Está en la página 1de 10

Universidad Católica Redemptoris Mater

Facultad de Ciencias Médicas

Cuadro clínico según la CIE-X de Delirium, Epilepsia y Demencia

Nombre : Allyson Fernanda Valle Cerros

Profesor : Dra. Manzanares

Fecha : Lunes, 11 de Mayo del 2020

Año : 4to año “A”

Carnet : 20170224
Trastorno del sistema nervioso central (SNC) caracterizado por la repetición de dos o más crisis
epilépticas en ausencia de una causa inmediata aguda identificable que la provoque. Así, una única
crisis o crisis epilépticas recurrentes secundarias a factores corregibles o evitables no permiten, sin
más, el diagnóstico de epilepsia.
El cuadro clínico de la epilepsia depende de su clasificación, se pueden clasificar las crisis epilépticas
desde varios puntos de vista.
Cuadro clínico según clasificación
1. Clasificación desde el punto de vista clínico y electroencefalográfico (ILAE)

1.1 Crisis parciales o focales (CP)


Son aquellas en las que existe evidencia de inicio focal y la actividad epiléptica queda circunscrita a
pequeñas áreas de la corteza cerebral. Su semiología dependerá de la funcionalidad de dicha área.
Estas se clasifican en:

 Crisis parciales simples (CPS)


Cursan sin alteración del nivel de conciencia. Pueden ser:
- Motoras
- Senstivas-sensoriales: Parestesias, alteraciones visuales, del olfato, de la audición o del
equilibrio
- Autonómicas: Enrojecimiento facial, sudoración, piloerección
- Psíquicas: Epigastralgia, miedo, sensación de despersonalización.

 Crisis parciales complejas (CPC)


Cursan con alteración del nivel de conciencia. Pueden presentarse como:
- Alteración aislada o inicial del nivel de conciencia o comenzar como una crisis parcial
simple que en su curso presenta una disminución del nivel de alerta
- Automatismos o actos estereotipados involuntarios (chupeteo, movimientos de
masticación o deglución, frotamiento de manos o actos más elaborados),

 Crisis parciales secundariamente generalizadas (CPSG).


Son crisis generalizadas que se originan a partir de una crisis parcial simple o compleja, al
propagarse hasta afectar a ambos hemisferios; son generalmente del tipo tónicoclónicas y
ocurren más frecuentemente en aquellas crisis con foco en lóbulo frontal.
1.2. Crisis generalizadas (CG)

Son episodios clínicos y electroencefalográficos bilaterales sin un comienzo focal detectable y con
alteración de la conciencia desde su inicio. Traducen una descarga generalizada de neuronas de toda
la corteza cerebral

Se dividen en:

 Ausencias típicas.
Breves y repentinos episodios de pérdida de conciencia, con recuperación sin periodo
post-crítico, típicos de la infancia y adolescencia

 Ausencias atípicas.
Se diferencian de las típicas por menor trastorno de nivel de conciencia, signos motores
más evidentes y comienzo y final menos bruscos.

 Crisis mioclónicas (CM).


Sacudidas musculares bruscas, breves y recurrentes; únicas en las que puede no existir
pérdida de conocimiento.

 Crisis clónicas.
Movimientos clónicos de las cuatro extremidades, frecuentemente asimétricos e
irregulares.

 Crisis tónicas.
Contracción de breve duración, típica de miembros superiores.

 Crisis tónico-clónicas (CGTC).


Comienza con pérdida de conciencia brusca, a continuación ocurre la fase de contracción
tónica de músculos de todo el cuerpo, de segundos de duración, y posteriormente la fase
clónica o de movimientos convulsivos, de predominio proximal, finalizando con un
período postcrítico con cuadro confusional, de duración variable, flaccidez muscular y en
ocasiones relajación esfinteriana.

 Crisis atónicas.
Pérdida brusca de tono muscular postural con caída, fundamentalmente en niños
2. Clasificación según la etiología o el mecanismo que desencadena la crisis

2.1 Idiopáticas.
Se desconoce su causa. Se postulan factores genéticos implicados. No existe otra enfermedad
que la propia epilepsia.

2.2 Sintomáticas.
Existe una causa clara subyacente. Hay un trastorno del sistema nervioso central que aumenta el
riesgo de epilepsia (traumatismo craneoencefálico, ACV, meningitis, patología metabólica u
otros factores que se describen en el siguiente apartado).

2.3 Criptogenéticas o probablemente sintomáticas.


Se sospecha la existencia de un trastorno del SNC o causa sintomática, que no puede determinarse
por los medios actuales.

3. Clasificación de Loiseau y cols. de síndromes epilépticos en el anciano, en función de las


manifestaciones clínicas, EEG y neuroimagen:

3.1 Epilepsias parciales:

 Parciales remotas sintomáticas


Con presencia de afectación del SNC y lapso de tiempo superior a una semana entre crisis
y dicha afectación; los pacientes con una sola crisis y con esta evidencia etiológica deben
considerarse epilépticos.

 Parciales criptogénicas
De etiología desconocida; deben presentar más de una crisis para el diagnóstico de
epilepsia.

3.2 Sindrome epilépticos indeterminados


Se incluyen pacientes con más de una crisis indeterminada en cuanto a su origen parcial o
generalizado y su etiología.

3.3 Sindromes epilépticos especiales, con crisis parciales o generalizadas:

 Crisis agudas sintomáticas debidas a alteraciones sistémicas, metabólicas, tóxicas o


patología aguda del SNC, con relación temporal crisis-patología menor de una
semana.
 Crisis únicas, sin causa aparente ni alteraciones en neuroimagen ni EEG.
El delirium es un síndrome cerebral orgánico agudo, caracterizado por un deterioro global de las
funciones cognitivas, depresión del nivel de conciencia, trastornos de la atención e incremento o
disminución de la actividad psicomotora. En todos los casos es consecuencia de una enfermedad
somática aguda.
Manifestaciones clínicas
1. Se caracteriza por una alteración aguda o subaguda de la conciencia, atención y el deterioro en
otros dominios de la función cognitiva

2. Tendencia del cuadro a la fluctuación a lo largo del día, oscilando desde un fallo mínimo hasta la
dificultad de ser activado y al estupor. El trastorno suele agravarse por la noche y primeras horas
de la mañana y a veces sólo se presenta por la noche. La presentación nocturna puede explicarse
por la menor estimulación sensorial

3. En principio suele ser reversible, de corta duración, y suele acompañarse de manifestaciones


asociadas a alteraciones del ciclo vigilia-sueño, del comportamiento psicomotor y de las
emociones.

4. Se produce un déficit en la atención, con incapacidad para dirigir, focalizar, sostener o cambiar la
atención).

5. Hay trastornos en memoria (defecto en el registro y retención de nueva información), acompañados


de desorientación y el pensamiento suele ser incoherente y desorganizado

6. Las alteraciones de la percepción van a ser frecuentes, con falsos reconocimientos de personas y
lugares, ilusiones perceptivas, y en casos más graves habrá presencia de alucinaciones.

7. El ciclo sueño/vigila también suele verse alterado, con inversión del ciclo, períodos de somnolencia
diurna e insomnio por la noche.

8. Por último, todas estas alteraciones pueden ir acompañada de trastornos psicomotores y


emocionales (desde irritabilidad sutil, ansiedad hasta disforia o incluso euforia).
Criterios diagnósticos
A. Una alteración de la atención (p. ej capacidad reducida para dirigir, centrar, mantener o desviar la atención)
y la conciencia (orientación reducida al entorno)
B. La alteración aparece en poco tiempo (habitualmente unas horas o pocos días),constituyen un cambio
respecto a la atención y conciencia iniciales y su gravedad tiende a fluctuar a lo largo del día
C. Una alteración cognitiva adicional (p. ej., déficit de memoria, de orientación, de lenguaje, de la capacidad
vísoespacial o de la percepción).
D. Las alteraciones de los Criterios A y C no se explican mejor por otra alteración neurocognitiva preexistente,
establecida o en curso, ni suceden en el contexto de un nivel de estimulación extremadamente reducido, como
sería el coma.
E. En la anamnesis, la exploración física o los análisis clínicos se obtienen datos indicando que la alteración es
una. consecuencia fisiológica directa de otra afección médica, una intoxicación o una abstinencia por una
sustancia (p. ej., debida a un consumo de drogas o medicamento), una exposición a una toxina o se debe a
múltiples etiologías.

Clasificación
La clasificación del delirium depende de su cuadro clínico y de los criterios diagnósticos
1. Delirium por intoxicación por sustancias
Este diagnóstico debe establecerse en lugar de un diagnóstico de intoxicación por una sustancia cuando
los síntomas de los Criterios A y C predominen en el cuadro clínico y sean suficientemente graves para
exigir atención clínica.

2. Delirium por abstinencia de sustancia


Este diagnóstico solamente debe establecerse en lugar de un diagnóstico de síndrome de abstinencia
de una sustancia cuando los síntomas de los Criterios A y C predominen en el cuadro clínico y sean
suficientemente graves para exigir atención clínica

3. Delirium inducido por medicamento


Este diagnóstico se aplica cuando los síntomas de los Criterios A y C surgen como efecto secundario
de un medicamento tomado con receta

4. Delirium debido a otra afección médica


En la anamnesis, la exploración física o los análisis clínicos se obtienen evidencias de que la alteración
puede atribuirse a una consecuencia fisiológica de otra afección médica.

5. Delirium debido a etiologías múltiples


En la anamnesis, en la exploración física o en los análisis clínicos se obtienen evidencias de que el
delirium tiene más de una etiología (p, ej., más de una afección médica etiológica, otra afección médica
más una intoxicación por una sustancia o un efecto secundario de un medicamento)
6. Delirium especificado
Esta categoría se aplica a las presentaciones en las que predominan los síntomas característicos de un
delirium que provocan un malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral^ otras
áreas importantes del funcionamiento, pero que no cumplen todos los criterios del delirium ni de
ninguno de los trastornos de la categoría diagnóstica de los trastornos neurocognitivos.

7. Delirium no especificado
Esta categoría se aplica a los cuadros clínicos en los que predominan los síntomas característicos de
un delirium que provocan un malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u
otras áreas importantes del funcionamiento, pero que no.cumplen todos los criterios del delirium ni
de ninguno de los trastornos de la categoría diagnóstica de los trastornos neurocognitivos,

Dentro de la clasificación, también existe la siguiente:

 Agudo: Dura unas horas o días.


 Persistente: Dura semanas o meses
Y se especifica si es:
 Hiperactivo: El individuo tiene un nivel hiperactivo de actividad psicomotora que puede ir
acompañado de humor lábil, agitación o rechazo a cooperar con su asistencia médica.
 Hipoactivo: El individuo tiene un nivel hipoactivo de actividad psicomotora que puede ir
aoormpañado de lentitud y aletargamiento próximos al estupor.
 Nivel de actividad mixto: El individuo tiene un nivel normal de actividad psicomotora aunque
la atención y la percepción estén alteradas. También incluye individuos cuyo nivel de actividad
fluctúa rápidamente.
La demencia es un síndrome que se caracteriza por un declinar de las funciones superiores, entre ellas
la memoria, en relación con el nivel previo de los pacientes. Adicionalmente, completando el cuadro
sintomático, se suelen sumar alteraciones psicológicas y del comportamiento, produciendo en el sujeto
una discapacidad progresiva.
El síndrome demencial debe cumplir las siguientes características: presentar un nivel de conciencia
normal, ser adquirido y persistente en el tiempo, afectar a diferentes funciones y ser de suficiente
intensidad como para tener repercusión en el funcionamiento personal, laboral o social.
Criterios de demencia DSM-IV

a) Desarrollo de déficit cognoscitivo múltiple que se manifiestan por:


1. Alteración de la memoria: alteración en la capacidad de aprender nueva información o recordar
información previamente aprendida.
2. Una o más de las siguientes alteraciones cognoscitivas:
a) Afasia.
b) Apraxia.
c) Agnosia.
d) Alteración de la función ejecutiva (capacidad para el pensamiento abstracto y para
planificar, iniciar, secuenciar, monitorizar y detener un comportamiento complejo).
b) Los defectos cognoscitivos de los criterios A1 y A2 han de ser de la suficiente intensidad como para
provocar un deterioro significativo de la actividad social o laboral.

Clasificación
La demencia es un síndrome que puede ser causado por múltiples etiologías que, a veces, más aún en
el paciente anciano, se interrelacionan. La causa más frecuente de demencia en el sujeto anciano
occidental es la enfermedad de Alzheimer
1. Demencias Corticales

1.1 Enfermedad de Alzheimer (EA)


Es una enfermedad degenerativa primaria de origen desconocido, caracterizada por:
- La pérdida de memoria de instauración gradual y continua
- Afectación global del resto de las funciones superiores, que conlleva la repercusión
consecuente en la actividad laboral o social.

Criterios diagnósticos:
- Demencia
- Empeoramiento progresivo de la memoria y de otras funciones cognitivas.
- Comienzo entre los 40 y los 90 años, con mayor frecuencia después de los 65 años.
- Ausencia de alteraciones sistémicas u otras enfermedades cerebrales que pudieran
producir el deterioro progresivo observado de la memoria y de las otras funciones
cognitivas.

Apoyan el diagnóstico de enfermedad de Alzheimer probable:


- Deterioro progresivo de alguna función cognitiva específica (afasia, apraxia, agnosia).
- Alteraciones conductuales y en la realización de las actividades diarias habituales.
- Antecedentes familiares de trastorno similar, especialmente si obtuvo confirmación
anatomopatológica.
- Pruebas complementarias: TAC craneal atrofia cerebral, líquido cefalorraquídeo y
electroencefalograma normal.

1.2 Demencia frontemporal


Se caracterizan por declive de las funciones superiores de inicio insidioso y progresión lenta,
acompañado de alteraciones conductuales, sociales, de las funciones ejecutivas y lenguaje
desproporcionado en relación con el defecto de memoria.

2. Demencias Subcorticales
La demencia por cuerpos de Lewy, según McKeith, se caracteriza por un deterioro cognitivo
progresivo asociado a cognición y alerta fluctuante, alucinaciones visuales (alucinaciones no visuales
o delirios sistematizados) y parkinsonismo, con mayor frecuencia de episodios de pérdida transitoria
de conciencia y síncopes, y tendencia a caídas repetidas. La rigidez y la bradicinesia son los signos
más comunes; sin embargo, el temblor de reposo es infrecuente.
Criterios diagnósticos
- Demencia progresiva. La alteración de la memoria puede no ser evidente en las fases
iniciales. En general, destacan las alteraciones de la atención y de las funciones
frontosubcorticales y visuoespaciales.
- Dos o tres de los siguientes aspectos permiten el diagnóstico de probable. Un aspecto
define a la forma posible:
a. Fluctuaciones de las funciones cognitivas, con variaciones notables en el nivel de
conciencia y el grado de atención.
b. Alucinaciones visuales recurrentes, bien estructuradas, que se perciben con gran
detalle.
c. Signos motores espontáneos de parkinsonismo.
Apoyan el diagnóstico:
- Caídas repetidas.
- Hipersensibilidad a neurolépticos.
- Síncopes.
- Delirios sistematizados.
- Pérdida de conciencia transitoria.
- Alucinaciones no visuales.

3. Demencias Vasculares
La demencia vascular se define como toda demencia secundaria a muerte neuronal derivada de
procesos isquémicos o hemorrágicos.
La presentación clínica varía en función de la localización y magnitud de los infartos. Se caracteriza
por un comienzo más brusco, deterioro más escalonado, curso fluctuante y signos neurológicos
focales.
Criterios diagnósticos
- Demencia.
- Enfermedad cerebrovascular demostrada a través de signos focales congruentes con ictus
previo, con o sin relato de ictus previo, y evidencia de lesiones vasculares en la
neuroimagen.
- Relación entre la demencia y enfermedad cerebrovascular a partir de una o más de las
siguientes circunstancias:
a. Asociación temporal: inicio de la demencia en los tres meses siguientes a un ictus.
b. Deterioro brusco de funciones cognitivas.
c. Progresión fluctuante o escalonada de las alteraciones cognitivas.

También podría gustarte