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Edad/expectativa de vida
Hipoglucemia asintomática
La Asociación Americana de la Diabetes sugiere los siguientes niveles para adultos con
diabetes, a excepción de las embarazadas. Es posible que objetivos más o menos rigurosos
sean apropiados para ciertas personas.
Glucosa plasmática posprandial (1-2 horas después del inicio de la comida): Menos
de 180 mg/dl
Glucagón
El glucagón es una hormona secretada por las células α de los islotes de Langerhans cuando
disminuye la glucemia y cumple varias funciones muy opuestas a las de la insulina. La más
importante de ellas consiste en elevar la concentración sanguínea de glucosa, efecto
contrario al de la insulina. Los principales efectos del glucagón sobre el metabolismo de la
glucosa consiste en:
El incremento de los aminoácidos en la sangre como las que ocurren, por ejemplo, después
de una comida rica en proteínas estimula la secreción de glucagón.
Catecolamina
Libera hormonas de manera episódica, lo que hace difícil definir sus concentraciones,
circulan de manera libre y unidas a proteínas; liberan epinefrina, dopamina, norepinefrina.
La Epinefrina provee de mayor llegada de sangre a los órganos críticos ante el estrés como
a los músculos, hígado, cerebro¸la norepinefrina aminora el flujo sanguíneo renal.
Glucocorticoides
Además de afectar al crecimiento general, la hormona del crecimiento ejerce otros efectos
metabólicos específicos:
Insulina: El páncreas responde con la producción de insulina, que permite que la glucosa
entre en las células del cuerpo para proporcionar energía, almacenar el exceso de glucosa
para obtener energía. Después de comer, cuando los niveles de insulina son altos, el exceso
de glucosa se almacena en el hígado en forma de glucógeno, su función es favorecer la
incorporación de glucosa de la sangre hacia la célula. Actúa siendo la insulina liberada por
las células beta del páncreas cuando el nivel de glucosa es alto. El glucagón, al contrario,
actúa cuando el nivel de glucosa disminuye y es entonces liberado a la sangre.
Glucagón: se libera durante la noche y ene las comidas, es importante para mantener el
equilibrio entre el azúcar del cuerpo y el combustible. Le indica al hígado que
descomponga los depósitos de almidón o glucógeno y ayuda a formar nuevas unidades de
glucosa y cuerpos cetónicos desde otras sustancias.
Amilina: se libera junto con la insulina desde las células beta. Disminuye los niveles de
glucagón, desacelera la velocidad a la que vacía la comida del estomago y hace que el
cerebro sienta que comió una comida que lo lleno y satisfizo. Una caída en el glucagón
disminuye la producción de glucosa del hígado.
Epinefrina, cortisol y hormonas de crecimiento: son hormonas que ayudan a mantener
los niveles de azúcar en sangre. Ellas junto con el glucagón se llaman hormonas del estrés o
contrarreguladoras de la glucosa; lo que significa que hacen que se eleve el azúcar en
sangre.
La hormona de crecimiento: se libera desde la glándula pituitaria, que es una parte del
cerebro. Como el cortisol, la hormona de crecimiento compensa el efecto de la insulina
sobre las células grasas y los musculo. Altos niveles de hormonas provocan resistencia a la
acción de insulina.
CASO CLÍNICO
Paciente femenina de 35 años de edad, con diabetes mellitus tipo I, refiere que en la
última semana había experimentado nauseas, vómitos, dolor abdominal, diarera y
anorexia, por lo que decidió interrumpir la insulina dos días antes. Además refirió
encías hiperplasias e inflamadas y absceso. Posteriormente desarrolló poliuria,
polidipsia, polifagia, pérdida de peso y glucosuria. Se le practicó examen de glucosa
encontrándose 300mg/100 ml.
El exceso de glucosa en la sangre hace que se pierda por la orina (glucosuria) junto con
aguas y sales. La abundancia de orina se conoce como (poliurina). Al eliminar por orina
gran cantidad de agua, sales etc, la persona tiene mucha sed y toma gran cantidad de líquido
(polidipsia), con el tiempo, los riñones eliminan la glucosa inutilizable (y las calorías) a
través de la orina y puede haber una pérdida de peso. Aumento anormal de la necesidad de
comer (polifatiga).
La insulina es el principal regulador del azúcar en la corriente sanguínea fabricada por las
células beta y liberada continuamente hacia la corriente sanguínea. Las células beta se
encuentran en el páncreas. Los niveles de insulina en la corriente sanguínea se calibran
cuidadosamente para mantener la glucosa en sangre justo en la medida correcta.
Manteniendo los niveles normales de glucosa entre los 70 y 100mg/ml
La paciente al presentar diabetes mellitus tipo 1 su glucosa se encontró en 300 mg/100 ml,
lo que nos dice que alcanza la hiperglucemia que es un alto nivel de glucosa. Las causas
más frecuentes de esta complicación puede ser errores en la administración de insulina
(olvidar su administración), consumir alimentos o bebidas altos en hidratos de carbono,
padecer alguna infección.
La diabetes mellitus tipo 1, ocurre cuando el sistema inmunitario, que combate las
infecciones, ataca y destruye las células beta del páncreas que son las que producen la
insulina. A medida que ésta progresa, los niveles de insulina decrecen produciendo un
aumento en la concentración de glucosa en la sangre. La falta de la hormona produce una
disminución de la entrada de glucosa al músculo y al tejido adiposo. Por otro lado, la
disminución de insulina en el hígado, así como el relativo exceso de glucagón, producen un
aumento en la degradación del glucógeno y de la glucogénesis, lo que ocasiona un
incremento adicional de la glucosa sanguínea. El exceso en la concentración de glucosa en
sangre sobrepasa la capacidad de reabsorción en el riñón y como consecuencia se elimina la
glucosa por orina arrastrando consigo agua y sales.
La mayor parte de destrucción del tejido conectivo que tiene lugar en la periodontitis es
debida a la interacción de las bacterias periodontopatógenas y sus productos con las células
inmunocompetentes y los fibroblastos al provocar la activación y secreción local de
mediadores de la inflamación con carácter catabólico, principalmente IL-1b, PGE2, TNF-a
e IL-6 (38).
El mecanismo biológico aceptado en la actualidad que intenta explicar el porqué de que los
pacientes diabéticos presenten periodontitis más severas defiende, por un lado que la
acumulación de AGEs afectaría la migración y la fagocitosis tanto de polimorfonucleares
como de mononucleares, resultando en el establecimiento de una flora subgingival que por
maduración se irá transformando en predominantemente anaerobia gramnegativa. Esto va a
desencadenar la secreción de mediadores solubles que mediarán la destrucción del tejido
conectivo y la reabsorción ósea, y el establecimiento de un estado de resistencia de los
tejidos frente a la insulina. Simultáneamente por otro lado, la infección periodontal también
inducirá a un estado de resistencia de los tejidos frente a la insulina contribuyendo a la
hiperglucemia y consecuentemente a la acumulación de AGEs.
La relación que se establece entre diabetes mellitus y periodontitis, por tanto es
bidireccional resultando en una mayor severidad de la periodontitis y una mayor dificultad
para controlar los niveles de glucosa en sangre en pacientes diabéticos.
5. Los pacientes diabéticos tienen un riesgo tres veces mayor de padecer gingivitis
que los individuos sanos. Explique.
Los diabéticos presentan un incremento de hasta 50% de los RAGE en comparación a los
sujetos sanos, y la interacción AGE-RAGE de los monocitos parece ser responsable del
incremento del estrés oxidativo celular lo que da como resultado la producción de citocinas
proinflamatorias tales como IL-1β y TNF-α, así como niveles elevados de prostaglandina
E2 (PGE2), corresponsable a su vez de la activación osteoclástica que produce la pérdida
ósea característica de la enfermedad periodontal avanzada en este tipo de pacientes.
También se ha observado interacción AGE-RAGE en fibroblastos, lo que repercute en
trastornos de la síntesis de colágena y su maduración, que son comunes cuando existen
niveles elevados de glucosa por glicación de los fibroblastos, así como la degradación de
dicha proteína fibrosa por metaloproteinasas de la matriz (MMP) y colagenasas, enzimas
que influyen tanto en la destrucción como en la reparación tisular, y disminuyen la
resistencia de tejidos periodontales al ataque bacteriano.
Por otra parte, la regulación glucémica natural tiene por objetivo asegurar un perfecto
equilibrio entre la producción de glucosa y su consumo, donde las principales hormonas
implicadas en el control son la Insulina, Glucagón, Catecolaminas, Glucocorticoides y
Hormona del crecimiento.
BIBLIOGRAFÍA
1. Guyton y Hall. (2016, 13ª ed.). Tratado de fisiología médica, España: S.A.
Elsevier
2. Harrison (2018, 20 ª ed.) Principios de Medicina Interna, Nueva York, E.E.U.U:
McGraw-Hill Prosessional
3. Ganong W. F. (2019, 26 ª ed.) Fisiología Médica, Ciudad de Mexico, México:
editorial McGraw Hill.