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Friedrich Nietzsche

(1844-1900)

¡Dios ha muerto!
Vida y obras

Filólogo
Nacimiento de la tragédia El nacimiento de la tragédia
Wagner y Schopenhauer La genealogía de la moral
filosofía radical: crítica al Ecce Homo
cristianismo y a la Aurora
modernidad Más allá del bien y del mal
aforismo Humano demasiado humano
filósofo maldito Gaya ciencia
acusado de nazismo El anticristo
grande influencia para la
Así habló Zaratustra
filosofía contemporánea

Yo fui el primero en ver la auténtica antítesis - el


instinto degenerativo, que se vuelve contra la Vida
con subterránea avidez de venganza (el
cristianismo, la fi􏰀losofía de Schopenhauer, en
cierto sentido ya la fi􏰀losofía de Platón, el
idealismo entero, como formas típicas), y una
fórmula de la afirmación suprema, nacida de la
abundancia, de la sobreabundancia, un decir sí sin
reservas aun al sufrimiento, aun a la culpa misma,
aun a todo lo problemático y extraño de la
existencia...
Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 90
Por qué Nietzsche es considerado tan radical?
Porque era un filósofo desacreditaba en el Estado, en la ciencia, en la razón; sus
críticas a la modernidad y al pensamiento científico apuntaban para el carácter
dominante, aplastador, triste, saqueador, abusador y cínico de la sociedad moderna
y científica. Toda la utopía en la ciencia, la creencia en el progreso es desmistificada
por Nietzsche. El hombre moderno sigue una moral iniciada por el cristianismo: la
moral del esclavo (hombre culpado, resentido, que debe sufrir y que busca ser
gobernado por otros). El hombre camina en el sentido inverso de los valores de
libertad, igualdad y fraternidad.
La filosofía de Nietzsche justamente propone una transmutación de estos valores, en
vez de una moral que quiere los hombres tristes y obedientes, se debe construir una
moral alegre y afirmativa de la vida, donde el hombre sea amo de sí mismo (la moral
del amo).
Lo apolíneo y lo dionisíaco
Dioniso: fiesta, desmesura,
desequilibrio, instintivo,
artístico

Dos tipos de fuerzas presentes en la vida


humana: la mesura y la desmesura, lo racional
y lo pasional, orden y caos.
Apolo es una contraposición necesaria a
Dioniso: un tipo de canalización de los flujos,
limitación a los instintos.
Apolo: mesura, orden, equilibrio,
La sociedad clásica griega tenía como base armonía, razón
estos dos dioses, Nietzsche es quien introduce
ese elemento dionisíaco como fundamental
en la mentalidad griega, antes de Nietzsche Necesitamos las dos. Platón, cristianismo y
solo se consideraba la dimensión apolínea (los racionalismo: desequilibrio entre las fuerzas, solo se
griegos son guiados por la razón). valoriza lo apolíneo y trata de excluir cada vez más el
elemento dionísiaco de la vida.
Vitalismo de Nietzsche
Con Platón y Sócrates, después con el judaísmo y el cristianismo se instaura
un régimen desigual entre las fuerzas apolíneas y dionisíacas. Cada vez más
se excluye el elemento del exceso, locura, descontrol.
El vitalismo de Nietzsche no es otra cosa que el regreso de Dioniso, la
reinstauración de las fuerzas dionisíacas en la existencia. La vida no es
racional, ni puede tener un sentido. No hay sentido en la vida. No es porque
nosotros imprimimos sentido en la vida que la vida tenga en sí ese sentido.
Para Nietzsche la vida es un juego de azar, una tirada de dados.
La historia: triunfo del nihilismo

La historia nos pone en presencia del fenómeno más extraño: ¡las fuerzas
reactivas triunfan, la negación vence dentro de la voluntad de poder! No
solamente se trata de la historia del hombre, sino de la historia de la vida, y
de la de la Tierra, por lo menos en su cara habitada por el hombre. Por todas
partes vemos el triunfo del «no›› sobre el «sí››, de la reacción sobre la acción.
Incluso la vida se vuelve adaptativa y reguladora, se reduce a sus formas
secundarias: ya ni siquiera comprendemos lo que signi􏰀fica actuar. Incluso
las fuerzas de la Tierra se agotan sobre esta cara desolada. A esta victoria
común de las fuerzas reactivas y de la voluntad de negar Nietzsche la
llama«nihilismo››-o triunfo de los esclavos. Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 33
Nihilismo
La idea de Nietzsche es que la muerte de Dios es un gran acontecimiento
ruidoso, pero no suficiente. Porque el «nihilismo›› continúa, apenas cambia
de forma. El nihilismo significaba hasta este momento: depreciación,
negación de la vida en nombre de los valores superiores. Y ahora: negación de
esos valores superiores, reemplazo por valores humanos -demasiado
humanos (la moral reemplaza a la religión, la utilidad, el progreso, la historia
misma reemplazan a los valores divinos). Nada ha cambiado, porque se trata
de la misma vida reactiva, de la misma esclavitud, que triunfaba a la sombra
de los valores divinos y que triunfa ahora mediante los valores humanos. Se
trata del mismo cargador, del mismo Asno, que seguía cargado con el peso de
las reliquias divinas, de las cuales respondía ante Dios, y que ahora se carga él
solo, en forma de autorresponsabilidad.
Hombres superiores.
–Son múltiples, pero son la prueba de una misma
empresa: tras la muerte de Dios, reemplazan los
valores divinos por valores humanos. Representan
por tanto el devenir de la cultura, es decir, el
esfuerzo por poner al hombre en el sitio de Dios.
Como el principio de evaluación permanece igual,
como no se ha producido la transmutación, ellos
pertenecen plenamente al nihilismo están más
cerca del bufón de Zaratustra que del propio
Zaratustra. Son «fallidos», «malogrados››, y ni
saben reír ni jugar ni bailar. Gilles Deleuze,
Nietzsche, 57
El hombre de la sanguijuela: Ha querido reemplazar los valores divinos, la religión e
incluso la moral por el conocimiento. El conocimiento debe ser científi􏰀co, exacto, incisivo:
poco importa entonces que su objeto sea pequeño o grande; el exacto conocimiento de la
cosa más ínfima reemplazará nuestra creencia en los vagos «grandes›› valores.

He ahí por qué el hombre cede su brazo a la


sanguijuela y se propone como tarea y como ideal
el conocer una cosa totalmente ínfima: el cerebro
de la sanguijuela (sin ascender a las causas
primeras). Pero el hombre de la sanguijuela no
sabe que el conocimiento es la propia sanguijuela
y que él toma el relevo de la moral y de la religión
desde el momento en que persigue el mismo
objetivo que ellas: sajar la vida, mutilar y juzgar la
vida. Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 58-59
Diagnóstico de su tiempo
Ahora bien, ¿cómo considera el fi􏰀lósofo la Cultura en nuestro tiempo? Desde luego que de
modo muy distinto a esos catedráticos de fi􏰀losofía contentos [con su status]. Casi le pasa
como si estuviera percibiendo los síntomas de un completo exterminio y desarraigo de la
Cultura, cuando piensa en esa universal prisa y en esa creciente velocidad de caída, en el
cese de toda sosegada contemplación y simplicidad. Las aguas de la religión ya no fl􏰁uyen y
dejan tras de sí pantanos o estanques; las naciones se dividen de nuevo con inusitada
hostilidad ansiando despedazarse. Las ciencias, cultivadas sin ninguna medida y en la más
ciega especie de laisser faire, destrozan y disuelven toda creencia firme; los estamentos y los
Estados cultivados son arrastrados por una economía financiera grandiosamente
displicente. Nunca fue el mundo más mundo, nunca fue tan pobre en amor y bondad. Los
estamentos cultos han dejado de ser faros o asilos en medio de toda esa mundanal
inquietud; ellos mismos devienen cada día más inquietos, más carentes de ideas y de amor.
Todo sirve a la barbarie venidera, el arte y la ciencia factuales inclusive. Gilles Deleuze,
Nietzsche,p. 68-69
El filósofo creador / legislador
En lugar de la unidad de una vida activa y de un pensamiento a􏰀firmativo, se ve
cómo el pensamiento se otorga la tarea de juzgar la vida, de oponerle pretendidos
valores superiores, de medirla con esos valores y de limitarla, condenarla. Al
mismo tiempo que de este modo el pensamiento se vuelve negativo, se ve cómo la
vida se desprecia, cómo cesa de ser activa, cómo se reduce a sus formas débiles, a
formas enfermizas, únicas compatibles con los llamados valores superiores. Para
la fi􏰀losofía, las consecuencias son garrafales. Porque las dos virtudes del
filósofo legislador eran la crítica de todos los valores establecidos, es decir, de los
valores superiores a la vida y del principio del que dependen, y la creación de
nuevos valores, valores de la vida que reclaman otro principio. Martillo y
transmutación.Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 25-26
Fragmento de Así habló
Transmutación de los valores Zaratustra

Tres transformaciones del espíritu os menciono: cómo el espíritu se convierte en camello, y el


camello en león, y el león, por fin, en niño.
Hay muchas cosas pesadas para el espíritu, para el espíritu fuerte, de carga, en el que habita la
veneración: su fortaleza demanda cosas pesadas, e incluso las más pesadas de todas.
¿Qué es pesado?, así pregunta el espíritu de carga, y se arrodilla, igual que el camello, y quiere que
lo carguen bien. (...) Con todas estas cosas, las más pesadas de todas, carga el espíritu de carga:
semejante al camello que corre al desierto con su carga, así corre él a su desierto.
Pero en lo más solitario del desierto tiene lugar la segunda transformación: en león se transforma
aquí el espíritu, quiere conquistar su libertad como se conquista una presa y ser señor en su
propio desierto.
Aquí busca a su último señor: quiere convertirse en enemigo de él y de su último dios, con el gran
dragón quiere pelear para conseguir la victoria. ¿Quién es el gran dragón, al que el espíritu no
quiere seguir llamando señor ni dios? «Tú debes» se llama el gran dragón. Pero el espíritu del león
dice «yo quiero».
«Tú debes» le cierra el paso, brilla como el oro, es un animal escamoso, y en
cada una de sus escamas brilla áureamente «¡Tú debes!».Valores milenarios
brillan en esas escamas, y el más poderoso de todos los dragones habla así:
«todos los valores de las cosas - brillan en mí».
«Todos los valores han sido ya creados, y yo soy - todos los valores creados.
¡En verdad, no debe seguir habiendo ningún “Yo quiero!”» Así habla el
dragón.
Hermanos míos, ¿para qué se precisa que haya el león en el espíritu? ¿Por
qué no basta la bestia de carga, que renuncia a todo y es respetuosa? Crear
valores nuevos - tampoco el león es aún capaz de hacerlo: mas crearse
libertad para un nuevo crear - eso sí es capaz de hacerlo el poder del león.
Crearse libertad y un no santo incluso frente al deber: para ello, hermanos
míos, es preciso el león.Tomarse el derecho de nuevos valores - ése es el
tomar más horrible para un espíritu de carga y respetuoso. (...)
Pero decidme, hermanos míos, ¿qué es capaz de hacer el niño que ni siquiera el león
ha
podido hacer? ¿Por qué el león tiene que convertirse todavía en niño?
Inocencia es el niño, y olvido, un nuevo comienzo, un juego, una rueda que se mueve
por sí misma, un primer movimiento, un santo decir sí.
Sí, hermanos míos, para el juego del crear se precisa un santo decir sí: el espíritu
quiere ahora su voluntad, el retirado del mundo conquista ahora su mundo.
Tres transformaciones del espíritu os he mencionado: cómo el espíritu se convirtió en
camello, y el camello en león, y el león, por fin, en niño. - -
Así habló Zaratustra. Y entonces residía en la ciudad que es llamada: La Vaca
Multicolor.
Nihilismo afirmativo

No se trata de negar la existencia o de quedarse en una nada, no de trata de


una falta de creencia en el mundo, sino de la negación absoluta de cierto
mundo (DE CIERTOS VALORES).
La crítica debe ser total - pars destruens, pars construens: destruir todos los
valores del presente (moral del esclavo) para la construcción de nuevos
valores (moral del amo-vida) para el futuro. Nietzsche ve un mal-estar en
su civilización, hecho que será muy retomado en la primera mitad del siglo
XX (posguerras; recordemos el libro de Freud "el mal-estar de la
civilización"). Para él no hay posibilidade de reformismos, sólo
posibilidades revolucionarias, de rupturas radicales.
La afirmación: el triunfo de la moral del amo

La afi􏰀rmación es la más alta potencia de la


voluntad. Pero ¿qué es lo afirmado? La Tierra, la
vida. Pero ¿qué forma toman la Tierra y la vida
cuando son objeto de a􏰀firmación? Forma
desconocida para nosotros que solamente
habitamos la superficie desolada de la Tierra y que
no vivimos sino estados próximos a cero. Gilles
Deleuze, Nietzsche, p. 42-43
Mundo poblado de fuerzas caóticas, no hay sentido

Formas: organizan fuerzas y les dan sentidos/rostro en la arena

Forma Dios Forma Hombre ?????


El superhombre (ultra-humano)
Dios ha muerto pero ahora es hora de matar el hombre para el advenimiento del super
hombre. Cuando leemos eso, no debemos entender que Nietzsche está invitando un a
genocidio de uma población. Estamos en una filosofia y los conceptos no dicen lo mismo
que el sentido común. Hombre significa una forma de vivir, un modo de vida. Entonces
lo que invita Nietzsche es a destruir una cierta forma de vida (aquella que vive la moral de
esclavo) para que nazca otra forma de vivir (la moral aristocrática – por fin afirmaríamos
toda nuestra potencia, una sociedad que no está dominada por instancias represivas de
poderes sino por instancias que potencializan los cuerpos y mentes)
¿qué puede un cuerpo? ¿qué puede una mente? Afirmación de las potencias humanas (e
inhumanas también) contra la limitación de los poderes a toda forma de vida.

¡Mirad, yo os enseño el superhombre!


El superhombre es el sentido de la Tierra. Diga vuestra
voluntad: ¡sea el superhombre el sentido de la Tierra!
¡Yo os conjuro, hermanos míos, permaneced fieles a la Tierra y no creáis a quienes os
hablan de esperanzas sobre-terrenales! Son envenenadores, lo sepan o no.
Son despreciadores de la vida, son moribundos y están, ellos también, envenenados,
la Tierra está cansada de ellos:
¡ojalá desaparezcan!
En otro tiempo el delito contra Dios era el máximo delito, pero Dios ha muerto y con
Él han muerto también esos delincuentes. ¡Ahora lo más horrible es delinquir contra
la Tierra y apreciar las entrañas de lo inescrutable más que el sentido de ella! [...] (Así
habló Zaratustra, Prólogo, 3.)
Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 115
Contra-sentidos que debemos evitar

Nosotros, lectores de Nietzsche, debemos evitar cuatro posibles


contrasentidos: 1°) sobre la voluntad de poder (creer que la voluntad
de poder signifi􏰀ca «deseo de dominar» o «querer el poder»), 2°)
sobre los fuertes y los débiles (creer que los más «poderosos››, en un
régimen social, son por el mismo motivo «fuertes››); 3°) sobre el
eterno Retorno (creer que se trata de una vieja idea, tomada de los
griegos, de los hindúes, de los babilonios...; creer que se trata de un
ciclo, o de un retorno de lo Mismo, de un retorno a lo mismo), 4°)
sobre las últimas obras (creer que esas obras son excesivas o que
están ya descalifi􏰀cadas por la locura).
Gilles Deleuze, Nietzsche, p. 52
Verdad y mentira en el sentido extramoral
Parte 1
Fábula del animal inteligente que inventó el conocimiento.

El conocimiento es un error basado en una falacia, en una soberbia del hombre, que cree
poder ser capaz de conocer una verdad del mundo. El hombre es la medida de todas las
cosas, todo se explica según su punto de vista.

El fragmento ‘sobre verdad y mentira’ dedica la primera de sus dos seciones a la


crítica del lenguaje y de la idea de verdad.

La fuente original del lenguaje y del conocimiento no está en la lógica (‘el origen del
lenguaje no sigue un proceso lógico’) sino en la imaginación, en la capacidad radical
e innovadora que tiene la mente humana de crear metáforas, analogías y modelos.
El edificio de la ciencia se alza sobre las arenas movedizas de ese origen. Eso es lo
que quiso decir Ortega al definir al hombre como animal fantástico.
Verdad y mentira en el sentido extra-moral, tecnos, prólogo de Manuel Garrido, 9-
11.
El conocimiento está basado en metáforas
¿qué es una metáfora?

La metáfora es una figura retórica que hace un uso figurado del lenguaje. Generalmente se
utiliza para referirse a algo pero sin nombrarlo específicamente.
ese niño es la oveja negra de la familia/eres la luz de mi vida/La noticia lo golpeó fuerte

“Conocer es simplemente trabajar con la metáfora favorita de uno”. Así, “vivimos y


pensamos completamente bajo la influencia de los efectos de lo ilógico, en un
mundo de ausencia de conocimiento y de conocimiento falso”. La voluntad de
ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger en Verdad y mentira en el sentido extra-
moral, tecnos, P 50
¿qué es conocer al mundo?

Nosotros percibimos el mundo natural vía lo sensible, somos un receptáculo de


estímulos. La naturaleza nos estimula.

A partir de esa percepción, creamos un lenguaje para describir estos estímulos. El


lenguaje es una invención útil al hombre, nos protege. Por medio del lenguaje el
hombre puede evitar la guerra entre sus pares. Por medio de lenguaje podemos
crear pactos que definen lo que está bien o no, lo que se puede o no hacer y lo que
es verdadero y falso.
¿Es el lenguaje la expresión adecuada de todas las realidades – o sólo de la humana?
Lenguaje nace de la capacidad del hombre de construir metáforas. 3 metáforas son
necesarias en el aparecimiento del lenguaje:
de los estímulos primero nacen imágenes, luego sonidos, para finalmente aparecer
palabras.
La naturaleza no entiende las metáforas ni lo que decimos de ella. La palabra “flor” no dice
nada verdadero de la flor en sí.

FLOR
La verdad
Una vez que la verdad esta basada en el conocimiento, ella no pasa de una ficción del hombre
que le ayuda a sobrevivir.
El hombre es un animal débil que garantiza su supervivencia engañando.
La verdad es una convención útil y compartidas por todos, pero es falsa, es una ficción del
hombre y para el hombre, no hay una verdad objetiva que pueda ser conocida. Siempre es
subjetivo, un punto de vista.

LA VERDAD está hecha de metáforas olvidadas y ya gastas. No hay una verdad universal o absoluta.

“Se ha traído a la luz una nueva verdad, pero es de valor limitado; quiero decir, es antropomórfica de
cabo a rabo y no contiene un solo punto que sea ‘verdadero en sí, real y universal”.

La utilidad de lo falso

Friedrich Nietzsche alcanzó a percatarse de que la vida y la ciencia no son


posibles sin concepciones falsas o imaginarios. (…); p. 43
Nietzsche subraya la gran significación de las ‘apariencias’ en los diferentes
campos de la ciencia y la vida y señala la fundamental y vastísima función de
la ‘invención’ y la falsificación’, como también la influencia falsificadora de la
‘creación’ poética, y con ello el valor y la justificación del ‘mito’ - no sólo en
religión. (…) frente al mundo del ‘cambiante y evanescente’ devenir, se
establece, en interés de la comprensión y la satisfacción estética de la
‘fantasía’, un mundo del ‘ser’, en el que todo aparece ‘redondo’ y completo’. La
voluntad de ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger en Verdad y mentira en el
sentido extra-moral, tecnos, p. 44
La consumación de la historia de la filosofía es por tanto, de acuerdo con
Nietzsche, la filosofía de la ilusión: ‘nuestra grandeza reside en la suprema
ilusión’, pues es ahí donde somos creadores. Ahora, sin embargo, no es ya sólo
la ilusión artística (el elemento antropomórfico en todo conocimiento’ hace
ahora su aparición). No es sólo ‘la vida la que necesita ilusiones, vale decir,
falsedades consideradas como verdades’, ni es sólo nuestra cultura la que
descansa sobre ‘ilusiones aisladas’; también nuestro conocimiento las necesita.

La voluntad de ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger en Verdad y mentira


en el sentido extra-moral, tecnos, p. 49.

La creencia en la permanencia, en la duración, en lo incondicionado, no es ‘la creencia que es


más verdadera, sino la que es más útil.” La voluntad de ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger
en Verdad y mentira en el sentido extra-moral, tecnos, p. 61
Sin la falsificación no hay pensamiento

“El pensamiento sería imposible si no tuviera, una concepción errónea de la


naturaleza del ser: debe predicar sustancia e igualdad, porque un conocimiento
del flujo total es imposible: debe adscribir atributos a la realidad, para hacer
posible al pensamiento, pero el pensamiento debe creer en ambos.” “El intelecto
no ha sido organizado para comprender el devenir. Se esfuerzan en probar la
rigidez universal [eterna permanencia], debido a su origen, en imágenes.”La
voluntad de ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger en Verdad y mentira en el
sentido extra-moral, tecnos, p. 61
Conocimiento científico

También está sometido a la metáfora. Las leyes de la naturaleza no dicen la verdad


objetiva de ella sino relaciones que se pueden sacar de la naturaleza a partir de un
instrumento construido por los hombres: las matemáticas.
“Hemos organizado un mundo en el que podemos
vivir: suponiendo cuerpos, líneas,
superficies, causas y efectos, movimiento y reposo, forma y contenido; ¡sin estos
artículos de fe nadie sería capaz de soportar la vida! Pero esto no significa que ya se ha
probado algo. La vida no es argumento; pues el error podría ser una de las condiciones
de vida”.
Y en XI, 72, desarrollo la idea de que la materia, como una masa en extensión ‘es una
alucinación; como las cosas en movimiento, como la Cosa en general, como toda
permanencia.”
“El intelecto es el medio del engaño, con sus formas forzadas: sustancia, identidad,
permanencia”; pero es en opiniones tales como “la creencia en la identidad, el número, el
espacio, etc., en las que se basa la duración del género humano”.
“¡En qué curiosa simplificación de las cosas y los seres humanos vivimos!” Hemos hecho todo
fácil y conveniente para nosotros… y hemos dado a nuestro pensamiento carte blanche para
hacer toda clase de inferencias erróneas.”

“Los signos numéricos se basan en el error de que existe más de una


cosa idéntica… aqui ya reina el error, por aquí y estamos
imaginando entidades y unidades que no existen.” 60

La voluntad de ilusión en Nietzsche, Hans Vaihinger en Verdad y mentira


en el sentido extra-moral, tecnos, p. 57-58.
Parte 2
Si la primera parte del fragmento ‘sobre verdad y mentira’ es una crítica del lenguaje y la verdad
científica, la segunda es una filosofía del arte como función metafórica. El impulso hacia la
construcción de metáforas, fundamental en el hombre, no se deja aplastar por la colosal
‘necrópolis de intuiciones’ que es la ciencia, sino que busca ‘un nuevo campo en el mito y en el
arte.’ (...)En el debate entre abstracción e imaginación, entre filósofa y arte, el joven Nietzsche
optó por el arte. Verdad y mentira en el sentido extra-moral, tecnos, prólogo de Manuel
Garrido, p. 13
La creación de metáforas es algo inevitable, el hombre necesita el lenguaje, sin eso
desapareceríamos. El impulso a la metáfora se realiza ampliamente primero en el mito y en el
arte, medios del hombre construir sus castillos metáforicos.
Hombre intuitivo x hombre racional
(Artista) (científico)

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