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ENSAYO DE ACUERDO CON LA LECTURA “LA MESTRA IGNORADA – ESCUELA

DE APRENDICES POR MARINA GARCÉS

JADILSON RUIZ CAICEDO

PRESENTADO AL DOCENTE MICHAEL BERMÚDEZ

EN LA ASIGNATURA DE PRÁCTICAS PEDAGÓGICAS

UNIVERSIDAD SANTIAGO DE CALI


FACULTAD DE EDUCACIÓN
PROGRAMA DE LICENCIATURA FÍSICA Y DEPORTE
SANTIAGO DE CALI
PERIODO 2022B
LA MESTRA IGNORADA

Para empezar, debemos reconocer la labor de los maestros y esta es la de compartir su


entendimiento y su forma de ser, de transmitir valores e incluso en muchas ocasiones
inspirar a ser mejores personas y así mismo impartir en la sociedad. Cuando en el texto
dice que la mejor manera de atacar la escuela es atacar a los maestros se refieren al gran
poder que estos tienes ante la sociedad. El segundo hogar de los seres humanos siempre
va a ser los centros educativos después de la casa ya que gracias a estos se logra
moldear excelentes personas. Muchas veces en la sociedad a nivel mundial ya sea
Europa, Asia o la misma Latinoamérica se ha logrado evidenciar que la corrupción, la
represión e incluso la censura empiezan por los mismos centros educativos.
En cuanto a la vía “económica”, siempre se ha tenido una imagen de los maestros como
“pobres” o la maestra “solterona” en donde han estado bajo la presión y/o normas
institucionales convirtiéndolos así en precarios y ser vistos como maquinas. Todo esto
limitando así y minimizando su poder que tienen.
Reiteradas ocasiones se ha puesto en duda la capacidad de los docentes y de su
enseñanza, un gran ejemplo de esto es todo el proceso educativo que se llevó a cabo
durante la pandemia del COVID-19 al momento de implementar herramientas virtuales
que incluían plataformas digitales y que dejó en duda y en cuestionamiento la capacidad
de estos mismo demostrando así una inutilidad. Investigando más sobre la lectura y la
autora Marina Garcés nos invita a preguntarnos y a pensar en ¿cómo queremos ser
educados? Durante esta pandemia pudimos presenciar una gran problemática y es como
se menciona con anterioridad a la incapacidad de los docentes en el momento de
responder o de llevar a cabo estrategias, en el cual se deja a un lado la enseñanza y se
enfocan en que cada uno desarrolle por su lado sus herramientas para su aprendizaje.
El filósofo francés Jacques Ranciére nos invita a pensar ante una imagen llamada “la
maestra ignorada” en la que prácticamente la docencia es vista como una asistente social
para los pobres dejando a un lado el verdadero objetivo de la enseñanza y es vista como
un coach para la burocracia. Esta maestra no inculca valores, no enseña, no comparte
conocimiento, sino que al contrario es como un apoyo y/o una mediadora ante el alumno y
SU PROPIO aprendizaje dejando a un lado el acompañamiento y guía educativa que
debería de ser.
Por otro lado, tenemos al profesor Joseph Jacotot que explica que en su exilio a los
Países Bajos daba clases en una lengua diferente a la que sus alumnos manejaban. Esto
lo podemos ver como la incapacidad que tienen algunos docentes de transmitir y enseñar
lo que se debe o incluso en el momento de comunicarse no maneja los recursos
suficientes para lograr el objetivo de enseñar y ser entendido.
La filosofa y profesora Spivak explica que: dar clase, sea el nivel que sea es “cocinar el
alma”. Con esta frase la filosofa quiere dar a entender que mas que explicar un tema o
enseñar algo es dejar realmente una enseñanza y un valor en los estudiantes, que estos
puedan aplicarlos y les quede para el día de mañana. No es leer por leer, ni responder por
responder. Es enfocarse y dejar una huella en cada enseñanza.
Retomando la pregunta de la autora ¿cómo queremos ser educados? Creo que la mejor
respuesta es quiero ser educado para aportarme como ser humano y persona que soy y
para aportar afuera, al mundo. Tal vez no logrando cosas enormes, porque el gesto más
sencillo ha demostrado que puede lograr grandes cambios. Llegando al alma, a la
sociedad y sobre todo aportando al futuro que es de todos, por eso se debe trabajar en la
educación. La Real Academia Española define recíproco como igual en la correspondía
de uno a otro. Sabiendo esto la educación debe ser reciproca, debemos ser educados
unos por otros y así mismo ser aprendices unos de otros. Logrando así una mayor
dimensión tanto social como política ya que la educación no es solo de los educadores,
sino que es de todos. Logrando así una igualdad y un verdadero cambio.

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