Está en la página 1de 8

CONFLICTOS, CUESTIONES Y CONTIENDAS DE COMPETENCIA

1.- CONFLICTOS DE COMPETENCIA:

Son aquellos que se producen entre los poderes del Estado, ya que existen ciertas áreas
de confluencias donde no está clara la línea divisoria de competencias y se pueden
producir conflictos.

Conflictos de competencia entre el órgano jurisdiccional y el poder ejecutivo.

Sobre el particular tenemos que remitirnos a los artículos 53 N º 3 de la Constitución


Política de la República; Artículo 93 N º 12 de la Constitución Política de la República
y artículo 191 del Código Orgánico de Tribunales inciso 4.

El artículo 93 de la Constitución Política de la República fue modificado por la Ley de


Reforma Constitucional N º 20.050 de 26 de Agosto de 2005.

En base a dicha reforma, hoy en día al Senado le corresponde resolver los conflictos de
competencia que existan entre las autoridades políticas o administrativas y los tribunales
superiores de justicia, y al Tribunal Constitucional, los conflictos de competencia que
existan entre las autoridades políticas o administrativas y los tribunales inferiores de
justicia.

Son Tribunales Superiores de Justicia, no solo la Corte Suprema, y las Cortes de


Apelaciones, sino que también las Cortes Marciales y Navales.

Se encuentra derogado tácitamente, entonces, desde la reforma constitucional de 26 de


Agosto de 2005, el artículo 191 inciso 4 del Código Orgánico de Tribunales, que señala:
“Corresponderá también a la Corte Suprema conocer de las contiendas de competencia
que se susciten entre las autoridades políticas o administrativas y los tribunales de
justicia, que no correspondan al Senado”, toda vez que dicha competencia corresponde
hoy al Tribunal Constitucional, dada su calidad de ente jurídico independiente incluso
de la supervigilancia de la Corte Suprema.
2.- LAS CUESTIONES DE COMPETENCIA:

Las cuestiones de competencia pueden plantearlas las partes ante el propio tribunal que
está conociendo de un asunto y a quien estiman incompetente, por la vía de la
declinatoria, que lleva implícita la petición de que decline el conocimiento del asunto a
otro tribunal (Artículo 111 inciso 1 del CPC). También se puede plantear al tribunal que
uno estima competente, frente a la circunstancia de que otro tribunal que se estima
incompetente esté conociendo del asunto, esta forma se denomina, cuestión de
competencia por la vía de la inhibitoria (Artículo 102 inciso 1 del CPC)

La diferencia principal entre la declinatoria y la inhibitoria, es que en la primera se


plantea ante el tribunal al que se cree competente, y la segunda, ante el tribunal que se
cree incompetente.

En nuestro sistema está cuidadosamente regulado el sistema de la inhibitoria, y sobre el


particular debemos remitirnos a los artículos 101 a 112 del Código de Procedimiento
Civil, sin embargo no se encuentra regulada la vía declinatoria.

La vía de la declinatoria e inhibitoria, son recíprocamente incompatibles, de manera que


el planteamiento de una precluye la posibilidad de la otra. La preclusión es por el
ejercicio de una atribución legal incompatible (Artículo 101 inciso 2 del CPC)

Ahora bien, las cuestiones de competencia por inhibitoria o por declinatoria tienden a
reclamar de la competencia del tribunal que esté conociendo de un determinado negocio
judicial, sea ésta competencia absoluta o relativa. En otros términos, la cuestión de
competencia puede plantearse en razón del fuero, materia, cuantía o territorio.

En cuanto a su oportunidad para formularla, creemos que hay que aplicar los principios
generales, por regla general, la cuestión habrá de plantearla antes de hacer cualquiera
gestión en el juicio (cuestión de competencia en razón del territorio); y por excepción,
podrá hacerla en cualquier estado del mismo (en razón del fuero o materia).
El determinar que vía elegir va a depender de las circunstancias correspondientes y de
los recursos procesales que caben frente a un juez u otro.

2.1 Tramitación de la declinatoria: Acá solamente existe un tribunal en juego: el que


está conociendo del negocio judicial y al cual estimamos incompetente.

En consecuencia la declinatoria se propondrá ante el tribunal a quien se cree


incompetente para conocer de un negocio que le esté sometido, indicándose cuál es el
que se estima competente y pidiéndole se abstenga de dicho conocimiento (Artículo 111
parte 1ª del CPC)

Un presupuesto procesal indispensable para poder ejercer esta vía es indicar cual es el
tribunal que se cree competente, no bastando en consecuencia con señalar que se estima
incompetente al tribunal en la que se plantea.

La tramitación de la declinatoria se sujeta a las reglas establecidas para los incidentes


(Artículo 111 parte final CPC). Por consiguiente si se formula como cuestión previa a la
contestación de la demanda, revestirá el carácter de una excepción dilatoria (Artículo
303 N ° 1 del CPC); y si la planteamos en el resto del curso del juicio, revestirá el
carácter de incidente de nulidad de todo lo obrado, pero bien entendido que debe
tratarse de una incompetencia absoluta, pues si es relativa, o sea, en razón del territorio,
será rechazada porque se habría producido la prorroga de la competencia (Artículo 187
N ° 2 del COT)

Mientras se halle pendiente el incidente de declinatoria de competencia, se suspenderá


el curso de la causa principal, porque es un incidente de previo y especial
pronunciamiento, pudiendo el tribunal solo dictar providencias que tengan el carácter de
urgentes (Artículo 112 inciso 1 del CPC)

La apelación que se interponga en contra de la resolución que acoja o que niegue lugar a
la declinatoria es apelable en el solo efecto devolutivo.

En materia penal, la incompetencia de un Juez de Garantía se plantea por la vía de la


declinatoria como una excepción de previo y especial pronunciamiento en la audiencia
de preparación del juicio oral (Artículo 264 N ° 1 del Código Procesal Penal)1, debiendo
resolverse en la misma audiencia antes de la dictación del auto de apertura del juicio
oral, que determinará entre otros aspectos el Tribunal del Juicio Oral que ha de conocer
del juicio oral (Artículo 277 letra a) del Código Procesal Penal), pudiendo plantearse
cuestiones de competencia respecto de éste último tribunal solamente dentro de tercero
día desde que se notifique a los intervinientes la fecha del juicio oral, cuestión que sería
planteada por la vía de la declinatoria ante el mismo Tribunal del Juicio Oral en lo Penal
(Artículo 174 del Código Procesal Penal)

2.2 Tramitación de la inhibitoria: Esta tramitación se sigue ante dos tribunales, el


tribunal requirente que es aquel ante el cual se plantea la cuestión de competencia, y
cuya competencia se afirma; y el requerido, que es aquel que está conociendo del
negocio judicial y cuya competencia desconocemos.

En esta cuestión se intenta ante el tribunal a quien se cree competente, pidiéndole que se
dirija al que esta conociendo del asunto y que se cree incompetente, para que se inhiba y
le remita los autos.

Si el tribunal requirente niega lugar a la solicitud de inhibitoria, una vez ejecutoriada


esta resolución, la cuestión de competencia ha quedado definitivamente rechazada, y el
juicio seguirá adelante, en su curso normal, radicado ante el tribunal requerido.

Si el tribunal accede a la solicitud de inhibitoria, se dirigirá ante el que esté conociendo


del asunto, por medio de la correspondiente comunicación, con inserción de la solicitud
de parte y los demás antecedentes en que se funde su competencia (Artículo 104 del
CPC)

El Tribunal requerido, con los antecedentes, oirá a las partes que ante el interviene, y
con los documentos y demás antecedentes, accederá o negará lugar a ella. O sea que

1
Si el juez de garantía acoge la excepción de incompetencia, se produciría una situación que haría
imposible la persecución del procedimiento, por lo que sería apelable dicha resolución, de acuerdo a lo
dispuesto en el artículo 370 letra a) del Código Procesal Penal. Por el contrario, si se rechaza dicha
excepción, no habría apelación, y tampoco reposición, porque dictada en una audiencia oral (audiencia de
preparación del juicio oral), va a ser precedida de debate, lo que excluye la posibilidad de oposición en
conformidad al artículo 363 del Código Procesal Penal.
llegados los antecedentes debe dictar una resolución: “Traslado”, y una vez evacuados
los traslados: “Autos”

Si el tribunal accede y esta queda ejecutoriada, queda radicado el conocimiento del


asunto en el tribunal requirente.

Si el tribunal deniega, se pondrá en conocimiento del otro tribunal, y cada uno con
citación de la parte que gestiona ante él, remitirá los autos que corresponda, para
resolver la contienda positiva de competencia.

El tribunal respectivo, fallará, y oirá al Ministerio Público. La resolución que dicta el


tribunal superior es en única instancia, y lo resuelto debe comunicarse a ambos
tribunales en cuestión.

3.- LAS CONTIENDAS DE COMPETENCIA:

Las contiendas de competencia son cuestiones que se presentan entre tribunales, y estas
pueden ser:

a.- Positivas: Cuando dos o más tribunales pretenden ser competentes, o


b.- Negativas: Cuando dos o más tribunales pretenden ser incompetentes.

El Código Orgánico de Tribunales es cuidadoso en relación a cual es el tribunal


competente para conocer de las contiendas, lo que está regulado en los artículos 190 a
193 del mencionado código:

I. Contienda de competencia entre tribunales ordinarios (Artículo 190 del Código


Orgánico de Tribunales):

Las contiendas de competencia serán resueltas por el tribunal que sea superior común de
los que estén en conflicto.
Si los tribunales fueren de distinta jerarquía, será competente para resolver la contienda
el superior de aquel que tenga jerarquía más alta.

Si dependieren de diversos superiores, iguales en jerarquía, resolverá la contienda el que


sea superior del tribunal que hubiere prevenido en el conocimiento del asunto.

Los jueces árbitros de primera, de segunda o de única instancia tendrán por superior,
para los efectos de este artículo, a la respectiva Corte de Apelaciones.

II. Contiendas de competencia entre tribunales ordinarios y especiales (Artículo 190 del
Código Orgánico de Tribunales)

Sin perjuicio de las disposiciones expresas en contrario, las contiendas de competencia


que se susciten entre tribunales especiales o entre éstos y los tribunales ordinarios,
dependientes ambos de una misma Corte de Apelaciones, serán resueltas por ella.

Si dependieren de diversas Cortes de Apelaciones, resolverá la contienda la que sea


superior jerárquico del tribunal que hubiere prevenido en el conocimiento del asunto.

Si no pudieren aplicarse las reglas precedentes, resolverá la contienda la Corte Suprema.

III. Contiendas de competencia entre tribunales arbitrales y especiales:

Se aplica la misma normativa existente entre tribunales ordinarios y especiales, porque


el tribunal arbitral se homologa para estos efectos, a los tribunales ordinarios.

IV. Contiendas de competencia entre tribunales arbitrales:

Se aplican las mismas reglas que las contiendas de competencia entre tribunales
ordinarios, precisamente por la regla de la homologación.

V. Contienda de competencia entre tribunales especiales:

Si dependen de una misma Corte de Apelaciones, resuelve ésta.


Si dependen de diversas cortes de apelaciones, resolverá la que sea superior jerárquico
del tribunal que hubiera prevenido en el conocimiento del asunto.
Si no se puede aplicar esta regla, resuelve la Corte Suprema.

Regla Procedimiental: Las contiendas de competencia serán falladas en única instancia.


Además todo lo dicho anteriormente solamente es válido para los aspectos civiles, más
no para las causas penales que están sometidas a normas especiales, que serán
analizadas a continuación.

En materia procesal penal, las contiendas de competencia se encuentran reguladas en los


artículos 72 a 74 del Código Procesal Penal.

En el evento que exista una cuestión de competencia positiva entre jueces de garantía de
varios juzgados de garantía2, mientras no se dirima el tribunal competente, cada uno de
ellos estará facultado para realizar las actuaciones urgentes y otorgar las autorizaciones
urgentes, que le solicite el Ministerio Público. O sea, la cuestión de competencia no
suspende la tramitación del procedimiento penal ante los jueces de garantía
involucrados, y todos ellos deberán efectuar las actuaciones urgentes que haya que
realizar, o dar las autorizaciones a las solicitudes urgentes que efectúe el Ministerio
Público.

Para los efectos de pronunciarse sobre la libertad de un imputado en prisión preventiva,


o detenido, o en cualquiera situación de privación de libertad, corresponderá resolver al
juez en cuyo territorio jurisdiccional se encontrare quien estuviera privado de libertad.

En cuanto a la competencia para conocer de las contiendas de competencia, se aplican


las ya analizadas anteriormente, por lo que es necesario remitirnos a las normas del
Código Orgánico de Tribunales.

Una vez resuelta la contienda de competencia, serán puestas a disposición del juez
competente, las personas que se encontraren privadas de libertad (si es que no

2
La regulación normativa, literalmente solo regularía las contiendas positivas de competencia, sin
embargo, no existe problema en aplicar la misma normativa a las contiendas negativas de competencia.
estuvieran a su disposición), así como los antecedentes que obraren en poder de los
demás jueces.

Son plenamente válidas todas las actuaciones libradas ante los jueces que resulten
incompetentes, sin necesidad de ratificación.

No existe la posibilidad de que se presenten contiendas de competencia respecto de


Tribunales Orales en lo Penal, porque si alguno de los intervinientes considerare que el
Tribunal del Juicio Oral en lo Penal es incompetente debe plantear una cuestión de
competencia por la vía de la declinatoria, ante el mismo Tribunal del Juicio Oral en lo
Penal que va a resolver en juicio oral del respectivo conflicto penal, dentro de los tres
días siguientes a la notificación de la resolución que fijare fecha para la realización de la
audiencia de juicio oral (Artículo 74 del Código Procesal Penal). Luego de dicho plazo
no puede ser planteada por las partes ni declarada de oficio.

No existe regulación legal en materia procesal penal, respecto de que ocurre una vez
acogida la alegación de incompetencia ante el Tribunal del Juicio Oral en lo Penal, de
acuerdo al artículo 74 del Código Procesal Penal. Dicha resolución es dictada por el
mismo Tribunal del Juicio Oral en lo Penal, y no está precedida de audiencia, por lo que
solamente cabría reposición. Si queda ejecutoriada la resolución que declara la
incompetencia del Tribunal del Juicio Oral en lo Penal, creo que debería solicitarse la
nulidad de lo obrado, y que se retrotraiga la causa a la audiencia de preparación del
juicio oral, para que se determine un nuevo Tribunal Oral en lo Penal competente para
conoce del asunto. Esta solución no se opone a lo establecido en el artículo 165 del
Código Procesal Penal que impide retrotraer el procedimiento penal a etapas anteriores
(inciso 3), porque tal prohibición en lo que respecta al retroceso de la etapa de juicio
oral a la etapa de preparación del juicio oral, se refiere al caso de nulidades decretadas
durante la: “audiencia del juicio oral”, siendo que en este caso, la misma todavía no se
ha producido, porque solamente es posible interponer la incompetencia del Tribunal del
Juicio Oral, dentro de los tres días siguientes a la notificación de la resolución que fija
fecha para la audiencia del juicio oral.

También podría gustarte