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UNIVERSIDAD NACIONAL DE LAS ARTES

(UNA)

CINO FASE 2

PARCIAL DOMICILIARIO

INTRODUCCIÓN AL ANÁLISIS DEL DISCURSO

Alumna: Rocío Artaza.

DNI: 44006150.

Materia: Introducción al Análisis del Discurso.

Docente: Marcelo Pitrola.

Comisión: 1.
1. Saussure es considerado el fundador de la lingüística moderna. En su teoría se basan el
análisis del discurso y las teorías lingüísticas y literarias posteriores. Su producción también
tuvo un gran impacto dentro de las ciencias sociales, la filosofía y el psicoanálisis.

En Curso de lingüística general, seminario dictado por él, pero reconstruido y escrito por
estudiantes, explaya una perspectiva lingüística nueva, donde establece que el campo de
estudio de la lingüística es la lengua, parte social y sistematizable del lenguaje.

La lengua es un sistema social de signos lingüísticos y el estudio de la misma debe ser de


un modo sincrónico según Saussure, dado que son las interrelaciones que se dan dentro de
ella quienes explican cómo opera la comunicación.

El signo lingüístico es la unidad de análisis primaria del sistema de la lengua, es una


entidad psíquica y social que está compuesta de forma intrínseca por el significado o
concepto y por el significante o la imagen acústica. La relación entre un significado y un
significante es el signo lingüístico. El significado es el concepto y la representación de este
es el significante, que puede ser o no una imagen acústica.

Los principios fundamentales que caracterizan al signo lingüístico son la arbitrariedad, la


linealidad, la mutabilidad y la inmutabilidad.

La relación de correspondencia entre el significado y el significante de cada signo


lingüístico es inmotivada y producto de una convención heredada, a esto se le denomina
arbitrariedad del signo lingüístico.

El principio de linealidad se refiere a que el significante se desarrolla en el tiempo de


forma lineal. Con los mismos sonidos y letras se pueden formar distintos significantes
según el orden en el que se dispongan, por eso es imprescindible la linealidad: para
representar y diferenciar cada signo lingüístico dentro del sistema de la lengua.

La mutabilidad y la inmutabilidad son dos características contrapuestas, pero no


excluyentes. El signo lingüístico es mutable e inmutable a la vez. La inmutabilidad se debe
a que los significantes están impuestos, son producto de una convención preexistente y
heredada. Un sujeto en particular no puede elegir o modificar el nombre de un concepto,
dado que la lengua es un sistema constituido y muy complejo. A su vez hay una resistencia
a la modificación debida a la inercia colectiva que se retroalimenta con el principio de
arbitrariedad.

En contraposición, el signo lingüístico también es mutable, ya que, aunque el sistema de


la lengua en primera instancia es inmutable, a través del tiempo y por el uso se transforman
tanto significados como significantes y sus respectivas relaciones. Este proceso lleva
mucho tiempo, es orgánico, involuntario, colectivo, y es el principal vehículo del devenir
de una lengua en otra. Saussure hace hincapié en la importancia de estudiar a la lengua
desde una perspectiva sincrónica y no diacrónica, ya que en ese momento la lingüística se
centraba en la mutabilidad de una lengua a otra, estudiando los cambios, pero no el
funcionamiento del sistema lingüístico vigente.

La lingüística estática, que estudia la lengua desde una perspectiva sincrónica, se centra
en el funcionamiento de la misma y en las relaciones entre los distintos signos lingüísticos
que la componen.

El concepto de valor es crucial para entender la estructura de la lengua, dado que el valor
de un signo es la posición que este ocupa en el sistema. La significación, que es la
capacidad de un signo de representar una idea, está sujeta, además de al significado y al
significante, a la existencia de otros signos que acotan su alcance. Un ejemplo reiterado de
esto es el caso de pez y pescado, donde la diferencia entre uno y otro está en que el primero
es el animal vivo y el segundo el que ha sido cazado por un humano. En inglés esta
diferenciación no existe y solo cuentan con el término fish, que refiere a ambas opciones
según el contexto.

Los signos se conforman de manera opositiva, relativa y negativa en relación a los demás,
siendo posible así su identificación.

El valor es un aspecto estructural formal, pero también subjetivo, porque la significación


que se le asigna a un signo depende también del uso de cada sujeto o colectivo en un
momento dado. Un ejemplo de esto es la apropiación de la injuria, que es cuando un
concepto es y/o se aplica de forma peyorativa, pero las personas que han sido violentadas
por esa definición y su uso se empoderan mediante la resignificación e identificación
positiva de ese significante, alterando la carga conceptual, aunque no del todo el
significado.

Relaciono la reflexión anterior y el concepto de valor al texto En contra de la música, de


Julio Mendívil, donde el enunciador, un especialista en música, escribe en su contra, o más
bien en contra de la singularidad genérica del concepto, por entender que la definición que
se maneja de esta excluye las diferentes concepciones y diversidades de músicas que hay.
Considero que se podría decir que Mendívil está en contra del valor que se le asigna a la
música, considerándola, tanto desde la singularidad como desde la significación, un
absoluto único y homogéneo, que excluye formas diferentes de habitar y entender la
música, invisibilizando distintas cosmovisiones. Con el simple uso del plural, en vez de
música, músicas, se redimensionaría el valor del concepto, porque se incorporaría la
multiplicidad de forma intrínseca, siendo esto un ejemplo de cómo la lengua es un sistema
de pensamiento que construye realidad.

2. El contrato de lectura de este texto implica, en primer lugar, dar a notar la idea errónea
que ha sido impuesta a través del tiempo acerca del internet y la memoria. El enunciador es
alguien con previo conocimiento acerca del uso del internet y de las funciones del mismo,
además de tener una opinión formada sobre esto. El enunciatario se construye a raíz de que
el enunciador asume que éste, al igual que él, tiene conocimiento acerca del uso de internet:
“Todos hemos utilizado Google para bucear en recuerdos vagos o corregir algún dato
inexacto”, no se detiene a explicar qué es el internet ni para qué sirve, simplemente aborda
el tema desarrollando su opinión y argumentando la misma. Puede que el enunciatario no
tenga los mismos conocimientos que el enunciador respecto a internet, posiblemente apenas
sepa como usarlo, pero lo conoce, sabe a qué se está refiriendo, por ende, comprendería que
el internet no dificulta a la memoria. Esto crea una relación estrecha entre enunciador-
enunciatario, ya que hay noción respecto al tema abordado. Todo esto contradice la idea
planteada por Vargas Llosa, quien sostiene que el internet no es beneficioso para la
memoria: “Cuanto más inteligente sea nuestro ordenador, más tontos seremos”.

Dato 1: Al utilizar internet decidimos no destinar nuestros recursos cognitivos a recordar la


información sino a cómo acceder a esta.
Garantía 1: Buscar la información en Google es un recurso fácil, todos lo hemos utilizado
Google para despejar una duda. Respaldo 1: El uso de la Web como un banco de memoria
es virtuoso.

Conclusión 1: Internet no debilita la memoria.

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