Diario pedagógico#4

Fecha: 8 de septiembre de 2022

Practicante: Ana Belén Mazo Lopera

Grado: 10-B

Maestro: Ernesto

Grupo en el que se realizó la observación: 2B

Relato:
La tarde se tornaba cálida, el sol se posaba sobre mi cabeza, y a eso de la 1:40pm me
encontraba caminando hacia el cooperativo, ya que debía de cumplir con la práctica, llegue
temprano al colegio, a eso de la 1:53pm más o menos. Cuando llegué, lo primero que hice
fue cepillarme, para luego ir a esperar a mi compañera Ana Sofía Velásquez Suárez, era un
día más, una aventura más por vivir junto a los 40 niños que habitan el salón de 2B, y yo
estaba muy alegre, ya que era la primera práctica como tal con los pequeños, y por ello me
sentía preparada para compartir con los chicos, tenía muchas expectativas, así mismo como
todos los días que he ido a compartir con estos niños que son muy enérgicos, curiosos,
amables, solidarios y atentos.

Mientras esperaba a mi compañera vi a un niño del salón afuera, llamado Josué, y el me

dijo que estaba ahí porque tuvo un problema con una niña de 2C llamada Mariana, pero el
me confesó que le iba a mentir a la coordinadora Leydi para que no le hicieran reporte, todo
esto me impacto, porque desde la inocencia del niño, se puede reconocer también que los
mismos, desde cierta edad empiezan a usar las mentiras como un tipo de escape por las
cosas que han hecho mal y las consecuencias graves que fueran a recibir por ello.

Después de escuchar esto que me había dicho Josué sentí que de pronto la práctica de este
día que iba enfocada en la verdad iba a tener ciertos aprendizajes como el que llegar a la
verdad y desmantelar mentiras ayuda en la construcción de un mejor futuro y ser humano.
Con esto y más ganas de empezar la práctica, entramos al salón y los niños nos saludaron,
estaban felices de vernos un día más.

Al entrar al salón nos sentamos a escuchar la clase y a observar a los niños, pues la práctica
como tal se haría después del descanso, en la hora en que entramos estaban en matemáticas,
y el docente Ernesto les estaba enseñando probabilidad, y esto de manera didáctica, con un

dibujo o gráfico como el siguiente:

Muy posible: Azul= 6 Según las cantidades

Medianamente posible: Rojo= 4 que se tuvieran de
cada color era la
Poco posible: Verde= 2
probabilidad de
sacarlas.
Con este gráfico que el maestro hizo en el tablero, los niños podían contar y sacar las
conclusiones acerca de las preguntas formuladas por el maestro, las cuáles apuntaban por
ejemplo a ¿es más probable sacar una canica azul o Roja?, y mediante esto los niños
explicaban si era posible o no y el porqué, realmente los chicos eran muy inteligentes, pues
estos conceptos de probabilidad, al prestar atención se veía el desarrollo a nivel conceptual
y procedimental, el docente Ernesto nos dijo que era bueno que los niños hicieran este tipo
de actividades, pues en las pruebas saber se les pregunta sobre la probabilidad de algunos
eventos.

Luego de está actividad el docente les dijo que como ya sabían, se estaban trabajando las
operaciones de suma, resta y multiplicación, y por eso el les entrego una ficha con 3
problemas, de los cuáles les explico el primero, y a cada uno se le debían hacer por lo
menos dos operaciones, en este punto Ana Velásquez y yo Ana Belén, nos paramos de
dónde estábamos a colaborarles a los niños, yo por ejemplo lo que hacía era leerles el
problema, y explicarles que operación debían de hacer, y ya ellos la resolvían y si estaba
mal, yo me sentaba, les recordaba las tablas de multiplicar, y les hacía un seguimiento, para
que ellos mismos se dieran cuenta de los errores, era muy bonito cuando los niños nos
llamaban “profe”, porque yo me sentía bien, y pensaba que estaba haciendo bien el trabajo
de ayudarles, obviamente algunos niños se veía que copiaban las cosas, y que no realizaban
las operaciones por su propio mérito, y en esos casos lo que yo hacía era decirles que
¿cómo hiciste para resolver la suma?, y cuando no me contestaban, yo les explicaba.

Se llegó la hora del descanso, por lo que los niños sacaron sus alimentos, y juiciosos
comieron, para luego ir a jugar al descanso, en el receso, estaban jugando un partido los
niños de cuarto grado, y el profesor Ernesto era el que dirigía este, y estaba pendiente,
había niños que corrían, y jugaban y otros que estaban viendo el partido, yo por mi parte
estaba sentada esperando a que finalizara el descanso, y cuando esto sucedió, subí al salón,
dónde a eso de las 4:00pm el formador Ernesto nos dio el permiso para iniciar la práctica.

Al inicio yo pegué unas letras en el tablero que formaban la palabra “LA VERDAD”, y
después de esto, les dije a los niños que se iba ¿n a organizar en forma de círculo, y cuando
todos estaban organizados, Sofia y yo pasamos al primer momento, dónde les preguntamos
a los niños que “¿Qué es la verdad para ustedes?, y fue muy bonito que la mayoría de los
niños quisieran participar, ellos decían cosas como: las mentiras se usan cuando no se
quiere decir la verdad, la verdad es importante, y una de las niñas llamada Gabriela contó
una anécdota de un día que le dijo una mentira a su abuela, y está se enojó, luego de eso,
escribimos en el tablero que la verdad era lo contrario a la mentira, y para explicarles
mejor, la compañera Ana Sofía Velásquez leyó el cuento de “Pablo el niño que siempre
fingía”, y mientras ella lo hacía, yo mostraba las imágenes.

Después de leer el cuento, se evaluó los conocimientos a los niños con la pregunta de ¿De
qué trataba el cuento?, y ¿Quiénes eran los personajes?, los niños respondieron
acertadamente, y por ello se les entregó las imágenes a blanco y negro de los personajes
principales (un niño llamado pablo y su gatita perla), y por parejas los coloreaban, todo este
primer momento se demoro unos 45 minutos. Al finalizar, los niños recortaron a los
personajes y cada uno tendría uno.

El trabajo fue muy cooperativo y era bonito ver la creatividad de los niños al colorear, la
actividad salió bien, como se tenía planeada, y yo digo que, hasta mejor, en el segundo
momento, yo hice una introducción sobre el juego que se haría que era todo un misterio
llamado “Libritos, libritos ¿Quién tiene los libritos?”, y en está el docente Ernesto nos
colaboro con un bafle que sonaba más duro que el que traíamos y en este se puso la música
un poco misteriosa, los niños cerraban los ojos y fue muy bonito que todos siguieran las
instrucciones, se hicieron más o menos 4 rondas, dónde el objetivo era esconder dos libritos
pequeños que tenían frases adentro y que cuando se les dijera ellos abrieran sus ojos para
buscarlos.

Al final de la búsqueda misteriosa, los chicos eran entusiastas, pues todos querían esconder
los libritos, pero por ronda sólo se escogieron a dos niños, y los que los encontraban debían
de leer en voz alta las frases, y cuando ellos lo hacían nosotras (Ana y yo), dábamos una
leída de nuevo para que todos entendieran, y se les decía algo referente a la verdad. Por
último, en el tercer momento lo que se hizo fue dividir los niños en dos grupos, y cada uno
tenía un nombre, el Equipo#1 se llamaba leones y leonas y el Equipo#2 los vengadores,
luego de escoger nombres se les explico que a alguno de los niños se le iba a decir una
frase, la cual debía de pasar por todos, y pues se cumplió el objetivo que era del “Teléfono
de la verdad”.
Cuando se finalizo la práctica, eran como las 5:40pm más o menos, y para reflexionar, yo
les dije que el propósito de todo eso era que ellos supieran los conceptos de verdad y de
mentira y que en la sociedad nosotros debíamos de ser personas de bien, transparentes y
con buenos principios para ser personas más creíbles y en quienes se pueda confiar.
Después de finalizar con está intervención, el docente les escribió en el tablero una tarea
que debían de traer para el siguiente día, y cuando el se fue a acompañar a los niños en el
transporte, Ana Velásquez y yo le ayudamos organizando el salón.

Durante la práctica hubieron momentos de felicidad cuando los niños atendían, pero
también en algunos momentos ellos se dispersaban, y para controlarlos yo les decía con voz
fuerte: Una palmada los que me estén escuchando, dos palmadas los que me estén
escuchando, y tres palmadas los que me estén escuchando, y al hacer esto, se obtenía la
atención de todos, pienso que gracias a está técnica que había aprendido en unos encuentros
de la pastoral del colegio, logré en muchas ocasiones que los niños escucharán, y con la voz
del maestro Ernesto, ellos también a la final prestaban atención.

Algo que me gustó mucho fue que el educador Ernesto al final de la práctica nos dijo que le
parecieron muy buenas las actividades, ya que eran didácticas, y que se veía que cada una
tenía un propósito diferente para lograr con los niños, los cuáles se cumplieron, y que para
él ellos aprendieron mucho. Otra cosa para resaltar es que en estos espacios de práctica a
pesar de los obstáculos que se presentan, me doy cuenta de que realmente la docencia si es
lo que me apasiona, lo que quiero, y más cuando dirigía a los niños y estos realizaban lo
propuesto a mí me pareció muy gratificante que la mayoría entendiera el mensaje que se
quiso compartir.

En estos espacios uno como el ser estudiante, aprende a valorar más la labor de el docente,
y que cada uno de mis maestros, realmente siempre están pensando en con que temas nos
van a evaluar, que actividades nos llevarán a reflexionar, o simplemente la planeación que
me imagino gastan en espacios externos a su trabajo, mirando que nos van a compartir, y es
una de las profesiones donde digo yo que más amor se le debe tener a los niños o a la
juventud, ya que trabajar con seres humanos es una de las cosas más complicadas que hay,
y el agradecer a los diferentes docentes que han pasado por mi vida, me da pie para
pensarme que muchas de mis actitudes, y de mi nivel conceptual, procedimental, y como
persona se ha logrado en la medida en que esos docentes estrictos, amables y solidarios han
estado para mí y me han forjado un carácter, que hoy es el mismo que me ha hecho amar
está profesión.

¿Qué aprendizajes pedagógico- didácticos me brindó está

experiencia?:
Está cuarta experiencia de observación y práctica me brindó muchos aprendizajes, entre
ellos voy a enunciar los siguientes:

1. Es necesario explicar a los niños los temas con detenimiento, y no es hacerles las
cosas si no que por sus mismas capacidades se den cuenta de los errores.
2. Los gráficos o imágenes ilustradas en las edades más pequeñas forman un mejor
aprendizaje visual en los pequeños.
3. Evaluar a los niños y preguntar por lo que saben es una estrategia para que ellos
mismos valoren lo que saben y reflexionen.
4. Hacer seguimiento a los conocimientos de los niños genera mayores capacidades a
nivel interior y exterior de cada individuo.
5. El trabajo en equipo es necesario potenciarlo desde edades tempranas, pues en una
sociedad todos vamos a estar en constante interacción con todos.
6. Enseñar con pasión y amor es la mejor herramienta para que los sujetos se sientan
aceptados y queridos por sus maestros.
7. Tener espacios de reflexión en el salón con los niños, acerca de lo que se trabaja es
importante a la hora de culminar alguna clase.
8. Mirar los gustos de los estudiantes también forma parte en el proceso de enseñar.
9. Estar en constante observación del sujeto, genera un aprendizaje tanto de él hacia su
profesor como del maestro hacia él.
10. El educador siempre debe estar dispuesto a ser un mediador para resolver conflictos
que se presenten al interior del aula.