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menos determinado y limitado por el lenguaje. El niño domina ciónos como los interrogatorios, y en ningún caso peor que los
bastante el lenguaje como para expresarse, pero aún no ha pa- adultos; incluso mejor a veces. También las investigaciones de
sado por la confrontación que experimenta en el colegio, que le Lamers-Winkelman (1995) acerca de la fiabilidad de los niños
demostrará lo poco que en realidad lo domina todavía. En se- en los temas de abuso sexual demuestran que, por lo general,
gvmdo lugar, estos niños tienen más confianza en sí mismos que los niños son buenos testigos.
uno o dos años más tarde, cuando se vuelven inseguros al equi-
vocarse en los ejercicios del colegio y quedan impresionados A los adultos les parece a veces extraordinariamente buena la
por los conocimientos de los maestros. La creciente inseguridad memoria de los niños. Quien haya jugado al juego de la memoria
desde aproximadamente los siete años hace que el niño se adap- con niños sabe lo excelente que es su memoria. Para u n adulto
te a los adultos. Como tercera razón, se puede indicar la ya es casi imposible ganarles jugando a esa clase de juegos.
mencionada integración de los hemisferios del cerebro, que hace La memoria se puede manifestar a través del reconocimiento
que a partir de los siete aiios aproximadamente los niños em- de u n hecho o de una persona cuando reaparece, y en el recuer-
piecen a situar los hechos dentro de su contexto. También co- do del mismo. A menudo reconocemos a alguien sin que poda-
mienzan a crear los esquemas que fomentan los prejuicios. A mos recordar su nombre; o no podemos acordarnos de algo,
ello se le suma que a partir de los siete u ocho años el niño co- pero lo recordamos de inmediato si alguien lo nombra. En la
mienza a tener más conciencia de la importancia de la comuni- investigación sobre la memoria se examina tanto el «reconocer»
cación verbal para los adultos y comprende mejor las caracte- como el «recordar». A l parecer, los niños no son peores que los
rísticas de la misma, así como los distintos intereses que con ella adultos con respecto al hecho de reconocer. Esta capacidad i n -
se ponen en juego. cluso disminuye con la edad. En cuanto al factor recuerdo, los
En el marco de un juicio por el asesinato de un niño a principios niños y los ancianos funcionan peor que los adultos. En el caso
del siglo XX, Varendonck investigó la fiabilidad de los testimonios in- de los niños, ocurre que el recuerdo se hace más difícil cuanto
fantiles. Les preguntó a los niños por el color de la barba de su maes- más interviene el aspecto verbal. En cuanto el aspecto verbal
tro. El 90 por 100 respondió nombrando un color, el negro, a pesar de tiene menos importancia, pues los niños recuerdan bien (Perl-
que el maestro no tenía barba. Se dejaron llevar por la pregunta in- mutter y Ricks, 1979).
ductora del adulto. En especial las niñas con denuncias por abuso
La memoria no es u n dato estático, puesto que se va forman-
sexual se consideraron como muy poco fiables. Se creía que el abuso
do y actualizando continuamente. Esto es válido tanto para los
sexual era fruto de su fantasía (Elbers y Ter Laak, 1989).
niños como para los adultos; es decir, el recuerdo de u n hecho
Los resultados de las investigaciones del psicólogo belga Va- no es u n dato estático alojado en el cerebro, sino u n elemento
rendonck en 1911 (Soppe y Hees-Stauthamer, 1993) han influido dinámico que constantemente es actualizado y jamás podrá ser
durante mucho tiempo en la opinión sobre la fiabilidad con res- una representación exacta de u n hecho. En el caso de la repeti-
pecto a las declaraciones de los niños. Estas investigaciones ción de u n suceso, el nuevo no se memoriza. Los elementos d i -
planteaban preguntas m u y sugestivas a los niños y demostra- ferentes del nuevo suceso con relación al anterior se añaden al
ban que caían m u y fácilmente en las trampas de la sugestión. ya existente, de manera que aunque algo haya sucedido repeti-
das veces, de hecho sólo se memorizarán uno o dos casos.
Sólo recientemente se tiene interés por el hecho de que el
funcionamiento de los niños en tales situaciones depende m u - Otro punto interesante es el hecho ya mencionado de que
cho del marco en que se desenvuelve la conversación. Si no se los niños son buenos reproduciendo la línea general de u n su-
hacen preguntas inductivas los niños reaccionan bien en situa- ceso, y no tanto dando detalles del mismo (Fivush, 2002; Fivush,

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