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Salarios no son determinados por productividad, sino convenciones sociales. Son un punto de
referencia para los contratistas. Se desplaza la curva de demanda por trabajo.
1. Los demandantes de trabajo doméstico se ubican en cotos residenciales en los que vecinos
cercanos tienen una interacción cotidiana.
2. Este grado de interacción incide en la definición de lo que sería un “salario justo” para las
empleadas domésticas.
3. Cada uno de los hogares desea contar con una sola trabajadora si logran acordar una
relación laboral.
4. Pueden existir diversos tipos de cotos, en tanto que los ingresos promedio de las familias
son diferentes.
5. Los salarios son establecidos por los demandantes atendiendo a los siguientes factores: i
salarios mínimos que indican una cota inferior; ii salarios factibles que definen una cota
superior a partir del ingreso disponible de las familias; iii salarios convencionales que se
definen como el promedio de los salarios existentes entre los miembros de cada vecindad de
un coto.
6. Los oferentes determinan si aceptan o no la propuesta salarial.
1. Se supone que la oferta es rígida, por lo que durante el periodo de análisis el número total
de trabajadoras está dado.
2. Las trabajadoras emigran de su pueblo para trabajar en cotos habitacionales específicos.
3. Tomas la decisión de contratarse (aceptar o rechazar) en base al salario ofrecido.
4. Están dispuestas a permanecer desempleadas cuando el salario previo es superior al
ofrecido, a menos de que ya lleven mucho tiempo sin conseguir empleo.
5. La información se transmite de manera local, por lo que por periodo de tiempo solo pueden
conocerse los salarios ofrecidos en un número limitado de vecindades.
6. Los contratos se establecen anualmente, aunque no se definen de manera sincrónica.
7. Una vez establecido el arreglo contractual, éste se puede romper de manera idiosincrática
(al azar), por lo que hay posibilidad de buscar un nuevo empleo en otra vecindad en la que
se ubiquen sus amistades o en cualquier otra elegida al zar (una por mes).
1. Los salarios los fijan los empleadores en función de qué tan fuerte es la oferta laboral.
2. Si suponemos que la oferta es reducida; es decir, en los x periodos previos a la negociación
contractual, no se recibieron solicitudes laborales (Oi)
3. 1ª alternativa: si Oi = 0 y Ui < W, entonces W = Wmin
4. 2ª alternativa: si O = 0 y Ui >= W, entonces W = max{Wmin, W}
5. En donde W es el salario ofrecido por la i-ésima familia en periodo actual (t); ui es la cota
superior de los salarios posibles; Wmin es el salario mínimo para trabajo no calificado en la
ciudad; W es el salario convencional definido con el promedio observado entre todas las
familias que integran a la vecindad centrada en i en el periodo previo (t -1)
1. La cota superior que define el ingreso de cada familia se determina con una distribución
uniforme U ~ [20, 50].
2. Este ingreso es fijo a lo largo de la simulación y es específico a cada familia.
3. Los salarios se negocian para 12 periodos (un año), pero no se definen de forma sincrónica.
4. La relación contractual puede romperse en c/periodo para solo k < N familias, en cuyo caso
la trabajadora desocupada puede buscar empleo en las vecindades de sus amistades y en
una sola vecindad del coto por periodo.
5. Búsqueda de empleo: en caso de no encontrar empleo por x periodos, las trabajadoras
tendrán que aceptar una disminución en sus salarios.
1. Suponemos que las solicitudes de empleo son elevadas; es decir, en los x periodos previos a
la negociación contractual, se recibieron otras solicitudes laborales cuando ya había una
empleada doméstica en la familia, en este caso el salario se establece de acuedo al siguiente
criterio.
2. Por lo tanto, entre mayores sean las solicitudes, baja la disposición a ofrecer el salario
convencional.
3. Cabe notar que con esta formulación existen percepciones diferenciadas en los hogares
sobre la fuerza de la oferta laboral.
4. Un hogar puede prescindir de una trabajadora si su propuesta salarial es rechazada, no
negocia otro salario.
7) Tipos de desempleo
1. Con oferta rígida y vacantes disponibles, el desempleo se produce cuando ante un choque
idiosincrático se rompe una relación contractual y la trabajadora busca empleo sin
encontrarlo, o bien por terminación de contrato y propuesta salarial no atractiva.
2. Hay dos tipos de desempleo: voluntario e involuntario.
1. En el modelo, tanto hogares como trabajadoras tienen redes de amistad que resultan ser
funcionales en el mercado laboral.
2. Los hogares se ubican en vecindades que les son útiles para establecer un salario
convencional que se consideran equitativo, y que contribuyen a diseminar información en
término de plazas vacantes, cuando algún vecino busca empleadas domésticas.
3. Las empleadas domésticas presentan amistades con lazos fuertes que trabajan en el mismo
coto, pero que además les permiten obtener información de salarios en otras vecindades.
4. Estas amistades se ubican al azar en los hogares al inicio de la corrida, pero en caso de
ruptura contractual o terminación de contrato pueden cambiar de ubicación.
5. Cuando una empleada se encuentra sin chamba, puede buscar vacantes preguntando a sus
amigas por vacantes y por salarios, de no encontrar opciones busca al azar en una vecindad
cualesquiera por periodo.
1. Para describir un coto habitacional podemos pensar en una retícula tipo autómata celular sin
fronteras.
2. El coto está conformado por barrios que proveen de información local.
3. Empleadas desocupadas aceptan el trabajo aún si ello implica una reducción salarial solo
cuando llevan un tiempo sin chamba.
4. También es posible que el salario ofrecido en la misma casa se reduzca si las condiciones del
entorno (salario global y local, cambian), lo que daría inicio a una búsqueda de empleo por
terminación de contrato.