BAM21 Dinámica de La Predicación - Guillermo Bonnet

Dinámica de la
Predicación
Guillermo Bonnet
DINÁMICA DE LA PREDICACIÓN:
LA ÉTICA DEL PREDICADOR Y ASPECTOS
PRÁCTICOS DEL MENSAJE
Autor
Guillermo Gabriel Bonnet
Un curso del
Seminario Internacional de Miami
Miami International Seminary
14401 Old Cutler Road
Miami, FL 33158
305-238-8121 ext. 315
Email, guillermobonnet26@hotmail.com
Abril, 2020
1
Contenido
PREFACIO .................................................................................................................................. 4
LECCIÓN 1. El PREDICADOR Y SU VIDA PERSONAL I ................................................ 5
I. INTRODUCCIÓN........................................................................................................... 5
II. EL LLAMADO DE DIOS .......................................................................................... 5
III. LA ORACIÓN ............................................................................................................. 9
IV. CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 12
PREGUNTAS PARA LA LECCIÓN 1 ............................................................................... 12
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 14
II. LECTURA Y VALORIZACIÓN DE LA PALABRA ........................................... 14
III. VIDA DIARIA ........................................................................................................... 18
IV. CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 21
LECCIÓN 3. EL MENSAJE I ................................................................................................. 23
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 23
II. SINCERIDAD Y SERIEDAD .................................................................................. 23
III. PRIORIDADES DEL MINISTRO .......................................................................... 25
IV. CONCLUSIÒN .......................................................................................................... 29
LECCIÓN 4. EL MENSAJE II ................................................................................................ 31
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 31
II. ASUNTO O TEMA ................................................................................................... 31
III. ELECCIÓN DEL TEXTO ....................................................................................... 34
IV. ESPIRITUALIZACIÓN DEL TEXTO ................................................................... 35
V. CONCLUSIÓN .............................................................................................................. 38
LECCIÓN 5. EL MENSAJE III .............................................................................................. 40
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 40
II. CONVICCIÓN AL PREDICAR LA PALABRA DE DIOS...................................... 40
III. CON LA MENTE Y EL CORAZÓN ...................................................................... 43
IV. CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 46
2
LECCIÓN 6. EL MENSAJE IV .............................................................................................. 48
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 48
II. PLANIFICAR EL CRONOGRAMA DE MENSAJES ......................................... 48
III. VOZ ............................................................................................................................ 52
IV. USO DEL HUMOR................................................................................................... 53
V. CONCLUSIÓN .............................................................................................................. 55
LECCIÓN 7. EL MENSAJE V ................................................................................................ 57
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 57
II. ILUSTRACIONES .................................................................................................... 57
III. ATENCIÓN DEL OYENTE .................................................................................... 60
IV. CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 64
LECCIÓN 8. LA FINALIDAD DE LA PREDICACIÓN ..................................................... 66
I. INTRODUCCIÓN......................................................................................................... 66
II. EL AUTOR: DIOS .................................................................................................... 66
III. EL MENSAJE: CRISTO .......................................................................................... 68
IV. EL OBJETIVO: LA GLORIA DE DIOS................................................................ 69
V. CONCLUSIÓN .............................................................................................................. 72
BIBLIOGRAFÍA ....................................................................................................................... 74
GUIA DE ESTUDIO ................................................................................................................. 75
BIOGRAFÍA.............................................................................................................................. 77
3
PREFACIO
Este curso tiene como objetivo brindar herramientas útiles para el desarrollo del
predicador bíblico, las lecciones son más bien de consejos prácticos, pero
imprescindibles para el ministro que desea predicar correctamente el mensaje de Dios.
Las lecciones 1 y 2 tienen que ver con la vida del predicador, considero que este
tratamiento es indispensable, por el hecho de que transmitimos lo que somos, las
lecciones 3 a la 8 son de abordaje práctico que tocan distintos temas que hacen al
mensajes: Asunto, elección del texto, espiritualización, con la mente y el corazón, la
planificación de un cronograma de predicación, la voz, el humor, y otros temas que nos
darán una cierta orientación para ser lo más eficaz posible en el ámbito de la
predicación.
Mi deseo es que usted cómo estudiante pueda encontrar en estas páginas,

resueltas dudas que uno tenía al empezar a predicar, y en el camino al
perfeccionamiento como ministros, nunca obviaremos la oración, la obra del Espíritu de
Dios, pero el trabajo arduo también corresponde hacerlo por parte de los ministros que
desean honrar a Dios.
4
LECCIÓN 1. El PREDICADOR Y SU VIDA PERSONAL I
I. INTRODUCCIÓN
En esta lección estaremos tratando el llamado de Dios a la predicación y la

oración. Estos dos elementos son cruciales, pues sin ellos es imposible desarrollar el
ministerio de manera eficaz.
El primer elemento mencionado es quien avala, garantiza o certifica la función

del mismo hombre de Dios, y el segundo da poder, apertura, iluminación y fuerza al
predicador a la hora de exponer, de tal manera, que el Espíritu se manifieste en la
audiencia, por medio de la predicación en la vida del predicador. Considero que son
elementos esenciales para la dinámica de la predicación bíblica, pues sin ellos no podría
haber ministerio, y menos, un ministerio que de fruto en la obra del Señor.
II. EL LLAMADO DE DIOS

En esta etapa del curso trataremos acerca de la vida del predicador. Lo cual es de
suma importancia. Ningún mensaje puede ser dado con eficacia, con poder, si primero
el predicador no ha sido llamado por Dios a este ministerio. El apóstol Pablo tenía muy
en claro este tema, cuando se dirige a la Iglesia de Corinto en su primera carta. Él les
dice que fue llamado por Dios al ministerio y que a la vez fue llamado específicamente
a predicar su Palabra (1 Cor. 1:1,17).
El llamado de Dios implica una responsabilidad de representar correctamente a

Dios, para ello debemos de examinarnos constantemente y pedir a Dios que nos
transforme en instrumentos útiles. Nadie que es llamado al ministerio de la predicación
debe ser descuidado en lo fue llamado a hacer, no es una tarea menor, sin desprestigiar
cualquier oficio, es ser embajador de un reino inconmovible, es ser embajador del reino
de Dios para que otras personas puedan acceder a Él por medio de la predicación y la
obra del Espíritu.
Spurgeon en su libro “Discurso a mis Estudiantes” dice lo siguiente: “Todo

obrero sabe cuán necesario le es conservar su herramienta en buen estado, porque "si los
instrumentos se embotasen y no los amolase, tendría que emplear más fuerzas." Si al
5
obrero se le gastara el filo de su azuela, sabe que se vería obligado a redoblar su
esfuerzo, so pena de que su obra saldría mal ejecutada.”1
Otra anécdota que encontramos en el libro: “Discurso a mis estudiantes” es

medular en el cuidado de uno mismo como instrumento de Dios: “McCheyne,
escribiendo a un ministro amigo suyo que andaba viajando con la mira de
perfeccionarse en el alemán, usó un lenguaje idéntico al nuestro: "Sé que te aplicarás
con todo empeño al alemán, pero no eches en olvido el cultivo del hombre interior,
quiero decir, del corazón. Cuán diligentemente cuida el oficial de caballería de tener su
sable limpio y afilado, frotándole con tal fin cualquiera mancha con el mayor cuidado.
Recuerda que eres una espada de Dios, instrumento suyo, confío en ello, y un vaso de
elección para llevar su nombre.”2
Para cumplir con el llamado y no desgastarnos, debemos estar siempre en la

presencia del Señor, recordar que en el ministerio nuestro mayor instrumento es nuestra
vida consagrada a Dios. Esto acompañado con la oración hacen que el ministro este
siempre listo para la obra del ministerio
En cuanto al cuidado de sí mismos y al tiempo, muchos ministros de la

predicación culpan de sus errores al diablo, a la iglesia, o a otras personas. Pero es uno
mismo Él que debe toma conciencia que sin comunión con Dios, sin su Espíritu es
imposible poder ser transformados por la Palabra y a la vez dar fruto en la predicación.
Esto es algo que Moisés tenía muy en cuenta. Él le dijo a Dios: “si tu presencia no ha de
ir conmigo no nos saques de aquí” (Éx. 33:15); este pensamiento en la vida del ministro
es fundamental, por el hecho, de que Dios es el centro de todo ministerio que lleva
bendición. Es por eso que, una de las formas de cuidar a los demás, es cuidar de uno
mismo. El apóstol Pablo le dijo a Timoteo que cuide su vida para cuidar a los demás,
que persista, que nunca se detenga en la fiel exposición de la Palabra para bendición de
sus oyentes (1 Ti. 4:16).
El cuidado del ministro debe ser integral: espíritu y cuerpo, todo es del Señor,
todo debe entregarse en sacrificio a Él. Prestar atención a nuestra voz, a la salud y al
1
Spurgeon, Charles. Discurso a mis estudiantes. p. 1.
2
Ibíd. pp. 1-2.
6
corazón es glorificar a Dios en la administración de nuestra vida. Debemos estar
siempre preparados para representar correctamente a Dios.
Es como se dijo anteriormente, si el hacha pierde el filo es el trabajo más

agotador. Un hombre de Dios que no administra bien su vida, se encuentra en
desventaja para desarrollar el ministerio que Dios le encomendó.
En el ministerio de la predicación, nos encontraremos con distintos escenarios

durante la vida misma, desde hombres profanos, burladores, mentirosos, vendedores de
bendiciones y otras personas que solo buscan popularidad. Tendremos presiones pero
debemos ser fieles, solo el llamado al ministerio y la confianza en Dios, no en nosotros;
nos sostendrá para que seamos vasos de honra, hombres de Dios.
Timoteo como hijo espiritual del apóstol Pablo tuvo que enfrentar infinidad de
vicisitudes en Éfeso, a tal punto que su salud se veía perjudicada (1Ti. 5:23), pero el
Apóstol lo animaba a que hiciera buena profesión del llamado, y a la vez le recordaba
que él era un hombre de Dios.
John MacArthur dice al respecto: “…1 Timoteo 6.11, en donde Pablo se dirige a
Timoteo como hombre de Dios. Al llamarlo así, Pablo lo identifica con una extensa
línea de voceros de Dios que se extiende hasta el Antiguo Testamento. Pablo
indudablemente procuraba que el recordatorio de este noble linaje fortaleciera la
determinación de Timoteo de permanecer f irme frente a las presiones del ministerio.”3
Pablo le está diciendo a Timoteo, que el gran Dios del cielo y de la tierra, el
Todopoderoso, el que todo lo conoce, es el que está con Él, es el que le comisionó para
predicar su evangelio en Éfeso, que se mantenga firme hasta el final.
El hecho de ser ministro del evangelio glorioso de Dios nos debe llevar a prestar
atención a cada detalle de nuestra vida. Cualquier detalle por mínimo que sea puede
llegar a entorpecer el desarrollo del ministerio de manera eficaz. Dos ilustraciones que
Spurgeon nos brinda en su libro, afirma esta realidad: “Viajando un día por expreso de
Perth a Edimburgo, nos vimos repentinamente detenidos, a consecuencia de haberse
3
MacArthur, John. La predicación: como predicar bíblicamente. pp. 102-103.
7
roto un pequeño tornillo de una de las dos bombas de que virtualmente constan las
locomotoras empleadas en los ferrocarriles; y cuando de nuevo nos pusimos en camino,
tuvimos que avanzar al impulso de un solo émbolo que funcionaba en lugar de los dos.
Sólo un pequeño tornillo se habla inutilizado, y si ese hubiera estado en su lugar, el tren
habría andado sin pararse todo su camino; pero la falta de esa insignificante pieza de
hierro desarregló todo lo demás. Se dice que un tren se paró en uno de los ferrocarriles
de los Estados Unidos, con motivo de haberse llenado de moscas los depósitos de grasa
de las ruedas de los carros.”4 Debemos ser precavidos pues cualquier detalle puede
estropear algo tan maravilloso como el ministerio mismo y el mensaje que de parte de
Dios debemos dar a la congregación.
El estar siempre en la presencia de Dios y pedirle que analice nuestro corazón

(Sal. 26:1-3), y que nos muestre su voluntad es crucial en la vida del ministro de Dios,
del hombre de Dios. Otras de las cualidades indiscutibles de los hombres de Dios que
predican su Palabra, es que son sinceros, no hay hipocresía en ellos. La gente ve a
través de ellos el mensaje. Lo que ellos muestren a través de su persona es el mensaje
que están dando. Uno puede hablar del poder de Dios, de su fidelidad, de su soberanía,
pero vivir como si nunca hubiera hablado de ello. Y esto desacredita totalmente lo que
se habló.
Una frase muy importante que comparte John Stott de Phillip Books es la
siguiente, con respecto a este tema: “La predicación es la comunicación de la verdad de
un hombre a los hombres. Contiene dos elementos esenciales: la verdad y la
personalidad. No es posible que carezca de alguno de ellos y continúe llamándose
predicación. La predicación es traer la verdad mediante la personalidad. La verdad es en
sí misma un elemento fijo y estable; la personalidad es un elemento que varía y crece.”5
Claramente usted puede ver aquí que la verdad de Dios debe ir encarnada en la vida del
predicador, que el mensaje que lleva de parte de Dios a la congregación es parte de su
vida misma. No es en vano que el apóstol Pablo dice a los ancianos de Éfeso, como a
Timoteo que tengan cuidado primero de ellos mismos (Hch. 20:28; 1 Ti. 4:16), es en
consecuencia que ningún mensaje tendrá tanto poder como lo tiene primero en nuestra
4
5
Stott, John. La predicación: puente entre dos mundos. p. 259.
8
propia vida. El mensaje que predicamos es poder de Dios, cuando realmente nos
transformó primero a nosotros.
III. LA ORACIÓN
La oración en el predicador y ministro es crucial, ningún ministerio será efectivo

si no hace de la oración como el pan diario de cada día. Jesús a pesar de su gran
actividad siempre priorizaba el tiempo con Dios y la oración, creo que esto nos muestra
que la oración en la vida del predicador es una parte indispensable en la dinámica de la
predicación. Nunca uno debe empezar un tema, o desarrollar una tarea exegética u
homilética, sin antes bañar en oración lo que debe hacer. La misma oración no debe ser
solo dirigida hacia el mensaje, sino también a los oyentes.
Es cierto que la capacitación que uno tenga es indispensable, pero si no está bañada
en oración en intimidad con Dios es como nada. Spurgeon nos comenta: “El gabinete
del retiro es el mejor estudio. Los comentadores son buenos instructores, pero el Autor
mismo lo es mucho mejor, y la oración hace una directa apelación a él y lo alista en
nuestra causa.”6 Nuestro mejor comentario es la oración con el Dios que todo lo sabe,
esto nos hace entender que la oración es primordial en la tarea del predicador.
Le preguntaron una vez al predicador M'Cheyne con respecto a una predicación

diligente en el pulpito, a lo que él dijo: “Ex. 27:20: "aceite molido; aceite molido para
las lámparas del Santuario." Y además de esto, su espíritu de oración era mayor todavía.
A la verdad, no podía descuidar su asociación con Dios antes de entrar en la
congregación. Necesitaba estar bañado en el amor de Dios.”7
Los grandes predicadores y hombres de Dios nunca descuidaron la intimidad con

Dios y la oración, ella era indispensable en todo momento. Solo aquel que se prepara en
oración está preparado para estar ante la congregación. Con esto no digo que no se debe
estudiar. Pero la combinación entre oración y preparación es indispensable. Además de
ello la oración transforma el corazón y hace que el mensaje primero llegue a nuestra
6
7
Ibíd. p. 31.
9
vida para transformar a otros. Ser elocuentes no sirve si el mensaje dado no transformó
nuestra vida por medio de la oración.
Richar Baxter decía: “el ministro debe preocuparse en forma especial de su corazón
antes de ir a encontrar la congregación."8 El mensaje es de corazón a corazón, y este
debe estar preparado antes de estar con los hermanos en la fe. Además, si entendemos
que el mensaje es visible en la vida del predicador, más que en lo que dice, nos daremos
cuenta de la importancia de prepararse en oración.
Dios no nos concederá grandes mensajes, ni grandes impactos en donde

prediquemos si antes no hemos bañado en oración lo que hacemos. Si hoy deseamos
que Dios realmente cambie los corazones de una sociedad tan dura, de congregaciones
frías o tibias, solo será si nos comprometemos firmemente en la oración ferviente y en el
estudio de la Escritura. Pero como estamos con el tema de la oración ferviente, quiero
dejar algunos ejemplos de hombres de Dios que tenía como prioridad la oración en la
preparación del mensaje bíblico. En su libro “El predicador y la oración”, Edward
Bounds menciona lo siguiente: “Charles Simeon tenía la costumbre de orar desde las
cuatro de la mañana hasta las ocho. Juan Wesley empleaba dos horas diarias a la
oración. El arzobispo Leighton, permanecía tanto a solas con Dios que parecía estar en
perpetua meditación, oración y alabanzas fueron sus ocupaciones y su placer”.9
Prestemos atención a estos hombres de Dios. La importancia que daban al asunto de la
oración. Ellos primero que todo oraban, y ese era su trabajo más importante, creo que
deberíamos seguir sus pisadas para producir un impacto real a través de la predicación.
Estos ejemplos también forman parte del libro de Edward Bounds, no dejo de
mencionarlo para que tengamos en cuenta la importancia de los mismos. Lo cita de la
siguiente manera: “Samuel Rutherford, la fragancia de cuya piedad es aún rica, se
levantaba a las tres de la mañana para encontrarse con Dios en oración. En cuanto a
Joseph Alleine, se levantaba a las cuatro de la mañana para ocuparse en la oración hasta
las ocho. Si se encontraba de que había hombres de negocios que ya se ocupaban de sus
asuntos antes de que él estuviera levantado, exclamaba: “¡Oh, cuanto me avergüenza
8
9
Bounds, Edward. El predicador y la oración. p. 22.
10
esto! ¿No merecen los negocios de mi Maestro más que los suyos?”10 No podemos ser
débiles o indiferentes a la oración, allí está el secreto y el poder del ministerio del
predicador. Así es como lo hacían los grandes hombres de oración.
Recuerden las palabras de Pablo a la iglesia de Éfeso en el cual él les señala el valor
de cada persona cuando dice: “Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en
que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la
cual él ganó por su propia sangre” (Hch. 20:28). El Apóstol está diciendo que debemos
examinarnos y ser aptos para llevar adelante la iglesia del Señor la cual fue comprada
por su sangre. Qué responsabilidad, no podemos mostrarnos descuidados en la oración.
Si usted tuviera que presentarse a una entrevista de trabajo, si es de suma

importancia, usted se prepara mucho tiempo antes de conseguir dicho empleo secular. Si
para eso es que invertimos una gran cantidad de horas en nuestra vida, cuanto más para
el hecho de que el Señor nos moldee por su palabra y la oración para presentarnos ante
aquellos que fueron comprados con su sangre preciosa. Nada tiene más valor en el
mundo. Por tanto, seamos perseverantes en la oración, seamos personas que oran en
todo tiempo y lugar, y como dice el Señor por medio de la parábola de la viuda y el juez
injusto, no cesemos de orar en ningún momento, no cesemos de orar.
En este momento, pensado en la prioridad de la oración en la vida del predicador,

vino a mi mente la frase de Adoniram Hudson en la cual dice: “Dispón tus asuntos, si es
posible, de tal modo que puedas cómodamente dedicar dos o tres horas cada día, no
meramente a los ejercicios devocionales, sino al verdadero acto de la oración secreta y
de la comunión con Dios. Esfuérzate siete veces al día en retirarte de los negocios y
compañías y eleva tu alma a Dios en retiro privado. Comienza el día levantándose
después de medianoche, para dedicar algo de tiempo entre el silencio y la oscuridad de
la noche a esta obra sagrada. Procura también que la primera hora del día te encuentre
en la misma obra. Y que las nueve, doce, tres, seis y nueve de la noche testifiquen lo
mismo. Se resuelto en su causa. Has todos los sacrificios practicables para mantenerla.
Considera que tu tiempo es corto, y no permitas que los negocios y las compañías te
roben el tiempo que le debes a tu Dios.”11 Creo que muchas veces estamos lejos de
10
11
Ibíd. pp. 22-23.
11
poder lograr este tipo de esfuerzos en la oración, pero si lo hiciéramos tendría un gran
efecto en la vida personal y en la exposición de la Palabra.
Nunca es tarde para darle prioridad a este elemento de la dinámica de la predicación

que es la oración. Lo importante es empezar y en consecuencia poco a poco se verán los
resultados. Cuando la oración sea una prioridad cada día veremos el poder de Dios en la
vida personal, ministerio y oyentes. Queremos ver cambios realmente en el ministerio
de la exposición bíblica, dediquémonos fervientemente a la oración, luchemos con Dios
en oración hasta rayar el alba como lo hizo Job.
Quisiera culminar con las palabras de Canon Liddon: “Dejemos que los que
realmente han orado den la respuesta.”12 El hombre que ha luchado en oración ha
bañado la preparación y mensaje en oración que antes de subir al pulpito el mismo día
del Señor ha encomendado toda la causa a Él, con oración y quebrantamiento, verá los
resultados de esta piedad.
IV. CONCLUSIÓN
En esta lección hemos podido contemplar, o tener un panorama breve, pero de suma
importancia en la vida del predicador, como lo es: El llamamiento y la oración. Oro a
Dios que pueda tocar sus corazones como lo ha hecho con el mío, en cuanto a estos
elementos indispensables en la dinámica de la predicación. Que usted pueda meditar en
esto y evaluar su situación como cuando yo escribía estos párrafos. Sabemos que son
importantes el llamamiento y la oración, prestémosle la atención que se merecen para
bendición de la iglesia de Cristo y la gloria al Dios maravilloso que tenemos.
PREGUNTAS PARA LA LECCIÓN 1

1. En el ministerio nuestro mayor instrumento es la efectividad de las actividades.
Verdadero o falso.
2. El cuidado del ministro debe ser integral: _________ y ______, todo es del
Señor.
3. El hecho de ser ministro del evangelio glorioso de Dios nos debe llevar a prestar
atención a la predicación solamente. Verdadero o falso.
12
12
4. Otras de las cualidades indiscutibles de los hombres de Dios que predican su
Palabra, es que son (escoger las opciones correctas):
a. Inteligentes
b. Elocuentes
c. Sinceros
5. La oración en el predicador y ministro es crucial. Verdadero o falso.
6. La misma oración no debe ser solo dirigida hacia el _________, sino también a
los ___________.
7. El gabinete de retiro es el mejor descanso. Verdadero o falso.
8. Charles Simeon tenía la costumbre de orar (escoger las opciones correctas)
a. Media hora
b. Una hora
c. Desde las cuatro de la mañana
9. El hombre que ha luchado en oración ha bañado la preparación y mensaje en
oración. Verdadero o falso.
10. Explique con sus propias palabras: ¿Qué tan importante es el cuidado de
nosotros mismos para la predicación bíblica?
13
LECCIÓN 2. EL PREDICADOR Y SU VIDA PERSONAL II
I. INTRODUCCIÓN
En esta lección del predicador y su vida personal, abordaré el valor de la Palabra
de Dios y la lectura de esta, y la vida diaria del predicador. El objetivo que se persigue
en esta lección es, que usted entienda que la lectura de la Palabra de Dios es
indispensable para el ministro como lo es entender el poder de ella. Se incluirá también
un punto sobre la vida diaria del predicador, lo cual es indispensable en la dinámica de
la predicación, pues aquí se ve la realidad del mensaje que se predica y el mensaje que
se transmite.
Oro a Dios que estos conceptos se afirmen en su vida como lo fueron en la mía,
para poder bendecir el pueblo de Dios, transmitir correctamente la verdad de Dios, y
sobre todo que Dios sea glorificado a través de nuestras actividades, como lo es la
lectura de su Palabra, y la vida misma encarnando la verdad de Dios en el ámbito que lo
rodea.
II. LECTURA Y VALORIZACIÓN DE LA PALABRA
Todo predicador debe valorizar el hecho de la lectura de la Palabra de Dios. Es

crucial apartar cada día no solo para lectura devocional, sino para el aprendizaje. La
Palabra de Dios fue la que creó el mundo. Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz (Gn.
1:3). La Palabra de Dios es la que nos anima, consuela, dirige, y cambia nuestros
pensamientos.
Un pasaje medular sobre el poder de la Escritura, y el aporte que hace al

creyente. Es el siguiente: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar,
para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea
perfecto, enteramente preparado para toda buena obra” (2 Ti. 3:16).
El primer concepto que debemos tener en cuenta al leer el texto es que toda la
Escritura es inspirada, esto nos lleva a pensar que es el mismo pensamiento y discurso
de Dios. Haciendo alusión a la palabra “inspiración” que es de suma importancia en el
14
texto, esta nos habla de que el aliento de Dios, el mensaje de Dios fue comunicado en la
Escritura, por tanto, al leer debemos entender que no es una fábula, ni un cuento, una
historia más, o historieta de un mundo mágico. Es el mensaje que Dios dejó al hombre
para conocer su voluntad y para que le pueda glorificar.
Teniendo en cuenta esta realidad sublime, maravillosa al leer, quisiera dejar un

comentario esclarecedor de John Stott al respecto: “Por otro lado, si bien me referiré a
ello en otro párrafo, la Palabra de Dios escrita es una excelente definición de las
Escrituras, puesto que es una cosa creer que Dios ha actuado, revelándose a sí mismo en
la obra histórica de la salvación, y en forma suprema en la Palabra hecha carne. Es otra
creer que Dios ha hablado inspirando a profetas y apóstoles a interpretar sus obras. Una
tercera etapa es creer que el habla divina, que registra y explica la actividad divina, ha
sido puesta por escrito. Y sólo así podía la revelación particular de Dios hacerse
universal, y lo que dijo e hizo en Israel y en Cristo podía alcanzar a todas las personas
en todo tiempo y lugar.”13 Entender que Dios no solo se manifestó en tiempos antiguos,
que a la vez hizo habitáculo entre nosotros por medio de su Hijo, sino que también
habló e inspiro y puso por escrito sus pensamientos y propósitos, nos debe llevar, no
solo a dimensionar su poder sino a entender que Dios se quiso comunicar claramente
para que podamos llevar adelante la tarea de proclamar su Palabra a todas las personas,
a que puedan recibir la buena noticia de salvación.
El poder de Dios en la Palabra escrita es incalculable, por lo tanto, no debemos

ser perezosos al leer la misma o estudiarle, menos a tener un mal concepto de lo que ella
representa. Es el libro de Dios. Esto nos debe llevar a involucrarnos como predicadores
en el tiempo en que los testigos oculares de Jesús narraron o contaron sobre él, debemos
entrar en su ambiente cultural al leer, en su situación histórica. Nuestra lectura
responsable de la Palabra de Dios hará que el mensaje que uno comparta lleve ese
poder, con el cual sostiene todas las cosas y las preserva, con el poder de traspasar hasta
lo profundo del corazón para discernir las intenciones de los hombres.
Sabiendo que la Palabra escrita es el mensaje oral de Dios veremos que también
es incalculable su poder para enseñar. El texto que compartí dice que es útil para
13
15
enseñar. Esto me lleva a pensar que, es indispensable para el predicador, la lectura e
interpretación para edificación propia y para los que le escuchan. No podemos darle a la
gente palabras agradables, y no educar en la Palabra. Debemos saber que al enseñar la
Palabra de Dios se producen cambios importantísimos en la vida misma y de las
personas, por tanto, una buena enseñanza es como una buena medicina para los
problemas espirituales del hombre.
En una breve frase de Spurgeon vemos el valor de enseñar correctamente por

ende la importancia de leer correctamente: “Las apelaciones que excitan los afectos son
excelentes, pero si no van acompañadas de enseñanzas, son simplemente una apariencia,
un incendio de pólvora sin tirar una bala. Estad seguros de que la revivificación más
ferviente se acabará cual mero humo, si no se sostiene por el combustible de la
enseñanza. El método divino es presentar la ley a la mente, y enseguida escribirla en el
corazón; de este modo se ilumina el juicio y se someten las pasiones. Leed Hebreos
8:10, y seguid el modelo del pacto de gracia.”14 Es como dice Spurgeon, el método
divino es presentar la ley en la mente y escribirla en el corazón. Pero para ello debemos
ser lectores asiduos de la Escritura, estar totalmente impregnados de ella y poder
ubicarnos en cada libro de manera que al leerlo haya luz y entendimiento de los textos.
No es fácil, pero al que ama a Dios, todo le es posible.
El ministerio de predicación necesita de lectores asiduos, ningún ministro que no

lea la Palabra puede estar preparado para exponer la verdad de Dios. Es como dijo
Spurgeon: un incendio de pólvora sin tirar una bala. En una breve palabra: infructuosa.
El texto compartido de 2 Timoteo nos dice que la Palabra redarguye. Seguramente se
preguntarán: ¿Qué significa esto? En simples palabras redargüir es demostrar con
evidencias que es la verdad, y en consecuencia repensar y si es necesario cambiar
nuestra actitud. Nos confronta con la evidencia verdadera.
El ser un lector asiduo de la Escritura nos permite tener convencimiento de

varios temas en los que podríamos llegar a tener una concepción equivocada. Qué bueno
es poder hacer y decir lo que es correcto, es por eso que, la lectura responsable y
constante de la Palabra, nos hace eficaces en el ministerio. Charles Spurgeon menciona
14
16
lo siguiente en su libro: “Poder presentar un exordio oportuno y atractivo; hablar
fácilmente y con propiedad durante el tiempo asignado al discurso, y concluir con una
peroración que inspire respeto, puede parecer suficiente a los que predican de un modo
simplemente formal; pero el ministro verdadero de Cristo, sabe que el valor real de un
sermón debe consistir no en su forma y modo, sino en la verdad que contiene. Nada
puede sustituirse en vez de la enseñanza; toda la retórica del mundo es tan sólo como la
paja del trigo, cuando se pone en contraste con el Evangelio de nuestra salvación.”15 Es
crucial nuestra lectura de la Palabra de Dios, cuanto más aprendemos de ella, tanto más
podremos cambiar patrones equivocados de conducta, podremos dirigir a la
congregación por medio de sermones que tienen contenido veraz, no que solo están
llenos de retórica y vacíos de contenido bíblico. Esto es también lo que Spurgeon nos
está diciendo.
La Palabra de Dios corrige. Esto significa que rectifica la verdad o si hay un

error evita que se coloque en nuestros hábitos, y siembra o implanta la verdad en
nosotros. Es como cuando hacemos un examen, todo lo que está mal es corregido para
que podamos entender lo que está mal. Así es la Palabra de Dios, es como una tutora
que nos corrige para seguir por el camino correcto. Para esto la lectura es esencial, para
mantenernos en el camino correcto, para no desviarnos tras errores y herejías que
producen maldición en la vida o destrucción espiritual. Por lo que es importante orar,
leer, entender y aplicar.
En cuanto a la importancia de la lectura, con el objetivo de la preparación de

sermones. Un predicador llegó a la siguiente conclusión luego de haber recibido una
pregunta sobre cómo se sentía de estar en el púlpito exponiendo la verdad de Dios: “La
Biblia es la voz de Dios a lo largo de las generaciones. La función del predicador
bíblico es hacerse eco de esa voz en nuestra generación. Específicamente, la tarea del
predicador es doble: presentar el significado verdadero y exacto del texto bíblico
(veamos qué dice Dios) y de una manera que sea relevante para el oyente
contemporáneo (a nosotros).”16 Aquí podemos corroborar que importante es entender el
significado del texto, a través de la lectura, y poder luego llevarlo a la realidad del
oyente. Es el poder de Dios que está en su Palabra, la cual debe ser expuesta, dada a
15
16
Sunukjian, Donald. Volvamos a la predicación bíblica. pp. 7-8.
17
conocer de manera exacta para que el oyente pruebe, compruebe, y comparta el mensaje
preciso y poderoso de Dios en las Escrituras.
Luego de este breve panorama del poder y utilidad de la Escritura, veremos la

relación de esta con el predicador en la vida diaria.
III. VIDA DIARIA
La vida diaria del predicador es el canal, no solo por el cual se evangeliza, sino
también por el cual el mensaje es vivido y entendido. Nada mejor que predicar con el
ejemplo, esto es lo que cada predicador debe hacer luego de haber terminado de exponer
el sermón dominical.
Spurgeon en su libro dice lo siguiente: “Nada tiene de extraño que uno que
aspire a tener mucho de ministro llegue a tener poco de hombre; sin que por esto
neguemos que mientras más hombre verdadero llegue uno a ser, más verdaderamente
será lo que un siervo del Señor tendrá que ser.”17 En general los ministros tienden a
olvidarse de su vida diaria, y solo de predicar el domingo. El mensaje se lleva en la
vida, cuanto más se pueda este ver en nosotros, estaremos cumpliendo con la misión
que Dios nos ha dado. Es cierto que muchos piensan que cuanto más apartado de la
gente o más apariencia de super-espiritualidad se tiene, más se cree el mensaje, esto es
una equivocación fatal, cuanto más parecido seamos a un ser humano con actitudes
espirituales correctas, mayor será nuestro rango de influencia.
En el caso del pastorado puertas adentro en la iglesia, las ovejas necesitan un

ejemplo, necesitan saber a quién observar para tener una vida correcta, y nosotros
estamos en esa plataforma en la cual somos observados para que puedan seguir nuestro
ejemplo, pero es un trabajo diario que Dios, el Espíritu Santo, la Escritura y nuestro
compromiso debe forjar en nosotros ese hombre.
Existen dos textos cruciales que marcan esto, uno en el que el Apóstol Pablo
pide que lo imiten como él imita a Cristo (1 Co. 11:1). Es un desafío impresionante. Y
17
18
otro texto en la Carta a los Hebreos en el cual dice que debemos dar cuenta por el
rebaño de Dios (Hb. 13:17).
El pastor Miguel Núñez en su libro “De Pastores y Predicadores” nos deja un

comunicado que nos hace repensar y tomar conciencia sobre el ministerio: “La realidad
es que somos líderes y el líder tiene seguidores. Estos seguidores imitarán tu ejemplo, lo
quieras o no. Y tú necesitas modelar para tus ovejas el estilo de vida que quieres que
ellas imiten. Dado lo anterior, hay muchos hombres en los púlpitos hoy que no debieran
estar pastoreando.”18 Es duro lo que dice el pastor Miguel Nuñez en este breve párrafo,
pero es increíblemente cierto, no puede pastorear, quien no puede dar ejemplo.
En la vida diaria del predicador, la elocuencia, retórica, el carisma personal, no

sirven de nada, si lo que expone es solo para entretener a la gente. Él puede decir que:
“El Señor es nuestro pastor nada nos faltara” con poder, pero cuando se presenta la
prueba se desespera y desequilibra. Es por eso que, primero se debe formar el carácter
para luego hacer. Es indispensable el carácter transformado o transformándose, para
poder ser irreprochable como dice la Palabra (1 Ti. 3:2).
El siguiente principio expuesto por Miguel Nuñez también es crucial como el

anterior: “Cuando el pastor no se comporta a la altura de su llamado, traerá como
resultado una falta de respeto de la congregación hacia su posición.”19 Estamos
representando a Dios delante de las personas. La imagen de Dios es suprema, gloriosa,
santa, poderosa, nos debemos como embajadores al cuidado personal de nosotros
mismos ante la congregación y los demás, para honrar a Dios a quien representamos y
para la expansión del evangelio, pues el mejor testimonio es la vida cambiada por Cristo
y su Palabra.
Debemos entender que no somos una elite especial o superiores a los demás,
somos sí: llamados por Dios. Esto no es para enorgullecernos, sino para tener un
concepto correcto de nosotros mismos, el cual nos debe conducir a tener la humildad de
Jesús que siendo Dios se hizo hombre, y obediente hasta la muerte y muerte de cruz
(Fil. 2:5-8). Y encarnar en nuestra vida el mensaje como lo hizo Jesús. El apóstol Juan
18
Nuñez, Miguel. De pastores y predicadores. p. 13.
19
Ibíd. pp. 13-14.
19
lo dice en su evangelio: Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y
vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad (Jn.
1:14).
Ser parte de la realidad de los demás, tratando los asuntos espiritualmente y de

forma madura, demuestra la altura del llamado de Dios al predicador, como también el
ejemplo de Cristo en los evangelios. La gracia de Dios se muestra, no solo por sus
manifestaciones, sino a través de nuestra persona en la cual los hábitos de Cristo, como
humildad, mansedumbre, amor, paciencia, y otras cualidades hacen eco a través de
nuestra vida personal.
Otro tema importante dentro de lo que es la vida diaria del predicador, es que fue
llamado a servir. Existe una realidad; muchos se benefician de las ovejas sacándole la
lana, y de la gente con mentiras y promesas que ni Dios ha dado, pero esto debe ser
desmentido, confrontado y se debe cambiar esa imagen a través de un ejemplo piadoso
y de servicio por parte del ministro haciendo hincapié en una cualidad indispensable:
Integridad. En palabras de James Crane: “La idea de dignidad, o de importancia oficial,
o de prerrogativa es completamente ajena a la Palabra. Por supuesto, hay dignidad en
todo servicio, y hay prerrogativas inherentes al servicio; pero éstas resultan de la
naturaleza del trabajo que tiene que ser hecho, y existen únicamente para que éste sea
hecho cabalmente. La palabra “ministerio” connota la subordinación, la sumisión; e
implica necesariamente la diligencia y la fidelidad.”20
Nuestra diligencia y nuestra fidelidad en el servicio en la vida ordinaria o diaria,

nos ayudará en el objetivo de que conozcan a aquel que nos encomendó esta tarea. Que
maravilloso sería que cada ministro o servidor tome conciencia de esto, oro porque así
suceda. Es necesario entender que tanto uno como predicador y aquellos a quienes
predicamos deben mostrar a Cristo, su excelencia, poder, naturaleza, para ello deben ver
en nosotros esa pasión. El apóstol Pedro nos enseña sobre esto: “Porque no os hemos
dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas
artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad” (2 Pe.
1:16.). El ministro o predicador debe ser o es una persona convencida de la verdad de la
20
Crane, James. El Sermón Eficaz. pp. 26-27.
20
persona de Cristo su mensaje y obra; no inventa, ni tampoco miente sobre algo que dice
conocer. Él realmente está convencido de la majestad de Cristo y su obra. Eso es crucial
para nosotros, y para los que reciben el mensaje.
Culminando con este aspecto debemos recordar que el Señor Jesús dijo en su
Palabra con respecto a nuestro servicio que no debemos dejar de actuar, y que debemos
ser una luz que alumbra en lugar oscuro.21 Por tanto, no está permitido para el ministro
de Dios, y no creo que en los corazones regenerados suceda, el dejar de mostrar la
verdad de Dios con la vida misma y en cada lugar y momento de su vida diaria.
IV. CONCLUSIÓN
Habiendo tenido un breve panorama de la importancia de la lectura de la
Palabra de Dios para el ministro, y del valor de la misma, en cuanto a su inspiración, y
su forma de obrar en la vida misma de cada uno de nosotros, cabe decir que es de suma
necesidad ser asiduos lectores de la misma, porque en efecto, la lectura de la Escritura y
su aplicación en la vida diaria será el mejor ejemplo de predicación y evangelización del
predicador mismo, y de la congregación en donde expone la Palabra de Dios.
En la siguiente lección estaré tratando los tópicos: convicción al predicar la

Palabra de Dios y con la mente y el corazón. Ambos tienen que ver con la influencia de
la Escritura en nosotros y el efecto corporativo en nosotros mismos y en los demás.

1. La__________ de Dios fue la que creó el mundo.
2. El primer concepto que debemos tener en cuenta al leer el texto es que
toda la Escritura es inspirada. Verdadero o falso.
3. La Escritura es:
a. Una fábula
b. Un cuento
c. Narraciones
d. El mensaje que dejó Dios al hombre para conocer su voluntad
21
Mateo 5:13-16.
21
4. Spurgeon dice en una frase sobre la Palabra: Las apelaciones que excitan
los afectos son excelentes, pero si no van acompañadas de enseñanzas, son simplemente
una apariencia, un incendio de pólvora sin tirar una bala. Verdadero o falso.
5. Con respecto a la vida del ministro Miguel Nuñez dice lo siguiente:
…tú no necesitas modelar para tus ovejas el estilo de vida que quieres que ellas
imiten. Verdadero o falso.
6. En la vida diaria del predicador, la elocuencia, retórica, el carisma
personal, no sirven de nada, si lo que expone es solo para entretener a la gente.
Verdadero o falso.
7. Estamos ___________ a Dios delante de las personas.
8. El ministro o predicador debe ser o es una persona indiferente sobre la
verdad de la persona de Cristo su mensaje y obra. Verdadero o falso.
9. Según palabras de Crane, la palabra “ministerio” connota:
a. Popularidad
b. Sumisión
c. Carisma
d. Diligencia
e. Fidelidad
Elegir las opciones correctas
10. Explique con sus propias palabras: ¿Por qué es importante una lectura
responsable de la Escritura? ¿Cuáles son los beneficios?
22
LECCIÓN 3. EL MENSAJE I
I. INTRODUCCIÓN
Dentro de lo que he venido enseñando en este curso sobre: “Dinámica de la

Predicación”, creo que esta lección debe ser para nosotros un motivo de lectura
consciente y de mucha reflexión. Si en algo de lo escrito en esta lección llega de cerca a
su vida, como lo hizo con la mía, le animo que vaya a los pies de Jesús y pida que pueda
cambiar algún aspecto en el que ha fallado. Los ministros somos falibles, pero lo que
importa es el deseo de aprender y cambiar constantemente, para que Dios siempre sea
glorificado. Acompáñeme en esta lección de cerca y verá cuán importante es. Todo es
escrito con el objetivo de bendecir al ministro, para ser un portavoz fiel de la Palabra de
Dios.
II. SINCERIDAD Y SERIEDAD
La sinceridad y seriedad del ministro viene en consecuencia de su carácter, de

cómo está formado interiormente. Es imposible dar lo que no se tiene. Si hemos
cultivado nuestra vida espiritual interior eso se reflejará en nuestros actos. He
encontrado un texto de N.T Wright muy interesante al respecto, que dice lo siguiente
refiriéndose a la importancia del carácter del líder, define el carácter como: “la forma de
pensar y actuar que corre en el interior de alguien que, cuando lo partes, ves la misma
persona por adentro y por afuera.”22
Es evidente este concepto, debes ser el mismo por fuera y por dentro, no deben
encontrar doblez en ti. Esto es lo que hoy se busca y se anhela de los líderes y ministros
que exponen la verdad de Dios. Que también esa verdad sea realidad en ellos, a tal
punto que lo puedan corroborar con solo vernos. Dios pone atención al corazón del
hombre, y respalda al hombre íntegro, aquel que obedece y teme delante del Señor, que
todo lo ve. Absolutamente todo.
22
23
Como ministros nuestra sinceridad y seriedad al predicar la Palabra de Dios, son
las armas más poderosas ante nuestros oyentes. Ellos escuchan más al mensajero que al
mensaje. Por lo tanto, nuestra vida debe ser intachable como lo dice el apóstol Pablo:
“La siguiente declaración es digna de confianza: Si alguno aspira a ocupar el cargo de
anciano en la iglesia, desea una posición honorable. Por esta razón un anciano debe ser
un hombre que lleve una vida intachable” (1 Ti 3:1-2).
El hecho de que el ministro debe ser irreprochable, intachable, sin falta, o lo más
puro posible, tiene que ver con que no puedan argumentar faltas en su contra. Lo que se
está esperando de los ministros, esto lo digo a nivel iglesia, y de las personas de afuera,
que el evangelio sea real en su vida, porque en muchos casos antes de ver a Dios ven
nuestro comportamiento como hijos de Dios.
John Stott dice lo siguiente: “La sinceridad de un predicador consta de dos

aspectos: habla en serio al estar en el púlpito y practica lo que dice cuando no está
allí.”23 Esto es crucial. Necesitamos ser un ejemplo de lo que enseñamos, es la única
forma para que las personas crean en las verdades del evangelio. Dios más que ningún
otro está interesado en esta clase de ministros, para la expansión de la buena noticia.
Creo que es oportuno en este momento, hablar de lo que significa la palabra

heraldo, o aquel que proclama una noticia del Rey. En este caso nosotros somos
heraldos del Rey de Reyes: Dios. Pablo habla de nuestra representación del Rey de
reyes de la siguiente manera: “Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura;
de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, sino que golpeo mi cuerpo, y lo
pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a
ser eliminado” (1 Cor. 9:26-27).
Un heraldo era una persona importante en el sentido de quien representaba, y de

la función que cumplía, es decir de proclamar los edictos del Rey, de la integridad que
debía poseer para dicha función. Por lo tanto, lo que el apóstol nos está diciendo aquí en
estos pasajes, es que, su vida tiene un objetivo claro, y es el de agradar a Dios en todo,
para llegar a la meta, para cumplir con el ministerio que Cristo le dio. Esto me lleva a
23
24
pensar que la gente debe ver en nosotros esta motivación, este deseo, esta dirección en
el ministerio. Cumpliendo fiel e integralmente el propósito de Dios en nuestra vida. Es
así como la iglesia se orientará hacia el propósito de Dios para ella, y crecerá.
El pastor Miguel Ñunez, nos comparte un principio medular a la hora de

pastorear y predicar en el ministerio: “La razón por la que el estándar es tan alto es
porque el discípulo tiende a parecerse a la persona que lo formó. El pastor reproduce en
otros lo que él es. Jesús aborda esto en Lucas 6:40: Un discípulo no está por encima de
su maestro; mas todo discípulo, después de que se ha preparado bien, será como su
maestro. Debemos recordar esto toda la vida. Este versículo revela el verdadero color y
la forma del llamado pastoral.”24 El estándar es tan alto porque lo demanda quien nos
llamó, y aparte de ello es porque reproducimos en la iglesia lo que somos. Creo que esto
debe quedar guardado en nuestro corazón como ministros y siempre tenerlo presente
para lo que es la predicación y vida diaria del ministro de Dios y para la salud de la
iglesia de Cristo.
Habiendo compartido lo que representa la sinceridad y seriedad del ministro,

entraremos en otra área importante de lo que es la dinámica de la predicación. En lo que
respecta a mi entendimiento, otra área fundamental en el ministro es, el orden de sus
prioridades. El lugar que ocupa cada cosa en su vida, es crucial, como se organizan las
prioridades también, esto influye directa e indirectamente en lo que predicamos y
hacemos a diario como personas.
III. PRIORIDADES DEL MINISTRO
Algunos se preguntarán, porque hablar sobre las prioridades en la vida del

ministro, cuando se trata de un libro de predicación. La respuesta a lo que algunos
pueden estar pensando es el hecho de que, si no tenemos un orden correcto de
prioridades, no podremos tener excelencia en lo que hacemos, no tendremos testimonio
de lo que hacemos, o no podremos llevar una vida de acuerdo con lo que predicamos.
Necesitamos establecer prioridades para que podamos ser efectivos y honremos a Dios
con el ministerio que Él nos encomendó.
24
25
Miguel Nuñez plantea lo siguiente con respecto a las prioridades: “Gran parte
del tiempo que se pierde se debe a prioridades fuera de orden y, cuando esto ocurre,
tanto el mundo interior del hombre como el exterior terminan desorganizados.”25 Es
totalmente cierto lo que plantea el pastor Núñez. Cuando no tenemos orden de
prioridades se produce un desajuste o desorden en nuestro mundo interior que se refleja
en el exterior. Por tanto, afecta toda la vida del ministro inclusive su predicación.
Necesitamos redimir el tiempo, aprovechar bien el tiempo. Tener un propósito

según Dios a seguir, y metas que cumplir. Si somos responsables en esta área de
planificación de la vida, podremos ser más eficaces en el ministerio. Entiendo que, en
algunos momentos, se comete el error de querer complacer o hacer pensar a la gente,
que a través del activismo y de la agenda completa se es más efectivo y eficiente.
Tremendo o terrible error. Esto solo producirá en nosotros: extenuación, tristeza,
depresión y hasta no poder cumplir con lo que se agendó.
Creo que el ministro debe tener tiempo para sincerarse delante de Dios, de acatar
lo que Dios le guíe a hacer, y encontrar el gozo de adorar a Dios cumpliendo su
voluntad. Es lo más importante en la vida de un cristiano. La Biblia dice que
encontramos diversidad de dones, y en esa diversidad cada cual debe ocupar su lugar,
para que el ministro no sea un hombre orquesta, o lo que llamamos multifunción. Por
amor a Dios, a ti, a tu familia y a tu iglesia, debes tener las prioridades claras, porque
cada área de tu vida debe ser bien administrada, no solo la predicación del domingo. El
ministro es ejemplo de la verdad de Dios, y la verdad engloba estas áreas.
Los discípulos cuando se encontraron en crecimiento en la iglesia primitiva

tuvieron el conflicto con las viudas griegas que no eran atendidas. Si tú te pones en la
situación de ellos: ¿Qué harías? Cada decisión marca la vida para bien o mal, te hace
aprovechar el tiempo o malgastarlo, en este caso la Palabra dice lo siguiente: “Por lo
tanto, hermanos, escojan a siete hombres que sean muy respetados, que estén llenos del
Espíritu y de sabiduría. A ellos les daremos esa responsabilidad. Entonces nosotros, los
25
26
apóstoles, podremos dedicar nuestro tiempo a la oración y a enseñar la palabra” (Hch.
6:3-4).
No es que ellos no querían servir a las viudas, siempre sirvieron junto al Señor
Jesús en innumerables situaciones. Ellos dieron prioridad a la oración y la Palabra de
Dios, porque era prioritario y el fundamento y edificación de la iglesia, y contaban con
personas competentes para la tarea que necesitaba atención. Es solo por eso que
delegaron la tarea. Nosotros como ministros debemos seguir las prioridades que Dios
nos marca en su Palabra, no estamos para agradar a la gente, sino para agradar a Dios y
cumplir la tarea que nos encomendó. Nuestra agenda debe ser gobernada por la oración
y la voluntad de Dios.
No perdamos de vista la vigilancia de nuestra vida en cuanto a prioridades.

Spurgeon dice lo siguiente: “Para el heraldo del Evangelio, el estar espiritualmente
desarreglado en su propia persona, es tanto para él mismo como para su trabajo, una
verdadera calamidad; y con todo, hermanos míos, ¡cuán fácilmente se produce tal
mal!”26
Otro consejo que nos da el pastor Nuñez es el siguiente, que nos será de mucha
ayuda: “La mayoría de los problemas, o las consecuencias de las decisiones, están
relacionados al orden de las prioridades con las que vive el hombre. Prioridades fuera de
lugar, dan lugar a los problemas más comunes. De manera lamentable, con mucha
regularidad permitimos que lo urgente del día a día tome el lugar de lo prioritario.”27
Que cruda verdad, pero es una realidad. Muchas veces lo urgente nos hace olvidarnos o
dejar de lado lo prioritario. Hermanos seamos sabios, prestemos atención. Revisemos
nuestras agendas. Oremos a Dios por sabiduría. Las prioridades en orden son de gran
bendición para la vida del ministro para con Dios, si mismo, la familia y la iglesia.
28
26
27
28
Ibíd. p. 76.
27
En estos cuadros el pastor Núñez nos muestra como el hombre maneja sus
prioridades.29
En el primero usted puede ver al ritmo que le lleva la vida y a los resultados que
pueden llegar a tener. Y si presta atención en los resultados esto afectaría su vida con
Dios, consigo mismo, con su familia, y por ende con la iglesia. En consecuencia,
cualquier mensaje que usted pueda dar no tiene respaldo.
Pero si nos disciplinamos y ponemos en orden correcto las cosas usted puede ver
los resultados del segundo cuadro: comunión, paz, propósito, una descendencia santa,
satisfacción. Un mensaje que se predica con autoridad, un mensaje que llega al corazón
del oyente. Creo que vale la pena poner en orden nuestras prioridades. Esto favorecerá
integralmente nuestra vida. Y sobre todo daremos gloria a Dios con la misma. Recuerde
que el mensaje que predicamos es nuestra propia vida transformada por la Palabra de
Dios.
Mosley en su libro nos da un testimonio de lo que puede suceder en la vida

pastoral si no tenemos prioridades claras en el ministerio: “Una declaración típica que
he oído muchas veces es la siguiente: “¿Cómo puedo hacer todas estas cosas para los
demás cuando me siento tan incapaz en mi propia vida?” Algunos ministros confesaron
que estaban a punto de darse por vencidos, y otros lo hicieron. Un joven al comienzo de
su primer pastorado dijo: “La gente espera que el pastor sea tanto que no sé si puedo
hacerlo.”30 Recuerde no estamos para llenar la agenda de lo que la gente quiere que
hagamos, o lo que le agrada sólo por capricho. Estamos para cumplir la agenda de Dios,
lo que Dios está demandando de nosotros como ministros. Esto nos ayudará no solo a
redimir el tiempo, sino también a tener salud para la exposición bíblica.
29
Nuñez, Miguel. De pastores y predicadores. pp. 76-77.
30
Mosley, Ernest. Prioridades en el ministerio. p. 19.
28
Pablo le dijo al joven Timoteo que debía ser ejemplo en: palabra, conducta, fe y
pureza. Para eso hermanos debía tener en claro las prioridades. Es como que estas
palabras también del apóstol resuenan en mis oídos y en mi corazón. Se ejemplo. Pon en
orden tu mundo interior, tus prioridades para honrar a Dios en todo lo que haces.
Seamos honestos, sinceros delante de Dios, armemos nuestras agendas de acuerdo con
el plan de Dios establecido en la Biblia, no cedamos a la tentación del activismo dañino
para alimentar el ego o la popularidad. Dios no desea gente popular, sino gente fiel.
Dios está preocupado por encontrar ministros conforme a su corazón. Ministros que
estén dispuestos a hacer lo que Él les pide, y ordenar las prioridades según Él les indica.
Recordemos estas palabras que Dios le dice a Samuel cuando va a ungir rey en
vez de Saúl: “Pero el Señor le dijo a Samuel: —No juzgues por su apariencia o por su
estatura, porque yo lo he rechazado. El Señor no ve las cosas de la manera en que tú las
ves. La gente juzga por las apariencias, pero el Señor mira el corazón” (1 Samuel 16:7
NTV). El Señor no ve la apariencia, sino mira el corazón. El señor mira como estamos
interiormente. Invierte en tu ser, no en tu parecer.
IV. CONCLUSIÒN
En esta lección que para mi resulta enriquecedora, por el hecho de refrescar
conceptos y recoger consejos de personas experimentadas en cuanto al ministerio y la
predicación. Me lleva animarle a tomar en cuenta lo compartido en esta sección. No
olvide que somos el mensaje. Estemos vigilantes en nuestras prioridades, tengamos la
agenda que Dios quiere, y no tratemos de llenar espacios para complacer caprichos y
enfermarnos.
Nunca descuido las distintas áreas que forman parte del ministro: Dios, tú mismo
como persona, tu familia, la iglesia. Administra cada cosa con mucha oración y
responsabilidad, pidiendo a Dios sabiduría para cada día. Él la da abundantemente con
generosidad. Recuerda que estamos para agradar a Dios y cumplir su voluntad. Y es
importante que nuestro ser este lleno de Él más que de actividades, que nuestra vida
interna este en orden para tomar las mejores decisiones, en lo que respecta a nuestra
trayectoria terrenal. Ten en cuenta que lo que somos da autoridad al mensaje que
predicamos.
29
1. La sinceridad y seriedad del ministro viene en consecuencia de su__________,
de cómo está formado____________.
2. Debes ser el mismo por fuera y por dentro. Verdadero o falso.
3. Como se organizan las prioridades también, esto influye directa e indirectamente
en lo que predicamos y hacemos a diario como personas. Verdadero o falso.
4. Gran parte del tiempo que se pierde se debe a prioridades fuera de_______.
5. Cada decisión marca la vida para bien o mal, te hace aprovechar el tiempo o
malgastarlo. Verdadero o falso.
6. Con mucha regularidad permitimos que lo________ del día a día tome el lugar
de lo_________.
7. ¿Cuál es el orden de las prioridades correctas?
a. Dios, tú mismo, familia, ministerio
b. Dios, familia, tú mismo, ministerio
c. Dios, ministerio, familia, tú mismo
8. Dios desea gente popular, y gente fiel. Verdadero o falso.
9. Recuerde que el mensaje que predicamos es nuestra propia_____ ________ por
la Palabra de Dios.
10. Explique ¿Cuál es la importancia de la sinceridad en el predicador?
30
LECCIÓN 4. EL MENSAJE II
I. INTRODUCCIÓN
En esta lección comenzaremos a trazar algunos aspectos que tienen que ver con
el mensaje. Luego de compartir algunas aristas importantes con respecto al ministro
bíblico. Comenzaremos unas lecciones sobre el mensaje que debemos exponer.
En esta lección trataremos los siguientes puntos: El asunto, el texto a elegir, y la

espiritualización de un texto. A mi entender esta temática es importante porque delimita
lo que voy a decir, y en cierta manera como abordar la preparación del principio del
mensaje, aunque también tocamos un tema recurrente y un poco crítico como lo es la
espiritualización de los textos. Se prosigue con los puntos.
II. ASUNTO O TEMA
Este tema es importantísimo por el hecho de que de esto depende la orientación

de la exposición bíblica. Hay elementos indispensables que debemos tener en cuenta a
la hora de tratar con el asunto a predicar. Estos elementos son:
A. EL CONTENIDO DEL MENSAJE

En estos tiempos los mensajes que se presentan en los púlpitos contienen poca o
nada profundidad doctrinal. La predicación en estos tiempos es como comida rápida, se
prepara pronto, y deja sensación de insatisfacción. Por esto es importante que el
predicador tenga conocimientos claros de doctrina y se mueva alrededor de la Biblia
con solidez y confianza, para que pueda expresar la verdad de Dios con fundamento,
como un alimento sólido bien servido para que los comensales puedan alimentarse
saludablemente. Nuestras iglesias necesitan alimento sólido, es la única forma de crecer
saludablemente.
El apóstol Pablo le dio consejo a su hijo espiritual, que mientras él iba a verlo se
ocupara en la exhortación y en la enseñanza (1 Tm. 4:13), no era en vano este trabajo,
era el secreto para santificar la iglesia de Éfeso.
31
Cada mensaje debe estar dirigido efectivamente a las personas a quienes
alimentamos. El asunto aparte de tener una enseñanza sólida requiere que este se
encuentre correctamente direccionado, en el buen sentido de la palabra. James Crane
nos comparte lo siguiente con respecto al tema: “Analizando las cualidades que
contribuyen a la efectividad del sermón... Pongo en primer lugar la precisión de
propósito. Cada sermón debe tener a la vista una meta clara... Antes de sentarse a
preparar su discurso, el predicador siempre debe preguntarse a sí mismo: ¿Cuál es mi
propósito en este sermón? Y no debe dar un solo paso más sino hasta haber formulado
en su mente una contestación definida a esta pregunta.”31 Es decir que el mensaje debe
estar cargado de enseñanza, pero bien dirigido, con la claridad del propósito para el cual
se está preparando. Cuando se desea ser efectivo en aplicar una medicina; el médico
estudia el caso para ser eficaz a la hora de dar el tratamiento. El secreto está en dar la
medicina correcta al paciente en su problemática.
Nuestra enseñanza debe estar excelentemente dirigida, entonces tendrá efecto.

En cuanto a la profundización de la enseñanza, es indispensable tocar todos los temas de
la Escritura, pero no olvidar los centrales, esto es lo que da cuerpo, fundamento a la
iglesia. Spurgeon en su libro lo dice de la siguiente manera: “Hermanos, si estáis
resueltos a tratar en vuestros sermones de verdades importantes, no debéis pararos
siempre en los meros bordes de la verdad. Las doctrinas que no son esenciales a la
salvación del alma, ni al cristianismo práctico, no se deben considerar en todos los
cultos. Haced mérito de todos los aspectos bajo los cuales puede considerarse la verdad,
en su proporción debida respectivamente, porque cualquiera parte de la Biblia es
provechosa, y vuestro deber no es tan sólo predicar la verdad sino la verdad entera.”32
No debemos enfatizar una doctrina por encima de las otras, podemos llegar a tener
problemas en la enseñanza, debemos ser armónicos y coherentes en el estudio para
enseñar, debemos leer y pedir al Espíritu de Dios para que podamos predicar todo el
consejo de Dios de forma efectiva.
El apóstol Pablo lo dijo en su despedida a los ancianos de Mileto cuando hablo

de su exposición en dicho lugar. Nunca deje de enseñar todo el consejo de Dios (Hch.
31
Crane, James. El Sermón Eficaz. p. 46.
32
Spurgeon, Charles. Discurso a mis Estudiantes. p. 57.
32
20:27). El dice, todo el consejo de Dios. Por tanto, en el momento de estudiar, pidamos
guía a Dios para ser ministros que enseñan toda la verdad de Dios.
B. PROFUNDIZAR EN LA VERDAD
Aparte de poder enseñar con fundamento y todo el consejo de Dios, las verdades
que enseñamos deben ser estudiadas responsablemente, debemos dedicar tiempo para
entender el texto como si la claridad que viene a nuestra mente es como un mediodía de
sol radiante sin nubes.
Lo que quiero decir con esto, es que no podemos enseñar algo que no
entendemos, y si Dios nos manda a enseñar algún asunto de su Palabra, el nos ayudará a
clarificarlo, pero también deberemos trabajar arduamente. No podemos hacer como
algunos que tratan de espiritualizar los textos, en los cuales se comenten grandes
herejías, solo para ahorrar tiempo, no solo es una ofensa al llamado de la exposición
bíblica, es una ofensa a la iglesia de Cristo, y a Dios mismo, quien te comisionó tan
grande e inigualable tarea.
Spurgeon describe a estas personas como “teólogos microscópicos” es decir que

solo quieren engañar a ignorantes con la elocuencia en vez de predicar las profundas
verdades de Cristo. Preste atención al siguiente párrafo, lo que sucedía en tiempos de
Spurgeon, sigue siendo realidad en el hoy: “Conozco a un ministro, la correa de cuyo
zapato no soy digno de desatar, cuya predicación frecuentemente apenas es mejor que la
pintura de miniaturas sagradas casi pudiera yo decir, que es frivolidad santa. Es muy
afecto a predicar hablando de los diez dedos del pie de la bestia, de los cuatro rostros de
los querubines, del sentido místico de los cueros de los tejones, y de la significación
típica de las varas del arca y de las ventanas del templo de Salomón; pero los pecados
de los hombres de negocios, las tentaciones especiales de nuestros tiempos, y las
exigencias morales del siglo son asuntos de que por rareza se ocupa. Esta predicación da
idea de un león empleándose en cazar ratones, o de un buque de guerra buscando un
barril perdido de agua. Esta clase de teólogos microscópicos suelen magnificar asuntos
inferiores a los que Pedro llama "fábulas de viejas," como si fueran de la mayor
importancia.”33 En pocas palabras, la exposición bíblica no es para entretener, no es
33
Spurgeon, Charles. Discurso a mis estudiantes. pp. 57-58.
33
para hacer alarde de una sabiduría que no tiene, es para que, por medio de ella y la obra
del Espíritu Santo, los corazones sean transformados por la verdad de Dios, bien
expuesta y con fundamento.
III. ELECCIÓN DEL TEXTO
En cuanto a los mensajes que debemos presentar en los distintos puntos de

predicación, es un asunto delicado, de mucha oración la elección del texto bíblico para
exposición. Debemos ser prestos como Samuel a decir: Señor habla que tu siervo oye (1
Sm 3:10). Comparto la postura de predicadores o ministros en cuanto a la exposición de
temas que Dios guía por medio del Espíritu Santo y la lectura devocional. De que en
algunos momentos Dios pone en el predicador un tema particular para la iglesia. Creo
que la guía de Dios por el Espíritu es indispensable. Pero también he visto la riqueza de
predicar libro por libro de la Biblia, o predicar un libro completo de la Biblia. Uno
desde el púlpito no solo está predicando las buenas noticias, sino que está enseñando a
la iglesia. Y creo que esto es indispensable.
He comprobado la eficacia de poder predicar libros completos de la Biblia, uno

siempre está en mejor situación que tener que buscar distintos textos, estudiar contextos
de cada texto, y saber la idea central de cada libro en que extraigo para predicar, para no
decir algo que no dijo Dios en su Palabra. Existen ciertos beneficios de predicar
expositivamente toda la Biblia, o por libro, y quisiera que pueda ser tenido en cuenta
por ustedes. Aunque respeto y entiendo como Dios guía a cada predicador o ministro a
exponer la verdad de Dios.
En un video donde se entrevista a Josías Grauman decano de educación en

español de The Master’s Seminary este habla de los beneficios que brinda este tipo de
exposición: 34
 El pastor o ministro es edificado personalmente, debe trabajar profundamente el
texto, y es más preciso a la hora de exponerlo.
34
https://www.youtube.com/watch?v=e7bNG8xa2Xc.
34
 La audiencia es beneficiada con todo el consejo de Dios, no con alguna
perspectiva teológica del pastor. Sino con la verdad consecuente que el autor
bíblico va mostrando en su libro.
 El predicar libro por libro, te hace invertir tiempo de investigación en el texto, el
autor, el contexto, la gramática, el flujo del libro, su idea central.
Espero que esta argumentación de predicar libro por libro, o párrafo por párrafo
de la Biblia, le lleve a meditar y reflexionar sobre esta forma de exponer. Seguiremos
ahora con otro tema importante dentro de esta lección, que es: la espiritualización de un
texto bíblico.
IV. ESPIRITUALIZACIÓN DEL TEXTO

Creo que este tema es controversial, por lo menos en el país en el cual vivo
(Argentina) muchas de las denominaciones evangélicas en este país utilizan el método
alegórico para tratar mucho los textos. Incluso se trata de forzar textos, sin tener en
cuenta el contexto. Se encuentra una fascinación por decir algo, que, aunque no sea
verdad, le suene deleitoso a la persona que escucha.
El ámbito evangélico en nuestro país tiene una deficiencia importante, pocos son
ávidos lectores y estudiosos de la Palabra de Dios, por tanto, en la mayoría de los casos
no suelen darse cuenta de estos detalles que son graves. Creo que algunos ministros no
lo hacen de mala voluntad, pero si por ignorancia. Necesitamos por lo menos en
Argentina un respeto mayor por la educación teológica, y sobre todo por la Palabra de
Dios. La espiritualización o alegorización de textos narrativos está a la orden del día.
Pero es algo que con trabajo y dedicación puede cambiar. Creo que enseñando reglas
básicas de la hermenéutica y tratando los textos con entendimiento, se aprende y
disfruta en gran manera de la Escritura y se edifica el ministro bíblico.
Una conciencia clara de la importancia de predicar lo que el texto dice debe ser
la oración de un ministro fiel a Dios y su gloria. Spurgeon comparte algunas frases que
identifican este asunto: “Dice Adam Clarke: "La predicación alegórica vicia el gusto y
encadena el entendimiento tanto del predicador como de los oyentes." La regla de
Wesley es mejor: "Haced uso raras veces de la espiritualización, y alegorizad muy
35
poco."35 Debemos tomar con prudencia el tratamiento del texto. Más que nada porque lo
que debe primar es el sentido común del texto. Nuevamente Spurgeon exhorta a sus
estudiantes de la siguiente manera: “El primer canon que se debe observar es éste: "no
forcéis un texto espiritualizándolo." Esto sería un pecado contra el sentido común.”36 Es
claro que todo lector de la Palabra se da cuenta cuando se desea forzar un texto, pero
esto no solo lo afecta a Él, sino también a quienes escuchan el mensaje, se dan cuenta
que algo no concuerda con la verdad que Dios dice, tarde o temprano.
Hay una verdad que será el que evacue la duda de lo que se está predicando, y
me parece que la siguiente frase lo es: “Solo aquellos que creen la Palabra de Dios están
capacitados para dirigir al pueblo de Dios.”37 Todo ministro que cree que la Palabra de
Dios tiene poder, y que solo ella puede transformar toda realidad, estará convencido de
que, solo se necesita entender el texto y exponer el texto. Será humilde en saber que el
poder no está en la elocuencia en lo enigmático sino en la interpretación simple y llana
de la Escritura.
No es solo entender el texto sino el flujo de pensamiento que está en él, esto
determina el asunto del mensaje. Una compresión inadecuada del texto es también
dañina. Fíjense este detalle, debemos ser peritos competentes al leer e interpretar el
texto, ahí reside el poder de Dios. Crane en su libro “El Sermón Eficaz” plantea lo que
acabo de decir: “El predicador tiene que conocer el significado exacto de su texto antes
de poder derivar su tema de él. Un pensamiento incompleto no puede ser interpretado
satisfactoria y correctamente sin ser ampliado a su forma completa.”38
Ahora como tratar el tema de la espiritualización de un texto. Creo que a mi

entender debemos ser muy cautos, y a la vez sinceros delante de Dios a quien servimos.
Por amor a Él, a su iglesia, y a la exposición bíblica debemos analizar los siguientes
postulados que Spurgeon nos comparte en su libro discurso a mis estudiantes, que me
parece adecuado.
35
36
Ibíd. p. 76.
37
Sunukjian, Donald. Volvamos a la predicación bíblica. p. 9.
38
36
A. NO FUERCES UN TEXTO PARA ESPIRITUALIZARLO
Repito, necesitamos integridad en los púlpitos, y a la vez honestidad delante de
Dios. No trates de agradar a los hombres con raras oratorias, solo para decir algo que tu
ni siquiera sabes, se fiel. Di lo que tengas que decir y no más. Si algo es posible
espiritualizar, por favor ten un pleno conocimiento del texto mismo. Spurgeon dice lo
siguiente con respecto a predicadores que no tuvieron esa delicadeza: “…así como el
cardillo del Líbano no es el cedro de Líbano. Guardaos de aquella trivialidad pueril y
tendencia atroz de torcer textos, que os hará sabios a vista de los necios, pero necios a
vista de los sabios.”39
B. NUNCA ESPIRITUALICES PARA LLAMAR LA ATENCIÓN

Algunas personas espiritualizan para llamar la atención, para decir que son
importantes, y algunas personas lo creen, pero como se dijo en la frase anterior se hace
sabio ante los necios, y necio ante los sabios. Aparte de esto me parece pertinente
compartir una historia que se encuentra en el libro de Spurgeon, una historia verídica
que nos hará reflexionar con respecto a este asunto: “Cierto aspirante predicó una vez
sobre la palabra "pero," esperando así ganarse el favor de la congregación que, según su
modo de pensar, no podía menos de entusiasmarse por el talento de un hermano que
podía extenderse tanto al tratar de una simple conjunción. Parece que su asunto era el
hecho de que por mucho bueno que hubiera en el carácter de un hombre, o por
admirable que fuera en sus circunstancias, siempre se encontraría alguna dificultad,
alguna prueba en conexión con esto. Por ejemplo, "Naamán era un gran varón delante
de su señor, pero leproso." Cuando bajó del pulpito el orador, los diáconos le dijeron:
"Bien, señor, usted acaba de darnos un sermón muy raro; pero nos consta con toda
claridad, que no es usted a propósito para esta congregación."40 Creo que a través de
esta historia verídica y que seguro pasó en otros lugares, no creo que la historia no se
repita, nos deje una correcta lección, sobre el tratar de creerse sabio, no siéndolo, y
usando la Palabra de Dios de una manera indignante.
39
40
Ibíd. p. 78.
37
C. NO TRATES DE DARLE A UN TEXTO UN SENTIDO ORIGINAL O
PARTICULAR QUE NO TIENE
Hay un dicho que expresa: “no trates de inventar la pólvora” es decir, lo que
escrito está, es así en su sentido común y llano, no inventes, no trates de hacer decir al
texto lo que no dice, no corrompas la interpretación del texto, se fiel a tu Dios que te
llamó a tal ministerio. Quisiera cerrar este tema con esta frase particular de Spurgeon,
que me parece muy oportuna: “Además, nunca permitáis que vuestra congregación se
olvide de que las narraciones que espiritualizáis son hechos y no meras fábulas o
parábolas. Este significado palpable de un pasaje, nunca se debe anegar en la
exuberancia de vuestra imaginación, sino debe ponerse de manifiesto con toda claridad,
y ocupar el primer rango en la importancia.”41 Respeta los géneros en la Biblia, no
hagas un cuento de una narración, ni una parábola de este, como no hagas de una
alegoría o parábola una narración. Se fiel. Lo más importante es que representas a Dios
y que llevas su mensaje, no el tuyo. Se fiel. Dios por pura gracia te ha considerado para
tan grande ministerio de la proclamación de la verdad de Dios. Les dejo el texto que
siempre está presente ante mi preparación delante de Dios y su Palabra para alimentar a
su iglesia: “A diferencia de muchos, nosotros no somos de los que trafican con la
Palabra de Dios. Más bien, hablamos con sinceridad delante de él en Cristo, como
enviados de Dios que somos” (2 Cor2:17. NVI 1999).
V. CONCLUSIÓN
En esta lección hemos visto la realidad de la importancia del asunto a predicar,
de tener el correcto entendimiento del texto para poder desarrollar el asunto y la
exposición misma. Sumándose a esto he compartido que dependemos totalmente de
Dios y el Espíritu Santo, para la elección de los textos a predicar, aunque deje a
consideración la predicación libro por libro, o de un libro completo, compartiendo
argumentos por los cuales hacerlo, y he concluido esta lección con el tratamiento de la
espiritualización de los textos, mi postura ante ello. Solo quisiera cerrar con la intención
de mi corazón al escribir esta lección. Esta es: Se fiel. Dios por su gracia te puso en este
ministerio.
41
38
En la próxima lección seguiremos tratando asuntos del mensaje, todo esto lo
hago para que Dios se lleve la gloria en cada exposición que hacemos de su Palabra.

1. La predicación en estos tiempos es como __________.
2. La exposición bíblica no es:
a. Para entretener
b. Para mostrar elocuencia
c. Para transformar las vidas
3. Enseñe lo que pueda del consejo de Dios. Verdadero o falso.
Verdadero o falso
4. El mensaje no debe estar cargado de enseñanza
5. Adam Clarke dice sobre la Espiritualización del texto. La predicación alegórica:
a. Es excelente
b. Atrae a los eruditos
c. Vicia el gusto
Elige la opción correcta
6. Solo aquellos que creen la Palabra de Dios están capacitados para dirigir al
pueblo de Dios. Verdadero o falso.
7. ___________los géneros en la Biblia, no hagas un cuento de una narración, ni
una parábola de este.
8. Si algo es posible espiritualizar, por favor ten un pleno conocimiento del texto
mismo. Verdadero o falso.
9. Aspectos a tener en cuenta al espiritualizar un texto, según Spurgeon:
a. No fuerces un texto para espiritualizarlo
b. Espiritualiza las narraciones con figuras
c. Nunca espiritualices para llamar la atención
d. Espiritualiza según te guíe el Espíritu
e. No trates de darle a un texto un sentido original o particular que no tiene
10. ¿Por qué muchos ministros en sus mensajes carecen de profundidad bíblica?
Explique las razones y ponga ejemplos.
39
LECCIÓN 5. EL MENSAJE III
I. INTRODUCCIÓN
En esta lección trataremos dos temas muy importantes. En primer lugar, la
convicción que se tiene como ministro de que predica la Palabra de Dios, la cual es
autoritativa, normativa, correctiva, y direcciona a la iglesia. Esta Palabra tiene el poder
de cambiar la vida de cualquier persona, porque es el mismo mensaje de Dios expuesto
por su embajador, como también, en segundo lugar, trataremos el tema de que debe ser
hecho con entendimiento de lo que estamos diciendo, como el efecto que produce en
nosotros dicha Palabra para que por medio de nuestra vida transformada por ella,
podamos aportar para que el evangelio llegue con mayor eficacia a los oyentes.
II. CONVICCIÓN AL PREDICAR LA PALABRA DE DIOS
A. CONVICCIÓN DEL VALOR DE LA ESCRITURA

La convicción del predicador bíblico al exponer el texto viene en consecuencia
de saber, que el mismo texto es el mensaje de Dios comunicado al hombre. Muchos
piensan que el Dios que ha creado el mundo y que ha trascendido en la historia, es un
Dios lejano, que solo se ha dedicado a estas ocupaciones, pero Dios no solo ha
trascendido en la historia, se ha hecho evidente en su comunicación con el hombre, a
través de la inspiración de la Escritura, de la comunicación de su mensaje a través de
personas inspiradas por su Espíritu.
Dios siempre estuvo y está interesado en que el hombre reciba su mensaje.

Desde la creación Dios deseo comunicarse con el hombre, y hoy también lo hace por su
Palabra. Es necesario para cada predicador entender que la Escritura es la herramienta
poderosa de Dios para comunicarse con el hombre y que lo hace a través de un
instrumento: El predicador o ministro. Este debe estar convencido del poder de la
Palabra, y debe ser transformado por ella cada vez que lee. Debe suceder como lo
expresa el rey David en el siguiente salmo: “El temor de Jehová es limpio, que
permanece para siempre; Los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son
más que el oro, y más que mucho oro afinado; Y dulces más que miel, y que la que
destila del panal. Tu siervo es además amonestado con ellos; En guardarlos hay grande
galardón (Sal. 19:9-11).”
40
David expresó la belleza de los mandatos del Señor, la dulzura de los mismos. El
ministro que tiene esta certeza en su corazón será de gran bendición a los oyentes,
porque su vida misma es el mensaje de Dios habiendo sido transformado por la Palabra
antes de comunicarla. En estos tiempos hay un deseo de la verdad de Dios, no de lo que
uno pueda decir, eso no es de importancia, sino de lo que Dios dice. Las personas
quieren saber lo que Dios dice respecto a los distintos temas de la vida.
El siguiente aporte de Criswell es clarísimo en cuanto a la importancia del

mensaje bíblico: “Cuando el pastor está exponiendo un libro de la Biblia su texto está
automáticamente establecido. Todo lo que él necesita hacer es descubrir lo que el texto
dice y lo que significa para nosotros hoy. Su sermón, entonces, es pertinente. Las
personas son bombardeadas diez mil veces con lo que el político dice, lo que el
psiquiatra, el psicólogo, lo que el editor, lo que el comentarista dice, lo que el hombre
de la calle dice, lo que todo el mundo dice. Pero lo que quisiéramos saber es: ¿Dice
Dios algo? Si Dios tiene algo que decir, ¿qué dice Dios? Esa es la tarea del predicador.
Y, cuando él presenta ese mensaje fielmente y bien, la gente será maravillosamente
bendecida.”42 Las personas necesitan más que nunca escuchar lo que Dios dice, para eso
debemos exponer la verdad de Dios de la manera más precisa posible.
Para tener la convicción de que el mensaje es bíblico requiere tiempo,

dedicación, esfuerzo, agotamiento muchas veces. Porque el entender la verdad de Dios
y aplicarla a uno mismo y a los oyentes, no es una tarea simple, es una tarea ardua.
Jesús hablaba con autoridad porque sabía lo que decía (Mateo 7:28-29). John
MacArthur dijo lo siguiente con respecto a este tema: “En todos mis años de estudio no
había visto una sociedad occidental donde los bancos estuvieran tan llenos y los
sermones tan vacíos.”43 Necesitamos doblar esfuerzos, orar por un despertar en el
pueblo de Dios, hambre de la Escritura, por la situación crítica que plantea John
MacArthur, y que es real. Es necesario que se tome conciencia de que la Biblia es el
ente regulador de la vida cristiana. Es el centro de todo crecimiento espiritual. Debemos
prepararnos conscientemente y con esta convicción.
42
Criswell, Wallie Amos. El pastor y su ministerio. pp. 62-63.
43
41
Debemos estar inmersos en la lectura de la Escritura y en el mensaje a preparar.
Necesitamos estar a solas con Dios y con su Palabra. Como dice Criswell. “El mensaje
se formará en su corazón mientras usted estudia”44 Este mensaje de Dios se forma de
horas y horas de lectura, oración, de investigación, y sobre todo escuchar la voz de
Dios. No es necesaria nuestra opinión en el mensaje, solo es necesario el consejo de
Dios efectivo y pertinente en todo momento.
El texto bíblico debe tomar posesión de nuestra vida y así poder transmitir con
autoridad lo que Dios quiere decir a su pueblo. Todos aquellos que tenemos la total
convicción del poder de la Palabra de Dios debemos organizar nuestro día, para sacar el
mayor provecho posible al estudio de su Palabra. Lo primero que un ministro o
predicador debe hacer es, tener tiempo con Dios y su Palabra. Esta anécdota sobre
Murray MCheyne es maravillosa: “Roberto Murray McCheyne tenía pintado sobre su
reloj un sol poniente y bajo el cielo occidental las palabras impresas: La noche viene
cuando nadie puede trabajar.”45 Si cada predicador o ministro tomara con esta seriedad
la Palabra, muchos aspectos de la iglesia y su influencia en el mundo que vivimos
cambiarían para bien.
Creo que Dios añadía a la iglesia primitiva los que habían de ser salvos, no solo
por el hecho de ser un Dios soberano, sino porque perseveraban en la Palabra y la
oración (Hch. 2:43, 47). También cabe aclarar que ellos no hablaban de sí mismos, del
poder que Dios les había conferido, ni siquiera de la cantidad de gente que habían
alcanzado, ellos no podían dejar de hablar lo que habían visto y oído de Jesús (Hch.
4:19-20). En estos breves párrafos he sacado la conclusión que un ministro debe tener
total convicción, absoluta certeza del poder de la Palabra de Dios a la hora de comunicar
el mensaje bíblico, esto es lo que producirá efectos grandiosos en quienes escuchen.
Trataremos ahora en breve lo que es predicar con la mente y el corazón, pues, habiendo
dicho brevemente la importancia de leer, hay otros detalles que no pueden pasar
desapercibidos.
44
Criswell, Wallie Amos. El pastor y su ministerio. p. 64.
45
Ibíd. p. 64.
42
III. CON LA MENTE Y EL CORAZÓN
Ningún mensaje es eficaz si no ha producido un efecto en el pensamiento y el
corazón del ministro. Un mensaje excelente teológicamente sin corazón es mero
intelectualismo, un mensaje carente de teología y lleno de corazón es solo un extracto
motivacional. Por lo tanto, un mensaje bíblico es aquel que incluye una mente
transformada y en consecuencia un corazón también. Creo que hay algunas pautas
importantes para que el mensaje sea con la mente y el corazón. Algunas de ellas estaré
nombrando y explicando brevemente.
A. LEA EN VARIAS VERSIONES

Es importante para aquellos que saben idiomas bíblicos que puedan tener su
propia traducción del pasaje. Pero en caso de no tenerlo, sería conveniente que pueda
usar diferentes versiones para poder tener una idea concreta del pasaje. Podría usar las
versiones literales como: Reina-Valera 1960, La Biblia de las Américas, y versiones de
equivalencia dinámica como: Nueva Versión Internacional, Nueva Traducción Viviente.
Además, podría utilizar a modo de comentario paráfrasis como: Dios Habla Hoy, Biblia
al Día o Traducción Lenguaje Actual.
B. PRIORIDADES EN LA AGENDA
Este es un asunto importante, nuestras prioridades determinan hacia dónde
vamos. En el caso del predicador, del ministro, debe saber que lo principal en su agenda
diaria, y la primera nota es un encuentro con la Palabra de Dios y la oración. El lugar en
donde usted estará trabajando en el mensaje es crucial, la organización de su día es
crucial. Atender lo principal y en algunos momentos delegar lo secundario es
indispensable en la vida del ministro. Claramente esto lo podemos ver en el caso de los
apóstoles y la situación que se les presenta con la asistencia a las viudas en Hechos 6.
Ellos no despreciaron, ni quitaron valor a la atención de estas, pero delegaron esa
actividad a hombres idóneos para poder proseguir en la oración y la Palabra. Aprenda a
delegar, es importante para tener tiempo para el mensaje.
Esta frase de Roberto G. Lee citado por Criswell es pertinente a lo que vengo
comentando y creo dará mayor luz o claridad al concepto: “Usted no puede vivir en
base a la leche desnatada durante los días de la semana y predicar la crema el domingo.
43
El pastor tiene que estar él mismo lleno de la verdad de Dios.”46 No podemos ser
negligentes en el estudio de la Escritura, debemos estar sumergidos en ella e investigar
cada detalle de la Palabra para alimentar bien al rebaño. Las ovejas necesitan alimento
sólido, no solo agua, pastos frescos no abrojo o paja.
C. CONTENIDO DOCTRINAL
Los mensajes de hoy son vacíos de contenido, tienen mucha emoción, mucho
movimiento del orador, pero poco dice. Se está llenando a la gente de comida rápida, o
mejor dicho, se le está dejando faltar el alimento sustancioso. Anteriormente compartí lo
que dijo John MacArthur con respecto a la predicación: que las iglesias estaban llenas
pero la predicación era vacía. No se puede dar el permiso como ministro de servir
siempre caldo con el mismo hueso como dice Criswell. Usted debe estar empapado de
las verdades doctrinales de cada libro de la Biblia, debe saberse mover en cada libro,
conociéndolo de punta a punta, esta repetición en cuanto a esto de mi parte es, porque
estamos tratando con vidas que tienen dos destinos por delante, uno el infierno y otro el
cielo. Para ser cristianos se debe conocer a Cristo en profundidad, sino somos meros
simpatizantes, nuestra tarea es presentar a Cristo con la mayor profundidad y exactitud
posible.
D. ORAR EN TODO MOMENTO

Orar en todo momento es un arma inigualable a la hora de preparar y presentar el
sermón para el ministro. En esto hay que ser perseverante, pues la oración es parte
indispensable para un mensaje de poder, pues trae luz de parte de Dios para entender el
pasaje a predicar, como para exponerlo en la congregación o lugar que Dios disponga.
Hay algo que la oración produce, y que es medular, que nos comparte John
MacArthur en su libro: “Si el predicador ha de presentar el mensaje de Dios con poder,
la oración debe permear su vida y proveer un medio ambiente para el fruto del Espíritu
que dure a través de toda su existencia (Gá 5.22, 23). Su ejemplo espiritual hace que
otros tomen su mensaje con seriedad.”47 La oración produce fruto en el predicador y en
consecuencia junto al poder del mensaje trae que las personas tomen con seriedad la
Palabra de Dios. No deje la oración como último recurso, eso es de necios, no podrá
46
47
MacArthur, John. La predicación: puente entre dos mundos. p. 76.
44
dejar de evidenciar su falta de oración en el púlpito. Por tanto, no cese de orar para
preparar el mensaje y para que el mensaje lo prepare a usted para ser ejemplo y para
predicar con poder la verdad de Dios. Jesús tenía esta cualidad y el apóstol Pablo
también, él mismo lo dice: “y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras
persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para
que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios”
(1 Cor. 2:4-5). Esta conexión entre la oración y la Palabra, entre la Palabra, la oración y
uno mismo es vital, para que nuestro mensaje sea demostración del Espíritu y de poder
de Dios, para que vean a Cristo, y solo a Cristo.
E. NUNCA DEJE DE APRENDER

He escuchado un dicho que dice así: “El que deja de aprender, deja de enseñar.”
Es muy cierto, necesitamos mantenernos frescos en cuanto al conocimiento de la
Palabra, también debemos leer toda literatura edificante para poder tratar los asuntos de
manera eficaz, precisa. Es necesario toda la vida estar aprendiendo para que la
congregación siga siendo alimentada. Un gran orador del siglo pasado nunca dejaba de
aprender. Aquí presento el testimonio: “Aun después de que Phillips Brooks había
obtenido fama como uno de los más grandes predicadores, él continuó tomando
lecciones de predicación. Hemos de estudiar y mantenernos estudiando.”48
Hermanos no seamos vanidosos u orgullosos, confiese y reconozca que siempre

estamos aprendiendo, que siempre debemos mejorar, que nunca es suficiente, pues Dios
demanda la excelencia en los embajadores que llevan su mensaje. El apóstol Pablo lo
dice muy claramente: “Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y
administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los
administradores, que cada uno sea hallado fiel” (1 Cor. 4:1-2). Estamos dando a conocer
la verdad de Dios, no es una noticia más, ni un anuncio de periódico, es el gran mensaje
de salvación para el hombre, el mensaje que cambiará la vida de la persona que se aferre
a él, y para eso debemos ser hallados fieles, es decir que trabajamos firme y
constantemente para transmitir con claridad y poder la verdad de Dios.
48
45
F. UNA VIDA QUE REFLEJA LA VERDAD DE DIOS
Es necesario que todo predicador o ministro tenga en cuenta esta verdad:

Nuestra vida debe reflejar lo que predicamos. Es una frase difícil de aceptar en muchas
personas que se dedican a la exposición de la Palabra de Dios, pero si realmente no
estamos dispuestos a orar a Dios y tratar con su gracia de encarnar cada mensaje, es en
vano que subamos a una plataforma a dar un mensaje, porque el primer mensaje que
damos en el púlpito es nuestra vida misma. Es lo que la gente ve y oye, no es lo
elocuente que eres, lo carismático que te presentas, es lo que ellos pueden leer en tu
vida. El apóstol Pablo con una riqueza inigualable, nos compara con cartas abiertas
leídas por todos los hombres (2 Co. 3:2). Eso es lo que sucede en la realidad del
ministro. Él es leído principalmente por su vida, no por su oratoria.
Para que pueda tener una idea panorámica de lo que acabo de decir, y no es
ninguna cuestión de tomar a la ligera, medite en el siguiente comentario: “La conducta
moral del predicador ha de ser “irreprochable.” Esta es una expresión muy fuerte.
Significa no sólo que no debe haber acusación en su contra, sino que debe ser imposible
formularle una acusación que pudiera resistir la investigación. Su conducta debe ser tal
que no le deje al adversario ninguna base posible para vituperar su vocación. Tan así ha
de ser que aun entre los extraños “es necesario que goce de buen nombre.” El
predicador ha de ser un “modelo a los que creen, en palabra, en comportamiento, en
amor, en fe y en pureza.”49 Esto que ha dicho el autor James D. Crane en su libro, está
fundamentado por 1 Timoteo 4:1-2. Ante la exposición de la verdad de Dios, debemos
hacer una rigurosa reflexión sobre nosotros los ministros, para que la Palabra de Dios no
tenga estorbo, sino que seamos canales por el que fluye la verdad de Dios para asistir a
los que necesitan.
IV. CONCLUSIÓN
En esta breve lección hemos visto brevemente sobre la importancia de tener
convicción del poder de la Palabra de Dios, y es Dios quien está comunicándose por su
Palabra. Anexado a esto hemos tratado el tema de que necesitamos ser responsables en
distintos aspectos para que el mensaje que se expone sea con la mente y el corazón, es
49
46
decir, que esto demanda: Lectura, oración, prioridades, encarnación del mensaje en uno
mismo. Es una lección de mucha importancia, aunque no se aborden temas técnicos de
la predicación. Recuerde que una de las cosas más importante es que usted es el mensaje
que predica. Y Dios ha demandado de cada ministro o embajador que sea fiel en su
tarea.

1. La convicción del predicador bíblico al exponer el texto viene en consecuencia
de saber, que el mismo texto es el mensaje de Dios comunicado al hombre.
Verdadero o falso
2. Todo lo que él necesita hacer es __________lo que el texto dice y lo que
significa para nosotros hoy.
3. Ningún mensaje es eficaz si no ha producido un efecto en el___________ y
el___________ del ministro.
4. Roberto Lee dice:
a. El pastor debe leer esporádicamente la verdad de Dios
b. El pastor debe tratar de investigar la verdad en la Escritura
c. El pastor tiene que estar él mismo lleno de la verdad de Dios
5. Criswell con respecto a la preparación del mensaje dice lo siguiente: se puede
dar el permiso como ministro de servir siempre caldo con el mismo hueso.
Verdadero o falso
6. John MacArthur dice con respecto a los predicadores: Su _________ espiritual
hace que otros tomen su mensaje con__________.
7. La conducta moral del predicador ha de ser “irreprochable”.
Verdadero o falso
8. En esta lección figura un predicador que nunca dejó de estudiar clases de
homilética:
a. John Stott
b. Miguel Nuñez
c. Phillips Brooks
9. Nuestra vida debe reflejar lo que predicamos.
Verdadero o falso
10. ¿Por qué es importante es tener una agenda de predicación? Justifique al menos
con 5 razones.
47
LECCIÓN 6. EL MENSAJE IV
I. INTRODUCCIÓN
En esta lección veremos temas sumamente interesantes con respecto al mensaje,
esto es parte de la dinámica de la predicación. Un expositor debe tener en cuenta los
siguientes temas que compartiré en esta lección, que son: la planificación de un
cronograma de mensajes, el uso de la voz, y el sentido del humor. Creo que a través de
lo que compartiré en esta lección, podrá erradicar dudas como también afirmar algunas
cuestiones que podrían no estar suficientemente claras. Le animo a seguir esta lección
con atención, así es edificado, como lo fui yo, al recordar y afirmar puntos que son parte
crucial de la exposición bíblica.
II. PLANIFICAR EL CRONOGRAMA DE MENSAJES
A. PROPÓSITO
Es importante para todo ministro planificar, tener un cronograma de mensajes.
Capaz que muchos no cuentan con ello, pero en realidad es de mucha ayuda, por el
sentido que no debe uno estar incesantemente buscando el tema luego de cada
predicación, y también por el hecho de poder brindar a la congregación todo el consejo
de Dios. El planificar nos permite dar una dirección a la iglesia, de acuerdo con como el
pastor y ministro entiende que alimento espiritual necesita, y que es lo que en oración y
guía del Espíritu le está mostrando que debe predicar. Usted puede decir que suena
poco espiritual el hecho de planificar el cronograma de mensajes, pero cabe aclarar que:
1) Dios no improvisó la creación del mundo, la tenía planeada. El estableció cada cosa
de la creación con un propósito definido y secuencialmente si usted lee el libro de
Génesis, también con respecto al maravilloso plan de salvación. Dios de antemano ya
había designado el plan con el cual salvaría al mundo. Esto lo podemos registrar a través
de toda la Biblia.
Entonces, el planificar tiene un propósito. El cual es glorificar a Dios en la

edificación de su iglesia. Comparto la experiencia que cuenta Briscoe en su libro: “En
mi congregación, cada domingo hay una multitud de necesidades, expectativas, niveles
48
de madurez e intereses. Y se supone que tengo que ofrecer un menú que sirva para
todos. Eso significa que tengo que ser un nutricionista bíblico intencional.”50
El planificar nos hace ser intencionales, es decir tratar de llegar a alimentar a la

iglesia con aquellos nutrientes que les está faltando para su salud espiritual. El hecho de
planificar nos debe llevar también a pensar que en cada mensaje el que debe ser
glorificado y puesto en evidencia es Dios, pues fuimos creados para su gloria y
alabanza. El hecho de entender el propósito de la planificación nos ayuda a cada día
tratar de ser más competentes en la gran tarea que se nos ha asignado, le ruego usted
preste atención al siguiente pensamiento de Crane con respecto a este tema: “…el hecho
de que el predicador está dedicado a la tarea más importante del mundo exige que la
desempeñe de la manera más inteligente posible. Ninguna empresa humana de categoría
funciona al azar. Ningún vendedor de productos comerciales deja de trazar
anticipadamente su plan de ventas. Ningún general entra a la batalla sin haber ideado ya
su plan de ataque. Ningún maestro de escuela que tenga conciencia de la importancia de
su trabajo dará principio a su labor sin haber formulado primero un plan de enseñanza.
¿Y el predicador, hombre en cuyas manos descansan responsabilidades eternas, se
atreverá a actuar como “dispensador de los ministerios de Dios” sin la proyección de
plan alguno?”51
No podemos ser negligentes como ministros en la tarea de preparar nuestras

predicaciones, nuestra programación de mensajes. Si las empresas buscan sus logros
planificando, si vendedores no compran cosas al azar para vender. Como vamos a
descuidar la planificación de la Palabra de Dios que tiene consecuencias eternas en las
vidas humanas. Aparte del hecho de que uno programa la predicación para la gloria de
Dios, y que debe llegar a su entendimiento de cuán grande es la tarea que llevamos
adelante. Debemos pensar en la forma de exponer esos mensajes.52 Es crucial tener una
metodología adecuada para mantener a los creyentes atentos cada momento de
predicación.
50
Briscoe, Stuart; Hybels, Bill y Robinson, Haddon. Predicando a personas en el siglo XXI. p. 53.
51
52
Briscoe, Stuart; Hybels, Bill y Robinson, Haddon. Op. Cit. p. 57.
49
B. FORMA
Este es un tema sumamente interesante porque existen diferentes posturas.

Dentro de ellas indagando e investigando con respecto al asunto, me pareció de suma
importancia la siguiente: El hecho de preparar series de mensajes temáticos que ocupen
un mes, luego tratar de que ocupen tres meses y llegar a semestralmente hasta uno se
podría animar a hacer una planificación anual, con los detalles de las festividades
especiales, temas que los congregantes puedan llegar a necesitar a los cuales podemos
acceder por medio de encuestas u otra forma metodológica para obtener información.
El hecho de saber que alimento necesita la congregación, el poder dosificarlo y a

la vez permitirle crecer en gracia y conocimiento de Dios es algo crucial. Como lo es
que la gente sepa hacia donde estamos yendo. Si la gente que concurre entiende el plan
de la iglesia, verá que hay responsabilidad en el cuidado de su vida espiritual y que se
desea hacer las cosas para glorificar a Dios.
Por qué no he compartido el hecho de predicar secuencialmente toda la Biblia

párrafo por párrafo, porque sería muy monótono y afectaría a la congregación. Aunque
aclaro que no estoy en contra de la predicación de un libro de la Biblia en serie e ir
mechando de forma intermitente mensajes de carácter esencial del tiempo que vive la
congregación.
Si estoy totalmente en contra de la improvisación la cual arguyen ciertos

místicos que solo el Espíritu Santo basta para predicar. Me parece un argumento de falta
de valor a la Palabra de Dios, y de pereza, lo que me conduce a examinar el estado
espiritual del ministro. Además de esta argumentación quisiera dejar datos adicionales
que nos puedan ayudar para la preparación de estas series y la elaboración del
cronograma de predicación. Esto es para quienes lo entienden que debe ser así.
C. DATOS ADICIONALES
Algunos datos adicionales que serán de gran importancia al hacer tu cronograma
de predicación serán:
50
 SE EQUILIBRADO EN LO QUE PREDICAS: Debes predicar para conversión,
pero también para edificación. Seguramente encontrarás en la iglesia personas
que necesiten ser confrontadas con la verdad de Dios para arrepentimiento y fe
salvadora, como personas que necesiten ser edificadas para crecimiento en la fe.
 HAZ UNA PLANIFICACIÓN CON TIEMPO: Es recomendable que te tomes al

principio del año o en un tiempo libre durante el fin del año para planificar tu
cronograma, hazlo con tiempo, teniendo en cuenta cada actividad que tu iglesia
realice, desde festividades, hasta temáticas especiales, como presentación de
ministros, misión, educación.
 REVISA LO QUE HAS PREDICADO: Debes tener un conocimiento concreto

de lo que estas predicando y de que vienes predicando, es importante alimentar
bien a la congregación. Aconsejo llevar una tabla de los temas y tópicos que has
estado desarrollando y ver en cuáles áreas se está fortalecido como en cuáles
áreas necesitar dar más dosificación. Se competente en esto. Es importante para
el equilibrio de la iglesia.
 EN LA PROYECCIÓN DE UN PLAN DE TRABAJO PARA EL PÚLPITO:

además de todo lo que se ha dicho ya, el predicador debería pensar seriamente
en la conveniencia de presentar un curso de sermones sobre algún libro de la
Biblia o de predicar una serie de mensajes sobre algún tema especial.”53 Estos
datos dados con respecto al cronograma de predicación surgen por la inquietud
de la improvisación en los púlpitos y la salud de la iglesia. Debemos ser
responsables en la gran tarea que Dios nos encomendó. Quiero cerrar este tema
con una frase del autor Briscoe, que me parece muy pertinente, reflexione, y si
puede guárdela en su corazón: “…mi punto de partida no es tanto “¿Qué quiere
oír la gente?”, sino, “Voy a darle a la gente el Pan de Vida” 54 Recuerdo que es el
alimento espiritual lo que sostiene a una congregación, tómelo con la seriedad
que merece el caso.
53
54
Briscoe, Stuart; Hybels, Bill y Robinson, Haddon. Predicando a personas en el siglo XXI. p. 54.
51
III. VOZ
La voz es uno de los instrumentos del predicador, para exponer la verdad de
Dios. Es necesario que el ministro cuide de este detalle, ya que es el canal por el cual
nos comunicamos los seres humanos. Dios se comunicó con nosotros por medio de la
persona de Jesús, y sus verdades fueron habladas no solo vistas por los hombres.
Hay algunos detalles que se deben tener en cuenta en cuanto a la voz y el

ministro.
 CUIDE SU VOZ: La voz debe ser cuidada porque se puede dañar, y esto
estropearía el ministerio del predicador en cuanto al habla. Es necesario que
prestemos atención a lo que ingerimos a lo que tomamos, y la forma en que
decidimos hablar. Entendemos que las cuerdas vocales son como músculos que
debemos ejercitar con conversaciones que edifiquen, no debemos dejar de
hablar, y solo hacerlo el domingo. Debemos ejercitar la voz durante toda la
semana, con distintos ejercicios para poder exponer de una forma clara.
 APRENDA A MODULAR SU VOZ: Esto quiere decir que no tenemos

necesidad de gritar para que la gente entienda, ni tampoco de hablar tan bajo que
la gente no entienda. Debemos saber cuál debe ser el volumen de nuestra voz
para exponer, saber en qué momentos hacer pausas, alzar un poco la tonalidad,
bajar, hablar más pausadamente, elevar el ritmo del fraseo hacia el clímax, son
ejercicios que debemos hacer y que hacen a la exposición de un fiel ministro de
la Palabra. El objetivo es que Dios sea exaltado por la predicación, porque la
iglesia entendió lo que se decía. Evite la monotonía, que su predicación sea
armónica con sus tonalidades bajas altas, intermedias. Sepa como presentar el
mensaje hablado. Spurgeon dice una gran verdad con respecto a esto: “Verdades
preciosas en extremo, se pueden perder mucho de su mérito por ser expresadas
en un tono monótono de voz.”55 No permita que se arruine un mensaje
debidamente preparado porque no preparó su voz para exponer, sea competente
en esto, es también parte del mensaje.
55
52
 HABLA CLARAMENTE: Es necesario que el predicador sea un hombre que
muestre un vocabulario y pronunciación claro. Es decir, cada palabra debe ser
escuchada completamente no en parte, es necesario ejercitarse en esto. Para ello
recomendaré una serie de ejercicios que nos brinda James Crane en su libro “El
Sermón Eficaz.”56 En cuanto al hablar claramente Spurgeon en su libro lo
describe vívidamente para que lo podamos entender, y dice lo siguiente:
“Igualmente reprensible es aquella habla lúgubre en la cual un hombre no hace
uso de sus labios, sino imita a un ventrílocuo. Los tonos sepulcrales pueden
preparar a un hombre para que sirva de comisario de entierros, pero Lázaro no se
resucita con gemidos roncos.”57 Hermano lo que tenga que decir, si Dios ha
tocado su corazón con el mensaje dígalo clara y vívidamente, la Palabra es vida
para huesos secos.
 UTILIZA TU VOZ EQUILIBRADAMENTE: Recuerda que nuestra voz es

parte de la administración que Dios nos da para que cuidemos, esfuérzate en los
momentos necesarios del sermón, no fatigues tu voz si no es necesario, no solo
te dirán que eres un hombre gritón si no paras de alzar la voz, sino que te
quedarás sin voz pronto. Se entendido en esto, muchos se han quedado roncos, o
no han podido usar su voz más de 20 minutos y luego ya no pueden hablar.
Espero que esta ilustración te sirva de ejemplo: “La tinta es necesaria para
escribir; pero sí volteáis la botella de tinta sobre un pliego de papel, no le
comunicáis ningún significado con esto. Lo mismo sucede con el sonido: este es
como la tinta; pero se necesita no una gran cantidad, sino un buen uso de él, para
producir una impresión inteligible en el oído.”58
IV. USO DEL HUMOR

El humor es un tema de interés, pues hay en el círculo de los expositores
interrogantes con respecto a esto. Creo a mí entender que el humor es parte también de
la naturaleza humana, cuando es genuino y no inventado. El humor es también un
ingrediente que dosificado en su medida correcta puede producir interesantes resultados.
El predicador por excelencia Jesús uso el humor, lo hizo por medio de ironías, que no
56
Crane, James. El Sermón Eficaz. pp. 241-248.
57
58
Ibíd. p. 91.
53
solo habrá hecho reír a las personas sino habrá indagado en lo profundo del corazón,
pues tenían un efecto sanador sus palabras dichas con este tipo de expresión.
John Stott, nos comparte lo siguiente con respecto a Jesús y el humor:

“Trueblood se esfuerza por demostrar que la forma de humor más frecuentemente
utilizada por Jesús fue la ironía (el exhibir ante la opinión pública un vicio o bien la
insensatez), y no el sarcasmo (el cual es cruel y hiere a sus víctimas). Escribe que: Es
muy importante comprender que el propósito evidente del humor de Cristo es aclarar y
hacer crecer el entendimiento, y no herir. Algo de perjuicio es quizás inevitable,
especialmente cuando... el orgullo humano queda en ridículo, pero claramente el
objetivo difiere del daño... La verdad, y sólo la verdad, es el fin ... Desenmascarar el
error, y con ello, hacer emerger la verdad.”59
Jesús a través del humor fue incisivo para descubrir la verdad que hay en los
corazones de los hombres. El uso correcto y genuino del humor puede abrir las defensas
del hombre tosco y hacer que la verdad penetre en su corazón.
El que tiene humor, no debe dejar de tenerlo, pero le aseguro que lo importante
es que cuando tenga que usarlo, la gente sepa que usted está comprometido con la
Verdad, que su interés no es divertir, sino que la Palabra de Dios llegue a los corazones,
hay una frase de Richard Baxter, que fue clarificadora con respecto al humor en el
púlpito: “Sea lo que sea que hagan, dejen ver a la gente que su intención es seria... No se
puede penetrar los corazones humanos cuando se bromea con ellos...” 60 Repito, la gente
verá nuestro compromiso con Dios y su mensaje, el humor sea un medio para llegar a la
gente, pero si ella se da cuenta que se está bromeando con ella, todo se echa a perder.
No tome ese camino, use el humor con sabiduría y responsabilidad.
También con respecto al humor y la exposición bíblica, debo advertir sobre una
línea delgada que hay en el uso del humor y el profanar lo sagrado de la predicación,
debe ser un perito, una persona preparada para usar el humor en el púlpito, porque
puede hacer que lo sagrado se vuelva común, por negligencia al exponer. Si realmente
no está preparado o no tiene el don para usar el humor no lo haga por el bien de la
59
Stott, John. La Predicación: Puente entre dos mundos. p. 279.
60
Ídem.
54
predicación bíblica, pero si lo tiene sepa usarlo correctamente para llegar a los
corazones duros y aplicar la medicina de la buena noticia de salvación. Porque digo
esto, porque esta frase de Phillips Brooks hincó en mi corazón el sentido de respeto por
lo sagrado de la Palabra y el ministerio, esta dice así: “…el bufón clerical que echa
mano de las cosas más sagradas, y profana todo lo que toca." Un bufón irresponsable
como ese, dice, nunca ha comprendido que el humor es algo muy distinto a la
frivolidad."61 No trate de acaparar atención con el humor, no use esto para profanar lo
sagrado, sepa que cuando expone la Biblia, lo hace en nombre de Dios.
En conclusión, el humor es bueno en su justa medida y con autenticidad, es un

arma para llegar a los corazones duros, y aplicar la medicina del evangelio, pero nunca
debemos usarlo para profanar lo sagrado y parecer payasos en el púlpito.
V. CONCLUSIÓN
En esta lección hemos podido corroborar o aprender la importancia de tener un

cronograma de predicación, esto hace que la gente entienda hacia dónde va la iglesia, y
la responsabilidad de quien expone la Palabra. Hemos tratado con formas de exponer la
Palabra y puede usted compartir o no la metodología, cada uno en particular sabe cómo
le es más beneficioso para el ministerio y la iglesia.
En cuanto a la voz, hemos visto la importancia de la misma, el uso adecuado de

ella, el hecho de saber los cambios de tonalidad, la educación de la misma, y la
necesidad de claridad al hablar para que el mensaje llegue a los corazones de los
oyentes. Y cerramos esta lección con el humor, que es una herramienta útil, si es usada
como corresponde, y con sinceridad, no para mostrarse, sino como parte de los rasgos
personales del predicador. He dejado en claro que el hecho de poder usar el humor no es
para volver lo sagrado en profano, sino para que la verdad llegue a los corazones duros
para arrepentimiento. Sin más les insto a seguir las lecciones siguientes para continuar
aprendiendo sobre la dinámica de la predicación, y mejorar en la exposición bíblica para
la gloria de Dios.
61
55
1. Es importante para todo ministro__________, tener un___________ de

mensajes.
2. El planificar nos hace ser intencionales. Verdadero o falso.
3. Debes tener un conocimiento concreto de lo que estas predicando y de que
vienes predicando. Verdadero o falso.
4. Que debes tener en cuenta en una planificación para el cronograma de mensajes
a. Se equilibrado en lo que predicas
b. Predica lo que te viene a la mente
c. Haz una planificación con tiempo
d. Revisa lo que has predicado
e. Haz series de sermones
Elige las opciones correctas
5. “Verdades preciosas en extremo, no se pueden perder mucho de su mérito por
ser expresadas en un tono monótono de voz.” Verdadero o falso.
6. Es necesario que el predicador sea un hombre que muestre un vocabulario y
pronunciación_________.
7. Debemos saber cuál debe ser el_________ de nuestra voz para exponer.
8. Jesús a través del humor fue incisivo para descubrir la verdad que hay en los
corazones de los hombres. Verdadero o falso.
9. “Sea lo que sea que hagan, dejen ver a la gente que su intención es seria... No se
puede penetrar los corazones humanos cuando se bromea con ellos...”.
Verdadero o falso.
10. Desde su opinión personal ¿Es válido el uso del humor en el púlpito? Justifique
su respuesta.
56
LECCIÓN 7. EL MENSAJE V
I. INTRODUCCIÓN
Estos temas que abordaré en esta lección son cruciales para el predicador, ambos
temas tienen una incidencia importante en la predicación. Tanto la importancia de la
ilustración en el sermón, la cual debe dar mayor claridad a la verdad que predicamos,
como también la realidad del oyente, el cual debe ser impactado por la verdad, pero para
ello existen varios factores que mencionaré para que la Palabra fluya con mayor
facilidad. Sé que no es el todo de la predicación, ni para el ministro, pero si son medios
importantes que no deben faltar en la dinámica de la predicación. Le invito a que pueda
leer, aprender y reflexionar sobre estos. Se dará cuenta que realmente son importantes.
Prosigamos con los temas.
II. ILUSTRACIONES
Este es un tema de suma importancia en la dinámica de la predicación, pues si
queremos atrapar la atención de la gente hacia el mensaje, debemos ser precisos y claros
en los conceptos que presentamos en el mismo, para ello la ilustración cumple una
función fundamental, sin reemplazar al texto bíblico sino dando luz a su verdad.
Es pertinente definir en breve lo que es ilustrar. Este concepto es aclarado por

Les Thompson en su libro “El arte de ilustrar sermones”, para este con ilustrar quiere
decir las siguientes opciones: 62
1. La acción y el efecto de dar luz al entendimiento.
2. Explicar un punto o materia.
3. Alumbrar interiormente a la criatura con luz sobrenatural.
4. Depositar un nido de ideas en la mente.
5. Captar la atención en medio de una distracción.
6. Contar una historia, presentar un relato, un chiste, un dicho, una lectura que
logre establecer una buena relación con la audiencia, persuadiéndoles de la verdad que
se les predica, y, sobre todo, enseñar.
62
Thompson, Les. El arte de ilustrar sermones. p.18.
57
7. Aquello que ayuda a desarrollar ideas, a ampliar el horizonte, a llegar a
aceptar opiniones nunca imaginadas, y que a veces hasta lleva el oyente a conclusiones
contradictorias.
La ilustración es alumbrar el entendimiento de la gente a través de distintos

géneros, historias, anécdotas, situaciones vividas que traen claridad al mensaje que se
está predicando. Habiendo entendido esto, veremos la importancia de la ilustración en el
sermón.
A. IMPORTANCIA DE LA ILUSTRACIÓN
Hay una frase de James Braga que es pertinente para describir la importancia de
la ilustración, y dice así: “Se ha dicho con frecuencia que la ilustración es al sermón lo
que una ventana es a un edificio. Así como la ventana da entrada a la luz al edificio, así
una buena ilustración clarifica un mensaje.”63 La ilustración es importante por el hecho
que da claridad al mensaje si es correctamente expuesta, y a la vez atrae la atención a la
verdad que uno desea enseñar como ministro.
La ilustración es indispensable porque uno puede traer o presentar a la gente a

través de distintos medios de explicación la verdad para ser entendido. La ilustración no
reemplaza la verdad, solo la hace brillar más. En cuanto a las formas que puede obtener
una ilustración, James Braga nos comparte lo siguiente en su libro: “Una ilustración
puede asumir una de varias formas. Puede consistir en una parábola, una analogía,
una alegoría, una historia (incluyendo una anécdota o fábula), un relato de una
experiencia personal, un acontecimiento histórico o un incidente biográfico. Como se
ha mencionado en el capítulo anterior, una ilustración puede también ser inventada o
sacada de la propia imaginación.”64 Sin comprometer la verdad, a través de una
ilustración adecuada podremos mantener a la gente en el mensaje, y el contenido
solvente del mensaje puede guardarse más fácil en el corazón.
63
Braga, James. Como preparar mensajes bíblicos. p. 233.
64
Ídem.
58
B. COMO ILUSTRAR CORRECTAMENTE
Es indispensable saber, cómo ilustrar, no es contar algo que llame la atención al

oyente, pero que no tenga que ver con el mensaje, eso sería solo entretener a la persona,
y a la vez una pérdida de tiempo para lo más importante, que es presentar la verdad de
Dios. Por lo que debemos ser diligentes en investigar cual ilustración es eficaz y
pertinente para el mensaje que se dará. James Braga nos comparte lo siguiente referido
al tema: “Una ilustración que valga la pena contar, vale la pena que sea bien contada.
Como regla general, no debiera ser leída. Como el sermón, una ilustración que se lee
desde el púlpito pierde su impacto. Por ello, cuando alguien usa una ilustración, debiera
cerciorarse de que conoce las detalles lo suficientemente bien como para contarlos con
fidelidad. Si olvida u omite una o dos partes esenciales, puede hacer inservible la
ilustración.”65 Es indispensable como dice Braga contar bien la ilustración, tenerla
memorizada y entendido, sino es inservible. Toda ilustración que se elige de manera
concienzuda para el mensaje es pertinente, pero es indispensable que se cuente
correctamente.
Aparte de este dato indispensable, hay otros que debemos llevar a cabo, estos
son: Tener en claro el concepto bíblico. No podemos dudar, ni tener una nebulosa para
explicar lo que debemos decir. Por ejemplo, si va a hablar sobre los efectos del pecado,
debe saber muy bien que es el pecado para poder ilustrar correctamente.
Otro dato para tener en cuenta es el siguiente consejo que da Les Thompson: que
la ilustración sea lo más realista posible. El trae a colación lo siguiente: “Walt Disney,
para lograr que los niños se queden pegados al televisor, usa animales, ¡pero les da
personalidad humana! Es más, para hacerlos atractivos, los coloca en situaciones muy
humanas. Hace uso de toda la gama de emociones, temor, amor, sospecha, desánimo,
lágrimas y alegrías propias del ser humano —todo para captar nuestra atención. El
secreto de su éxito es esa humanización de sus personajes. Lo que digo es que a todos
nos gusta oír de gente, de cosas que nos suceden, de experiencias que tenemos, de
tristezas o goces que sentimos.”66 Este es uno de los tantos ejemplos que Les Thompson
da en su libro, pero lo que nos quiere decir con eso, es que debemos estar familiarizados
65
Braga, James. Cómo preparar mensajes bíblicos. p. 241.
66
Thompson, Les. El arte de ilustrar sermones. p. 20.
59
con la vida diaria de la gente. Nuestras ilustraciones tienen mayor vigor cuan más reales
sean.
Continuando con la importancia de ilustrar correctamente, está el tiempo que

debemos invertir para hacer un archivo para de ilustraciones. Es bueno hacerlo, porque
nos ahorra tiempo. Tendríamos que registrar anécdotas, historias, datos que nos ayuden
y colocarnos en temáticas para predicar. Este trabajo es arduo, pero si deseamos ser
predicadores eficaces tenemos la obligación de hacerlo. Recuerde que estamos para
presentar la verdad de Dios de una manera que la gente pueda grabar el mensaje en su
corazón, llevarlo a su hogar y repensarlo. Quiero cerrar este breve comentario sobre el
valor de las ilustraciones con el consejo que nos deja Les Thompson, que dice lo
siguiente: “Nuestro objetivo no es poner la gente a dormir, sino hacerles vivir una
verdad bíblica.”67
III. ATENCIÓN DEL OYENTE
La atención del oyente es fundamental, por la simple razón que serán los
depositarios de la verdad divina. Es necesario que tengamos en cuenta algunos aspectos
que a mi parecer son indispensables, más allá de que lo crucial es el haber tenido una
comunión íntima con Dios, estar lleno del Espíritu Santo y preparado en lo que respecta
al mensaje a la hora de predicar, existen otros elementos importantes.
A. LA CLARIDAD DE LA VOZ DEL PREDICADOR: Este es un elemento clave,

necesitamos no solo tener la idea clara de lo que iremos a predicar, sino un
vocabulario claro y entendible para que la gente pueda captar el mensaje.
imagínese que tenga algo tremendamente importante que decir, pero no sepa
cómo decirlo. Es como que atalaya sepa que viene el enemigo y lo que esté
anunciando sería que todo está tranquilo. Sería un desastre. Necesitamos ser
claros. La claridad es un medio que favorece la llegada del mensaje al oyente.
Para esto debemos trabajar en nuestra voz y la pronunciación. Es bueno leer
mucho y leer en voz alta. Es indispensable leer el mensaje en voz alta para
memorizar y a la vez para educar la voz.
67
Thompson, Les. El arte de ilustrar sermones. p. 9.
60
B. LA RÍTMICA DE LA VOZ EN EL MENSAJE: En el mensaje se produce
variedad de tonalidades, velocidad, silencio, estos elementos son indispensables
para tener al auditorio cautivo. Si usted está por debe decir algo que necesita una
tonalidad de voz elevada, no dude en hacerlo. Por ejemplo, si sabe que una casa
se comienza a incendiar, usted pediría auxilio en voz alta, no lo susurraría, lo
mismo sería cuando usted está por decirle a un pecador que es necesario
arrepentirse porque el destino eterno en el infierno es terrible. Otra de las cosas
que es necesaria es que cuando usted está llegando al clímax de un tema o de
uno de los puntos la velocidad, la pausa, son importantes, ellas también
comunican. Espero me entienda. En la historia de cuando Isaac iba a sacrificar a
su hijo. Usted no puede decir de forma lenta que levanto el cuchillo e iba a matar
a su hijo. Es en una velocidad como secuencia dramática, la pausa ante la
aparición del ángel sería maravilloso, y en alza voz decir: No lo mates, Dios te
ha oído. Espero me haya explicado. Pero es necesario el cambio de voz, la
velocidad y la pausa.
C. NECESIDAD DE PONERSE EN LOS ZAPATOS DEL OTRO: Esta es una
realidad que el predicador debe tener en cuenta a la hora de escoger sus
mensajes. La gente pasa un sinnúmero de problemas durante la semana, y
cuando está en el día del Señor a veces sigue pensando en ellos, debemos saber
qué es lo que le sucede, con que problemas luchan personalmente y diariamente
en su vida cotidiana, esto hará que ellos presten gran atención cuando usted
predica la verdad de Dios. Ellos necesitan respuestas prácticas para sus
problemas cotidianos, y la Palabra de Dios las tiene.
D. EL ARREGLO ADECUADO DEL LUGAR DE PREDICACIÓN: Esto también
hace a la atención del oyente, debemos estar en cada detalle para que la
predicación no halle estorbo, por lo menos en lo que respecta a asuntos
humanos. Spurgeon dice lo siguiente respecto a esto: “Muchas veces el local y
su atmósfera impiden que el auditorio preste su atención. Por ejemplo, si el aire
libre no puede entrar en el salón, si están cerradas todas las ventanas, los oyentes
respirarán con mucha dificultad y no podrán pensar en otra cosa. Cuando la
gente haya aspirado repetidas veces el aire exhalado de los pulmones de otras
personas, toda la maquinaria de su ser se trastornará, y será probable que de ahí
resulte una fuerte jaqueca más bien que un corazón contrito. La mejor cosa como
auxilio del predicador, después de la gracia de Dios, es el oxígeno en
61
abundancia.”68 Este es un detalle muy importante, no lo deje librado al azar.
Verá que hará un gran aporte para que el evangelio pueda llegar al oyente.
E. ENCUÉNTRESE PREPARADO PARA PREDICAR: Un pastor que me
enseñaba sobre predicación me dijo una vez: Si no tienes nada para decir, no
digas nada. Es preferible eso a atentar contra la gloria de Dios. Esto es cierto, no
solo ofendemos a Dios, sino que también perjudicamos al oyente que se toma el
tiempo de venir a escuchar la Palabra de Dios. No podemos ser incompetentes
en esto, Dios nos prestó el corazón de la gente para que acuda a escuchar el
mensaje, lo mínimo que podemos hacer para glorificar a Dios es estar bien
preparados para anunciar el mensaje. Spurgeon dice sobre este tema lo siguiente:
“No es una crítica severa el decir que hay ministros cuyas palabras son muchas,
y cuyos pensamientos son pocos. En efecto, sus palabras ocultan sus
pensamientos, si es que los tienen. Emiten montones de hollejo, y tal vez haya
un grano o dos de cebada mezclados con él, pero sería muy difícil encontrarlos.
Ningún auditorio atenderá por mucho tiempo a palabras, palabras, palabras y
nada más.”69 Hermanos debo decirte que no solo Dios sabe cuándo no te
preparas, la gente también sabe cuándo solo es un balbuceo de palabras sin
contenido, por tanto estemos preparados para dar el mensaje.
F. UN MENSAJE VIVIDO: Hermanos ministros si queremos captar la atención del
oyente, el mensaje primero debe captarnos a nosotros. El mensaje debe haber
producido en nosotros un deslumbramiento y cambio en el corazón por la verdad
encontrada en él. Este mensaje que transformó nuestro corazón hará que
vayamos al pulpito a decir una verdad con autoridad del cielo, con poder. El
oyente se dará cuenta que lo que decimos tuvo impacto real en la vida. Hay algo
que Spurgeon dijo a sus estudiantes y que caló hondo en mi corazón, y es lo
siguiente, te animo a que reflexiones en esto: “Dadles algo notable, algo que
valiera la pena de que un hombre se levantara a media noche para oírlo, y de que
anduviera 50 millas con ese objeto. Si sois capaces de hacer esto, hacedlo,
hermanos, hacedlo siempre, y tendréis la atención más fiel y fija de vuestros
oyentes.”70 Hermanos, meditemos en esto, ¿es valioso lo que le diremos a tal
68
Spurgeon, Charles. Discurso a mis estudiantes. pp. 99-100.
69
Ibíd. p. 101.
70
Ídem.
62
punto de que sientan un anhelo intenso por estar? Les dejo esto para reflexionar
de manera personal.
G. UNA IMAGEN DECENTE: Usted me puede decir que es esto que está
compartiendo conmigo, no le parece que es demasiado. Yo le pregunto mi
querido estudiante. Si un embajador de un país, si un presidente, o un
funcionario o empresario se encuentra con usted, ¿cómo está vestido? Parece un
vagabundo, sin ofender a nadie. Al contrario, este vestido espléndidamente, por
tanto. Si nosotros somos embajadores de Dios, representantes de Dios, como
deberíamos estar vestidos. Cree que deberíamos ser menos decorosos que
aquellos que representan cosas terrenales. La imagen decente también habla, no
solo en el púlpito, sino en la vida diaria. Un comentario de Criswell me parece
adecuado en este tópico. “El pastor ha de estar vestido apropiadamente todo el
tiempo para toda ocasión. Hay un modo de vestir para un campamento
programado por la iglesia, hay un modo de vestir para una boda, hay un modo de
vestir para una fiesta. El buen sentido común le dictaminará lo que ha de vestir.
Recuerde que la propiedad en el vestir puede hablar más fuertemente de que sus
palabras. Sea sabio y cauteloso en la selección.”71 Por tanto, ruego que tenga en
cuenta este aspecto de la vida también, es un consejo que ayudará a no poner
estorbo al oyente en su atención a la verdad de Dios.
H. LOS ADEMANES: En cuanto a la expresión corporal, debo decir que ella es
buena, siempre y cuando no sea excesiva, que produzca en el oyente algún tipo
de desatención o confusión. Los ademanes deben estar de acuerdo con el
mensaje o idea que está explicando, y no deben ser exagerados por el hecho que
pueden echar a perder el mensaje. Es como el dicho que expresa: mucho de algo
no es bueno. Para este tema deseo compartir un consejo de Criswell al respecto:
“Cuide sus ademanes. Algunos de éstos pueden ser parte de su personalidad
extrovertida, pero la mayoría de las veces son pequeñas peculiaridades que se
nos acercan sigilosamente sin darnos cuenta de ello y pronto llegan a ser hábitos
que distraen la atención. Pídale a un miembro de la familia o a un amigo de
confianza que le indique cualquier gesto o mueca que sea dañino. Las manos en
sus bolsillos, torcimientos y contorsiones faciales, subirse sus pantalones,
rascarse la cabeza o sus orejas, mecerse hacia adelante y hacia atrás, mirar
71
63
siempre por encima de las cabezas del público, estos y muchos otros hábitos
parecidos inducen a antipatías inconscientes. Observe a otros pastores y aprenda
de ellos qué emular y qué evitar.”72 Creo que en este comentario de Criswell hay
un consejo que no debemos dejar pasar, y es el hecho de pedir que alguien nos
aconseje de la familia, si es posible su esposa, o alguien de confianza para que
podamos corregir ademanes que perjudican al oyente. Será una forma de facilitar
que el mensaje llegue sin estorbo. Debido a que este tema es una lección no
puedo extenderme más. Solo quiero cerrar con el consejo que para mi entender
es crucial en cuanto a la atención del oyente. Este es: Pase horas con la Palabra y
en oración, elabore su mensaje en oración, en privado. Esto es el secreto más
poderoso a la hora de exponer. Predique con un corazón lleno de la Palabra de
Dios y del Espíritu Santo.
IV. CONCLUSIÓN
En esta lección hemos trabajado el tema de la ilustración, que para mi tiene gran
incidencia en la claridad de las verdades bíblicas que presentamos a diario en los
mensajes. La forma de dar las ilustraciones, como darlas adecuadamente para que no
sea un perjuicio en vez de un beneficio. Tratamos además el tema de la atención del
oyente, viendo la importancia de: La claridad al hablar, la rítmica de la predicación, la
importancia del cuidado del lugar de predicación, el tener un mensaje vivido, la
presentación del predicador en el púlpito y en la vida diaria, el cuidado de los ademanes,
y el estar preparados teológica y espiritualmente. He tratado de condensar los puntos
que considero importantes en esta lección. Usted puede seguir investigando, incluso
existen libros excelentes para poder mejorar en las técnicas de ilustración, y en lo que
tiene referencia a la atención del oyente. Mi deseo es que pueda exponer de manera
eficaz, dentro de la parte humana que nos toca hacer, a priori sabemos que lo principal
es la obra de Dios a la cual nos abocamos en oración y preparación delante de Él como
ministros.

1. Que significa la palabra Ilustración:
a. La acción y el efecto de dar luz al entendimiento.
72
64
b. Un pensamiento magnifico
c. Un conjunto de ideas
Elegir la opción correcta
2. La ilustración no reemplaza la verdad, solo la hace brillar más. Verdadero o
falso.
3. Les Thompson nos da el siguiente consejo: … que la ilustración sea lo
más__________ posible.
4. Una ilustración que valga la pena contar, vale la pena que sea bien contada.
Como regla general, no debiera ser leída. Verdadero o falso.
5. La claridad de la voz del predicador no es indispensable. Verdadero o falso.
6. En el mensaje se produce variedad de tonalidades, _________,_________, estos
elementos son indispensables para tener al auditorio cautivo.
7. Muchas veces el local y su atmósfera impiden que el auditorio preste su
atención. Verdadero o falso.
8. Un pastor que me enseñaba sobre predicación me dijo una vez: Si no tienes
____para decir, ___digas nada.
9. Criswell expresa sobre la imagen del pastor lo siguiente: Recuerde que la
propiedad en el vestir puede hablar más__________ que sus ________.
10. Explique su opinión ¿Para usted es indispensable el uso de ilustraciones en los
sermones? Justifique su respuesta.
65
LECCIÓN 8. LA FINALIDAD DE LA PREDICACIÓN
I. INTRODUCCIÓN
En este curso de dinámica de la predicación hemos tratado no solo

particularidades del predicador, sino que he tratado de brindar herramientas para poder
presentar el mensaje de una forma eficaz. Hemos recorrido una gran trayectoria durante
este curso para poder lograr el objetivo de presentar el mensaje de Dios a los oyentes, el
tema que nos queda por abordar, es un tema crucial para el predicar o ministro.
Este tema tiene que ver con el objetivo de la predicación, con el eje de nuestra
predicación. No podemos fallar en ello, porque toda nuestra preparación, elocuencia,
retórica se vendría al piso, y lo peor que en vez de edificar fundamento sólido,
construiríamos su iglesia sobre arenas movedizas, en vez de que esté sobre la roca que
es Cristo.
En esta lección trataremos sobre tres puntos cruciales que orientan la

predicación, que son: Dios el autor y creador de todas las cosas y que ha dejado un plan
trazado por su Palabra, Cristo el mensaje de Dios para traer a los corazones su presencia
y su reino o su gobierno para ser bendecidos, y el propósito por lo cual fue hecho, que
es para disfrutar de las perfecciones de Dios y glorificarlo que es el fin supremo del
hombre sobre la tierra y por la eternidad.
II. EL AUTOR: DIOS

Algunos pueden discutir sobre la veracidad de la Biblia, o que fue escrito solo
por seres humanos y es un libro más, pero para los que han nacido de nuevo, los que
han experimentado el nacimiento espiritual, pueden entender como dice el apóstol Pablo
las cosas espirituales como lo expresa en la Primera Carta a los Corintios. A Dios le
plació, le agradó expresar su mensaje no solo a través de la persona de Jesús, sino que
también lo ha dejado por escrito. Porque se trata del gran mensaje de Dios para la
humanidad. El pastor Timothy Keller lo define muy bien: “…el evangelio es la noticia
de lo que Dios ha hecho para cumplir la salvación a través de Jesucristo en la historia.
66
Este no es un aviso acerca de lo que debemos hacer para alcanzar a Dios. Nosotros no
ganamos esta salvación. Nosotros sólo la aceptamos.”73
Este es el objetivo que Dios tuvo en mente, presentarle a la humanidad una vía
de escape a la destrucción eterna. Todo ministro debe tener en claro de que el concepto
medular de la Biblia es el evangelio de Dios expresado en la persona de Jesús. El autor,
Dios mismo buscó por todos los medios acercar al corazón humano la verdad de vida
que se presenta en Él, esto lo podemos ver desde el Antiguo Testamento, y las figuras
que apuntaban a Cristo y su encarnación, ministerio, y gloria, y luego la expansión del
evangelio por el resto de la tierra. Dios está interesado en la propagación del evangelio.
¿Quién es este Dios que está sumamente interesado por la salvación de la humanidad y
que planeó que la Escritura estuviera en nuestras manos hoy? Es el Dios que gobierna
todo y que formó un pueblo para sí estableciendo su gobierno en la tierra. Y esto es
estar hablando de su reinado.
Este reinado fue proclamado por Jesucristo durante todo su ministerio terrenal, y
el objetivo es que sea instaurado en el corazón de cada persona. El mensaje de Jesús era:
“¡Por fin ha llegado el tiempo prometido por Dios! —anunciaba —. ¡El reino de Dios
está cerca! ¡Arrepiéntanse de sus pecados y crean la Buena Noticia!” (Mr. 1:15 NTV).
Esta era la gran noticia, la inigualable noticia de permitir que Dios se instaure y
gobierne cada corazón humano, para formar su reino, y regirlo, para su Gloria.
Cuál es el objetivo por el cual el Dios maravilloso que tenemos, se presentaba en

la persona de Jesús predicando inminentemente el tema del arrepentimiento para fe en
Dios. Dios desea tener comunión con sus criaturas, para que puedan gozarse en sus
perfecciones, que puedan experimentar de sus bendiciones. Este es el tema central del
evangelio: Conocer a Dios, ser transformado por él, para darle Gloria. Vaughan Roberts
lo plantea de la siguiente manera: “Dios desea que el ser humano comience a disfrutar
una íntima relación con él en su presencia. Puesto que él es un Dios santo y perfecto,
eso es posible solo si nos sometemos a su amoroso gobierno y no pecamos. Eso es lo
mejor de la vida; vivirla como fue diseñada para vivirse. Vivir bajo el gobierno de Dios
significa disfrutar la bendición de Dios; ambas cosas van de la mano. Eso es lo que
veremos desde la creación del jardín del Edén hasta la caída. Pero en aquella ocasión
73
Keller, Timothy. ¿Qué es el evangelio? p. 7.
67
los hombres desobedecieron a Dios y se privaron de su bendición”74 Estas palabras
clarifican lo que Dios tuvo en sus planes desde antes de la fundación del mundo, esto es
lo que mueve el corazón de Dios y su propósito. Fíjese que cuando Dios funda la
iglesia, lo hace con el objetivo que todo lo que haga sea para su alabanza. Usted puede
supervisar y observar el capítulo 1 de Efesios y verá que constantemente cada
bendición, que Dios da para su iglesia es para alabanza de su Gloria, es para que se
gocen en sus perfecciones, en Dios mismo, que es la Fuente de Vida.
III. EL MENSAJE: CRISTO
Cristo es el mensaje de toda la Escritura en ella se apunta constantemente a su

persona, desde el protoevangelio en Génesis 3:15, pasando por las distintas narrativas
del Antiguo Testamento y sus escenas, donde las figuras cobran el total sentido con su
cumplimiento de Cristo en su ministerio presente y futuro. Como ministros es menester
mirar la Biblia de esa manera, porque el plan de Dios fue hablar de Cristo, del único
camino para la salvación del hombre. Jesucristo mismo atestiguó sobre el objetivo del
mensaje de Dios: “Ustedes estudian las Escrituras a fondo porque piensan que ellas les
dan vida eterna. ¡Pero las Escrituras me señalan a mí!” (Jn. 5:39). Aquí Cristo nos dice
que la vida está en Él! Y de esto habla toda la Escritura. Prestemos atención a nuestro
mensaje al predicar este debe hablar del evangelio, este debe presentar al mensaje del
evangelio, que es: Cristo.
Como ministros debemos tener siempre presente que nuestra predicación forma
o deforma la iglesia, que si no tenemos claro cuál es el objetivo de Dios en la Escritura,
no lo podremos predicar. El objetivo es mostrar a Cristo. ¿Lo está haciendo? Quisiera
compartir unas interesantes líneas del libro del Goldsworthy: “Por lo cual, deseo
formular una pregunta simple pero dirigida en especial al predicador evangélico; una
pregunta que todos deberíamos hacernos al prepararnos para predicar (y que sin lugar a
duda la respuesta debería estar clarísima en nuestras mentes antes de empezar nuestra
predicación): ¿Cómo da testimonio de Cristo este pasaje de la Escritura y, en
consecuencia, mi sermón? Hay dos razones fundamentales para recalcar esta pregunta.
La primera, antes mencionada, es que Jesús afirma ser el tema de toda la Escritura. La
74
Roberts, Vaughan. El gran panorama divino. p. 19.
68
segunda, es la estructura general de la revelación bíblica, la cual sólo encuentra su
coherencia en la persona y obra de Jesucristo. Aunque a estas dos razones podríamos
agregar una tercera: no fue por accidente que la iglesia cristiana llegara a entender que
la Biblia es la Palabra de Dios, y que, al mismo tiempo, entendiera que este título
también se aplica a Jesús (Jn 1:1-14).”75 Las tres razones que nos muestra Goldsworthy
son fundamentales. Jesús es el tema de la Escritura. Toda la Escritura encuentra su
coherencia en la obra y ministerio de Jesús. Y la iglesia primitiva entendió esto. Si este
concepto se encuentra siempre en nuestra mente y corazón, si realmente queremos que
se expanda el reino de Dios, porque le amamos y deseamos darle Gloria, trataremos la
Biblia como una unidad que nos presenta el mensaje de Cristo.
IV. EL OBJETIVO: LA GLORIA DE DIOS
El mensaje del evangelio tiene un objetivo. Es que la gente glorifique a Dios y

disfrute de Él. Dios es el creador de todas las cosas, quien las sostiene, preserva y guía.
Dios es quien da al ser humano toda bendición y satisfacción cuando se pone bajo su
gobierno. No en vano el libro de Apocalipsis nos habla de cómo su pueblo le adora. “Tú
eres digno, oh Señor nuestro Dios, de recibir gloria y honor y poder. Pues tú creaste
todas las cosas, y existen porque tú las creaste según tu voluntad” (Ap. 4:11).
Todos aquellos que han sido transformados por el evangelio glorioso de nuestro
Señor Jesucristo, no tienen otra particularidad que, glorificar a Dios por la gran
misericordia que ha tenido para con nosotros. Para con aquellos que vivíamos en
tinieblas y luz nos resplandeció, la luz del glorioso evangelio de Jesucristo. Esto como
ministros a la hora de predicar debe suceder en nuestras vidas, esto es lo que debemos
irradiar, y a la vez poder llevar a otras personas a que puedan disfrutar del Dios
maravilloso que tenemos, de su santidad y amor. De su Gracia inmerecida.
Cabe decir además de ello que el evangelio que predicamos no tiene que ver solo
con disfrutar de Dios de adorar a Dios, tiene implicancias de generosidad, de amor hacia
el otro. De ser un heraldo, de proclamar esta verdad para que otros por la Gracia de Dios
cobren vida en la muerte espiritual que se encuentran. No debemos olvidar esta tarea,
75
Graeme, Goldsworthy. Como predicar a Cristo usando toda la Escritura..p.46.
69
sino el evangelio estaría incompleto. Debemos entender que el plan de Dios es restaurar
lo que él creó y que fue destruido por el pecado del hombre. Ese plan de reconciliación
que dice el Apóstol Pablo, que vemos en el proceso del panorama divino, es el que Dios
está tratando y el que debemos predicar en cada momento que Dios nos da oportunidad
de hacerlo.
Cual fue el patrón de vida que gobernó en el Edén y cuál es el que gobernará en
futuro con Dios. Fíjense en este cuadro que nos brinda Roberts: 76
El Reino El patrón El reino El reino El reino El reino El reino

de Dios del reino perdido prometido parcial profetizado presente
El pueblo Adán y Nadie Descendencia Los El Jesucristo:

de Dios Eva de Abraham Israelitas remanente nuevo Adán:
de Israel, nuevo Israel
inclusión de
las naciones
El lugar El jardín Expulsión Canaán Canaán Nuevo Jesucristo:

de Dios (y Templo: verdadero
Jerusalén nueva tabernáculo:
y el creación verdadero
templo) templo
El La Palabra Obediencia Bendición a La ley y Nuevo Jesucristo:

gobierno de Dios: y maldición Israel y a las el rey pacto: nuevo nuevo pacto:
y relaciones naciones rey: gran descanso
bendición perfectas bendición
de Dios
Aquí claramente vemos la trama del escenario divino: desde el Reino que Dios
había establecido, hasta el reino presente en Cristo. Es inigualable lo que Dios desea
hacer por su creación. No hay otro Dios como Él, por eso le alabamos, por eso nos
gozamos en Él y hacemos todo para su gloria. La gente debe entender este principio de
vida, y al entender la historia, no puede hacer otra cosa que prorrumpir en júbilo y
alabanza a nuestro Dios. El efecto de la soberanía de Dios sobre nuestras vidas del
76
Roberts, Vaughan. El gran panorama divino. p. 113.
70
poder disfrutar de sus perfecciones nos debe llevar a adorarlo, y al adorarlo encontramos
la plenitud que tanto hemos estado buscando. Esto es lo que debemos presentar como
ministros en cada mensaje.
Recuerde que hoy el mensaje cristocéntrico está ausente en las iglesias, es más
un asunto de motivaciones, emociones, superación y otras ciencias, menos de tratar
sobre el tema principal del cristianismo, que es Jesús. Entonces, ¿Cómo saber si mi
mensaje es Cristocéntrico?
 Porque el mensaje que predicamos tiene que ver principalmente con Cristo y
la gloria de Dios. Cristo es el autor de nuestra redención (Hb. 12:2) y por
quien todas las cosas existen y subsisten (Col. 1:16).
 Porque enseñamos que la única forma de llegar a Dios y disfrutar de Él es
por medio de Cristo. “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre
Dios y los hombres, Jesucristo hombre” (1 Ti. 2:5).
 Porque el evangelio nos humilla y nos hace reconocer la necesidad de Dios y
de Jesucristo como Salvador. Este es el verdadero mensaje. El que Cristo
proclamó, el que los distintos testigos oculares que escribieron los evangelios
enseñan. En donde nos muestra nuestra pecaminosidad, la necesidad de Dios
para un camino nuevo, y no seguir el camino de la perdición eterna (Lc.
14:15-24).
 Si quitamos a Cristo del evangelio no seríamos nada y estaríamos perdidos.
(1 Cor. 15:19). Stott lo dice de la siguiente manera: "Si quitamos a Jesús de
Nazaret del centro del cristianismo, simplemente lo que quedaría es un
cascarón vacío."77
Este es el mensaje que nos es pertinente predicar para la edificación de la iglesia,

es el mensaje apostólico verdadero que habla Efesios 2:20 es lo que dice el apóstol
Pedro que Cristo es la piedra angular, el centro de toda vida, y que por el tenemos
relación con Dios y plenitud en Él.
No nos olvidemos de esta dinámica indispensable en la predicación, y estaremos
siendo fieles al ministerio que Dios nos encomendó. Como dijo el Apóstol Pablo en su
77
Ídem.
71
Carta a los Corintios: “Pues no somos como muchos, que medran falsificando la
Palabra de Dios, sino que con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios,
hablamos en Cristo” (2 Cor. 2:17). Todo lo que hacemos como ministros al predicar es
para que Dios se lleve la Gloria, y sabemos que lo hacemos delante de Él gran Dios, y
de parte de el gran Dios.
V. CONCLUSIÓN
En esta última lección tratamos un tema cardinal de la predicación, que es Dios,
su gloria y mensajes, Jesús el mensaje de Dios para que el hombre vuelva a
reconciliarse con él, y el objetivo final de todo el plan por el cual Dios desea llegar al
hombre por el evangelio, es la alabanza de su Gloria.
Espero que este curso haya podido despertar en cada ministro la importancia de
la predicación, el poder utilizar cada herramienta que se presenta de la mejor manera, el
poder usar nuestras vidas como Dios desea, para su gloria, y que el mensajes del
evangelio corra, para que otros puedan conocer la Fuente de Vida inagotable que
tenemos en Dios. El sentido del hombre en la vida temporal y eterna.
1. … el ________ es la noticia de lo que Dios ha hecho para cumplir la salvación a

través de Jesucristo en la historia.
2. Todo ministro debe tener en claro de que el concepto medular de la Biblia es el
evangelio de Dios expresado en la persona de Jesús. Verdadero o falso.
3. La gran noticia del evangelio es:
a. Cumplir la ley
b. Ser personas sumamente caritativas
c. Que Dios se instaure en nuestro corazón
4. Dios desea tener comunión con sus criaturas, para que puedan gozarse en sus
perfecciones, que puedan experimentar de sus bendiciones. Verdadero o falso.
5. Cuando Dios funda la iglesia, lo hace con el_________ que todo lo que haga sea
para su__________.
6. Cristo es el mensaje de toda la Escritura en ella se apunta constantemente a su
persona. Verdadero o falso.
72
7. Todos aquellos que han sido transformados por el evangelio glorioso de nuestro
Señor Jesucristo, no tienen otra particularidad que, glorificar a Dios por la gran
misericordia que ha tenido para con nosotros. Verdadero o falso.
8. "Si quitamos a Jesús de Nazaret del centro del cristianismo, simplemente lo que
quedaría es un cascarón vacío". Verdadero o falso.
9. El mensaje apostólico verdadero que habla Efesios 2:20 es lo que dice el apóstol
Pedro que Cristo es la piedra angular, el centro de toda vida, y que por el tenemos
relación con Dios y plenitud en Él. Verdadero o falso.
10. Explique con sus propias palabras ¿Cuál es la finalidad de la predicación bíblica?
73
BIBLIOGRAFÍA
Baxter, Richard. El pastor reformado. Ciudad de México: Iglesia Bautista de la Gracia,

2000.
Bound, Edward. El predicador y la oración. España: Clie. 2008.
Braga, James. Como preparar mensajes bíblicos. Oregon: Editorial Portavoz. 1981.
Chapel, Bryan. Como usar ilustraciones para predicar con poder. Grand Rapids:
Editorial Portavoz. 2001.
Crane, James. El Sermón Eficaz. Texas: Mundo Hispano. 2003.
Criswell, W. El Pastor y su ministerio. Texas: CBP. 1998.
Goldsworthy, Graeme. Como Predicar de Cristo usando toda la Escritura. Colombia:
Torrentes de Vida. 2012.
Hybels, Bill; Robinson, Haddon y Briscoe, Stuart. Predicando a personas en el siglo
XXI. España: Clie. 2008.
Keller, Timothy. ¿Qué es el evangelio?. New York: Redeemer Church Planting Center.
2004.
MacArthur, John. La predicación: Como predicar bíblicamente. Nashville: Grupo
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Morgan, G. Campbell. El ministerio de la predicación. Terrasa: CLIE, 1984.
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Nuñez, Miguel. De pastores y predicadores. Nashville: B&H. 2019.
Roberts, Vaughan. El Gran panorama divino. México: Torrentes de Vida. 2008.
Spurgeon, Charles. Discurso a mis estudiantes. El Paso: CBP. 1980.
Stott, John. La predicación: puente entre dos mundos. Grand Rapids: Editorial Desafío.
2000.
Sunukjian, Donald. Volvamos a la predicación bíblica. Grand Rapids: Editorial
Portavoz. 2010.
Thompson, Les. El arte de ilustrar sermones. Miami: Editorial Portavoz. 2001.
Páginas web:
https://www.youtube.com/watch?v=e7bNG8xa2Xc
https://www.salvosporgracia.com/el-mensaje-cristo-centrico
Todas las citas corresponden a la version Reina valera 1960, salvo excepciones
mencionadas en el texto.
74
GUIA DE ESTUDIO
Descripción
El curso es una herramienta muy útil para poder desarrollar el ministerio de
predicación de una manera eficaz. El objetivo es ayudar al predicador o ministro a
desenvolverse en el púlpito para edificación de la iglesia y para la gloria de Dios. Las
lecciones mismas son de carácter más bien prácticas en el sentido de los principios que
presenta. Tratará como objetivo que el predicador pueda recordar y aumentar su
capacidad de desarrollar el arte de predicar.
Es importante que junto con las lecciones el ministro pueda desarrollar

diariamente cada principio o punto establecido en el curso, para ello fue escrito. Las dos
primeras lecciones tratan sobre la predicación y el predicador, y las lecciones
subsiguientes brindan herramientas para la preparación del predicador antes de subir al
púlpito a dar el mensaje de parte y delante de Dios.
Exigencias del curso

El curso se ha diseñado en unidades (temas) de estudio, cada unidad se desarrollará en
las siguientes partes:
1) Lectura, estudio y reflexión del tema, comprendiendo los apuntes de clase y la lectura
de los capítulos asignados, guiados a través de la estructura interna.
2) Para la versión on-line: participación en el foro, respondiendo y aportando las
opiniones sobre los ítems planteados por el profesor. Para la versión presencial
participación en clase de forma activa y puntual.
3) Cada tema consta de un examen parcial, que deberá ser contestado por el alumno,
siguiendo los criterios establecidos por el Seminario para ello. Las preguntas serán
tomadas tanto del material de clase como de los datos propios del texto bíblico.
4) Lectura de 300 páginas en relación a uno o varios puntos del temario y presentación
de un informe de lectura, se presentará un informe de 3 – 4 páginas. (Para los alumnos
de Máster, la lectura será de 600 páginas, se presentará un informe de 5 -6 páginas)
5) Investigación y redacción de un trabajo, con una extensión comprendida entre 15 o
20 páginas, previa consulta con el profesor, sobre cualquier temática relacionada con el
temario del curso.
75
6) Examen final.
Evaluación
1) Foros o Asistencia 15%
2) Informe de lectura 20 %.
3) Proyecto 30 %.
4) Cuestionarios 15%.
5) Examen final 20%.
76
BIOGRAFÍA
Guillermo Gabriel Bonnet: nací el 30 de septiembre de 1979 en Concepción del

Uruguay, Entre Ríos, Argentina.
En abril del 2011 contraje matrimonio con Viviana Noemí Euler de la misma
ciudad natal. Juntos tenemos dos hijas llamada: Carolina Abigail Bonnet, nacida en
noviembre del 2014 y Hanna Nicole Bonnet, nacida julio de 2019.
He sido llamado al ministerio en el año 2000, y en marzo de 2006 comencé mis

estudios teológicos en I.T.I.E.C (Instituto de Teología de la Iglesia Evangélica
Congregacional, hoy actualmente I.S.I.E.C (Instituto Superior de la Iglesia Evangélica
Congregacional) culminándolos en él, a fin del año 2010.
He realizado Materias para la Maestría en Teología en F.I.E.T (Facultad

Internacional de Estudios Teológicos).
Con una gran Expectativa seguí la Maestría en Teología en MINTS (Miami

International Seminary) de la cual me he recibido, y con gratitud a Dios y su fidelidad,
acabo de terminar en dicho Seminario la Maestría en Divinidades, hallándome,
cursando el Doctorado en Ministerio, con gran expectativa de aprender más, y servir
mejor a mi Señor y Dios, y a su iglesia.
Actualmente me desempeño como; pastor principal en la Iglesia Evangélica

Congregacional de Oberá, Misiones, Argentina.
Me encuentro colaborando como profesor en las materias: Ética, Introducción a

la Biblia, Predicación Expositiva, Cartas generales, Apocalipsis y Exégesis del Nuevo
Testamento en el I.T.B.M (Instituto Teológico Bautista de Misiones) de la misma
ciudad.
Además, agradecido a Dios; estoy trabajando vía Online como facilitador: En

MINTS y en I.S.I.E.C (Instituto Superior de la Iglesia Evangélica Congregacional).
77
Por sobre todo lo nombrado, quiero dar gracias a Dios por su gran bondad hacia
mi vida, familia y ministerio. Por la pasión que me dio para amar el estudio de su
Palabra maravillosa, y el deseo intenso de predicarla para su gloria, y de ser un servidor
y colaborador para que otros hermanos en distintos lugares puedan amar a Dios y
predicar fielmente su Palabra.
Sin lugar a duda eternamente agradecido a mi esposa e hijas que me apoyan en

este ministerio, a mis padres que siempre me enseñaron a ver el servicio como un gran
don de Dios, a mi director académico: Jaime Morales Herrera, que siempre estuvo
presente y ayudándome ante cada necesidad, y a mi Dios a quien sirvo, me deleito en Él
y le estoy eternamente agradecido. Guillermo Bonnet.
78

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Guillermo Gabriel Bonnet

Seminario Internacional de Miami

Miami International Seminary

14401 Old Cutler Road

305-238-8121 ext. 315

Mi deseo es que usted cómo estudiante pueda encontrar en estas páginas,

En esta lección estaremos tratando el llamado de Dios a la predicación y la

El primer elemento mencionado es quien avala, garantiza o certifica la función

II. EL LLAMADO DE DIOS

El llamado de Dios implica una responsabilidad de representar correctamente a

Spurgeon en su libro “Discurso a mis Estudiantes” dice lo siguiente: “Todo

Otra anécdota que encontramos en el libro: “Discurso a mis estudiantes” es

Para cumplir con el llamado y no desgastarnos, debemos estar siempre en la

En cuanto al cuidado de sí mismos y al tiempo, muchos ministros de la

Es como se dijo anteriormente, si el hacha pierde el filo es el trabajo más

En el ministerio de la predicación, nos encontraremos con distintos escenarios

El estar siempre en la presencia de Dios y pedirle que analice nuestro corazón

La oración en el predicador y ministro es crucial, ningún ministerio será efectivo

Le preguntaron una vez al predicador M'Cheyne con respecto a una predicación

Los grandes predicadores y hombres de Dios nunca descuidaron la intimidad con

Dios no nos concederá grandes mensajes, ni grandes impactos en donde

Si usted tuviera que presentarse a una entrevista de trabajo, si es de suma

En este momento, pensado en la prioridad de la oración en la vida del predicador,

Nunca es tarde para darle prioridad a este elemento de la dinámica de la predicación

PREGUNTAS PARA LA LECCIÓN 1

II. LECTURA Y VALORIZACIÓN DE LA PALABRA

Todo predicador debe valorizar el hecho de la lectura de la Palabra de Dios. Es

Un pasaje medular sobre el poder de la Escritura, y el aporte que hace al

Teniendo en cuenta esta realidad sublime, maravillosa al leer, quisiera dejar un

El poder de Dios en la Palabra escrita es incalculable, por lo tanto, no debemos

En una breve frase de Spurgeon vemos el valor de enseñar correctamente por

El ministerio de predicación necesita de lectores asiduos, ningún ministro que no

El ser un lector asiduo de la Escritura nos permite tener convencimiento de

La Palabra de Dios corrige. Esto significa que rectifica la verdad o si hay un

En cuanto a la importancia de la lectura, con el objetivo de la preparación de

Luego de este breve panorama del poder y utilidad de la Escritura, veremos la

III. VIDA DIARIA

En el caso del pastorado puertas adentro en la iglesia, las ovejas necesitan un

El pastor Miguel Núñez en su libro “De Pastores y Predicadores” nos deja un

En la vida diaria del predicador, la elocuencia, retórica, el carisma personal, no

El siguiente principio expuesto por Miguel Nuñez también es crucial como el

Ser parte de la realidad de los demás, tratando los asuntos espiritualmente y de

Nuestra diligencia y nuestra fidelidad en el servicio en la vida ordinaria o diaria,

En la siguiente lección estaré tratando los tópicos: convicción al predicar la

PREGUNTAS PARA LA LECCIÓN 2

Dentro de lo que he venido enseñando en este curso sobre: “Dinámica de la

II. SINCERIDAD Y SERIEDAD

La sinceridad y seriedad del ministro viene en consecuencia de su carácter, de

John Stott dice lo siguiente: “La sinceridad de un predicador consta de dos

Creo que es oportuno en este momento, hablar de lo que significa la palabra

Un heraldo era una persona importante en el sentido de quien representaba, y de

El pastor Miguel Ñunez, nos comparte un principio medular a la hora de

Habiendo compartido lo que representa la sinceridad y seriedad del ministro,

III. PRIORIDADES DEL MINISTRO

Algunos se preguntarán, porque hablar sobre las prioridades en la vida del

Necesitamos redimir el tiempo, aprovechar bien el tiempo. Tener un propósito

Los discípulos cuando se encontraron en crecimiento en la iglesia primitiva

No perdamos de vista la vigilancia de nuestra vida en cuanto a prioridades.

Mosley en su libro nos da un testimonio de lo que puede suceder en la vida

En esta lección trataremos los siguientes puntos: El asunto, el texto a elegir, y la

II. ASUNTO O TEMA

Este tema es importantísimo por el hecho de que de esto depende la orientación

1. Es importante para todo ministro, tener un_ de