ENSAYO

YITZHAK DAVID MERCADO FLOREZ

FILOSOFIA
CENTRO DE COMERCIO
11-02
PIEDECUESTA
2023
 ¿Por qué y para qué filosofar?

Por qué y para qué filosofamos, cuando nos preguntamos por qué filosofamos lo que
estamos haciendo es tratar de dar una explicación, una justificación, una argumentación,
motivos, razones o elementos que nos permitan dar cuenta de por qué hacemos algo, cuáles
son los resortes últimos que permitirían dar cuenta de en este caso la realización o la
pervivencia de la filosofía.

Es interesante preguntarse por qué filosofar parece más bien dar cuenta de la posibilidad de
no hacerlo, es decir porque filosofamos cuando en realidad podríamos no hacerlo, lo cual
nos pone de cara ante un rasgo de la filosofía que es que la filosofía parece responder en
última instancia al deseo a la voluntad a la libertad de llevar adelante o a cabo un ejercicio
motivado simplemente por el deseo de hacerlo.

Evidentemente no hay una única respuesta a la pregunta porque filosofar y las respuestas
que uno podrá dar son de tipo personal, de tipo histórico, porque es que la filosofía sigue
siendo vigente, porque es que la filosofía se vuelve un ejercicio necesario, hay múltiples
respuestas a esta pregunta.

Porque filosofar hoy, porque seguir filosofando, porque seguir haciendo filosofía sobre
todo en un contexto como el de la actualidad desde el comienzo del siglo XXI y finales del
siglo XX y acá si encontramos otro elemento que permite caracterizar al trato al trabajo
propio de la filosofía y es que la filosofía es una herramienta inseparable de los contextos
de crisis, uno diría que siempre hubo contextos de crisis, por ende también siempre hubo
reflexiones de tipo filosófico, la filosofía emerge con mayor virulencia y con mayor poder
crítico cuando las certezas se desvanecen cuando aparecen las crisis políticas, económicas,
culturales, sociales.

La filosofía es una gran herramienta para pensar en contextos donde aparecen emergentes
que modifican nuestra relación con el entorno y la aceleración del tiempo, las tecnologías y
los problemas ecológicos, todas las grandes transformaciones y los grandes datos que
acontecen en nuestro entorno son objeto privilegiado de un análisis filosófico.

Entonces la idea de para qué filosofamos, no parece poder separarla del contexto en el cual
se lleva a cabo el propio ejercicio filosófico, entonces no hay un porqué de la filosofía pero
justamente lo que sí podemos decir es que el ejercicio de la filosofía se sostiene siempre y
cuando entendamos que su tarea es solidaria respecto de una reflexión en un contexto
histórico donde parece estar todo desmoronándose y en un proceso que reclama una
atención y un pensamiento fuertemente crítico y constructivo sobre qué es lo que nos está
aconteciendo.

Por qué y para qué, estas dos preguntas están ligadas porque para qué filosofamos la
pregunta de él para que ya no me pide una argumentación, ya no me pide una
razón o una explicación sino que él para que lo que me planteo con lo que me enfrenta es
con la finalidad, cuál es la utilidad cuál es el elemento que me permite dar cuenta de mi
motivación o mi sostén de este ejercicio filosófico y acá lo que encontramos es que la
utilidad de la filosofía es una utilidad muy particular.

En realidad esta pregunta no tiene una respuesta en concreto ya que cada persona tiene un
punto de vista distinto, la verdadera pregunta es porque seguimos filosofando, no hay un
porqué de la filosofía, pero hay que entender que siempre filosofamos, cuando nos
cuestionamos lo que está sucediendo.

Su utilidad es la de la sospecha, ya que su utilidad es no tener utilidad, porque nos hace

dudar de todo, por esto se puede decir que la filosofía no tiene una utilidad determinada.