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Qué es el emprendedurismo

El emprendedurismo es la capacidad de elaborar y llevar a cabo


proyectos, transformando ideas en productos, servicios y negocios en
general.

También podríamos entender el emprendedurismo como la iniciativa


para sugerir e implementar cambios en empresas que ya existen en el
mercado.

En el mundo empresarial, podemos decir que el emprendedurismo es el


acto de crear nuevas soluciones, transformar negocios, modificar
procesos y cualquier iniciativa que promueva la evolución del mercado y
genere un impacto en él.

Asimismo, el emprendedurismo es un escenario con gran potencial para


el desarrollo profesional ya que, al surgir nuevos negocios enfocados en
satisfacer necesidades específicas de un público determinado, los
emprendedores pueden aprovechar estos novedosos hábitos de
consumo para identificar oportunidades.

La “ecuación” para un emprendimiento, según el consultor


norteamericano Steve Cobak, es la siguiente:

Emprendedor + Capital = Productos + Clientes = Negocio

¿Cómo surgió el concepto de emprendedurismo?

Aunque hoy en día el emprendedurismo es una palabra bastante popular, no


es un término tan actual como parece. El concepto comenzó a ganar
notoriedad en el mundo académico a mediados de 1945 por el economista
austro-estadounidense Joseph Schumpeter.
En un principio, la palabra se utilizó como punto de partida para la “Teoría de la
Destrucción Creativa”, concebida por el economista. Según Schumpeter, el
emprendedurismo es una práctica limitada a personas versátiles, con
habilidades de producción, organización financiera y ventas.
Con el tiempo, el concepto se fue transformando hasta convertirse en lo que
conocemos hoy. Parte de esta transformación provino del académico Robert
D. Hisrich en su libro “Entrepreneurship”.
Para Hisrich, el emprendedurismo es el proceso de crear algo nuevo y valioso,
dedicando tiempo y esfuerzo, asumiendo los posibles riesgos económicos,
psicológicos y sociales, con el objetivo de obtener recompensas económicas y
personales.

¿Qué es ser emprendedor?

A partir del concepto de emprendedurismo, podemos definir al emprendedor


como aquel que lidera proyectos innovadores, promueve transformaciones y ve
oportunidades en lugares inexplorados.
Un emprendedor es la persona que pone en práctica nuevas ideas y realiza cambios
donde quiera que va.
En la práctica, un emprendedor puede ser:
 el inventor de un nuevo objeto;
 el creador de un nuevo producto o servicio;
 el fundador de una empresa o institución;
 el creador de una transformación significativa;
 el propietario de un sitio web, blog o tienda online;
 y cualquiera que esté detrás de algo nuevo e innovador.

Características de un emprendedor
Las principales características de un emprendedor son:

 Iniciativa: el emprendedor sabe cuándo actuar y no desperdicia


oportunidades.

 Confianza en sí mismo: cree en sus ideas y sabe muy bien cómo


defenderlas.

 Valentía: el emprendedor no tiene miedo de correr riesgos o


fracasar; lo impulsan los desafíos.

 Optimismo: ¿pensamiento negativo? ¡De ninguna manera! Un


emprendedor siempre es optimista sobre sus proyectos e ideas.

 Persistencia: darse por vencido no es una opción, un


emprendedor es persistente y hace todo lo posible para
asegurarse de que sus objetivos se logren.

 Resiliencia: el emprendedor tiene la capacidad de afrontar


situaciones adversas e, incluso, salir beneficiado de ellas; se
recupera de situaciones complicadas, aprende de las
adversidades y sigue avanzando hacia el futuro.
 Liderazgo: actúa como guía de las iniciativas y los equipos,
liderando y dirigiendo cada etapa del proyecto.

 Capacidad de relacionamiento: el emprendedor sabe que el


trabajo en equipo puede ser mucho más efectivo; por eso, se
asegura de mantener buenas conexiones profesionales.

¿Cuáles son los tipos de emprendedurismo?


A lo largo de los años, el concepto de emprendedurismo no solo se ha
transformado, también se ha fragmentado, permitiendo la aparición de
diferentes escenarios.

Como resultado, hoy existen tantos tipos como mercados explorados


por las personas para dar vida a su proyecto de emprendimiento.

Con esto en mente, hicimos una lista con los principales tipos de
emprendedurismo para que descubras cómo funciona cada uno.

Emprendedurismo digital
El emprendedurismo digital involucra negocios y soluciones que se
llevan a cabo en el entorno virtual. Desde tiendas onlines hasta
aplicaciones y redes sociales, todo lo que se desarrolla en internet
puede entenderse como parte de esta categoría.

En Argentina, por ejemplo, hay un enorme potencial para los


emprendedores digitales, especialmente en todo lo referido al e-
commerce: de acuerdo con la agencia eMarketer, durante 2020, el
mercado de comercio electrónico minorista del país tuvo el crecimiento
más rápido de todo el mundo, arrojando un 79% de aumento respecto
del año anterior.

Emprendedurismo de negocios
El emprendedurismo de negocios implica la creación y desarrollo de
empresas comerciales tradicionales.

Contempla la creación de productos y servicios en general, con el


objetivo de obtener un beneficio económico. Los emprendedores que
trabajan en esta área deben observar atentamente las nuevas
necesidades del mercado, ya que es ahí donde surgen las
oportunidades.
Emprendedurismo corporativo
El emprendedurismo corporativo, o intraemprendedurismo, es aquel que
tiene lugar dentro de una organización y se enfoca en desarrollar
mejoras. Ya sea con nuevas soluciones o con la reestructuración de
procesos, el objetivo del emprendedor corporativo es promover
transformaciones.

Este modelo es muy popular en las empresas más modernas, como


las startups, donde existe una fuerte cultura de compartir ideas. El
emprendedurismo corporativo suele ser muy positivo para las empresas
que buscan actualizar sus procesos y destacarse en el mercado.

Emprendedurismo social
El emprendedurismo social fue diseñado para implementar mejoras
orientadas a la comunidad. Por ello, se diferencia significativamente de
los otros modelos, pues las instituciones ponen el foco en la realización
de proyectos que ayuden a algún colectivo o causa.

Dentro del emprendedurismo social podemos mencionar a las


Organizaciones No Gubernamentales (ONG) que trabajan para combatir
el hambre, por ejemplo. Los emprendedores sociales son bastante
diferentes a los demás, ya que se centran en defender sus ideales y
garantizar que su institución tenga un impacto positivo en la sociedad.

Emprendedurismo verde
El emprendedurismo verde está relacionado con el emprendedurismo
social, la diferencia está en el enfoque de estas organizaciones,

que consiste en preservar el ambiente. 🌳

En este modelo, las instituciones se crean para abordar temas


ambientales de interés público. Normalmente, no buscan beneficios
económicos, sino que monitorean e intervienen directamente en
agendas que puedan amenazar el ambiente de alguna manera.

Emprendedurismo femenino
El emprendedurismo femenino incentiva y promueve la presencia de la
mujer en todos los mercados. La idea es conseguir que la presencia
femenina en puestos de poder se convierta en algo común.
El papel de una mujer emprendedora también implica encontrar
oportunidades para promover la diversidad en el entorno empresarial.
Asimismo, busca apoyar proyectos creados por otras mujeres y
fortalecer una red de conexiones entre mujeres profesionales.

Emprendedurismo individual

El emprendedurismo individual se trata de pequeñas empresas


gestionadas por una sola persona.

Los profesionales que desarrollan y ofrecen servicios por su cuenta —


como monotributistas o responsables inscriptos, por ejemplo— pueden
considerarse empresarios individuales. Lo que diferencia a este modelo
de otros es la ausencia de socios e inversores.

Emprendedurismo cooperativo
El emprendedurismo corporativo, por su parte, promueve la unión de
varios emprendedores con un objetivo común. En estos casos, los
profesionales unen fuerzas para dar vida a un proyecto específico.

Funciona como una red de apoyo, donde cada emprendedor ofrece lo


que tiene. Partiendo del concepto de economía colaborativa, todas las
decisiones se toman en conjunto de forma democrática, así como el
reparto de los gastos y beneficios obtenidos.

(Lopes, 2023)

Emprendedores y empresarios: diferencias y semejanzas

Existe en la sociedad cierta dificultad a la hora de diferenciar entre los conceptos de


emprendedor y empresario, una dificultad, por otra parte, lógica, puesto que haces
apenas diez años ni siquiera se utilizaba la palabra emprendedor: entonces solo
conocíamos a los autónomos y a los empresarios.
Sin embargo, con el paso de los años, el uso del vocablo ‘emprendedor’ se ha
extendido a un sector amplio de la sociedad, saltando del ecosistema startup a los
medios y de estos al resto de la población. Pero, ¿qué diferencia real existe entre el
nuevo emprendedor del que tanto se habla y el empresario de toda la vida? ¿Es una
cuestión monetaria o también de carácter?

Según la Wikipedia, “un emprendedor es una persona que diseña, lanza y pone en
funcionamiento un nuevo negocio”, mientras que el emprendimiento sería “la capacidad y el
deseo de desarrollar, organizar y manejar un negocio junto con sus respectivos riesgos, y con
el fin de obtener una ganancia”. Pese a que la definición puede ajustarse a la del empresario,
en un punto de la definición la fuente introduce el concepto startup, un formato empresarial
fuertemente asociado al emprendedor.
No obstante, más allá de ese matiz, la definición sigue quedándose corta a la hora de trazar
una línea divisoria respecto al concepto de empresario. Una aproximación que nos puede
ayudar a resolver la cuestión es la realiza el libro “Mi primer negocio”, donde se afirma que,
mientras el empresario es aquel que “intenta hacer” y “hace” negocios con el objetivo casi
exclusivo de obtener un retorno económico por su actividad, el emprendedor no sólo busca el
premio económico, sino que, en un sentido más amplio, “busca satisfacer desafíos personales
o sociales”.
La diferencia –empezamos a intuir– radica en las motivaciones de ambos. El emprendedor
busca rentabilidad monetaria, el emprendedor busca rentabilidad emocional. Satisfacer una
aspiración. Dicho en otras palabras, uno toma una decisión vital mientras que el otro focaliza
su energía en una actividad puramente económica, sin más dobleces.
En esa misma línea, el consultor Enrique Navarro comenta en su blog –del que se hacen eco en
my pymes– que “el emprendedor es una persona que vive feliz en un estado de
incertidumbre permanente, con la cabeza en las estrellas, pero con los pies en el suelo; un
soñador con los ojos abiertos que no deja de tener fe en su visión incluso en las peores
situaciones”.
Por el contrario, el empresario tiene “metas más prácticas y menos emocionales”, porque lo
que en realidad busca, según el propio Enrique Navarro, es ser administrador de una empresa
en un clima de tranquilidad y seguridad. La idea, sencilla, queda complementada con la
siguiente cita del emprendedor Carlos Blanco: “El empresario suele enfrentarse a riesgos
bastante controlados, le gustan los negocios seguros. Pero esto también hace que el
empresario pueda ser un mejor gestor para su empresa que un emprendedor”.
Dicho esto, ¿qué ocurre cuando un startup crece de manera imprevista y la pasión inicial da
paso a una administración menos pasional pero más profesional? Ahí la frontera entre el
emprendedor y el empresario comienza a difuminarse, pues la visión de querer conquistar el
mundo se pierde en favor de un perfil más técnico, más pragmático. La percepción utópica del
negocio queda enterrada bajo una gestión canónica de la compañía, desde la que rentabilizar
todo su potencial. Cuando los sueños empiezan a ser monetizados pierden parte de su esencia.
No obstante, esto no quiere decir que el espíritu emprendedor tenga que quedar
necesariamente desplazado después de ese crecimiento. Aún existen startups gigantes que, a
pesar del crecimiento, siguen conservando su identidad. Son fruto de un proyecto humilde y
humildes se mantienen en su ascenso. Las diferencias, por tanto, son muy sutiles y difícilmente
identificables. En la fase inicial de un negocio es más fácil detectarlas, pero luego casi siempre
terminan diluyéndose. En ese punto, la diferencia –o la similitud– entre emprendedor y
empresario es prácticamente una cuestión de autopercepción.

(Holded, 2018)

Las ventajas y desventajas de ser emprendedor


Ventajas de ser un emprendedor
Mayor autonomía e independencia

Emprender un negocio se caracteriza por una autonomía e


independencia que son incomparables al de la ocupación de un
empleado por cuenta ajena. Independientemente del trabajo que se
realiza, la libertad que otorga el tener tu propia empresa y tomar tus
propias decisiones son una gran ventaja que se tiene muy en cuenta a la
hora de plantearse el ser emprendedor. Por supuesto la clave del éxito
está en saber valorar y hacer uso de esta libertad en nuestro favor y el de
la empresa, lo cual no es innato en cada uno, sino que se va
desarrollando poco a poco a medida que nos vamos desenvolviendo con
más soltura en nuestra nueva actividad. Además, no olvidemos que ser
tu propio jefe te permite también seleccionar a las personas que
quieres que formen parte de tu equipo de trabajo.

Flexibilidad para gestionar tu tiempo


Como único responsable de tu trabajo, un emprendedor puede adaptar
sus horarios a sus necesidades personales y familiares, siempre que esto
no obstaculice la atención de que deba prestar a sus clientes: reuniones,
soporte, disponibilidad para llamadas, etc. En cualquier caso, tiene
muchas mayores posibilidades de equilibrar su vida laboral y personal.
La posibilidad de mayores ingresos
Este es otro de los puntos de peso que suele ser clave en la decisión de
emprender. Y es que, ¿quién no aspira a ganar más dinero? Ser
ambicioso no es un rasgo negativo, ni tampoco lo es el hecho de querer
conseguir una estabilidad económica y aspirar a un nivel de vida
superior. Como emprendedor, puedes lograr ingresos significativamente
mayores que un empleo tradicional, ya que te beneficias directamente
del crecimiento de tu negocio.
La satisfacción de crear algo propio y ver como prospera
Directamente ligada al éxito e ingresos considerablemente más altos,
está la satisfacción personal que supone el crear algo propio y la
consecución de los objetivos que uno se propone. Retar y poner en
prueba las habilidades de uno mismo, arriesgarse y ver cómo prospera
una idea viene acompañado de un sentimiento de autorrealización.
Conseguir tener éxito como emprendedor puede ser muy gratificante ya
que es el fruto del desarrollo de tus habilidades, esfuerzo y pasión por lo
que haces.
Crecimiento personal y profesional
Emprender te permite dirigir tus energías y aprendizajes en la dirección
que más te interese en cada momento, lo que te brinda la oportunidad de
aprender constantemente y desarrollar habilidades en áreas como la
gestión del tiempo, la toma de decisiones, la negociación, el liderazgo y
la resolución de problemas.
Aportar algo nuevo a tu entorno y ser recompensado por ello
Por último, ser un emprendedor de éxito puede mejorar tu estatus y
abrirte muchas puertas. Además, aportar tu granito de arena al entorno
en el que vives también es un punto positivo que no se puede obviar. Ser
de utilidad para la sociedad a través de acciones de diversa índole supone
generar un impacto social positivo y con la posibilidad de contribuir a la
solución de problemas sociales o ambientales.
Desventajas de ser emprendedor
Saber administrar la autonomía recién adquirida
La autonomía también trae sus inconvenientes, y es que para ser
emprendedor hay que exigirse un determinado grado de
organización y disciplina para no hundirse a uno mismo de forma
rápida y catastrófica. Asimismo, y a diferencia de un trabajador por
cuenta ajena, las responsabilidades que se concentran en tu persona
son mucho más grandes tanto en número como en dimensión. Las
claves para ser un emprendedor de éxito nos exigen saber un poco de
todo: administración y gestión empresarial, comercio, marketing, y, por
supuesto, ser un as dentro de nuestra área de trabajo. Por otro lado, si
piensas que has erradicado completamente la figura del jefe de tu vida,
estás equivocado, pues de ahora en adelante tus jefes serán los clientes y
la Agencia Tributaria, entre otros.
Inevitables riesgos económicos
Otro de los aspectos negativos del emprendimiento es el inevitable
riesgo económico al que nos enfrentamos: todo negocio o actividad
empresarial requiere de medios económicos para iniciarse, pero no hay
seguro que valga aquí, pues todo emprendedor se arriesga a fracasar al
comenzar un nuevo proyecto y perder todo su dinero. Es importante estar
preparados y saber evaluar las dificultades que podrían surgir, así como
organizar nuestros ingresos de forma responsable hasta que el negocio
florezca y alcance una estabilidad que consideremos
suficiente. Tampoco está de más tener guardado un plan B en la
manga, siempre listo en el caso de que las cosas vayan realmente mal y
no quedarnos en la miseria.
Estrés y presión
La inestabilidad de los ingresos, la incertidumbre respecto al futuro, las
responsabilidades adquiridas y el enfrentar cualquier problema
adoptando decisiones difíciles suele conllevar unas altas dosis de estrés y
presión. Dependiendo de tu personalidad y tu capacidad para soportar de
forma continuada estas condiciones, podrás evitar caer en situaciones de
ansiedad o depresión.
Tu tiempo libre siempre sujeto a la carga de trabajo

Ser emprendedor conlleva sacrificar noches sin dormir para sacar el


negocio adelante. La flexibilidad horaria podría convertirse en tu peor
enemiga, aunque es cierto que en teoría eres el que se establece sus
vacaciones y los días de trabajo. Pero si hay algún problema o
muchísimo trabajo y eres el único que lo puede abarcar, despídete de los
fines de semana y de la jornada de 8 horas al día, pues hay que estar
siempre dispuesto a hacer todo lo que está en tus manos y más para
sacar el negocio adelante. Y en ocasiones, esto podría significar pasar
alguna que otra noche en vela.
Aislamiento
Emprender suele ser iniciar un camino en solitario y, frecuentemente,
con la falta de comprensión, empatía y apoyo de los que te rodean. Hasta
que el crecimiento de tu negocio te permita construir un equipo que te
apoye, debes estar preparado para enfrentarte a los desafíos y aprender
de tus errores.
(Marketing digital, 2015)

Tipos de emprendimiento: características y tips para empezar

Tipos de emprendimiento

Para elaborar esta categorización tomamos en cuenta aspectos como el


propósito del emprendimiento, la inversión inicial, el tipo de solución que
desarrolla y su impacto en la sociedad.

A partir de estas variables, definimos 6 tipos de emprendimiento:

1. Emprendimiento pequeño

2. Emprendimiento escalable

3. Emprendimiento social

4. Emprendimiento espejo o de imitación

5. Emprendimiento oportunista

6. Emprendimiento incubador

Veamos cada uno en detalle.


1. Emprendimiento pequeño

Se trata de negocios unipersonales, salvo ciertas excepciones donde


puede haber uno o dos socios más. También son conocidos como
microemprendimientos y se caracterizan por tener una inversión inicial
baja.

Asimismo, se consideran emprendimientos locales, que buscan distribuir


sus productos o servicios dentro de los límites de su ciudad.

Un ejemplo de este tipo de emprendimiento en Argentina son las micro y


pequeñas empresas de las siglas MiPyME.

2. Emprendimiento escalable

Los emprendimientos escalables buscan tener un crecimiento


exponencial en el corto y mediano plazo. Nacen con el objetivo de
expandirse rápidamente y convertirse en empresas multinacionales.

Suelen ser compañías asociadas al mundo tecnológico y algunos


ejemplos de ellas son las aplicaciones móviles como Netflix, Facebook e
Instagram que fueron diseñadas para satisfacer a millones de personas.

3. Emprendimiento social

El principal objetivo de este tipo de emprendimiento es generar un


impacto positivo en su comunidad y el mundo.

Quienes llevan adelante emprendimientos sociales suelen desarrollar


sus iniciativas en sectores vinculados a la educación, la salud y el
ambiente.
4. Emprendimiento espejo o de imitación

Son aquellos que replican una idea que fue o está siendo exitosa en el
mercado. Se puede imitar un producto, servicio o un modelo de negocio.
Las franquicias son un ejemplo de los emprendimientos espejo.

Para adquirir este tipo de negocio es necesario contar con una inversión
significativa, debido al alto costo que representa pagar por una marca
reconocida.

5. Emprendimiento oportunista

Tal como su nombre lo indica, este tipo aparece en el momento


oportuno para resolver una necesidad puntual y urgente. Durante la
pandemia, por ejemplo, surgió este tipo de empresas que comenzó a
fabricar barbijos en grandes cantidades.

Lo que caracteriza a estos negocios es la visión del emprendedor, su


creatividad y su capacidad para ejecutar con rapidez.

6. Emprendimiento incubador

A diferencia del oportunista, el emprendimiento incubador se concentra


en investigar cuáles son las necesidades permanentes del
mercado para ofrecer una solución innovadora.

Este tipo de emprendimiento requiere de una gran inversión, para


realizar las investigaciones que le permitan llegar a conclusiones
acertadas sobre las necesidades del nicho que están analizando.

Un ejemplo de incubadora argentina es NXTP Labs, que brinda apoyo a


empresas emergentes a través de asesorías en gestión de negocios y
marketing.
Tipos de emprendedores

Podemos categorizar a los emprendedores basándonos en el estilo de


negocio que emprenden, el tiempo que llevan desarrollando su idea y en
los pasos que siguen para hacerla realidad.

Los 11 tipos de emprendedores más conocidos son:

1. Emprendedor apasionado

2. Emprendedor innovador

3. Emprendedor visionario

4. Emprendedor inversionista

5. Multiemprendedor

6. Emprendedor académico

7. Emprendedor social

8. Emprendedor por necesidad

9. Emprendedor especialista

10. Emprendedor empresario

11. Emprendedor por accidente

A continuación, te explicamos brevemente de qué va cada uno.

1. Emprendedor apasionado

Se caracteriza por tener un gran ímpetu para trabajar y materializar sus


proyectos. Se enfoca en crear ideas rentables y es apasionado en lo
que hace.
2. Emprendedor innovador

Es aquel que se interesa por las tendencias y busca crear proyectos con
un alcance significativo. Además, crea soluciones para un determinado
grupo de personas que sean sostenibles en el tiempo.

3. Emprendedor visionario

Son emprendedores que convierten una idea y visión en un negocio,


pero se trazan metas realistas. Se destacan por ser disruptivos,
creativos y persistentes en el rubro donde se desempeñan.

4. Emprendedor inversionista

Son ambiciosos y estratégicos. Tienen como objetivo invertir o financiar


un proyecto y hacer crecer su dinero para detectar y generar más
oportunidades, por lo que tienen buen olfato para los negocios.

5. Multiemprendedor

Son personas que tienen la habilidad de enfocarse en varios proyectos


a la misma vez, aunque no estén relacionados entre sí, y los llevan a
cabo sin perder el norte.

6. Emprendedor académico

Este perfil se caracteriza por tener una formación académica sobre


negocios, finanzas o ventas y dispone de las herramientas necesarias
para tener su propio emprendimiento.
7. Emprendedor social

Este es un ejemplo de emprendimiento con una perspectiva más


humanista que pretende generar un impacto positivo en la sociedad. A
las personas que están detrás de estos proyectos, les apasiona
solucionar los problemas de una comunidad y buscan rodearse de
quienes compartan ese mismo interés.

8. Emprendedor por necesidad

Son emprendedores que se arriesgan a tener su propio negocio luego


de pasar una experiencia desfavorable, como por ejemplo, un despido,
una renuncia, o problemas económicos.

9. Emprendedor especialista

Por lo general, los emprendedores especialistas son metódicos y


técnicos. Pueden desarrollar productos o servicios de calidad, dado que
tienen los conocimientos suficientes en una área determinada.

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10. Emprendedor empresario

Tienen el conocimiento, las herramientas y los recursos necesarios para


transformar una idea en un negocio escalable. Cuentan con una
inteligencia financiera y, a la par, son creativos, líderes y estratégicos.
11. Emprendedor por accidente

Son quienes se cruzan con un proyecto o idea al azar y, al final, lo


convierten en su emprendimiento. También puede verse reflejado en
una persona que asume un nuevo cargo dentro de una empresa.

(Rivera, 2023)

Califican al Perú como el país más emprendedor a nivel mundial

El Perú ostenta un nuevo título: el de ser el país más emprendedor del mundo. Según
el General Entrepreneurship Monitor (GEM), la Tasa de Actividad Emprendedora (TAE)
del Perú -es decir, el número de emprendimientos entre la Población Económicamente
Activa- es de 40.20%, la más alta del mundo.

Sin embargo, la Cámara de Comercio de Lima (CCL) señaló que el Perú no debe sentirse
satisfecho con este nuevo título, pues a decir del gremio empresarial aún estamos muy
lejos de contar con un Estado que promueva las condiciones de competencia en el
camino correcto hacia la competitividad nacional.

La presidenta de la Comisión de Tratados Internacionales de la CCL, Rosa Bueno, refirió


que los factores que promueven el emprendedurismo en el Perú son diversos,
destacando la necesidad generada por el desempleo y la poca oferta laboral de las
empresas consolidadas, lo cual obliga a las personas a generar, por su cuenta y riesgo,
negocios como único modo de sobrevivir.

Agregó que también existe un número reducido de empresas que generan nuevos
negocios, aplicando innovación en sus procesos y productos; estas aún constituyen el
5% del total de empresas exportadoras del Perú.

De acuerdo con el índice del GEM, cuatro de cada 10 peruanos entre 18 y 65 años
realizan alguna actividad emprendedora. Los emprendedores peruanos son 19 veces
superiores que sus pares japoneses en cuanto al emprendimiento por oportunidad y
11 veces superiores en cuanto al emprendimiento por necesidad.

"Poseemos una cultura emprendedora extraordinaria, que representa un gran


capital social, el cual lamentablemente se ve afectado por barreras que ocasionan
una alta tasa de mortalidad empresarial", anotó la CCL.

Muriendo en el intento:

Sin embargo, muchos emprendimientos mueren en el intento. Según información de


Sunat, al año se registran cerca de 300,000 empresas, pero se cierran unas 200,000.
Cabe destacar que el 80% de los emprendimientos peruanos son microempresas,
señala la CCL.
El gremio empresarial considera que es necesario definir políticas de que promuevan la
competitividad nacional, a fin de aprovechar el gran potencial emprendedor del Perú.

Para la CCL, un aspecto importante de la competitividad es la formalización,


simplificando los procesos administrativos. Asimismo, se debe promover la generación
de mecanismos de integración e inclusión a servicios, protección social y derechos
laborales, así como posibilidades de información, capacitación y de crédito para
empresarios y trabajadores.

Es precisamente por ello, anotó Rosa Bueno, que la CCL y la Universidad de Lima
organizan la II Cumbre Internacional "Perú emprendedor: Estableciendo las estrategias
globalizantes", que se desarrollará durante los días 13 y 14 de noviembre con la
participación de expertos internacionales y nacionales, para definir propuestas, planes
de acción y la hoja de ruta para el desarrollo emprendedor.

Problemas que afrontan los emprendedores


Los principales problemas que afrontan los emprendedores peruanos son la
incapacidad de gestión, el desconocimiento del negocio y del mercado, los ingresos no
acordes con sus expectativas y que basen su desarrollo empresarial en el empirismo,
anotó la Cámara de Comercio de Lima (CCL).

A ello se suma que las estrategias nacionales para apoyar a los emprendedores se
cumplen parcialmente, tanto por el Estado como por la sociedad civil. Además, estos
esfuerzos se dan algunas veces de manera desarticulada y dispersa, refiere el gremio
empresarial.

"Es necesario entonces buscar mecanismos eficientes, donde el emprendedor o


empresario acceda de una manera integrada por un tiempo determinado, a los
servicios necesarios para crecer y desarrollar su capacidad de sobrevivir en el
mercado o implementar sus proyectos de innovación y/o competitividad".
(Diario gestion, 2023)

Referencias
Diario gestion. (2023). Califican al Perú como el país más emprendedor a nivel mundial. En D.
gestion, Califican al Perú como el país más emprendedor a nivel mundial. Obtenido de
https://www.up.edu.pe/aplicaciones/boletines/EmprendeUP/ver_articulo.aspx?
idsec=264&idnum=#:~:text=El%20Per%C3%BA%20ostenta%20un%20nuevo,la%20m
%C3%A1s%20alta%20del%20mundo

Holded. (2018). Emprendedores y empresarios: diferencias y semejanzas. En Holded,


Emprendedores y empresarios: diferencias y semejanzas. Obtenido de
https://www.holded.com/es/blog/emprendedores-y-empresarios-diferencias-y-
semejanzas

Lopes, K. (2023). Qué es el emprendedurismo y cómo funciona en la práctica. En K. Lopes, Qué


es el emprendedurismo y cómo funciona en la práctica. Obtenido de
https://www.tiendanube.com/blog/que-es-el-emprendedurismo/

Marketing digital. (2015). Las ventajas y desventajas de ser emprendedor. En M. digital, Las
ventajas y desventajas de ser emprendedor. Obtenido de
https://www.humanlevel.com/articulos/marketing-online-articulos/emprendedor-
ventajas-desventajas.html

Rivera, E. (2023). Tipos de emprendimiento: características y tips para empezar. En E. Rivera,


Tipos de emprendimiento: características y tips para empezar. Obtenido de
https://www.tiendanube.com/blog/tipos-de-emprendimiento/

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