CONTEXTUALIZACION DE LA PROVISION DE EMPLEOS DE CARRERA

ADMINISTRATIVA

ACTIVIDAD 1 – EVIDENCIA 2.

Aprendiz:
HUMBERTO SIMÓN LEAÑO AMÉZQUITA

FICHA: 2706825

SERVICIO NACIONAL DE APRENDIZAJE (SENA)

2023
 PANORAMA PERSONAL DE LA SITUACIÓN OCUPACIONAL Y LA BUSQUEDA
CONSTANTE POR LO QUE CADA UNO, DE FORMA INDIVIDUAL, ENTIENDA
COMO ESTABILIDAD

La búsqueda por mejorar nuestra calidad de vida nos obliga en muchos casos
a fortalecer nuestro historial académico y finalmente nuestra hoja de vida.
Algunos tienen la facilidad para formarse en universidades privadas debido a
la dura competencia que se forma para ingresar a una universidad pública;
pero ni los unos ni los otros tienen garantizada una oportunidad para obtener
ingresos a través de un empleo bien remunerado y no digamos estable.
Luego de superadas las etapas competitivas en la escuela y en la universidad,
llega una no menos ardua y más decisiva llamada vida laboral. Esta última es
más real que las anteriores. Lo que está en juego en la vida laboral no son unas
buenas calificaciones o un buen promedio, sino la posibilidad de hacerse
independiente y en otros casos más difíciles: sobrevivir.
El empleo estable y bien remunerado parece un ideal inalcanzable. El
acercamiento a un primer empleo suele estar dado por la posibilidad de
acceder a una pasantía o práctica profesional de la cual se deriva un primer
certificado de experiencia el cual atesoramos orgullosa y realizadamente como
nuestra primera experiencia de la vida adulta y puerta de entrada a amplias y
mejores opciones. Pronto nos damos cuenta que el camino apenas empieza, y
que la batalla por el empleo es mas real de lo que pensamos. Se solicita
experiencia para tener la posibilidad de ingresar a oportunidades donde
esperamos adquirir experiencia.
De la mano de las ilusiones provocadas por una entrevista de trabajo que no
termina en nada, llegan las estafas. Las empresas ficticias que de manera
delictiva se aprovechan de la necesidad y en muchos casos ingenuidad de la
persona desesperada para solicitarle dinero a cambio de ingresar a una
empresa que jamás existió. Por suerte, estas modalidades de estafa, que se
han difundido tan fácilmente gracias a la tendencia que tenemos de compartir
nuestros datos personales a través de aplicaciones de mensajería, correo
electrónico o redes sociales, son fácilmente contrarrestables pues la misma
facilidad de comunicarnos por internet con personas conocedoras del tema o
hacer una propia investigación de la supuesta empresa por internet, nos
salvaguardan de los errores que la ingenuidad o la desesperación nos puedan
causar.
Finalmente, la primera experiencia laboral para muchos de nosotros llega de
la mano del contrato por prestación de servicios. Normalmente este empleo
no se corresponde con la profesión que ostentamos, ni con una alta
expectativa salarial y mucho menos se desarrolla en nuestro municipio de
origen… pero soy de los que piensa que cualquier oportunidad de empleo es
una experiencia de aprendizaje y se debe agradecer. Tenemos nuestro primer
contrato y aprendemos lo que significa tener obligaciones contractuales, nos
adentramos al mundo de pagar mes a mes la seguridad social y vamos
aprendiendo qué es eso del régimen contributivo en salud. Ya la salud y la
alimentación no vuelven a ser tarea de nuestros padres sino de nosotros
mismos, y ¡eso se siente muy bien! No importa si el contrato solo dura tres
meses o cinco, la oportunidad y el aprendizaje son enormes.
Sabemos que la búsqueda de empleo y experiencias de aprendizaje jamás
termina. Y nos mantenemos revisando las plataformas de empleo a diario, casi
hasta repugnarnos, pero decidimos que “no hay de otra”. Ocasionalmente y
gracias a los medios de comunicación y redes sociales descubrimos que hay
otras formas de empleo, el llamado “empleo público”. Esta última forma de
empleo la vemos como una posibilidad aún más remota, en parte por
desconocimiento, en parte por desconfianza hacia las instituciones públicas y
en parte también (y no en menor medida) por la desconfianza que tenemos
hacia nuestras propias capacidades. Para concursar debemos presentar un
extenso examen escrito dividido en dos componentes: El funcional y el
comportamental. Un examen donde se compite con personas de todo el país
buscando lo mismo que nosotros.
En muchos casos el cargo a concursar solo tiene una plaza, quizás dos, nada
fácil. El examen escrito es solo una etapa dentro del proceso de selección. Si el
aspirante cumple con la verificación de requisitos mínimos para el empleo al
cual aplica, ha superado la primera etapa. Luego vendrá el examen,
posteriormente la verificación de antecedentes en la que se otorgarán puntos
adicionales al aspirante dependiendo de si posee experiencia laboral o
relacionada; pero para llegar a la verificación de antecedentes el aspirante
deberá haber superado el examen con el puntaje mínimo requerido.
Una vez se han surtido las etapas mencionadas se conformará el listado de
elegibles, que como su nombre lo indica, es la relación final de candidatos que,
por su puntaje y hoja de vida, pasarán a ocupar el cargo al cual aspiraron
dependiendo de cuantas vacantes se hayan ofertado para ese cargo. Quien
ocupó el primer lugar en el listado ocupará el cargo; si por alguna razón el
primer lugar decide no ocupar el cargo, le sucederá el siguiente y así
sucesivamente.
El ingreso al empleo público otorga ciertos beneficios al empleado con el fin
de que este pueda desempeñar su labor de forma idónea y para ello el estado
le garantiza estabilidad, prestaciones sociales y el amparo de que su
nombramiento no se verá afectado por motivaciones políticas ni
discriminatorias.
Sin duda que la posibilidad de que cualquier persona que cumpla los requisitos
pueda concursar libremente para uno de estos cargos y conseguir el estatus
que este brinda, es un completo y admirable logro de nuestras instituciones
estatales. Pero tal mecanismo de selección y acceso tardó alrededor de 30
años en instaurarse, no fue hasta la constituyente de 1991 que el país empezó
a pisar fuerte en la implementación de este sistema de administración de
personal.
El país hoy cuenta con la Comisión Nacional para el Servicio Civil (CNSC) que
vigila y supervisa todos estos procesos de selección de aspirantes y su
permanencia en los cargos públicos a los cuales aspiraron.
La historia de la conformación del sistema de selección de empleados para
entrar a carrera administrativa demuestra que ha sido un proceso de
constante desarrollo y mejoramiento con aras en garantizar la mejor
prestación de los servicios del estado a sus ciudadanos. Y así como este sistema
ha evolucionado en las últimas décadas seguramente seguirá evolucionando.
Idealmente podríamos requerir que los cargos a proveer sean más numerosos,
pero esto depende de la demanda del servicio e irá de la mano con el
crecimiento poblacional, pero también con la creación de nuevas entidades de
orden nacional dirigidas a satisfacer necesidades de la población.
El país se debate hoy ante una reforma laboral que busca otorgar prerrogativas
a los trabajadores y se cuestiona si la figura del contrato por prestación de
servicios otorga los suficientes privilegios al trabajador en comparación con
otro tipo de contratos laborales. Hoy por hoy el debate alrededor del trabajo
digno se mantiene vigente, pero este es tan importante como la poca oferta
laboral existente en el país, especialmente en los municipios que no son
ciudades capitales.