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TERATOGÉNESIS

Teratología: estudio de los monstruos. Rama de la ciencia que estudia las causas,
mecanismos y patrones de los defectos congénitos.

Teratógenos:

- Agentes que dan lugar a malformaciones congénitas.


- Agentes ambientales que actú an sobre los organismos, modificando el fenotipo
normal.
- Cualquier agente ambiental, sea físico, bioló gico o químico, por exceso o déficit,
son eventuales causales de modificaciones del genoma y del fenotipo.

Una sustancia puede o no ser teratogénica dependiendo de:

- Dosis: algunas sustancias, como el ácido retinoico, son terató genas en dosis muy
bajas que superen los valores normales. En otros casos, como el ácido valproico, la
acció n teratogénica depende má s de la concentració n má xima (pico de
concentració n) que de la duració n de la exposició n.
- Tiempo de exposició n: en otros casos, el efecto depende de la duració n de la
exposició n (tiempo durante el cual la concentració n del terató geno se mantiene
por encima de la concentració n umbral efectiva)
- Contexto genético del individuo donde se aplica

Los agentes terató genos actú an alternando diversos comportamientos celulares de


desarrollo: muerte celular, alteració n del crecimiento de un tejido (aplasia, hipoplasia,
hiperplasia), interferencia con la diferenciació n celular u otro proceso morfogenético.

Aproximadamente el 10% de los defectos congénitos, son producidos por exposició n


materna a un terató geno.

Existen sustancias con distinto potencial teratogénico. La exposición teratogénica es


aquella que puede causar el desarrollo anormal de un embrió n o feto. Esto puede
producirse, afectando la expresió n genética, apoptosis, migració n celular o la proliferació n
junto con la histogénesis, la síntesis de proteínas y á cidos nucleicos o el suministro de
fuentes de energía. Algunos agentes con potencial teratogénico actú an en forma directa
mientras que otros, lo hacen como metabolitos producidos por el metabolismo materno.

Potencialidad teratogénica: posibilidad de una sustancia de producir una alteració n del


desarrollo
Factores que influyen en la exposició n a un terató geno

El riesgo a una anomalía disminuye cuando la mujer con deseos de concebir realiza el
tratamiento adecuado antes y durante la gestació n.

Susceptibilidad: sensibilidad de un ó rgano ante un terató geno. Es decir, que a mayor


susceptibilidad, mayor será la sensibilidad al efecto del terató geno y por ende, mayor
probabilidad de que se produzca una alteració n en ese ó rgano. Algunas mutaciones
aumentan la susceptibilidad o predisposició n a sufrir alteraciones del desarrollo.

Umbral: lo que determina hasta qué punto resiste ese ó rgano al efecto del terató geno.

A mayor umbral, menor susceptibilidad. Es decir, cuanto má s resista, el ó rgano al efecto


del terató geno, menor será la sensibilidad del ó rgano ante este terató geno y por ende,
menores será n las probabilidades de que el ó rgano sufra alguna alteració n producto de
este terató geno.

Puede pasar que haya terató genos que afectan má s o menos a una persona. Todo depende
de:
- Tipo de terató geno: una misma persona puede tener distinto umbral para distintos
terató genos.
- Dosis de exposició n al terató geno
- Tiempo de exposició n al terató geno

Períodos de susceptibilidad a las alteraciones del desarrollo

Hay períodos críticos del organismo en desarrollo para cada agente. Cada agente tiene un
mecanismo particular de acció n.

Se distinguen 3 períodos principales:

- Preimplantatorio: dos primeras semanas posfecundació n. Se considera como


período refractario ya que en él, la exposició n no ha podido ser vinculada con
anomalías congénitas. Durante etapas tempranas, el embrió n aú n posee capacidad
regulativa y se considera que se comporta respecto de los agentes terató genos con
una respuesta de todo o nada: la lesió n es tan grave que conduce a la muerte del
embrió n o el embrió n se recupera debido a su capacidad regulativa y no aparece
dañ o ulterior. Esas dos primeras semanas corresponden a una época en la cual la
mujer no ha tenido un retraso en su período menstrual por lo que el embarazo
todavía se desconoce.
- Embrionario: la vinculació n entre exposició n a agentes terató genos y aparició n de
malformaciones congénitas es significativamente alta entre la 3° y 8° semana de
desarrollo
- Fetal

Se considera que en etapas má s tardías prevalecen las deformaciones y las disrupciones.


Má s tarde aú n se producen retraso del desarrollo intrauterino y trastornos funcionales. Un
terató geno puede causar diferentes efectos segú n la edad gestacional en la que actú a.

En ciertos períodos críticos de la gestació n, los embriones son má s susceptibles a los


agentes o factores que causan alteraciones en su desarrollo. Las agresiones que recibe el
embrió n en las 3 primeras semanas de la embriogénesis (período inicial antes del
comienzo de la organogénesis) no suelen dar lugar a un desarrollo defectuoso porque
matan al embrió n o son compensadas por las potentes capacidades reguladoras del
embrió n. El periodo de susceptibilidad má xima para las alteraciones del desarrollo tiene
lugar entre las semanas 3° y 8° de la gestació n, ya que durante el mismo se produce el
establecimiento inicial de la mayoría de los ó rganos y regiones corporales. El periodo de
mayor sensibilidad a los terató genos es el de la organogénesis porque hay tejidos en
rá pida diferenciació n y los cambios se vuelven irreparables produciendo malformaciones
mayores.

Entre la fertilizació n y la implantació n, se encuentra el periodo todo o nada, en donde


una injuria puede resultar en la muerte y el aborto del embrió n. En el periodo fetal, el
efecto del dañ o se debe má s al tamañ o y funció n de ó rganos y en el crecimiento fetal. Cada
ó rgano y sistema tiene su propio periodo crítico de susceptibilidad a los agentes
terató genos. Dentro de este, la plasticidad es má xima al igual que la posibilidad del
establecimiento de una anomalía fenotípica. A la vez, los períodos críticos se caracterizan
por presentar la má xima plasticidad y es el momento en donde se instalan las anomalías
del fenotipo con mayor o menor gravedad. Estas anomalías del desarrollo son lo que
permiten continuar con el desarrollo del embrió n. La normalidad en el desarrollo revela el
cará cter plá stico del desarrollo o desarrollo embrionario como un sistema complejo
adaptativo.

No es frecuente que aparezcan malformaciones estructurales graves tras la octava semana


de gestació n ya que a partir de ese momento, la mayor parte de los ó rganos ya se han
establecido adecuadamente.

Las malformaciones que se originan entre el 3° y 9° mes de gestació n, suelen ser


funcionales o causar trastornos en el crecimiento de zonas corporales ya formadas.

Un terató geno o algú n otro factor lesivo puede aparecer durante una fase inicial del
desarrollo pero que su expresió n en forma de trastorno del desarrollo no tenga lugar hasta
fases má s avanzadas de la embriogénesis. Existen otros factores que pueden causar la
destrucció n total o parcial de estructuras que ya se han formado

Antes del período crítico, la exposició n a un terató geno conocido influye poco en el
desarrollo. Durante los primeros días de dicho periodo crítico, la susceptibilidad (medida
como la incidencia o la gravedad de una malformació n) aumenta de manera rá pida y
después, disminuye a lo largo de un plazo mucho mayor.

Los distintos ó rganos muestras diferentes períodos de susceptibilidad durante la


embriogénesis. Los ó rganos que se forman en fases má s tempranas (corazó n) suelen ser
sensibles a los efectos de los terató genos antes de que los que se constituyen má s tarde
(genitales externos). Algunos ó rganos muy complejos (cerebro y ó rganos de los sentidos)
muestran períodos prolongados de susceptibilidad elevada a las alteraciones en el
desarrollo

No todos los factores terató genos actú an durante los mismos períodos del desarrollo.
Algunas influencias causan malformaciones si el embrió n queda expuesto a las mismas
durante las primeras etapas del desarrollo, pero son inocuas en fases má s avanzadas de la
gestació n. Ejemplo: talidomida muestra un periodo de peligro pequeñ o y bien definido
durante la fase embrionaria (entre la 4° y 6° semana de gestació n).
Período crítico: período en el que el ó rgano presenta la mayor susceptibilidad ante un
terató geno. Es el momento en el que esa estructura está má s vulnerable y cuando el
terató geno puede causar el mayor dañ o. El momento es distinto para cada ó rgano y para
cada terató geno
Patología- patogenia- etiología

Patología: descripció n de la anomalía

Patogenia: es el mecanismo que falló / no se produjo por el cual se produjo la anomalía.


Secuencia de eventos moleculares, celulares y tisulares que llevan a una alteració n en
particular. La patogenia de cada defecto es menos comprendida en la mayoría de los
defectos.

Etiología: factores responsables del inicio y progresió n de la alteració n. ¿Por qué surge
una enfermedad? Se responde por: causa genética, ambiental o multifactorial

Patogénesis: explica los cambios celulares y moleculares que dan lugar a anormalidades
funcionales y estructurales. ¿Có mo una enfermedad se desarrolla?

El virus de la rubéola era la causa de un síndrome de desarrollo anó malo que consistía en
malformaciones en ojos, oídos y corazó n.

Talidomida: sedante muy eficaz. Se utilizaba como un ansiolítico para las embarazadas
para las ná useas (durante el primer trimestre). Al poco tiempo, los médicos comenzaron a
observar que nacían lactantes con malformaciones congénitas infrecuentes, como la
focomelia (miembro acortado), un trastorno en el que las manos y los pies parecen surgir
de forma casi directa de los hombros y caderas; y la amelia, en la que falta todo un
miembro. Es un inhibidor del factor α de la necrosis tumoral y sigue siendo uno de los
fá rmacos en el tratamiento de la lepra y del mieloma mú ltiple. La talidomida se presenta
en su forma S y esta es la que tiene su efecto sedante. En su forma S, la talidomida no tiene
efecto terató genico. Por eso, en animales de experimentació n no hubo grandes efectos
adversos. La teoría que se sostiene es que los seres humanos y otras especies tienen una
enzima capaz de transformar la S de la talidomida en su forma R. En su forma R, la
talidomida tiene efecto teratogénico. En la embarazada, los efectos son:

- Amelia: anomalía congénita en la que falta todo el miembro.


- Focomelia: anomalía congénita en el que las manos y pies parecen surgir de forma
casi directa de los hombros y caderas.
La talidomida tiene un efecto anti angiogénico (impide la formació n de nuevos vasos).
El colapso de los vasos de los miembros podría explicar la reducció n de los elementos
del miembro.

En el caso de la amelia:

Patología: ausencia de los miembros (superiores/inferiores/ambos)

Patogenia: efecto antiangiogénico que impide la formació n de los vasos que conforman el
miembro

Etiología: ambiental (producto de la talidomida)

Tragedia de la talidomida

- Período entre fines de 1950 y principios de 1960 en el que miles de recién nacidos
nacieron con estas patologías irreversibles.
- Marcó un precedente en el modo en el que se hacían los ensayos clínicos. Se puso
en evidencia que el método de ese no podía mantenerse y que debía mejorarse.
- A partir de la tragedia de la talidomida, comenzaron a utilizarse una mayor
variedad de especies para experimentació n.
- Se sigue utilizando para algunos tipos de cá ncer y la lepra.

Síndrome alcohólico fetal

El consumo materno de alcohol durante el embarazo puede dar lugar al síndrome


alcohó lico fetal.

Los síntomas son:

- Tasa baja de crecimiento postnatal


- Microcefalia
- Retraso mental
- Malformaciones cardíacas
- Hipoplasia de las estructuras faciales

El consumo de cantidades de alcohol de solo 90g al día durante las 4 primeras semanas de
gestació n puede causar malformaciones extremadamente graves, como la
holoprosencefalia.

La formació n del embrió n y sus partes implica morfogénesis, un proceso de modelado de


formas controlado por comportamientos celulares fundamentales que resultan en
crecimiento diferencial y diferenciaciones tisulares. La perturbació n de estos procesos
debidos a una mutació n genética, la exposició n a un agente terató geno o una combinació n
de los dos procesos da origen a alteraciones del desarrollo. Es importante considerar que
las alteraciones se pueden producir a cualquier nivel de organizació n de la materia (desde
el molecular hasta el anató mico). 

Las características de los seres vivos (fenotipo) está n determinadas por interacciones
entre la informació n genética y el medio ambiente. La informació n genética está contenida
en el DNA nuclear y extranuclear. El DNA tiene secuencias codificantes (genes) y
regulativas. Las codificantes tienen informació n referida a la síntesis de las
macromoléculas informativas que participan en la regulació n del desarrollo de las
características bá sicas de todos los aparatos y sistemas como también de los rasgos
fenotipicos que nos diferencian. La informació n genética se expresa en el m arco de redes
de interacciones en las que está n incluidos los estímulos ambientales. La modificació n de
la expresió n genética por factores ambientales es el campo de estudio de la epigenética

Genotipo: totalidad de la informació n genética de un individuo

El desarrollo consiste en la generació n de un individuo sexualmente maduro a partir de la


célula huevo e involucra la operació n de varios CCD regulados por medio de la
informació n genética y factores ambientales. . El desarrollo consiste en la expresió n de un
programa que se ejecuta epigenéticamente, que implica activaciones y represiones
secuenciales de genes organizadas en cascadas y redes y que, tanto las alteraciones en la
informació n como en su expresió n, alteran el desarrollo del individuo y llevan a la
aparició n de anomalías congénitas. É stas abarcan los niveles molecular, estructural,
funcional, del metabolismo y del comportamiento. El desarrollo implica la ejecució n de un
programa de desarrollo cifrado en la informació n genética, pero su ejecució n es
epigenética, mediado por In t c-c. e influido por una variedad de factores ambientales que
involucran variables como la dieta, la infecció n y la edad que ejercen su efecto
directamente sobre la expresió n genética o sobre sus mecanismos de regulació n

El desarrollo implica la ejecució n de un programa codificado en la secuencia genética, cuya


regulació n es epigenética. Se encuentra mediado por interacciones celulares e influido por
una variedad de factores ambientales, que involucran la dieta, infecció n, edad que ejercen
la acció n sobre el genotipo

Fenotipo:

- Cualquier característica o rasgo que presente un organismo como su morfología,


desarrollo, propiedades bioquímicas, fisiología y comportamiento. Obtenida en
funció n de la expresió n del genotipo en funció n del ambiente.
- Abarca todos los niveles de organizació n del individuo desde el molecular hasta el
anató mico, el funcional e incluso el comportamiento. Se estructura desde los niveles
má s bá sicos (nivel molecular) hasta los má s complejos pasando por todos los niveles
(celular, tisular, orgá nico, aparatos o sistemas, etc.).
- El fenotipo no es exclusivamente lo que vemos a nivel anató mico sino que también a
nivel molecular, tisular. La expresió n del fenotipo está bajo dominio epigenético.
- El fenotipo final es la consecuencia de eventos de orden superior que tienen lugar en
ausencia de un control genético directo. Este tipo de fenó meno se denomina
epigenético y la mayor parte de la complejidad morfoló gica se genera dentro del
dominio epigenético.

No hay una relació n directa entre genotipo y fenotipo, sino a través de los complejos
mecanismos de morfogénesis e histogénesis. La informació n codificada en los genes
contiene un conjunto de instrucciones que no bastan para explicar la complejidad de los
mecanismos que se ponen en juego para el desarrollo de un nuevo individuo. La
complejidad fenotípica se genera progresivamente con la adquisició n de las distintas
propiedades celulares que permiten despegar todo su potencial morfogenético y
funcional.

Cada célula del organismo posee la informació n necesaria para el desarrollo y


mantenimiento del individuo adulto. La informació n se transmite de cada célula a las
células hijas y de un individuo a su descendencia. La informació n genética se almacena
mayormente en el DNA nuclear y, en mucho menor medida, en el DNA mitocondrial.

Todas las células tienen la misma informació n genética pero no todas la expresan en su
totalidad; existe una expresió n diferencial de la informació n como respuesta a la
regulació n que se inicia durante el desarrollo embrionario

Las proteínas son polímeros de aminoá cidos cuya estructura primaria determina su
estructura secundaria, terciaria, etc., sus interacciones con otras moléculas y, en
consecuencia, su funció n específica. Está n involucradas directa o indirectamente en todos
los procesos bioló gicos y, por ende, en el desarrollo

En la especie humana, aproximadamente un 10% del D N A corresponde a secuencias


codificantes de RNAm, que son traducidos en proteínas y otros varios tipos de RNA. Tales
secuencias codificantes son genes (se estiman 2 0.000 en la especie humana). El DNA se
asocia a proteínas (juntos forman la cromatina) que se disponen en una organizació n que
permite la expresió n selectiva de genes en cada tipo celular en momentos definidos del
desarrollo.

La secuencia de bases del DNA no se traduce directamente en la secuencia de aminoá cidos


de una proteína sino que se transcribe en un RNA denominado transcripto primario; éste
es procesado y se convierte en el RNA mensajero que es transportado al citoplasma donde
se traduce en la secuencia de aminoá cidos de la proteína. Los genes se hallan
estructurados en secuencias codificantes o exones (especifican secuencias de aminoá cidos
de proteínas) y secuencias no-codificantes o intrones (interactú an con otras secuencias
pró ximas o distantes que regulan la expresió n).

Gen: Se considera gen a toda secuencia de DNA que codifica la síntesis de un RNA. Son
genes las secuencias que codifican RNA mensajero, ribosó micos, transferencia y los
diversos tipos de RNA que cumplen funciones regulatorias.
- Genes estructurales: codifican proteínas que intervienen en el metabolismo, la
estructura celular o biosíntesis. Codifican las proteínas que intervienen en todos
los procesos vitales.
- Genes reguladores: codifican ARN o proteínas que regulan la transcripció n del
ADN. Codifican las proteínas que regulan las cantidades de cada una de las
especies de proteínas

Los genes que son esenciales para el desarrollo y mantenimiento de las funciones vitales
de las células, en general se hallan conservados, es decir, con poca variació n estructural en
las diferentes especies. Ello se debe a que las variaciones en su secuencia son
incompatibles con el mantenimiento de la vida.

Polimorfismo: Otros genes, en cambio, acumulan variaciones que no entrañ an pérdida o


cambio de funció n. Constituye la base de la diversidad genética entre las especies y los
individuos de una especie.

Cualquier factor que altere al fenotipo durante el desarrollo, generará la aparició n de una
anormalidad.

Normal:

- Valores má s esperados en una població n de referencia.


- Los valores que má s comú nmente vemos.
- Los valores má s frecuentes de un determinado rasgo o característica se deben a la
mejor adaptació n de los individuos. Lo normal es determinado por su frecuencia.
- Es una definició n estadística, aislada o univariable. Para determinar estos límites,
se ha recurrido a modelos matemá ticos de probabilidad como la difusió n de Gauss,
en donde la distribució n de los valores debe contemplar a todo el universo
considerado como normal.

Anormal:

- Es un valor que lo relacionamos a un síntoma y que ese síntoma es producto de


una enfermedad o es un síntoma que puede facilitar la aparició n de una
enfermedad.
- Lo anormal se presenta cuando un dato o valor en el paciente implica la presencia
de un comportamiento asociado a un proceso mó rbido, un dato que surge como
respuesta del organismo a esta enfermedad o una condició n perenne que facilita
su inicio.
- Es la variació n má s extrema y es el resultado de adaptaciones muy particulares o
variaciones momentá neas.

Las adaptaciones extremas en el contexto de desarrollo intrauterino se conocen con el


nombre de defectos congénitos.

Malformaciones congénitas:

- Alteraciones estructurales o anató micas primarias de un ó rgano o parte de un


ó rgano.
- Fallas que derivan en la ausencia de un ó rgano, o parte de él, o en una
morfogénesis anormal (déficit o exceso del crecimiento y otra alteració n
morfoló gica).
- Se producen durante períodos críticos del desarrollo diferentes para diferentes
ó rganos, pero que, en general, se hallan en un intervalo temporal, denominado
organogenia), comprendido entre la 3* \ la 8* SD.
- El término malformació n no alude específicamente a alteració n histogenética, pero
en general implica también alteraciones histoló gicas. La mayoría de ellas son de
etiología multifactorial aunque hay algunas en las cuales puede reconocerse un
patró n de herencia mendeliano.
- Fueron atribuidas a diferentes causas, desde efectos mecá nicos hasta castigos
divinos, pasando por estados anímicos o emocionales maternos. Con el tiempo, las
alteraciones congénitas fueron atribuidas a causas genéticas o ambientales.
- Son anomalías en el desarrollo morfoló gico, estructural, funcional o molecular
presente al nacimiento o detectado en etapas posteriores, causadas por eventos
que preceden al nacimiento, heredados o adquiridos durante la gestació n.
- Mientras la causa sea por algú n evento sucedido durante el desarrollo
embrionario, la anomalía es congénita.

Incidencia de las anomalías congénitas

Pérdidas gestacionales: Se estima que cerca del 50% de los embarazos se interrumpe 5-
6 días después de la fecundació n como abortos inaparentes sin haber sido diagnosticados.
Un 15% de los embarazos (embarazos ya diagnosticados por ecografía o por pruebas de
laboratorio) se pierde entre la 8* y 11* SG 2 (calculadas a partir de la fecha de la ú ltima
menstruació n | FUM |) como aborto espontá neo y, de ellos, aproximadamente el 50%
presenta alteraciones cromosó micas.

Mortalidad perinatal: Esta tasa expresa la relació n entre el nú mero de muertes


perinatales (entre la 28* SG y 7 días posnatales) cada 1.000 recién nacidos vivos.

Anomalías congénitas en fetos muertos y nacidos muertos: Aproximadamente el 15 a


20% de los fetos muertos y nacidos muertos se debe a alteraciones del desarrollo.

Anomalías congénitas en neonatos: desde defectos leves que no comprometen la


sobrevida hasta los má s graves que provocan la muerte. El 3% de los recién nacidos
presentan anomalías severas detectadas poco después del nacimiento y 10% anomalías de
cará cter leve. Este índice varía en los distintos países debido a factores tales como: a)
calidad de vida de la població n (causas ambientales que alteran el desarrollo), b) atenció n
primaria de la salud (vacunas para prevenir la rubéola o la varicela, enfermedades
infectocontagiosas), c) calidad de los registros, d) estrategias de diagnó stico prenatal
(ecografía, disponibilidad de estudios genéticos, etc.), e) la legislació n vigente (legalidad
de aborto).

Según la repercusión clínica

- Anomalías mayores: son las que tienen consecuencias médica, cosmética o


funcional. Afectan a alrededor del 2% de los nacidos vivos y un 2% adicional de los
menores de 5 añ os. Ejemplos: fisura de labio, fisura de paladar, agenesia renal.
- Anomalías menores: son consideradas variantes de la normalidad cuando se
presentan en má s del 4% de la població n y anomalías menores propiamente
dichas cuando su frecuencia es menor. Su importancia reside en que la existencia
de dos o má s de ellas aumenta la chance de que coexista una anomalía mayor.

El 2% o 3% de los recién nacidos vivos muestras una malformació n congénita reconocible.


Las malformaciones congénitas ocupan un lugar significativo entre las causas de
mortalidad infantil (má s del 20%).

Los defectos del nacimiento van desde alteraciones simples que afectan a una sola
estructura hasta grotescas deformidades que pueden afectar una regió n corporal
completa.

La génesis de los defectos congénitos se trata de una interacció n entre el aporte genético
que recibe el embrió n y el ambiente en que se desarrolla. La informació n bá sica está
codificada en los genes, pero a medida que se despliegan las instrucciones genéticas, las
estructuras u ó rganos en desarrollo está n sometidos a influencias micro o
macroambientales que pueden ser compatibles con el desarrollo normal o interferir en el
mismo.

En el caso de las malformaciones de origen genético o debidas a aberraciones


cromosó micas, el defecto es intrínseco y se suele expresar en un ambiente normal. Las
causas puramente ambientales pueden interferir en los procesos embrioló gicos en
situaciones en las que el genotipo es normal. En otros casos, existe una interacció n entre el
ambiente y la genética.

Entre los factores asociados a un aumento en la incidencia de malformaciones congénitas:

- Edad de los padres. Ejemplo: síndrome de Down en los hijos de mujeres mayores
de 35 añ os.
- Estación del año. Ejemplo: anencefalia es má s frecuente en los nacidos en enero.
Como los factores principales que provocan la anencefalia se producen durante el
primer mes de la vida embrionaria, los investigadores deben buscar las posibles
causas ambientales con mayor prevalencia en el mes de abril. Se ha demostrado
que la anencefalia está relacionada con la deficiencia de á cido fó lico en la madre.
Los suplementos de ácido fó lico en la dieta de las mujeres en edad fértil reducen
de forma significativa la aparició n de defectos del tubo neural
- País de residencia
- Raza. Ejemplo: la incidencia de fisuras palatina es el doble entre las personas de
raza blanca que entre las de raza negra.
- Tendencias familiares: las malformaciones que tienen una base genética se
observan con mayor frecuencia en ciertos grupos familiares, sobre todo si existe
algú n grado de consanguinidad en los matrimonios a lo largo de las generaciones.
Ejemplo: mayor incidencia de dedos supernumerarios en algunas familias de la
comunidad amish.
Tipos de desarrollo anormal
Malformació n: defecto estructural de un ó rgano entero o de parte del mismo o de la mayor
parte de una regió n corporal que es causado por un proceso anormal intrínseco a su desarrollo.
Ejm: coloboma
Anormalidades Disrupció n o ruptura: defecto en un ó rgano o parte del cuerpo causado por un proceso que
de estructuras interfiere con el desarrollo original normal. Las presiones mecá nicas llegan a producir
individuales amputaciones, resecciones o fusiones de un segmento corporal como un miembro o parte de él.
Se usa también para describir anomalías resultantes de una interrupció n del riego vascular que
trae como consecuencia una alteració n anatomofuncional Ejm: talidomida como inductora de la
focomelia; síndrome de bandas amnió ticas (amputació n) y el síndrome de Poland (por
supresió n del riego vascular)
Deformació n: anormalidad estructural causada por fuerzas mecá nicas. Alteraciones de la forma
debidas a fuerzas mecá nicas que actú an sobre un ó rgano o una parte del feto que por lo demá s,
se desarrolla normalmente. Las deformaciones se producirían en las ú ltimas semanas del
desarrollo. Suelen ser má s frecuentes en el primer embarazo, supuestamente debido al mayor
tono muscular del ú tero y los mú sculos abdominales. Ejm: bridas amnió ticas
Displasia: anomalía de un tejido debido a un proceso intrínseco del desarrollo de carácter
anormal. Alteraciones histogenéticas que modifican la organizació n de un tejido. Pueden alterar
la forma y/o funció n de uno o má s ó rganos. Suelen deberse a defectos en un ú nico gen
(herencia monogénica o mendeliana) como, por ejemplo, la displasia esquelética acondroplasia
o la disostosis cleidocraneal
Según los órganos comprometidos
Secuencia: patró n de malformaciones mú ltiples derivado de un
proceso del desarrollo anterior o de un factor mecá nico. Ejm: secuencia
Defectos que afectan a más de una de Potter. Cuadros en los que una cierta alteració n primaria
estructura desencadena, en forma sucesiva, alteraciones en otros ó rganos o partes
del embrió n. Se diferencia de la malformació n en que en ésta cada
lesió n es primaria. En los casos de oligoamnios, por ejemplo, puede
haber compresiones del feto que producen deformaciones (facies
aplanada, pie bot, deformaciones del acetá bulo o arqueamiento de los
miembros).
Síndrome: grupo de malformaciones de estructuras diferentes debido a
una casa principal ú nica, pero que actú a a través de mú ltiples vías de
desarrollo. Conjunto de anomalías que poseen causa comú n. Para
algunos basta una íntima relació n etiopatogénica para ser con siderado
síndrome. El riesgo de recurrencia depende de la causa. Ejemplos:
síndrome de Down, síndrome de bandas amnió ticas. Ejm: trisomía del
cromosoma 13.
Asociación: grupo de anomalías vistas en má s de un individuo, que por
el momento no se puede atribuir a una causa definitiva. Alteraciones
que coexisten con una frecuencia mayor que la esperable por azar, por
lo cual es de causa desconocida pero no casual. Alude a anomalías
mú ltiples no reconocidas como defectos de campo, secuencias o
síndromes. Un ejemplo clá sico es la asociació n C H A R G E
Anomalía aislada: alteraciones que afectan un ú nico ó rgano o sistema.
Se designa mencionando la estructura comprometida, por ejemplo
cardiopatía congénita aislada.
Complejo o defecto de campo de desarrollo: alteraciones que
ocurren en estructuras (ó rganos o regiones corporales) complejas,
cuyos desarrollos se hallan vinculados por contigü idad o por efecto de
interacciones de desarrollo o porque son afectadas simultá neamente
por un factor terató geno comú n, como por ejemplo la acció n de fuerzas
mecá nicas, defectos de la irrigació n, etc. Ejemplo: microsomía
hemifacial, holoprosencefalia y ciclo pía, etcétera.

Según el tipo de alteración histológica


Déficits en la proliferació n suficientemente intensos como para que el
Aplasia esbozo de un ó rgano no crezca. Por dicho motivo a veces se lo asocia al
término agenesia (la falta de formació n del esbozo por falla en la
determinació n de éste).
Hipoplasia Déficits en la proliferació n con deficiente crecimiento de un ó rgano
Hiperplasia La situació n opuesta con crecimiento en exceso

El diagnó stico temprano permite minimizar secuelas; diferenciar una malformació n


aislada de una secuencia o de un síndrome permite optimizar recursos para la bú squeda
etioló gica y el adecuado asesoramiento genético.

Tipos de desarrollo anómalo

Las malformaciones mú ltiples se pueden producir por mú ltiples razones. Un ú nico factor
terató geno actú a sobre los primordios de varios ó rganos durante los períodos susceptibles
de desarrollo. Puede existir un defecto genético o cromosó mico que altere a varios genes
que influyen en diversas estructuras o que un ú nico defecto metabó lico afecte a distintas
estructuras en desarrollo a través de mecanismos diferentes.

Causas de las malformaciones

- La causa del 50% de las malformaciones congénitas es desconocida


- Cerca del 18% se puede atribuir a causas genéticas:
o Monogénicas (8%): afectan a un solo gen
o Cromosó micas (10%): afectan a uno o má s cromosomas que
contienen varios genes
- Menos del 7% se debe a factores ambientales (terató genos físicos o químicos)
- El 25% de las malformaciones tienen un origen multifactorial (combinació n de
factores ambientales y genéticos)

Factores genéticos

Estas malformaciones pueden producirse por alteraciones en la divisió n cromosó mica o


por mutaciones en los genes. Las anomalías cromosó micas se suelen clasificar como
errores estructurales o numéricos y se originan en la divisió n celular, en especial en la
meiosis. Los errores numéricos de los cromosomas dan lugar a aneuplodía, definida como
un nú mero total de cromosomas que no es el normal de 46.
Alteraciones en el número de cromosomas

Las alteraciones en el nú mero de cromosomas se asocian a la muerte prenatal y a


síndromes de estructuras anó malas.

Poliploidía:

- Es un trastorno en el que la cantidad de cromosomas es un mú ltiplo superior a 2


del nú mero haploide de cromosomas (23).
- Causas (en especial de la triploidía): la fecundació n de un ó vulo por má s de un
espermatozoide o la falta de separació n de un cuerpo polar durante la meiosis.

Monosomía y trisomía: se deben de manera característica a la falta de separació n


durante la meiosis. Cuando tiene lugar esta situació n, un gameto muestra monosomía y el
otro presenta trisomía del mismo cromosoma

Monosomía: falta de uno de los elementos en un par de cromosomas. Pueden sobrevivir


algunos individuos con monosomía de los cromosomas sexuales (genotipo 45XO). Estos
pacientes sufren el síndrome de Turner, que cursa con un fenotipo femenino pero con
gó nadas estériles.

Trisomía: presencia de tres miembros en un par cromosó mico. Existen tres cuadros de
trisomía autosó mica que dan lugar a recién nacidos con asociaciones características de
malformaciones:

- Trisomía 21 o síndrome de Down: muestran un típico retraso mental y presentan


una cara ancha con puente nasal aplanado, ojos separados y pliegues epicá nticos
prominentes
- Trisomía 13: se observa a menudo polidactilia
- Trisomía 18

Las trisomías 13 y 18 dan lugar a fetos con malformaciones graves, muchos de los cuales
no sobreviven hasta el parto. Los lactantes con trisomía 13 y trisomía 18 presentan
retraso mental grave y otras malformaciones del sistema nervioso central. Es frecuente la
presencia de fisura palatina y paladar ojival. Los lactantes con ambos síndromes muestran
otras malformaciones de las extremidades como los pies en mecedora que consisten en un
redondeamiento de la planta. y una prominencia de los talones. La mayor parte de los
lactantes con trisomía 13 o 18 fallece durante el primer o segundo mes después del
nacimiento.

Alteraciones en la estructura de los cromosomas

Existen varias alteraciones en la estructura de los cromosomas que pueden dar lugar a
malformaciones durante el desarrollo. Algunas de estas anomalías cromosó micas se deben
a la rotura de los propios cromosomas, inducida por factores ambientales como la
radiació n y ciertos terató genos químicos. Este tipo de error estructural suele ser específico
para un individuo dado y no se transmite a sucesivas generaciones. Otros tipos de
alteraciones estructurales de los cromosomas se generan durante la meiosis y, si afectan a
las células germinales, pueden ser hereditarios. Son anomalías frecuentes en la estructura
de los cromosomas las translocaciones recíprocas, la formació n de isocromosomas y las
deleciones y duplicaciones (fig.8.11). Una malformació n congénita bien definida debida a
una deleció n en el brazo corto del cromosoma 5 es el síndrome del maullido de gato.

Mutaciones genéticas

Numerosas mutaciones genéticas se expresan en forma de alteraciones morfoló gicas.


Estas mutaciones pueden afectar a genes dominantes o recesivos de los autosomas o de
los cromosomas sexuales.

Factores ambientales

Muchos elementos ambientales como infecciones intrauterinas, agentes químicos,


medicamentos, agentes físicos como el calor y radiació n y desó rdenes metabó licos
maternos como la diabetes alteran el desarrollo.

Los factores ambientales modifican la informació n genética misma (mutaciones) o la


expresió n genética (fenó meno epigenético). La informació n bá sica está codificada en los
genes pero durante su expresió n se expone a factores ambientales que pueden
modificarla. Algunas alteraciones genéticas se expresan aun en un ambiente favorable,
otras só lo lo hacen en determinadas condiciones

Algunos factores ambientales interfieren gravemente con la expresió n de genes que tienen
la informació n adecuada. Desde el punto de vista médico las interacciones informació n
genética-ambiente son de fundamental importancia porque, si bien por el momento no se
puede modificar la constitució n genética de un individuo, sí se puede actuar sobre los
factores ambientales que operan como factores de riesgo

Diversos factores ambientales está n relacionados con malformaciones congénitas:

- Teratógenos químicos: muchas sustancias son terató genas en los animales de


experimentació n o que dan lugar a malformaciones congénitas en el ser humano
o Antagonistas del ácido fó lico: son muy letales para el embrió n y se
utilizaron en ensayos clínicos como sustancias abortivas (agentes
que causan el aborto). Ejemplo de un antagonista del á cido fó lico
tó xico para el embrió n: la aminopterina, que produce mú ltiples
malformaciones graves como anencefalia, retraso del crecimiento
o Antiepilépticos: Varios antiepilépticos (anticonvulsivantes) de uso
comú n son conocidos o potenciales terató genos. Ejemplo: fenitoína
(antes conocida como difenilhidantoína) da lugar al «síndrome de
la hidantoína fetal», constituido por diversas malformaciones como
alteraciones del crecimiento, defectos craneofaciales hasta en la
tercera parte de los embriones que sufren exposició n a este
fá rmaco durante la gestació n. La trimetadiona también causa un
síndrome con anomalías como la implantació n baja de los
pabellones auriculares, el labio leporino y la fisura palatina, y las
malformaciones esqueléticas y cardíacas.
o Hormonas androgénicas: La administració n de hormonas
androgénicas a mujeres embarazadas para el tratamiento de
tumores o para prevenir las amenazas de aborto ha dado lugar al
nacimiento de cientos de lactantes de sexo femenino con grados
diversos de masculinizació n de los genitales externos. Estas
alteraciones consisten en la hipertrofia del clítoris y a menudo
grados variables de fusió n de los pliegues genitales, con formació n
de una estructura de tipo escrotal
o Sedantes y tranquilizantes: La talidomida es un fá rmaco
intensamente terató geno cuando se administra incluso só lo una vez
durante un período muy concreto de la gestació n, en especial entre
los días 25 y 50, cuando una sola dosis de 100 mg puede ser
suficiente para causar malformaciones congénitas. É ste es el
período en que se establecen los primordios de la mayor parte de
los ó rganos y sistemas. Las lesiones má s características son las
anomalías graves de los miembros, aunque el síndrome de la
talidomida también consta de alteraciones en el sistema
cardiovascular, ausencia de pabellones auriculares y diversas
malformaciones del sistema urinario, el gastrointestinal y la cara.
o Agentes antineoplá sicos: son intensamente terató genos, debido en
gran parte a que está n diseñ ados para destruir o anular a las células
que se dividen con rapidez. La aminopterina es uno de estos
agentes
o Alcohol: es la droga que mayor cantidad de defectos congénitos
produce. El consumo materno de alcohol durante el embarazo
puede dar lugar a una constelació n bien definida de alteraciones del
desarrollo, entre ellas una tasa baja de crecimiento posnatal,
microcefalia, retraso mental, malformaciones cardíacas e hipoplasia
de las estructuras faciales. Esta constelació n de malformaciones se
conoce popularmente como síndrome alcohólico fetal y las
estimaciones sugieren que algú n tipo de síndrome alcohó lico fetal
puede afectar al 1-5% de los recién nacidos vivos. El consumo de
cantidades de alcohol de só lo 90 g al día durante las cuatro
primeras semanas de gestació n puede causar malformaciones
extremadamente graves, como la holoprosencefalia.
La exposició n al alcohol en fases má s avanzadas de la gestació n
tiene menos posibilidades de originar alteraciones anató micas
significativas en el feto, aunque, debido a la compleja evolució n de
la maduració n psicoló gica del cerebro a lo largo del embarazo,
pueden producirse trastornos del comportamiento menos
llamativos. No obstante, existen diferencias notables respecto a la
normalidad en la forma del cuerpo calloso, la estructura principal
que conecta los hemisferios cerebrales derecho e izquierdo y en el
cerebelo que puede estar hipoplá sico. Muchas de las anomalías del
desarrollo de la cara y del cerebro pueden ser atribuidas a
fenó menos de muerte celular en la porció n anterior de la placa
neural, que sirve como centro señ alizador en el embrió n temprano.
A pesar de que el cociente intelectual (CI) de los pacientes con
síndrome alcohó lico fetal puede ser normal, estas personas pueden
tener problemas en el reconocimiento de las consecuencias de sus
actos o en la planificació n del futuro.
o Á cido retinoico o vitamina A: Los derivados del ácido retinoico se
utilizan en el tratamiento del acné, aunque los investigadores han
establecido que el ácido retinoico es un terató geno potente cuando
se administra por vía oral. Esta sustancia puede dar lugar a una
amplia gama de defectos, la mayor parte de los cuales se relacionan
con los derivados de la cresta neural craneal y pueden causar varias
alteraciones de las estructuras faciales, del infundíbulo de salida del
corazó n y del timo. A través de una compleja secuencia de proteínas
de unió n citoplá smicas y de receptores nucleares, el á cido retinoico
influye en los genes Hox, en especial en los que se expresan en las
regiones craneal y faríngea, lo que produce alteraciones en los
rombó meros anteriores y en las células de la cresta neural
derivadas de ellos.
o Antibió ticos: Existen dos antibió ticos cuya administració n a
mujeres gestantes se ha asociado a malformaciones congénitas. La
estreptomicina a dosis elevadas puede causar sordera por
alteració n del oído interno. La tetraciclina administrada a la madre
durante las fases tardías de la gestació n atraviesa la barrera
placentaria y busca las zonas de calcificació n activa en los dientes y
los huesos del feto. Los depó sitos de tetraciclina producen una
coloració n amarillenta en dichos dientes y huesos
o Otros fá rmacos: el anticoagulante warfarina, tienen conocidos
efectos terató genos. El Agente Naranja, y varias drogas sociales (p.
ej., la dietilamida del á cido lisérgico [LSD], la marihuana) han sido
consideradas a menudo como causantes de malformaciones
congénitas, aunque las pruebas existentes hasta el momento no son
del todo convincentes. Varios estudios han mostrado la aparició n
de diversas complicaciones del embarazo debidas al uso de cocaína,
que puede atravesar con facilidad la barrera placentaria. Ademá s de
malformaciones estructurales en ó rganos como el cerebro, el
consumo de cocaína se ha relacionado con el retraso del
crecimiento intrauterino, con partos prematuros y abortos
espontá neos
o Características bioquímicas: las propiedades físico- químicas de
sustancias del medio poseen gran influencia sobre su posible acció n
teratogénica ya que de dichas propiedades depende su transporte a
través del corion y su acceso al embrió n.
o Existen sustancias o factores protectores, como el ácido fó lico, que
disminuyen la susceptibilidad o el riesgo de producció n de fallas del
cierre del tubo neural (administrada periconcepcionalmente en una
dosis de 0,4 mg/día). El efecto protector es má s marcado para el
mielomeningocele que para la anencefalia.
- Hormonas
- Infecciones maternas: El mismo microorganismo patogénico puede causar
lesiones por interferencia en los procesos embrionarios o por destrucció n de
tejidos diferenciados, segú n el momento en que dicho microorganismo ataca al
embrió n. La mayor parte de las enfermedades infecciosas que producen
malformaciones congénitas son víricas, con las notables excepciones de la
toxoplasmosis y la sífilis. El momento en que tiene lugar la infecció n es
fundamental respecto al tipo de efectos que se producen sobre el embrió n. La
rubéola es responsable de un porcentaje elevado de malformaciones durante el
primer trimestre, mientras que las infecciones por citomegalovirus suelen causar
la muerte del embrió n en ese mismo período. Los microorganismos causantes de
la sífilis y la toxoplasmosis atraviesan la barrera placentaria durante el período
fetal y en gran medida causan malformaciones al destruir tejidos ya existentes.
- Factores nutricionales

- Factores físicos:
o Radiació n ionizante: es un terató geno potente y la respuesta a la
misma depende tanto de la dosis administrada como de la fase de
la gestació n en que el embrió n sufre la radiació n. Puede producir
zonas de rotura en el ADN y a mutaciones. Una medida prudente en
las mujeres embarazadas es evitar la exposició n a la radiació n
siempre que se pueda, aunque la dosis utilizada en los estudios
radioló gicos diagnó sticos es tan pequeñ a que el riesgo resulta
mínimo. Aunque la radiació n ionizante puede causar diversas
malformaciones en los embriones (p. ej., fisura palatina,
microcefalia y malformaciones en los ó rganos só lidos, los
miembros y el esqueleto), en los casos de exposició n a la radiació n
son muy prominentes los defectos en el sistema nervioso central.
o Otros factores físicos: el efecto de las concentraciones excesivas de
oxígeno sobre los recién nacidos prematuros. En las épocas en que
ésta era una prá ctica comú n, se observaba fibroplasia retrolental
en má s del 10% de los lactantes prematuros con un peso corporal
inferior a 1.500 g y en cerca del 1% de los mismos cuyo peso
oscilaba entre 1.500 g y 2500 g.

Factores maternos: La diabetes materna se asocia a menudo a un peso elevado al


nacer y a muerte intrauterina. La diabetes en el embarazo comprende la diabetes
gestacional y la diabetes preexistente. El riesgo de malformaciones es de 2 a 8
veces mayor que en la població n general.
Algunas malformaciones estructurales son varias veces má s comunes en los hijos
de madres diabéticas que en los nacidos de mujeres de la població n general. La
nutrició n materna no parece ser un factor principal en la aparició n de
malformaciones (el á cido fó lico es una excepció n notable), aunque si la madre
muestra una deficiencia grave de yodo es probable que el recién nacido muestre
los síntomas del cretinismo (retraso del crecimiento, retraso mental, manos cortas
y anchas, dedos cortos, piel seca y dificultades respiratorias). En la actualidad, hay
pruebas considerables de que el consumo intenso de cigarrillos por parte de las
mujeres embarazadas da lugar a un aumento en el riesgo de peso bajo al nacer y a
una tasa baja de crecimiento después del parto.
- Factores mecánicos: Muchas de las malformaciones má s frecuentes como el pie
zambo, la luxació n congénita de la cadera y ciertas deformidades del crá neo se
pueden atribuir en gran parte a la existencia de presiones intrauterinas anó malas
sobre el feto. A menudo, esta situació n puede estar relacionada con
malformaciones uterinas o con una cantidad reducida de líquido amnió tico
(oligohidramnios). Las bridas amnió ticas que constriñ en a los dedos o a las
extremidades del feto han sido implicadas como causa de amputaciones
intrauterinas

La implementació n de ciertas medidas de atenció n primaria de la salud podría reducir


significativamente la incidencia de las anomalías congénitas:

- Programació n de embarazos
- Consulta preconcepcional
- Inmunizació n de las mujeres en edad fértil
- Cuidado e higiene de los alimentos
- Educació n para la reproducció n
- Administració n de á cido fó lico periconcepcional
- Control de la diabetes
- Evitar el consumo de alcohol en las mujeres en edad fértil
- Administrar fá rmacos solo si la relació n riesgo/beneficio lo justifica

Trastornos del desarrollo que causan malformaciones

En la aparició n de una malformació n congénita concreta pueden estar implicados


varios mecanismos que alteran el desarrollo. Por ejemplo, las duplicaciones, las
interacciones tisulares de inducció n anó malas, la ausencia de muerte celular normal, la
formació n defectuosa de estructuras tubulares, las alteraciones en la reabsorció n
tisular, la falta de migració n, la detenció n del desarrollo, la destrucció n de estructuras
ya formadas, la falta de fusió n o de unió n, los cuadros de hipoplasia o hiperplasia, los
defectos en los receptores, las anomalías en los campos de desarrollo, los efectos
secundarios a otras alteraciones del desarrollo y los defectos en las capas de células
germinales.

Duplicaciones e inversión de la asimetría

Un ejemplo clá sico de duplicació n es el de los gemelos idénticos. Por lo general, ambos
son completamente normales.

Siameses: la duplicació n no es completa y se produce el fenó meno de los gemelos


unidos. É stos pueden estar unidos casi por cualquier parte y en cualquier grado

Trastorno del gemelo parasitario: es un ejemplo de unió n en el que uno de los


miembros de la pareja tiene un aspecto relativamente normal, pero el otro está
representado por un cuerpo mucho má s pequeñ o, a menudo constituido só lo por el
torso y los miembros, que aparece unido a zonas como la boca o la parte inferior del
abdomen del gemelo huésped

Situs inversus: En casos infrecuentes (má s o menos en 1 de cada 10.000


nacimientos), un individuo por lo demá s normal muestra una inversió n parcial o
completa de la asimetría de los ó rganos internos.

Alteraciones en las interacciones tisulares inductivas

La ausencia de inducció n o los defectos de la misma en las primeras fases del


desarrollo (p. ej., la inducció n del sistema nervioso central) es incompatible con la
vida, pero las alteraciones en inducciones má s tardías pueden causar malformaciones.
La ausencia del cristalino (afaquia) o de un riñ ó n (agenesia renal) puede deberse a una
interacció n inductiva ausente o anó mala

Ausencia de muerte celular

La muerte celular controlada por mecanismos genéticos o epigenéticos (influencias del


ambiente superpuestas al fondo genético) es un mecanismo significativo para el
modelado de muchas regiones corporales. La ausencia de los fenó menos normales de
muerte celular en la zona interdigital ha sido considerada la causa de la sindactilia
(dedos en membrana) y de la persistencia anó mala de la cola

Alteraciones en la formación de las estructuras tubulares

La formació n de un tubo a partir de una banda de células epiteliales es un mecanismo


fundamental en el desarrollo. Las alteraciones relacionadas con la espina bífida
constituyen un ejemplo clá sico de anomalías en la formació n de tubos, ya que en este
caso el trastorno se debe a la fusió n incompleta del tubo neural

Alteraciones en la reabsorción tisular

Algunas estructuras existentes en el embrió n inicial deben ser reabsorbidas para que
tenga lugar el desarrollo normal subsiguiente, como por ejemplo las membranas que
cubren las futuras aberturas oral y anal. Estas membranas está n constituidas por
lá minas opuestas de ectodermo y endodermo, pero cuando existen células
mesodérmicas que se interponen entre ambos componentes y este tejido muestra
vascularizació n, se produce una persistencia característica de la membrana. La atresia
anal es una malformació n frecuente de este tipo

Alteraciones de la migración

La migració n es un fenó meno relevante en el desarrollo que tiene lugar a nivel celular
o de ó rganos completos. La cresta neural es un ejemplo clá sico de migració n masiva a
nivel celular, y las alteraciones de la migració n pueden dar lugar a malformaciones en
cualquiera de las estructuras que se originan a partir de la cresta neural (p. ej., el timo,
los infundíbulos de salida del corazó n o la médula suprarrenal). En el nivel de los
ó rganos completos, los riñ ones emprenden una migració n destacada en la cavidad
abdominal desde su origen en la regió n pélvica, y los testículos migran desde dicha
cavidad abdominal hasta el escroto. Los riñ ones pélvicos y los testículos que no
descienden (criptorquidia) son situaciones relativamente comunes
Detención del desarrollo

En los inicios de la teratología, algunas malformaciones se consideraban como la


persistencia de estructuras en un estado que era normal en las fases iniciales del
desarrollo. Muchos de los patrones de labio leporino y de fisura palatina son ejemplos
de detenció n del desarrollo, aunque no es correcto afirmar que el desarrollo haya
quedado totalmente detenido entre la sexta y la octava semana de la embriogénesis.
Otro ejemplo de la persistencia de una fase previa en el desarrollo es el conducto
tirogloso, en el que las células epiteliales persistentes indican el camino de la glá ndula
tiroides en su migració n desde la base de la lengua hasta su posició n normal.

Destrucción de estructuras formadas

Muchas enfermedades o productos químicos terató genos causan malformaciones al


destruir estructuras que ya estaban presentes. Si la estructura se encuentra en un
estadio primordial precoz, cualquier tejido que deba derivarse de este primordio está
ausente o muestra malformació n. La interferencia en el aporte sanguíneo de una
estructura puede dar lugar a patrones extrañ os de malformaciones. En la génesis de la
focomelia, la lesió n de los vasos sanguíneos proximales puede destruir los primordios
de los segmentos proximales de los miembros, pero las células del esbozo distal del
miembro que dan lugar a las manos o a los pies pueden quedar respetadas si
permanece intacta la microvascularizació n distal del esbozo del miembro.

Falta de fusión o de unión

Si dos estructuras como las láminas del paladar no se unen en el momento crítico es
posible que permanezcan separadas. De manera similar, los desplazamientos relativos
del mesénquima (unió n), implicados en la configuració n de la mandíbula inferior,
pueden no tener lugar a tiempo o con la intensidad suficiente. É sta es la causa de
algunas malformaciones de la parte inferior de la cara

Hipoplasia e hiperplasia

La formació n normal de la mayor parte de los ó rganos y de las estructuras complejas


requiere una cantidad y una distribució n precisas de la proliferació n celular.

Si la proliferació n celular en un ó rgano en formació n es anó mala, la estructura puede


resultar demasiado pequeñ a (hipoplá sica) o demasiado grande (hiperplá sica). Incluso
las alteraciones menores del crecimiento pueden causar problemas graves en regiones
complejas como la cara. En ocasiones, se produce el gigantismo de una estructura
como un dedo o todo un miembro.

Defectos del receptor

Algunas malformaciones congénitas pueden atribuirse a defectos en moléculas


receptoras específicas. Uno de los primeros trastornos reconocidos de este tipo es el
síndrome de feminizació n testicular, en el que la ausencia de receptores para la
testosterona da lugar al desarrollo de un fenotipo femenino típico en un individuo
genéticamente masculino

Campos defectuosos
La morfogénesis adecuada de numerosas regiones del cuerpo está bajo el control de
campos morfogénicos poco conocidos. Estas regiones está n controladas por un
programa global de desarrollo. Las alteraciones en los límites o en los controles
globales de los campos pueden en ocasiones causar malformaciones masivas. Un
ejemplo es la fusió n de los campos de los miembros inferiores, que probablemente se
debe a un defecto mayor en el campo que controla el desarrollo de la regió n caudal del
cuerpo. Esta anomalía, en la que el individuo tiene un aspecto similar al de una sirena,
se denomina sirenomelia, y representa un ejemplo extremo de lo que se ha llamado
síndrome de regresió n caudal, resultante de la funció n anó mala del gen T

Efectos secundarios a otras alteraciones del desarrollo

Debido a que gran parte del desarrollo normal implica la coordinació n estrecha de
procesos individuales o la formació n de estructuras completas, no es sorprendente
que muchas malformaciones representen manifestaciones secundarias de otros
procesos embrionarios alterados. Hay numerosos ejemplos de ello en el desarrollo
craneofacial. Algunos casos de fisuras palatinas han sido atribuidos al ensanchamiento
de la base craneal, de manera que las lá minas del paladar, quizá normales por
completo, no pueden establecer contacto en la línea media.

Alteraciones en las capas germinales

El conocimiento del desarrollo normal puede explicar una serie de anomalías en


apariencia diversas. Entre las displasias ectodérmicas, que se basan en alteraciones de
la capa germinal ectodérmica, se pueden incluir malformaciones tan diversas como la
presencia de pelo fino, dientes malformados, estatura corta, piel seca y descamada y
uñ as hipoplá sicas.

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