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La prehistoria es el término que designa al periodo que abarca desde la hominización hasta
la invención de la escritura. Está dividido en dos etapas: Paleolítico y Neolítico.
En el Paleolítico vivían de la caza, pesca y de la recolección, por lo que eran grupos
nómadas con una economía depredadora,se diferencian 3 etapas: Paleolítico
inferior aparecen dos grupos de homínidos Homo antecessor y Homo
heidelbergensis, en el Paleolítico medio se halla el Homo neanderthalensis,
cuyos instrumentos pertenecer a la cultura Musteriense y por último el Paleolítico
superior donde hizo su aparición el Homo sapiens (especie actual), en esta
etapa emplearon nuevos materiales que darán lugar a instrumentos más
especializados. El Neolítico (5000-2500 a.C.) comenzaron a producir su propio alimento a
través de la agricultura y ganadería, impulsando el sedentarismo y la aparición de
poblados estables. Se divide en dos etapas: Neolítico inicial, se asentaron en
cuevas y se desarrolló la cultura de la cerámica cardial y una segunda
fase, Neolítico pleno en el que surgieron verdaderos pueblos y la cultura de
los sepulcros de Almería, además de la cultura de los sepulcros de fosa.

Surgieron tres culturas en función del metal predominante: Edad del Cobre o
Calcolítico (3000-1700 a.C.) sobresalen las culturas de los Millares y del vaso
campaniforme. Edad del Bronce (1700-1000 a.C.) destacan las culturas del Argar,
los campos de urnas y la megalítica de las islas baleares y la Edad del hierro
(1000 a.C.) Finalmente, dentro del arte rupestre destacan dos manifestaciones: el arte
rupestre cantábrico con figuras de animales y la policromía (pinturas de la cueva de
Altamira) y el arte rupestre levantino: figuras humanas y monocromía (pinturas de la cueva
de Valltorta y de el Cogul)

1.2
Como pueblos prerromanos tenemos a los Iberos asentados en el sur y en la costa
mediterránea. Economía basada en la agricultura y ganadería, con gran actividad comercial
llegando a acuñar moneda, la sociedad era tribal y estaba jerarquizada en función del poder
económico y militar. Su organización política está basada en el modelo ciudad-Estado y con
monarquía. Como elementos culturales destacan la escritura, religión y el arte con
funcionalidad religiosa o funeraria (La dama de Elche).
Los celtas, de origen indoeuropeo, ubicados en la Meseta norte y zona noreste, cuya
economía principal se basa en la ganadería, su sociedad se agrupaba en tribus y vivían en
castros fortificados y circulares. Los celtas e iberos se unieron creando la cultura celtíbera
que fueron extraordinarios guerreros.
A principios del primer milenio se asentaron en la península diversas potencias
colonizadoras, los primeros fueron los fenicios, de origen Libones, crearon ciudades como
Gadir para potenciar el comercio y por la abundancia de metales, gracias a su cercanía con
África. Más tarde llegaron los griegos y fundaron Emporion, Rhode…Con el fin de
establecer comercios, además, difundieron el alfabeto y la moneda. Finalmente, los
cartagineses adquirieron rasgos de conquista militar en la península y fundaron emporios.
La cultura de los Tartessos con centro demográfico en Andalucía occidental, cuya economía
se sustentaba de la minería y en actividades metalúrgicas del bronce, constituyeron una
pluralidad de centros de poder, pero tras una serie de elementos externos e internos esta
cultura decayó.
1.3.
La conquista romana (218-19 a.C.) se inició con la Segunda Guerra Púnica donde los
romanos tomaron Sagunto, Cartago, Nova y Cádiz controlando el sur y este peninsular en el
desembarco contra Aníbal. Durante la conquista del interior de la Península, celtíberos,
lusitanos y la Numancia presentaron una resistencia, sin embargo, casi todo el territorio
quedó bajo el control de los romanos. En la conquista de la cornisa cantábrica formaron
diversos campamentos militares como Astorga o León y así pasaron a formar parte del
Imperio romano. Asimismo, la romanización se definió como el proceso de asimilación de la
cultura romana por los pueblos conquistados. La economía se caracterizó por ser esclavista
y el uso de denario romano mientras que la agricultura fundamentada en la triada
mediterránea: trigo, vid y olivo y la pesca. Por otro lado, la península fue rica en yacimientos
mineros como la plata o el plomo. En cuanto a la sociedad, los esclavos se situaban en la
base de la pirámide social, seguidos de la plebe y por último la aristocracia formada por
caballeros y la orden senatorial; la familia era patriarcal, es decir, el marido tenía la patria
potestad y la mujer solo mandaba en su ausencia, siendo el divorcio legal. Su organización
administrativa se basaba en dos tipos de provincias: senatoriales, controladas por el senado
o imperiales, bajo control del emperador. De igual manera, construyeron calzadas las cuales
organizaron el territorio y unieron las ciudades. En la romanización destacó latín como
lengua de prestigio, manifestaciones artísticas en la arquitectura y mosaicos, el derecho
humano regulando relaciones privadas y funcionamiento de instituciones políticas y las
creencias religiosas (tres dioses). A partir del siglo III d.C. Se extendió el cristianismo y con
el Edicto de Milán la libertad religiosa. La crisis del Imperio se causó por la escasez de
mano de obra esclava y los asaltos de pueblos bárbaros dificultando las relaciones
comerciales, los pueblos vecinos aprovecharon para penetrar en sus territorios.

1.4.
La crisis económica del s. III d.C. del Imperio romano fue aprovechada por los pueblos
vecinos que fueron penetrando en sus territorios. Los emperadores se vieron obligados a
dividir el Imperio y a pactar con estos pueblos como aliados (federados). Los visigodos
llegaron a un acuerdo y establecieron el Reino de Tolosa (sur de Francia) para expulsar a
suevos, vándalos y alanos. Casi un siglo más tarde fueron derrotados por los francos y se
asentaron en la Península, estableciendo un Reino independiente con capital en Toledo. En
el Reino de Leovigildo para conseguir la unificación política, se expulsó a los Bizantinos y se
conquistó el reino suevo. Su hijo, Recaredo, se convirtió al catolicismo y acabó con la
división religiosa, consiguiendo unificar todo el territorio. Los reyes visigodos compartieron el
poder con otras instituciones. La más importante fue la Aula Regic, asamblea consultiva
formada por la aristocracia visigoda, otro fue los Concilios de Toledo, los cuales eran de
origen religioso pero adquieren peso político e importantes funciones legislativas; estas
consistían en asambleas de obispos a las que asistía el rey y se trataban cuestiones
religiosas y políticas. Asimismo, la sociedad continuó el proceso de ruralización y se
consolidó el modelo feudal, donde la nobleza fue ganando poder gracias a pequeños
propietarios que cedían sus tierras a cambio de protección.

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