UNIVERSIDAD ARTURO MICHELENA

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS

ESCUELA DE DERECHO

La imputabilidad.

Profesor: Alumnos:

Fredi Grillete. Michelle Rodríguez Cl: 31.488.287

Derecho Penal l. Axcel Paez. C.I: 31.396.784

Valentina Chacón. C.I: 30.640.746

Franyelis Quiñones. CI: 27.754.255

Shara Lobo CI: 31.022.617

Axcel Paez. C.I: 31.396.784

San Diego, 31 de Octubre de 2023.

 Introducción.

El objetivo de este trabajo es analizar qué es la imputabilidad y a lo largo de este,

discutiremos los temas más importantes que sobresalen de este. Si tenemos en
cuenta la imputabilidad es la capacidad para delinquir, o en otras palabras
podemos definir la imputabilidad como aquella acción u omisión que se genera a
libre elección atribuida a un sujeto, la cual produce consecuencias por las que se
debe cumplir y afrontar una determinada sanción.

Este trabajo se realiza a fines de poder comprender de una manera más

específica y explicada sobre la imputabilidad, sus partes más importante, cómo se
realiza su evolución y consecuencias.
 La imputabilidad.

Según Gisbert Calabuig, 2004 y José Ángel Patitó, 2000; conceptualizan la

imputabilidad como aquel acto humano (acción u omisión) atribuido a una
persona; la obligación de sufrir las consecuencias penales, por la realización de un
hecho delictivo. Etimológicamente el término proviene de la raíz latina “imputare”
que significa atribuir, asignar o poner en la cuenta o a cargo de alguien. Se
destaca la comprensión, o sea comprender y entender el deber y la
autodeterminación de la voluntad.

Podemos decir que la imputabilidad es la capacidad de una persona para ser

considerada responsable de sus actos y de las consecuencias que estos puedan
generar. En términos legales, se refiere a la capacidad de una persona para
entender la naturaleza y las consecuencias de sus acciones y para actuar de
acuerdo con ese entendimiento. La imputabilidad es un concepto fundamental en
el derecho penal, ya que se utiliza para determinar si una persona puede ser
juzgada y condenada por un delito.

De acuerdo a Zazzali, 2007, imputabilidad significa capacidad para delinquir. Es el

legislador quien fija las condiciones que debe reunir un sujeto para ser
considerado inimputable y es el juez quien establece la imputabilidad o no del
autor de un delito.

Una condición entre las dos anteriores supracitadas, se le conoce como

imputabilidad disminuida, ya que implica una disminución en la capacidad mental
del sujeto para entender las consecuencias jurídicas de sus acciones.
Maurach (1902-1976) indica que en este caso el autor es imputable pero para
alcanzar el grado de conocimiento y dirección de un sujeto anímicamente normal,
debe esforzar más su voluntad.

Este término ha generado controversia ya que para algunos autores la

imputabilidad no puede ser medible, mientras que para otros si puede determinar
un cierto grado que pueda clasificar esta condición en las personas de acuerdo a
sus características o patologías asociadas, es por esto que estos términos se
consideran conceptos jurídicos que presentan una base psicológica.

Una cosa es la imputabilidad y otra cosa es la responsabilidad, con la primera se

le atribuye a alguien un determinado efecto como causa productiva del mismo,
mientras que la segunda se pretende obligar a alguien a resarcir un daño y a sufrir
una pena con motivo de aquel dado efecto. La imputabilidad es cosa de hecho, la
responsabilidad es cosa de derecho. La responsabilidad, dicho con palabras más
simples, es la obligación de sufrir las consecuencias jurídicas del reato. Por eso
hemos dicho en otro lugar, que se responde por todo el reato.

Antecedentes historicos.

Desde tiempos de Aristóteles ya se mencionaba la imputabilidad como que, “solo

se comete delito o se hace acto justo cuando se obra voluntariamente, lo mismo en
uno que en otro caso, pero cuando se obra sin querer no se es justo ni injusto a no
ser indirectamente; porque al obrar así solo se ha sido justo o injusto por accidente”.
Para este filósofo era muy importante la voluntad para determinar las recompensas
o castigos. Se centró en hablar de culpabilidad y de reproche, del libre albedrío, de
la voluntad de poder escoger.

El sacerdote Víctor Catherin, seguidor de Santo Tomás de Aquino, indica que la

autodeterminación de que goza el hombre es la base de la imputabilidad; se imputa
cuando el hombre es libre de decidir la forma de actuar.

Idea clásica:
Para los autores clásicos o neoclásicos -desde CARRARA hasta WELZEL-, la
imputabilidad es la capacidad vital o existencial del individuo de comprender y actuar
conforme al valor. De esta manera se divide a los individuos en imputables (capaces
de autodeterminación, de ser libres) e inimputables (aquellos que no poseen dicha
capacidad: locos, niños, etc.).

Con ello el concepto de inimputabilidad lleva aparejada la idea o estigma o etiqueta

de minusvalía, de desigualdad existencial de los hombres libres y el de los que no
lo son. A los hombres superiores les corresponde la protección de los inferiores y
éstos deben aceptarla sin ninguna otra posibilidad
Idea positivista

Escuela Positiva:
LOMBROSO, GARÓFALO, FERRI, etc.), desaparece la distinción entre sujetos
imputables e inimputables puesto que el fundamento de la responsabilidad penal ya
no radica en la libre voluntad sino en la responsabilidad social. Ahora, lo que
interesa poner en claro es más bien la capacidad de los individuos para atentar
contra el orden social (de ser peligrosos) y no su capacidad o incapacidad de
autodeterminación. En este sentido, el llamado “inimputable” presentará rasgos de
elevada peligrosidad, hasta el punto de ser considerado el criminal por excelencia,
muy cercano al “delincuente nato” (o loco moral).
La Escuela Positivista pensaba que el delincuente era un individuo que accionaba
debido a causas fuera de su control, por lo que propondría respuestas al delito que
tendiera a la protección de la sociedad ya la rehabilitación del delincuente.

Según (Patitó, 2000).Es una condición jurídica poseída por todo aquel que tenga
madurez mínima fisiológica y psíquica, salud mental y conocimiento de los actos
que se realizan.

Según ´´Machicado J. 2012´´La imputabilidad es un concepto jurídico que se define

como la capacidad psíquica de una persona de comprender la antijurídica de su
conducta y de no adecuar la misma a esa comprensión´.

Según Zazzali, 2007, imputabilidad significa capacidad para delinquir. Es el

legislador quien fija las condiciones que debe reunir un sujeto para ser considerado
inimputable y es el juez quien establece la imputabilidad o no del autor de un delito.

Existe la imputabilidad cuando la persona tiene la capacidad de comprender la

ilicitud de su acción u omisión y de determinarse de acuerdo con esa comprensión
y conocimiento. Por lo tanto la imputabilidad representa la capacidad para delinquir,
ya que sin ella como requisito no puede existir un delito.

Un aspecto negativo de la imputabilidad es la inimputabilidad, consistente en la

incapacidad de querer y entender en el mundo del Derecho. Son aquellas causas
en las que si bien el hecho es típico y antijurídico, no se encuentra el agente en
condiciones de que se le pueda atribuir el acto que perpetró. Por lo tanto, ésta
implica la capacidad de ser sujeto activo del delito, o sea, no es un comportamiento
propio del delito.

Tipos de imputabilidad.

• Imputabilidad plena: La imputabilidad plena se refiere a la capacidad de

una persona para ser considerada responsable penalmente por sus
acciones.
En algunos países, la imputabilidad plena se otorga a partir de los 18 años,
mientras que en otros puede ser a partir de los 16 o incluso los 14 años. En
general, se considera que una persona es imputable si tiene la capacidad de
entender la naturaleza y las consecuencias de sus acciones y de actuar de
acuerdo con ese entendimiento. La imputabilidad plena ha abordado varios
aspectos, incluyendo la relación entre la edad y la capacidad de entender y
controlar el comportamiento, la influencia de los trastornos mentales en la
imputabilidad y el papel de las circunstancias del delito en la evaluación de la
responsabilidad penal.
En Venezuela, la imputabilidad plena se otorga a partir de los 18 años, según el
Código Penal venezolano. Sin embargo, existen excepciones en casos de delitos
graves como el homicidio, donde se puede considerar la imputabilidad a partir de
los 16 años. Una revisión de estudios sobre la relación entre la edad y la
capacidad de controlar el comportamiento sugiere que los adolescentes tienen una
capacidad limitada para controlar sus impulsos y tomar decisiones informadas.
Esto puede deberse en parte a la inmadurez del cerebro y a la falta de experiencia
en la toma de decisiones complejas.

Además, el Código Penal venezolano establece que una persona no es imputable

si, en el momento del delito, estaba en un estado de locura o de perturbación
mental que le impidiera entender la ilicitud de sus acciones o dirigir su conducta.
En cuanto a las circunstancias del delito, el Código Penal venezolano también
establece que una persona puede ser eximida de responsabilidad penal si actuó
en defensa propia, en cumplimiento de un deber o en estado de necesidad.

• Imputabilidad disminuida: La imputabilidad disminuida se refiere a la

capacidad reducida de una persona para entender la ilicitud de sus
acciones o dirigir su conducta debido a una enfermedad mental o
discapacidad intelectual. Es importante destacar que la imputabilidad
disminuida no significa que la persona no sea responsable de sus acciones.
Simplemente significa que su capacidad para entender la ilicitud de sus
acciones está comprometida debido a una enfermedad mental o
discapacidad intelectual.

La imputabilidad disminuida también puede ser el resultado de un trastorno

psiquiátrico temporal, como una crisis de ansiedad o una depresión aguda. En
estos casos, la persona puede haber perdido momentáneamente la capacidad de
controlar su conducta debido a la intensidad de los síntomas.

En Venezuela, el Código Penal establece que una persona con imputabilidad

disminuida puede ser considerada responsable penalmente, pero con una pena
reducida en función de su capacidad mental. En la práctica, la falta de recursos y
la falta de atención médica adecuada para las personas con enfermedades
mentales o discapacidades intelectuales pueden dificultar la identificación y el
tratamiento de la imputabilidad disminuida. Además, la estigmatización y la
discriminación hacia estas personas pueden llevar a una falta de comprensión y
empatía por parte de los jueces y jurados, lo que puede afectar negativamente su
capacidad para recibir un juicio justo y equitativo.
 • La Inimputabilidad: La inimputabilidad se refiere a la incapacidad de una
persona para ser considerada responsable de sus acciones debido a su
estado mental o psicológico, es decir, una persona inimputable no puede
ser culpable de un delito porque no tenía la capacidad mental para
comprender la naturaleza ilícita de sus acciones o para actuar de manera
diferente.
La inimputabilidad puede ser el resultado de una enfermedad mental o
discapacidad intelectual, como la esquizofrenia, el trastorno bipolar, el trastorno
del espectro autista o la discapacidad intelectual. En estos casos, la persona
puede haber perdido permanentemente la capacidad de controlar su conducta
debido a la naturaleza crónica de su condición. Sin embargo, también puede haber
situaciones en las que la inimputabilidad sea temporal, como durante una crisis
psiquiátrica aguda o después de un traumatismo cerebral. En estos casos, la
persona puede haber perdido momentáneamente la capacidad de controlar su
conducta debido a la intensidad de los síntomas.

Es importante destacar que la inimputabilidad no significa que la persona sea

absuelta de toda responsabilidad por sus acciones. Simplemente significa que no
puede ser considerada culpable de un delito debido a su estado mental o
psicológico.

En lo que refiere a la minoría de edad, y según el sistema penal venezolano,

aquellos que no hayan alcanzado la edad 12 años, se consideran inimputables.
Por lo tanto, el adolescente que cometa un hecho delictivo, podrán ser
responsable, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y del Adolescente.

Elementos de la Imputabilidad.

• La capacidad mental: es un factor clave en la imputabilidad, ya que una

persona que no tenga la capacidad de comprender la naturaleza y
consecuencias de sus actos, no puede ser considerada responsable
penalmente. En Venezuela, se realiza una evaluación psiquiátrica para
determinar la capacidad mental de una persona acusada de un delito. La
evaluación psiquiátrica se realiza por un equipo de especialistas que
evalúan el estado mental del individuo, su capacidad para comprender la
naturaleza del delito y su capacidad para controlar su comportamiento. Si
se determina que el acusado no tiene la capacidad mental necesaria para
ser considerado imputable, se le considera inimputable y se le envía a un
hospital psiquiátrico para recibir tratamiento.
Es importante destacar que la capacidad mental no es lo mismo que la capacidad
intelectual. Una persona puede tener un alto coeficiente intelectual pero tener
problemas mentales que afecten su capacidad para comprender la naturaleza y
consecuencias de sus actos. Por esta razón, la evaluación psiquiátrica es
fundamental en el proceso de imputabilidad.

• La libertad de voluntad: Este se refiere a la capacidad de una persona

para elegir entre diferentes opciones y tomar decisiones por sí misma, una
persona que actúa bajo coacción o amenaza no puede ser considerada
responsable penalmente, ya que su voluntad no fue libre. En Venezuela, la
ley establece que una persona que actúa bajo coacción o amenaza no
puede ser considerada responsable penalmente. Sin embargo, es
necesario demostrar que la coacción o amenaza fue lo suficientemente
grave como para anular la libertad de voluntad del individuo.
En el caso de los menores de edad, se considera que su libertad de voluntad
puede estar limitada por su nivel de madurez y desarrollo cognitivo.

• Conciencia de la ilicitud: Está se refiere a la comprensión por parte del

acusado de que su conducta es contraria a la ley. Es un elemento
importante en la imputabilidad, ya que una persona que actúa sin saber que
su comportamiento es ilegal no puede ser considerada responsable
penalmente.

En el caso de los menores de edad, la conciencia de la ilicitud también se tiene en

cuenta al evaluar su responsabilidad penal. Se considera que los menores pueden
tener una comprensión limitada de las leyes y sus consecuencias, por lo que se
debe evaluar si sabían o no que su conducta era ilegal. En Venezuela, la Ley
Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes establece que se
debe evaluar su capacidad de comprensión y discernimiento para determinar si
actuaron con conciencia de la ilicitud. Además, se deben tomar en cuenta factores
como su edad, madurez y nivel educativo.

Es importante destacar que la falta de conciencia de la ilicitud puede ser

causada por diversos factores, como la falta de educación, la influencia de
terceros o problemas de salud mental. En estos casos, se debe tener en cuenta la
situación particular del acusado y buscar soluciones que promuevan su
rehabilitación.

• Capacidad de autodeterminación: Se considera que una persona tiene

capacidad de autodeterminación cuando es capaz de comprender las
consecuencias de sus acciones y tomar decisiones de manera libre y
consciente. Esto se evalúa tanto en adultos como en menores de edad,
teniendo en cuenta su edad, madurez y nivel educativo. La capacidad de
autodeterminación no está relacionada con la capacidad de entender las
 normas legales, sino con la capacidad de tomar decisiones libres y
conscientes.
En Venezuela, se considera que una persona tiene capacidad de
autodeterminación cuando es capaz de comprender las consecuencias de sus
acciones y tomar decisiones de manera libre y consciente.

Factores que pueden afectar la imputabilidad.

De acuerdo al Código Penal venezolano, las causas son: minoría de edad, y la

enfermedad mental la cual conlleva también a una condición en aquellas personas
con defectos mentales de inteligencia y de voluntad, por lo que no están
conscientes de sus actos que se conoce como inimputabilidad. Sin independencia
de la voluntad o sin capacidad de entendimiento el sujeto es inimputable. (Zazzali,
2007) es decir que la inimputabilidad requiere que al momento de cometerse el
hecho delictivo, las personas además de presentar una enfermedad mental y estar
relacionada con los hechos, tenga afectadas algunas de las condiciones
precitadas: conciencia, inteligencia y voluntad.

Según Patitó, 2000, todo trastorno o alteración psíquica que perturben

profundamente la inteligencia y/o la voluntad puede ser causa de inimputabilidad,
por lo que, es inimputable aquel sujeto que no es responsable penalmente de un
delito cometido, ya que no comprende las consecuencias que esto puede
ocasionar.

Otro tipo de psicosis que se debe tener presente es la psicosis en el trastorno

afectivo bipolar. El trastorno psicótico afectivo bipolar, el cual es caracterizado por
episodios de manía y depresión mayor. En los episodios maníacos graves existe
una gran dificultad para concentrarse con gran distracción, existen ideas de
grandeza y aumento de confianza en sí mismo. La pérdida de inhibiciones sociales
puede conllevar a un comportamiento impulsivo, inapropiado. En los casos muy
graves puede haber síntomas de psicosis.

Por otro lado, en los episodios depresivos, donde se altera el afecto puede verse
comprometido la capacidad de comprensión de los actos cuando hay síntomas de
psicosis que afecta el juicio; por lo que tanto en una fase como en la otra está
justificada la inimputabilidad.

Otra enfermedad que se debe de tomar en cuenta es la demencia. Corresponde a

un grupo de enfermedades neurológicas caracterizadas por presentar déficits
cognocitivos, moderados y severos que son irreversibles, que afectan las
funciones psíquicas, la memoria, el pensamiento y la capacidad de juicio. Altera
las funciones intelectuales basales y desintegra las conductas sociales; hay
pérdida del control de impulsos y pérdida de juicio crítico. Cada individuo con
demencia se debe valorar individualmente para determinar el tipo y el grado de
afección de las capacidades intelectuales y volitivas.

En el código penal Venezolano está establecido en su artículo 62:

“No es punible el que ejecuta la acción hallándose dormido o en estado de

enfermedad mental suficiente para privarlo de la conciencia o de la libertad de sus
actos.”

“Sin embargo, cuando el loco o demente hubiere ejecutado un hecho que

equivalga en un cuerdo a delito grave, el tribunal decretará la reclusión en uno de
los hospitales o establecimientos destinados a esta clase de enfermos, del cual no
podrán salir sin previa autorización del mismo tribunal. Si el delito no fuere grave o
si no es el establecimiento adecuado, será entregado a su familia, bajo fianza de
custodia, a menos que ella no quiera recibirlo”.

En lo que refiere a la minoría de edad, y según el sistema penal venezolano,

aquellos que no hayan alcanzado la edad 12 años, se consideran
inimputables. Por lo tanto, el adolescente que cometa un hecho delictivo, podrán
ser responsable, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescente

DERECHOVENEZOLANO EN DERECHO PENAL EL JULIO 2, 2014

Importancia en el Derecho Penal venezolano.

La imputabilidad es la capacidad de aplicar los cargos que por ley se atribuyen a

una persona que ha realizado determinados actos. La existencia de determinados
trastornos de índole psiquiátrica que puedan anular parcial o totalmente la
consciencia y voluntad de modo transitorio o permanente, hace necesario la
evaluación de la presencia de estas alteraciones en el momento de los hechos
para saber si la persona es susceptible de aplicación de la totalidad de cargos por
los que se le imputa.

Es decir, que la imputabilidad es un concepto fundamental en el derecho penal, ya

que se refiere a la capacidad de una persona para entender y ser responsable de
sus acciones delictivas, en otras palabras, se trata de determinar si el individuo
tenía la capacidad mental y moral para comprender la naturaleza y consecuencias
de sus actos. Es importante ya que establece la base para la responsabilidad
penal de una persona, si esa persona no es imputable, es decir, si no tiene la
capacidad de entender y ser responsable de sus acciones, no puede ser
considerada culpable y, por lo tanto, no puede ser condenada penalmente.
Además, la imputabilidad también tiene implicaciones en la determinación de las
penas y medidas de seguridad que se aplican a los delincuentes, si una persona
es declarada imputable, se le pueden imponer penas más severas y se puede
considerar que es necesario aplicar medidas de seguridad para proteger a la
sociedad.

Nuestro código penal acoge en materia de imputabilidad la solución clásica y se

apoya en dos principios elementales:

• La conciencia
• La libertad de las personas

Esto quiere decir que el individuo entienda el significado del acto que realiza y si lo
realiza o no con entera y absoluta libertad. Guiándonos por el artículo 62 del
código penal venezolano, textualmente expresa: “ No es punible el que ejecuta la
acción hallándose dormido o en estado de enfermedad mental suficiente para
privarlo de la conciencia o de la libertad de sus actos”.

Cuando una persona tiene conciencia y libertdad de sus actos y realiza un acto
punible, cuando ha debido y podido abstenerse de cometerlo, tal persona es
moralmente responsable y por tanto, penalmente imputable y responsable. Si el
individuo por el contrario no ha podido determinarse libremente, si ha obedecido a
un impulso contra el que no ha podido reaccionar, si obra dominado por una fuerza
a la que no ha podido resistir, no hay delito y por tanto no puede ser declarado
responsable.
 Conclusión.

En definitiva, la imputabilidad es un elemento clave para garantizar la justicia en el

sistema penal, ya que permite determinar quiénes son responsables de sus
acciones y, por lo tanto, merecedores de sanciones. Sin embargo, es importante
tener en cuenta que la imputabilidad no es un concepto absoluto y puede variar
según las circunstancias individuales de cada caso, por lo que es fundamental que
los jueces evalúen cuidadosamente todos los factores relevantes antes de tomar
una decisión. En última instancia, el objetivo de la imputabilidad es asegurar que
se haga justicia y se proteja a la sociedad en su conjunto.

La imputabilidad es un principio fundamental en cualquier sistema de justicia, ya

que permite establecer la responsabilidad de los individuos por sus acciones y
garantizar que se apliquen sanciones justas y proporcionales. Es importante que
las leyes y los procedimientos judiciales estén diseñados para proteger la
imputabilidad y asegurar que se respeten los derechos de todas las partes
involucradas en un proceso penal. Al mismo tiempo, es esencial que los jueces y
los expertos en derecho trabajen juntos para desarrollar una comprensión más
profunda de la imputabilidad y cómo aplicarla de manera efectiva en situaciones
complejas.
 Bibliografía.

• https://derechovenezolano.wordpress.com/2014/07/02/circunstancias-
atenuantes-y-su-relacion-con-la-imputabilidad-como-requisito-del-delito/
• https://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-
00152015000200010
• Lecciones de derecho penal PARTE GENERAL; Hernando Grisanti
Aveledo
• Derecho Penal Venezolano, Biblioteca de la universidad
• Manual General de Derecho Penal; Biblioteca de la universidad