Está en la página 1de 1

Capítulo7 ANÁLISIS DEL PENSAMIENTO

REFLEXIVO.
Ante una adversidad solo existen dos opciones: eludirla (abandonar la actividad
que le produzca esa dificultad y enfocarse en otra cosa) o bien enfrentarse
realmente a la situación.
Este capítulo comienza haciendo alusión a que la reflexión no puede separarse de
la observación. No importa que dichas observaciones se realicen mediante el uso
directo de los sentidos; o a través del recuerdo de observaciones previas, propias o
ajenas, son necesarias, ya que tienen como fin el tomar nota de las condiciones en las
que se encuentra la persona.
Los hechos observados son denominados datos. Estoy son el material que el individuo
debe interpretar y explicar.
Las IDEAS son las soluciones sugeridas para las dificultades que la observación ha
descubierto. Estos dos términos (datos e ideas) constituyen los dos factores
indispensables para toda actividad reflexiva.
La INFERENCIA se relaciona más con lo “posible” que con lo “real”. Toda previsión,
predicción, planificación, teorización o especulación son ejemplos de INFERENCIA.
Exige una doble comprobación: en primera el proceso de formación de la idea o
solución y en segunda, la idea o solución deberá ponerse en práctica. Se llegará a la
conclusión REAL si es posible e IMAGINARIA si no lo es.
En el pensamiento reflexivo existen 5 fases, las cuales resumiré a continuación.
1) Sugerencias. En las que la mente salta hacia adelante en busca de una posible
solución.
2) Intelectualización. Aborda la dificultad o perplejidad que se ha experimentado
(de forma directa) en un problema al que hay que hallarle solución.
3) Idea conductora-Hipótesis. El uso de una sugerencia tras otra como idea
conductora o hipótesis, para así iniciar y guiar la observación.
4) Razonamiento. La elaboración de forma mental de la idea o suposición, siendo
este denominado como razonamiento, siendo una parte de la deducción y no
su totalidad.
5) Comprobación de hipótesis por acción.

La secuencia de estas 5 fases NO es fija.

También podría gustarte