La cultura organizacional es el conjunto de creencias, valores y prácticas
compartidas que permite a un grupo de personas enfocar todas sus actividades hacia una misma meta. Representa una ayuda para el cumplimiento de los objetivos de las entidades correspondientes.
La cultura organizacional debe ser lo suficientemente flexible para adaptarse
según el país donde se encuentra. En el caso de que se trate de una marca trasnacional o internacional puede generar manifiestos que sean de carácter universal.
Gracias a la cultura organizacional, fortaleces los lazos de identidad corporativa
entre tres actores principales: la marca, el equipo de trabajo y los clientes. Además, logras proyectar estabilidad y elevas los niveles de calidad de cada actividad.
Para qué sirve la cultura organizacional
La cultura organizacional es lo que caracteriza a la empresa, su forma de ser y actuar hacia dentro, y cómo esta personalidad se refleja hacia fuera, de acuerdo con sus creencias y valores. Está alineada a su estrategia de negocio, siendo el diferenciador entre los consumidores de sus productos y servicios.
Contar con una cultura organizacional permite detectar al interior problemas,
porque estás brindando a tus equipos una ideología positiva, clara y efectiva para su correcto funcionamiento e impacto en su motivación, satisfacción y productividad. Así tus colaboradores se mantienen identificados, al tiempo que dotas a tu organización de una buena imagen dentro del mercado laboral, favoreciendo la retención de talento y, con él, las propuestas comerciales que se generen hacia fuera.
Tener una cultura organizacional es una guía de expectativas, comportamientos
y acciones, ya que la empresa cuenta con una postura clara, de la cual se desprenden opiniones o percepciones sobre asuntos particulares.
Tipos de cultura organizacional
A continuación, te compartiremos algunos modelos basados en la clasificación que realizó el psicólogo social Roger Harrison sobre los tipos de cultura organizacional: 1. Cultura organizacional orientada al poder Su objetivo es la competitividad empresarial, por eso los valores y la cultura en general están orientados a destacar su posición en el mercado. El liderazgo empresarial es su principal vertiente.
Esta cultura ve al empleado como quien presta un servicio. Llama a formar
grupos de trabajo entre los directivos de área únicamente cuando surgen problemas; fuera de estos incidentes, el trabajo es individual y la información de cada área es privada.
2. Cultura organizacional orientada a las normas
Busca la estabilidad y seguridad de la compañía con un cumplimiento estricto de las normas y reglas internas; por lo tanto, es común que se apliquen sanciones a todo el que las infringe. Se apega a los procesos, protocolos y procedimientos para garantizar un funcionamiento correcto, por lo que establece funciones y responsabilidades. 3. Cultura organizacional orientada a los resultados Su objetivo es la eficacia y la optimización de los procesos laborales; además, prioriza las metas a corto plazo y fomenta el ahorro de recursos, tanto materiales como humanos.
4. Cultura organizacional orientada a las personas
Esta cultura se centra en el desarrollo personal y profesional de su equipo de trabajo, fomenta valores sociales e incita a la motivación y la creatividad. También es incluyente y busca la satisfacción de los clientes y de los colaboradores.