Está en la página 1de 3

Invasión napoleónica a España: influencia en movimientos

independentistas americanos

Las invasiones Napoleónicas a la península ibérica tuvieron significativa relevancia


en las colonias americanas a través de distintas dimensiones, previamente,
podemos encontrar los precedentes a dicho acontecimiento en las consecuencias
del bloqueo continental ejercido hacia Gran Bretaña por orden de Napoleón,
provocando que la potencia Europea invadiera, entre otros emplazamientos
coloniales, el Río de La Plata, como intento de abrir nuevas rutas comerciales en
busca de sustituir sus negocios con la bloqueada Europa. El desarrollo de estos
intentos de invasión por parte de Gran Bretaña desembocó en fracaso y la victoria
española, provocada en gran parte por los criollos rioplatenses, impulsó los primeros
trazos de autodeterminación e identidad americana al verse capaces de repeler un
ejército colonial europeo. Posteriormente, la conformación de la Junta suprema en
Sevilla en busca traspasar el poder a las juntas locales que enfrentaron a Francia
durante los levantamientos,acabó provocando una serie de reacciones adversas en
el territorio americano, especialmente por su falta de legitimidad frente a una
sucesión monárquica tradicional. Ante la falta de autoridad debido al nuevo régimen
político en la metrópoli, ocurren una serie de procedimientos en América, primero en
1808, concretamente en el Virreinato de Nueva España, donde se destituyó, tras
una serie de escándalos relacionados a corrupción, al Virrey Iturrigaray, apresando a
quienes manifestaron sus deseos de investir a una autoridad local en representación
del rey, manifestando un “sostén permanente de la nueva solución política” ( Alperin
Donghi, T, Reforma y disolución de los imperios ibéricos 1750-1850, Alianza
Editorial. 1985.pág.117). Como se ha nombrado anteriormente, las invasiones
inglesas al río de la plata dieron pie al desarrollo de una conciencia regional, que se
manifestó en el área militar, provocando la creación de un cuerpo de milicias,
teniendo como base la organización de los cuerpos regulares. En relación a esto, la
dicotomía entre dos autoridades señaladas por sus méritos en las invasiones, el
Virrey Liniers y Martín de Alzaga se torna distante. Tras la guerra, la ascendencia
Francesa del virrey y el anterior intercambio de correspondencia con Bonaparte
provoca que se le acuse de traidor, Una junta disidente dirigida por Javier de Elio se
organiza en Montevideo y se intenta, infructuosamente, la dimisión del Virrey, este
hecho marca el predominio de las tropas criollas (patricios) en Buenos Aires. Tras
dicho acontecimiento, la Junta Suprema busca decidir la autoridad de Liniers como
virrey, durante estos etapa, aparecen las figuras de los hermanos Rodriguez Peña, y
principalmente Manuel Belgrano, quien brevemente adopta una postura de
legitimación hacia la princesa Carlota joaquina, tras la imposición del cese por parte
de su consorte, el príncipe de Portugal y de Lord Strangford, la infante Carlota
decide desvincularse de quienes la apoyan, acusándolos de subversivos. La
seguidilla de acontecimientos acabó llegando al Alto Perú, donde los miembros de la
Audiencia de charcas, criollos terratenientes, destituyen a su presidente por
presunto intento de subversión, estas acciones provocaron una reacción inesperada
en La Paz, donde a diferencia de Chuquisaca, el poder estaba en manos de
Mestizos, que se levantaron de forma menos conservadora que los anteriores, estos
movimientos acabaron siendo reprimidos por el recientemente investido Virrey
Cisneros. Durante los incidentes de represión, a diferencia de tiempos anteriores, se
ejecutan tanto a miembros implicados de bajo estrato social, como a aquellos de
posición social considerable, significando un punto de quiebre entre las autoridades
realistas y los grupos de poder regionales:”He aquí un signo adicional de que el
equilibrio entre administración regia y poderosos locales se había roto para
siempre…”(Alperin Donghi, T, Reforma y disolución de los imperios ibéricos
1750-1850, Alianza Editorial. 1985.pág.120). En efecto, si bien las autoridades
realistas creyeron que a través de sus métodos represivos, los emancipados
habrían de cesar sus hostilidades, ante sus acciones, pronto estos grupos tomaron
una postura mucho más determinista:”La victoria o la muerte”. Los mismos métodos
se llevan a cabo en Quito, donde tras la disolución de la audiencia y la toma del
poder por la Junta de gobierno al mando del Marqués de Selva Alegre, el presidente
de dicha Audiencia recibe el apoyo del virrey del Perú quien restablece el control
sobre la zona: más de sesenta comprometidos son encarcelados y al año siguiente,
masacrados. Esta serie de acontecimientos, ocurridos Desde Nueva España hasta
el Río de la Plata, entre los cuales se ven implicados motivos tanto de índole
política, como económica acabaron conformando la antesala de las futuras guerras
revolucionarias en América:”Esas primeras fintas no han debilitado todavía a los
sostenedores del poder metropolitano, ni siquiera en ese Río de La Plata donde el
equilibrio local de fuerzas militares les es claramente desfavorable. Pero han
revelado las modalidades del conflicto que se avecina…”(Alperin Donghi, T, Reforma
y disolución de los imperios ibéricos 1750-1850, Alianza Editorial. 1985.pág.121).
Bibliografía:

- Alperin Donghi T, Reforma y disolución de los imperios ibéricos 1750-1850, Alianza Editorial.
1985

- Ares Pons, R. España en América, Curso de Historia Nacional y Americana, Tomo 1, 3ra Ed,
La Casa del Estudiante, 1974

También podría gustarte