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DIABETES MELLITUS TIPO 1 Y TIPO 2

Guillermo Arenas Valencia


La diabetes mellitus es un trastorno metabólico de los hidratos de carbono. El
organismo requiere de energía para funcionar y esta sale del metabolismo de los
nutrientes, especialmente lípidos e hidratos de carbono. Hay órganos como el cerebro
que sacan su energía únicamente de los hidratos de carbono, de manera que disponer
de ellos en forma permanente es vital. La glucosa en sangre (glicemia) es la forma de
disponer de este recurso en forma continua, de modo que mantener sus niveles
normales es muy importante. Los seres vivos y el hombre disponen de 2 periodos en
relación al ciclo nutricional. El periodo absortivo que es cuando el hombre se alimenta,
se produce la digestión y se absorben los nutrientes hacia la sangre y el periodo no
absortivo que ocurre cuando se está en ayunas. Durante el periodo absortivo, se
absorbe la glucosa que viene de la digestión de los hidratos de carbono ingeridos. La
glucosa absorbida tiende a subir en la sangre, pero este nivel se controla porque la
glicemia estimula a las células beta del páncreas que secretan insulina que promueve
que las distintas células de organismo capten la glucosa y la incorporen para su
metabolismo y obtención de energía o para que la glucosa se almacene en el hígado
como glucógeno hepático y en el músculo como glucógeno muscular. De este modo la
glicemia nunca sube de 140 mg/dl en los periodos absortivos. Durante el periodo no
absortivo la glicemia tiende a bajar porque es utilizado por los distintos tejidos del
organismo para obtener energía especialmente el cerebro. Esta baja de la glicemia
inhibe la producción de insulina y estimula a las células alfa de los islotes de langerhans
del páncreas para producir glucagón. El glucagón tiende a vaciar los depósitos de
glucógeno hepático y mantener la glicemia y si el ayuno se prolonga más halla de 6
horas se acaban los depósitos de glucógeno, se estimulan otras hormonas como el
cortisol, la adrenalina y la hormona de crecimiento que estimular la conversión de
parte del hígado de otras sustancias no glucídicas en glucosa, Este proceso se llama
neoglucogénesis. Si el ayuno se prolonga por varios días, la energía empieza a
obtenerse casi exclusivamente de los lípidos y el paciente se enflaquece y si el ayuno
se mantiene se empiezan a consumir las proteínas. Durante todo este periodo se
tiende a que la glicemia se mantenga sobre 60 mg por dl por neoglucogénesis y que la
glucosa sea ocupada casi exclusivamente por el cerebro.

La diabetes mellitus es un trastorno en la cual la glicemia esta sobre 126 mg/dl


en ayunas o sobre 200 mg/dl después de comer. Este trastorno ocurre o porque no hay
insulina suficiente producida por el páncreas o esta es ineficiente por resistencia de los
tejidos a su efecto. La diabetes mellitus se clasifica en 4 formas. La diabetes mellitus
tipo 1 en la cual el páncreas es incapaz de producir insulina. La diabetes mellitus tipo 2
en la cual el páncreas produce insulina incluso más que lo normal pero hay una
resistencia periférica a sus efectos. La Diabetes gestacional que ocurre desde el
segundo trimestre del embarazo por resistencia a la insulina producida por las
hormonas que se elevan en el embarazo como el lactogeno placentario y la diabetes
mellitus secundaria a otra situación patológica como ocurre por ejemplo secundaria a
una enfermedad del páncreas como una pancreatitis, resección de este por un cáncer,
o por un sindrome de Cushing en que el paciente produce altos niveles de cortisol que
producen secundariamente resistencia a la insulina y diabetes mellitus secundaria, los
paciente que por otras enfermedades deben usar altos niveles de corticoides también
tienen resistencia a la insulina y pueden tener altos niveles de glicemia.

La diabetes mellitus tipo 1 suele presentarse desde niño, y obedece


generalmente a una inflamación crónica de las células beta en los islotes de langerhans
por causa inmunitaria o viral. En estos pacientes no hay insulina circulante y su
tratamiento es obligado con insulina, son insulinodependientes. Estos pacientes son
muy frágiles y suelen complicarse con hipoglicemias, que ocurre cuando se ponen la
insulina y no comen o tienen vómitos. Otra complicación aguda frecuente en estos
pacientes es la cetoacidosis diabética y esto ocurre porque la insulina es antilipolÍtica y
evita la degradación de los ácidos grasos en los depósitos de grasa. Al no existir la
insulina puede ocurrir lipolisis de las grasas corporales que dan como producto de la
lipolisis muchos ácidos grasos que son capturados por el hígado y metabolizados a
cuerpos cetónicos como el ácido hidroxibutírico, el ácido acético y la acetona , todos
ácidos que bajan el ph sanguíneo y dan acidosis metabólica. La diabetes mellitus tanto
tipo 1 como tipo 2 puede dar en el largo plazo complicaciones crónicas como son las
microangiopatias, como la de los vasos de la retina que pueden provocar ceguera, el
compromiso de los capilares glomerulares renales que lleva a la insuficiencia renal y
la diálisis, las macroangiopatías, como la de los vasos coronarios y encefálicos que
pueden provocar infartos cardiacos y cerebrales y por ultimo otras complicaciones
crónicas como las neuropatías o mixtas como el pie diabético.

La diabetes mellitus tipo 2 aparece habitualmente en la edad adulta después de


los 30 años y se caracteriza por una resistencia a la insulina de parte de los tejidos
periféricos. Suele ser pacientes obesos, con altos niveles de insulina, para compensar
la resistencia insulínica y mantener la glicemia bajo los 126 mg/dl en ayunas, o bajo
200 mg después de las comidas. En esta etapa se les llama prediabéticos o resistentes
a la insulina pero cuando sobrepasan los 126 mg/dl en ayuna o los 200mg/dl después
de comer son ya oficialmente diabéticos. Lo normal es tener bajo 100 mg /dl en ayunas
o bajo 140 mg/dl después de comer.

Los pacientes diabéticos pueden complicarse agudamente como con la


hipoglicemia, la cetoacidosis o el coma hiperosmolar, o crónicamente con daños
vasculares de pequeños vasos, (microangiopatias) o de vasos medianos
(macroangiopatías) . Las microangiopatías más frecuentes son las de la retina y el
glomérulo que pueden llevar va la ceguera y a la insuficiencia renal terminal. Las
macroangiopatías más frecuentes son la de los vasos coronarios, cerebrales y los de las
extremidades inferiores que pueden llevar al síndrome coronario agudo, a los
accidentes vasculares cerebrales isquémicos y a la necrosis con infección y neuropatía
del pie diabético que lleva a muchos de estos pacientes a la amputación.

En los pacientes diabéticos a causa del alza de la glicemia, y cuando esta sobrepasa el
umbral tubular renal de absorción de la glucosa sale por la orina, provocando la
glucosuria que secundariamente arrastra osmóticamente el agua produciendo la
poliuria, síntoma característico de estos pacientes. La poliuria definida como orinar
sobre 2 litros en 24 horas tiende a deshidratar al paciente lo que unido al alza de la
glicemia y por ende de la osmolaridad que estimula los osmoreceptores provoca sed
en los pacientes, llamada polidipsia, otro síntoma característico. La glicemia alta en
presencia de no haber insulina o ser esta ineficiente hace que la glucosa no se pueda
ocupar como sustrato energético, de modo que el paciente pierde peso
completándose la triada sintomática característica de presentación de esta
enfermedad, poliuria, polidipsia y baja de peso.

Para hacer el diagnóstico, además de la clínica, se necesita una glicemia en ayunas


sobre 126 mg/dl o un test de tolerancia a la glucosa a las 2 horas de haber tomado 75
mg de glucosa por sobre los 200 mg/dl de glicemia. La hemoglobina glicosilada es un
examen que sirve para controlar al paciente diabético por cuento su valor se asocia a
cuanto a sido el promedio de glicemia los últimos 3 meses. Lo normal es tenerlo bajo
6%. Se habla de resistencia a la insulina cuando los valores de glicemia en ayunas están
entre 100 mg/dl y 126mg/dl o cuando después de una carga de 75 gramos de glucosa
los niveles de glicemia están entre 140mg/dl y 200mg/dl.

Por último para el tratamiento de la diabetes, este se basa en un régimen de hidratos


de carbono, tener el peso normal para la estatura del paciente y fármacos
hipoglicemiantes que estimulan la producción de insulina, mejoran la resistencia a esta
y por último el uso de insulina que puede ser de larga duración o lenta o de acción
rápida.

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