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RECURSO DE APELACIÓN

PRESENTADO DENTRO DE LA
ACCIÓN DE AMPARO DE
GARANTÍAS CONSTITUCIONALES
INTERPUESTO POR LA
LICENCIADA KATHIA MARTÍNEZ,
EN SU CONDICIÓN DE FISCAL
ADJUNTA DE LA SECCIÓN DE
DECISIÓN Y LITIGACIÓN DE LA
PROVINCIA DE BOCAS DEL TORO,
CONTRA LA DECISIÓN ADOPTADA
EN LA AUDIENCIA REALIZADA EL
DÍA 23 DE ABRIL DE 2018, POR EL
JUEZ DE GARANTÍAS DE LA
PROVINCIA DE BOCAS DEL TORO.
PONENTE: OLMEDO ARROCHA
OSORIO. PANAMÁ, VEINTISÉIS (26)
DE SEPTIEMBRE DE DOS MIL
DIECINUEVE (2019).
Tribunal: Corte Suprema de Justicia, Panamá

Sala: Pleno

Ponente: Olmedo Arrocha Osorio


Fecha: 26 de septiembre de 2019

Materia: Amparo de Garantías Constitucionales

Apelación

Expediente: 966-18

VISTOS:

En grado de Apelación conoce el Pleno de la Corte Suprema de Justicia, de la


Acción de Amparo de Garantías Constitucionales promovida por la licenciada Kathia
Martínez, en su condición de Fiscal Adjunta de la Sección de Decisión y Litigación de la
Provincia de Bocas del Toro, contra la decisión dictada por el Juez de Garantías de la
Provincia de Bocas del Toro, en audiencia de fase de investigación celebrada el día 23 de
abril de 2018, dentro de la Carpetilla N°201800023849 seguida a LUIS ALFREDO
JIMÉNEZ SANTO, por el supuesto delito Contra el Patrimonio Económico (Robo).

Dicho Recurso de Apelación fue interpuesto por la licenciada Anahixa R.


Ávila Magallanes, actuando en nombre y representación del Juez de Garantías de
la Provincia de Bocas del Toro, contra la Resolución de fecha uno (1) de agosto
de dos mil dieciocho (2018), expedida por el Tribunal Superior del Tercer
Distrito Judicial, mediante la cual concede la Acción de Amparo de Garantías
presentada.

ANTECEDENTES

La licenciada Kathia Martínez, Fiscal Adjunta de la Sección de Decisión y


Litigación de la Provincia de Bocas del Toro (hoy Amparista),  le atribuye a la decisión adoptada
por el licenciado Arnulfo Ávila Magallanes, en calidad de Juez de Garantías de la Provincia de Bocas del
Toro, la infracción de los artículos 17, 21 y 32 de la Constitución Política de la República de
Panamá.

Señaló la Activadora Constitucional, que la violación constitucional se


verificó, cuando el Juez de Garantías de la Provincia de Bocas del
Toro, declaró ilegal la aprehensión del joven Luis Alfredo Jiménez al considerar
que la Acción del presunto agresor no es una conducta delictiva y no se realizó
con dolo, cerrando la causa y dejando desprotegida a la víctima y promoviendo la
impunidad, pasando por alto que no estamos ante una audiencia de formulación
de imputación de cargos, sino más bien ante una legalización de aprehensión en
flagrancia.
Indicó la Accionante que el Juez de Garantías quebrantó los trámites
legales inherentes al debido Proceso, puesto que el artículo 32 de la Constitución
Nacional señala que el juzgador debe cumplir con los parámetros que establece la
Constitución y la Ley, ya que el ejercicio de la Acción penal le corresponde al
Ministerio Público y es quien debe reunir los elementos mínimos que acreditan el
hecho punible y la vinculación. Indicó que en la presente causa se dio un hecho
en flagrancia y en poder del victimario se le ubicó el objeto material que es el
teléfono celular del menor A.E.V.C., quien figura como víctima, cumpliéndose
así con lo dispuesto en el artículo 233 numeral 2 y 234 del Código Procesal
Penal.
Agregó la Activadora Constitucional que esta no es la etapa procesal para
discutir aspectos de tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad, responsabilidad y
mucho menos de dolo.
DECISIÓN DEL TRIBUNAL DE PRIMERA INSTANCIA

Correspondió al Tribunal Superior del Tercer Distrito Judicial conocer en


primera instancia el presente negocio constitucional. Dicha Autoridad al
momento de decidir el fondo de la controversia mediante Resolución de 1 de
agosto de 2018, resolvió Conceder la Acción de Amparo de Garantías
Constitucionales basado en los siguientes argumentos:

"...
Ajustando lo citado al negocio que nos ocupa, tenemos que
el Artículo 233 del Código de procedimiento penal
establece lo siguiente:
"Artículo 233:"
Así tenemos que según consta en audio y video para la
fecha 22 de abril de 2018, aproximadamente a la 1:40 de la
tarde, el ciudadano LUIS ALFREDO JIMÉNEZ SANTOS
con cédula 1-756-552 de raza indígena, se acercó al menor
con descripciones o generales A.E.V.C. y le pidió que lo
llevara a la residencia de una persona o a un lugar de una
persona, el menor se rehusó y el señor Jiménez le dijo que si
no lo llevaba le quitaba el celular y se lo iba a romper.
Dicho menor A.E.V.C. busca ayuda con unas personas que
venden lotería quienes proceden a llamar a las unidades del
Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT) del
Corregimiento de Guabito, provincia de Bocas del Toro,
que se encontraban cerca del lugar de los hechos y la
víctima señala el presunto agresor, y se procede con la
aprehensión del ciudadano Luis Alfredo Jiménez cedulado
1-756-572, en atención a lo establecido en el artículo 234
numeral 2 del Código de Procedimiento Penal, toda vez que
el mismo fue señalado y se le encontró en su poder el
celular, propiedad de la víctima.
Por lo anterior el Capitán Pedro Vega, informó vía
telefónica, a la Fiscalía de la Sección de Decisión y
Litigación de la provincia de Bocas del Toro que en el
Corregimiento de Guabito, se había dado un hecho delictivo
en perjuicio del menor A.E.V.C. De (sic) 14 años de edad,
dándose con la aprehensión de un sujeto de nombre Luis
Jiménez de 25 años de edad.
Dicha aprehensión se materializa a las 02:20 P.M. del día
22 de abril de 2018, poniéndolo así formalmente a
disposición del Tribunal de Garantías el día 23 de abril a las
9:14 A.M., es decir, dentro del término de las 24 horas que
nos señala el artículo 21 de la Constitución Nacional y los
artículos 233 y 234 del Código Procesal Penal, por lo que la
señora Fiscal respeta el plazo que establece dicha norma y
además se encontraban reunidos los méritos suficientes para
llevar al ciudadano Luis Alfredo Jiménez ante un Juez de
Garantías.
Así las cosas, consideramos que la resolución dictada por el
Juez de Garantías vulnera las garantías y derechos
fundamentales de las partes recogidos en el artículo 32
constitucional; toda vez que primeramente dentro del plazo
establecido en la ley el Agente Policial informó al
Ministerio Público sobre dicha aprehensión, quien
inmediatamente pone al aprehendido a órdenes de la
autoridad demandada, dicha aprehensión se da en flagrancia
y tal como lo señala el menor A.E.V.C. de 14 años de edad,
el sujeto que se le acercó pregunta si conocía a un sujeto
que se llama Hernández Santo y le insistía a (sic) que lo
acompañara hasta donde este, al rehusarse el menor al (sic)
ir con el sujeto, este le jaló con fuerza el celular de la mano
y le dijo que si no lo llevaba le rompería el celular.
Por otro lado, dicha investigación se encuentra en la etapa
de investigación por lo que corresponde al Ministerio
Público el ejercicio de la acción Penal y es quien dirige la
investigación tal y como queda establecido en el Artículo 5
del Código de Procedimiento Penal, quien debe reunir los
elementos mínimos que acreditan el hecho y la vinculación
del aprehendido.
Por último, en dicha audiencia se debate es la legalidad de
la aprehensión y no formulación de cargos, en donde el Juez
de Garantías erróneamente señala que no se cumple con lo
establecido en los artículos 13 y 26 del Código Penal, por lo
que considera que la acción del presunto agresor no es
típica, antijurídica y culpable y además señala que no existe
dolo, quien además señaló que el nexo causal debe guardar
relación con los hechos imputados y también manifestó que
todo lo anterior son aspectos que deben valorarse en Juicio
y que no son propios de este acto de audiencia, es decir se
contradice en sus criterios.
Visto lo anterior, lo que procede es conceder el amparo de
garantías presentado por haberse infringido el artículo 32
constitucional, y así debe declararse
jurisdiccionalmente."(fs. 47-49)
SUSTENTACIÓN DE LA APELACIÓN

Consta a fojas 59 a 61 del cuadernillo de Amparo que la licenciada Anahixa R.


Ávila Magallanes, actuando en representación del licenciado ARNULFO RENÉ
ÁVILA MAGALLANES (Juez de Garantía de la Provincia de Bocas del Toro)
anunció y sustentó en tiempo oportuno Recurso de Apelación contra la referida
Resolución de fecha uno (1) de agosto de dos mil dieciocho (2018), dictada por
el Tribunal Superior del Tercer Distrito Judicial, solicitando que sea Revocada la
mencionada Resolución.

El Recurrente en su escrito de Apelación manifestó que, "no solo por la razón de


que una persona sea aprendida por unidades de la policía nacional, y lo lleven
ante los tribunales, automáticamente se tiene que tener por cierto de que nos
encontramos ante una conducta delictiva, de hecho este ciudadano seleccionado
por el poder punitivo es llevado ante un juez natural, a fin de que este verifique si
nos encontramos ante una conducta delictiva Típica y Antijurídica, a fin de poder
determinar si se ha infringido el ordenamiento penal."

Además indicó, que la Fiscalía de Litigación solicitó ante el Juez de Garantías


legalizar la aprehensión del joven Jiménez por el supuesto delito contra el
Patrimonio Económico en su modalidad de Robo, y ante esa petición el Juez de
Garantías consideró que era ilegal la aprehensión por estimar que la conducta por
la cual fue aprehendido el prenombrado Jiménez era atípica.
Agregó el Apelante que "El Tribunal Superior de David considera que se ha
violado el debido proceso, porque el Juez de Garantías considero que los hechos
explicados por la fiscalía no constituyen delito, realizando el control que le
establece la Ley (art. 44 del C.P.P.), de hecho el Tribunal Superior solo señala
que se violenta el art. 5 del Código Procesal Penal, pero olvida que la
persecución penal mediante la Ley 68 del 2008, está controlada por el Organismo
Jurisdiccional (Jueces de Garantías), a fin de que se vigile que se cumpla con lo
establecido en el artículo 70 del Código Procesal. "

Por último, el Apelante señaló "Si observamos los hechos narrados por la
Fiscal Khatia (sic), podemos ver que el sujeto pasivo (menor), se le acerco otro
sujeto (Alfredo Jiménez) que le pregunta si conocía a una persona llamada
Hernández Santos y al insistirle que lo acompañara donde este vivía, el menor se
rehusó a ir con este sujeto, y es ahí, cuando este le jalo con fuerza el celular de la
mano. Es importante señalar, que en la presente narración no se escucha ni se lee,
que se ejerció violencia física en contra del menor ni intimidación, de hecho,
cuando llegan las unidades policiales de frontera, encuentran al joven Hernández
en el mismo lugar sin que se diera a la fuga."

CONSIDERACIONES DEL PLENO

Examinado el contenido del Amparo de Derechos Fundamentales, la


Resolución recurrida y las consideraciones del apelante, procede el Pleno de la
Corte Suprema de Justicia a resolver la alzada.

En primera instancia, es oportuno señalar que la Acción de Amparo es una


institución de garantía que puede ser presentada contra cualquier Acto
susceptible de lesionar, afectar, alterar, restringir, amenazar o menoscabar un
derecho fundamental, previsto no solamente en la Constitución Nacional, sino en
los Convenios y Tratados Internacionales sobre derechos humanos vigentes en
Panamá y en la Ley, cuando por la gravedad e inminencia del daño se requiera
una revocación inmediata.

Como se ha indicado, la Resolución recurrida consiste en la Sentencia de 1


de agosto de 2018, dictada por el Tribunal Superior del Tercer Distrito Judicial
que Concede la Acción de Amparo de Garantías Constitucionales promovida por
laFiscal Adjunta de la Sección de Decisión y Litigación de la Provincia de Bocas
del Torocontra la Resolución de 23 de abril de 2018 emitida por el Juez de
Garantías de la Provincia de Bocas del Toro, mediante la cual dispuso declarar
ilegal la aprehensión de LUIS ALFREDO JIMÉNEZ, por considerar que el
hecho cometido por éste, no es una conducta delictiva.
Ahora bien, advierte esta Corporación de Justicia que el debate jurídico a
examinar en grado de apelación radica en determinar si la decisión del Juez de
Garantías de la Provincia de Bocas del Toro, licenciado Arnulfo Ávila
Magallanes, de decretar ilegal la aprehensión de LUIS ALFREDO
JIMÉNEZ, por considerar que el hecho investigado no es una conducta delictiva,
viola o no la garantía constitucional del debido Proceso.

Un atinado enfoque para decidir este debate jurídico, en sede


constitucional, no lo es analizar si un Juez de Garantías tiene facultades para
calificar si los hechos que se le ponen en conocimiento son delito o no. En
realidad, el "quid" está en establecer si la argumentación que lo lleve a tomar una
decisión, en este sentido, viola o no una garantía fundamental; en este caso, el
Debido Proceso.

Como ha manifestado esta Superioridad en múltiples ocasiones, siguiendo


al Doctor Arturo Hoyos, "la garantía del debido proceso que incorpora la
Constitución Política en su artículo 32 consiste en una institución instrumental en
virtud de la cual debe asegurarse a las partes en todo proceso la oportunidad
razonable de ser oídas por un tribunal competente, predeterminado por la ley,
independiente e imparcial, de pronunciarse respecto de las pretensiones y
manifestaciones de la parte contraria, de aportar pruebas lícitas relacionadas con
el objeto del proceso y de contradecir las aportadas por la contraparte, de hacer
uso de los medios de impugnación consagrados por ley contra resoluciones
judiciales motivadas y conformes a derecho, de tal manera que las personas
puedan defender efectivamente sus derechos". (Arturo, Hoyos, El Debido
Proceso, Editorial Temis, S. A., Santa Fé de Bogotá-Colombia, 1996, pág.54).

En cuanto al Debido Proceso, el artículo 32 de la Constitución Política,


señala lo siguiente:

"Artículo 32: Nadie será juzgado, sino por autoridad


competente y conforme a los trámites legales, y no
más de una vez por la misma causa penal,
administrativa, policiva o disciplinaria".

El Pleno de la Corte Suprema de Justicia, ha manifestado doctrinal y


jurisprudencialmente que la garantía del debido proceso consagrada en el artículo
32 de la Constitución comprende tres derechos, a saber: el derecho a ser juzgado
por autoridad competente; el derecho a ser juzgado conforme a los trámites
legales pertinentes; y el derecho a no ser juzgado más de una vez por una misma
causa penal, policiva o disciplinaria.
Conforme a lo anterior, se advierte que en el caso bajo estudio la
administración de justicia no se ejercitó con arreglo a los trámites legales, en
razón que la Autoridad demandada no resolvió lo peticionado por la Fiscalía en
cuanto al control de la legalidad de la aprehensión del señor Luis Alfredo
Jiménez, sino que paso directamente a realizar consideraciones sobre inexistencia
del tipo penal y sobre culpabilidad y punibilidad. Es decir, hizo un ejercicio
inoportuno de etapas procesales, lo que correspondía a otra etapa del proceso.
Además, a juicio de esta Corporación, realizó una errada motivación de su
decisión.

Como quiera que lo que se discute guarda relación con el control jurídico
de la Aprehensión, es necesario traer a colación el contenido de los artículos 233
y 235 del Código Procesal Penal que establecen respectivamente lo siguiente:

"Artículo 233. Aprehensión Policial. Los miembros de la Policía


Nacional podrán aprehender a toda persona, aun sin orden
judicial, en los siguientes casos:
1. Cuando haya sido sorprendida en flagrante delito o
cuando sea perseguida inmediatamente después de su
comisión.
2. Cuando se haya fugado de algún establecimiento penal o
de cualquier otro lugar de detención.
En caso de flagrancia, cualquiera persona podrá practicar
la aprehensión e impedir que el delito produzca
consecuencias. La persona será entregada
inmediatamente a la autoridad más cercana.
El agente policial que haya aprehendido a una persona la
deberá conducir inmediatamente al Ministerio Público,
que verificará de manera inmediata si hay mérito para
presentarla ante el Juez de Garantías dentro del plazo
establecido en este Código.
Si...
El incumplimiento por parte del agente de policía dará
lugar a las responsabilidades administrativas y penales
que correspondan."
"Artículo 235. Orden de aprehensión y conducción por el
Ministerio Público. El Ministerio Público podrá ordenar
que una persona sea aprehendida cuando existan elementos
de convicción suficientes para sostener razonablemente que
es autora o partícipe de un delito y cuando la investigación
así lo amerite. En este caso, el Ministerio Público deberá
poner a disposición del Juez de Garantías a la persona
aprehendida dentro de las veinticuatro horas siguientes a su
recibo, quien controlará si concurren los motivos que la
justifiquen y el cumplimiento de este plazo.
De igual forma, se podrá conducir de manera excepcional
a cualquier persona cuando la investigación requiera de su
presencia en el Ministerio Público".
En primer lugar, cabe señalar que la Legalización de la Aprehensión, es un
Acto procesal independiente, donde se legaliza la privación física de la libertad
de una persona y se verifica si la misma se dio conforme a derecho.

De tal manera, que la función del Juez de Garantías cuando examina la


legalidad de la aprehensión no solo debe verificar si desde el Acto de la
aprehensión, hasta cuando la persona fue llevada a su presencia, se le respetó su
dignidad humana, es decir, si no fue sometida a tratos crueles, inhumanos o
degradantes o a tortura y si fue informada de manera inmediata de sus derechos
como aprehendido (Art. 21 y 22 de la Constitución Nacional), sino que debe
verificar además el cumplimiento de los requisitos para llevarla a cabo, es decir,
comprobar si en efecto las circunstancias de los hechos dan cuenta de la
existencia de elementos de convicción suficientes para sostener razonablemente
que una persona es autora o partícipe de un delito; esto, teniendo en cuenta el
contenido del artículo 235 del Código Procesal Penal anteriormente transcrito, el
cual regula los requerimientos para que proceda la aprehensión de una persona.

Ahora bien, conforme a la escucha del soporte técnico aportado en disco


compacto, la cual contiene la grabación de la audiencia llevada a cabo el día 23
de abril de 2018, se puede verificar que la audiencia fue solicitada por el
Ministerio Fiscal, con el objeto de someter a control jurisdiccional, la legalidad
de la aprehensión de LUIS ALFREDO JIMÉNEZ. Sustentó su petición la representante del Ministerio
Público señalando que la aprehensión de Luis Alfredo Jiménez Santos tuvo lugar el día 22 de abril de 2018, a
las 2:20 p.m. luego que el menor A.E.V.C. solicita ayuda a unas personas que venden lotería, quienes
proceden a llamar a la policía y llegan las unidades del Servicio  Nacional de Fronteras y de
inmediato el menor le señala al presunto agresor; indicando que
cuando caminaba por la acera que está cerca al gimnasio de Guabito, llevaba un
celular en sus manos, cuando de repente se le aparece una persona, le preguntó
que si conocía a Hernández Santo y le insistía que lo acompañara hasta donde
este se encontraba, pero que al rehusarse al ir con la persona (Alfredo Jiménez),
le haló el celular de su mano, diciéndole que le iba a partir el celular y le iba a
pegar sino hacía lo que le decía. En razón de estos hechos el Fiscal atribuye a
Luis Alfredo Jiménez Santos la comisión de un delito contra el Patrimonio
Económico en la modalidad de Robo, en el cual se da la aprehensión in fraganti.

Ante lo solicitado por la Agente de Instructor, conforme a la escucha


aportada en disco compacto, el Juez de Garantías de la Provincia de Bocas del
Toro decidió lo siguiente:

" ...

... bajo estos presupuestos, indicó el Ministerio Público


que los hechos fueron estos. Ese día a las 1:40 de la tarde se
acercó el ciudadano LUIS ALFREDO JIMENEZ le pidió al
menor que lo llevara a la residencia de una persona o a un
lugar de una persona, entiendo Fiscal que el mismo menor
se rehusó le dijo que no y el joven Jiménez le dijo que si no
lo llevaba le quitaba el celular y se lo iba a romper, eso
fueron los hechos que escuche en este acto de audiencia,...
le haló el celular y le dijo que se lo iba a romper si no lo
llevaba a ese lugar, esos son los hechos, bien, repito los
hechos son....

Estos son los hechos que este Tribunal va a analizar en


base a los presupuestos que establece el artículo 234 del
Código Procesal Penal. El artículo 44 del Código Procesal
Penal exige que el Juez haga un control de los actos de
investigación que el Ministerio Público realice, toda vez que
el Ministerio Público según lo que establece el artículo 68 y
263 del Código de Procedimiento Penal, cuando tiene un
conocimiento de la noticia criminal, tiene que iniciar una
investigación y poder acreditar el hecho punible y la
vinculación del ciudadano, estos son los Actos procesales
que el Ministerio Público debe realizar con todas las
diligencias y acopios propios para poder resolver la materia
penal ante el Juez de Garantías, cuando eso llegue ante el
Juez de Garantías, el Juez de Garantías tiene que hacer una
valoración primaria y antes de ver procesalmente el Acto
tenemos que observar sustantivamente los hechos narrados,
porque tiene el nexo causal guardar relación con los hechos
imputados. Bajo estos parámetros se tiene que hacer un
análisis de lo que establece el artículo 13 del Código Penal
panameño. El artículo 13 dice que la conducta debe ser
típica, antijurídica y culpable y según el artículo 26 dice que
debe realizarse con dolo, estos aspectos que se deben
valorar en juicio, que no son propios de este Acto de
audiencia, se debe dar con aspecto de conocimiento y
voluntad del Acto propio que va a infringir la normativa
penal, pero la conducta debe estar debidamente tipificada en
el Código Penal, para que este Tribunal pueda abordarlo, en
su defecto, estaríamos ante una conducta totalmente atípica,
bajo estos parámetros el Juez debe observar lo que establece
la Ley, robo, está contemplado en el artículo 218 del
Código Penal Panameño, que nos dice esa conducta, "quien
mediante violencia o intimidación en la persona se apropie
de una cosa mueble ajena, la cual será considerada como
delito y tiene una pena de 7 a 12 años de prisión", para el
artículo 26 el último párrafo del Código Penal señala, "la
causalidad por sí sola no basta para la imputación jurídica
del resultado" y es que para poder enmarcar la conducta a
los hechos, subsumirlos en el tipo penal se debe dar los
verbos rectores de la ley, cual fue el objetivo de arrebatarle
o sustraerle el celular, apropiarse del celular, no señor, es
que esto no fue manifestado en este Acto de audiencia, él le
retiro el celular, se lo sustrajo con el objetivo de que
supuestamente lo llevara a un lugar, lo cual indica que no se
está ante una conducta tipificada en los verbos rectores del
artículo 218 del Código Penal panameño, esta conducta a
criterio de este juzgador no se enmarca, no se subsume en el
tipo penal porque no se consume o no se subsume en una
conducta delictiva, si bien es cierto pudiese haberse ido en
un Proceso administrativo, en la Corregiduría, porque el
objeto narrado por el Ministerio Público, es que se lo
sustrajo, no con el objetivo de apoderarse del bien, sino de
que la persona lo llevara a un lugar y le dijo que si no lo
llevaba le rompía el celular, no es que se quería apoderar
del celular, el análisis jurídico y ya la Corte Interamericana
de Derechos Humanos, haciendo un control de
convencionalidad en el caso Chaparro Álvarez vs Ecuador,
dijo: primero se investiga y después se ordena la detención
y ese control de convencionalidad estamos obligados bajo el
artículo 4 de la Constitución Política de acatarlo y aplicarlo
a todo administrador de justicia. Nos señala y nos indica la
dirección la cual nosotros debemos llevar a un ciudadano
para seleccionarlo en el poder punitivo, no digo que no hay
un hecho, hay un hecho, pero que dice el artículo 2 del
Código Penal Panameño, el principio de mínima
intervención, pero ese principio de mínima intervención, no
es que el juez se tiene que liberar de los hechos que se dan,
sino que tiene que hacer un análisis concatenado,
constitucionalizado como lo establece el artículo 3 del
Código Procesal Penal, haciendo un análisis profundo a
cada caso en particular, contrario es que la persona venga
con un cuchillo, con una pistola o sin eso y agarre a una
persona y la amenace o coaccione con el objetivo de
apoderarse del bien, para su uso propio, ahí se enmarca la
conducta establecida en el artículo 218 del Código Penal
panameño y que este debe de aplicar la legalidad del
Código Penal, no es solo un deber del Juez sino también del
Ministerio Público, haciendo un análisis pormenorizado de
cada Acto que se dio en lo que se establece los hechos
narrados. Que dice el artículo 70 del Código de
Procedimiento Penal, los Fiscales así como las instituciones
auxiliares de apoyo a la investigación adecuaran su
actuación a un criterio objetivo, velando por la correcta
aplicación de la ley y es que la correcta aplicación de la ley
no es única y exclusivamente (sic) se da de (sic)que una
persona se sorprende con algo y que ya se enmarca en el
tipo penal, son los hechos por eso es que dice nexo causal,
debe guardar relación con los hechos imputados, es que el
nexo causal imputado en este Acto de audiencia para la
legalización de la aprehensión, no se subsume en el tipo
penal, este tribunal va a decretar ilegal la aprehensión en
contra del ciudadano LUIS ALFREDO JIMÉNEZ
SANTOS con cédula 1-756-552, por considerar que esta
conducta no se ajusta a lo que establece el artículo 218 del
Código Penal Panameño, se debió realizar una investigación
objetiva aunque el Ministerio Público, la Fiscalía, la Policía
Nacional, hizo una aprehensión y eso valora del principio
de la correcta aplicación de la ley, debió ser aplicado por el
primer interviniente que es el Ministerio Público, haciendo
(sic) que el derecho que le asiste a todos los ciudadanos y
en base a lo que establece la facultad del artículo 226 del
Código Procedimiento Penal toda vez que considera este
Tribunal que no es una conducta delictiva le va a ordenar la
inmediata libertad al ciudadano LUIS ALFREDO
JIMÉNEZ SANTOS, con cédula 1-756-552 y demás
generales conocidas en audio y video. Todos notificados de
esta decisión a las 5:51 de la tarde del día de hoy..."

En primer lugar, cabe señalar que según consta en el audio de la audiencia


de control de legalidad, el Servicio Nacional de Fronteras el día 22 de abril de 2018, a las
2:20 p.m., aprehendió al señor Luis Alfredo Jiménez y el mismo día a las 8:32 p.m. lo
puso a órdenes del Ministerio Público, por lo que la Fiscal el día 23 de abril de
2018 a las 9:15 a.m. le solicitó audiencia de control de legalidad ante el Juez de
Garantías, es decir, dentro del término de 24 horas que establece la Constitución
Nacional y el Código Procesal Penal cuando la aprehensión se haya dado en
flagrancia, como en el caso que nos ocupa, en que el señor Luis Alfredo Jiménez
fue aprehendido inmediatamente después de cometer el hecho investigado y se le
encontró en su poder un celular propiedad de la víctima. Siendo así las cosas, se
advierte que se cumplieron con los presupuestos establecidos tanto en las
disposiciones Constitucionales como Legales en cuanto a la forma como se llevó
a cabo la aprehensión de Luis Alfredo Jiménez.

Esta Corporación de Justicia debe manifestar, que en la presente causa


bajo estudio se plantean algunos aspectos que generalmente no se han aceptado
como susceptibles de ser analizados bajo la luz de la Acción de Amparo de
Garantías Constitucionales; tal es el caso del cuestionamiento sobre valoración de
pruebas, la calificación del delito, entre otros. Sin embargo, no puede soslayar
este Tribunal, en sede constitucional, que, en este caso en particular, se aprecian
variables que requieren una aplicación excepcional de este recurso.

Sobre este tema, el Pleno de la Corte Suprema de Justicia, en Sentencia de


cinco (5) de septiembre de dos mil doce (2012), indicó lo siguiente:

"... la jurisprudencia ha hecho una excepción a la regla


conforme a la cual el amparo no está indicado para que
se vuelva a efectuar una valoración probatoria o para
verificar que la aplicación o interpretación de la ley
por parte del juez ordinario haya sido correcta. Esa
excepción tiene lugar en aquellos casos en los que se
ha violado un derecho o garantía fundamentalpor
razón de una sentencia arbitraria o por una sentencia
que está falta de motivación o que se haya realizado
una motivación insuficiente o deficiente
argumentación (Cfr. Sentencia de 21 de noviembre de
2011) o cuando se trate de una sentencia en la que se
aprecie una evidente mala valoración o no
apreciación de algún medio probatorio trascendental
para la decisión(Cfr. Sentencia de 4 de julio de 2012)
o cuando se trate de una sentencia en la que se ha
cometido un grave error al interpretar o aplicar la
ley, siempre que, se reitera, se afecte con una de
dichas sentencias un derecho o garantía fundamental.
(Destaca el Pleno de la Corte)
..."
En este orden de ideas, debemos indicar, sin el ánimo de desmeritar las
facultades conferidas al Juez de Garantías frente al control de los actos de
investigación que le confiere el artículo 44 del Código Procesal Penal, que al
confrontar la decisión dictada por el Juez acusado (declarar ilegal la aprehensión
de Luis Alfredo Jiménez Santo), se observa que el mismo determinó que el hecho
cometido no es una conducta delictiva, toda vez los hechos relatados por el Ministerio no se enmarcan dentro
de la estructura del tipo penal de Robo, ya que el objetivo de sustraerle el celular a la víctima, no era
apropiarse del mismo, sino para que supuestamente lo llevara a un lugar; sin embargo, para este Tribunal
Constitucional, contrario a lo manifestado por el Juez de Garantías, los hechos son jurídicamente relevantes y
según éstos, sin mayor esfuerzo mental, afloran elementos mínimamente necesarios que dan cuenta que
estamos ante un comportamiento que viola algún tipo penal, aunque de acuerdo al criterio del Juez de
Garantías no sea exactamente robo.

Pasemos a repasar cuáles los son los hechos que lleva el agente de
instrucción ante el Juez de Garantías para solicitar la legalidad de la aprehensión
de Luis Alfredo Jiménez:

"... el día 22 de abril de 2018, aproximadamente a las 1:40 de


la tarde, momento en que el menor A.E.V.C. caminaba por la
acera que está cerca al gimnasio de Guabito, llevaba un celular
en sus manos de color negro sin marca, cuando de repente se le
aparece un sujeto de raza indígena vestido con una camiseta de
color blanca y pantalón de color azul y le dice que si conocía a
un sujeto que se llama Hernández Santo y le insistía que lo
acompañara hasta donde este, el menor al rehusarse al ir con el
sujeto, este le haló el celular de su mano y le dijo que le iba a
partir el celular y que le iba a pegar si no hacía lo que le decía.
De inmediato el menor sale del lugar y va y pide ayuda a
donde estaban unos vendedores de lotería ahí mismo en el
centro de Guabito, estos proceden a llamar a la policía y llega
la policía de Servicio Nacional de Fronteras y de inmediato el
menor acude donde ellos y le dice que el señor de suéter de
franela blanca con pantalón corto le había robado...
... encontrándose en poder del señor un celular de color negro,
sin marca visible,"
Como se advierte, estamos ante una conducta donde "un adulto se acercó
sorpresivamente a un menor de edad y le haló el celular de su mano,
amenazándolo que le iba a partir el celular y le iba a pegar sino hacía lo que le
pedía", por lo se observa que existió violencia e intimidación en los hechos
relatados, máxime que un adulto no tiene la misma fuerza física en comparación
de un menor, por tanto, no estamos de acuerdo que el Juez de Garantías haya
decidido que los hechos sometidos a su consideración no constituyen delito.

La argumentación del Juez de Garantías se ha apalancado en que el motivo


último por el cual este "adulto", le haló el celular al menor, no fue para robárselo
sino para obligarlo a darle información sobre la ubicación de un tercero.

Sin perjuicio del reconocimiento de la facultad de un Juez de Garantías, que


luego de analizar en una situación si existen los elementos de convicción
necesarios para sostener razonablemente que una persona era autora o partícipe
de un delito (art. 235 C.P.P.), puede decidir no legalizar la aprehensión de un
ciudadano por considerar que los hechos puestos en conocimiento por parte del
Ministerio Público no constituyen delito. No obstante, este no es el caso que
ocupa nuestra atención porque de los hechos presentados por el agente de
instrucción es palpable que los mismos son jurídicamente relevantes y que se
relacionan con la configuración de algún tipo penal.

No podemos perder de vista que la estructura del nuevo Sistema Penal de


Corte Acusatorio permite considerar que si dentro del término de la investigación
surgen nuevos elementos que se fundamenten en los mismos hechos, se puede
variar la calificación inicial del delito, por lo que el fiscal puede calificar de
manera diferente los hechos al formular la acusación (artículo 340 C.P.P.).

No está demás destacar, que los Jueces a la hora de verificar la legalización


de la aprehensión, si lo consideran prudente, pueden o no otorgar otras medidas
cautelares, ya que no es obligatorio que en una imputación se imponga
automáticamente la medida cautelar de detención preventiva.

Siendo así las cosas y tomando en cuenta que la decisión tomada por el
Juez de Garantías de la Provincia de Bocas de Toro, en el acto de audiencia de 23
de abril de 2018, no tiene previsto un Recurso dentro del Sistema Penal
Acusatorio, es por lo que esta Corporación de Justicia debe ejercer un control de
este razonamiento.
Además, no podemos dejar de mencionar que el Juzgador debe tener
presente en todo momento los principios procesales sobre los cuales está
fundamentado el Sistema Penal Acusatorio, entre los cuales está, no solamente el
deber de velar por el derecho de una sola parte, sino el de velar por el derecho de
todas las partes involucradas en un proceso, incluyendo las víctimas y la
colectividad.

Ante dicho panorama jurídico, el Pleno concluye que la actuación del Juez
de Garantías de la Provincia de Bocas del Toro, impugnada mediante el Amparo
de Garantías que nos ocupa, infringe la garantía del debido proceso contenido en
el artículo 32 de la Constitución Política; esto es, bajo el entendido de que el Juez
omitió actuar conforme a los trámites legales, al realizar una errónea motivación
de los hechos y adelantarse a tomar una decisión en una etapa que no
correspondía; razón por la cual esta Corporación de Justicia considera que la
declaratoria de ilegalidad de la aprehensión de Luis Alfredo Jiménez Santos
dispuesta en el Acto de audiencia de fase de investigación, no es coherente con
los hechos jurídicamente relevantes que el Ministerio Público le hizo de su
conocimiento. Reiteramos que el nuevo Sistema Penal de Corte Acusatorio le
permite al fiscal, durante la investigación, hacer una recalificación del tipo penal,
siempre y cuando se base en los mismos hechos. Existe en la presente causa los
elementos mínimamente necesarios para determinar que estamos ante un
comportamiento que viola algún tipo penal.

En virtud que las circunstancias descritas en las líneas que anteceden,


dejan en evidencia la infracción del Debido Proceso, consideramos pertinente
que la decisión de primera instancia debe ser confirmada, en el sentido de
Conceder la Acción de Amparo bajo estudio.

Por lo tanto, la CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, PLENO, administrando


justicia en nombre de la República y por autoridad de la ley,  CONFIRMA la Resolución de 1 de
agosto de 2018, proferida por el Tribunal Superior del Tercer Distrito Judicial,
que CONCEDE la Acción de Amparo de Garantías Constitucionales promovido
por la Fiscal Adjunta de la Sección de Decisión y Litigación de la provincia de
Bocas del Toro; y, como consecuencia de ello, REVOCA lo decidido por el Juez
de Garantías de la Provincia de Bocas del Toro en la audiencia celebrada el 23 de
abril de 2018, en la cual dispuso Decretar Ilegal la Aprehensión del ciudadano
LUIS ALFREDO JIMÉNEZ SANTO.

Notifíquese y Devuélvase,
OLMEDO ARROCHA OSORIO
JOSÉ E. AYÚ PRADO CANALS -- CECILIO CEDALISE RIQUELME - HERNÁN A. DE LEÓN BATISTA - HARRY
A. DÍAZ - LUIS RAMÓN FÁBREGA S. - JERÓNIMO E. MEJÍA E. - ANGELA RUSSO DE CEDEÑO -- ABEL
AUGUSTO ZAMORANO

YANIXSA Y. YUEN (Secretaria General)

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