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UNIDAD 12

OBLIGACIONES DE HACER
Art 773.- Concepto. La obligación de hacer es aquella cuyo objeto consiste en la prestación de un servicio o en la realización de un hecho, en
el tiempo, lugar y modo acordados por las partes.
Es aquella obligación cuya prestación consiste en la realización de un hecho o de un servicio, que se traduce en un
compromiso positivo de energía de trabajo orientado a satisfacer el interés del acreedor. Lleva implícita una idea de actividad
que genera una modificación en el estado de las cosas existentes a través de una conducta positiva del deudor.
Los contratos de servicios y de obras (art 1278), mandato (art 1319), consignación (art 1335, 1338), depósito (art 1356),
transporte (art 1280, 1289), agencia (art 1479), concesión (art 1502), distribución, franquicia (art 1512, 1514), cuenta
corriente bancaria (art 1393), de servicio de caja de seguridad (art 1413), de custodia de títulos (art 1418), de seguro (ley
17418), de consultoría, de prestación de servicios informativos, de asistencia administrativa o de management, de publicidad,
de viaje y turismo, de hotelería, entre otros, son fuentes relevantes de obligaciones de hacer. Mismo carácter presenta la
obligación de resarcir en especie, que consiste en reponer las cosas al estado anterior al q se hallaban antes del ilícito dañoso
(art 1740)

OBLIGACIONES DE DAR OBLIGACIONES DE HACER

Entrega de la cosa Ejecución de un hecho


Su cumplimiento puede ser perseguido con el auxilio de la Si bien procede la ejecución forzada, existe un límite más
fuerza pública aunque para ello sea necesario ejercer rígido: no puede haber violencia sobre la persona del
violencia (otorgan al acreedor prerrogativas más intensas) deudor
La persona del deudor es, por lo general, irrelevante para el La persona del deudor puede presentar especial
acreedor quien pone acento en lo patrimonial, en la cosa importancia para el interés del acreedor, especialmente
misma cuando se trate de prestaciones personalísimas.

Especies de prestaciones de hacer


► FUNGIBLE: el interés del acreedor se satisface con la realización de la actividad debida con total independencia de
quien sea el sujeto q la realiza. P.ej obligación asumida por el peón de desmalezar determinada fracción de campo; al
acreedor le es indiferente q dicha actividad sea realizada por el peón A o B.
► NO FUNGIBLE: el interés del acreedor sólo se satisface si el propio deudor realiza la conducta debida; las prestaciones
intuitu personæ o personalísimas se constituyen teniendo en cuenta como factor relevante la persona que ejecutará la
prestación. Al acreedor no le es indiferente quien realiza la prestación, por lo q solo habrá efectivo cumplimiento si el hecho
es ejecutado x el propio deudor. P.ej. contratación de servicios d reconocido cirujano para q efectúe una delicada
intervención.
Para q el hecho pueda ser ejecutado por otro no alcanza con q la actividad prometida sea susceptible de ser realizada por un
sujeto distinto del obligado. Habrá que estar siempre a lo q las partes han convenido o, en su defecto, a lo q resulte razonable
desde un punto de vista objetivo con relación al negocio celebrado. (art 776)
Es fungible si el interés del acreedor se satisface con la ejecución de la actividad idéntica a la debida llevada a cabo por
cualquier persona. Es infungible cuando aquel sólo alcanza plena realización a través de la ejecución efectuada por la propia
persona con quien se vinculó, de suerte que si se forzara el pago por un 3ro se obligaría al acreedor a recibir algo distinto de
aquello que le era debido.

► DE SERVICIO: obligación de hacer que tiene por objeto la prestación de un servicio, la realización de un compromiso
de energía independiente de la obtención de un resultado determinado; cuenta la actividad en sí misma considerada y la
mayor o menor diligencia empleada para satisfacer el interés del acreedor (p.ej obligaciones de hacer q emergen del contrato
de servicios o de trabajo). Incluye las obligaciones de hacer de medios y de resultado.
Art 774.- Prestación de un servicio. La prestación de un servicio puede consistir:
a) en realizar cierta actividad, con la diligencia apropiada, independientemente de su éxito. Las cláusulas que comprometen a los buenos
oficios, o a aplicar los mejores esfuerzos están comprendidas en este inciso;
b) en procurar al acreedor cierto resultado concreto, con independencia de su eficacia;
c) en procurar al acreedor el resultado eficaz prometido. La cláusula llave en mano o producto en mano está comprendida en este inciso.
Si el resultado de la actividad del deudor consiste en una cosa, para su entrega se aplican las reglas de las obligaciones de dar cosas ciertas
para constituir derechos reales.
► DE OBRA: obligación de hacer cuyo objeto es la ejecución de un hecho que debe traducirse en la obtención de un
resultado; el compromiso de energía debe traducirse en la obtención de un resultado material o intelectual (p.ej obligaciones
q emergen del contrato de obra y de transporte de personas y cosas).
Art 775.- Realización de un hecho. El obligado a realizar un hecho debe cumplirlo en tiempo y modo acordes con la intención de las partes o
con la índole de la obligación. Si lo hace de otra manera, la prestación se tiene por incumplida, y el acreedor puede exigir la destrucción de
lo mal hecho, siempre que tal exigencia no sea abusiva.

► INSTANTANEA: prestación q se agota en una única actividad desarrollada por el deudor de la obligación (p.ej
transportista que se obliga a trasladar a una persona de un lugar a otro determinado, cumple su prestación al finalizar el
viaje)
► PERMANENTE: de tracto sucesivo, perdura en el tiempo pudiendo a su vez ser continuada (cuando la actividad del
deudor se prolonga ininterrumpidamente en el tiempo, p.ej la obligación de vigilancia q tiene el depositario respecto de la
cosa dada en depósito) o periódica (cuando a pesar de ser cumplida en un solo acto, su realización se fracciona en el tiempo,
p.ej la obligación q asume un profesor de guitarra q debe dar clase a los alumnos todos los martes a tal hora)

Efectos: Las obligaciones de hacer son regidas, en cuanto a los efectos, por los mismos principios establecidos para todas las
obligaciones en general. El efecto normal de una obligación de hacer consiste en q el deudor cumpla in natura con la
prestación asumida (art 775). Es deber primordial del deudor de una obligación de hacer cumplir con la prestación asumida
en el tiempo y forma que fue convenido por las partes.

Cumplimiento específico: tiempo y modo de ejecución. La prestación debe ser cumplida ajustando la conducta al plan
prestacional objeto de la obligación, ejecutado con probidad y buena fe.
Tiempo acorde o propio es aquel que las partes han pactado expresa o tácitamente al convenir la obligación. Si nada se
hubiera convenido al respecto y no surgiera implícitamente su fijación de conformidad a la naturaleza de la prestación, lo
deberá fijar el juez.
ART 871. Tiempo del pago. El pago debe hacerse:
a) si la obligación es de exigibilidad inmediata, en el momento de su nacimiento;
b) si hay un plazo determinado, cierto o incierto, el día de su vencimiento;
c) si el plazo es tácito, en el tiempo en que, según la naturaleza y circunstancias de la obligación, debe cumplirse;
d) si el plazo es indeterminado, en el tiempo que fije el juez, a solicitud de cualquiera de las partes, mediante el procedimiento más breve q
prevea la ley local.
ART 887. Excepciones al principio de la mora automática. La regla de la mora automática no rige respecto de las obligaciones (…) b) sujetas
a plazo indeterminado propiamente dicho; si no hay plazo, el juez a pedido de parte, lo debe fijar mediante el procedimiento más breve que
prevea la ley local, a menos que el acreedor opte por acumular las acciones de fijación de plazo y de cumplimiento, en cuyo caso el deudor
queda constituido en mora en la fecha indicada por la sentencia para el cumplimiento de la obligación.
En cuanto al modo de cumplimiento también deberá estarse a lo que las partes han estipulado, o en su defecto, a la
intención que tuvieron al contratar. Tendrán mucha incidencia los usos y costumbre del lugar en q debe llevarse a cabo la
prestación. De arribarse a un conflicto en sede judicial, el juez siempre se regirá por la apreciación del principio de buena fe,
dado q la prestación de hacer debe ejecutarse del modo en que las partes lo entendieron o verosímil// pudieron entenderlo,
obrando con lealtad. Los servicios deben realizarse conforme la reglas q rigen la actividad, el arte u oficio en cuestión
La ley 24240 se refiere a la forma y modo de cumplimiento de las obligaciones de hacer en materia de prestación de servicios
a usuarios, vigorizando el principio de buena fe, para asegurar una tutela justa, equilibrada y eficaz de los dchos del usuario
(interpretación en sentido más favorable al consumidor, prestación de servicios de forma que no presenten peligro alguno
para la salud o integridad física del usuario, y en caso de q pueda suponer riesgo se brinde adecuado y razonable
asesoramiento, respeto por parte d los proveedores d servicios de términos, plazos, condiciones, modalidades, reservas y
demás circunstancias conforme a las cuales hayan sido ofrecidos, publicitados o convenidos).
Incorporación de terceros
La iniciativa del pago por un 3ro no proviene del acreedor sino de una exigencia q efectúa el propio deudor o de un acto
espontaneo de un 3ro q paga una deuda ajena.
Sólo en las prestaciones fungibles el deudor esta legitimado para imponer al acreedor el pago a través de la ejecución
prestacional efectuada por otro, habida cuenta de q las condiciones personales del deudor son irrelevantes a los fines de la
satisfacción del interés del acreedor. El acreedor no puede oponerse a recibir dicho pago por un 3ro sea por iniciativa del
deudor o del 3ro. Si el acreedor podrá oponerse a la ejecución por otro cuando la prestación es infungible, consecuencia
lógica del carácter intuitu personæ q tiene el dcho prometido q sólo admite adecuada realización en cabeza del deudor.
Art 776. La prestación puede ser ejecutada por persona distinta del deudor, a no ser que de la convención, de la naturaleza de la obligación
o de las circunstancias resulte que éste fue elegido por sus cualidades para realizarla personalmente. Esta elección se presume en los
contratos que suponen una confianza especial.

Ejecución forzada y Ejecución por otro


Ante la falta de cumplimiento espontaneo de la prestación por parte del deudor de una obligación de hacer, el acreedor
puede acudir a la ejecución forzada para exigir su cumplimiento especifico. Este principio es concordante con lo dispuesto en
el art 730 y no impide q el acreedor pueda acceder a otros mecanismos legales, como la aplicación de sanciones
conminatorias, para forzar también el cumplimiento. Únicamente podrá demandarse la indemnización dineraria cuando se
han agotado todos los medios para procurar el cumplimiento del deudor in natura y no se ha logrado.
Art 777.- Ejecución forzada. El incumplimiento imputable de la prestación le da derecho al acreedor a:
a) exigir el cumplimiento específico;
b) hacerlo cumplir por terceros a costa del deudor;
c) reclamar los daños y perjuicios.
La ejecución forzada y el empleo de la fuerza publica procede en aquellos supuestos en los cuales el objeto de la prestación
puede ser escindido de la persona del deudor (p.ej empresa de transportes q se obligar a llevar contingente de estudiantes).
Cuando el hecho adeudado no es escindible de la persona del deudor por constituir una emanación de su personalidad, la
ejecución forzada directa tiene un limite categórico: no puede haber violencia sobre la persona del deudor. En dicho caso el
acreedor tendrá q demandar los daños y perjuicios, a menos q sea procedente la ejecución por un tercero y él así lo prefiera.
Frente a la mora del deudor la ley permite al acreedor hacer cumplir coactivamente la prestación por un 3ro, a cargo y costa
del deudor; para ello será necesario que exista mora del deudor (es decir q el solvens haya incurrido en un retardo
injustificado en el cumplimiento y q este le sea imputable, incumplimiento absoluto), q la prestación de hacer sea fungible (q
no se trate de una prestación de hacer intuitu personæ) y q el acreedor obtenga autorización judicial previa, excepto en
situación de urgencia debiendo justificar luego ante el juez el carácter de urgente q presentaba la situación y q motivó su
ejecución por un 3rp prescindiendo de la autorización judicial previa. Si el acreedor opta por la ejecución por el 3ro, nada
impide q pueda reclamar, además, la indemnización de los daños y perjuicios moratorios q derivan del retraso en q ha
incurrido el deudor.

Responsabilidad por incumplimiento


Luego de haber procurado el acreedor por todos los medios obtener la prestación un natura si haberlo conseguido,
procederá la indemnización de los daños derivados del incumplimiento de la obligación. Se trata de la misma obligación q
sólo ha mutado su objeto: la actividad a desarrollar por el deudor es reemplazada por una suma de dinero que integra la
indemnización.
Imposibilidad de pago. Si la falta de cumplimiento por parte del deudor sucede en razón de algún hecho q no es imputable a
su conducta, la doctrina mayoritaria sostiene q la obligación debe extinguirse sin responsabilidad alguna para el deudor, en
razón de configurarse la imposibilidad de cumplimiento (sobrevenida al nacimiento de la obligación).
Art 955. La imposibilidad sobrevenida, objetiva, absoluta y definitiva de la prestación, producida por caso fortuito o fuerza mayor, extingue
la obligación, sin responsabilidad. Si la imposibilidad sobreviene debido a causas imputables al deudor, la obligación modifica su objeto y se
convierte en la de pagar una indemnización de los daños causados.
Art 956. La imposibilidad sobrevenida, objetiva, absoluta y temporaria de la prestación tiene efecto extintivo cuando el plazo es esencial, o
cuando su duración frustra el interés del acreedor de modo irreversible.
Obligación de escriturar
Obligación de hacer originada en las operaciones inmobiliarias por la celebración de un boleto de compraventa (junto con las
obligaciones de entregar la cosa el vendedor y pagar el precio de la venta el comprador); el contrato de compraventa de
inmuebles debe ser instrumentado en escritura pública en virtud de lo dispuesto por el art 1017.
Art 1017. Escritura pública. Deben ser otorgados por escritura pública:
a) los contratos que tienen por objeto la adquisición, modificación o extinción de derechos reales sobre inmuebles. Quedan exceptuados los
casos en que el acto es realizado mediante subasta proveniente de ejecución judicial o administrativa;
b) los contratos que tienen por objeto derechos dudosos o litigiosos sobre inmuebles;
c) todos los actos que sean accesorios de otros contratos otorgados en escritura pública;
d) los demás contratos que, por acuerdo de partes o disposición de la ley, deben ser otorgados en escritura pública.
Art 1018. Otorgamiento pendiente del instrumento. El otorgamiento pendiente de un instrumento previsto constituye una obligación de
hacer si el futuro contrato no requiere una forma bajo sanción de nulidad. Si la parte condenada a otorgarlo es remisa, el juez lo hace en su
representación, siempre que las contraprestaciones estén cumplidas, o sea asegurado su cumplimiento.
Concepto, características. Otorgamiento de la escritura por el Juez.
Responsabilidad por incumplimiento: valuación del daño.

OBLIGACIONES DE NO HACER
Art 778.- Obligación de no hacer. Es aquella que tiene por objeto una abstención del deudor o tolerar una actividad ajena(...)
Las obligaciones de no hacer tienen por objeto una conducta negativa, consistente en una abstención (in non facendo) o en
un deber de tolerancia (in patiendo, p.ej locatario q asume el deber de no impedir q un vecino pueda atravesar el inmueble q
ocupa para poder acceder a la vía pública)por parte del deudor. La omisión puede consistir en la no realización de actos
materiales (p.ej no edificar en determinado lugar) o de actos jurídicos (p.ej no contratar). Le son aplicables las disposiciones
generales relativas a las obligaciones de hacer.
Comparación con las obligaciones de dar y de hacer y las servidumbres.
Especies o clases
 Instantáneas: la prestación negativa se agota en un único instante, se lleva a cabo mediante un solo acto o momento (p.ej
cuando una persona se compromete a no presentarse a una audiencia de oposición de antecedentes q se celebra un
día determinado, cumple no asistiendo a ella)
 Permanentes: denotan cierta perdurabilidad a lo largo del tiempo
- Continuadas: la prestación negativa se proyecta a lo largo de un tiempo determinado o indefinida//, sin
fraccionamiento alguno; suponen una situación de permanente pasividad (p.ej no viajar a determinado lugar durante
el plazo de 3 meses)
- Periódicas o de tracto sucesivo: contienen una prestación negativa q debe ser cumplida de modo fraccionado, en
determinados lapsos de tiempo (p.ej tolerar q una persona pueda alojarse en el inmueble dado en comodato una
semana cada 2 meses)
Efectos. Al igual que las obligaciones hacer, las de no hacer también son regidas, en cuanto a los efectos, por los mismos
principios establecidos para todas las obligaciones en general.
Cumplimiento específico. El deudor de una obligación de no hacer cumple cuando, espontáneamente, se abstiene de realizar
un hecho o tolera una situación, en el tiempo y la forma en q fueran convenidos por las partes de la obligación.
En las obligaciones de no hacer instantáneas, ante la realización del hecho q se decía omitir, el deudor incurre en
incumplimiento absoluto y definitivo de la obligación.
En las obligaciones de no hacer permanentes (periódicas o continuadas), si el deudor realiza los actos q no debió realizar
puede no dar lugar a un incumplimiento absoluto y definitivo, sino q puede ocasionar únicamente un supuesto de mora (p.ej
si el deudor se había comprometido a suspender la realización de las obras de construcción de un determinado inmueble, y
sin perjuicio de ello, las continua efectuando hasta q finalmente cesa con las mismas, el acreedor puede demandar por el
cumplimiento tardío de la obligación los daños y perjuicios derivados del retardo en el pago).
Ejecución forzada. En las obligaciones de no hacer procede salvo cuando sea menester ejercitar violencia sobre la persona del
deudor; debe tratarse de obligaciones de no hacer duraderas o periódicas. En las obligaciones de no hacer instantáneas, las
reglas de la ejecución forzada son inaplicables, pues presuponen siempre la posibilidad de cumplimiento tardío; frente a la
realización del hecho, el acreedor sólo podrá reclamar la pertinente indemnización de daños.
El acreedor no puede hacer ejecutar la prestación por otro a cargo del deudor, ya q se trata de prestaciones por naturaleza
infungibles; la actuación a desplegar consiste en un comportamiento negativo y el único q puede efectuarlo es el obligado.
Responsabilidad por incumplimiento.
Art 778. (…) Su incumplimiento imputable permite reclamar la destrucción física de lo hecho, y los daños y perjuicios.
Si el cumplimiento de la obligación se torna imposible por culpar del deudor, el acreedor tiene dcho a obtener la
indemnización de los daños y perjuicios q deriven del incumplimiento, así como a exigir la destrucción de lo que se hubiese
hecho o q se le autorice para destruirlo a costa del deudor. El acreedor no se encuentra habilitado para hacer justicia por
mano propia, debe requerir autorización judicial para obtener la destrucción de lo realizado, por si o por un 3ro; sin esa
autorización previa la facultad de destrucción es inconcebible e implicaría un delito. Dicha facultad se encuentra limitada, ya
que no es posible emplear violencia sobre la persona del deudor y, además, es preciso q la destrucción de lo realizado no
importe el sacrificio de un valor económicamente superior al interés del acreedor comprometido en el cumplimiento
obligacional, o plasme otra forma de ejercicio abusivo del dcho.
Tipos de obligaciones de no hacer:
Según su proyección y duración temporal: • instantáneas • duraderas
Según la entidad del hecho negativo: • de abstención • de tolerar
Según su fuente: • legales • convencionales

OBLIGACIONES DE MEDIOS Y DE RESULTADOS


OBLIGACIONES DE MEDIOS: aquellas en las cuales el deudor se compromete a realizar una conducta diligente, orientada a la
obtención de un resultado, esperado y querido por el acreedor, pero no asegurado.
P.ej el médico que asume la obligación de diagnosticar y tratar a un paciente; abogado q se obliga a representar a su cliente.
El profesional se compromete a poner sus conocimientos y diligencia para alcanzar una finalidad procurada por el acreedor
(p.ej curación, ganar un juicio), de carácter aleatorio, pues su obtención no depende exclusivamente del obrar del profesional
sino también de otros factores. Por esta razón, la culpa del profesional y el incumplimiento son inescindibles (inseparables).
La ausencia de resultado no es suficiente para para generar responsabilidad del deudor pues este sólo esta obligado a actuar
con diligencia para satisfacer el interés del acreedor, ligado ciertamente a un resultado esperado pero no asegurado. En estas
obligaciones el factor de atribución es subjetivo, sin perjuicio de q la prueba de la culpa del deudor pueda descansar sobre el
acreedor o, en casos excepcionales, ser presumida iuris tantum, correspondiendo al deudor la acreditación de un obrar
diligente (obligaciones de medios agravadas o reforzadas)
Cuando el factor de atribución de responsabilidad es subjetivo la causa es ajena, y el caso fortuito desplaza la relación de
causalidad, se atribuye la causa a un hecho diferente del responsable aparente. Dentro de un sistema de responsabilidad
subjetiva, basado en la idea de culpa se corresponde de tal modo con la prueba del deudor de haber prestado diligentemente
la conducta debida en una obligación de medios.
Las obligaciones de medios son alcanzadas por el principio de la culpa (art 1721, 1724 y cc). Excepto disposición legal en
contrario, la carga de la prueba de la culpa pesa sobre el acreedor (art 1734). Cuando el legislador invierte la carga
probatoria, a partir de ciertos extremos facticos, presume la existencia de culpabilidad, poniendo en cabeza del demandado
la prueba en contrario; el sindicado como responsable se libera probando que no hubo culpa de su parte. El CCyC faculta al
juez a distribuir la carga de la prueba de la culpa o de haber actuado la diligencia debida, ponderando cuál de las partes se
haya en mejor situación para aportarla (art 1735)
Supuestos de obligaciones de medios: obligaciones de prestar servicios, en particular, las q provienen del contrato de
locación de servicios, de trabajo y, como regla, del mandato (si pese a desplegarse diligentemente tales servicios al acreedor
no logra satisfacer su interés, la prestación estará de todos modos bien cumplida). La mayor parte de los servicios de
profesionales de la medicina y de la abogacía encuadran en esta categoría; también incluye la obligación que presta el
trabajador en el campo del dcho del trabajo.
Son obligaciones de medio en el CCyC las de transmitir bienes ajenos cuando no se ha garantizado el éxito de la promesa (art
1008), la promesa de hecho de 3ro cuando no se ha garantizado q sea aceptada (art 1026), la obligación de realizar las tareas
y esfuerzos q resulten del contrato o de las circunstancias para q la cosa futura llegue a existir en las condiciones y tiempo
convenidos (art 1131), como regla, la asumida por el prestador de servicios en la locación de servicios (art 1252, 1256), las
obligaciones del mandatario (art 1324), la obligación del corredor (art 1345), entre otros.

OBLIGACIONES DE RESULTADOS: aquellas en las cuales el deudor compromete su actividad para el logro de un interés final
del acreedor, no contingente o aleatorio, de suerte que su falta de obtención importa incumplimiento; el deudor asegura un
resultado y asume todas las contingencias que puedan presentarse en el desempeño de la conducta proyectada, salvo
aquellas absolutamente fortuitas, generadas por un factor ajeno y determinable.
P.ej las obligaciones de dar, donde la no concreción del resultado, es decir la no entrega de la cosa debida, produce el
incumplimiento. La responsabilidad q emerge de dicho incumplimiento es objetiva, por lo q el deudor sólo se libera probando
la causa ajena.
Art 1723.- Responsabilidad objetiva. Cuando de las circunstancias de la obligación, o de lo convenido por las partes, surge que el deudor
debe obtener un resultado determinado, su responsabilidad es objetiva.
Supuestos de obligaciones de resultado: todas las obligaciones de dar (su cumplimiento se obtiene a través de la efectiva
entrega de lo adeudado), las obligaciones de hacer (cuando el deudor debe procurar al acreedor un resultado concreto,
incluyendo las prestaciones q debe el proveedor profesional de servicios brindar al consumidor), y las obligaciones de no
hacer (su cumplimiento suele depender exclusivamente del deudor, la aleatoriedad es inexistente).

Criterios para determinar de qué tipo de obligación se trata


 Las partes pueden, de manera expresa o tácita, determinar si una obligación es de medios o de resultado, por aplicación
del principio de la autonomía privada; basta con q ello surja de manera inequívoca de la voluntad de los interesados. Estos
pactos son plena// validos en los contratos paritarios y, en principio, tb en materia de contratos por adhesión y en el campo
del dcho del consumo, siempre q a través de ellos no se desnaturalicen los dchos del adherente o del consumidor o usuario
 La determinación de la naturaleza de una obligación como de medios o de resultado también puede surgir de la propia
ley o de los usos y costumbres, en forma expresa o implícita; tal lo q sucede en materia de locación de obra, o en el ámbito
de responsabilidad profesional de los médicos y abogados.
 Si nada se ha pactado al respecto y no es posible inferir de la normativa vigente si la obligación es de medios o de
resultado, el carácter debe ser dilucidado atendiendo a otros parámetros, generalmente complementarios entre sí, entre
ellos: el carácter aleatorio del resultado; el riesgo contractual; la buena fe, la equidad, la confianza y la finalidad social; el
orden público económico; los usos y costumbres; el papel activo o pasivo del acreedor en el cumplimiento de la prestación
prometida.

Origen de la clasificación. Si bien la creación de esta clasificación es atribuida a René Demogue en el Dcho francés (hacia
1925), existen rastros de ella en el Dcho romano y en los ordenamientos alemán e italiano con anterioridad a la exposición
efectuada por el jurista francés. Demogue afirmaba q existen situaciones en las cuales el deudor o solvens se compromete a
obtener un resultado determinado (p.ej el locatario q debe restituir la cosa arrendada en buen estado), cuya falta de
obtención generará su responsabilidad a no ser q se acredite la causa ajena (casus), único medio viable para provocar, en tal
caso, la ruptura del nexo causal. Pero, afirmaba también, q en ciertos casos hay obligaciones q se consideran cumplidas por el
deudor aun cuando no se haya obtenido el resultado esperado, siempre y cuando aquel haya actuado diligentemente en pos
de su concreción; en dicho caso, estará a cargo del acreedor la acreditación de la culpa del solvens si pretende endilgarle
responsabilidad (aun tratándose de un supuesto de responsabilidad contractual, pesa sobre el acreedor la carga de la prueba
del factor d imputación: la culpa o el dolo del deudor, p.ej en la responsabilidad médica o del abogado). Con esto, advierte
Demogue, el régimen de la carga de la prueba de la culpa es idéntico tanto en la responsabilidad contractual como en la
extracontractual, ya que en ambos casos hay q determinar ex ante si el deber u obligación incumplidos -según se trate de
responsabilidad aquillana o contractual, respectivamente- es de medios o de resultado. Para el jurista francés, en las
obligaciones de medios es el acreedor quien debe demostrar la negligencia del deudor, quien para poder eximirse deberá
acreditar su "no culpa" (haber actuado diligentemente); mientras que en los deberes de resultado, la culpa se presume,
pesando la carga de la eximente en cabeza del deudor (el incumplimiento engendra la presunción de culpa del deudor). La
obligación de medios impone únicamente al deudor el deber de aptitud e idoneidad para adoptar y llevar a cabo aquellas
diligencias o medidas que habitualmente conducirán al resultado esperado, sin asegurar la obtención de este último. En
cambio, en la obligación de resultado el deudor se compromete a la obtención de este, por lo cual, ante la frustración de su
consecución, se presumirá su responsabilidad.

La teoría de Demogue recibió gran adhesión en la doctrina europea, siendo también receptada de buen modo tanto en la
doctrina y en la jurisprudencia argentinas así como también en otros países latinoamericanos (p.ej Uruguay). Sin embargo, es
en el Dcho nacional en donde mayor debate se ha entablado en torno a esta clasificación de obligaciones.
Un gran sector doctrinario de las décadas del 60 y del 70 del siglo pasado había receptado la clasificación atribuida a
Demogue, tal como este la había expuesto, atribuyéndole valor en cuanto a establecer la regla a seguir en materia de carga
probatoria. Sin embargo, con posterioridad, en sucesivos trabajos se ha puesto en evidencia el verdadero alcance de esta
clasificación, que es el de asignarle como función principal a ella el de poder determinar el factor de atribución aplicable en
cada caso, marcando el sendero que han seguido también numerosos autores argentinos y extranjeros. Según esta línea de
pensamiento, siendo el objeto de la obligación el "plan o proyecto de una conducta futura del deudor con miras a dar
satisfacción a un interés del acreedor", aun cuando los dos elementos (plan de conducta e interés del accipiens) se
encuentran presentes en el objeto de toda relación obligatoria, ambos deben concretarse indefectiblemente en una
obligación de fines: el interés final al que aspira el acreedor (resultado) debe cumplirse, ya que el "mismo se halla tanto in
obligatione como in solutione. En la obligación de medios, en cambio, el interés perseguido por el accipiens se encuentra in
obligatione (al igual que el comportamiento diligente del deudor) -dado que es lo que justifica la celebración del contrato que
le sirve de causa- pero no in solutione, por revestir dicho interés el carácter de aleatorio o contingente (p.ej el caso del
médico que no se compromete a sanar al enfermo -resultado esperado por el paciente- dado que va más allá de sus
posibilidades).
En una obligación de medios, si el deudor demuestra que se comportó diligentemente, al mismo tiempo está demostrando
que ha cumplido. En cambio, en una obligación de resultado, la diligencia del deudor en el cumplimiento de la obligación
(ausencia de culpa) queda fuera de cuestión, debiéndose pues concluir que el solvens solo cumplirá con el deber obligacional
asumido, cuando haya dado satisfacción al interés último o definitivo esperado por el acreedor (p.ej en el contrato de
transporte, el transportista se compromete a una finalidad determinada: llevar sano y salvo a destino al pasajero). Ello no
ocurrirá en una obligación de medios, en donde el deudor cumplirá con el deber asumido (pagará) solamente desplegando
una conducta diligente tendiese a la concreción del fin buscado. La responsabilidad será objetiva en las obligaciones de
resultado y subjetiva (como regla general) en las obligaciones de medios.
Por lo tanto, en las obligaciones de medios, el objeto de la obligación (que constituye un quid diverso del contenido de ella,
aunque de signo coincidente) está formado por una conducta del deudor dirigida a alcanzar un resultado que no es
afianzado. Pero si el deudor no satisfizo la prestación en absoluto, si lo hizo parcial// o se encuentra incurso en mora,
tampoco incurrirá en responsabilidad si se demuestra el acaecimiento de una causa ajena o casus; se aplican los mismos
principios que en las obligaciones de resultado, puesto q estas perturbaciones al plan de prestación no tienen un régimen
diferente
Un deudor de una obligación de resultado incumplida únicamente se podrá liberar de responsabilidad acreditando una causa
ajena o casus (culpa de la víctima, hecho de un 3ro por quien no se deba responder o el caso fortuito/fuerza mayor), dado
que será el único modo viable de interrumpir el nexo causal, ya que el fin fue afianzado por el solvens al momento de
concertarse el plan de prestación; el casus no se identifica con la ausencia de culpa, ya que esta última es pago solo en las
obligaciones de medios, mientras aquel constituye el límite de responsabilidad tanto para las obligaciones d medios como
para las de resultado.
Entonces, en las obligaciones de resultado nos encontramos ante un supuesto de responsabilidad objetiva (siendo el factor
de atribución una obligación de seguridad especial, la garantía, el riesgo, etc). Mientras en las obligaciones de medios, se
debe efectuar una distinción: el factor de atribución será subjetivo (regla general que impera en esta categoría) cuando haya
existido un cumplimiento inexacto de la misma, pero en el resto de los incumplimientos de esta clase de deberes (p.ej
cuando el deudor no desarrolla ningún tipo de conducta) el factor de atribución también será objetivo (p.ej el cirujano q no
concurre al quirófano el día de la operación), dado que la culpa queda también aquí fuera de cuestión (si un médico concierta
una cita para un día y hora determinados y no concurre a ella, ha asumido frente al paciente-respecto de su obligación de
concurrencia-un resultado determinado).
El fundamento utilizado por Demogue para realizar esta distinción entre obligaciones de medios y de resultado, haciendo
hincapié en la carga probatoria en uno y otro caso, tiene real relevancia solo en las obligaciones de resultado, en donde
probado el incumplimiento, el deudor debe acreditar el casus para poder liberarse. Pero en las obligaciones de medios su
alcance presenta limitaciones, ya que existirán situaciones en las que la carga de la prueba de la culpa recaerá sobre el
acreedor, y otras en las cuales la culpa se presumirá, debiendo el deudor probar su "no culpa" o, en definitiva, el casus.
Asimismo, la clasificación puede dar lugar a cuestionamientos a la hora de definir a una obligación como de medios o de
resultado, cuando la asunción del resultado no aparezca impuesta por la ley o por la voluntad de las partes. No obstante,
podrá considerarse a una obligación como de fines cuando la obtención de la finalidad esperada por el acreedor se derive y
dependa -casi exclusiva//- de la conducta asumida por el deudor, y sea prácticamente inexistente el aleas del interés
comprometido. El criterio de aleatoriedad es importante para establecer la distinción entre una obligación de medios y una
de resultado, dado q tal carácter proviene de circunstancias o fuerzas que escapan al control del hombre, y si bien el aleas
existe siempre, aparece en mayor o menor proporción según cada caso: cuanto más alto sea el grado de aleatoriedad del
resultado esperado, mucho más probable se torna que esa obligación sea clasificada como "de medios".

Cuestionamiento de la clasificación. Son numerosas las críticas contra esta clasificación de las obligaciones (en especial en
cuanto a la importancia que tiene en torno al factor de atribución aplicable); entre ellas:
Algunos autores (Alsina Atienza, Belluscio, Zannoni, Wayar), con variantes entre ellos, han cuestionado la categorización en
obligaciones de medios y de resultado dado que no existe una diferencia ontológica entre ambas categorías, debido a que en
todas las obligaciones existen medios que tienden a la concreción de un resultado determinado.
Otros (Mosset Iturraspe, Lorenzetti, Alterini-Ameal-López Cabana), por su parte, han cuestionado a esta clasificación por
resultar ser un esquema demasiado rígido q deja fuera de consideración a los variados matices que presenta la realidad a
diario y que no son de fácil encasillamiento en las categorías de medios o de resultado. Así, se establece que existen
obligaciones "de resultado atenuadas" que le permitirían al deudor liberarse probando su falta de culpa (es decir, cuyo
incumplimiento generaría responsabilidad subjetiva), obligaciones "de resultado agravadas" en las que se exigiría la prueba
de un caso fortuito calificado, y obligaciones "de medios reforzadas", en las que existiría una presunción iuris tantum de
culpa.
Finalmente, Wayar afirma q la teoría daría lugar a situaciones de injusticia en los casos de responsabilidad profesional,
debido a que, en tales supuestos, la superioridad técnica y científica del profesional respecto del cliente, coloca a aquel en
mejores condiciones de probar el cumplimiento de su obligación debiendo cargar entonces con la acreditación de la prueba.
Quienes defienden la summa divisio entre obligaciones de medios y de resultado van de la mano con la actual tendencia del
Dcho de daños, q define a la responsabilidad civil como la reacción frente al daño injusto, y que procura que toda victima
pueda ver resarcido el daño injustamente sufrido. En este sentido, la clasificación en cuestión resulta relevante a la hora de
establecer el correcto factor de atribución aplicable en cada caso.
Régimen en el CCyC. La clasificación de las obligaciones de resultados y de medios no ha sido abordada explícitamente como
categoría autónoma en el CCyC, aunque ha sido receptada por normas aisladas de dicho cuerpo legal:
Art 774.- Prestación de un servicio. La prestación de un servicio puede consistir:
a) en realizar cierta actividad, con la diligencia apropiada, independientemente de su éxito. Las cláusulas que comprometen a los buenos
oficios, o a aplicar los mejores esfuerzos están comprendidas en este inciso;
b) en procurar al acreedor cierto resultado concreto, con independencia de su eficacia;
c) en procurar al acreedor el resultado eficaz prometido. La cláusula llave en mano o producto en mano está comprendida en este inciso.
Si el resultado de la actividad del deudor consiste en una cosa, para su entrega se aplican las reglas de las obligaciones de dar cosas ciertas
para constituir derechos reales.
El inc a) se refiere a las obligaciones de medios, prudencia o diligencia, donde el deudor se compromete a realizar la
prestación debida, consistente en desplegar cierta actividad, con la diligencia apropiada, independientemente de un
resultado exitoso.
Los inc b) y c) regulan supuestos de obligaciones de resultados. En el inc b están las obligaciones de resultado ordinarias o de
resultado simple, en las q el deudor se obliga a procurar al acreedor cierto resultado concreto con independencia de su
eficacia. En el inc c aparecen las obligaciones de resultado agravadas o de garantía, en las que el obligado se compromete no
solo a la obtención de un resultado, sino q además garantiza su eficacia al acreedor (cláusula llave en mano o producto en
mano)
Art 1291. Extensión de la responsabilidad. Además de su responsabilidad por incumplimiento del contrato o retraso en su ejecución, el
transportista responde por los siniestros que afecten a la persona del pasajero y por la avería o pérdida de sus cosas. (obligación de
resultado)
Art 1723. Responsabilidad objetiva. Cuando de las circunstancias de la obligación, o de lo convenido por las partes, surge que el deudor
debe obtener un resultado determinado, su responsabilidad es objetiva. (obligación de resultado)
Art 1768. La actividad del profesional liberal está sujeta a las reglas de las obligaciones de hacer. La responsabilidad es subjetiva, excepto
que se haya comprometido un resultado concreto (...) (obligación de resultado)

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