Redes Atencionales

En el año de 1990, cuando la neurología estaba dando sus primeros pasos, se tenía un
pequeño conocimiento acerca de la atención. En ese entonces la mayoría de evidencia que
se tenía venía dada por estudios en comportamientos de adultos normales o en pacientes
que tuvieran alguna lesión cerebral. A pesar de esto, las formas de adquirir imágenes
mediante la actividad cerebral con tomografía por la inserción de positrones parecía ir bien
encaminada para un análisis fisiológico en lo que respecta a los procesos mentales, donde
se incluía a la atención.

En el estudio original surgieron tres conceptos fundamentales en lo que respecta al sistema

de atención. El primero de ellos expresa que el sistema de atención se encuentra
anatómicamente separado de los llamados sistemas de procesamiento, el cuál es el
encargado de manejar los estímulos entrantes, hacer toma de decisiones y fabricar
resultados. El segundo concepto que se aborda es que la atención usa una red de áreas
anatómicas. Y con ello el último concepto es que las áreas anatómicas mencionadas
describen variadas funciones que pueden especificarse en temas cognitivos.

Con esto las tres redes que fueron descubiertas en el año de los 90 integraron una red de
alerta, mismo que tuvo su enfoque en los sistemas de activación en el tronco cerebral en
conjunto con los sistemas del hemisferio derecho que tienen conexión con la vigilancia
sostenida; también trae consigo una red de orientación centrada en, con diversas regiones,
la corteza parietal; y por último una red ejecutiva, incluída la corteza cingulada frontal /
anterior de lo que es la línea media. Estas serán explicadas a fondo y por separado a
continuación.

Red: Alertando

El principal enfoque que se tiene para el estudio de las alertas es el uso de señales de
advertencia momentos antes a algún evento objetivo que generará un cambio fásico en lo
que es el estado de alerta. Esta señal de alerta será guiada a reemplazar el estado de
reposo por un nuevo estado que tendrá la preparación para encontrar y generar una
respuesta a una señal esperada. Si lo que se requiere es una señal rápida al objetivo, el
tiempo que tome en dar una respuesta mejorará luego de una advertencia. El tiempo de
respuesta al mejorar no se da por la acumulación de la información con mayor precisión,
misma que no tiene variación a la señal de advertencia, pero esta señal de advertencia
varía la velocidad de orientación de atención, por ello responde a la señal.
Se ha dado uso a varios otros modos para estudiar lo que es el estado de alerta tónico.
Estos estudios incluyen variaciones a lo largo del día. El tiempo que se tarda en dar la
reacción a veces tienden a ser más largos en lo que son las primeras horas de la mañana, y
van disminuyendo paulatinamente a lo largo del día, y luego vuelven a tener un aumento en
las horas de la noche y alcanza su umbral en las primeras horas de la mañana. Estas
medidas tomadas se ven señaladas en otras variaciones diurnas como son la temperatura
corporal y lo que respecta a la secreción de cortisol.
Una forma de medir la vigilancia sostenida es mediante tareas que sean de larga duración y
de carácter aburrido. Lo que respecta a las tareas de vigilancia tienen relación
principalmente con los mecanismos de la corteza cerebral derecha.
Red: Orientación

Esta red tiene un mayor enfoque en lo que es la capacidad de poner en primer lugar la
entrada sensorial determinando una modalidad o ubicación. A pesar de que la revisión
original tenía discusiones sobre lo que es el pulvinar y el colículo superior, nosotros
tendremos un enfoque en la selección visual y la corteza parietal, conformando el sistema
de atención posterior.
Añadiendo, las áreas parietales toman parte en las formas relacionadas de procesamiento.
Dicho procesamiento puede ser específico en la determinación de los movimientos motores
o los oculares dirigidos. En efecto, la determinación de las regiones parietales en lo que es
el procesamiento sensorial versus motor es un imprescindible punto de discordia. A pesar
de ello, mayormente se está de acuerdo en que las funciones del lóbulo parietal no se
encuentran limitadas únicamente a orientar los estímulos sensoriales, sino que también se
involucran en otros procesos relacionados.

Red: Ejecutivo

En el artículo original, el tercer y último sistema principal se dispone bajo el nombre de

objetivo detección. La principal razón de aquello no fue por que la detección del objetivo sea
un proceso de principal atención, sino que el punto de detección del objetivo apresa la
conciencia de un modo muy específico. A pesar de que es posible llevar un seguimiento de
los objetivos en los diversos flujos del procesamiento sin que sea demasiado complicado, el
punto de detección del objetivo da como resultado la interferencia en todo el sistema, mismo
que ralentiza la detección de cualquier otro objetivo. Este conjunto de procesos está
conectado a la limitación del sistema de atención. Lo primero que se vendrá a la mente es la
atención focal como entrada al estado consciente, que podría relacionar conexiones desde
la corteza de la línea media y la cingulada anterior dando como resultado el espacio de
trabajo global mayormente asociado con la conciencia. Se vincula la detección y
concientización de objetivos con la corteza frontal medial y el ACC adyacente. A esta zona
del cerebro se le estudia con el uso de experimentos de imágenes, mayormente debido a su
frecuente activación.

Conclusión

Se han presentado las áreas más importantes que comprenden lo que es las redes que
conforman el sistema de atención humano. Mediante estas redes atencionales se permite
explicar y dar respuesta a algunos de los problemas que han ido apareciendo en lo que
respecta a la explicación científica acerca de los mecanismos atencionales. Las limitaciones
de capacidad que se encontraban como base de las primeras propuestas, pasaron de estar
relacionadas con los sistemas de procesamiento de la información a formar parte de las
limitaciones de la red atencional anterior. Con lo que son las propiedades que van dándose
en su propio funcionamiento lo que da como resultado esas limitaciones conductuales.
También se subraya la influencia continua que hay entre la red posterior y la anterior, al
igual que el efecto de la activación de la red de vigilancia y de las dos mencionadas
anteriormente.
Referencias
Petersen, S. E., & Posner, M. I. (2012). El sistema de atención del cerebro humano: 20 años
después. Annual Reviews. Recuperado 24 de octubre de 2021, de
https://neuro.annualreviews.org