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CONVIJISACION 163

conversación, se le ha de preguntar por el motivo antes de lle-
gar a la conclusión de que se debe a falta de confianza. Si, efec-
tivamente, no se ha ganado su confianza, no se ha de hacer la
entrevista. Se ha de procurar no presionar a l niño (ejercicio 4.11,
anexo 1), pues de lo contrario la calidad de las respuestas de la
entrevista sería poco fiable. Pero sí que es aconsejable esmerar-
se para ganar la confianza del niño e investigar lo que se puede
hacer al respecto.
dad prcici-ida lu) es simplemente para recibir información sino
para comunicar y conectar con él. Cuanto más joven es el niño,
más recomendable es emprender una actividad con él o parti-
cipar en lo que él ya estaba ocupado.
CUADRO 7
i n t r o d u c c i ó n d e l m a r c o d e la conversación

¿No quieres que grabe nuestra conversación? Si no quieres no lo

— Especificar quién de-
hago, pero ¿puedo hacer algo para que sí que quieras? Quizá tengas termina los temas.
miedo de que yo haga algo raro con la cinta. ¿Quieres que te explique — Aclarar que se desea
saber la opinión del
lo que voy a hacer con ella?
niño.
— Aclarar que sólo se le
Tengo la impresión de que prefieres que no mantengamos una con-
ayudará si el niño no
versación. Quizá tengas miedo de que suceda algo desagradable si consigue expresar lo
mantenemos una conversación. Yo creo que no va a pasar nada des- que quiere decir.
— Aclarar la intención
agradable. ¿Y tú qué crees?
de intervenir con
ayuda o no.
En el cuadro 7 se pueden observar los puntos más impor-
— Explicar el nivel de
tantes de la introducción en el marco de los distintos tipos de confidencialidad de
conversación. Aquí también pueden complementarse las dife- la conversación.
rentes formas de conversación.
— Aclarar que deseas
conocer la opinión
del niño sobre un
tema determinado.
— Explicar que vas a
hacer preguntas y
que te gustaría que el
niño las contestara.
— Aclarar que no exis-
ten respuestas «bue-
nas» 0 «malas».
— Explicar que no se
trata de obtener fan-
tasías, sino opiniones
y sentimientos.
— Aclarar que sólo ayu-
darás si el niño no
consigue expresar lo
que quiere decir.
— Especificar que es el
niño quien deternTÍ-
na el tema.
— Aclarar que te gusta-
ría saber en qué con-
sisten los problemas
del niño.
— Aclarar que preten-
des ayudar al niño
con sus problemas.
— Aclarar que ayuda-
rás al niño si éste no
consigue expresar
sus pensamientos y
sentimientos por sí
mismo.
— Explicar el nivel de
confidencialidad de
la conversación.

4.1.4. PREGUNTAS DE INTRODUCCIÓN

Tras haberte presentado, es lógico preguntar por el nombre
de t u interlocutor y por la edad si éste es u n niño. También pue-
des decir t u edad después de que el niño haya dicho la suya.
Esto le da al niño de hasta aproximadamente ocho años la sen-
sación de que tienes la intención de tratarle a t u mismo nivel
durante la conversación. A partir de los ocho años no se suelen
nombrar las edades. Por ello puede resultar extraño que u n
adulto nombre su edad, y en vez de tomarse como una señal
de igualdad podría verse como «pelotilleo», por ejemplo. Esto
dañará en vez de fomentar la confianza.
Para los niños, la actividad en la que están ocupados es lo
más importante. Por tanto, preguntarle a un niño por su activi-
Como ilustración describimos a continuación algunos ejem-
plos por orden de edad. En este caso el entrevistador es u n
adulto, desconocido para el niño, que se ha de presentar él
mismo.
De 4 a 6 años
Hola, soy... (explicar el objetivo). ¿Cómo te llamas? ¿Cuántos
años tienes? ¿Qué es lo que más te gusta hacer? (Si es posible,
seguir preguntando sobre el tema, incluyendo la posibilidad de
emprender una actividad común). ¿Te gusta dibujar? ¿Qué te
parece si hacemos u n dibujo juntos? Si tú dibujas u n muñeco,
yo dibujo una casa.

0.J03 SOÍ-AFíeS
OJOS SOl_ARHS