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ARTÍCULO ORIGINAL

ONLINEFPRIMERA

Colgajo giratorio lateral crural

en rinoplastia funcional
Fazil Apaydin, MD

Objetivo:Para utilizar el cartílago recortado como material de
soporte para las válvulas internas y externas.
Métodos:La técnica del colgajo lateral crural turn-in (LCTF)
consiste simplemente en hacer un recorte cefálico del
pilar lateral y convertirlo en un bolsillo creado debajo del
pilar lateral restante. Participaron en este estudio 24
pacientes con pilares laterales mayores de 12 mm en los
que se aplicó esta técnica. El cartílago recortado se usó
para remodelar y/o sostener el pilar lateral y la válvula
interna manteniendo intacta la voluta. El apoyo y
éxito. La válvula interna también se mantuvo abierta
manteniendo intacta el área de la voluta, especialmente en 1
paciente con pilar lateral cóncavo en quien esta técnica ayudó a
ampliar el ángulo de la válvula interna.
Conclusiones:Este estudio muestra que la LCTF se puede utilizar
para remodelar y agregar estructura a la columna lateral y para
suspender la válvula interna. Si bien es una técnica poderosa por
sí misma en la rinoplastia funcional, debe combinarse con otros
métodos, como los colgajos/injertos ensanchadores o los
listones alares, para obtener el máximo resultado funcional.

R
suspensión de la crura lateral “sándwich” ayudó no sólo a
prevenir la estenosis del ángulo valvular interno sino
también a ensancharlo en algunos casos.
Cirugía Plástica Arco Facial. 2012;14(2):93-96.
Resultados:El LCTF se ha utilizado en 24 pacientes para Publicado en línea el 17 de octubre de 2011.
remodelar y/o agregar estructurael
a tpilar lateral con gran doi:10.1001/archfacial.2011.798

LA HINOPLASTIA ES POR LEJOS LA La concavidad del pilar lateral puede ser un

operación más desafiante en
cirugía plástica facial, y la
cirugía de punta nasal también
se acepta como la más
parte difícil de ella. La razón principal de la
dificultad de la cirugía de la punta nasal es la
cantidad de variantes y condiciones patológicas
que se pueden encontrar, mientras que una
diversidad similar no se puede ver en la cirugía
del tercio medio y superior de la nariz y el
tabique nasal. La principal estructura que da
forma y función al ala es el pilar lateral. Por lo
tanto, su forma, orientación y elasticidad son
muy importantes a este respecto, y todos los
principales mecanismos de soporte de la punta
nasal se reúnen en y alrededor de los pilares
laterales.1
Tradicionalmente, el recorte cefálico de los pilares
laterales es una de las principales maniobras
realizadas durante la rinoplastia por muchas
razones, como dar una apariencia más estética al
ala y aumentar la rotación de la punta nasal. La
porción cefálica resecada no suele utilizarse como
problema problemático tanto estética como
funcionalmente. Para superar este problema, muchos
autores han presentado y utilizado con éxito muchas
técnicas. Una técnica favorita es dividir el pilar lateral
verticalmente de 2 a 3 mm lateral al domo, voltearlo y
suturarlo nuevamente en su lugar o reemplazar cada
pieza contralateralmente para mantener los bordes
cefálico y caudal en el original.1También se puede usar
un injerto de puntal crural lateral para enderezar el
pilar lateral cóncavo.2Se puede utilizar un injerto crural
lateral solo para rellenar la concavidad del pilar lateral.
También se ha descrito el uso de suturas de
colchonero para solucionar este problema.3
La convexidad de los cruracales laterales dan
un desagradable aspecto voluminoso a la punta
nasal. La sutura Domal es la técnica más utilizada
para cambiar esta forma.4Cuando esta sutura no es
suficiente, se puede usar una sutura transdomal
como complemento adicional.1
Se puede usar un injerto de puntal crural lateral para
cambiar la convexidad.2También se ha descrito la
sutura transversal crural lateral para resolver este

Afiliación del autor:Departamento de material de injerto; sin embargo, incluso si no es lo problema.5La debilidad estructural de los pilares
Otorrinolaringología, Facultad de suficientemente fuerte para usar como injerto laterales puede provocar el colapso de la pared alar
Medicina de la Universidad de Ege, estructural, puede usarse como material de durante la respiración, lo que se puede corregir
İzmir, Turquía. camuflaje. mediante el uso de injertos de puntal crural lateral,

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7-
12

8m
-1

m
4m
7-

m
8m

m
m

mm

7m
12
Figura 1.La ilustración esquemática de la técnica quirúrgica. A, El recorte cefálico suele ser la resección de la mitad medial del pilar lateral dejando al menos 7 mm de
cartílago en su lugar (área sombreada). En la técnica modificada presentada aquí, se hace un corte lineal en el pilar lateral como se muestra. B, El ancho del pilar lateral
debe ser de al menos 12 mm para crear un colgajo cruzado lateral crural. C, El revestimiento interno del pilar lateral se diseca con cuidado, dejando 1 a 2 mm adheridos
caudalmente. Se usa un calibrador para medir 7 mm y se hace una marca lineal como se muestra en el panel A. D. La porción cefálica se gira hacia adentro después de
un corte parcial y se sutura en forma de sándwich con tres o cuatro suturas de PDS 5-0. E, La preservación del área de la voluta ayuda a suspender la porción caudal del
cartílago lateral superior.

injertos crurales laterales y/o listones alares.6,7En este estudio se podría ser soportado en casi toda su longitud. A continuación, la piel
presenta una técnica que puede superar algunos de los problemas desprendida se suturó al pilar lateral con suturas de colchonero Vicryl
estructurales de los pilares laterales antes mencionados. rápidas 5-0 para cerrar el espacio muerto y ayudar a que la piel se volviera
a adherir al pilar lateral.

MÉTODOS
RESULTADOS

Esta técnica se utilizó en 24 casos (13 mujeres y 11 hombres) que

fueron intervenidos desde diciembre de 2008 hasta enero de 2011.
La duración media del seguimiento fue de 14 meses (rango, 8-24
meses). La edad media fue de 27 años (rango, 19-50 años).
Todos los pacientes fueron operados bajo anestesia general.
Después de aplicar el anestésico local en los sitios de incisión y los
planos de disección, se realizaron una incisión en V invertida e
incisiones marginales. El colgajo columelar se elevó utilizando unas
tijeras curvas afiladas. Luego, la columela, las cúpulas y los pilares
laterales se diseccionaron para liberarlos de los tejidos blandos
circundantes. Al hacerlo, se pudo obtener una vista sin distorsiones
de los cartílagos laterales inferiores, lo cual fue muy importante en la
toma de decisiones. En este punto de la operación, se evaluaron la
forma, la orientación, la elasticidad, el grosor, el ancho y la simetría
de los pilares laterales. En casi todos los pacientes estuve dispuesto a
dejar al menos 7 mm de pilar lateral en ambos lados en mujeres y 8
mm en hombres. Para aplicar la técnica aquí presentada, el ancho del
pilar lateral tenía que ser de al menos 12 mm (Figura 1). En esta
técnica, todos los tejidos blandos sobre el pilar lateral fueron
disecados para exponer todo el pilar lateral bajo exposición directa.
La unión del pilar lateral con el cartílago lateral superior (ULC)
también se cortó en los primeros 5 casos. El área de la voluta se
mantuvo intacta en casos posteriores para no perturbar el ángulo
interno de la válvula nasal. La piel subyacente del pilar lateral se
inyectó primero con clorhidrato de lidocaína que contenía adrenalina
(1:100.000) para disección hidráulica y hemostasia. Luego se
diseccionaba desde el pilar lateral, acercándose desde el borde
cefálico manteniendo de 1 a 3 mm de piel adherida al borde caudal.
Se utilizó un pie de rey para medir una distancia de 7 a 8 mm desde el
borde caudal del pilar lateral (el ancho a dejar atrás),Figura 2). Se
realizó un corte parcial en la superficie exterior de la cruz lateral
siguiendo una línea recta con una hoja del n.° 11, se volteó hacia
adentro la porción cefálica libre y se suturó el cartílago plegado con
tres puntos de colchonero 5-0 PDS, dejando el nudo en la cara lateral
del pilar lateral. La primera sutura se colocó en la línea media, la
segunda más cerca de la cúpula y la tercera más cerca del margen
lateral. Cuando se anudaron estas suturas, ambos segmentos del
pilar lateral se unieron en forma de sándwich. El ancho del cartílago
que quedaba era generalmente de 7 a 8 mm, y el ancho del cartílago
girado era de al menos 4 a 7 mm, lo que significa que la crus lateral
El colgajo lateral crural turn-in (LCTF) se ha utilizado en 24
casos. En 12 de estos pacientes se encontró que los pilares
laterales tenían concavidad (figura 3), mientras que 7
presentaron convexidad. En 16 de estos 19 pacientes, la
forma de los pilares laterales se convirtió en una ligera
convexidad, lo que era un resultado deseable. En los 3
restantes quedó ligeramente convexo por la forma irregular
del pilar lateral. En 5 de los casos, los pilares laterales eran
muy delgados y débiles, y el colgajo doblado se utilizó para
reforzar los pilares laterales restantes mientras se refinaba
el ala. En estos 19 pacientes, los pilares laterales eran
moderadamente gruesos en 15 pacientes, mientras que
eran notablemente gruesos en 4 pacientes. La corrección
más llamativa se observó en este último grupo porque el
colgajo doblado hacia adentro era lo suficientemente fuerte
como para eliminar la concavidad o convexidad extrema. En
1 de estos pacientes con pilar lateral cóncavo, tras la
aplicación de LCTF, la concavidad resultó ser una convexidad
leve,
En los 5 primeros casos, también se desprendió la zona de la
voluta para girar hacia dentro la pieza recortada cefálicamente
en toda la longitud de la columna lateral. En los 19 casos
restantes, el área de la espiral se mantuvo intacta para evitar un
posible colapso en el ángulo interno de la válvula por
contractura de la cicatriz. En 1 caso en el que el paciente
presentó un colapso alar severo unilateral durante la respiración
tranquila, tras la aplicación de LCTF persistió un colapso leve,
aunque no provocó ningún tipo de obstrucción nasal.
COMENTARIO
El pliegue hacia adentro de la porción cefálica del pilar lateral
para sostener el borde alar fue descrito en 2007 por Tellioglu et
al.8quienes reportaron resultados satisfactorios en todos los
casos. Murakami et al.9también reportaron una técnica similar
para reforzar el cartílago alar después del recorte cefálico. La
técnica descrita aquí fue adaptada de estos 2 estudios

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mi F GRAMO H

I j k

Figura 2.Un caso demostrativo de un paciente con pilar lateral hipercóncavo que fue tratado con un colgajo de pilar crural lateral. A, En la vista frontal, se puede ver fácilmente la
concavidad de los pilares laterales. B, La concavidad de los pilares laterales también se puede ver durante la cirugía. C, La vista superior también muestra una concavidad prominente de
los pilares laterales. D, Se diseca y retira la piel debajo de los pilares laterales, manteniendo intacta la parte caudal. E, Se utiliza un calibrador para medir de 7 a 8 mm de pilar lateral, que
se dejará en su lugar. F, Tras marcar la línea de incisión lineal, se realiza un corte parcial a modo de recorte cefálico. G, El segmento cortado se gira hacia adentro sobre el pilar lateral
restante. H, Después de suturar entre sí los 2 segmentos opuestos del pilar lateral, la concavidad se ha convertido en una convexidad. I, En la vista superior, se puede ver la diferencia de
forma en ambos lados, donde el lado derecho es convexo y el lado derecho intacto es cóncavo. J, Se ha aplicado un colgajo crural lateral giratorio en ambos lados y la concavidad se ha
transformado en convexidad. K, El resultado final también se puede ver en la vista superior.

A B C D

mi F GRAMO H

I j k L

Figura 3.El cambio de forma se puede ver cuando se comparan las imágenes preoperatorias y postoperatorias. Vistas frontal (A y B), lateral (CF), oblicua (GJ) y basal (K y
L).

pero modificada a partir del primer caso. ¿Cuál fue el motivo de
esta modificación? Se pensó que la columna lateral podría
sostenerse si el recorte se realizaba de forma lineal, y el colgajo
doblado hacia adentro podría ser lo suficientemente largo y
ancho para sostenerse en toda su longitud. Es por eso que
esta técnica se utilizó solo en los casos en que el ancho de la columna
lateral era de al menos 12 mm. Teniendo en cuenta que esta
modificación podría provocar un colapso en el ángulo de la válvula
nasal, se realizó una segunda modificación, manteniendo intacta la
zona de la voluta. De hecho, no se observó colapso en ninguno de los

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A B
1 2 3
Figura 4.El resultado de un colgajo cruzado lateral crural en 3 tipos crurales diferentes. A,
Colgajo giratorio crural lateral que muestra la sutura (línea punteada) (la línea roja continua
muestra dónde se tomó la sección transversal de la columna lateral). B, Cambios en esta sección
transversal. La fila superior muestra las formas de los pilares originales; las filas siguientes
ilustran las etapas del procedimiento. El triángulo rojo marca el nivel de la incisión. En la mayoría
de los casos, los pilares laterales eran convexos (tipo 1). Después de la aplicación del colgajo
cruzado lateral crural, la forma se volvió más favorable. En caso de que la forma fuera cóncava
(tipo 2), la forma resultó ser más plana después del procedimiento. En los raros casos en los que
el cuerpo del pilar lateral era cóncavo y la porción cefálica convexa (tipo 3), el resultado final no
fue tan favorable como en las 2 primeras situaciones.
pacientes, incluso en los primeros 5 pacientes, durante el
seguimiento. Además, la segunda modificación se ha utilizado
como medida preventiva, evitando el colapso hacia adentro y, en
ocasiones, proporcionando una tracción lateral de la parte
caudal de los ULC. Se encontró que esta modificación era muy
útil, especialmente en los casos en los que se eliminó una joroba
y se liberaron los ULC del tabique nasal.
La forma del pilar lateral puede ser convexa, cóncava, plana o
una mezcla de todas ellas. Uno de los principales puntos fuertes
de esta técnica parece ser la capacidad de suturar 2 piezas
opuestas para enderezar el pilar lateral independientemente de
su forma. Aunque en teoría parecía una característica muy
atractiva, en algunos casos no funcionó bien. Hubo varias
razones para esto: (1) el pilar lateral no es una elipse simétrica, y
los bordes superior e inferior pueden mostrar una configuración
diferente, (2) el colgajo girado hacia adentro suele ser de 1 a 3
mm más estrecho que el caudal parte, y (3) el pilar lateral puede
ser demasiado débil para reforzar otra pieza. La fuerza del
cartílago alar suele ser una condición subestimada en la
literatura. Cuando se tuvo en cuenta la fuerza del cartílago, se
encontró que era débil en 5 casos, moderado en 17 y grueso y
fuerte en 4. Los cartílagos más débiles podrían reforzarse con
LCTF sin ningún efecto remodelador. En los 19 pacientes
restantes, en 16 se obtuvo una forma más deseable mediante
esta técnica, y en 3 pacientes persistió una ligera concavidad por
una variante en la forma alar (Figura 4). Cuando estos 3 pacientes
fueron evaluados de manera crítica al observar las imágenes
intraoperatorias y el seguimiento posoperatorio, se pensó que
los injertos de puntales crurales laterales podrían ayudar más a
deshacerse de la concavidad.2Otra opción también podría ser el
uso de un procedimiento de abdominoplastia cefálica,
especialmente en este tipo de variaciones anatómicas.10Por lo
tanto, las formas de los segmentos de cartílago suturados entre
sí y la forma resultante del pilar lateral intercalado deben
evaluarse minuciosamente en cada caso particular.
Existen diferentes opciones quirúrgicas para la remodelación
y/o reestructuración alar descritas en la literatura. El más
utilizado y sencillo de todos es el recorte cefálico y su-
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técnicas de tura. En casos de pilares cóncavos excesivos, “flip
flop” crural lateral,1listones de alarma,6,7injertos de puntal crural
lateral,2injertos crurales laterales,2y suturas de colchonero
crurales laterales3son todas opciones viables. La LCTF descrita
aquí demostró ser una técnica multipropósito para refinar,
remodelar y reestructurar en casos en los que un resultado
similar podría obtenerse solo con la combinación de las técnicas
mencionadas anteriormente.
En 1 caso en el que el paciente presentó un colapso alar
unilateral severo durante la respiración tranquila, tras la
aplicación de LCTF, persistió un colapso leve, aunque no estaba
provocando ningún tipo de obstrucción nasal. Cuando se realizó
un análisis crítico de los videos e imágenes preoperatorios e
intraoperatorios, me di cuenta de que el epicentro del colapso
en este caso era más lateral, más allá de los márgenes del pilar
lateral. Aunque el uso de LCTF ayudó en este caso, la adición de
un listón de alarma sería más útil. Por lo tanto, aunque la LCTF
puede resolver muchos problemas relacionados con el ala, un
cirujano no debe dudar en utilizar injertos complementarios
durante la cirugía, según las necesidades del paciente.11
En conclusión, el LCTF, tal como se describe en este documento,
se puede usar para refinar, remodelar y agregar reestructuración a la
base lateral. Al hacerlo, es una técnica útil para reforzar la válvula
externa. En las rinoplastias de reducción, no solo ayuda a prevenir el
colapso sino también a ampliar el ángulo de la válvula nasal. En
muchos casos, se recomienda enfáticamente combinar la LCTF con
otros procedimientos de soporte de válvulas internas y externas,
como colgajos/injertos ensanchadores, listones alares, injertos de
puntal crural lateral e injertos de borde alar.
Aceptado para publicación:8 de septiembre de 2011.
Publicado en línea:17 de octubre de 2011. doi:10.1001/
archfacial.2011.798
Correspondencia:Fazil Apaydin, MD, Departamento de
Otorrinolaringología, Facultad de Medicina de la Universidad de Ege,
Bornova 35100, İzmir, Turquía ( fazil.apaydin@ege.edu.tr ).
Divulgación de información financiera:Ninguno reportado.
Contribuciones adicionales:Me gustaría agradecer a
Yeliz Tuna, PhD, la fotógrafa médica, y a Merve Ulug,
PhD, la ilustradora médica, por su ayuda.
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