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La autoestima a lo largo del desarrollo.


A lo largo de nuestra vida, el significado de la autoestima no es del todo estable, todas
las experiencias que vivimos van modificando y moldeando este concepto.
¿Qué es la autoestima?
El amor que sentimos por nosotros mismos está definido como autoestima, está
relacionado con la forma en la que aprendemos a relacionarnos, tratarnos y a valorarnos
a nosotros mismos. Esto incluye todo tipo de actitud, creencia y comportamiento
también hacia nosotros mismos.
Evolución de la autoestima en la infancia
Para evaluar la autoestima a lo largo de la vida, debemos iniciar por la autoestima al
comienzo de la infancia, en un rango de edad comprendida entre los 4 a 7 años, en estas
edades podemos hablar de 4 áreas relevantes y distintas:
- Aprobación por parte de los iguales.
- Capacidad física.
- Admisión por parte de los padres.
- Competencia cognitivo-académica.
Desde temprana edad, los niños pueden describirse como hábiles y competentes en cada
una de las áreas antes mencionadas, en cada caso particular puede variar la autoestima
de cada infante. La autoestima se va formando y construyendo desde muy pequeños y
va avanzando según el desarrollo de cada niño.
Autoestima a partir de los 6 años
Se evidencian cambios de importancia en la autoestima y se va desarrollando según la
relación y contacto que mantengan los niños a diario. Antes de los 6 años, los niños
suelen tener una autoestima positiva.
Autoestima desde los 7 a 8 años
La autoestima tiene un enfoque más global y se va consolidando más que en las edades
anteriores. Las enseñanzas familiares y educativas parecen tener una gran influencia en
el desarrollo de la autoestima de una forma positiva, pero no es lo único que ayuda a
fortalecer la autoestima. El contacto con otras personas como profesores y otros niños,
además de los distintos escenarios en los que se desenvuelven, ayudan a formar una
buena autoestima durante estas edades de nuestra infancia.
La autoestima depende también de la manera de ser de cada niño, es decir, que el niño le
dé importancia o no a diversos aspectos de sus gustos, ejemplo, que sea poco ágil en
deportes y, por lo tanto, prefiere la música. Para crear una buena autoestima, los niños
no se basan únicamente en la manera negativa o positiva que otros opinen de ellos, sino
que va también formada por aspectos externos y a sus propias preferencias.
¿Cómo evoluciona la autoestima a lo largo de la vida?
En el ámbito de la psicología del desarrollo, existen modelos o patrones en cada etapa
de la vida, que ayudan a conservar un buen autoconcepto a medida que se va creciendo.

1.- Desconfianza vs. Confianza: edad de 0 a 18 meses, en esta etapa se fortalecen los
vínculos maternos, el infante debe interactuar con sus padres y familiares
cariñosamente, porque si no mantiene este contacto, más adelante al avanzar en edad
sería un niño miedoso y asustadizo.

2.- Vergüenza vs. Autonomía: edad de 18 meses a 3 años, en esta etapa se debe
procurar que los niños tengan un desarrollo muscular y de exploración. El niño debe
buscar y encontrar nuevas texturas, sensaciones y sabores, no puede estar siempre en un
mismo cuarto encerrado, debe aprender en espacios nuevos, de lo contrario crecerá
siendo dependiente y miedoso.

3.- Culpa vs. Iniciativa: edad de 3 a 6 años, en esta etapa de la niñez se debe motivar
los comportamientos sociales, socializar con distintos grupos de niños. Enseñarles el
adecuado comportamiento en sociedad, de no realizarse estaremos en presencia de un
niño introvertido y tímido.

4.- Inferioridad vs. Laboriosidad: edad de 6 a 12 años, en esta etapa la escuela ejerce
un papel vital y de importancia, contar con el apoyo de su grupo de amigos y
compañeros. Crecer en un ambiente sano nos ofrece lograr óptimos resultados escolares
y lograr afianzar la autoestima.

5.- Confusión vs. Identidad: edad de 12 a 20 años, en esta etapa la identidad se forma.
Conformar nuestro grupo de amigos con los que compartir ideas y sentirse cómodo es
prioritario a esta edad. Esa época donde comienzan los flirteos y las relaciones amorosas
ayudan a desarrollar nuestra autoestima. De ser esto inexistente, el no encontrar
amistades acordes o vivir aislado y en timidez ocasionará una confusión de identidad.

6.- Aislamiento vs. Intimidad: edad de 20 a 40 años, mantener relaciones amorosas o


de amistades estables, realizar pequeñas metas, un buen empleo donde sentirse cómodo
son muy importantes para ayudar a mantener nuestra autoestima en positivo, de lo
contrario sentiremos que somos inferiores a otras personas.
7.- Estancamiento vs. Generatividad: edad de 40 a 65 años, en este periodo se debería
ya lograr tener un buen empleo, una estabilidad económica y en algunos casos ya tener
establecida una familia, esto es la clave para ayudarnos a tener una buena autoestima.
En especial, lograr establecer una familia es la piedra angular de la autoestima.

8.- Desesperación vs. Integridad: de 65 años hasta su fallecimiento, en esta última


etapa de la vida, es donde todo ser humano realiza una reevaluación de su vida. Si una
persona considera que se ha llevado una vida cruel, aburrida e injusta, tendrá constantes
quejas y caerá en desesperación hasta el final de sus días.

¿Porque la gente envejece?


El envejecimiento es, junto con el sueño, uno de los misterios fundamentales de la
biología humana. ¿Qué hace que el cuerpo se ralentice, que sus células dejen de
dividirse y que sus órganos sean víctima de enfermedades y discapacidades cada vez
mayores? Nadie tiene las respuestas definitivas a estas preguntas, pero las teorías
pueden agruparse en dos campos: el daño gradual a lo largo del tiempo y la
programación genética.
El primer grupo de teorías sostiene que el cuerpo envejece debido al desgaste que se
acumula en los tejidos con el paso de los años. Los productos de desecho se acumulan
en las células, los sistemas de reserva fallan, los mecanismos de reparación se estropean
gradualmente y el cuerpo simplemente se desgasta como un coche viejo.
El segundo grupo afirma que el envejecimiento viene determinado por los genes, por
un reloj molecular interno que se ajusta a un calendario particular para cada especie.
Esta teoría se apoya en estudios con animales: los científicos han conseguido aumentar
la esperanza de vida de algunos animales alterando un solo gen. Los biólogos señalan
que, desde un punto de vista evolutivo, los efectos de la selección natural disminuyen
mucho después de la edad reproductiva. La evolución favorece a los genes que son
beneficiosos al principio de la vida, ya que dedican los recursos del organismo a la
reproducción y dejan menos disponibles para el mantenimiento a largo plazo.

La búsqueda de la autorrealización.
La autorrealización es la satisfacción de haber alcanzado y cumplido una o más metas
personales que forman parte del desarrollo y del potencial humano.
Por medio de la autorrealización los individuos exponen al máximo sus capacidades,
habilidades o talentos a fin de ser y hacer aquello que se quiere. Es decir, se refiere al
logro de un objetivo personal por medio del cual se puede contemplar la felicidad.
El deseo de autorrealización es motivado por la búsqueda individual que nos encamina a
cumplir con una serie de expectativas y dar respuestas a dudas o cuestionamientos que
marcan un determinado momento existencial.
La felicidad es el máximo logro de la autorrealización, es contemplativa y se obtiene
cuando las personas comprenden que es a través de hechos y acciones que se cumplen
los anhelos y proyectos. Forma parte de la libertad de ser y hacer aquello que se desea.

Exploración de nuevos campos: Cambiando y ampliando zona de confort.


La zona de confort es habitualmente conocida dentro del campo de la psicología como
esa sensación de comodidad en la que las personas nos encontramos según el entorno en
el que nos desenvolvemos. Por lo general, permanecer en la zona de confort es posible
tan solo manteniendo un estilo de vida en el cual siempre se haga lo mismo, aquello a lo
que estamos acostumbrados y que nos proporciona un estado de tranquilidad que no
genere complicaciones en nuestro día a día.
Esta circunstancia, lejos de ser algo completamente negativo, simplemente nos aleja de
situaciones de riesgo por las que no quisiéramos pasar, pero esto significa únicamente
que el bienestar adquirido proviene únicamente de no experimentar ningún tipo de
emociones negativas como el miedo, la ansiedad o la angustia causada por las
incertidumbres propias de no saber qué pueda ocurrir en determinado momento, lo cual
quiere decir que difícilmente la experimentación de emociones positivas será el
causante del bienestar logrado.
Entonces, el no salir de la zona de confort lo que hace es limitarnos las posibilidades de
vivir algo nuevo y conocer cuánto podemos hacer y hasta dónde podemos llegar para
descubrir una cara positiva de las emociones como, por ejemplo, alegría, satisfacción,
orgullo o entusiasmo por explorar un aspecto desconocido de nuestras capacidades tanto
físicas como mentales. Por lo tanto, con esta actitud jamás tendremos la oportunidad de
conocer cómo podríamos ser capaces de combatir nuestros propios miedos y temores de
hacer algo diferente a lo que siempre hacemos.
El no salir de la zona de confort nos instiga no solo a permanecer en el mismo lugar de
siempre sino también a ver todo siempre de la misma manera. No hay otros matices para
lo que hacemos y la sola posibilidad de que algo cambie genera una ola de estrés que
posiblemente no seamos capaces de superar fácilmente.
Vencer estos límites trae grandes beneficios con los cuales podemos tener una mente
más saludable. En primera instancia, será posible lograr el crecimiento personal y el
establecimiento de una personalidad acorde a nuestros verdaderos intereses, con los que
comenzaremos a establecer sueños y metas que amplíen la visión de lo que realmente
queremos en la vida. Con esto seremos capaces de no estar satisfechos con cualquier
cosa que tengamos, sino que siempre querremos llegar más allá de donde ya estamos y
alcanzar más cosas de las que ya nos encontramos disfrutando.
Al ser capaces de ampliar nuestra zona de confort, logramos aumentar nuestra
autoestima y reducimos la frustración propia de la poca capacidad que antes teníamos
de asumir nuevos retos. También aumenta la fortaleza interna, al poder enfrentar los
diferentes conflictos que se nos presenten, con lo que además se estimula la capacidad
para levantarnos de las caídas que podamos tener en la vida.
Adultez emergente y temprana.
LA MADUREZ EN LA EDAD ADULTEZ EMERGENTE Inicialmente el concepto de
sujeto “adulto” hace referencia a la dimensión biológica, donde adulto y maduro
biológico son conceptos equiparable: se refieren a un individuo que ha terminado de
crecer o de desarrollarse. Principalmente la madurez biológica haría referencia a la
plenitud de las capacidades físicas y a la capacidad de procrear.
En cambio, desde un punto de vista psicológico la madurez implica la plenitud de las
funciones intelectuales y afectivas, que a su vez están encaminadas a la procreación (en
sentido amplio del término: procreación biológica, laboral, social). La madurez
biológica no coincide con madurez psicológica en las sociedades avanzadas. En la
infancia y la adolescencia los sujetos normales son en parte maduros y en parte
inmaduros. La madurez psicológica representa en cada momento la capacidad aprender,
adaptarse al medio y de resolver con éxito las tareas del desarrollo. En la edad adulta
cabe esperar que el individuo haya alcanzado el máximo de competencias psicológicas
para la adaptación al medio, para la convivencia, para ser productivo y disfrutar de una
vida plena. Tanto durante la adultez emergente y como en la adultez temprana se
produce una evidente desfase entre la madurez biológica y la dependencia familiar,
entre la capacidad subjetiva y los deseos de independencia y la demora en la asunción
de responsabilidades.
El joven se siente en un momento de plenitud vital, autónomo para tomar decisiones
sobre lo que hace, piensa, con quién está y cómo quiere orientar su vida laboral. La
autonomía personal está limitada en tanto en cuanto no tiene recursos ni medios para
vivir de forma independiente de sus padres. Aunque este no siempre es el problema
principal, pues sus padres pueden ceder de sus ventajas para que el hijo se sienta a gusto
en la “cohabitación” y sin presionarle para que tome decisiones de independencia que
pueden hacer daño a ambas partes.
Torres y Zacarés (2004) destacan con razón que en la adultez emergente la madurez
psicológica no se basa en criterios psicosociales más o menos normativos sino en otros
criterios marcadores de inicio de la adultez: 1) Finalización de la madurez biológica; 2)
mayoría de edad legal y derecho al voto; 3) comportamientos de cierta independencia
como la obtención del carnet de conducir, poseer un coche propio, viajar o pasar
vacaciones con amigos aparte de la familia; 4) criterios psicológicos o cualidades de
carácter (Arnett, 1998) que son subjetivos e individuales pero que contribuyen al
“sentirse adulto” en ausencia de otros factores y roles sociales asociados directamente
con la adultez .
Adultez media.
La adultez intermedia o mediana edad es el periodo comprendido entre la adultez
temprana y la adultez tardía, o lo que es lo mismo, la adultez joven y la tercera edad. Al
igual que sucede con el resto de las etapas vitales, existe cierto debate acerca cuándo
comienza y cuándo termina, pero, por regla general, se considera que va desde los 40
hasta los 65 años.
Características físicas
A lo largo del periodo entre los 40 y 65 años, aparecen algunos signos de
envejecimiento. La mayoría de las personas alcanzan la mediana edad con algún rasgo
que evidencia que están cada vez más cerca de la tercera edad, aunque no son
necesariamente síntomas de enfermedad o problemática de salud, sino más bien
muestras de que van pasando los años.
Características psicológicas
Durante mucho tiempo, la psicología del desarrollo creía que la inteligencia y las
capacidades cognitivas en general alcanzaban su punto álgido alrededor de los 20 años
y, a partir de ese punto, comenzaban a empeorar sin remedio. Esta creencia se ha ido
poniendo en duda a medida que se ha ido investigando más a fondo sobre esta cuestión
y al concebirse la idea de la inteligencia fluida y la inteligencia cristalizada.

Adultez tardía.
La adultez tardía, también conocida como senectud, es entendida en la cultura popular
como el último periodo de nuestras vidas. Esto es cierto, pero no es solo eso, sino
también es el momento en el que conseguimos nuestro merecido descanso y, bien
llevada, puede ser una época de crecimiento personal y desarrollo.
En los casos en los que no se gestionan adecuadamente acontecimientos como la
jubilación o el fallecimiento de un cónyuge, esta etapa puede ser sinónimo de soledad y
aislamiento, así como problemas de salud física y mental.
Las diferencias de personalidad y la forma en cómo se enfrenta uno a la adultez tardía
son clave, cuestión que vamos a explorar en profundidad a continuación.
Características físicas
En la adultez tardía se presentan varios cambios físicos, todos ellos relacionados con el
declive en el organismo. Si bien no necesariamente son sinónimo de enfermedades o
problemas médicos, lo cierto es que el cuerpo durante la tercera edad es más sensible a
patologías y alteraciones físicas, como dolores en las articulaciones o lesiones con
mayor frecuencia.
Características psicológicas
En lo relativo a las características psicológicas, cabe mencionar que ha existido cierto
debate sobre cómo están las capacidades cognitivas durante la tercera edad. Aquí la
controversia es similar a la que hubo con la adultez intermedia, pues es cierto que se van
perdiendo memoria, atención, concentración y fluidez en la resolución de problemas
nuevos, pero también, siempre y cuando no haya una demencia, la cantidad de
conocimientos va aumentando y también la experiencia sobre la vida.

El final de la vida: Manejo de la muerte y el duelo.


Suponer que la muerte es simplemente el final o clausura de una vida sería minimizar
un concepto con múltiples implicaciones sociales, culturales, históricos, religiosos,
legales, psicológicos, del desarrollo, médicos y éticos.
De igual forma, el concepto de muerte no debe ni puede estar aislado, ya que al hablar
de muerte debemos -siempre- considerar lo que conocemos como “pérdida”.
A lo largo de la vida, el concepto de muerte siempre estará presente de una u otra forma,
pero no hay duda de que cada persona la ve diferente, sobre todo influyendo la etapa de
vida en la que se encuentre. Aun así, hay múltiples cambios físicos y cognoscitivos que
preceden a la muerte, tales como deterioros funcionales, perdida en el interés en comer
y beber, lo cual puede llevar al fallecimiento de forma natural, que -dicho sea de paso-
también son cambios que han sido advertidos en personas más jóvenes cuya muerte está
próxima.
Tal y como expresa Papalia (2012) “la muerte, al igual que la vida, es una experiencia
individual. Para algunas personas la negación o la ira pueden ser formas más sanas de
enfrentar la muerte que la aceptación tranquila” (p. 607), lo cual nos lleva a ver otro
tema, además de la muerte, que es lo que conocemos como duelo, que se describe como
la pérdida de alguien a quien la persona se siente cercana y el proceso de ajustarse a ella
puede afectar casi todos los aspectos de la vida de un superviviente.
En forma de conclusión, debemos afirmar que la muerte como tal es una realidad de la
que nadie podrá escaparse (así como la forma en que la vemos), al igual que lo que
conocemos como pérdida y duelo, ya que son procesos naturales del ser humano, pero
sobre temas en los que implican analizar las vertientes del “derecho a la vida” y/o “de
morir dignamente”, queda en cada quién decidir cómo afrontará dicho proceso, aún y
cuando el gran debate siempre se centrará en quiénes deben ser lo que tomen esa
decisión: La misma persona, los familiares, los doctores o los legisladores.
Hasta que no logremos ponernos de acuerdo en eso, el debate seguirá, y las personas
tendrán que depender de lo que les permita (o no) la legislación de los lugares en los
que viven.

Identifique los tres grupos de adultos mayores.


Considerando la edad se pue- de clasificar a los ancianos como viejos-jóvenes de 60 a
74 años; viejos-viejos de 75 a 84 años; viejos-longevos de 85 a 99 años y centenarios a
los de 100 años y más.
En que consiste la edad funcional.
Edad funcional se refiere al nivel de la capacidad que posee el individuo relativo a otros
de su misma edad para el funcionamiento dentro de su sociedad. Por ejemplo, un
individuo puede tener 85 años y sufrir de artritis severa, pero ese individuo puede ser
todavía alerta y comportarse asertivamente.

Explique cuál es la rama que se encarga de los procesos del envejecimiento.


La Geriatría y la Gerontología, son dos ciencias relativamente recientes que se dedican a
investigar para adquirir conocimientos útiles sobre el envejecimiento de los seres
humanos.
Presente y futuro de la psicología del desarrollo.
EL PSICOANÁLISIS
La teoría psicoanalítica de Sigmund Freud es un fenómeno que desborda la psicología y
afecta a la concepción misma del ser humano. Ser humano contradictorio y conflictivo.
Teoría aún con mucho de literatura constituida por pensamiento narrativo. El “Yo” sirve
de mediador entre el “ello” y el “super-yo”.
EL CONDUCTISMO
Intento de aplicar a la psicología métodos y cánones de la ciencia natural. Como
alternativa a la psicología introspectiva. Su aspiración era establecer relaciones
funcionales entre estímulos y respuestas por lo que la psicología debería únicamente
ocuparse del estudio de la conducta, de los aspectos visibles y observables del
funcionamiento mental humano. Una de las consecuencias fue suprimir del ámbito de la
investigación psicológica problemas como el estudio de las imágenes, parte del estudio
del lenguaje y el pensamiento y, en general, todo lo que tenga que ver con la conciencia.
> Toda conducta humana es aprendida y los mecanismos de aprendizaje son
básicamente idénticos, no sólo en todas las edades, sino también en todas las especies
animales. El desarrollo es aprendizaje.
LA PSICOLOGÍA DE LA GESTALT
Defendía la primacía de las formas complejas. Las totalidades preexisten a los
elementos, de tal manera que en 4 puntos no vemos sólo eso sino el bosquejo de un
cuadrado. Permitió realizar grandes avances en el terreno de la percepción.
LA MEDIDA DE LA INTELIGENCIA
Test mentales, intentos por medir la inteligencia. La idea de realizar medidas sobre las
características psicológicas de los individuos que permitan diferenciar a unos de otros
fue elaborada por Galton.
Cattell fue el primero en usar la expresión de “test mentales”, pero quien popularizó la
de los test fue Binet con Simón. La aplicación más importante se debe a Terman-
Stanford-Binet, posteriormente el test de Weschler = instrumento que permitiera
conocer el nivel de cada niño para que pudiera seguir con éxito la enseñanza obligatoria.
En manos de otros autores instrumento para medir la inteligencia que condujo a la
discriminación de muchos sujetos y a sostener posiciones clasistas y racistas. Pero han
tenido gran influencia discutiéndose si hay una inteligencia general el denominado
factor g o la inteligencia está formada por factores múltiples.
LA PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO
La teoría de la evolución de Darwin contribuyó a impulsar esos estudios. Baldwin fue el
primero que intentó dar una dimensión teórica sobre el desarrollo del niño. Introdujo
conceptos teóricos como la idea de reacción circular, el papel de la imitación o el
adualismo (= falta de diferenciación entre la interno y lo externo que manifiestan los
niños – Piaget lo retomó con su egocentrismo). En el primer cuarto del s. XX Wallon,
Werner, Vigotski y Piaget.
Piaget
La intención era explicar cómo se produce el desarrollo del conocimiento. Perspectiva
teórica dominada por intereses epistemológicos más que psicológicos. Utilizando el
Método Clínico = variante de la entrevista clínica. Diálogo abierto y flexible; se indaga
en las explicaciones sobre el mundo que le rodea, sus ideas y creencias acerca de él
mismo y sobre las representaciones que construye. Finalmente se llamaría crítico.
Conjugaba las virtudes de la observación directa, de los test e incluso de los
experimentos, superando al mismo tiempo sus limitaciones.
1. PRINCIPALES ASPECTOS DE LA TEORÍA DE PIAGET. Se centra sobre el
desarrollo de la inteligencia y considera que el desarrollo es un producto de la
evolución de las especies que permite la adaptación al medio mediante los
procesos complementarios de asimilación y acomodación.
LOS CAMBIOS EN LOS MÉTODOS Y EN LAS TEORÍAS DE LA PSICOLOGÍA
Mitad del s. XX revolución cognitiva contra las limitaciones del conductismo >
psicología cognitiva en la dirección de establecer modelos computacionales del
funcionamiento de la mente que pasa a ser considerada como un procesador de
información.
LA EXPLORACIÓN DE NUEVOS CAMPOS.
EL Lenguaje => Chomsky - gramáticas formales - propone estudiar el mecanismo de
producción y comprensión del lenguaje. Una gramática es un dispositivo generativo que
permite producir y comprender un número infinito de oraciones.
El Apego => Bowlby - el vínculo afectivo que se establecía entre el niño y la madre
respondía a una necesidad primaria que no derivaba de otras y tenía un gran valor para
la supervivencia (vínculo entre la cría y adulto animal = troquelado). Bowlby y
Ainsworth diseñaron una situación experimental denominada “situación extraña” para
diferenciar diferentes tipos de apego (seguro, inseguro, ambivalente y desorganizado.
Los estudios sobre bebés => pese a su desvalimiento motor sus capacidades perceptivas
eran mucho más sofisticadas de lo que se había supuesto > idea del “bebé competente”,
provocando un auge de las ideas innatistas. Chomsky: la rapidez de adquisición de la
lengua materna se debe a un dispositivo innato para su adquisición, siendo el
aprendizaje y el entorno meros factores desencadenantes que pueden adelantar o retrasar
el desarrollo, pero no alterar su curso ni su forma final. Fodor: parte de nuestra mente
está formada por módulos, innatos e independientes.
5 Hoy: bebés de pocos meses o semanas discriminan formas visuales, olores y sabores,
distinguen no sólo voces humanas sino también ciertos patrones asociados a distintas
lenguas, y parecen capaces de relacionar información proveniente de distintas
modalidades sensoriales, como en la imitación de gestos faciales o en la localización de
una fuente de sonido
NUEVOS AVANCES TEÓRICOS Y APLICADOS.
ENFOQUES TEÓRICOS:
Las teorías permiten explicar y anticipar los hechos. Las teorías del desarrollo actuales
están penetradas por el enfoque cognitivo que considera al sujeto como un procesador
de información. La mayoría de las posiciones tienden a dar primacía a las totalidades y a
las relaciones entre elementos.
Teoría de los sistemas dinámicos => énfasis en las conexiones y en las relaciones. Se
inspira en la teoría general de sistemas propuesta por Ludwig Von Bertalanffy que
considera que los organismos son sistemas abiertos que mantienen complejos
intercambios con el medio. Teoría de amplio alcance, puede incluir desde las redes
neuronales, a los seres humanos, los sistemas económicos, las familias o los
ecosistemas. Dos elementos importantes son el concepto de autoorganización y el
concepto de epigénesis (= emergencia de nuevas funciones y estructuras como
consecuencia de la interacción dinámica entre los distintos componentes de un sistema).
Sistemas de Producción => Simón. Tratan de simular con el ordenador la resolución de
tareas cognitivas y mostrar lo que el sistema haría en situaciones concretas.
Modelos Conexionistas => tratan de realizar una simulación que intenta asemejarse al
funcionamiento del cerebro. Propone que se pueden observar cambios cualitativos,
producto de leves cambios cuantitativos. Le preocupa construir un modelo que permita
hacer predicciones en relación con lo observable.
Teorías Piagetianas => elementos básicos de la teoría de Piaget, pero incorporando
enfoques basados en el procesamiento de información. Pascual Leone propuso
relacionar los estadios de Piaget con el desarrollo de un procesador central cuya
capacidad va aumentando con la edad, lo que da lugar a cambios cualitativos que serían
los estadios piagetianos. Ese aumento se puede relacionar con el aumento de capacidad
en la memoria operativa.
Teoría de la teoría => el desarrollo cognitivo es un proceso de adquisición y ampliación
progresiva del conocimiento en “dominios específicos”. Se contempla al niño como un
pequeño teórico que va ampliando y elaborando sus nociones y conceptos en los
distintos ámbitos de la realidad, hasta integrarlos y organizarlos como auténticas
“teorías”; teorías intuitivas e ingenuas. Propone que los niños construyen teorías para
explicar toda su experiencia, y explican las transiciones de una forma semejante a
Piaget, haciendo intervenir la equilibración. Pero atribuyen un mayor peso a estructuras
innatas y defienden una posición más de dominio específico.
Posición Ecológica => Bronfenbrenner: el desarrollo es el producto de la interacción
entre múltiples sistemas que se encuentran en interacción; desde el microsistema
(ambiente más inmediato del individuo), pasando por el macrosistema, constituido por
la organización cultural, política y económica de una sociedad, hasta el cronosistema,
que corresponde al período histórico en que vive el individuo, con los intermedios del
mesosistema y el exosistema.
LOS PROBLEMAS PENDIENTES
¿Qué es lo que se desarrolla? El problema de los estadios => no todos los cambios
pueden ser considerados desarrollo - “aprender a conducir, memorizar un número de
teléfono”... son acontecimientos que suponen un cambio de la conducta o del
pensamiento del individuo pero que no representan propiamente desarrollo, mientras
que logros como aprender a andar, a adquirir el lenguaje... constituyen cambios ligados
a la edad, permanentes y estables, progresivos, ordenados, y, lo que es crucial,
universales o comunes a los distintos miembros de la especie humana.
Algunos autores consideran que lo único que existe es un aumento cuantitativo de
conductas. Otros, como las teorías neopiagetianas fundamentan el desarrollo en un
aumento de la capacidad de procesamiento. En la misma línea se puede situar la
corriente que estudia las diferencias de actuación de sujetos expertos y novatos. Los
problemas que siguen planteados se refieren a si hay una continuidad en el desarrollo y
sólo un incremento, o hay cambios más bruscos, cambios estructurales; si funcionamos
igual desde el nacimiento y sólo vamos aprendiendo cosas nuevas (posición empirista) o
se producen reestructuraciones; y si es la familiaridad con los contenidos lo que
determina los cambios o hay diferentes maneras de tratarlos en las distintas edades, es
decir si hay cambios de funcionamiento.
¿Funcionamiento unitario de la mente o funcionamiento modular? => Piaget: mismo
proceso de construcción de nuevos conocimientos en todos los dominios. La
inteligencia, el lenguaje... se producirían e incrementarían cuando el sujeto se enfrenta
con resistencias en la realidad y tiene que buscar formas de superarlas, aunque también
hay un progreso por reorganizaciones internas de los esquemas al que denominó
equilibración.
¿Cómo se producen los cambios? => Hoy lo importante es estudiar cómo se producen
las interacciones, uno de cuyos aspectos es el de la interacción entre los genes y el
ambiente.
APLICACIONES PRÁCTICAS
Estudios sobre bebés / conocimientos sobre el funcionamiento de la memoria (sabemos
que en la MLP se produce siempre una reconstrucción) / sobre los procesos de
aprendizaje de la lectura, escritura o aritmética / sobre las relaciones interpersonales /
sobre el envejecimiento (psicología del ciclo vital).
A MODO DE CONCLUSIÓN
El gran problema es el de explicar lo que hace especiales a los seres humanos- cuáles
son las raíces de nuestra especificidad > trabajo interdisciplinar de las ciencias
cognitivas: psicología, etología, antropología, neurología, lingüística, teoría de la
comunicación, etc. > se echa en falta una teoría unificadora que permita explicar toda la
conducta humana.
El envejecimiento primario y secundario.
1. Envejecimiento primario
Cuando se habla de envejecimiento primario se está haciendo referencia a una serie
de cambios progresivos e inevitables que se dan en todas las personas a medida que
pasan los años. Como el resto de los tipos de envejecimiento, implica un deterioro en el
funcionamiento general y en la capacidad de adaptación al entorno.
Se clasifican como envejecimiento primario todos los procesos no patológicos que se
producen como consecuencia de la edad; por esto es llamado también “envejecimiento
normativo”. Se da durante toda la vida adulta, si bien sus efectos son mucho más
notables en edades avanzadas, sobre todo en personas que no gozan de buena salud.
Entre los cambios que conforman este tipo de envejecimiento encontramos la
menopausia, la debilitación y encanecimiento del cabello, el descenso en la velocidad de
procesamiento cognitivo, la pérdida de fuerza, la aparición progresiva de déficits
sensoriales o el deterioro de la respuesta sexual.
Los procesos biológicos implicados en el envejecimiento primario alteran el
funcionamiento físico, pero también se asocian a cambios psicológicos y sociales. Estos
últimos están influidos en mayor medida por el contexto, si bien al hablar de
variabilidad interindividual este tipo de envejecimiento se solapa con el secundario.
Causas del envejecimiento primario
Las teorías principales sobre el envejecimiento primario lo conceptualizan como
un proceso preprogramado a nivel genético. Factores como la limitada capacidad de
regeneración de las células y el deterioro progresivo del sistema inmunitario influyen de
forma clave en este tipo de envejecimiento.
La teoría de la programación genética afirma que con la madurez se activan genes que
desencadenan el envejecimiento, y la del marcapasos propone que estos cambios se
deben al desequilibrio hormonal producido por la “desconexión” del reloj biológico del
hipotálamo. Según la teoría inmunológica, en edades avanzadas el sistema inmunitario
pasa a atacar al cuerpo.
Otras perspectivas defienden que el envejecimiento primario es consecuencia de la
acumulación de daños en el cuerpo, y no de factores genéticos inmodificables. Estas
hipótesis, que en general cuentan con menos aceptación que las genéticas, son
conocidas como “teorías celulares no genéticas” o “teorías del daño aleatorio”.
La teoría del radical libre, la más popular en este grupo, plantea que la liberación de
electrones libres que resulta de la actividad normal del organismo provoca daños
acumulativos en las membranas celulares y en los cromosomas.
Otras hipótesis cercanas atribuyen el deterioro a la construcción espontánea de
moléculas perjudiciales, a la incapacidad del cuerpo para protegerse indefinidamente de
las influencias ambientales dañinas, a la acumulación de errores en la síntesis de
proteínas (que alteraría la transcripción genética) o a los efectos normales del
metabolismo.
2. Envejecimiento secundario
Este tipo de envejecimiento consiste en cambios causados por factores conductuales y
ambientales, ajenos a los procesos biológicos naturales. Se suele afirmar que el
envejecimiento secundario es aquel que se puede prevenir, evitar o revertir, pero esto no
siempre es así; la característica clave es la no universalidad de los procesos que lo
componen.
Los principales factores que determinan la intensidad del envejecimiento secundario
son el estado de salud, el estilo de vida y las influencias ambientales. Así, padecer
enfermedades como trastornos cardiovasculares, llevar una dieta poco sana, ser
sedentario, consumir tabaco, exponerse directamente al sol o respirar aire contaminado
potencian este tipo de cambios.
Muchos déficits físicos y psicológicos típicos de la vejez pueden considerarse
consecuencia del envejecimiento secundario a pesar de que tiendan a ser vistos como
manifestaciones del primario; por ejemplo, el deterioro cognitivo patológico y el cáncer
se vuelven mucho más frecuentes a medida que la edad avanza, pero no se dan en todas
las personas.

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