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TEMA I.-
La prueba en general:
Es la actividad de demostrar la coincidencia de un enunciado con la realidad. Esta actividad
tiene lugar en las ciencias naturales como la química, la física, la biología etc. También en
la ciencias sociales, como la historia.
Desde hace siglos el instrumento del cual se sirven las partes para demostrar la veracidad
de los hechos alegados y del cual se sirve el juez para decidir sobre la verdad o falsedad de
tales alegatos fácticos, es la prueba.
Así que, prueba jurídica, es la actividad, admisible conforme al ordenamiento jurídico, para
la averiguación y comprobación de los hechos con relevancia jurídica y en el caso del
proceso, los hechos sobre los cuales verse la controversia judicial. O sea, es la actividad de
comprobar los hechos en que se fundamentan las pretensiones o las excepciones planteadas
por las partes.
Es muy difícil, por no decir imposible, que encontremos un proceso civil donde la discusión
sea únicamente jurídica. Con el recaudo de las pruebas, con su manejo adecuado,
procuramos que los hechos tal y como ocurrieron en el mundo fuera del proceso, sean
demostrados en el proceso, porque si no logramos reconstruir el hecho tal como ocurrió y lo
subsumimos en la hipótesis general abstracta de la norma jurídica con la cual se juzga,
estamos juzgando otra cosa y creamos zozobra. Establecer la realidad de los hechos (la
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verdad) es una premisa de la decisión justa. (Las otras premisas, según el maestro Michele
Taruffo son: un debido proceso y la adecuada selección, interpretación y aplicación de la
norma jurídica para resolver el caso)
En el proceso judicial, cada parte formula alegatos, los fundamenta, generalmente trata de
plantearlos del modo más persuasivo que le resulta posible, haciendo uso de los
instrumentos que ofrece la retórica. Sin embargo, cuando se plantean hechos
controvertidos, la decisión judicial, no puede adoptarse con base en los alegatos más
persuasivos, sino con base en la prueba, de acuerdo con los hechos establecidos a través de
la prueba y con arreglo en el derecho.
Es verdad que el juez debe de alguna manera persuadirse de la verdad o falsedad del
enunciado fáctico y no es del todo errado decir que su convencimiento puede ser también
fruto de la persuasión, pero debe ser con arreglo a pruebas admisibles, no puede ser pruebas
extrajudiciales, conocimiento privado, pruebas ilícitas, pruebas sometidas a control crítico,
verificando la autenticidad, la credibilidad de la prueba o y con arreglo a un razonamiento
lógico, racional, generalmente aceptado, Lo cual puede estar en contraposición con sus
personales persuasiones derivadas de otras causas, de modo que la persuasión subjetiva no
cuenta y la decisión tiene que fundamentarse conforme a informaciones objetivamente
controlables y en argumentaciones lógicamente válidas.
“En el proceso entendido como libre competición de las partes, en que el juez tiene solo
una función equivalente a la de un árbitro deportivo, vence por definición el más hábil o el
1
Considera el maestro italiano Michele Taruffo, que en el estadio actual de nuestra civilización, el proceso
judicial no debe concebirse como un subrogado de la guerra sino como un instrumento para lograr la
convivencia entre los seres humanos a través de la justicia. “La prueba”. Marcial Pons. Madrid. 2008. pág.
21.
3
más fuerte, no quien tendría razón de conformidad con los hechos y con las reglas de
derecho.” (Taruffo “Sobre las fronteras, escritos sobre la justicia civil. P. 272).
Decía Santiago Sentís Melendo, que la figura del abogado va unida a la prueba más
íntimamente que a cualquier otro aspecto de la vida del derecho y del proceso. Y es que, es
un tema profundamente teórico pero, sobre todo, esencialmente práctico. Lo más práctico
que el abogado ha de hacer en su vida profesional, en su actividad ante los tribunales de
justicia, es probar.”3 Es tratar de conectar los hechos de la llamada “teoria del caso” con la
realidad. Generalmente, el éxito en el manejo de un proceso judicial, no está en las
especulaciones jurídicas, sino en la posibilidad de poder acreditar en el proceso la realidad
de lo sucedido, por ello, el punto neurálgico del proceso es el recaudo de la prueba, su
transporte al proceso, el centro de la tormenta se localiza en este aspecto.
Los medios de prueba, son instrumentos de conocimiento, los vehículos a través de los
cuales se lleva al proceso el conocimiento sobre la existencia de los hechos que interesan al
proceso. La fuente de prueba es la realidad física de donde emana ese conocimiento porque
allí quedó estampada la huella de ese hecho.
Siguiendo al procesalista español Luis Muñoz Sabaté, las fuentes de prueba son LOS
ELEMENTOS DE LOS QUE EMANA EL CONOCIMIENTO ACERCA DE LOS
HECHOS ALEGADOS POR LAS PARTES EN EL PROCESO PORQUE EN
ELLOS HAN QUEDADO ESTAMPADAS O GRABADAS LAS HUELLAS DE
TALES HECHOS.5 Los medios de prueba son entonces los vehículos a través de los
cuales se transporta al proceso el conocimiento de esos hechos.
4.1.-NOCION:
Es el derecho subjetivo de aportar pruebas al proceso para demostrar los hechos alegados
como fundamento de las pretensiones o de la excepciones en el proceso civil o de la teoría
del caso en el proceso penal que tienen los sujetos procesales (demandantes, demandados y
terceros, el acusador, el imputado y su defensor), distintos del órgano jurisdiccional y
también, el derecho que tienen estos mismos sujetos a contradecir y controlar las pruebas
de la contraparte, o incluso, a controlar las pruebas que son allegadas al proceso, por el
juez, de manera oficiosa. Y también es el derecho que tienen las partes, cuando se requiera
y sea posible, a que el juez, haga uso de sus poderes oficiosos, para establecer la verdad de
los hechos.
Constituye pieza clave dentro de ese complejo mecanismo constitucional que se conoce
como garantía del debido proceso, previsto en el artículo 49 de la Constitución. Dice al
respecto, el procesalista argentino, Mario Augusto Morello, que el derecho a probar es uno
de los elementos constitutivos que concurren a definir el proceso justo. 6 Y el proceso justo,
es aquel que no sólo ofrece todas las garantías procesales, sino también que permite una
decisión justa. Por su parte, el maestro Devis Echandía dice: “La obligación del juez de
decretar, practicar y tener en cuenta las pruebas pedidas por las partes, emana del derecho
subjetivo que las constituciones les otorgan a éstas para ser oídas al ser juzgadas y que está
comprendido en los derechos de acción y de contradicción.”7
5
Muñoz Sabaté., luis “Probática y derecho probatorio.” En XXVII Congreso colombiano de Derecho
Procesal. P´. 479.
6
Augusto Mario Morello. “La prueba. Tendencias Modernas.”Librería Editora Platense. La Plata. Segunda
Edición ampliada, 2.001 p. 268
7
Teoría General de la Prueba. Editorial Diké. Medellín, cuarta edición, 1.993, p. 40)
5
Es decir, el derecho que tiene la parte a poder practicar, diligenciar o desahogar dentro del
proceso, en un tiempo razonable la prueba que le fue admitida, tratándose de los medios de
prueba que terminan de formarse dentro del proceso, como la inspección judicial, que
requiere que el tribunal se traslade y constituya en el lugar en un día y una hora para
percibir a través de los sentidos lo que se pide que deje constancia. O la prueba de testigos,
para que éstos pueda ser interrogados. O la prueba de experticia que requiere la designación
de los expertos, la aceptación de éstos y la juramentación y la actuación de éstos: O la
prueba de informes, que requiere que el tribunal oficie al ente de que se trate pidiendo la
información. O la prueba de exhibición de documentos, que requiere la intimación de la
persona de quien se afirma que tiene en su poder el documento, para que lo presente el día
y la hora que el tribunal fije. O la prueba de posiciones juradas, que requiere la citación
personal de la parte que debe absolverlas. Etc.
Es el derecho a que sean valoradas las pruebas que se evacuaron, y que esa valoración se
haga con arreglo a la sana critica ( que comprende las reglas de la lógica, las reglas de la
experiencia, la técnica y la ciencia) y excepcionalmente a las normas que fijan una
valoración (tarifa legal), para las pruebas sujetas a tarifa legal, todo ello a los fines de
pronunciar la sentencia. Así se establece en el artículo 509 del Código de Procedimiento
Civil como el principio de exhaustividad probatoria.9
8
Eduardo. J. Couture. “Fundamentos del Derecho Procesal Civil.” Ediciones Depalma. Buenos Aires, 1982.
11ª reimpresión, pág. 235.
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No se afecta el derecho a la prueba aun cuando no se valore ciertos medios de prueba, en los siguientes
casos: 1)la prueba se refiera a hechos manifiestamente impertinentes; 2) cuando la prueba sea ineficaz al no
haber sido promovida y evacuada con los requisitos exigidos por la ley como en el caso del documento
emanado de un tercero que no fue ratificado en juicio; 3) cuando la prueba que no fue valorada se refiera a
hechos que fueron establecidos por el juez con base en otra prueba que por disposición de la le tiene mayor
eficacia probatoria; 4)cuando la prueba que no se valoró es manifiestamente ilegal
10
Jairo Parra Quijano: “Manual de Derecho Probatorio.” Décima segunda edición. Ediciones librería del
profesional. Bogotá 2002. pp.106 a 115.
6
procedimiento de retardo perjudicial, previsto en los artículos 813 al 818 del Código de
Procedimiento Civil. Y en el artículo 289 del Código Orgánico Procesal Penal. 11
(Técnicamente lo que corre el riesgo que se pierda es la información, la fuente de prueba: el
testigo, cambien las circunstancias, se volatice la sustancia, etc)
El Derecho a la prueba está limitado en cuanto al tiempo para su ejercicio dentro del
proceso, ya que, en aras de la certeza, de la eficiencia y de la lealtad e igualdad entre las
11
“Cuando sea necesario practicar un reconocimiento, inspección o experticia, que por su naturaleza y
características deban ser consideradas como actos definitivos e irreproducibles, o cuando deba recibirse una
declaración que, por algún obstáculo difícil de superar, se presuma que no podrá hacerse durante el juicio, el
Ministerio Público o cualquiera de las partes podrá requerir al juez o jueza de control que lo realice. Si el
obstáculo no existiera para la fecha del debate, la persona deberá concurrir a prestar su declaración.
El juez o jueza practicará el acto, si lo considera admisible, citando a todas las partes, incluyendo a la víctima
aunque no se hubiere querellado, quienes tendrán derecho de asistir con las facultades y obligaciones
previstas en este Código.
En caso de no haber sido individualizado el imputado, se citará para que concurra a la práctica de la prueba
anticipada a un defensor o defensora pública.”
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En el Proyecto de Código Procesal Civil en la norma que consagra la regla de la carga de la prueba, en sus
apartes primero y segundo se consagra por primera vez, la regla de la carga dinámica de la prueba:
“Si las circunstancias especiales del caso debatido así lo justifican, el juez o jueza de juicio puede establecer
a quien corresponde la carga de la prueba ponderando cuál de las partes está en mejor situación para aportarla.
Esta resolución deberá dictarse en el mismo auto que admita las pruebas promovidas por las partes, y estas en
el lapso legal de evacuación de pruebas deberán consignar las que sean pertinentes.”
“Para la aplicación de lo dispuesto en el párrafo anterior de este artículo, el tribunal deberá tener en cuenta la
disponibilidad y facilidad probatoria que corresponde a cada una de las partes, de acuerdo con la naturaleza
de los debatido:”
7
partes, se establecen oportunidades para realizar los actos de prueba. Como todas las
actuaciones dentro del proceso, la actividad probatoria está sujeta, para ser realizada,
dentro de ciertos arcos de tiempo. Así mismo, la actividad probatoria como una especie de
la actividad procesal, está sometida a un modo, a fin de garantizar la eficiencia, la certeza,
la lealtad y la igualdad en el debate, como por ejemplo, en el caso de los testigos, la prueba
debe evacuarse en audiencia, de manera oral, mediante la formulación de preguntas por el
promovente y luego, dando oportunidad a la contraparte para que interrogue. Igual en
cuanto al lugar, los actos procesales, se realizan en un lugar, que por regla general es la
sede del tribunal, para seguridad y certeza pero por la naturaleza de la fuente de prueba,
determinados medios de prueba implican su evacuación en lugares distintos al del lugar
sede del tribunal. De manera que, las partes no pueden traer al proceso las pruebas
cuando, cómo y dónde quieran.
La prueba cuando se obtiene de la fuente o cuando se forma debe respetar los derechos
humanos. La prueba debe producirse en el marco del debido proceso y con respeto de la
persona humana, tal como lo consagra el ordinal 1º del artículo 49 de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela.
Un sector de la doctrina, encabezado por el profesor Jairo Parra Quijano sostiene que, en
caso de conflicto entre el principio de veracidad y el de licitud de la prueba, debe
sacrificarse el principio de veracidad en respeto y observancia del principio de la licitud de
la prueba. Considera que, ni siquiera indirectamente el Estado, a través del órgano
jurisdiccional, puede darle ningún valor a la prueba obtenida o formada con violación de
los derechos fundamentales de la persona. Que es un asunto de ética del Estado.
Dice el profesor Jairo Parra Quijano, que con la utilización directa o indirecta de la prueba
ilícita, el Estado pierde legitimidad frente a la colectividad, ya que la prueba, primero que
todo, hay que mirarla en términos de moralidad y después de verosimilitud. El Estado debe
predicar con el ejemplo la ética que promueve como valor entre los miembros de la
sociedad.
También, como dice el maestro Devis Echandía: El derecho subjetivo concreto de probar se
limita en cada proceso por las nociones de conducencia (que la prueba sea idónea para
probar el hecho que se quiere probar; asi: una inspección judicial no puede probar los
estados financieros de una compañía); pertinencia (que la prueba sirve para probar los
hechos controvertidos que sirven de fundamento a la demanda y de fundamento a la
excepción o defensa de fondo) y utilidad (que la prueba no sea redundante, que no sobre)13
13
Obra cit. p.40
8
Según la concepción del proceso que se siga y de los objetivos que se persigan con el
proceso, se determina la finalidad o función de la prueba.
Para quienes conciben el proceso como instrumento para hacer justicia, la prueba es
imprescindible y por tanto de extraordinaria importancia, porque una de las premisas de la
decisión justa, es la verdad y la prueba es la que permite establecer la verdad. Y el mejor
criterio para la solución de las controversias, es el establecer la verdad y dictar una
sentencia justa. Surge aquí, la concepción cognoscitiva, entendiendo que la prueba busca
establecer la verdad sobre los enunciados para sobre su base emitir una decisión.
Otros sostienen que es imposible desde el punto de vista práctico obtener la verdad en el
proceso. En tal sentido se afirma que el juez no dispone de los instrumentos cognitivos ni
del tiempo y la libertad de investigación de los que dispone el científico o el investigador.
Entre otras cosas, porque el proceso debe desarrollarse en un tiempo limitado, dado que
intereses públicos y privados presionan para que así sea. Además existen limitaciones
legales al uso de medios de prueba, existen pruebas tasadas y formalismos que imponen al
juez una verdad formal que a menudo no se corresponde con la realidad de los hechos. Sin
embargo, en el contexto del proceso, aun con las limitaciones de tiempo, de medios de
prueba, de formalismos, a pesar de ciertas valoraciones legales de la prueba establecidas a
priori, resulta posible probar los hechos en el proceso usando los mismos medios
(testimonios, confesiones, documentos, grabaciones, fotografias, cartas, facturas, indicios,
etc …) que la gente común y corriente utiliza para descubrir la verdad en su vida cotidiana.
De modo que, la función jurídica de la prueba, es hacer posible saber como sucedieron los
hechos debatidos para poder aplicar las normas de derecho sustancial y realizar la justicia.
O sea, la prueba es necesaria para poder administrar justicia. En consecuencia, la prueba
tiene una función de interés general, no puede usarse para ocultar o deformar la realidad,
para tratar de inducir al juez a engaño ya que, si no logramos reconstruir los hechos tal y
como ocurrieron, estamos juzgando otra cosa y creamos zozobra. La prueba debe llevar la
convicción al juez de cómo sucedieron los hechos.
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6.1.- NOCIÓN:
Lo que se debe probar en un proceso civil determinado, son los hechos controvertidos,
alegados oportunamente por las partes (el demandante en la demanda y el demandado en la
contestación de la demanda) y que son la base de sus pretensiones (en el caso del
demandante) o de las excepciones opuestas (en el caso del demandado) y que son
jurídicamente relevantes por constituir los supuestos de hecho de las normas jurídicas que
consagran el efecto jurídico que las partes persiguen les sea acordado en la sentencia.
A.-NOCION:
Dadas las características de su ocurrencia, o las causas que lo originaron o el impacto que
causó su ocurrencia (fuera de lo común, causó conmoción), la importancia del asunto o de
las personas o las cosas involucradas o por la trascendencia y por el conocimiento o por la
difusión general que se tuvo de dicho acontecimiento, por lo que se supone conocido por la
generalidad de las personas, cualquiera que sea su grado de cultura, dentro de un
determinado territorio y en determinada época, pues la notoriedad puede ser a nivel
mundial, continental, regional o puramente local y es temporal, porque se fija en la
memoria colectiva e individual durante un tiempo. (El atentado a las torres gemelas de New
York, la muerte del presidente Chávez, la II Guerra Mundial, Las Guarimbas del 2014 en
Venezuela) En todo caso, se supone conocido por la generalidad de los personas del lugar
donde se lleva a cabo el proceso en el tiempo en que se efectúa el proceso, siempre que
formen parte de esa comunidad, los sujetos de la relación jurídica procesal (juez y partes).
De modo que, lo que para un proceso es un hecho notorio, para otro proceso no
necesariamente tiene esa connotación.
El concepto de notoriedad procura, dos altos fines de política procesal: 1)por una parte, un
ahorro de esfuerzos al relevar a las partes de producir pruebas innecesarias. En este sentido
significa un homenaje al principio de economía. Por otra parte, procura prestigiar la justicia
evitando que ésta viva de espaldas al saber común del pueblo y su arte consista, en ignorar
jurídicamente lo que todo el mundo sabe.”17
Es una especie del género hecho notorio, sólo que de más corta duración en la memoria
colectiva, casi fugaz memoria y es conocido fundamentalmente por la amplia difusión. El
conocimiento del hecho se produce por la difusión en los medios de comunicación. Se trata
por tanto de un hecho que también está exento de prueba y para que se configure requiere
las siguientes condiciones o requisitos: 1)Que sea un hecho y no una opinión o testimonio,
sino de un evento reseñado por el medio como noticia. 2)Que haya sido difundido por
varios medios de comunicación social escritos, audiovisuales o radiales, lo cual puede
venir acompañado de imágenes. 3)Que haya transcurrido un tiempo prudencial, a criterio
del juez, desde el comienzo de la difusión sin haber sido sujeto a rectificaciones, a dudas
sobre su existencia, a presunciones sobre la falsedad del mismo, surgidas de los mismos
medios que lo comunicaron o de otros. Esto lo llama la jurisprudencia como consolidación.
4)Que los hechos sean contemporáneos para la fecha del juicio o de la sentencia que los
tomará en cuenta.18Independientemente de que tales hechos no sean ciertos, teniéndose por
cierto, hasta que no se demuestre lo contrario. Ejemplo de tales hechos notorios
comunicacionales son: Las partes pueden alegarlos y comprobar que son comunicacionales
acompañando los periódicos o los videos.
18
Sentencia de la Sala Constitucional del T.S.J N º 98 del 15 de marzo de 2000, con ponencia del magistrado
Jesús Eduardo Cabrera Romero.
19
Sentencia Nº 150 de la Sala Constitucional del T.S.J del 24 de marzo de 2000, con ponencia del magistrado
Jesús Eduardo Cabrera. La sentencia Nº 198 de la Sala de Casación Social del T.S.J del 26 de julio de 2001.
La Nº 724 , también de la Sala Constitucional del 5 de mayo de 2005. La Sentencia Nº 161 de la Sala Político
Administrativa del 01 de febrero de 2007
12
El titulo II del Libro Segundo del Código de Procedimiento Civil contiene el régimen
probatorio, en los artículos 388 a 510 desarrollando los aspectos generales, como es el
lapso de promoción y evacuación, la oportunidad para que las partes puedan convenir u
oponerse, la providenciación de las mismas para su admisión o inadmisión a trámite y la
evacuación, para finalmente, ocuparse de cada medio de prueba en particular. Y no obstante
que, en los códigos de derecho sustancial (Código Civil, Código de Comercio, etcétera),
aparecen regulados algunos otros aspectos de las pruebas, ello no le da carácter sustancial a
esas normas, porque en definitiva lo sustancial o procesal, depende de su función, y la
función de las normas probatorias como de las normas procesales en general, es de carácter
instrumental.
El Derecho Probatorio forma parte del Derecho Procesal (en relación con nuestro curso
forma parte del Derecho Procesal Civil) y sus disposiciones orientan supletoriamente toda
la actividad probatoria en materia de niños y adolescentes, agrario, y administrativo. En
suma, los restantes sistemas procesales, excepción del penal, en lo fundamental, son
repetitivos del civil.21
De esta manera pues, las características, los principios y reglas técnicas que corresponden
al derecho procesal, y en concreto al procesal civil, se predican también de la materia
probatoria.
20
“Procedimiento Civil. Pruebas. T. III. Dupré Editores. Bogotá 2.001. p. 49
21
¿ Podrá existir distinción en un testimonio, una experticia, la inspección judicial, o un indicio por la
circunstancia de utilizarse en el campo penal, en el civil, administrativo o laboral ?
13
22
Luis Muñoz Sabaté: “Introducción a la probática”. Bosch-Editor. Barcelona. 2007. Pág.13