay muchos autores que defienden que las organizaciones, en
lugar de estar sujetas a leyes universales, son artefactos culturales, es decir realidades
sociales construidas por el conjunto de los significados compartidos por las personas que
las integran. Stephen Ball dirá que el análisis del funcionamiento de la organización está
representado por el modo en que esos actores definen, interpretan y manejan las
situaciones con las que se enfrentan. Como resultado de esto, no hay una única
abstracción llamada organización, sino una variedad de percepciones socialmente
compartidas. Entre los múltiples enfoques que se pueden usar para hablar de la
organización uno es el modelo político, que parece especialmente adecuado para explicar
el funcionamiento de los Centros docentes.

Micro-política de los Centros docentes.

El modelo político en las instituciones educativas recibe cada día mayor reconocimiento 4

por parte de teóricos y prácticos. Las organizaciones entendidas como arenas políticas
son conceptualizadas como ámbitos de conflicto en los cuales los diferentes grupos de
intereses y de poder se enfrentan o establecen alianzas para alcanzar sus objetivos. En
este contexto, como explicaremos más adelante, el conflicto no es entendido como algo
nocivo o patológico, sino como un mecanismo de la acción humana intencionada. Para
reconocer y comprender la dimensión política de las instituciones escolares es necesario
relacionar dos enfoques que generalmente se presentan disociados, según expone
Bardisa (1997). Por una parte, el enfoque interno, que persigue estudiar y analizar las
escuelas como sistemas de actividad política —en cuyo caso estaríamos hablando de
micropolítica educativa—, y, por otra, el enfoque estructural, que presenta a la escuela
como un aparato del Estado, responsable sobre todo de la producción y reproducción
ideológica. Esta visión macropolítica de la escuela es necesaria, a su vez, para
comprender su relación con el sistema económico, la justificación del currículo «oficial»,
el juego de intereses políticos e ideológicos que existen en la sociedad y en el sistema
político en torno a la educación y a sus instituciones. Es necesaria la combinación de
ambos enfoques para lograr un conocimiento más aproximado de la realidad.

La imagen política del centro educativo parte de reconocer la existencia intereses en

conflicto entre los miembros de la organización. Los miembros tienen intereses propios,
en parte coincidentes con los interese y objetivos de la organización. Para alcanzarlos,
emplean diferentes estrategias, como, por ejemplo, la creación de alianzas y coaliciones,
el regateo y el compromiso para la acción. La identificación de las estrategias y la
selección de las más adecuadas para cada situación conflictiva requieren diversas
habilidades en los actores
La micropolítica de las escuelas ha recibido poca atención de teóricos e investigadores,
en parte porque se la considera una cuestión perceptiva más que una realidad. Es un
tema tabú en los debates serios, mientras que lo es de cotilleo en los encuentros
informales, en los que se habla de «juego político», de «agendas ocultas», de «mafias
organizativas» y de «maquiavelismo». Son temas que se abordan en la sala de
profesores, en la cafetería y en los pasillos de la escuela, y, raramente, en un contexto
más académico que propicie un análisis riguroso, advierte Bardisa (1997). Ello hace que
se sepa poco de ese lado de la organización, que permanece oscuro.
Stephen Ball, en su propuesta de análisis organizativo sobre las escuelas, emplea ciertos
conceptos claves a su juicio para comprender la micropolítica de la vida escolar , entre
los que destaca: poder, diversidad de metas, disputa ideológica, conflicto, intereses,
5
actividad política y control.
Las escuelas son entornos propicios a la actividad micropolítica, al igual que los son
muchas organizaciones, por dos razones: en primer lugar porque son organizaciones
débilmente articuladas, eso deja libres muchos intersticios donde se despliega mucha
actividad micropolítica, y en segundo lugar porque hay formas de legitimación que
compiten en la toma de decisiones. Esto último se debe a que la legitimidad formal del
director o del Equipo directivo del Centro es desafiada por formas profesionales y
democráticas alternativas, que son válidas para los Centros docentes. Esta situación
coloca a los directores ante el dilema de equilibrar su responsabilidad de administradores
con las expectativas de la colega respecto a los otros profesionales a cuyo colectivo
pertenece, y al que tendrá que volver cuando acabe su mandato. Algunos de los temas
más relevantes que analiza Stephen Ball son los siguientes:

CONTROL: los Centros docentes tienen estrategias de control diversas y contradictorias.

El centro educativo tiene elementos de los tres tipos de organizaciones: son
organizaciones jerárquicas (como una empresa comercial), son controladas por sus
miembros (como un sindicato), y son comunidades profesionales. En las escuelas, las
decisiones (el control) a veces se toman como si éstas funcionaran democráticamente
(las decisiones las toma el personal, por ejemplo los profesores), y otras como si fuera
una organización jerárquica (las decisiones las toman sólo los directivos). Esto nos
muestra que el control no se ejerce siempre del mismo modo: hay una diversidad de
controles que pueden entrar en conflicto incluso. Por ejemplo, una decisión tomada por
los miembros del Equipo directivo es cuestionada o contestada por el colectivo de
profesores.
 6

Figura. La diversidad de los subgrupos dentro de la institución educativa

favorece la concreción de alianzas que asocian a las personas en función
de los niveles en que se desempeña, de sus áreas de conocimiento, de su
género, de su formación previa.

DIVERSIDAD DE METAS: La estructura del centro educativo permite que haya una
diversidad de metas, dada la relativa autonomía de subgrupos (departamentos
didácticos, grupos profesionales, colectivos) dentro de la misma. Pero no se trata sólo
de la autonomía de los subgrupos, sino también de los individuos. En muchas ocasiones
falta también coordinación entre ellos para orientarse hacia una meta común y única.
Esta estructura 'floja' hace que la escuela pase casi a ser una organización anárquica
cuando hay un entorno social (contexto) muy agitado.

IDEOLOGIA: Las diferencias entre subgrupos o departamentos son a menudo

ideológicas, y suelen estar cargadas de afectos como justicia, elevados ideales, igualdad,
etc. En momentos de crisis, estas diferencias se exacerban en cuanto a la 'ideología de
la enseñanza' (o creencias sobre cómo debe ser la enseñanza, como es la naturaleza
humana, qué es el aprendizaje, etc).
Muchas veces el centro educativo deja que haya diferencias, estando la política oficial
sujeta a como cada cual la interprete (libre acoplamiento).
CONFLICTOS: Los teóricos del conflicto hablan de que en la organización hay intereses
particulares que pueden chocar. La micropolítica es justamente según Hoyle, el conjunto
de las estrategias de cada individuo o grupo emplea para usar su poder a fin de promover
sus intereses. Las escuelas, al igual que cualquier organización, son 'campos de lucha',
y los conflictos pueden ser constructivos o destructivos. En esa lucha siempre hay una
cuestión de poder (la idea de autoridad es usada más bien por los teóricos que buscan
legitimar la organización, y en estos casos el conflictos lo considerarán siempre
destructivo).
7
Esta visión política, en concreto micropolítica, nos permite abordar el estudio de las
competencias que necesitan los miembros de los equipos directivos del centro educativo
con una nueva mirada. Comprendemos ahora que no se trata sólo de saber sobre
legislación, ni de conocer cómo se gestiona una licencia para un profesor o cómo se pide
un sustituto. Hay que ser capaz de comprender los procesos psicosociales que están
debajo de los comportamientos de las personas y de los grupos dentro de la organización
que es el centro educativo. Entender que en él hay una cultura organizacional, que los
profesores están desempeñando un trabajo y, por ende, hay un contrato psicológico que
los liga a su empleador, y que a su vez pertenecen a grupos con los cuales se identifican
y dentro de los que desarrollan sus tareas.
Este enfoque más amplio y enriquecedor nos permitirá entender mejor cuáles son las
competencias que necesitan los futuros miembros de los equipos directivos para
desarrollar una tarea eficaz.
Unidad didáctica 4. La gestión presupuestaria de los centros docentes

Carlos Orbis Espada

Contenidos

- Elaboración y aprobación del presupuesto.

- El presupuesto de ingresos.
- El presupuesto de gastos.
- Las Modificaciones presupuestarias. 8
- La ejecución del presupuesto
o Criterio de contabilización
o La compensación de gastos
o La Tesorería
- La rendición de las cuentas: la aprobación de la cuenta de gestión.
- Mecanismos de control.
- Obligaciones fiscales.

LA GESTIÓN PRESUPUESTARIA EN LOS CENTROS DOCENTES

El presupuesto de los centros docentes públicos no universitarios de la Comunidad de

Madrid es la expresión cifrada, conjunta y sistemática de las obligaciones que como
máximo puede reconocer el centro en orden a su normal funcionamiento, así como la
estimación de los ingresos que prevé obtener durante el correspondiente ejercicio. Por
lo tanto, los ingresos tendrán un carácter estimativo y los gastos un carácter limitativo.

El presupuesto es, además, un instrumento de planificación económica del centro en

orden a la prestación del servicio educativo, en el que se prevé, junto con sus ingresos,
los gastos necesarios para alcanzar sus objetivos bajo los principios rectores de equilibrio
entre ingresos y gastos, es decir, que la suma del remanente del ejercicio anterior más
los ingresos previstos a lo largo del ejercicio coincida con el montante total de gastos,
así como los principios de eficacia y eficiencia en la utilización de los recursos.

El ejercicio presupuestario de los centros docentes públicos no universitarios coincidirá

con el año natural.
Elaboración y aprobación del presupuesto
El Equipo Directivo del centro docente elaborará, al inicio de cada ejercicio económico,
el proyecto de presupuesto y, a través del Director, lo presentará al Consejo Escolar
para su estudio y aprobación antes del 31 de enero de cada ejercicio presupuestario
al que se refiera.
El proyecto de presupuesto incluirá los siguientes documentos:
- Una memoria justificativa que incluya, además del objetivo general del
funcionamiento operativo del centro para la prestación del servicio educativo, los
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objetivos relativos a aquellos proyectos específicos que, para cada ejercicio económico,
se determinen en la programación general del centro, estableciéndose al efecto los
correspondientes indicadores que permitan evaluar la eficacia y eficiencia en su
consecución.
- Un estado de los ingresos que se prevé obtener.
- Un estado de los gastos a realizar para la consecución de los objetivos propuestos.

Hasta tanto se apruebe el presupuesto con carácter definitivo, el Director del centro
docente podrá autorizar gastos y efectuar pagos conforme al proyecto de presupuesto
aprobado por el Consejo Escolar del centro, bien con cargo al remanente procedente del
ejercicio anterior o a los ingresos ya percibidos en el ejercicio corriente

El presupuesto de ingresos
Se integrará por los siguientes recursos:
• El saldo final o remanente de la cuenta de gestión del ejercicio anterior
• Los recursos asignados por la consejería de educación a través de los
correspondientes programas de gasto para el funcionamiento de los centros
docentes, subconcepto de gasto 2900.
• Otros recursos públicos distintos a los gastos de funcionamiento del apartado
anterior.
• Recursos que provienen de la Consejería de Educación por subconceptos distintos
al 2900 (Se engloban en este apartado los créditos para la reposición de
inversiones no centralizadas, dotación de libros de texto, programa bilingüe, etc.)
- Recursos que provienen de otras Instituciones u Organismos de la Comunidad de
Madrid.
- Recursos que provienen de otras Administraciones Públicas.
- Recursos que provienen de Instituciones de la Unión Europea
- Recursos propios obtenidos en virtud de la autonomía de gestión de que gozan los
centros docentes públicos.
- Ingresos procedentes de disposiciones testamentarias y donaciones (Se imputarán a
este tipo de ingresos los procedentes de devoluciones realizadas por las empresas
colaboradoras en el programa de formación de alumnos en centros de trabajo
(F.C.T.).
- Ingresos procedentes de la prestación de servicios y de la venta de bienes muebles,
ambos producto de las actividades educativas.
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De conformidad con lo dispuesto en el artículo 11 del citado Decreto 149/2000, de 22
de junio y en la Instrucción número 3/2001, de 1 de marzo, de la Dirección
General de Centros Docentes, por la que se regula el procedimiento que permite a
los Centros docentes públicos no universitarios obtener ingresos procedentes de la
prestación de servicios y de la venta de bienes muebles, ambos producto de sus
actividades educativas, así como su aplicación al presupuesto, se engloban en este
apartado:
- Cualquier otro ingreso para los que se cuenta con la autorización de la
Dirección General competente (el artículo séptimo, apartado 1.4 letra j)
del Decreto 149/2000, de 22 junio, dispone que el estado de ingresos del
presupuesto de los centros docentes se integrará, entre otros, por
cualquier otro ingreso para el que deberá contar con la autorización de la
Dirección General competente. Se trata de cualquier otro tipo de ingreso,
distinto de los enunciados en los apartados anteriores, para los que se
cuenta con la pertinente autorización de la Dirección General competente)

- Cuantías a cobrar por el uso particular de las fotocopiadoras y teléfonos

de los centros docentes
- Obtención de ingresos por la instalación de máquinas expendedoras de
alimentos y bebidas no alcohólicas
- Cantidades a percibir de compañías de seguros en concepto de
indemnizaciones por los siniestros contemplados en las pólizas suscritas.
- Ingresos de los alumnos por las actividades extraescolares organizadas
por el centro y contempladas en su Programación General Anual.
 - Cantidades ingresadas por los alumnos por los daños ocasionados en las
instalaciones, mobiliario o enseres del centro, de acuerdo con lo dispuesto
en su Reglamento de Régimen Interior.
- Los ingresos por el cobro del canon establecido en los contratos de
cafetería de los centros que cuentan con este servicio.
- Premios y becas por participación en actividades didácticas, culturales o
deportivas (se incluirán en este apartado las ayudas, becas o premios
otorgados por instituciones, organismos y empresas privadas, como
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consecuencia del desarrollo de proyectos y experiencias de innovación e
investigación)

El presupuesto de gastos
El estado de gastos estará integrado por los gastos corrientes para el funcionamiento
operativo del centro docente, por aquéllos que estén asociados a ingresos finalistas (tales
como la adquisición de libros de texto y material didáctico complementario) y por los
que tengan el carácter de reposición de inversiones, tanto en obras como en
equipamientos con cargo a los programas de inversiones no centralizados de la
Consejería de Educación. Asimismo, con cargo al presupuesto de gastos del centro
docente podrán suscribirse las pólizas de seguro.
El presupuesto de gastos no podrá financiar gastos de personal, atenciones protocolarias
o representativas, ni los referidos a servicios y obligaciones que, según la legislación
vigente, deban ser asumidas por las corporaciones locales o la Administración
autonómica. De conformidad con lo dispuesto en el artículo 196, apartado 3, del Real
Decreto Legislativo 2/2000, de 16 de junio (B.O.E. del 21) por el que se aprueba el texto
refundido de la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas, no podrán celebrarse
contratos de servicios con empresas de trabajo temporal.

Las modificaciones presupuestarias

Si los centros docentes públicos no universitarios pretenden alterar la estructura del
estado de ingresos o de gastos de su presupuesto ya aprobado tanto por el Consejo
Escolar del centro como por la Dirección de Área Territorial o Delegación Territorial
deberán proceder a realizar una modificación presupuestaria.
Las modificaciones del presupuesto de los centros docentes podrán producirse como
consecuencia de la obtención de nuevos ingresos no previstos en el presupuesto u
obtenidos en cuantía superior a la inicialmente prevista o por reasignaciones de gastos
entre las diferentes partidas presupuestarias de los Capítulos 2, 4 y 6 de la vigente
clasificación económica de gastos.
El procedimiento para la aprobación de estas modificaciones del presupuesto de los
centros será el mismo que el empleado para la aprobación inicial, es decir:
- Propuesta por parte del Director del centro docente.
- Aprobación por el Consejo Escolar del centro docente.
- Examen de la modificación presupuestaria por la Dirección de Área Territorial o
Delegación Territorial.
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La ejecución del presupuesto

- Criterio de contabilización: de conformidad con lo dispuesto en el artículo 10
del Decreto 149/2000, de 22 de junio (B.O.C.M. del 30), por el que se regula el
régimen jurídico de la autonomía de gestión de los centros docentes públicos no
universitarios, todas las operaciones que realice el centro en ejecución de su
presupuesto, tanto de ingresos como de gastos, se contabilizarán con el
criterio de caja y deberán contar con el oportuno soporte documental que
acredite tanto la legalidad de los ingresos como la justificación de los gastos

- El Director del centro docente autoriza los gastos de acuerdo con el

presupuesto aprobado y ordena los pagos. El Director del centro no podrá
autorizar gastos por un importe superior a los créditos consignados en el
presupuesto, ni ordenar pagos que excedan de los ingresos efectivamente
obtenidos, siendo nulos de pleno derecho los actos administrativos que
infrinjan tal norma, sin perjuicio de las responsabilidades que legalmente puedan
deducirse.
La contratación y autorización de gastos estarán limitadas por las cuantías establecidas
en la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, “de Contratos del Sector Público, por la que se
transponen al ordenamiento jurídico español las Directivas del Parlamento Europeo y
del Consejo 2014/23/UE y 2014/24/UE, de 26 de febrero de 2014” para los contratos
menores. Las cuantías máximas para cada tipo (IVA excluido) de contrato son las
siguientes:
Tipos de contrato Cuantías máximas
Menor de obras 40.000 €
Menor de suministros, servicios, consultoría y asistencia 15.000 €
 - Facturas: el artículo tercero del Real Decreto 2402/1985, de 18 de
diciembre (B.O.E. del 30), que regula el deber de expedir y entregar
factura que incumbe a empresarios y profesionales, establece los datos y
requisitos que deben contener todas las facturas y sus copias o matrices
- La compensación de gastos: en relación con las actividades extraescolares,
el Consejo Escolar del centro docente, en su programación general anual,
aprobará el número y la naturaleza de dichas actividades, determinando su
fuente de financiación y fijando las cuantías máximas para la compensación de
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los gastos en que incurran los profesores acompañantes de los alumnos en
aquellas actividades que requieran de su presencia, no pudiendo exceder estas
cuantías las establecidas por la legislación vigente sobre indemnizaciones por
razón del servicio o el gasto efectivamente realizado si este fuese menor
- La tesorería: Los centros docentes públicos no universitarios contarán con una
única cuenta corriente abierta en una institución de crédito autorizada
por la Consejería de Hacienda, a través de la cual se realizarán todos los
movimientos de ingresos y pagos del centro docente.
Los centros docentes podrán disponer de dinero en efectivo para atender determinados
pagos cuya pequeña cuantía o mejor gestión así lo reclame; asimismo, a través de la
caja del centro docente se podrán canalizar determinados ingresos propios de su normal
giro y tráfico

La rendición de cuentas
- La Cuenta de Gestión: el artículo 13 del Decreto 149/2000, de 22 junio,
dispone que los Directores de los centros deberán remitir al Consejo
Escolar, para su aprobación antes del 31 de enero del ejercicio
siguiente, una única Cuenta de Gestión a 31 de diciembre de cada
ejercicio económico, acompañándose una memoria justificativa de los
objetivos conseguidos en relación con los programados.
Sin perjuicio de lo anterior, en el supuesto de que se produzca un cambio de Director
antes de la fecha del cierre, el saliente deberá elaborar la justificación de los ingresos y
gastos habidos hasta la fecha del cese y someterlo a la aprobación del Consejo.
En el supuesto de que no se aprobase la Cuenta de Gestión por el Consejo
Escolar, se remitirá la misma a la Dirección de Área Territorial correspondiente, junto
con el acta de la sesión, donde consten los motivos que sustentan la decisión. La
Dirección de Área Territorial o Delegación Territorial, tras las gestiones pertinentes,
adoptará la resolución que, en su caso, proceda.

Mecanismos de control
El artículo 15 del Decreto 149/2000, de 22 junio, por el que se regula el régimen jurídico
de la autonomía de gestión de los centros docentes públicos no universitarios establece
que por los servicios gestores de las Direcciones Generales competentes de la Consejería
de Educación se establecerán programas de control de la gestión económica de estos
14
centros, a fin de evaluar el cumplimiento de los objetivos programados.
Los centros docentes públicos no universitarios estarán sometidos a los mecanismos de
control que se establezcan, de conformidad con la Ley 9/1990, de 8 de noviembre,
reguladora de la Hacienda de la CM.
Las cuentas de gestión de los centros docentes públicos no universitarios, con todos sus
justificantes, estarán a disposición de la Intervención General, de la Cámara de Cuentas
y del Tribunal de Cuentas.

Obligaciones fiscales
En el marco de estas actividades, el centro podrá contar con la participación de expertos
externos para la impartición de cursos, seminarios, conferencias, grupos de trabajo o
actividades análogas. Para el pago de estos honorarios, el centro docente realizará la
oportuna liquidación donde se especifique el importe líquido abonado al experto así como
la correspondiente retención practicada a cuenta del I.R.P.F que se ingresará en la
Administración o Delegación de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria que
corresponda cumplimentando el Modelo 110 “Impuesto sobre la Renta de las
Personas Físicas. Retenciones e Ingresos a cuenta”. Además, anualmente, se
formalizará el Modelo 190 “Resumen Anual de Retenciones e Ingresos a cuenta del
I.R.P.F.”
El experto deberá cumplimentar la oportuna declaración a que se refiere el artículo 71 y
72 de la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público, de no hallarse incurso en ninguna
de las circunstancias que prohíben contratar con la Administración.
Asimismo, cuando se hayan efectuado adquisiciones de bienes, contratado obras y
recibido o prestado servicios que en su conjunto, para cada proveedor, hayan superado
la cifra de 3.005,06 € anuales, el centro vendrá obligado a formalizar la “Declaración
Anual de Operaciones con Terceros” mediante el Modelo 347.
Unidad didáctica 5: La disciplina en el marco de la convivencia

Carlos Orbis Espada

Contenidos

- El plan de convivencia 15

- Las normas de convivencia.

- Agentes de la convivencia escolar
- Conductas contrarias a las normas de convivencia.
- El procedimiento disciplinario

LA DISCIPLINA EN EL MARCO DE LA CONVIVENCIA EN LOS CENTROS

ESCOLARES

La Ley 2/2006, de 3 de mayo, “de Educación” (LOE) establece que todos los centros
deben incluir en su proyecto educativo un “Plan de Convivencia” así como establecer
normas que garanticen su implantación y cuyo incumplimiento habrá de dar origen a la
correspondiente medida correctora.
Es preciso que nuestros escolares respeten las normas de la escuela, respeten a sus
profesores y se respeten entre sí y es preciso que todos los sectores de la comunidad
educativa acepten las normas de convivencia establecidas y se comprometan a
respetarlas.

El PLAN DE CONVIVENCIA es el documento en el que se fundamenta y se concreta

el modelo de convivencia del centro. En él se coordinan las acciones de toda la
comunidad educativa para construir un clima escolar dentro de los principios
democráticos que garanticen una educación para todos. Será elaborado por la comisión
de convivencia con la participación efectiva, en el seno del Consejo Escolar, de todos los
sectores de la comunidad educativa, y será aprobado por el Consejo Escolar del centro.
El plan de convivencia se enmarca en el proyecto educativo y deberá promover procesos
de participación activa que contribuyan a prevenir y resolver pacíficamente los conflictos.
Incluirá, entre otros, los siguientes apartados:

- El diagnóstico del estado de la convivencia en el centro.

- Los valores de convivencia y los objetivos y prioridades.
- La concreción de los derechos y deberes del alumnado y del resto de la
comunidad educativa.
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- Las normas de convivencia.
- Las actividades que se programen para un buen clima de convivencia.
- Deberá diferenciar con claridad el acoso escolar, el ciberacoso, la violencia de
género y la LGTBIfobia de otras conductas esporádicas que dificulten la
convivencia.
- Las estrategias de difusión, seguimiento y evaluación del plan de convivencia.
- Las actividades de formación dirigidas a los miembros de la comunidad educativa
- Las estrategias para la promoción de la igualdad efectiva entre hombres y
mujeres

LAS NORMAS DE CONVIVENCIA

Serán de carácter educativo y deberán contribuir a crear el adecuado clima de respeto,

así como de responsabilidad y esfuerzo en el aprendizaje, necesarios para el
funcionamiento de los centros docentes.
Las normas de convivencia del centro y sus posibles modificaciones serán elaboradas
por la comisión de convivencia, informadas por el Claustro de profesores y el Consejo
Escolar y aprobadas por el Consejo Escolar del centro.
La participación del alumnado en la elaboración y seguimiento de las normas de
convivencia habrá de facilitar el desarrollo de su autonomía moral.
Estas normas, una vez aprobadas, serán de obligado cumplimiento para todos los
miembros de la comunidad educativa. Se harán públicas procurando la mayor difusión.
Se corregirán los actos contrarios a las normas de convivencia que realicen los alumnos
en el recinto escolar o durante la realización de actividades complementarias y
extraescolares y servicios educativos complementarios (las medidas deberán ser de
carácter educativo y recuperador y tener en cuenta la situación y condiciones personales
del alumnado).
Igualmente se podrán corregir todos aquellos actos de alumnos realizados fuera del
recinto escolar cuando tengan su origen o estén directamente relacionados con la
actividad escolar o afecten a los miembros de la comunidad educativa.

La memoria anual de evaluación de la convivencia

Los centros educativos elaborarán al final de cada curso escolar la memoria del plan de
convivencia, que se incorporará a la memoria final de curso. Deberá contener, al menos,
los siguientes apartados:
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- Grado de implantación y nivel de consecución de los objetivos propuestos.
- Actuaciones realizadas y grado de participación de los distintos sectores de la
comunidad educativa.
- Evaluación del proceso y de los resultados, conclusiones y propuestas de continuidad
y de mejora para cursos sucesivos.

AGENTES DE LA CONVIVENCIA ESCOLAR

La comunidad educativa de los centros públicos
Todos los miembros de la comunidad educativa son agentes responsables de la
convivencia y participarán, a través de los cauces establecidos en el seno del Consejo
Escolar, en la elaboración, en el desarrollo, en el control del cumplimiento y en la
evaluación del plan de convivencia y de las normas de convivencia del centro.
La comunidad educativa en su conjunto velará por la aplicación de aquellas medidas
que vayan encaminadas a fomentar el respeto a las diferencias, entre ellas, la igualdad
efectiva entre mujeres y hombres.
La comunidad educativa fomentará, mediante medidas educativas, que el alumnado
ponga en conocimiento del personal del centro aquellas situaciones que puedan poner
en grave riesgo la integridad física o moral de los miembros de la comunidad educativa,
cuando la comunicación pueda hacerse sin riesgo propio ni de terceros.

Al Consejo Escolar le corresponde, entre otras funciones:

- Realizar un informe anual del seguimiento y evaluación del plan de convivencia.
- Elegir a los integrantes de la Comisión de Convivencia.
- Proponer actuaciones de mejora de la convivencia para todos los sectores.
- Informar las normas y los planes de convivencia y sus modificaciones previstas.
- Aprobar el Plan de Convivencia.
La Comisión de Convivencia estará formada por el director, el jefe de estudios, un
profesor, un padre de alumno y un representante del alumnado en el Consejo Escolar.
Será presidida por el director del centro que podrá delegar en el jefe de estudios y le
corresponden, entre otras, las siguientes funciones:
- Promover que las actuaciones en el centro favorezcan la convivencia, el respeto
y la tolerancia.
- Proponer el contenido de las medidas a incluir en el plan de convivencia del
centro.
18
- Evaluar periódicamente la situación de la convivencia en el centro y los
resultados de aplicación de las normas de convivencia.
- Elaborar el plan de convivencia y las normas de convivencia, así como sus
modificaciones.

El Claustro de Profesores. Le corresponden las siguientes funciones:

- Realizar propuestas para la elaboración del plan de convivencia y de las normas
de convivencia del centro.
- Participar en la evaluación anual de la convivencia en el centro.

El director del centro. Le corresponden, entre otras:

- Garantizar las condiciones para que exista en el centro un adecuado clima
escolar que favorezca el aprendizaje y la participación del alumnado.
- Garantizar el cumplimiento de las normas establecidas en las normas de
convivencia y las normas de organización y funcionamiento del centro.
- Resolver los conflictos escolares e imponer las medidas correctoras que
corresponda a los alumnos, sin perjuicio de las competencias que se le atribuyan
al profesorado, Consejo Escolar o jefe de estudios.

El jefe de estudios. Le corresponden las siguientes funciones:

- Coordinar y dirigir las actuaciones establecidas en el plan de convivencia del
centro y en las normas de convivencia del centro.
- Organizar la atención educativa del alumnado al que se le suspendiese el derecho
de asistencia a la clase, en el marco de lo dispuesto en las normas de convivencia
o de organización y funcionamiento del centro.
- Ser el responsable directo de la aplicación de las normas de convivencia y de la
disciplina escolar. El jefe de estudios deberá llevar control de las faltas del
 alumnado cometidas contra las citadas normas de convivencia y de las medidas
correctoras impuestas y deberá informar de ellas, periódicamente, a los padres
o tutores, cuando el alumno es menor.

El orientador. Le corresponden las siguientes actuaciones dirigidas a la mejora de la

convivencia escolar:
- Asesoramiento al profesorado en prevención e intervención ante problemas de
comportamiento del alumnado.
19
- Colaboración con el jefe de estudios en la adecuación del plan de acción tutorial
al plan de convivencia del centro, impulsando y programando dentro del mismo
la realización de actividades que favorezcan un buen clima de convivencia
escolar, y la prevención y resolución de conflictos.
- Asesorar en la Comisión de convivencia cuando sea requerido para ello.

Tutores y profesores. Les corresponde

- La coordinación del profesorado que imparte docencia al grupo de alumnos de
su tutoría.
- Mediar y garantizar la comunicación entre el profesorado, el alumnado y los
padres
- Incorporar en sus sesiones contenidos proactivos para la mejora de la
convivencia escolar.
- Valorar la justificación de las faltas de asistencia de sus alumnos en casos
reiterativos.
- Poner en conocimiento de los padres o tutores, cuando el alumno sea menor, las
normas de convivencia.
Fomentar la participación del alumnado en las actividades programadas en el
plan de convivencia.

Los alumnos. Les corresponde:

- Participar de forma activa, a través del Consejo Escolar, en el proceso de
elaboración, aprobación, cumplimiento y evaluación de las normas de
convivencia.
- Los delegados, en materia de convivencia, tendrán las siguientes funciones:
o Fomentar la convivencia entre los demás alumnos de su grupo
 o Colaborar con los profesores y con los órganos de gobierno del centro
para el buen funcionamiento del mismo.
o Participar en acciones y programas de mejora de la convivencia del
centro, de ayuda entre iguales, en especial en casos de acoso, de igualdad
efectiva entre hombres y mujeres y LGTBIfobia.
- La junta de delegados, en relación a la convivencia, tendrá las siguientes
funciones:
o Canalizar las propuestas del alumnado y delegados de grupo en relación
20
a la mejora de la convivencia.
o Impulsar la participación del alumnado y delegados en acciones y en
programas específicos de mejora de la convivencia como alumnos
ayudantes.
o Conocer y difundir entre el alumnado acciones para la mejora de la
convivencia en el centro.

Los padres o tutores, cuando el alumno es menor, contribuirán a la mejora del clima
educativo del centro y al cumplimiento de las normas, promoviendo en sus hijos o
representados el respeto por las normas de convivencia del centro y a las orientaciones
y decisiones del profesorado en relación con la convivencia escolar.

La Administración educativa llevará a cabo las siguientes actuaciones:

- Planificar, desarrollar y asesorar sobre medidas dirigidas a favorecer la
convivencia en los centros y servicios educativos, cuando así lo requiera, en
colaboración con las diferentes Direcciones de Área Territorial.
- Elaborar y coordinar la página web Mejora de la convivencia y clima social de
los centros docentes de la Comunidad de Madrid.

La Inspección educativa tendrá las siguientes funciones en materia de convivencia

en centros educativos:
- Informar y asesorar a los equipos directivos, en casos de conflictos de
convivencia, acoso y ciberacoso colaborando en su análisis y valoración y, en su
caso, elaborando propuestas de intervención.
- La supervisión y seguimiento de la aplicación por parte de los centros docentes
de sus planes de convivencia, así como proponer modificaciones de mejora.
El Observatorio para la Convivencia Escolar realizará aquellas funciones que le
sean asignadas en su normativa reguladora, participando como agente externo al centro
en materia de convivencia escolar.

CONDUCTAS CONTRARIAS A LAS NORMAS DE CONVIVENCIA

Se considerarán faltas de disciplina las conductas contrarias a las normas de convivencia
establecidas por el centro.
Las infracciones tipificadas se denominan faltas y se clasifican en leves, graves y muy
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graves.
La tipificación de las mismas, así como de las medidas correctoras correspondientes,
deberán figurar en las normas de convivencia del centro.
Asimismo, se tendrán en cuenta circunstancias atenuantes o agravantes.

Faltas LEVES:
Cualquier infracción de las “Normas de Convivencia” cuando por su entidad no llegara
a tener la consideración de GRAVE o MUY GRAVE.
Se corregirán de forma inmediata de acuerdo con lo que disponga el plan de convivencia
y entre las medidas correctoras que se contemplen estarán las siguientes:
- Amonestación verbal o por escrito.
- Expulsión de la clase con comparecencia inmediata ante el Jefe de Estudios o el
Director.
- Privación del tiempo de recreo.
- La realización de tareas de carácter académico o de otro tipo, que contribuyan al
mejor desarrollo de las actividades del centro o dirigidas a mejorar el entorno
ambiental del centro.
- Cualquier otra medida adoptada con los alumnos, prevista en el plan de
convivencia del centro.

Faltas GRAVES:
- Las faltas reiteradas de puntualidad o asistencia no justificadas.
- Las conductas que impidan el estudio a los compañeros
- Los actos de incorrección o desconsideración con compañeros u otros miembros
de la comunidad educativa.
- Los actos de indisciplina y los que perturben el desarrollo de las actividades.
 - Los daños causados en instalaciones o material del centro o en los bienes o
pertenencias de los miembros de la comunidad educativa.
- La sustracción, daño u ocultación de los bienes o pertenencias de los miembros
de la comunidad educativa.
- La participación en riñas mutuamente aceptadas.
- La alteración grave e intencionada del normal desarrollo de la actividad escolar
- que no constituya falta muy grave.
- La reiteración en el mismo trimestre de dos o más faltas graves.
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- Los actos que impidan la correcta evaluación del aprendizaje por parte del
profesorado o falseen los resultados académicos.
- La omisión del deber de comunicar al personal del centro las situaciones de acoso
o que puedan poner en riesgo grave la integridad física o moral de otros
miembros de la comunidad educativa, que presencie o de las que sea conocedor.
- La difusión por cualquier medio de imágenes o informaciones de ámbito escolar
o personal que menoscaben la imagen personal de miembros de la comunidad
educativa o afecten a sus derechos.
- El incumplimiento de la medida correctora por una falta leve así como el
incumplimiento de las medidas dirigidas a reparar los daños o asumir su coste, o
a realizar las tareas sustitutivas impuestas

Las faltas graves se corregirán, además de las medidas correctoras previstas para las
leves:
o Realización de tareas dirigidas a reparar los daños causados o mejorar el
entorno ambiental.
o Expulsión de la sesión de clase con comparecencia inmediata ante el jefe
de estudios o el director, la privación del tiempo de recreo o cualquier
otra medida similar de aplicación inmediata
o Prohibición de participar en actividades extraescolares por el periodo
máximo de un mes ampliables a tres en el caso de actividades que
incluyan pernoctar fuera del centro
o Expulsión de determinada clase por un máximo de 6 días lectivos
consecutivos.
o Expulsión del centro por un máximo de 6 días lectivos.
Faltas MUY GRAVES:
- Los actos graves de indisciplina, desconsideración, insultos o falta de respeto
hacia los profesores o demás personal del centro.
- El acoso físico o moral a compañeros.
- El uso de la violencia, las agresiones u ofensas graves.
- Las discriminaciones, las vejaciones o las humillaciones de cualquier miembro de
la comunidad educativa, ya sean por razón de nacimiento, raza, sexo, orientación
sexual…etc.
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- La grabación o difusión a través de cualquier medio o soporte de agresiones o
humillaciones cometidas.
- Los daños graves causados intencionadamente por el uso indebido de
instalaciones o material del centro.
- La suplantación de personalidad y la falsificación o sustracción de documentos
académicos.
- El uso, la incitación o introducción en el centro de objetos o sustancias
perjudiciales para la salud.
- El acceso indebido o sin autorización a documentos, ficheros y servidores del
centro.
- La grave perturbación del normal desarrollo de las actividades del centro y en
general cualquier incumplimiento grave de las normas de convivencia.
- La perturbación grave del normal desarrollo de la actividad académica.
- La reiteración en el mismo trimestre de dos o más faltas graves.
- El incumplimiento de la medida correctora impuesta por una falta grave.

Las faltas muy graves se corregirán, además de las medidas correctoras previstas para
las graves:
o Realización de tareas en el centro fuera del horario lectivo, que podrán
contribuir al mejor desarrollo de las actividades del centro o, si procede,
dirigidas a reparar los daños causados.
o Prohibición temporal de participar en actividades extraescolares o
complementarias por un periodo máximo de 3 meses que podrán
ampliarse hasta final de curso para las actividades que se incluyan
pernoctar fuera del centro.
o Cambio de grupo del alumno.
 o Expulsión de determinadas clases por un periodo superior a 6 días e
inferior a 10.
o Expulsión del centro por un periodo superior a 6 días lectivos e inferior a
20.
o Cambio de centro, cuando no proceda la expulsión definitiva por tratarse
de un alumno de enseñanza obligatoria o de formación profesional básica
(alumnos hasta 18 años. La Consejería le garantizará un puesto en otro
centro sostenido con fondos públicos).
24
o Expulsión definitiva del centro.

Órganos competentes para la adopción de medidas correctoras:

- Para las faltas leves será competente cualquier profesor que presencie o tenga
conocimiento de la falta dando cuenta al tutor del grupo y al jefe de estudios.
- Para las faltas graves los profesores del alumno, el Jefe de Estudios y el Director.
- La imposición de faltas muy graves corresponde exclusivamente al director del centro

Criterios para la adopción de medidas correctoras y medidas cautelares

- Ha de tener carácter educativo y de mejora de la convivencia en el centro.
- En los casos de absentismo o riesgo de abandono escolar se procurará que las
medidas correctoras que se adopten eviten que se acentúen estos problemas.
- No se podrá privar a ningún alumno de su derecho a la educación obligatoria.
- Se deberán tener en cuenta, con carácter prioritario, los derechos de la mayoría
de los miembros de la comunidad educativa y los de las víctimas de actos
antisociales, de agresiones o de acoso, primando el interés superior de los
menores sobre cualquier otro interés.
- Con el fin de no interrumpir el proceso educativo, cuando se apliquen las medidas
correctoras de prohibición de participar en las actividades extraescolares o la de
expulsión temporal de determinadas clases o del centro, el alumno realizará las
tareas y actividades que determine el profesorado que le imparte clase,
coordinados, en su caso por el tutor.
- Se valorarán la edad, situación y circunstancias personales, familiares y sociales
del alumno, y demás factores que pudieran haber incidido en la aparición de las
conductas o actos contrarios a las normas establecidas.
- Se deberán tener en cuenta las secuelas psicológicas y sociales de los agredidos,
 así como la repercusión social en el entorno del alumno creada por las conductas
objeto de medidas correctoras.
- Las medidas correctoras deberán ser proporcionales a la edad de los alumnos y
su situación socioemocional, así como a la naturaleza y gravedad de las faltas
cometidas, y deberán contribuir a la mejora del clima de convivencia del centro.

Atenuantes y agravantes:
Para la graduación de las medidas correctoras se apreciarán las circunstancias que
25
concurran en la conducta:
- Se considerarán ATENUANTES el “arrepentimiento espontáneo”, la “ausencia de
intencionalidad” y la “reparación inmediata del daño causado”, la “colaboración
en el esclarecimiento de los hechos”
- Se considerarán AGRAVANTES la “premeditación”, la “reiteración”, “el uso de la
violencia y las actitudes amenazadoras, desafiantes e irrespetuosas”, “causar
daño a compañeros de menor edad o recién incorporados al centro”, “las
conductas que atenten contra el derecho a no ser discriminado por razón de
nacimiento, raza, sexo…” , “los actos realizados en grupo que atenten contra los
derechos de cualquier miembro de la comunidad educativa”, “la gravedad de los
perjuicios causados al centro o a cualquier de los integrantes de la comunidad
educativa” y “la publicidad o jactancia relativas a conductas perturbadoras de la
convivencia a través de aparatos electrónicos u otros medios”.

Responsabilidad y reparación de los daños:

- Los alumnos quedan obligados a reparar los daños que causen de forma
intencionada o por negligencia a las instalaciones y material del centro y a las
pertenencias de otros miembros de la comunidad educativa (o a hacerse cargo
del coste económico de su reparación). Los padres o tutores asumirán la
responsabilidad civil que les corresponda.
- En las normas de organización y funcionamiento se podrán fijar supuestos en los
que la reparación de los daños pueda sustituirse por la realización de tareas que
contribuyan al mejor desarrollo de las actividades o la mejora del entorno
ambiental.
- La reparación económica no eximirá de la sanción.
 - Cuando se trate de agresiones físicas y morales a compañeros o miembros de la
comunidad educativa, se deberán presentar excusas y reconocer la
responsabilidad, bien en público o en privado.

EL PROCEDIMIENTO DISCIPLINARIO
Tenemos que hablar de 2 procedimientos:

Procedimiento ordinario: que se aplicará con carácter general a las faltas leves y
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graves cuando, por resultar evidente la autoría y los hechos, sea innecesario el
esclarecimiento de los mismos.
Podrá utilizarse también en relación con las faltas muy graves en caso de ser flagrante
la falta y resultar evidente la autoría y los hechos cometidos (no obstante si quien va a
imponer la sanción considera que se debe proceder a la “expulsión del centro” o al
“cambio de centro por no proceder expulsión al tratarse de un alumno de enseñanza
obligatoria”, remitirá el expediente al director para que se tramite mediante el
“procedimiento especial”.
- Las faltas se sancionarán de forma inmediata por el profesor, quién comunicará
al Tutor y al Jefe de Estudios la sanción impuesta.
- Cuando sea necesaria información para valorar correctamente los hechos, el Tutor
oirá al alumno infractor y a cuantos considere necesario. Posteriormente impondrá
la medida correctora correspondiente (o la elevará al Jefe de Estudios o Secretario
si son estos los competentes para la resolución).
- En cualquier caso siempre habrá de respetarse el derecho a audiencia del alumno
o sus representantes legales con carácter previo a la adopción de la sanción.
- El alumnado y sus familias o tutores recibirán comunicación por escrito de todas
- y cada una de las medidas correctoras que les sean aplicadas a sus hijos por el
procedimiento disciplinario ordinario
- La duración del procedimiento no podrá exceder de 10 días lectivos y se deberá
dejar constancia escrita de la sanción adoptada (con hechos y fundamentos que
la sustentan).

Procedimiento especial: se seguirá, con carácter general, en las faltas graves y muy
graves.
- El Director, una vez oídos el alumno o sus padres o tutores, cuando el alumno sea
menor, en el plazo de cuatro días lectivos desde que se tuvo conocimiento de la
 comisión de la falta, incoará el expediente y designará un instructor, que será un
profesor del centro (La incoación del expediente y el nombramiento del instructor
se comunicarán al alumno y, si este es menor de edad, igualmente a sus padres
o tutores)
- Como medida provisional y comunicándolo al Consejo Escolar, al alumno y a sus
padres o tutores, podrá decidir la suspensión de asistencia al centro, o a
determinadas actividades o clases, por un período no superior a cinco días
lectivos. Este plazo será ampliable, en supuestos excepcionales, hasta la
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finalización del expediente.
- El plazo para la incoación del expediente disciplinario podrá ser ampliado hasta
los diez días lectivos si se hubiera activado el protocolo de acoso.
- Los alumnos y sus padres o tutores podrán solicitar la recusación del instructor.
- En un plazo no superior a 4 días lectivos el instructor notificará al alumno o a sus
padres el “Pliego de Cargos”, en el que se expondrán con precisión los hechos
imputados así como las medidas correctoras que se pudieran imponer.
- El alumno, o sus representantes, tendrán 4 días lectivos para presentar
alegaciones, pudiendo proponer la prueba que considere oportuna (deberá
sustanciarse en el plazo de 2 días lectivos). En los casos en los que, tras la entrega
del pliego de cargos, el alumno o sus padres reconozcan los hechos causantes,
acepten las medidas correctoras propuestas y renuncien explícitamente y por
escrito a formular alegaciones y proponer pruebas, el instructor dará por concluida
la instrucción del expediente
- Finalizada la instrucción del expediente el instructor formulará (en el plazo de 2
días lectivos) la “Propuesta de Resolución”, que deberá contener los hechos o
conductas que se imputan, la calificación de los mismos, las circunstancias
atenuantes o agravantes y la medida correctora que se le impone.
- El instructor dará audiencia al alumno y, si es menor, a sus padres o
representantes legales, para comunicarles esta propuesta y la apertura de un
plazo de 2 días lectivos para alegar cuanto estimen oportuno. Si el alumno, o sus
padres, muestran conformidad o renuncia al plazo de 2 días para alegar, deberán
manifestarlo por escrito.
- El instructor elevará al Director el expediente completo con la “Propuesta de
Resolución” y las “Alegaciones” que se hubieran formulado, quién adoptará la
Resolución y la notificará.
 - El director adoptará la resolución y la pondrá en conocimiento del claustro de
profesores.
- El procedimiento deberá resolverse en un máximo de 18 días lectivos desde su
inicio. La Resolución deberá indicar el órgano ante el que cabe reclamar en caso
de disconformidad.

Cuestiones generales de procedimiento:

o Todas las citaciones a los padres de los alumnos se realizarán por
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cualquier medio que permita dejar constancia de su recepción y su fecha.
o La incomparecencia, sin causa justificada, del padre o representante, o
bien la negativa a recibir notificaciones, no impedirá la continuación del
procedimiento y la adopción de la medida correctora.
o La Resolución adoptada será notificada al alumno, o sus padres o
representantes, así como al Consejo Escolar, al Claustro y al Servicio de
Inspección
o Las medidas correctoras adoptadas por un centro (público o privado
sostenido con fondos públicos) podrán ser objeto de reclamación ante el
Director del Área Territorial / Delegado Territorial en el plazo de 4 días
hábiles.
o La resolución del Director de Área Territorial pondrá fin a la vía
administrativa.
o Los centros privados no concertados podrán adaptar sus normas de
convivencia al procedimiento descrito.

- La Consejería de Educación habilitará un crédito para compensar

económicamente a profesores que realicen actuaciones fuera de la jornada
laboral en su actuación como instructores cuando deban realizarse fuera del
horario lectivo