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Dictamen sobre si el Bono Anual por Productividad debe ser contemplado o no a

los efectos del calcular el Sueldo Anual Complementario.


Las gratificaciones o bonos anuales son una herramienta utilizada por algunas
empresas con determinada capacidad económica y estructural, y direccionadas a
otorgarles a los trabajadores una retribución adicional a su remuneración normal,
mensual y habitual.
Este instituto del derecho laboral claramente no está para nada prohibido por ley,
pero acarrea problemas interpretativos, principalmente, acerca de si deben estar
comprendidas en el cálculo de la Indemnización del art. 245 de la LCT y en el
cálculo del pago del Sueldo Anual Complementario.
Sobre el primer conflicto, hay por demás jurisprudencia y doctrina contradictoria,
pero no nos compete en este acápite. En cuanto al segundo brete, podemos
concluir, que toda la jurisprudencia y doctrina argentina, están de acuerdo en que
los Bonos Anuales (por cualquier causa) o Gratificaciones DEBEN contemplarse
para formular el cálculo del aguinaldo.
Para adentrarnos en el tema, creemos que el pago del Bono en cuestión ingresa
en el concepto de Remuneración, entendida esta, como la contraprestación que
debe percibir el trabajador como consecuencia del contrato de trabajo.
Coincidimos con reconocida doctrina laboralista en que, “…todas las prestaciones
que el trabajador realiza o promete realizar, las realiza o promete con el fin de
obtener una retribución y, análogamente, debe entenderse que todas las
cantidades que el principal se obliga a pagar tienen su causa fin en la prestación
del trabajo…”. En sendos sentidos, la CSJN tiene dicho que “Toda vez que el
salario se proyecta a la dignidad del trabajador, es preciso y necesario que a la
persona trabajadora le sea reconocido que toda ganancia que obtiene del
empleador con motivo o a consecuencia del empleo resulta un salario, esto es,
una contraprestación de este último sujeto y por esta última 1 DEVEALI, Mario,
“Donaciones, gratificaciones e indemnizaciones en el contrato de trabajo”, en D.T.,
1946. Causa, razón por la cual, dichos reconocimiento y contraprestación sólo
pueden y deben ser llamados, jurídicamente, salario, remuneración o retribución”.
Recordemos que a partir de la vigencia de la ley 23.041 el SAC consiste en un
equivalente al “50% de la mayor remuneración mensual devengada por todo
concepto dentro de los semestres que culminan en los meses de junio y diciembre
de cada año”. Como dice el Dr. Akerman “…la excepcionalidad de alguna
retribución mensual…no impide su consideración para determinar la remuneración
más elevada”, entendiéndose que, el bono, claramente forma parte de la base del
cálculo para considerar el SAC.
Concluyendo, es de norma absoluta que las gratificaciones (Bonos) tienen
naturaleza remuneratoria por lo que, como decimos en el párrafo ut supra,
integran la base calculatoria para determinar el Sueldo Anual Complementario.
Asimismo, coincidimos con el Doctrinario Akerman, que la gratificación integrara
dicha base de cálculo, ya sea exigible –es decir las otorgadas en forma habitual-,
o de un bono otorgado por única vez.

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