Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Podemos definir la medicina perinatal como todas aquellas acciones encaminadas al diagnóstico y
tratamiento de la patología que pueda presentar el feto y al recién nacido, así como la
identificación y valoración precoz de los factores de riesgo que actúan sobre la salud de la madre,
feto y recién nacido, estableciendo los recursos asistenciales precisos para su correcta atención,
para la prevención de un resultado perinatal deficiente, intentando evitar la muerte fetal
intrauterina, la muerte neonatal y la lesión residual en el recién nacido.
EMBARAZO:
- Diabetes:
o Pregestacional: es aquella cuyo diagnóstico precede al embarazo.
PARTO:
- Período de dilatación: Los problemas que se pueden presentar en este período pueden
ser:
o Anestesia peridural: puede generar problemas de hipotensión arterial o anestesia
intratecal
o Prolapso de cordón
o Procúbito de cordón
- Período expulsivo: las alteraciones más frecuentes son:
o Bradicardia del expulsivo
o Retención de hombros
- Período de alumbramiento: entre las emergencias de este período:
o Inversión uterina: es la salida a la vagina o al exterior de la vulva, de la cara
endometrial del útero. Puede o no tener adherida una parte o toda la placenta.
o Retención de placenta: que puede corresponder a lóbulos placentarios aberrantes
o fragmentos placentarios retenidos
- Rotura prematura de membranas: es la rotura de las membranas ovulares antes del inicio
del trabajo de parto.
- Lesiones del canal vaginal: en relación a parto traumáticos
- Rotura uterina: en pacientes con antecedentes de cicatriz uterina, parto prolongado o
precipitado, hiperdistensión uterina
PUERPERIO:
- Hemorragia post parto (inmediata): primeras 24hrs
o Inercia uterina: miometrio agotado, incapaz de contraerse
o Desgarros del canal del parto
o Restos placentarios: extracción incompleta de la placenta, quedando fragmentos
de cotiledones y/o membranas fetales en la cavidad uterina
o Rotura uterina: parto asociado a cicatriz uterina
- Hemorragia tardía del puerperio: después de 24hrs
o Endometritis
o Restos ovulares
o Enfermedad trofoblástica gestacional
o Alteraciones de la coagulación
- Infecciosas: Habitualmente las complicaciones infecciosas puerperales se detectan por un
cuadro febril. La fiebre puerperal se reconoce por fiebre posterior a las 24 h post parto,
con 2 tomas de T° axilar ≥ 38ºC separadas por 6 horas.
o Endometritis puerperal: Corresponde a una infección bacteriana de la cavidad
uterina, secundaria a la invasión ascendente de microorganismos de la flora
vaginal o enteral, con compromiso principalmente endometrial, pero
ocasionalmente miometrial (endomiometritis) y parametrial. Es la infección
puerperal más frecuente, su incidencia es de 1-3% de los partos vía vaginal, 5-10%
de las cesáreas electivas y 15-20% de las cesáreas de urgencia. Se caracteriza por:
• Presencia de fiebre > 38°C, en dos tomas separadas por 6 horas, habitualmente
en el 3-5 día del puerperio, asociado a alguno de los siguientes signos: •
Sensibilidad uterina • Sub-involución uterina (sin retracción adecuada) • Loquios
turbios o de mal olor. El diagnóstico es eminentemente clínico, sin embargo, debe
solicitarse un hemograma con recuento de leucocitos, pues habitualmente se
presentará leucocitosis. En caso de fiebre alta es útil un hemocultivo. Los
gérmenes más frecuentemente involucrados son: • E. Coli • Bacteroides Fragilis •
Streptococcus Pyogenes. El esquema antibiótico a utilizar es: Clindamicina (600 mg
c/8 h ev) + Gentamicina (3-5 mg/kg/día ev en una dosis diaria) por 48 h (o hasta
24h post caída de la fiebre) y luego completar un tratamiento vía oral de amplio
espectro (Amoxicilina + ácido clavulánico) por 10 días en total
o Mastitis puerperal: Corresponde a una mastitis infecciosa, originada en la
proliferación bacteriana al interior de un túbulo lactífero ocluido. El cuadro clínico
se caracteriza por • Fiebre, habitualmente T° axilar 39-40°C • Eritema y dolor de
un sector de la mama • Compromiso del estado general • Mialgias.
Mastitis linfangítica: Corresponde al 90% de los episodios de mastitis
puerperales; el compromiso infeccioso es superficial, no existe un
absceso.
Mastitis abscedada: El 10% de las mastitis son de tipo abscedadas; en este
caso, se desarrolla una colección purulenta en el parénquima mamario.
o Infección de herida operatoria: Implica infección de la episiotomía o de la incisión
abdominal en una cesárea. Se trata en general de infecciones polimicrobianas, por
gérmenes provenientes de la vagina. La infección de la episiotomía o de a herida
de cesárea es habitualmente por los mismos gérmenes que la endometritis
puerperal.