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Angor estable
La angina es un dolor o molestia en el pecho que se siente cuando no hay suficiente irrigación
sanguínea al músculo cardiaco. Este músculo cardiaco necesita el oxigeno que transporta la
sangre. La angina puede sentirse como una presión o un dolor opresivo en el pecho. Puede
parecerse a una indigestión
Este aumento de la resistencia coronaria no tiene por qué tener consecuencias negativas en los
pacientes con lesiones coronarias fijas; de hecho, en estos casos el flujo coronario podría verse
dirigido hacia las regiones irrigadas por los vasos en que hay lesiones, ya que la competencia
representada por la vasodilatación de los territorios sanos sería menor. En todo caso, se ha
demostrado que estos agentes redistribuyen el flujo desde el subepicardio hacia el
subendocardio, que es la región más vulnerable en caso de isquemia.
Angina de pecho. Los betabloqueantes reducen las necesidades de oxígeno del corazón al
reducir la frecuencia cardiaca, la presión arterial y la fuerza que ejerce el corazón.
Aumentan el flujo de sangre a las arterias coronarias, por lo que consiguen reducir los
síntomas de angina de pecho. Evitan el remodelado cardiaco y producen una mejoría de la
función ventricular
Prevención de nuevos infartos. En las personas que han tenido un infarto de miocardio,
los betabloqueantes son capaces de reducir el riesgo de tener un nuevo infarto o de
morirse por causa cardiaca
Arritmias. Los betabloqueantes son eficaces para el control de ciertos tipos de arritmia,
especialmente aquellas que se acompañan de taquicardia (aumento de la frecuencia
cardiaca)
Insuficiencia cardiaca. Los betabloqueantes son un pilar fundamental del tratamiento de
la insuficiencia cardiaca. Cuando el corazón ha perdido fuerza, los betabloqueantes
pueden mejorar esta situación además de reducir el riesgo de muerte, las tasas de
hospitalización y aliviar los síntomas de insuficiencia cardiaca
Hipertensión arterial. Los betabloqueantes son fármacos que reducen la presión arterial y
se pueden utilizar para el tratamiento de personas hipertensas, solos o en combinación
con otros fármacos
Los bloqueadores beta de tercera generación son fármacos con propiedades vasodilatadoras
adicionales y, por esta característica, se denominaron «bloqueadores beta vasodilatadores». Esta
actividad vasodilatadora es beneficiosa porque reduce la resistencia vascular periférica al tiempo
que mantiene o mejora el gasto cardiaco, el volumen sistólico y la función del ventrículo izquierdo.
Los compuestos que pertenecen a este grupo pueden ser selectivos o no selectivos para el RA-β1,
pero muestran mecanismos adicionales, como la actividad antagonista del RA-β1 (carvedilol y
labetalol) y la liberación de óxido nítrico (NO) (nebivolol), que explica su actividad vasodilatadora.
Por otra parte, los bloqueadores beta vasodilatadores tienen efectos neutros (labetalol y
nebivolol) o beneficiosos (carvedilol) en el metabolismo de la glucosa y los lípidos, mientras que la
mayoría de los estudios clínicos indican que los bloqueadores no vasodilatadores tienden a un
efecto negativo en los parámetros de glucosa y lípidos 36 (tabla 1 y tabla 2).
β1 Corazón:
β2 Músculo Liso:
Hígado Glucogenolisis
Los betabloqueantes de receptores duales alfa y beta son una subclase de betabloqueantes que se
utilizan habitualmente para tratar la hipertensión. Los fármacos de esta clase incluyen carvedilol
(Coreg), labetalol (Trandate) y dilevalol (Unicard)
Los receptores beta que bloquea son: 1. Beta-1 del corazÛn. 2. Beta-2 del m˙sculo liso vascular. 3.
Beta-2 del m˙sculo liso bronquia
Principales indicaciones de los betas bloqueantes
- Angor estable.
En la angina estable se basa en primer lugar en una reducción de las demandas metabólicas
de O2. Estos agentes reducen la frecuencia cardiaca en reposo; pero además reducen la
tensión arterial y el aumento de contractilidad inducida por la estimulación adrenérgica, con
lo que tienen acciones múltiples sobre los diversos factores responsables del consumo
miocárdico de O2
Contraindicaciones
- Pacientes con Epoc o asma bronquial importante.
El bloqueo de los receptores β 2 en el músculo liso bronquial puede conducir a un
aumento en la resistencia de las vías respiratorias
- Bloqueo A-V de 2º grado o mayor.
Reducen la frecuencia cardiaca al actuar sobre el nodo sinusal. El bloqueo beta
supone, además una reducción en la velocidad de conducción en el nodo AV, por lo
que aumenta el espacio PR del EKG. Elevan la resistencia vascular periférica
inicialmente, lográndose su disminución tras la administración crónica de estos
fármacos.
- Enfermedad vascular oclusiva periférica (claudicación intermitente).
- Diabetes insulinodependientes, por que los beta bloqueadores favorecen la hipoglucemia
que puede ser mucho más riesgoso que un hiperglucemia. bloquear la descarga
catecolamínica que se produce en las hipoglucemias, agravándolas
Los bloqueadores beta de tercera generación son fármacos con propiedades vasodilatadoras
adicionales y, por esta característica, se denominaron «bloqueadores beta vasodilatadores».
Esta actividad vasodilatadora es beneficiosa porque reduce la resistencia vascular periférica
al tiempo que mantiene o mejora el gasto cardiaco y el volumen sistólico. Los agentes de
tercera generación (carvedilol, bucindolol, nebivolol) tienen la ventaja de que producen
reducción de la poscarga
y tiene efecto vasodilatador. La prominente acción vasodilatadora del carvedilol administrado por vía oral, provoca
síntomas ortostáticos al iniciar la terapia, la mayoría de los cuales son autolimitados o pueden ser manejados con pequeñas
dosis de diuréticos.