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INSTITUTO TECNOLÓGICO SUPERIOR DE

TEZIUTLÁN

Diplomado para la Formación de Tutores

“Las aportaciones de mi ejercicio como profesor para el


desarrollo de la calidad educativa en el Tecnológico
Nacional de México (comportamientos y actitudes)”

2.1.1 Concepto Educación de Calidad.


ENSAYO
.
Mtro. Luis Manuel García Martínez

Alumno:

Octavio Rosas Arriaga

23-06-2022
INTRODUCCIÓN
“La tarea del educador moderno no es cortar selvas, sino regar los desiertos”. (Staples
Lewis 1991, p. 29). Si bien puede parecer un reto imposible, hemos visto que desde el
oasis más pequeño surge el agua que riega la semilla del conocimiento aun cuando la
adversidad del clima en más que obvia.

En estas líneas muestro mi percepción de las “horas-clase” y de la enseñanza humana


que me ha dado la gran oportunidad de ser docente.

DESARROLLO
El análisis (más que excelente) que hace el Dr. Pablo Latapí Sarre, sobre la buena
educación deja en claro que la educación no es un ente aislado, no es un trabajo de 5
u 8 horas, sino más bien un conjunto de situaciones, necesidades, creencias,
posibilidades, vivencias y más situaciones de la cotidianidad que convergen en cada
una de las materias que se imparten y que (como cual reacción química) al fusionarse
con los elementos correctos se genera la maravilla del conocimiento.

Si bien el Dr. Latapí da cuatro puntos relevantes para una buena educación, son un
buen resumen de todo un proceso sistemático que debe ir adecuándose con el pasar
de los tiempos, pero nunca eliminarse o sustituirse por otros ya que representan el
“núcleo” del sentido educativo.

En este recorrido educativo -donde soy quien debe guiar a los discentes- he copiado
las mejores fórmulas que me han parecido adecuadas para la impartición de la
enseñanza y si bien todo es perfectivo, hoy me encuentro muy empatado con los cuatro
conceptos enunciados por el Dr. Latapí: El Carácter, La Inteligencia, Los Sentimientos
y la Formación de Libertades. Cual si fueran una pieza de Lego, cada uno forma parte
de un todo y sin lugar a dudas esta es la forma más adecuada de transmitir y entender
la educación en este y otros tiempos. No podemos concebir la transmisión del
conocimiento sin valores, sin congruencia y eso ha implicado en mi enunciar los que
dijo Cicerón en “Si quieres aprender, enseña” donde realizamos un enorme ejercicio
de responsabilidad. Y esa responsabilidad debe partir de tu deseo de aprender, de la
curiosidad por todo aquello que te rodea, de tu inconformismo.

Igualmente, en el rubro de La Inteligencia, se evoca la importancia de la “cultura


general”, es decir; mi cotidianidad, mi vivir, mi socialización llevada a la mezcla con
mis conocimientos donde puedo sintetizarlos, discernirlos, analizarlos y demás y como
si fuera receta de cocina, consagrarlos con un conocimiento específico que culmina
con la aplicación de este mismo.

Si en algún momento de esta profesión no hemos sentido pasión por la educación o


por el conocimiento, prácticamente estaremos teniendo “solo sexo y no amor” (válgase
la comparación) ya que involucra en ambos casos alma, cuerpo y espíritu ¿o no?, y ya
por ultimo no concibo una educación que no busque como último fin “La Libertad”, la
educación, como la verdad, te hace libre. Así que cuando me encuentro en el aula no
pienso que enseñar contenidos. Lo que uno pretende es hacer más libres a sus
alumnos para formar conciencias y personas que día a día tengan esa sed que ayude
al crecimiento humano en todos los sentidos.

CONCLUSIÓN
El quehacer cotidiano de la educación nos involucra de pies a cabeza, con cabeza y
corazón, implica veinticuatro horas de mezcladas perfectamente entre el ser humano,
el maestro, el profesional, el amigo, el aprendiente, el ignorante y el sabio. Sin duda
pienso estar aprendiendo más cada día en este eterno camino de la vida estudiantil.
Como consejo diría: “Nunca entres en un aula con la única idea de que vas a enseñar.
Si así lo haces, habrás desperdiciado una enorme oportunidad. Cuando entres en un
aula, no pienses en lo que vas a enseñar a tus alumnos, sino en lo mucho que tienen
ellos que ofrecerte, que enseñarte. Si así lo haces, saldrás de esa clase mucho más
enriquecido de como entraste”.

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