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Resumen:
Administración científica:
La administración científica es una corriente del conocimiento, también llamada Taylorismo,
que une al sector empresarial con la investigación científica. Surgió a raíz de una
monografía publicada en 1911 por Frederick Winslow Taylor, que estableció los principios
de la organización para las empresas industriales.
El nombre de administración científica se debe a la aplicación de métodos de la ciencia a los
problemas de la administración empresarial, con el objetivo de alcanzar una mayor
eficiencia en la producción industrial. Los principales métodos científicos aplicables a los
problemas de la administración son la observación y la medición de resultados.
La administración científica se ocupa del estudio de las causas y efectos de los problemas
que afectan a una organización. Para ello utiliza el conocimiento sistematizado y aplica los
métodos científicos como la observación y la medición para mejorar la eficiencia de las
organizaciones.
Efectivamente, la administración científica se inicia a finales del siglo XlX y principios del
siglo XX. Cuando los cambios que se presentaron sobre todo por el proceso de la Revolución
industrial hicieron que los procesos en las empresas cambiaran radicalmente.
En esa época estaba de moda el pago por pieza o por tareas. Los patronos buscaban ganar el
máximo al fijar el precio de la tarea; los obreros, a su vez, reducían a un tercio el ritmo de
producción de las máquinas para equilibrar.
De tal modo el pago por pieza determinado por los primeros.
Esto llevó a Taylor a estudiar el problema de la producción en sus mínimos detalles, ya que
gracia a su compañero de progreso en la compañía no quería decepcionar a sus patronos ni
a sus compañeros de trabajo. Estos últimos esperaban que el entonces jefe de taller no lo
tratase duramente en la planeación del trabajo por pieza.
A Frederick W. Taylor se le suele considerar el “padre de la ingeniería industrial”. Sobre la
base de los logros obtenidos, a la luz de la época en que fueron hechos, el título parece muy
apropiado. Mientras que la revolución industrial trajo fuentes nuevas de energía que
hicieron posible la difusión de la industrialización, Taylor ofrecía el concepto de que era una
responsabilidad de la ingeniería diseñar, planear y programar el trabajo.
Una de las claves para lograr este propósito era erradicar o al menos reducir al mínimo
posible todos los posibles malentendidos que podrían surgir en cada fase de todos estos
procesos y que al final se traducirían en una minimización de la utilización de los recursos,
incluyendo por supuesto el tiempo y la mano de obra requerida.
Fayol planteaba que la clave para lograr la máxima productividad era controlar
adecuadamente la actividad de los trabajadores mediante una gestión impecable. Ahí es
donde entra la teoría clásica de la administración, un sistema que es adecuado tanto para
las propias organizaciones como para las propias instituciones del Estado e incluso para la
gestión de las economías domésticas.
sino porque fue el primero en sistematizarlo, él pensaba que las prácticas administrativas
acertadas siguen ciertos patrones y se inventa el mejor proyecto que fueron los 14
principios de la administración que hasta la fecha se sigue conservando una gran proporción
de estos principios Fayol define la administración como:
A pesar de los cambios y los avances y más allá de la introducción de nuevos términos, estos
conceptos se mantienen hoy como pilares fundamentales de la administración a nivel
general.
La teoría clásica de la administración fue desarrollada por el francés Henri Fayol. Para la
época en que fue desarrollada, esto es 1916 aproximadamente, la teoría en boga era la
formulada por Taylor en los Estados Unidos y se caracterizaba por el énfasis en la tarea
realizada por el operario (es decir, el cargo o función) era pues, la administración científica.
Por otro lado, Fayol formulaba su teoría clásica que se caracteriza por el énfasis en la
estructura que la organización debería poseer para ser eficiente. De acuerdo a Taylor, la
eficiencia en las organizaciones se obtiene a través de la racionalización del trabajo del
operario y en la sumatoria de la eficiencia individual. Sin embargo, en la teoría clásica por el
contrario, se parte de un todo organizacional y de su estructura para garantiza eficiencia en
todas las partes involucradas, fuesen ellas órgano o personas.
Finalmente, y luego de formulada la teoría clásica surgieron sus críticas. Estas son
numerosas, contundentes y generalizadas. Primeramente, la teoría clásica tiene un enfoque
simplificado de la organización formal, dejando de lado la organización informal. Segundo, la
ausencia de trabajos experimentales que pudieran dar una base científica a sus afirmaciones
y principios.
Fayol y sus seguidores denominaban principios, que es un sinónimo de ley, a sus
afirmaciones que estaban basadas en su observación y que, por lo tanto, eran empíricas y
no demostradas. Tercero, tiene un enfoque incompleto de la organización y la visualización
de la organización como si ésta fuera un sistema cerrado. Este enfoque incompleto radica
en que no consideran el factor humano dentro de la organización